La industria del diamante está experimentando un espectacular repunte luego de un descenso en 2020 debido a la pandemia de COVID-19, cuando las ventas de joyas de diamantes cayeron un 14% y las de diamantes en bruto un 31%. A lo largo de 2021, los ingresos aumentaron un 62% en el segmento de extracción de diamantes, un 55% en cortado y pulido, y un 29% en la venta al detalle de joyas de diamantes, superando los niveles anteriores a la pandemia en un +13%, +16% y +11% respectivamente.
Estas son algunas de las conclusiones del undécimo informe anual Global Diamond Report 2021-2022 de Bain & Company y el Antwerp World Diamond Centre (AWDC).
El retail de las joyas con diamantes
2021 comenzó con una fuerte temporada de año nuevo chino y San Valentín, dos de los mayores ingresos anuales del sector. El deseo de los clientes de hacer regalos emocionales, el aumento del ahorro y la expansión de las tiendas a otras ciudades impulsaron la compra de diamantes. Los minoristas online experimentaron un crecimiento de las ventas, especialmente en Asia, al abrirse nuevos canales para la venta de joyas. Asimismo, la demanda creció aún más durante la segunda mitad de 2021, por la temporada de vacaciones de invierno.
«2021 fue un año de nuevos hitos en la industria del diamante. En toda la cadena de valor, el sector experimentó una recuperación y un auge a una velocidad inesperada que ha tomado por sorpresa a los insiders», dijo Olya Linde, socia del área de Energía y Recursos Naturales de Bain & Company y autora del informe.
Corte y pulido
Durante 2021, los precios de los diamantes en bruto crecieron un 21%. Esto, luego de la caída que se registró en 2019 y 2020 del 7% y el 11% respectivamente.
Por su parte, los valores de los diamantes pulidos, que habían disminuido un 3% y un 5% en 2019 y 2020, aumentaron un 9% por año, y como consecuencia, a finales de 2021, tanto los precios de los diamantes en bruto como pulidos se acercaron a niveles anteriores a la pandemia y a las medias históricas, pero seguían estando por debajo de sus máximos históricos. No obstante, por primer vez en varios años no hubo escasez de financiamiento de esta piedra preciosa.
De cara al futuro
Se espera que la demanda de diamantes pulidos y en bruto siga creciendo hasta el primer semestre de 2022, por la temporada de vacaciones, el fortalecimiento de la confianza de los consumidores en los principales mercados y una oferta limitada de diamantes en bruto. A mediano plazo, se estima que la demanda de diamantes podría verse afectada por las políticas gubernamentales en torno a los estímulos económicos y las restricciones a los viajes.
A pesar de ello, según el informe de Bain, se espera que en 2022 el mercado muestre un crecimiento superior al del periodo previo a la pandemia y que vuelva a su ritmo de crecimiento histórico en 2023-2024.