Los activos administrados profesionalmente en EE.UU. crecieron casi un 11% y cuentan con una tasa de crecimiento anual compuesta de 10 años del 8 %.
Si bien la mayoría de los activos direccionables residen en el canal institucional, el crecimiento de los activos de clientes minoristas ha superado el de los mercados institucionales de manera constante durante los últimos 10 años, según el estudio The State of U.S. Retail and Institutional Asset Management 2021: Targeting Growth Opportunities.
Los segmentos de clientes institucionales más grandes son cuentas generales de seguros, contribuciones definidas corporativas (DC): planes 401 (k) y planes de beneficios definidos (DB) del gobierno estatal y local.
En conjunto, estos tres canales representan más del 60% del mercado institucional direccionable total. A medida que los inversionistas institucionales buscan cada vez más una mayor personalización de la cartera, gestión de riesgos empresariales y acceso a oportunidades de coinversión, aumentan su dependencia de los intermediarios (consultores de inversiones, directores de inversiones (OCIO) subcontratados o asesores financieros) para seleccionar productos de inversión y/o o gestionar sus carteras.
“Los inversores institucionales exigen más que rendimientos y quieren un socio de inversión que supere las expectativas de rendimiento y más”, comenta Brendan Powers, director asociado de Cerulli.
El crecimiento del segmento retail de activos administrados profesionalmente ha superado al institucional durante la década siguiente, representando el 49% del total.
A fines de 2020, la distribución a través de terceros, como brokers/dealers (B/D) y RIAs, representa el 75 % de los activos totales del canal minorista.
El mayor crecimiento de canal se produjo entre los RIAs híbridos (20 %) y los RIAs independientes (16 %).
En respuesta a esta dinámica en evolución, Cerulli cree que los asset managers deben dedicar tiempo y recursos a considerar cómo planean abordar los segmentos minoristas.
“Desde la colocación de productos a nivel de plataforma hasta la introducción y adopción de carteras modelo de asignación de activos, los canales minoristas exigen cada vez más los niveles de sofisticación y servicio dedicado que antes estaban reservados para los guardianes institucionales”, comentó Powers.
Si bien la naturaleza fragmentada del canal minorista seguirá planteando desafíos, las oportunidades superarán los costos.
“Dado que la mercantilización y las tarifas reducidas amenazan a muchos competidores del mercado, los gerentes deberán repensar sus prioridades ya que los canales minoristas parecen estar preparados para representar la mayoría de los activos de los clientes en el futuro cercano”, concluyó Powers.
La resiliencia del segmento de renta residencial en el panorama de los fondos inmobiliarios ha atraído las miradas de varias administradoras de activos chilenas. Y Zurich Chile AGF no ha sido la excepción.
Actualmente, la firma se encuentra en un proceso de road show para atraer interés para un aumento de capital de su fondo Zurich Renta Residencial I, con la meta de adquirir un segundo activo para el vehículo.
Según comenta el Head of Balanced Funds and Real Estate de la firma, José Luis Luarte, la emisión de nuevas cuotas se utilizará para financiar la adquisición de un edificio multifamily en la comuna de San Miguel, en Santiago.
Se trata de un activo de 152 departamentos, lo que dejaría el patrimonio del vehículo –excluyendo la deuda– en 240.000 UF, es decir, alrededor de 9,4 millones de dólares.
El inversionista target de esta operación, según explica el ejecutivo de Zurich, son inversionistas institucionales –especialmente compañía de seguros– y clientes del segmento retail.
Si bien no hay una fecha definida para la emisión de las nuevas cuotas del vehículo, Luarte estima que estarían colocándolas entre finales de marzo y principios de abril.
Dinámica de mercado
Hasta ahora, Luarte describe un desempeño positivo del primer activo del fondo, un edificio en la comuna de La Florida –también en Santiago– con 113 unidades. Este activo, señala el ejecutivo, ha mantenido una ocupación promedio de 98%, sin experimentar problemas de mora.
A nivel de sectores, el ejecutivo de Zurich asegura que sus comunas preferidas son La Florida y San Miguel, aunque también están estudiando zonas que se podrían beneficiar de la ampliación de la red del Metro de Santiago. “Buscamos que la ubicación sea cerca de alguna estación de Metro, entre 300 a 1.000 metros de una estación, o cerca de algún corredor de locomoción colectiva”, explica, agregando que tampoco descartan salir de la capital.
En esa línea, Luarte indica que el escenario de base de la gestora es que los precios de los arriendos se mantengan relativamente estables. “A pesar de la mayor oferta de departamentos que van a entrar en los próximos años, los cánones de arriendo deberían mantenerse”, dice.
¿A qué se debe esto? Según el ejecutivo, es por la combinación de la escasez de terreno en Santiago y por condiciones más restrictivas para los créditos hipotecarios, de la mano de un aumento relevante en las tasas de interés en el país andino.
Eso sí, más allá de la dinámica del mercado inmobiliario, Zurich prefiere adquirir edificios de menor tamaño, de un máximo de 225 unidades. “La idea es tener un edificio más chico en los cuales se pueda dar servicios adicionales a los arrendatarios, como buenos quinchos, buenas salas de eventos, bien equipados y hacer actividades con los arrendatarios, generar más vida de comunidad”, explica.
Alternativos en Zurich
El fondo Zurich Renta Residencial I es uno de los cuatros productos que ha lanzado la administradora de fondos en el segmento de alternativos. Los otros vehículos del segmento son Zurich Activos Alternativos, un fondo de fondos globales que ofrece un mayor nivel de liquidez; Zurich Property I, un fondo de fondos que invierte en renta comercial europea; y Zurich Descuento, un vehículo de deuda privada.
“Nuestro foco en el último año es dedicarnos a los alternativos para darle oportunidad a los clientes para acceder, sobre todo que tenemos una base de clientes de patrimonio medio, que les cuesta ingresar a este tipo de fondos”, indica Luarte.
Ahora, si bien el ejecutivo describe un entorno en que los inversionistas individuales están volviendo a acercarse a las estrategias menos líquidas, también señala que ellos y los institucionales están esperando a que “decante” la incertidumbre política en el país andino. “Tienen interés, pero están esperando a ver cómo evoluciona la situación local”, comenta.
De todos modos, en Zurich Chile AGF anticipan que el mundo alternativo seguirá concentrando los esfuerzos de creación de vehículos de la administradora por el próximo par de año.
BBVA México prevé que el país podría enfrentar un panorama de retos para la economía, derivado de la cuarta ola de contagios, el aumento considerable en la inflación, así como mayores tasas de interés.
El estudio destaca la revisión a la baja de la estimación de crecimiento para 2021 a 5.3% (6.0% previo) ante la debilidad que la economía registró en 2S21, y considerando el menor crecimiento que la actividad económica exhibió en los tres primeros trimestres del año, en comparación con las cifras preliminares publicadas por el INEGI (1T21-3T21). En el 3T21 el sector de apoyo a los negocios se contrajo (-)50.8% TaT como resultado de la fecha límite para la implementación de la nueva ley de outsourcing.
Este cambio representó la desaparición (o reducción) del número de unidades económicas que proveían dicho servicio, y la correspondiente pérdida de su valor agregado a la producción. La institución financiera considera que este evento afectaría a la actividad económica de manera única en el 3T21.
Con respecto a los componentes de la demanda, los datos más recientes del Indicador de Consumo Big Data BBVA Research señalan debilidad en el consumo durante la segunda mitad de 2021, manteniendo como riesgo la persistencia de altos precios y su efecto sobre el ingreso disponible y el gasto de los hogares, así como la ola de contagios que está causando la variante Ómicron. Por el lado de la oferta, la escasez de insumos resultado de los cuellos de botella en las cadenas globales de suministro, ha frenado el crecimiento de la manufactura, especialmente en la industria automotriz (que ha operado al 60% de su capacidad instalada en meses recientes).
Los últimos datos del indicador ISM de Nuevos Pedidos Manufactureros en EE.UU. señalan un prolongamiento en los cuellos de botella, para los que la variante Ómicron representa el mayor riesgo, ante los cierres de fábricas, escasez de mano de obra y congestiones portuarias. Con respecto a la inversión, aún se encuentra 15% por debajo de su nivel de enero de 2019 ante la reiterada incertidumbre derivada de algunas políticas públicas y la extensión de las afectaciones en las cadenas de valor.
El informe señala que es importante notar que la recuperación en México ha sido más lenta que en otros países latinoamericanos comparables; aún persiste holgura en la actividad económica que permanece 3% por debajo de su nivel pre-pandemia. El débil crecimiento de 2021, las persistentes afectaciones a las cadenas de valor, y la continua ralentización del consumo ante mayores precios, imponen una revisión a la baja en la estimación de crecimiento para 2022 a 2.2% (3.2% previo), con riesgos a la baja impulsados por Ómicron y la consecuente prolongación de los cuellos de botella, a lo que se suma el riesgo de que se materialicen movimientos en la tasa de referencia de la Reserva Federal menos graduales de lo previsto.
Después de 23 meses de haber iniciado el confinamiento por el COVID-19, el mercado laboral continúa con señales de debilidad y empeoramiento de las condiciones generales. Uno de los riesgos latentes sobre el mercado de trabajo sigue siendo el COVID-19 y sus variantes que continúan incidiendo negativamente en la actividad económica. Otro factor es el bajo nivel de inversión, importante determinante de la creación de empleos.
Datos a diciembre de la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo (ENOE) muestran que persiste el estancamiento de la tasa de participación laboral que se ubicó en 59.5%, solo 3pp arriba en su comparación anual, pero 0.7pp por debajo del nivel previo a la pandemia (febrero de 2020). Adicionalmente, la institución financiera identifica cuatro rasgos fundamentales en la reactivación del mercado laboral: 1) una acelerada recuperación de los niveles de informalidad laboral (56.2%, similar al nivel previo a la pandemia), 2) niveles de subocupación que han venido descendiendo de manera marginal (11.1%) pero que continúa 2.2pp por arriba del nivel de febrero de 2020; 3) niveles de desempleo persistentemente altos (4.0%, prácticamente igual al 4.2% de diciembre de 2020) y 4) una recuperación de empleo con condiciones críticas de ocupación donde prácticamente una cuarta parte (24.3%) de los ocupados en el país se clasifican en esta condición.
El estudio detalla con respecto al empleo formal y en línea con el pronóstico de BBVA México que el número de trabajadores afiliados al Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) creció en 846 mil en 2021, la mayor creación de empleo desde 1998, explicada principalmente por la reactivación económica, que permitió el regreso de los trabajadores al mercado laboral tras el cierre económico que provocó la pérdida de más de 1.1 millones de empleos.
Otro elemento que contribuyó en la generación de empleo durante 2021 fue la Reforma para eliminar el outsourcing que favoreció principalmente la creación de puestos permanentes. Con este resultado, el mercado laboral alcanzó el nivel de empleo previo a la pandemia. Si bien esto es una buena noticia, al compararlo con el nivel de creación de empleo de la tendencia previa a la pandemia, el resultado no es tan positivo, ya que se ubica 1.5 millones de empleos por debajo, y dadas las perspectivas de creación de empleo para los próximos años, la afectación al mercado de trabajo será de largo plazo.
Un elemento a señalar es que a pesar de la reforma para eliminar el outsourcing, todavía se esperaba un ajuste estacional negativo en el empleo en diciembre de 2021 de alrededor de (-)319 mil empleos, el cual prácticamente se materializó con (-)313 mil empleos de acuerdo a cifras del IMSS, con lo cual se corrobora que el ajuste estacional del empleo se explica por otros factores que pueden estar relacionados, por ejemplo, con trabajos que por sus características se requiere que sean eventuales, o empleos que tienen ciclos productivos específicos con cierres de presupuestos con plazos definidos, entre otros.
Partiendo de lo anterior y con base en el escenario de crecimiento económico de BBVA México, se revisa a la baja la estimación de empleo y ahora prevé que se crearán 618 mil nuevos puestos de trabajo en 2022 y un ligero descenso en la tasa de desempleo con cifras desestacionalizadas, que seguirá mostrando resistencia a la baja, y alcanzará un nivel de 3.4% a fin de periodo de 2022.
Cabe señalar que los incrementos al salario mínimo han representado avances importantes para la recuperación del poder adquisitivo de los trabajadores que lo perciben, pero todavía se encuentra muy rezagado en términos reales y de manera comparada se ubica como el más bajo entre los países de la OCDE. De acuerdo con el Informe “Situación México” es importante puntualizar que los incrementos del salario mínimo no han impactado a la distribución salarial de los trabajadores afiliados al IMSS; de hecho, lo que se observa es que se ha venido compactando la distribución salarial y se ha generado en los últimos años una mayor concentración de trabajadores en empleos de hasta 2 salarios mínimos e incluso han desaparecido puestos de trabajo con rango de salario de más de 18 salarios mínimos. Es decir, no se ha observado un efecto faro.
El hecho de que se estén generando empleos de menor remuneración, y dada la dinámica reciente de inflación, ha implicado que en términos reales el salario y la masa salarial se hayan estancado en niveles previos a la pandemia, lo cual implica directamente una afectación al ingreso real disponible y por lo tanto al consumo, por lo que, a pesar de las ganancias temporales en salario real y empleo, el mercado de trabajo todavía muestra niveles importantes de holgura.
Con respecto a la inflación el estudio señala que la general alcanzó 7.4% al cierre de 2021, con la subyacente en 5.9%, ambos niveles máximos para un año desde que Banxico estableció el esquema de metas de inflación (2001). Las presiones inflacionarias se generalizaron e intensificaron en la segunda mitad del año, con todos los subíndices principales mostrando un incremento en este periodo, con excepción del correspondiente a energéticos, que se desaceleró en la segunda mitad del año, pero aún así cerró por encima del nivel de la inflación general, en 8.7%. La inflación continúa presionada por los factores que la han afectado globalmente: i) los cuellos de botella por el lado de la oferta en un contexto de mayor demanda de mercancías, principalmente de alimentos, ii) los aumentos en los precios de los servicios en un contexto de reapertura de la economía y mayor movilidad tras el suavizamiento de las restricciones para contener los contagios, iii) el traspaso de mayores costos e incluso aumento de márgenes de utilidad en algunos sectores, y iv) sobre todo en la primera mitad del año, el fuerte repunte de los precios energéticos.
Hacia delante, BBVA México prevé una tendencia de desaceleración en la inflación, más rápida y marcada en la general que en la subyacente. Anticipa que la inflación general tenderá a mostrar un menor ritmo de aumento interanual trimestre a trimestre, desde el primero hasta ubicarse en 4.1% al cierre del año. Por su parte, el informe anticipa que la inflación subyacente mostrará una tendencia alcista en el primer trimestre del año, y que descenderá más lentamente en los siguientes tres, para ubicarse en 4.5% al cierre del año. Para 2023 prevé el regreso de la inflación a niveles más moderados y cercanos al promedio de la última década, de 3.5%.
En este contexto, Banxico incrementó la magnitud de su ciclo de subidas en la última reunión del año, aumentando la tasa monetaria en 50pb a 5.50%, señalizando con ello que el ciclo de subidas “preventivo” hasta antes de dicho incremento, se aceleraría para posiblemente ubicar la tasa monetaria por arriba de la neutral lo más pronto posible, con la intención de evitar que los persistentes elevados niveles de inflación afecten las expectativas de inflación de mediano plazo, y con ello, el proceso de formación de precios.
Aunque la tasa monetaria es inefectiva para contrarrestar los factores que han impulsado al alza la inflación -i.e., afectaciones en las cadenas de producción y aumento de precios internacionales de los insumos-, la institución prevé que Banxico mantendrá el mayor ritmo de aumento de la tasa monetaria en la primera reunión del año, llevando la tasa monetaria a 6.0% en febrero. Más adelante, en un contexto de subidas de tasas por parte de la Reserva Federal, prevé que Banxico aumentará la tasa monetaria cuatro ocasiones más, reduciendo el ritmo, con aumentos de 25pb, hasta llevar la tasa a 7.0% a fin de año. Esta postura monetaria restrictiva incidirá negativamente sobre la actividad económica de este año y el próximo. En 2023, con la inflación dentro del rango objetivo, se prevé que Banxico iniciará una pausa prolongada en un contexto de gradual aumento de la tasa de fondos federales.
En lo que se refiere al rendimiento de los bonos a 10 años, el estudio destaca que presentó un ajuste al alza, similar al experimentado por los bonos del Tesoro de Estados Unidos ante la postura más restrictiva por parte de la Reserva Federal. Con el nuevo escenario para la trayectoria de la tasa de monetaria y la inflación, se revisaron las previsiones para las tasas de interés. Con la expectativa de que Banxico continuará con una postura de normalización relativamente agresiva en los próximos meses y en línea con el acelerado proceso de retiro de estímulos monetarios a nivel global, se prevé que al cierre de 2022 el rendimiento de los Cetes a 3 meses rondará en torno a 7.0%, mientras que el rendimiento de los bonos gubernamentales a tasa fija a 10 años será de 8.1%.
Anticipa que el déficit de la cuenta corriente se estabilizará en alrededor de 1.3% del PIB en el mediano plazo. Asimismo, se prevé que dicho déficit será de alrededor de 0.8% del PIB en 2022 ante el moderado crecimiento económico anticipado para este año. Lo anterior sugiere que la economía mexicana no presenta un problema de balanza de pagos.
En el periodo enero-noviembre, el balance primario del sector público registró un monto de 74.8 mil millones de pesos vs. 145.7 mil millones de pesos en el mismo lapso de 2020. Para este año, el gobierno federal tiene una meta de -83.6 mil millones de pesos (-0.3% del PIB) para dicho balance. Los ingresos públicos aumentaron 5.1% en términos anuales reales durante enero-noviembre mientras que el gasto público se expandió en 5.3% en dicho periodo. En lo concerniente a los ingresos tributarios, estos se incrementaron 0.6% en términos anuales reales en el periodo mencionado.
El crecimiento económico y la evolución de los ingresos tributarios serán dos factores relevantes que afectarán la calificación crediticia soberana que otorgan las tres principales agencias calificadoras. Si bien el gobierno federal se ha mantenido al margen de proponer una reforma fiscal que apuntale los ingresos tributarios a través de la eliminación de exenciones al pago del IVA y mayores tasas impositivas sobre el ingreso, la expectativa de mayores ingresos tributarios para los próximos años se apoya en mejoras recaudatorias y acciones de simplificación administrativa y tecnológica con más autoridad de fiscalización para el cumplimiento en el pago de impuestos. De cumplirse lo anterior y con estabilidad en la deuda pública (% del PIB), se mitigaría el riesgo de la pérdida del grado de inversión en los siguientes dos o tres años.
La institución financiera considera que resulta cuestionable que durante los siguientes años Pemex pueda recibir paquetes de apoyo financiero similares a los de 2020 y 2021. Para mejorar sus finanzas de una manera más permanente, la empresa productiva del Estado tendrá que controlar mejor su gasto operativo y enfocar su inversión en los campos petroleros más productivos. Adicionalmente, sería adecuado que se retomaran las asociaciones con el sector privado (farmouts), lo cual le permitiría a Pemex atraer capital y conocimiento para la exploración y producción de nuevos campos, sobre todo para aguas profundas. También sería conveniente que Pemex eficientice su actividad de refinación antes de pensar en su expansión, o que permita una mayor importación de gasolinas, lo cual tiene menores costos que producir internamente. Hacia delante, Pemex tendrá más dificultades para obtener financiamiento en términos competitivos debido al creciente número de inversionistas globales que adoptan criterios de sustentabilidad ambiental en sus decisiones de inversión. Por ello, BBVA México anticipa que será el gobierno federal quien obtenga el financiamiento y se lo otorgue a Pemex mediante aportaciones patrimoniales.
La firma uruguaya de gestión de patrimonios y asset management Nobilis presentó su informe anual de mercados “Perspectivas 2022”, que analiza el desempeño del mercado nacional y del internacional durante los últimos doce meses e incluye proyecciones para este año.
Optimismo moderado
Sobre el desempeño del mercado uruguayo, Nobilis señala en su reporte que los bonos de Uruguay en dólares terminaron el año con un retorno total negativo que en promedio alcanzó el 1,7%. Sin embargo, al comparar este resultado con lo que sucedió con otros bonos de países emergentes, se observa que el comportamiento de Uruguay fue mejor que la región de Latinoamérica, donde cayeron cerca de 3,3% en promedio.
Por otro lado, el riesgo país de Uruguay, que captura de cierto modo la calidad crediticia, se mantuvo relativamente estable e incluso cayó levemente en 2021.
A futuro, la firma realizó un pronóstico moderadamente optimista, similar al efectuado para 2021, ya que prevé un aumento del 3,3% en la actividad económica para el año en curso, de acuerdo con las estimaciones realizadas en la encuesta de expectativas económicas del Banco Central (BCU), considerando que es probable que el buen desempeño del último semestre de 2021 permita corregir al alza estas proyecciones.
En tanto, una buena temporada turística impactaría positivamente en las cifras de exportación de servicios, lo cual se sumaría al buen desempeño de esta variable en 2021, con lo que se mantendría como un motor para la actividad económica. La demanda externa también promete mantenerse firme a medida que la economía global continúa mostrando un crecimiento vigoroso para 2022 y eso también permite pronosticar fortaleza en el precio de los commodities que Uruguay exporta.
Mercados financieros: la economía mundial seguirá creciendo, pero menos que en 2021
Respecto a los mercados financieros, el informe aborda la situación a nivel internacional, destacando al 2021 como el año de la vacunación y la reapertura global.
Mientras transcurrían las campañas de inmunización y se observaba la efectividad de las vacunas, se fueron levantando las medidas de restricción a la movilidad y con ello se reactivó la actividad económica global, que cerró el año con un crecimiento de 5,5%. En este escenario, los bancos centrales mantuvieron sus políticas expansivas y los gobiernos continuaron con el apoyo fiscal, en particular el dirigido a los hogares, lo que llevó a que la demanda global se reestableciera más rápido que la oferta y presionó la inflación al alza alrededor del mundo hasta niveles no vistos en décadas.
El mercado fue reflejando esta realidad mediante subas en las tasas, haciendo que la mayor parte de los bonos cerraran el año en terreno negativo. Sin embargo, la fuerte recuperación de la actividad llevó las ganancias corporativas a superar las previsiones de los analistas e impulsó las acciones globales a nuevos máximos históricos, cerrando por segundo año consecutivo con retornos de doble dígito.
Para este año se prevé que el nivel de actividad global continúe creciendo, aunque a menor ritmo que en 2021. De acuerdo a las estimaciones del Banco Mundial, el crecimiento global en 2022 será de 4,1% (3,8% países desarrollados y 4,6% emergentes) y luego el ritmo se seguirá moderando hacia el potencial de largo plazo.
Los países emergentes son los que vienen más rezagados en cuanto a recuperar el nivel de actividad previo a la pandemia y solo la mitad de ellos aproximadamente lo logrará en 2022.
El año 2021 de Nobilis
Por otro lado, el equipo de inversiones destacó uno de los hitos más importantes de este año que fue la decisión de someter al análisis de la agencia de calificación Fix Ratings la calidad de la gestión de las inversiones del fondo de inversión “Estrategia Crecimiento”. Luego de un exhaustivo análisis, la agencia le otorgó la calificación de A+c(uy), convirtiéndose en el primer fondo en Uruguay en contar con una calificación independiente.
“Al igual que en 2020, el año que pasó nos enfrentó a una serie de dificultades que pudimos superar y crecer a partir de ellas, gracias a nuestras acertadas estrategias de negocio. Los portafolios de inversión diversificados en distintas clases de activos con objetivos de largo plazo nos permitieron continuar ofreciendo retornos consistentes para nuestros clientes”, concluye el informe.
La National YoungArts Week es un programa intensivo para que los finalistas de la competencia colaboren con compañeros de 10 disciplinas, desarrollen su oficio con líderes reconocidos internacionalmente en sus campos y creen conexiones para toda la vida.
A partir del sábado a las 8pm ET, los más destacados artistas de EE.UU. serán presentados en siete series de escritos, performances, lecturas, y otro tipo de exhibiciones.
La Semana Nacional de YoungArts ofrece a los finalistas del premio YoungArts en la orientación que necesitan para prepararse para la siguiente etapa de su desarrollo artístico.
Debido al incremento de casos de la variante Ómicron, la Semana Nacional de YoungArts se llevará a cabo nuevamente de manera virtual y se transmitirá en youngarts.org.
YoungArts identifica a los artistas jóvenes más exitosos en las artes visuales, literarias y escénicas, y les brinda oportunidades de desarrollo creativo y profesional a lo largo de sus carreras.
Cada año, YoungArts presenta a la próxima generación de artistas en 10 disciplinas. Los 156 finalistas que se exhibirán a lo largo de National YoungArts Week+ han sido seleccionados por destacados paneles de artistas específicos de la disciplina a través de un riguroso proceso de adjudicación.
Para registrarse a los eventos en streaming, puede acceder al siguiente enlace.
Openbank, el banco 100% digital de Grupo Santander, desembarca en Argentina. Argentina es el primer país americano en el que la entidad está presente y el quinto país del mundo en el que desarrollará su actividad tras su llegada a Alemania, Portugal y Países Bajos en los últimos años y su presencia en España desde hace 27 años, anunció la entidad en un comunicado.
“Tras varios meses en los que algunos usuarios han podido testar la nueva plataforma de la entidad, cualquier cliente puede ya acceder a todas las funcionalidades y productos disponibles en este nuevo mercado”, añade la nota.
En Argentina, el despliegue de productos y servicios comienza en una primera fase con cuenta de ahorro y cuenta nómina, así como tarjeta de débito para que los clientes puedan realizar sus operaciones habituales. Además, los usuarios tendrán acceso a Debin, un sistema de envío de dinero instantáneo, tanto en pesos como en dólares, entre particulares (similar a Bizum).
“El banco cuenta con más de 1,7 millones de clientes en el mundo y acaba de cerrar el mejor año de su historia tras lograr un crecimiento de su base de usuarios fuera de España del 83%”, afirmó Grupo Santander.
Hasta el tercer trimestre de 2021 se emitieron 1,1 billones de dólares en bonos y préstamos sostenibles, frente a menos de 15.000 millones de 2010; aunque la estimación para todo 2021 es de 1,4 billones. Según un estudio conjunto de Pictet AM y el Instituto de Finanzas Internacionales, este tipo de emisiones puede alcanzar 4,5 billones de dólares anuales para 2025.
El documento explica que hasta ahora la inversión con criterios ESG se ha centrado principalmente en renta variable, pero para hacer frente a los restos climáticos y medioambientales, de aquí a final de la década, se necesitan anualmente inversiones de 4 billones de dólares, por lo que es inevitable acudir a la deuda. Por ello, defiende que, en los próximos cinco a diez años, se producirá una revolución en los mercados de renta fija.
“Hay que tener en cuenta que la deuda relacionada con cuestiones ESG parte de una base limitada, pero ha crecido con rapidez los últimos años y la variedad de instrumentos y actividades con orientación medioambiental que financian ha aumentado a ritmo vertiginoso. Los ejemplos de estructuras innovadoras que pueden convertirse en habituales en pocos años, incluyen: la deuda verde (requisitos respecto a uso); bonos sostenibles (objetivos sostenibles o combinación de verde y sociales); vinculada a sostenibilidad (cupones ligados a resultado medioambiental de un Estados o empresa); bonos de transición (financia empresas con altas emisiones de gases de efecto invernadero en transición a actividades más ecológicas o menores emisiones de carbono); y bonos sociales (destinados a proyectos de impacto social positivo)”, identifica el informe.
Para el inversor, estos cambios implican nuevos desafíos. Según las conclusiones, hoy día es posible crear carteras de renta fija que, además de objetivos financieros, facilitan satisfacer objetivos no financieros, como atenuación del cambio climático, protección de biodiversidad o lucha contra la desigualdad. No obstante, hay que estudiar los riesgos, advierten: “Los bonos con criterios ESG, pueden, por complejidad, ser caros de analizar y deben ser examinados con mucho más detalle. A menudo no se ajustan fácilmente a la construcción de carteras que el inversor emplea”.
El crecimiento de la deuda sostenible emergente
En este sentido, el informe argumenta que la deuda soberana sostenible y empresarial de mercados emergentes será la clase de activo que cobre mayor importancia. El estudio de Pictet AM e IIF estima que las emisiones de bonos ESG en emergentes crecerá de 50.000 millones de dólares en 2020 a 360.000 millones para 2023 y más de 700.000 millones para 2025. Y, en el mejor escenario, pueden alcanzar 2 billones de dólares.
Ahora bien, las conclusiones del informe tamizan que hay que tener en cuenta que “en 2020, solo 83.000 millones de dólares de inversiones transfronterizas a países en desarrollo estaban relacionados con el clima, menos de 8 % del total”, y la diferencia entre inversiones necesarias y recibidas para alcanzar los Objetivos de Desarrollo Sostenible de Naciones Unidas 2030 en países en desarrollo y emergentes se estima en 2,5 billones de dólares anuales. Por eso concluye que la expansión de bonos ESG y un verdadero mercado de deuda sostenible puede poner a disposición de estos gobiernos y empresas el capital que necesitan.
“El desarrollo de bonos sello ESG es un segmento al que llevamos prestando gran atención desde hace cierto tiempo. El estudio de IIF y Pictet Asset Management corrobora nuestra convicción de que se va a producir una revolución silenciosa en los mercados de renta fija, que beneficiará tanto al inversor y la sociedad en su conjunto, como al medioambiente”, destaca Raymond Sagayam, director de inversiones de renta fija de Pictet AM.
Por su parte, Sonja Gibbs, directora ejecutiva y responsable de finanzas sostenibles de IIF, estima que, en 2025, habrá muy pocos inversores a nivel mundial que no cuenten con una importante asignación a inversiones verdes o con sello ESG. “Si miramos más allá, hacia 2050, cuando estados y empresas en todo el mundo estén a punto de alcanzar objetivos de emisiones netas cero de CO2, habremos realmente logrado un mercado de renta fija mundial más verde, al tiempo que mejorado nuestro entorno”, afirma Gibbs.
El liderazgo de las economías desarrolladas
Pese a que las mayores expectativas están puestas en el potencial que tienen los mercados emergentes, la realidad es que las economías desarrolladas dominan el mercado de bonos verdes. En concreto, el 50% de los bonos verdes en circulación están denominados en euros: desde finales de 2015 la expansión ha sido más rápida en Alemania, Francia y EEUU, que juntos representan más de un tercio del total del mercado.
En cambio, en mercados en desarrollo y emergentes China, India, Chile y Brasil representan 80% de la emisión de este tipo de deuda desde finales de 2015. Según destacan desde Pictet AM, como emisores, también destacan las empresas financieras, que representan 35% de los bonos verdes emitidos desde 2019, y las de servicios públicos e industriales 17% y 4%. En empresas no financieras, matizan, la emisión está dominada por calificaciones grado de inversión, 80% del total desde 2015.
En el futuro y crecimiento de este mercado la estandarización de taxonomías y metodologías de calificación ESG serán relevantes. En este sentido, varias regiones y países desarrollan estándares propios para bonos verdes y productos financieros sostenibles, como los Estándares de Bonos Verdes de la UE o el Catálogo de Apoyo a Bonos Verdes de China, además de esfuerzos liderados del sector privado, como la Iniciativa de Bonos Climáticos para bonos alineados con el clima (sin etiqueta ASG, emitidos por empresas que contribuyen a la transición a la energía limpia).
Según la gestora, el progreso en la estandarización de taxonomías debe fomentar un desarrollo más rápido de este mercado. “Un marco global es el de la Asociación Internacional del Mercado de Capitales (ICMA), con directrices de transparencia y divulgación para Bonos Verdes, Bonos Sociales, Bonos de Sostenibilidad y Bonos Vinculados a la Sostenibilidad. Por su parte las agencias de calificaciones bonos y emisores ASG utilizan diferentes metodologías, a menudo en conflicto entre sí y no totalmente transparentes. Una mayor transparencia sobre cómo recopilan, analizan y calculan métricas ASG puede impulsar la demanda y oferta de deuda ASG”, explican.
Greenium y rentabilidades
“Los bonos verdes son el segmento más dinámico, aunque aún supone menos de 1% del total del universo de renta fija en circulación. Es relativamente pequeño y no especialmente diversificado. Tiene su origen hace 15 años y aún no ha adquirido el peso que permita a los inversores transacciones grandes y rápidas sin oscilaciones adversas de precio. Los bonos verdes se han colocado con rentabilidades a vencimiento persistentemente menores que los convencionales, a pesar de ser menos líquidos y negociarse con menos frecuencia. Puede atribuirse a que los compradores tienden a ser instituciones de comprar y mantener, como fondos de pensiones, seguros y soberanos, a fin de ecologizar sus carteras en línea con sus compromisos de cero emisiones netas”, explican desde la gestora.
Y añaden: “La demanda por bonos verdes ha sido evidente en mercados primarios y secundarios y parece haberse traducido en menores costes de endeudamiento para algunos emisores, con una pequeña prima (greenium) respecto a los bonos convencionales. Esta prima parece mayor en bonos de peor calificación y ciertos sectores como servicios públicos y bonos soberanos. Es el caso de los bonos verdes alemanes, que cotizan con prima respecto a los convencionales para vencimientos similares”.
En este sentido, los bonos verdes han proporcionado una rentabilidad similar o mejor que sus pares no verdes los últimos años. “En concreto, los bonos verdes soberanos han superado a los convencionales desde finales de 2017 en 0,1% mensual promedio. Los índices de renta fija verde han sido ligeramente superiores a los de bonos convencionales, aunque variando considerablemente a nivel de valores individuales. Sin embargo, los índices de bonos verdes han sido más volátiles que los convencionales los últimos años, con diferencias significativas entre sectores. Los índices de bonos verdes de deuda soberana han sido más volátiles que los convencionales, con menor rentabilidad ajustada a volatilidad. Pero la volatilidad de los bonos verdes empresariales es inferior a la de los convencionales, en particular en denominaciones en dólares. Puede ser consecuencia del efecto de la divulgación adicional y verificación de estas emisiones por parte de terceros”, comentan desde la gestora.
Jupiter ha anunciado el lanzamiento del fondo Jupiter Dynamic Bond ESG (sicav), una versión adaptada de su fondo insignia Jupiter Dynamic Bond (sicav) centrada fundamentalmente en la sostenibilidad. Según ha matizado la gestora, el nuevo fondo, que promueve de forma activa características medioambientales y sociales, quedará clasificado con arreglo al artículo 8 del Reglamento de divulgación sobre sostenibilidad (SFDR) de la UE.
El Jupiter Dynamic Bond ESG Fund estará gestionado por el mismo equipo líder en el sector del Jupiter Dynamic Bond, que cuenta con un patrimonio de 9.960 millones de euros: Ariel Bezalel, director de estrategia de renta fija en Jupiter, y Harry Richards, gestor de fondos de renta fija.
Según explica la firma, mientras que el fondo Jupiter Dynamic Bond existente integra plenamente los criterios ESG en el marco de su consolidado proceso de inversión, el Jupiter Dynamic Bond ESG promoverá de forma activa características medioambientales y sociales, incluida la transición hacia una economía baja en carbono y el fomento de unos intereses positivos de todas las partes implicadas. Este nuevo fondo va dirigido a inversores que buscan una solución conforme al Artículo 8 para sus necesidades en materia de renta fija a escala mundial.
Está previsto que tanto el alto proceso de asignación de valores como las principales características de riesgo se mantengan uniformes en los dos fondos. En este sentido, el fondo Jupiter Dynamic Bond ESG aplicará unos estrictos criterios ESG, que incluyen ciertas exclusiones por sectores y países, análisis de datos e interacción constante con las empresas, junto con exhaustivos análisis cualitativos, para determinar si los valores resultan aptos para ser incluidos en la cartera. “Los requisitos de medición asociados a los fondos englobados por el Artículo 8 permitirán establecer objetivos de sostenibilidad a largo plazo para las empresas y países participados por el fondo, respecto a los que se evaluará, seguirá y compartirá su progreso”, señalan desde la gestora.
El fondo Jupiter Dynamic Bond continuará clasificado por el momento según el Artículo 6 del SFDR, y seguirá ofreciendo su riguroso enfoque establecido sobre las cuestiones ESG tanto en el marco de su selección bottom-up de títulos de deuda corporativa como de su asignación de activos top-down. Según añaden desde la gestora, al igual que todas las demás carteras de inversión de la sociedad, el fondo Jupiter Dynamic Bond ESG hará suyo el compromiso declarado de Jupiter de conseguir la neutralidad en sus emisiones netas de carbono procedentes tanto de sus propias operaciones como de los fondos que gestiona en representación de sus clientes no más tarde de 2050.
“La dilatada experiencia en mercados de deuda corporativa que el equipo de renta fija de Jupiter atesora nos ha enseñado lo fácil que resulta que una gestión deficiente de los riesgos de gobierno corporativo, medioambientales y sociales puede echar por tierra oportunidades en títulos de deuda corporativa aparentemente atractivas o en vías de mejora. Nuestra capacidad para gestionar los riesgos a la baja se fundamenta en un estudio riguroso de los posibles riesgos ESG en paralelo al análisis financiero tradicional. Así, estamos encantados de formalizar y promover este proceso dentro de este nuevo fondo”, ha destacado Ariel Bezalel, director de estrategia de renta fija de Jupiter.
Último nombramiento
En consonancia con el lanzamiento del fondo Jupiter Dynamic Bond ESG, Jupiter ha anunciado el nombramiento de Anna Karim para el cargo de directora ESG de renta fija. Según explican, Anna se incorporó a Jupiter en octubre procedente de Federated Hermes, donde estaba al cargo de la innovación de producto y del crecimiento de los activos gestionados por los fondos centrados en criterios ESG de la empresa. Anteriormente, trabajó 20 años en banca de inversión en empresas como Bank of America Merrill Lynch y Citi Group.
En su nuevo puesto, Anna se ocupará de la amplia gama de fondos de renta fija de Jupiter, con especial atención al Dynamic Bond ESG, para promover unas sólidas prácticas de inversión responsable en el marco del enfoque aplicado por el equipo en toda esta gama de fondos.
Para Warren Tonkinson, responsable global adjunto de distribución de Jupiter: “En nuestra calidad de gestora activa y basada en high conviction, consideramos que ofrecemos un mejor servicio a nuestros clientes mediante inversiones que generan un impacto positivo con su dinero en materia ambiental, social y financiera. Esto sucede no solo en los productos que integran nuestra gama de sostenibilidad, sino en toda nuestra familia de fondos”.
En opinión de Tomkinson, el Ramento SFDR, unido a la cada vez mayor concienciación existente entre los inversores sobre la urgencia de abordar los retos ambientales que están afectando a nuestro mundo, ha acelerado enormemente la demanda de inversiones que contribuyen a generar este impacto positivo. “Por ello, estamos encantados de ofrecer este nuevo fondo a los clientes que buscan acceder a nuestra exitosa y consolidada estrategia con los objetivos ESG en mente», concluye.
Groupama AM lanza el G Fund – Global Inflation Short Duration como respuesta a un contexto reflacionista y de tipos reales bajos. La entidad prevé que los niveles de inflación podrían estabilizarse en niveles superiores a los previstos, en un contexto de tendencias estructuralmente reflacionistas. Unas perspectivas que, según explican, abogan por soluciones de inversión protectoras capaces de beneficiarse de un aumento de la inflación.
El G Fund-Global Inflation Short Duration invierte principalmente en bonos de corta duración (1-5 años) ligados a la inflación y emitidos en países de la OCDE con un horizonte de inversión a medio plazo. El fondo tiene como objetivo obtener una rentabilidad superior a la del índice de referencia Bloomberg World Government Inflation-Linked Bond 1-5 años (con cobertura en euros), cupones netos reinvertidos.
Para lograrlo, el equipo de gestión aplica una estrategia de bonos flexible basada en varios motores de rendimiento, como la gestión de la duración, el posicionamiento sobre la curva de tipos, las elecciones de distribución geográfica, los breakeven de inflación, la selección de valores y, en menor medida, las divisas.
En general, esta estrategia ofrece al inversor una importante exposición a la inflación a corto plazo gracias al mecanismo de indexación y una menor sensibilidad a las evoluciones de los tipos reales.
Combinar rendimiento e inversión responsable para sus clientes es un compromiso importante para Groupama AM, por lo que el equipo de gestión efectúa un análisis completo de las características ESG de los emisores utilizando una metodología de calificación propia. El G Fund – Global Inflation Short Duration está clasificado como «Artículo 8» según la normativa SFDR.
«Pensamos que era el momento adecuado para lanzar un fondo de bonos ligados a la inflación a corto plazo. De hecho, la combinación de un contexto reflacionista y unos tipos reales históricamente bajos, ofrece según nuestra opinión, un punto de entrada atractivo para esta estrategia. El uso de bonos indexados permite proteger las carteras frente a un aumento de la inflación mayor de lo previsto. Favorecemos las duraciones cortas, ya que la parte corta de la curva se beneficia más de las sorpresas de la inflación, al tiempo que limita el riesgo de sensibilidad a los tipos reales», explica Xavier Hoche, director de Gestión.
Según destaca la gestora, el equipo de renta fija y crédito es el encargado de la gestión del fondo, compuesto de nueve especialistas y cuyos activos gestionados ascienden a 12.500 millones de euros.
¿Desaprovechan los inversores profesionales los beneficios de cobertura contra la inflación que pueden ofrecer las materias primas? Según argumenta WisdomTree en su última encuesta, en parte, sí estarían perdiendo esta oportunidad. En cambio, los resultados revelan que el que casi el 50% de los inversores profesionales europeos se está preparando para una inflación elevada y ante el riesgo de una política monetaria inefectiva.
La encuesta*, realizada a inversores profesionales en toda Europa, muestra una falta de confianza en la capacidad de los bancos centrales para mantener a raya la alta inflación, siendo esta última (un 52%) y los errores de política de los bancos centrales (un 51%) los riesgos que más preocupan a los inversores. Según explican desde WisdomTree, con la inflación en Europa situándose significativamente por encima de los niveles objetivo del 2%, el 72% de los inversores profesionales encuestados ha comenzado a prepararse para un escenario de alta inflación según el sondeo.
En este sentido, cuando se preguntó a los inversores cómo se están preparando para mitigar el entorno inflacionista, el 46% indicó que mediante una asignación a materias primas en sus carteras. Asimismo, otro 28% está considerando posicionarse en esta clase de activo para reducir el impacto de la inflación en sus carteras.
“Una de las características más comentadas de la inversión en materias primas es su capacidad para ejercer de cobertura contra la inflación. Los académicos han estudiado durante mucho tiempo la relación entre las materias primas y la inflación y concluyen que, a largo plazo, y en la mayoría de los períodos históricos, las materias primas están correlacionadas positivamente con la inflación. La rentabilidad media mensual de las cestas de materias primas tiende a incrementarse cuando el índice de precios al consumo (IPC) aumenta, lo que no siempre es el caso para otros activos como los bonos ligados a la inflación o los bienes inmuebles”, explica Nitesh Shah, responsable de Análisis Macroeconómico y Materias Primas en WisdomTree Europa.
Desde la gestora reconocen que, a pesar de que las materias primas son bien conocidas por sus propiedades de cobertura contra la inflación, el modo preferido para la mayoría de los inversores europeos (para el 55%) de acceder a esta clase de activo es a través de las acciones relacionadas con las materias primas. Sin embargo, apuntan, las acciones relacionadas con las materias primas y las materias primas por sí mismas no tienen características similares, lo cual podría sorprender a aquellos que construyen sus carteras de este modo.
De acuerdo con la encuesta, solo el 37% de los inversores europeos profesionales eligen, o elegirían, invertir a través de exposiciones sintéticas, mientras que un 24% lo haría a través de exposiciones con respaldo físico, típicamente los métodos más eficientes para acceder a las materias primas y realizar una cobertura contra la inflación.
Por su parte, Pierre Debru, responsable de Análisis Cuantitativo y Soluciones Multiactivo para WisdomTree Europa, añade: “Las acciones relacionadas con las materias primas son generalmente utilizadas como una alternativa de acceso fácil a este tipo de activo. Sin embargo, el análisis ha mostrado que una inversión en valores relacionados con las materias primas proporciona una exposición a la gestión, las líneas de negocio y las prácticas de estas compañías principalmente. En muchos casos, estas compañías cubren parte o toda su exposición a las materias primas, es decir, pagan la prima de riesgo de las materias primas a los titulares de contratos de futuros. Las acciones relacionadas con las materias primas se comportan significativamente más como las acciones o renta variable en general que como las materias primas, y como resultado, no son una cobertura muy efectiva contra la inflación”.
De acuerdo con la encuesta, los activos más comunes para los inversores profesionales europeos al configurar sus carteras con propósitos de cobertura contra la inflación son: las acciones (78%), los bonos ligados a la inflación (58%) y las infraestructuras (47%). Las cestas de materias primas (46%) y el oro (28%), ambas históricamente buenas coberturas inflacionarias, no se situaron entre las tres clases de activo mayoritarias, a pesar de que el 33% de los inversores profesionales europeos espera incrementar sus asignaciones a las materias primas de energía y un 29% a las materias primas agrícolas durante los próximos doce meses.
*La encuesta, realizada por la agencia de investigación independiente CoreData Research, consultó a 600 inversores profesionales de toda Europa, abarcando desde asesores financieros hasta gestores de patrimonio y family offices. Los inversores encuestados son responsables de aproximadamente 400 mil millones de euros en activos bajo gestión.