Foto: Mike Hugman, estratega de renta fija de los mercados emergentes de Investec. Investec: "Los bancos centrales de muchos países emergentes han recuperado la credibilidad"
Mike Hugman, estratega de renta fija de los mercados emergentes de Investec, explica en este vídeo por qué cree que la baja inflación es un factor positivo para los bonos de un amplio rango de mercados emergentes.
“Es una de las cosas que más me ha sorprendido en 2014, lo rápido que se ha extendido en todo el mundo el tema de la inflación”, explica. Un hecho que, en su opinión, se debe en gran parte a la caída de los precios de las materias primas, que ha sido muy pronunciada y se ha producido en un corto espacio de tiempo. Es el caso, por ejemplo, del petróleo.
Sin embargo, Hugman lo tiene muy claro. “De cara al próximo año, serán las medidas que adopten los bancos centrales las que marquen la evolución de los bonos” y cree que no hay que tener miedo al aumento de los tipos de interés en Estados Unidos porque será mucho más lento y gradual de lo que los mercados han estado acostumbrados en las dos últimas décadas.
“Como resultado de la baja inflación, que esperamos que continúe durante algún tiempo, somos bastante positivos en los bonos de los países emergentes. No sólo por este factor, sino también porque muchos de estos países han llevado a cabo progresos en sus reformas, aumentando la credibilidad de sus políticas monetarias y de sus bancos centrales. Estos mercados deberían evolucionar bien en un contexto de baja inflación”, concluye el estratega de Investec.
Photo: Moyan Brenn. Azimut Acquires 100% of AZ Global Portföy to Continue Its Growth Plans in Turkey
Azimut, una de las principales gestoras independientes de Italia, ha firmado esta semana un acuerdo de compra vinculante para adquirir la participación restante del 40% de AZ Global Portföy Yönetimi A.Ş. que le faltaba por comprar, convirtiéndose en su accionista exclusivo. Además, Azimut ha acordado la venta de su participación accionarial del 10% en Global Menkul Değerler A.Ş. al accionista mayoritario de GMD a precio de mercado.
El 7 de noviembre, AZ Global fue la primera compañía de manejo de activos independiente aprobada por la junta de Mercado de Capitales para operar bajo el nuevo marco regulatorio a partir de julio de 2014. Ahora, esta operación establece una sólida infraestructura para la gestión de activos de Turquía, que atesora buenas oportunidades de crecimiento tanto en términos de producción como de distribución, permitiendo a los managers comercializar directamente sus productos y servicios.
La compra permitirá a Azimut desarrollar sus planes en Turquía mediante la inversión en una plataforma de asesoramiento financiero integrado compuesta por las marcas de fondos locales y distribución AZ Global (que pasará a denominarse Azimut Portfoy Yönetimi AS) y AZ Notus, una sociedad de gestión discrecional de portfolios.
A la espera de la aprobación de las autoridades regulatorias, Azimut, a través de AZ International Holdings S.A., pagará un importe total de alrededor de 1,3 millones de euros.
Pietro Giuliani, presidente y CEO de Azimut Holding, comenta: «Seguimos creyendo en el potencial de Turquía y en las perspectivas de la firma local de gestión de activos, que está respaldada por un equipo de profesionales con talento y normas reguladoras fuertes. Desde nuestra primera joint venture en 2011, Azimut ha desarrollado una plataforma integrada que ha alcanzado una cuota de mercado del 21% entre los operadores independientes, también gracias al lanzamiento de dos fondos UCITS manejados y asesorados por nuestros colegas turcos. Estamos muy agradecidos a Global por los resultados que hemos logrado juntos y vamos a seguir cooperando en el futuro «.
Capital Strategies Partners, firma especializada en intermediación de fondos de inversión, tiene un acuerdo con AZ Fund Management para distribuir sus productos en Latinoamérica.
En la foto Roque Calleja de BlackRock. Foto cedida. ¿Cuáles han sido los nombramientos más jugosos para los lectores de Funds Society en 2014?
Los cambios de trabajo, los fichajes y las salidas de profesionales del sector de wealth y asset management siempre levantan mucho interés entre nuestros lectores, aunque algunos de estos nombramientos pasan más desapercibidos no podemos esconder que hay otros que encienden la red y corren como la pólvora por el ciberespacio.
Por ello, no queremos cerrar el año sin contarles, de mayor a menor, cuales han sido los movimientos más jugosos para nuestros lectores y para ello hemos elaborado un top 10:
1.- Roque Calleja. El movimiento de Calleja dentro de BlackRock, quien en abril pasado se trasladaba desde las oficinas de la gestora en Nueva York a México como responsable de desarrollar y mantener la relación con inversionistas institucionales en México y Centroamérica, ha sido sin duda el nombramiento más leído en 2014 por nuestros lectores.
2.- Conchita Calderón. A corta distancia de Calleja se encuentra el nombramiento de Calderón como directora ejecutiva de Desarrollo de Nuevos Negocios de JP Morgan para México, un movimiento que se producía a principios de año. Calderón se incorporaba al equipo de JP Morgan desde Canepa Management, entidad que participa en el capital de la española Azora.
4.- Andbank anunciaba a principios de año la contratación de un equipo de profesionales en Bahamas liderado por Juan Iglesias, procedente de Julius Baer, como CEO de la entidad en Bahamas, y al que sumaban un nutrido grupo de profesionales como Daniel-Marc Brunner desde Credit Suisse como jefe de Banca Privada, y también desde Julius Baer, Werner Gruner como director de banca privada. A éstos se suman Wendell Gardiner, director de compliance, y Amanda Smith. Esta última procedente de Banco Santander Bahamas.
5.- Antonio Gómez Real. Otro fichaje de Andbank se cuela también en nuestro top 10. En el primer trimestre del año Andbank incorporaba a sus filas en Miami a Gómez Real, un banquero con más de 16 años de experiencia en Latinoamérica. Gómez Real se sumaba a la banca privada de la entidad desde JP Morgan Nueva York.
6.- José Santamaría. También en banca privada BBVA Compass sumaba en julio a su departamento internacional de clientes UHNW a José Santamaría, un profesional con más de 20 años de experiencia en la industria.
7.- Carlos Moreno. La gestora británica Threadneedle, decidida a hacer crecer sus activos en España y Latinoamérica a un ritmo de doble dígito, de entre un 10% y un 20%, anunció hace unos meses que para ello fortalecía su equipo de Ventas, con la incorporación de Carlos Moreno y de otro profesional que, desde Londres, dará apoyo al equipo con sede en Madrid.
8.- Andbank se vuelve a colar en el ranking por el fichaje de un equipo en Panamá. El pasado mes de junio la entidad anunciaba la incorporación a sus filas de un equipo procedente de UBS Asesores Panamá, un equipo liderado por Gabriel Fábregas, antiguo executive director y deputy CEO de UBS Panamá.
10.- Erik Halvorssen se sumaba a mediados de año al equipo CGIS en Miami como senior vice president para trabajar junto a Riggín Dapena, CEO de CGIS, a quien conoció en Bank of America durante el periodo entre 2005 y 2008, cuando Dapena dirijía los negocios de Banca Privada Internacional y corretaje durante la salida del banco de estas líneas de negocios. Halvorssen se incorpoó a la firma chilena desde Lowenhaupt Global Advisors, en donde trabajaba como director del multi family office estadounidense.
Éstos son los diez más leídos en 2014, pero si quiere consultar todos los que se han producido a lo largo de este año puede consultar la sección de nombramientos de Funds Society.
Foto de la Biblioteca del Congreso de Estados Unidos. . Cuento de Navidad 2014
Amigas y amigos: esta vez no les escribo por temas financieros, sino para compartirles mi cuento de navidad de este año.
Esa Navidad sería diferente a las demás. Ya su rostro dibujaría una sonrisa, una de esas que no se borran aún ni en el más profundo de los sueños. Quizá era eso, solo un sueño. No, claro que no era un sueño, era verdad, debía ser verdad, una de aquellas que cambia la vida, que cambia la existencia, de las que se espera por largo tiempo, a veces, incluso, perdiendo algo de la fe en que llegue a suceder; pero en el fondo, muy en el fondo, de las que siempre se guarda una pequeña esperanza de que pasará, por alguna fuerza (de las desconocidas aunque deliciosas fuerzas) del destino.
Y esa Navidad sería diferente, porque por vez primera, una Navidad no lo llenaba de desasosiego. No es que fuera lo que la gente llama un “grinch”; no, de ninguna manera, sus motivos tenía para que no le gustara la Navidad. No recordaba exactamente lo ocurrido ni los detalles precisos de aquella noche, pero en su mente, por esta época, siempre venían las imágenes cuando, luego de las risas que despiertan las doce campanadas que anuncian el arribo del 25 de diciembre, de la natilla, los buñuelos y los regalos que traía el Niño Dios —porque en aquel tiempo no los traía ni Papá Noel ni Santa Claus ni San Nicolás—, la tragedia tocó a su puerta: recuerda unas luces que enceguecieron sus ojos, recuerda el grito de su madre, pero sobre todo, recuerda a su padre —el que veía desde donde estaba sentado— moviendo el timón con un gesto de desesperación, tratando de evitar las luces que venían de frente a ellos.
Solo él se salvó en aquel accidente. Los noticieros reportaron que un conductor ebrio, que iba con exceso de velocidad, embistió de frente a un carro con una familia y que el pequeño hijo de la pareja había sido el único sobreviviente de esa tragedia. Reportaron, también, a las autoridades anunciando todo el peso de la ley para el borracho. Y reportaron finalmente, días después, que el niño había entrado en tratamiento para superar el trauma. Y lentamente, la noticia se fue perdiendo, hasta que desapareció por completo.
Eso no importaba, porque desde aquel momento, lo único que realmente permaneció en el tiempo fueron las pesadillas que suscitaba el recuerdo de aquel diciembre, que aparecían como almas en pena, cada noche de Navidad. Eran esas pesadillas que no lo dejaban dormir apenas la ciudad se vestía de verde y rojo, cada vez que aparecían en las vitrinas de los comercios los adornos en forma de copos de hielo o de hombres de nieve, cada vez que las pequeñas luces blancas empezaban a alumbrar las ventanas de las casas. Eran las pesadillas que lo llevaban a acostarse de lado en la cama, con las rodillas pegadas al pecho y las manos tapando sus orejas, queriendo evitarlas, queriendo callarlas, que no se repitieran en su cabeza una y otra vez. Pero eran las pesadillas que siempre volvían y que no se iban, por más que lo intentara.
Pero él tenía un secreto —como todos tenemos secretos—muy bien guardado: a pesar de no querer la Navidad, de manera oculta siempre había pedido, diciembre tras diciembre, que su alma se llenara de una nueva ilusión. Lo pedía con sus gritos internos, con su fuerza extrema, deseando que algo cambiara su destino. En el fondo no era muy diferente a cualquier otra persona, que en esta época se aferra a sus más profundos anhelos, pensando que esta temporada dará una ‘mano extra’ para que los mismos se cumplan. Aunque muchas veces perdió algo de la esperanza de que llegara a suceder —momento en el cual sus pesadillas se juntaban con la falta de fe, convirtiendo sus eneros en grises momentos de depresión—, seguía firme, año tras año, pidiendo esa ilusión para su alma.
La Navidad anterior, una estrella fugaz había aparecido en el horizonte, y él, tan dado a rehuir de las cosas más banales de la época, cerró sus ojos y con todo su ser volvió a pedir su deseo más profundo. Igual, nada se perdía intentándolo una vez más; nada se perdía con otro enero en el que las lágrimas de rabia y desazón corrieran por sus mejillas.
La mayoría diría que era una mujer común y corriente; muchos, incluso, dirían que no le encontraban gracia alguna. Para él, sin embargo, constituía el ser más hermoso que existía sobre la tierra. Ella era las flores de colores que se sobreponían a sus grises pesadillas. Era la risa de sus tristes eneros. Era el nuevo comienzo a sus años perdidos. Era el sueño de sus noches en vela. Era la prueba irrefutable de que un deseo pedido a una estrella fugaz la madrugada del 25 de diciembre, se cumple. Pero era, sobre todo, el significado que le faltaba a su Navidad.
Foto: Alex Martin. Brasil eleva los límites de inversión de los fondos en el exterior
La Comisión de Valores brasileña (CVM) ha publicado nuevas regulaciones que harán mucho más accesible la inversión internacional por parte de los inversores locales. Las dos instrucciones publicadas – que amplían los límites de inversión internacional para fondos locales, restablecen los criterios para los inversores cualificados y también crean la figura del inversor profesional – son vistas por la comunidad global de gestión de activos como un cambio de juego importante en lo que respecta a su acercamiento a Brasil, ya que podrán dirigirse a una parte importante del mercado onshore, al menos a partir del 1 de julio de 2015, cuando las normas entren en vigor.
1.- A través de la instrucción 539/13, la CVM permite ahora a las personas físicas y jurídicas ser consideradas como “inversores profesionales” cuando cuenten con inversiones financieras superiores a los 10 millones de reales (3,75 millones de dólares), mientras que los inversores cualificados deben poseer inversiones financieras por encima del millón de reales (375.000 dólares). Es importante destacar que la instrucción también elimina unas normas rígidas que requerían a los inversores cualificados una inversión mínima – por ejemplo de un millón de reales en un solo fondo -.
2.- A través de la instrucción 555/14, que sustituye a la 409/04 como el marco normativo que regula la creación, administración, operación y revelación de información de los fondos de inversión, la CVM ha extendido los límites de inversión en el exterior:
– Para los inversores retail en fondos de renta variable y renta fija, el límite se ha duplicado al 20%
– Para los hedge funds: el límite sigue estando en el 20%
– Para los fondos destinados exclusivamente a inversores cualificados, el límite superior se fija en 40%, pero puede llegar al 100% si se respetan ciertas reglas.
La CVM explica que las inversiones realizadas en fondos en el marco anterior no necesitan ser rescatadas, pero los patrocinadores de los fondos sí deben tener en cuenta el nuevo marco a la hora de solicitar nuevas inversiones.
“Hay una gran necesidad de diversificación ahora que el mercado brasileño ha crecido y es más abierto”, dijo Ana Novaes, directora de la CVM la semana pasada al anunciar la norma. “Si el país quiere ser un actor importante en el escenario mundial, no solo tiene que recibir inversión extranjera, también tiene que dejar a sus ciudadanos que inviertan en el extranjero”.
Las administradoras latinoamericanas anticipan que la nueva norma provocará que muchos gestores de fondos globales se establezcan localmente en Brasil, y animará a muchos otros a establecer relaciones de distribución con jugadores locales. El vehículo de elección parece ser fondos de fondos, por lo que es probable que muchos gestores transfronterizos lancen productos asignando a fondos que invierten a nivel global, mientras que otros evitarán contar con un gestor local y simplemente buscarán asignar a fondos onshore de firmas brasileñas.
Photo: Richard Masoner. Oil: Boon or Slippery Slope?
El bajo precio del petróleo ¿es bueno o malo?, se plantean los expertos de MFS, Robert Spector, portfolio manager Institucional, Sanjay Natarajan, portfolio manager de Renta Variable, y Robert M. Hall, portfolio manager institucional de Renta Fija.
Y es que en un año lleno de sorpresas macro, la pronunciada caída en los precios del petróleo está dando titulares. Hace aproximadamente un año, la previsión de consenso para el final de 2014 era que el barril de West Texas Intermediate se situaría entorno a los 100 dólares mientras que el Brent estaría en los 110 dólares. Una previsión aproximadamente el 30% superior que los precios actuales. El barril se sitúa estos días alrededor de 60 dólares. “Como si fuera una señal, muchos han estado a punto de decir lo absolutamente maravilloso que puede ser el desplome del precio del petróleo para las perspectivas de crecimiento mundial”, dicen, pero en los mercados financieros todo tiene sus pros y sus contras.
Ganadores y perdedores
Está claro que algunas áreas de la economía mundial van a beneficiarse de unos precios de la energía más bajos. Cuando todos los aspectos positivos y negativos se compensen, probablemente veremos un impulso neto en el crecimiento global relacionado con lo que habríamos visto con un barril a 100 dólares. Pero es el débil crecimiento mundial -junto con un exceso en el lado de la oferta- uno de los factores claves en la caída de los precios del crudo, por lo que el argumento se convierte en una especie de círculo, explican desde la firma.
“Preferimos pensar en la caída del precio del petróleo como un estimulante general, similar a una rebaja de impuestos. Las caídas en el precio del petróleo o cualquier otro tipo de materia prima ayudan a distribuir el crecimiento desde las regiones que son productoras hacia aquellas que son consumidoras. A fin de cuentas, los beneficios netos para China, Europa, Japón y los Estados Unidos podrían ser mayores que los picos de actividad en Canadá, Noruega, Rusia y, sobre todo, la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP), donde la erosión en términos de comercio podría perjudicar los ingresos nacionales, las divisas, los ingresos gubernamentales y las previsiones de gasto de capital”, apuntan.
La caída en los precios del petróleo pondrá más presión a la baja sobre la ya reducida inflación mundial, obligando a algunos países como Estados Unidos o Reino Unido a alejarse de sus objetivos de inflación y situando a otros, entre los que se incluyen los miembros de la eurozona, más cerca de una moderada deflación.
El análisis de la firma recuerda que, de nuevo, esto actúa de la misma manera que una rebaja de impuestos para aumentar el poder adquisitivo de los consumidores. “Pero cuando el crecimiento es débil y los niveles de deuda son altos, cualquier perturbación negativa al crecimiento nominal, junto con unas expectativas de inflación persistentemente bajas, podrían ser malas para las tendencias fiscales y reavivar las preocupaciones sobre la sostenibilidad de la deuda, un posible riesgo para Europa”.
Implicaciones para los bancos centrales
El efecto de la caída de los precios del petróleo en la inflación proporciona a los banqueros centrales aún más justificaciones para mantener las líneas de liquidez ampliamente abiertas, cree MFS. En lo que se refiere a la Reserva Federal de Estados Unidos, que se espera que aumente los tipos de interés en algún momento del próximo año, las bajas presiones inflacionistas -vía menores precios del petróleo- tienden a compensar los efectos de la rigidez de los mercados laborales. En caso de que la Fed esté pensando en posponer el esperado aumento de tipos, ésta podría ser su excusa.
En su firme compromiso de luchar contra la deflación, es probable que el Banco Central Europeo inicie la compra de deuda soberana el próximo año, mientras que el Banco de Japón mantiene su relajación monetaria conforme la inflación se aleja de su objetivo. La combinación de baja inflación y la desaceleración del crecimiento ya ha provocado que el PBOC chino adopte medidas como su primer recorte de tipos desde 2012, que podría repetirse si el crecimiento y la inflación siguen siendo débiles.
“En resumen, evitamos ser excesivamente optimistas sobre el impacto de la caída de los precios del petróleo en el entorno macroeconómico global, ya que algunas economías productoras son propensas a verse afectadas duramente y la última decisión de la OPEP de no recortar las cuotas de producción podría inclinar a Europa hacia una leve deflación. Sin embargo, cuando las cosas positivas y negativas se compensen, y aparezcan otras fuentes de estímulo en su lugar, podría haber suficiente crecimiento global en 2015 como para respaldar las valoraciones de los activos de riesgo”, concluyen.
Ángel Olea, director de inversiones de Abante. “En 2014 el consenso apuntaba a la bolsa europea, y no funcionó, pero ahora sí es el momento”
A principios de este año, el consenso de mercado apuntaba a la bolsa europea como activo favorito en las carteras. “No ha funcionado del todo bien este año pero es el momento de que suceda”, comenta Ángel Olea, director de inversiones de Abante, en la presentación de perspectivas para el año próximo de la entidad.
En su opinión, la bolsa europea lo hará mejor que la estadounidense en 2015 porque los beneficios y márgenes de las empresas podrían ser mayores en Europa y además el mercado está más atractivo en términos de valoraciones, por lo que hay más posibilidades de que los beneficios recuperen terreno. “Los beneficios de las empresas en EE.UU. están en máximos históricos –con una previsión de crecimiento de entre el 8% y 9% para 2015, un poco altas- mientras en Europa vemos que a algunas les está costando más pero la capacidad de mejora y de aumento de beneficios es mayor en el Viejo Continente ”, corrobora Joaquín Casasús, director general de la gestora. Ésa es la razón por la que en Abante están más positivos con el mercado bursátil europeo que con el americano de cara al año próximo.
En su asignación de activos, sobreponderan tanto la bolsa europea como la de Japón, infraponderan ligeramente la de EE.UU. (teniendo en cuenta que el peso en el índice es fuerte) y son cautos en emergentes, con una clara preferencia por Asia, la zona que mejor puede capitalizar un petróleo barato. “El entorno es aún muy complicado y aunque estos mercados ofrecen mayores descuentos que los mercados desarrollados, creemos que todavía no es el momento”, explica Olea, que menciona los ajustes económicos que están acometiendo algunos países o las divisas que siguen cayendo como motivo de su cautela y baja exposición.
Atractivos relativos
Pero, en general, su preferencia es clara por activos de renta variable frente a los de renta fija, pues, en su opinión, “cada vez pesa más el atractivo relativo entre ambos”. Así, si hace años era posible estar tranquilo con posiciones conservadoras en renta fija, la caída de tipos hasta mínimos históricos ha dejado rentabilidades medias en el entorno del 2%, frente a un 6% en bolsa. “La prima de riesgo de la renta variable es buena, del 4% -considerando un PER de 16 veces en las bolsas mundiales-“, explica, algo a lo que hay que sumar el factor rentas. “Nunca ha sido más atractivo el dividendo por acción en Europa frente a los bonos europeos”, añade.
La foto de valoraciones también es más razonable en bolsa que en renta fija, explica, puesto que si en renta variable no ve ningún activo demasiado caro (aunque las valoraciones son más altas en mercados como EE.UU. o Alemania frente a emergentes o Europa, en su media histórica), en renta fija casi todo el espectro lo está. “En general la deuda está cara, con pequeños oasis en los bonos corporativos pero sin atractivos importantes”, dice Olea.
Así, las cosas, la renta fija no les convence como activo en 2015, a pesar de que en 2014 ha sorprendido positivamente. “Tras 30 años de mercado alcista hay poco que rascar. Aunque los tipos seguirán bajos en Europa durante mucho tiempo, el colchón de rentabilidad para los próximos años es escaso y el riesgo cada vez es más asimétrico ante un futuro escenario de subida de tipos”, insiste. Como ejemplo, la rentabilidad del bono español ha pasado del 11% al 2% en 20 años.
Por eso, en su exposicón apuestan por asumir poca duración y dar preferencia al riesgo de crédito, y apuestan por estrategias flexibles capaces de tomar apuestas relativas, y no solo direccionales; por ejemplo, con fondos de retorno absoluto.
Cautela con el dólar
En cuanto a las divisas, les gusta el dólar pero con cautela, pues les preocupan las posiciones tan agresivas que defienden su revalorización frente al euro; así, las posiciones del dólar frente a las otras divisas del G4 (yen, libra y euro) están en máximos históricos.
Según Casasús, la caída del euro no está descontada en Europa y eso dará impulso al crecimiento, junto a otro factor: un petróleo barato. Ambos factores mantendrán una inflación muy baja en el continente (en torno al 0%) y propiciarán el mantenimiento de políticas monetarias relajadas, con la posibilidad de un QE, un gran condicionante de inversión para los próximos años, en contraposición a las políticas monetarias de la Fed.
Según Casasús, el petróleo será un viendo de cola en 2015, conteniendo la inflación: seguirá bajo pero, a esos 60 dólares el barril, el incentivo para producir desaparecerá y el precio se estabilizará en torno a los 80 dólares. Esa situación beneficiará a sectores de consumo (tanto básico como cíclico) y a industrias que puedan sacar partido a un crudo barato, mientras perjudicará a sectores de energía y materias primas.
“En general, el PIB mundial crecerá por encima del 3%, en un contexto en el que EE.UU. irá bien, Europa mejorará –con España creciendo al 2% y Alemania frenando su ritmo- y los emergentes se desacelerarán ligeramente”, dice.
Diversificación contra populismos
En cuanto a los riesgos destacan el bajo crecimiento en Europa, el parón de China o los eventos geopolíticos, junto al del auge de los populismos en el Viejo Continente. “Las elecciones en España ofrecerán resultados distintos a las encuestas, que dan la victoria a Podemos, puesto que si España crece es difícil que nos peguemos un tiro en el zapato. Pero si eso ocurre, diversificaremos la inversión en otros mercados como EE.UU.”, dice Casasús.
Photo: Andrew Gillan, Head of Asia (ex Japan) Equities at Henderson. Henderson Points to Lower Commodity Prices as a Big Positive for Asian Corporate Earnings in 2015
El repaso de lo que ha sido el año 2014 en las bolsas de Asia deja buen sabor de boca para Andrew Gillan, responsable de renta variable asiática (excepto Japón). El experto de Henderson señala dos mercados emergentes como las principales opciones de cara al próximo año: China y la India seguirán siendo los mercados favoritos del portfolio. “Los datos demográficos, una relativa fortaleza presupuestaria y una mayor tasa de crecimiento hacen que Asia goce de unas perspectivas positivas en comparación con otras regiones”, explica el gestor.
El año que dejamos atrás ha estado marcado por las divergencias entre los diferentes mercados en Asia. ¿A qué se ha debido este factor?
En parte, al contexto político: los cambios de gobierno en la India e Indonesia han supuesto un impulso para ambos. No obstante, también hemos observado un buen comportamiento en otras economías pertenecientes a la ASEAN (Asociación de Naciones del Asia Sudoriental) como Filipinas y Tailandia. A pesar de la fortaleza del dólar, las economías tradicionalmente exportadoras del norte de Asia no se han beneficiado demasiado en términos de progresión en los mercados bursátiles, pese a unas valoraciones relativamente baratas, en concreto en China y Corea.
¿Qué otros factores señalaría?
La volatilidad ha aumentado durante el año, pero los mercados asiáticos han resistido relativamente bien tras la retirada del programa de relajación cuantitativa, y la caída del precio de las materias primas y el petróleo debería beneficiar considerablemente a la región de cara al próximo año.
¿Dónde cree que estarán las oportunidades más interesantes en 2015 en estos mercados?
La India sigue siendo uno de los mercados más positivos, pero esto también se refleja en las valoraciones. Seguimos sobreponderando la región, ya que aún consideramos que nuestras inversiones en los sectores financiero, farmacéutico, de servicios tecnológicos y de consumo pueden seguir generando un crecimiento considerable de los beneficios y una rentabilidad superior durante los próximos años.
¿Cuáles son los principales riesgos en ese país?
El riesgo más evidente es que las reformas económicas se paralicen, pero los tipos de empresa a los que estamos expuestos han obtenido una rentabilidad brillante incluso en contextos políticos más débiles. Los valores que priorizamos son, entre otros, HDFC y su filial HDFC Bank, Tata Motors, el grupo de higiene personal, salud y productos alimenticios Dabur, el grupo de servicios tecnológicos y de externalización Tech Mahindra, y el grupo farmacéutico Lupin.
¿Cuál es la mayor posición de la estrategia?
En términos absolutos, China sigue siendo nuestra mayor posición por país con una ponderación de más del 20% en la cartera, donde contamos con empresas tanto de la nueva como de la vieja economía y una buena exposición a empresas de consumo. A pesar de los titulares negativos y de las consecuencias del ajuste a unas tasas de crecimiento general más bajas —aunque, lo que es más importante, de mayor calidad—, las valoraciones parecen interesantes y los fundamentales de las empresas son positivos. El crecimiento excesivo del crédito registrado en la última década tendrá consecuencias, pero también considero que las políticas monetarias ayudarán a que la economía siga por buen camino. Una de las posiciones que priorizamos en este país es Baidu, líder del mercado de motores de búsqueda en Internet. Este mercado sigue expandiéndose a un ritmo impresionante, especialmente el segmento de las comunicaciones móviles, y la empresa está logrando encontrar un buen equilibrio entre inversión para el futuro y rentabilidad, a medida que monetiza su posición de liderazgo en el mercado. En el sector del consumo contamos con exposición a los fabricantes de automóviles Brilliance (socio de joint venture de BMW) y Dongfeng Motor (que colabora con Nissan y Honda, entre otros), que siguen ofreciendo perspectivas de crecimiento positivas y sus valoraciones parecen interesantes.
Si compara con diciembre de 2013, ¿tiene una visión más positiva o negativa sobre las perspectivas económicas y de inversión? ¿Por qué?
El índice regional está, en general, en línea con el aumento de los beneficios anuales, lo que supone un cierto alivio ya que hemos observado fluctuaciones considerables y, en consecuencia, un incremento de las valoraciones en algunos mercados. A corto plazo, el descenso del precio de las materias primas debería ser favorable para los beneficios de las empresas asiáticas. Más a largo plazo, el progreso en materia de reformas logrado en los mercados más importantes podría impulsar a los mercados de renta variable y favorecer a las ya positivas hipótesis de inversión macroeconómicas para el continente asiático. Los datos demográficos, una relativa fortaleza presupuestaria y una mayor tasa de crecimiento hacen que Asia goce de unas perspectivas positivas en comparación con otras regiones.
En muchas partes del mundo pensaron que el miércoles, el día en que Obama y Castro anunciaron que retoman las relaciones diplomáticas entre los dos países, Miami se había convertido en un campo de guerra. Pero no fue así.
Como cada mañana, dejé a mis hijos en la escuela y me encaminé a la redacción en medio de un monumental atasco provocado por un accidente que nada tuvo que ver con la nueva política hacia la isla de los hermanos Castro, que ya empieza a sonar a título de película de ficción de los sesenta.
Después, la reunión donde repartimos el trabajo de los reporteros: “Llama a Iván y que nos envíe cómo se vive desde La Habana”, “Sergio está en el Versailles, los viejos anticastristas ya empiezan a llegar con sus banderas”, “yo acabo de hablar con Ileana Ros y Diaz Balart y están que trinan con Obama”…
La edición ya estaba encarrilada cuando comenzó la doble sesión de cine desde Washington y La Habana. Un presidente guapo, vestido, iluminado, y con aire a Sidney Poitier, nos hablaba de un futuro esplendoroso de amor y cordialidad desde el plasma del fondo. En la otra punta del bullicio periodístico de Diario Las Américas (el periódico en español más antiguo de Miami), otro grupo viajaba en el tiempo, quién sabe si a los setenta, sesenta o cincuenta. Esa otra película tenía como protagonista a un señor mayor, vestido con un añejo uniforme militar, leyendo unos papeles amarillentos en un despacho al que todavía no han llegado las computadoras y en el que la caoba, el cuero falso y la foto enmarcada en blanco y negro invitan a salir corriendo. Podría ser un malo de película en una película de James Bond, pero de las antiguas, las de Sean Connery o Roger Moore. En este caso, las palabras en positivo sabían a derrota, entre otras cosas porque el malo sigue en la película.
Después de 56 años podría haber sido derrotado pero parece que no hay forma. En el Versailles, el cuartel general del anticastrismo recalcitrante, no sucedió nada especial. Los mismos que pisotearon discos de Juanes con una apisonadora gritaban contra Obama mientras cadenas internacionales como CNN engañaban al mundo asegurando que eso representa a Miami o la colonia cubana que reside en el sur de la Florida.
Señores, siento decepcionarles, pero en Miami no hubo guerra. Ni se quemaron muñecos con las caras de Obama y Fidel, ni se invitó a invadir la isla de los hermanos Castro. Lo único que se sentía, a la espera de saber si intercambian presos, abren las embajadas, permiten los viajes y dan una oportunidad a la tarjeta Visa en la isla, es un dolor ambiental. El dolor de saber que, pase lo que pase, los malos han ganado y siguen en la película, mientras víctimas de tres generaciones de cubanos exiliados han perdido su historia, su pasado y el sueño de recuperar su tierra, la que hace 56 años pasó de ser la hermosa Cuba a la isla de los hermanos Castro.
Foto: Steven Straiton. Tres implicaciones de los bajos precios del petróleo
“El precio del petróleo ha alcanzado el nivel más bajo en cinco años la última semana y el crudo Brent cayó hasta los 65 dólares. El menor precio del petróleo ha sido bien acogido en Occidente, pero está teniendo un efecto importante en algunos países de la OPEP. El daño dentro de la OPEP – que incluye a los Emiratos Árabes Unidos – no está uniformemente dividido, ya que algunos países pueden hacer frente a los bajos precios mejores que otros. Sin embargo, los efectos de un menor precio del petróleo sobre los bonos y acciones son en su mayoría positivos”, explica el estratega de Robeco Peter van der Welle.
El crudo alcanzó nuevos mínimos después de que la OPEP no lograra llegar a una decisión de recortar la producción en noviembre. Arabia Saudita y otros productores del Golfo querían mantenerse sin cambios, mientras que otros países como Venezuela preferían un recorte en la cuota de producción de la OPEP. La combinación de una débil demanda y el aumento de la oferta de Estados Unidos procedente del petróleo de esquisto ha reducido de manera constante el precio desde el verano. La decisión de la OPEP de mantener sin cambios la producción marca el final de un período de precios del petróleo relativamente estables desde 2010. ¿Cuáles son las implicaciones de esta nueva era de bajos precios del petróleo?
Van der Welle cree que habrá tres grandes implicaciones para los mercados financieros en general, y los Estados del Golfo, en particular.
1. No todos los países de la OPEP sufrirán lo mismo.
Algunos países de la OPEP son capaces de gestionar un período prolongado de bajos precios del petróleo. «Un indicador clave son las reservas de divisas extranjeras. Tomemos, por ejemplo, Arabia Saudita. El país ha amasado amplias reservas de divisas, alrededor de 750.000 millones de dólares en los últimos 10 años. Estas reservas proporcionarán un colchón contra la reciente caída por debajo del nivel de equilibrio fiscal y permiten que el país pueda financiar el presupuesto en los próximos años. Estas grandes reservas facilitan a los saudíes exprimir a algunos productores americanos de petróleo de esquisto sin poner en peligro el bienestar social». «Hay otros países del Golfo con grandes reservas de divisas como Kuwait, Qatar y los Emiratos Árabes Unidos. Seguirán siendo resistentes en este entorno», añade.
Los países con altos precios de equilibrio, como Nigeria, Irán y Venezuela, se enfrentarán a dificultades económicas porque también tienen reservas de divisas más bajas. «Éste es el precio del petróleo que requiere de los países productores tener un presupuesto fiscal equilibrado. Los precios de equilibrio se han disparado en la última década en muchos países debido a la política de incremento del gasto público de sus gobiernos».
2. Bueno para los activos cíclicos, malo para Rusia y las reservas de energía.
En general, un bajo precio del petróleo es positivo para los activos cíclicos, analiza Van der Welle. «Estos activos se benefician de un aumento del crecimiento económico mundial debido a los bajos precios del petróleo, que de alguna manera actúan como un recorte de impuestos para los consumidores, elevando su poder adquisitivo. «Otros claros ganadores son los activos en Turquía y la India, predice. «Son grandes importadores netos de petróleo y tienen déficit por cuenta corriente. Un precio bajo del petróleo les da más flexibilidad monetaria para estimular la economía, ya que hay menos riesgo de inflación». Pero advierte de que no todos los activos del mercado van a beneficiarse. «Obviamente para muchos activos energéticos, especialmente las empresas de servicios petroleros, los efectos son negativos. Y un bajo precio del petróleo es un claro símbolo de alerta roja para los activos rusos, dice. «El país es muy dependiente de las exportaciones de petróleo y gas y bien podría entrar en recesión el próximo año. Su moneda ya está bajo una fuerte presión debido a las sanciones económicas».
3. Positivo para los bonos, a excepción de los bonos high yield de Estados Unidos.
Para los bonos, un menor precio del petróleo es ligeramente positivo, porque ayuda a mantener baja la inflación, dice Van der Welle. «Puede tener implicaciones especialmente para la zona euro como importador neto de energía. Esta región tiene un riesgo de deflación, y un bajo precio del petróleo aumenta la posibilidad de que el BCE recurrirá a medidas de flexibilización adicionales. Los efectos directos de los bonos del gobierno en esta región son ligeramente positivos. Pero mucho se ha descontado ya y las tasas reales hacen frente a una presión al alza».
Sin embargo, el mercado de bonos high yield de Estados Unidos podría sufrir, añade. «Parte del auge del petróleo de esquisto de EE.UU. y el gas ha sido financiado por la emisión de deuda de alto rendimiento, que ha experimentado un incremento de cuota sobre el total del mercado de Estados Unidos. El bajo precio actual del petróleo hace que sea más difícil para refinanciar. Los “defaults” o incumplimientos por parte de empresas energéticas de los Estados Unidos podrían aumentar la percepción de riesgo de los inversores y acarrear consecuencias en el mercado high yield».