Parece que 2015 haya sido ya un año muy largo. Claramente los mercados han tenido mucho con lo que lidiar, pero el tema dominante ha sido el colapso sostenido de la rentabilidad de la deuda core. La actividad económica mundial sigue estando adormilada mientras las fuerzas deflacionistas continúan haciendo caer la inflación y el impacto en el crecimiento nominal es mucho y variado. Los políticos y la geopolítica continúan acaparando titulares. El caso de las elecciones de Grecia tiene potencial para afectar significativamente a los mercados dado que el país mantiene las ambiciones contradictorias de permanecer en el euro al mismo tiempo que busca el perdón de su deuda.
El precio del petróleo sigue siendo débil, y mientras su efecto en la inflación es claro, el seguimiento y consolidación en términos de gasto de los consumidores es más difuso. En el frente político, el BCE anunció recientemente un programa de expansión cuantitativa, con la intención de comprar 60.000 millones de euros al mes en bonos hasta que alcance su nivel objetivo de inflación del 2%.
En este contexto, la rentabilidad de los activos ha tenido un buen comienzo de año. El segmento de crédito, especialmente investment-grade, ha evolucionado bien, e igualmente la renta variable ha disfrutado de rentabilidades positivas en una serie de mercados. Nuestra estrategia de renta variable ha favorecido a Estados Unidos, que en este tiempo ha disfrutado de una economía relativamente fuerte, Reino Unido, que cuenta con el apoyo de las valoraciones, y Japón, donde los beneficios empresariales están viendo un impulso gracias a ‘Abenomics’. Aunque el mercado de renta variable del Reino Unido se ha visto frenado por su exposición a los valores energéticos y de materias primas, tanto en las acciones japonesas como las estadounidenses han evolucionado bien desde que cambiamos nuestro enfoque y pasamos a recomendarlas en nuestro modelo de asignación de activos.
Sin embargo, las valoraciones del mercado de renta variable estadounidense parecen ahora relativamente bajo presión tanto por su rendimiento superior como por algo más preocupante: el impacto de un dólar más fuerte en los beneficios empresariales de Estados Unidos. Europa, por su parte, se está beneficiando de una serie de factores como son la debilidad del euro, los precios del petróleo más bajos, y un impulso del programa de QE del BCE. Como consecuencia de todo esto, es muy posible que veamos revisiones al alza en el PIB europeo este año, por primera vez en muchos. Los beneficios de las empresas europeas encontrarán respaldo en la mejora de la competitividad como consecuencia de la debilidad del euro, y las valoraciones se encuentran en niveles relativamente atractivas. Curiosamente, las revisiones de beneficios de las compañías europeas acaban de ser positivas, aunque de una manera muy pequeña.
Por otra parte, en la región de Asia Pacífico, excluido Japón, y también después de un largo periodo de bajas rentabilidades, las valoraciones se están volviendo cada vez más atractivas. Si bien hay una serie de perdedores evidentes en la región como consecuencia de la caída del precio del petróleo, hay muchos otros ganadores, y estamos encontrando una amplia gama de oportunidades de inversión que consideramos interesantes. En consecuencia, hemos empezado a sobreponderar la región por primera vez en mucho tiempo. Del mismo modo, hemos pasado a sobreponderar renta variable europea; esos dos movimientos rebajando la renta variable estadounidense a neutral desde sobreponderar. También hemos utilizado estos recientes cambios de asignación de activos como una oportunidad para reducir la magnitud de nuestra sobreponderación en renta variable, aunque seguimos prefiriendo la renta variable frente a los bonos.
Columna de Mark Burgess, director de inversiones de Threadneedle
CC-BY-SA-2.0, FlickrFoto: Andreas Øverland. ¿Qué segmentos de la renta fija se beneficiarán más del QE del BCE?
El BCE por fin cruzó la línea y se aventuró en terreno inexplorado lanzando un programa de relajación cuantitativa en el que también entra la deuda pública. El tamaño, la duración y el carácter potencialmente abierto de esta relajación cuantitativa sorprendieron al mercado, provocaron una fuerte subida de los activos de riesgo en todo el mundo y tiraron a la baja del euro frente al resto de grandes monedas. Es el resumen de los expertos de Fidelity WI que aventuran para un futuro más inmediato que aunqur primero tiene que disiparse la polvareda levantada por el BCE, el efecto del anuncio tardará algún tiempo en dejarse sentir. Para la firma, la decisión del BCE es, en general, tremendamente positiva para el conjunto del mercado de renta fija.
Sin embargo, está por ver si el BCE tendrá éxito a la hora de estimular la inflación en la zona euro, estima Fidelity en un informe semanal, pero cree que la reacción inicial del mercado ha sido positiva hasta ahora. El documento destaca que la inclusión de los bonos indexados a la inflación entre los títulos que se comprarán en el marco del programa de relajación cuantitativa ha dado impulso a los indicadores de inflación y seguirá apoyando a esta clase de activo tras unos meses difíciles.
“A medida que los tipos de interés de la deuda pública van poniendo rumbo al cero, la búsqueda de rendimientos va a llevar a los inversores en euros a bucear en otros segmentos de la curva de riesgos y a buscar oportunidades en el mercado de deuda corporativa. Esto debería dar un fuerte impulso a la deuda corporativa en euros en 2015”, explican desde la gestora estadounidense. “El ciclo de la deuda corporativa europea está evolucionando y, aunque estamos empezando a observar un aumento del apalancamiento frente a los beneficios, los niveles de cobertura de intereses siguen en niveles históricamente altos, lo que hace que la carga de la deuda sea llevadera. La dinámica de tipos bajos refuerza esta situación”, apuntan.
Por su parte, los diferenciales en euros se han desconectado de los diferenciales en dólares desde mediados de 2014 en respuesta a la política del BCE, pero también al deterioro de los fundamentales de la deuda corporativa estadounidense. Aunque los diferenciales en euros parecen estar ajustados en términos absolutos, son amplios expresados como porcentaje de los rendimientos totales de los bonos corporativos. Esto acrecienta el atractivo del mercado para los inversores en euros, creen los analistas de Fidelity.
“Si nos alejamos en el espectro de riesgos, los bonos de alto rendimiento europeos no serán inmunes a la demanda inducida por el BCE. Las valoraciones están en niveles atractivos tras la fase de debilidad que vivió el mercado durante el segundo semestre de 2014. De hecho, los diferenciales se sitúan ligeramente por debajo de 400 pb y deben abordarse en el contexto de los 1,2 billones de títulos con rendimientos negativos que hay en circulación”, recuerdan.
Segmento BBB del mercado
“Dado que es improbable que los impagos aumenten de forma considerable desde los niveles actuales, gracias a la política monetaria extremadamente expansiva creemos que esta clase de activo ofrece una buena recompensa por el riesgo que conlleva. Lo anterior se hace especialmente evidente cuando se establece una comparación con el segmento BBB del mercado”, afirman.
Aparte del atractivo del papel denominado en euros dentro de la nueva era de relajación cuantitativa del BCE, la gran tendencia para los inversores en 2015 será invertir internacionalmente.
Los bonos del Tesoro y la deuda corporativa de EE.UU. probablemente se vean beneficiados, gracias a una combinación óptima de primas elevadas en vencimientos más largos y diferenciales más altos de lo que podría justificarse con los riesgos fundamentales, dicen desde Fidelity. Al mismo tiempo, el papel estadounidense ofrece a los inversores internacionales un flujo de rentas defensivo, atractivos rasgos de diversificación dentro de una cartera internacional y exposición al dólar en un entorno en el que el resto de grandes bancos centrales está luchando contra las fuerzas deflacionistas a través de depreciaciones cambiarias. «En nuestra opinión, la deuda emergente en divisa fuerte está en un momento óptimo en este contexto. El hundimiento de los precios del petróleo dará un impulso muy bienvenido a la demanda mundial y mejorará las balanzas por cuenta corriente de los países emergentes». Fidelity cree que a medida que se vayan fortaleciendo los fundamentales, los inversores europeos en busca de rendimientos se sentirán atraídos por los favorables diferenciales y las ventajas de diversificación que puede ofrecer esta clase de activo.
“Dado que las condiciones financieras serán aún más expansivas y los bancos centrales están luchando contra la tendencia deflacionista, las perspectivas a medio plazo para la renta fija siguen siendo positivas. Los riesgos específicos y geopolíticos persisten, pero las bajas presiones inflacionistas y el favorable panorama técnico deberían seguir dando apoyo a este mercado de cara al futuro”, concluyen.
El evento consistió en un coctel y una cena típica escocesa en la que no faltaron ni el whisky, catado por el experto Nick Pollachi, Whisky Master y propietario de The Whisky Dig. La velada estuvo amenizada por el gaitero canadiense Robert Ritchie y el trio musical Avalon.
“Nuestra sede sigue estando en la ciudad de Aberdeen, en el Noreste de Escocia, y nuestras raíces datan de 1875”, explicaba Hendry. “Nuestra herencia escocesa es una parte fundamental de la identidad de Aberdeen AM, y esperamos que nuestros clientes disfruten de aspectos de nuestra tradición, como los que celebramos esta noche”, agregaba Hendry.
Aberdeen AM celebra su tradicional Burns Supper en varias ciudades del mundo coincidiendo con la fecha del nacimiento de Robert Burns –el 25 de enero de 1759-, poeta autor de más de 600 poemas entre los que destacan algunos tan famosos como “Auld Lang Syne”, que se utiliza cada año en todo el mundo anglosajón para despedir al año viejo y dar la bienvenida al nuevo. Este año, Aberdeen ha celebrado su Burns Supper en 4 ciudades de Norteamérica: Toronto, Los Ángeles, Dallas y Miami. En Miami es el cuarto año consecutivo en el que Aberdeen AM celebra este evento.
Aberdeen Asset Management cuenta con presencia local en más de 25 países en Europa, Asia y América. A 30 de septiembre de 2014 contaba con 525.900 millones de dólares bajo gestión. En Miami se encuentra Maria Eugenia Cordova, que se ocupa del negocio puramente offshore que tiene su epicentro en esta ciudad. Maria Eugenia reporta a Menno de Vreeze, director del negocio offshore de Estados Unidos, cuyo equipo se completa con Damian Zamudio y Andrea Ajila, los tres con sede en Nueva York. En Miami también tiene su sede Linda Cartusciello que está al frente de todo el negocio institucional en América Latina.
Photo: robinhood.org. BlackRock Appoints Deborah Winshel to Lead Impact Investing Platform
BlackRock anunció esta semana el nombramiento de Deborah Winshel como managing director y directora mundial de Inversiones de Impacto. En su puesto, Winshel ayudará a la firma a unificar su enfoque de inversiones de impacto a través de la puesta en marcha de BlackRock Impact, una plataforma dedicada a los inversores preocupados por conseguir objetivos sociales o ambientales en todo el mundo. Winshel también será responsable de supervisar el programa Global de Filantropía Corporativa de BlackRock.
BlackRock Impact trabajará estrechamente con los equipos de inversión global de la gestora para aprovechar sus datos y capacidades analíticas y desarrollar soluciones de inversión escalables que también respondan a objetivos sociales deseados por los clientes. BlackRock gestiona en la actualidad más de 225.000 millones de dólares en estrategias diseñadas para alinear los portfolios de los clientes con sus objetivos y valores, que ahora pasarán a integrarse bajo BlackRock Impact. Winshel se une a la empresa tras una distinguida carrera en la gestión de activos sin ánimo de lucro y la filantropía.
«Hoy en día, muchos clientes buscan oportunidades de inversión que promuevan los objetivos sociales y financieros al mismo tiempo. Aunque las raíces de este movimiento se remontan muchos años, la frecuencia y la complejidad de estos mandatos están aumentando. Cada vez más, los clientes miden la rentabilidad de sus inversiones tanto por los resultados sociales como por los financieros. Con su experiencia en Robin Hood Foundation,y su enfoque en programas con impactos medibles, Deborah es la elección ideal para ayudar a desarrollar BlackRock Impact», explicó Laurence D. Fink, presidente y CEO de BlackRock.
Fabrizio Quirighetti, economista jefe de SYZ AM y gestor del Oyster Absolute Return, estuvo recientemente en Madrid . “La Reserva Federal va a tener complicado comenzar a subir los tipos; tiene que encontrar una buena razón”
La inflación se mantiene en niveles históricamente bajos, por debajo de los objetivos de los bancos centrales y en una tendencia a la baja en la mayoría de las economías desarrolladas. Una tendencia incluso reforzada por la caída de los precios del petróleo, al menos en el corto plazo. Pero los precios del crudo no se van a mantener eternamente a la baja: en algún momento cambiará la tendencia y también la de la inflación, defiende Fabrizio Quirighetti, economista jefe de SYZ AM y gestor del Oyster Absolute Return, que estuvo recientemente en Madrid. En este sentido, los US Treasury protegen contra el alza de los precios y también de los tipos de interés.
Sin embargo, pese a que la baja inflación es una constante en la mayoría de las economías desarrolladas, la situación económica y las políticas de los bancos centrales son muy divergentes entre sí. Por un lado, la Reserva Federal ha anunciado el fin de su política monetaria y por el otro, el BCE acaba de implementar un QE, mientras que el Banco de Suiza ha eliminado el techo de cambio del franco suizo, Japón continúa con sus medidas e incluso el Banco Central de Canadá ha recortado sus tipos de interés. “Con esta tendencia hacia una política monetaria más acomodaticia del resto de economías, la Reserva Federal va a tener complicado comenzar a subir los tipos de interés. Tiene que encontrar una buena razón, como que comience a aumentar la inflación”, defiende el experto.
No obstante, el verdadero problema para los inversores son las bajas rentabilidades que se encuentran, mientras que la inflación aún es positiva en Estados Unidos, explica. Por tanto, deben buscar activos que ofrezcan retornos superiores a la inflación.
En cualquier caso, a nivel mundial, espera que los tipos se mantengan bajos o no suban demasiado; que el crecimiento se mantenga débil y la inflación baja, por lo que los bancos centrales mantendrán sus políticas acomodaticias.
¿Cómo se traduce esto en la asignación de activos? Lo principal es ser activos en la gestión, explica el experto. Y además ofrece una serie de consejos: en primer lugar, evitar el efectivo, pero solo si no ofrece rendimientos reales, es decir, si no supera a la inflación.
En cuanto a bonos, los considera un recurso limitado y solo aconseja invertir si ofrecen una rentabilidad positiva a través de la duración o el riesgo de crédito y una gestión activa. “Actualmente hay que olvidarse de comprar y mantener”, defiende.
En cambio, sí opta por la renta variable, pero manteniendo la volatilidad bajo control. “Nosotros apostamos por las grandes compañías con dividendos altos y crecimiento de calidad”. En materias primas, considera que el oro sigue siendo una buena opción como cobertura para las carteras.
En Europa…
En concreto, en lo que respecta a la zona euro, “esperamos que los tipos de interés se mantengan bajos. Los inversores deberían aprender los japoneses y centrarse en la búsqueda de retornos reales. Y deberían beneficiarse del «roll-down» en la parte larga de la curva, buscar el carry en la parte media y estar infraponderados en la parte corta”.
En Estados Unidos y Reino Unido, están entrando en la normalización del ciclo. “Hay que reducir el riesgo de crédito y duración paralelamente a la normalización de los tipos y estar preparados para un aplanamiento de la curva y estar infrapoderados en la parte corta y media en favor del efectivo o los bonos de interés flotante”, asegura.
Brasil ha presentado nuevos planes para restaurar la confianza de los inversores y reforzar el crecimiento. En este sentido, María-Thérèse Barton, gestora senior de deuda de mercados emergentes de Pictet, que ha estado visitando el país, considera que, a pesar del pesimismo de muchos gestores con respecto al país, el cambio está en el aire y las autoridades se esfuerzan por abrirse a los negocios. Por eso, podría sorprender positivamente.
“Aterricé en Río de Janeiro con el creciente pesimismo de los inversores extranjeros, para un día lleno de reuniones y enseguida me alcanzó el optimismo local respecto a que Rousseff y su equipo pueden apoyar esta economía, la más grande de América Latina. Además las élites económicas y políticas tratan de ser amigables con los empresarios. De hecho, fuimos recibidos calurosamente en el Congreso por un funcionario senior del partido de coalición, a pesar de que era uno de sus días más ajetreados. Todos están interesados en resaltar que Brasil está abierto a los negocios y no puedo recordar cuántas veces he oído las palabras «ajuste fiscal». El mensaje es claro: el cambio está en el aire. Los inversores extranjeros están casi universalmente pesimistas y puede darse una grata sorpresa”, indica.
Con todo, hay peros y la experta no niega que la situación sea grave. “Esta economía coquetea con la recesión y la inflación está en el extremo de sus niveles de tolerancia, pero caen los precios de materias primas como el hierro, la soja y otras exportaciones clave”. Además, al menos una agencia de calificación crediticia ha insinuado una rebaja, mientras que un escándalo multimillonario afecta al gigante estatal petrolero Petrobras, que amenaza con socavar aún más la confianza.
Sin embargo la administración busca recuperar la confianza de los inversores, dice la experta. “Para apuntalar las finanzas estatales ya ha anunciado recortes a los subsidios a los bancos estatales, mayores tipos de interés en el banco de desarrollo BNDES y límites a pensiones y prestaciones por desempleo. Pero, aún más importante, el Gobierno ha dado un gran paso en la dirección correcta con el nombramiento de Joaquim Levy como ministro de Hacienda. Se trata de un banquero educado en Chicago, economista ortodoxo, que ha trabajado en el FMI y BCE y es conocido por haber recortado gastos de 2003-2006. De hecho los funcionarios y banqueros que he conocido son casi unánimes respecto a que frenar el gasto público es la tarea más importante los próximos cuatro años y Levy es apropiado para el trabajo”.
Según un funcionario, dice Barton, “promete poco y obtiene mucho”, lo que se necesita para hacer recortes difíciles y aumentar impuestos. “Muchos inversores dudan que vaya a poder disponer de autonomía, porque Rousseff es intervencionista (al parecer, dadas sus promesas a dirigentes sindicales, ha indicado al nuevo ministro de planificación Nelson Barbosa que cambie su posición respecto a ajustar el salario mínimo). Sin embargo muchas personas consideran que Rousseff no tiene opción. La promesa de Levy es mejorar el equilibrio fiscal en 1,5% y parece ambiciosa, pero el banco central de Brasil ha reafirmado su compromiso con una inflación dentro de su objetivo los próximos dos o tres años y parece que los inversores están dispuestos a dar a Levy el beneficio de la duda, al menos para los próximos meses”.
Desaceleración: el riesgo
El daño colateral inevitable de estas medidas es la desaceleración económica –el equipo de deuda emergente de Pictet AM piensa que Brasil, tras crecer aproximadamente el 0,1% en 2014, apenas tendrá crecimiento este año- y es probable que el desempleo aumente. Por otra parte el mercado cotiza una expectativas de subidas de tipos de interés de por lo menos 75 puntos básicos. Para mantener la inflación por debajo del 6,5% ya ha subido los tipos de referencia hasta máximos de cuatro años en el 12,25% y, dado el adverso impacto en la economía, es posible que el banco central no apriete tanto. En cualquier caso funcionarios y ejecutivos consideran que los tipos de interés van a subir este año, si bien difieren en la escala y algunos esperan que lleguen al 13%.
“De todas formas el banco central puede querer concentrarse hacia fin de año en apoyar el crecimiento, recortando tipos de interés, lo que puede generar una interesante oportunidad de inversión en bonos brasileños”, asegura. Este escenario puede estar en parte descontado, dado que la curva de rentabilidades a vencimientos de dos a seis años de la deuda del estado está invertida, pero hay espacio para que la brecha se amplíe si Levy y su equipo sorprenden de manera positiva.
“Sin embargo el real puede caer más respecto al dólar este año, en consonancia con lo que indican los diferenciales de tipos de interés de contratos a forward del mercado de divisas. Hay que tener en cuenta que en 2014 el real fue de las monedas de mercados emergentes con mayores caídas respecto al dólar, más de un 11%, tras el rublo ruso. Sin embargo, en nuestros modelos de valor razonable todavía está sobrevalorado 10,5% en términos nominales”.
Personalidades con cuentas opacas en HSBC Ginebra, según Swiss Leaks. La lista Falciani se hace pública: los Wikileaks de las finanzas ponen fin al secreto bancario suizo
El Consorcio Internacional de Periodistas de Investigación (ICIJ) hacía pública durante este pasado fin de semana la lista de 106.000 clientes que, acogiéndose al secreto bancario, llegaron a ocultar hasta 100.000 millones de dólares en las cuentas suizas de HSBC.
Las conclusiones de ICIJ están basadas en los datos que Hervé Falciani, informático empleado en HSBC, filtró a las autoridades francesas en 2008. Posteriormente, estos archivos llegaron a manos del diario francés Le Monde que los compartió con otros diarios resultando en la publicación de la lista. En total, 106.000 nombres de clientes de HSBC Ginebra que a los que el banco aseguró de “forma continuada”, que nunca desvelaría su detalles a las autoridades nacionales de sus países de origen, amparándose en el secreto bancario suizo, e incluso llegó a “discutir con sus clientes una serie de medidas cuyo objetivo final era que los clientes no pagaran impuestos en sus países de origen”, según detalla la documentación analizada por ICIJ.
Ahora todos conocemos la lista de implicados, pero los gobiernos de múltiples países la tienen desde hace años, dado que Francia la compartió con países como Reino Unido, Grecia o España, provocando en este último caso una regularización fiscal por la que España logró recuperar 260 millones de euros de liquidaciones de euros no declaradas. A su vez, HSBC ya no es el banco que era entonces. En un comunicado enviado por HSBC a ICIJ aseguran que el banco “ha sufrido una transformación radical durante los últimos años”, mediante reformas que dificultan la evasión fiscal y el lavado de dinero. El comunicado reconoce que “la cultura y los estándares de compliance y due dilligence de la división de banca privada de HSBC en Suiza, así como los de la industria en general, eran significativamente menores que los que hay hoy”. En el mismo comunicado HSBC explicaba como el número de clientes de su banca privada ha caído hasta unos 10.000, desde los 30.000 que tenía en el año 2007.
La publicación de la lista está haciendo correr ríos de tinta en la prensa local de los países implicados. Son muchos los evasores de impuestos entre las filas de los políticos y los gobiernos de numerosos países –el ex presidente egipcio Hosni Mubarak por ejemplo, el el ex presidente tunecino Ben Ali, o al actual dirigente de Siria, Bashad al-Assad-. En la lista también hay políticos (actuales o pasados) de Reino Unido, Rusia, Ucrania, Ruanda, Senegal, República del Congo, y un largo etcétera.
Dos países latinoamericanos destacan en la lista. En primer lugar Venezuela, que por monto total de dinero oculto se sitúa en tercer lugar, por delante incluso de EE.UU. o Francia, con 14.800 millones de dólares ocultos en Suiza según el análisis de ICIJ. Brasil es el otro, que por número de individuos con cuentas opacas ocupa el cuarto lugar, con 8.667 individuos (explore la lista a través de este link).
Foto: Doug88888, Flickr, Creative Commons. Las aseguradoras globales se centran en Asia y LatAm para crecer pero prevén tres años difíciles para el negocio
Los cambios normativos y el mantenimiento de los bajos tipos de interés continuarán siendo los principales retos para las aseguradoras durante los próximos tres años, según arrojan las conclusiones de una encuesta entre directivos de aseguradoras de todo el mundo (Global Insurer Survey) realizada por Towers Watson, empresa global de servicios profesionales. Estos retos a corto plazo destacan como principal preocupación entre casi las tres cuartas partes de los encuestados (62%), que también expresan su inquietud acerca de otras cuestiones fundamentales como, por ejemplo, si su modelo de negocio podrá hacer frente a riesgos nuevos y emergentes (27%).
Las aseguradoras norteamericanas muestran mayor preocupación por los riesgos de tipos de interés (85%) que las europeas (68%) y las de Asia-Pacífico (61%); mientras que la inquietud por los cambios regulatorios es mayor entre las compañías de seguros de Europa (82%) y Asia-Pacífico (80%), en comparación con las de América del Norte (65%). Las aseguradoras de vida y las generales tienen una visión similar sobre los principales desafíos ambientales, a excepción del cambio climático, que no ha sido clasificado como riesgo por parte de las compañías de seguros de vida.
«Con la implementación de Solvencia II a un año vista no sorprende que la regulación sea lo que más preocupe a las aseguradoras globales, particularmente a las europeas», señala Graham Fulcher, director de Seguros Generales para EMEA de Towers Watson. «Sin embargo, una inquietud desproporcionada por la regulación puede derivar en un problema a largo plazo, precisamente en un momento en que las aseguradoras tienen retos emergentes en los que pensar, como las oportunidades del Big Data, las redes sociales y la fuerte competencia de precios. Un enfoque excesivo en la regulación puede resultar peligroso ya que distrae a las aseguradoras de estos asuntos de igual o mayor importancia”.
¿Cuánto crecerá su negocio?
La mayoría de las aseguradoras prevén un crecimiento plano en su negocio (60%) o incluso la entrada en un período de crecimiento negativo (17%) durante los próximos tres años. Las aseguradoras de Asia-Pacífico son las más optimistas sobre las perspectivas de crecimiento (52%), con respecto a las norteamericanas (20%) y europeas (18%). Las compañías de seguros de vida (27%) mostraron más optimismo en relación al crecimiento que las generales (18%). Casi dos tercios (63%) prevén que el crecimiento será principalmente orgánico.
“La previsión general para las aseguradoras globales en los próximos años es el crecimiento nominal, probablemente porque las multinacionales se han centrado en Latinoamérica y Asia para su futura expansión. Sin embargo, el desarrollo en estos países no será fácil. Las compañías europeas y norteamericanas que entren en estos mercados deben lidiar con diferencias significativas tanto culturales, como de idioma y prácticas empresariales”, señala Serhang Guven, director de Seguros Generales de Towers Watson para Norte América.
En cuanto a los retos respecto a los recursos, las aseguradoras nombraron la tecnología (88%) y los problemas relacionados con el talento (78%). “En Asia, algunas aseguradoras están estableciendo centros de innovación internos para convertirse en disruptivas del mercado antes de quedarse fuera de él, un enfoque que debería ser considerado por muchas otras”, señala Michael Freeman, director de la Unidad Risk Consulting y Software de Towers Watson en Asia Pacífico.
El estudio también refleja las principales oportunidades y amenazas emergentes para el negocio asegurador. Más allá de la regulación (mencionada por el 57% de los encuestados), entre éstas también encontramos el cambio de los canales de distribución (47%), el ritmo de la innovación (39%), el Big Data (30%) y las redes sociales (9%). “Hay numerosas oportunidades que las aseguradoras pueden capitalizar para hacer crecer su negocio”, señala Fulcher. “Sin embargo, en muchos casos, las empresas reaccionan con cambios graduales en lugar de tomar medidas más radicales. Nuestro estudio muestra cómo muchas aseguradoras se cuestionan ahora si este enfoque les permitirá mantener el ritmo del mercado”.
Wescott, ex asesor del ex presidente Clinton, estuvo recientemente en Madrid. “El petróleo ha estado demasiado caro durante demasiado tiempo y su caída es muy buena noticia para la economía global”
El petróleo y las políticas monetarias serán los ejes macroeconómicos que dominarán los mercados este año, según analizó en una reciente presentación con periodistas en Madrid Robert F. Wescott, presidente de Keybridge Research y asesor del Comité de asignación global de activos de Pioneer Investments. Y ambos factores, en su opinión, apoyarán a los mercados.
“El barril de petróleo a 120 dólares ha dañado la economía más de lo que parece en los últimos años. Ha estado demasiado caro durante demasiado tiempo y por eso su caída supone una muy buena noticia para la economía global”, con excepción de sus implicaciones para algunos países como Rusia o Venezuela o el sector de la energía.
Pero será beneficioso para el sector de consumo y su contribución al crecimiento económico será positiva. Como ejemplo, pone EE.UU: “La industria de petróleo y gas alcanza los 170.000 millones de dólares, el 1% del PIB. La caída de precios puede restar un 0,2% al crecimiento del país por el impacto en este sector pero, en conjunto y considerando su implicación positiva en el resto de sectores, el petróleo barato puede aportar un punto más de crecimiento a EE.UU.”
En su opinión, el abaratamiento del crudo no se debe a una caída de la demanda -un análisis que no tiene sentido en un entorno de acelerado crecimiento económico-, sino más bien al hecho de que ha sido una burbuja en los últimos años y simplemente los precios “están volviendo a poner los pies en la Tierra”. “El petróleo nunca debió estar a 120 dólares, no es un precio sostenible”, afirma. Para Wescott, y aunque el barril podría bajar hasta niveles ceranos a 35 dólares, un rango aceptable para el resto del año será entre 50 y 60 dólares.
Es más, vaticina que durante los próximos años veremos precios del crudo más bajos que en el pasado. “En algún momento la OPEC volverá a impulsar los precios pero no creo que estén mucho más altos del rango 60-75 dólares durante los próximos años”. Entre otras razones, porque la producción del shale podría ser menor a lo previsto (35-45 dólares), mantiendo alta la competencia.
El experto está convencido de que los bajos precios supondrán uno de los principales catalizadores para el crecimiento económico en EE.UU., que podría alcanzar el 3%-3,5% este año, en un entorno de mayor fluidez del crédito, mejoras en el mercado laboral, recuperación “no completa pero a la mitad” en el mercado inmobiliario y buen comportamiento del sector industrial.
Laurent Crosnier, CIO at Amundi London, recently visited Madrid. Attracted by Mexico and Brazil, Amundi’s Laurent Crosnier Begins to See Value in Emerging Market Debt
A finales de 2014, en torno al 80% del mercado mundial de bonos ofrecía retornos por debajo del 2% y la mitad, menores al 1%. En este contexto, ¿dónde conseguir rentabilidad en renta fija? Mediante una estrategia basada en ampliar el universo de inversión y en un estilo flexible para invertir allá donde hay valor en función del momento de ciclo (con asignación dinámica de activos y combinando visiones macro a largo plazo con gestión táctica a corto), la estrategia de renta fija Global Aggregate de Amundi trata de lograrlo.
Laurent Crosnier, CIO de Amundi Londres recientemente en Madrid, asegura que la clave está en detectar la mejor clase de activo y saber combinarla adecuadamente para que, por ejemplo, las divisas no mermen las ganancias obtenidas. De cara a 2015 es cauto en duración (el fondo puede variar de 0 a 8) y en deuda pública estadounidense, si bien es más constructivo con la deuda pública europea (donde prefiere la deuda periférica a la alemana, ante su mayor potencial de beneficiarse del QE del BCE).
Laurent Crosnier compartirá su visión de mercado con los asistentes al primer Fund Selector Summit de Funds Society en Miami, oragnizado en asociación con Open Door Media, que se celebra en el Hotel Ritz-Carlton de Key Biscayne los días 7 y 8 de mayo. Puede consultar el programa e información adicional del evento en este link.
Según explicó en una presentación con periodistas, es muy constructivo con el crédito con grado de inversión, que también se verá beneficiado por el QE en Europa, si bien en este momento ve más valor en Estados Unidos debido a las valoraciones. Por sectores, le gusta el financiero frente al industrial, y también empieza a ser constructivo con la deuda emergente, donde ve valoraciones atractivas en México y Brasil (donde “no hay crecimiento pero los precios son muy atractivos ante la devaluación del real, y por tanto ofrece una buena relación rentabilidad-riesgo”), y también se decanta por la deuda de países beneficiados de la caída del precio del crudo, como India o Turquía. Eso sí, para cubrirse en el caso de un hard landing en China, se posiciona corto en deuda y divisas de países exportadores de materias primas como Canadá, Australia y Nueva Zelanda.
En divisas, apuesta por el dólar (apoyado en el crecimiento en EE.UU.) frente al yen y al euro y, preguntado por una posible guerra de divisas, advierte sobre los efectos contradictorios que pueden derivarse de las decisiones de algunos bancos centrales para evitar la deflación. Así, considera que la decisión del Banco Central Suizo lo que conseguirá será importar esa deflación.
Sobre China, asegura que necesitará una divisa más débil para ganar competitividad en Asia frente a Japón pero tendrá que equilibrar ese deseo con el de internacionalizar el renminbi. “No puedes pedir a los inversores que inviertan en una divisa que vas a depreciar un 20%”, dice, indicando la necesidad que tendrá China de equilibrar esos dos planes.
Gestión multiactivos
Dan Levy, jefe de especialistas de Gestión Flexible Multiactivo de Amundi, habló del Amundi Patrimoine y se mostró positivo con numerosos activos (como la renta variable, la renta fija y también la duración en EE.UU. –no espera una subida de tipos inminentes allí- y Europa) pero considera que habrá presiones que pueden añadir volatilidad (la subida de tipos por la Fed, la situación del mundo emergente, los riesgos políticos internacionales o la presión deflacionista en Europa).
Ante la ausencia de valores refugio, advierte de la importancia de la gestión del riesgo y de disminuirlo cuando sea necesario. En ese sentido, el fondo es flexible para proteger la cartera recortando el riesgo y añadiendo diversificación cuando sea necesario. Actualmente, la exposición del fondo a renta variable se sitúa en torno al 45%. “Esperamos una corrección, aunque no será grande”, afirma.