Foto: Ryyta, Flickr, Creative Commons. Legg Mason Global Asset Management lanza un fondo de renta variable estadounidense socialmente responsable
Legg Mason Global Asset Management ha lanzado un fondo de renta variable estadounidense socialmente responsable que gestionará su filial ClearBridge Investments, responsable de mandatos de inversión que responden a criterios medioambientales, sociales y de gobierno corporativo (ESG).
El fondo Legg Mason ClearBridge US Equity Sustainability Leaders aplica una estrategia centrada en diferentes capitalizaciones que busca identificar empresas interesantes en términos financieros que destaquen en cuanto a criterios ESG.
«Como fiel reflejo de la posición de liderazgo de ClearBridge en la inversión basada en criterios ESG y el compromiso con los resultados a largo plazo mediante una gestión activa, el fondo tiene como objetivo ofrecer una visión integral de su sostenibilidad», dice la entidad en un comunicado.
El fondo está gestionado por Mary Jane McQuillen, responsable de Inversiones basadas en criterios ESG de ClearBridge Investments, con 19 años de experiencia en este tipo de mandatos, y Derek Deutsch, que cuenta con 16 años de experiencia y es responsable de varias estrategias de mediana capitalización en la firma.
Con respecto al lanzamiento, McQuillen comentó: «Las compañías que cumplen con criterios ESG pueden ofrecer algunas de las mejores oportunidades para lograr rentabilidades atractivas, ya que suelen contar con un enfoque empresarial más sostenible que sus competidores a largo plazo».
En cuanto a los tipos de empresa en los que se centrará el fondo, McQuillen afirmó: «Con el proceso ESG y el sistema de calificación exclusivo que ClearBridge ha desarrollado a lo largo de casi tres décadas, nuestra estrategia no sólo se centra en adquirir empresas que ya cuentan con estas características, sino también en identificar firmas que se esfuerzan por mejorar su trayectoria en cuanto a criterios ESG. La colaboración con estas empresas para desarrollar sus buenas prácticas es un aspecto esencial de nuestro papel como inversores, que estará integrado en el proceso de inversión del fondo».
El fondo lleva a cabo un análisis fundamental para poder identificar las mejores empresas, centrándose en sus valoraciones, solidez financiera y su efectividad a la hora de asignar capital. El análisis exclusivo de los criterios ESG —desarrollado por ClearBridge en las últimas tres décadas— está integrado en el proceso del análisis fundamental para poder identificar así a empresas que destacan en lo relativo a sus responsabilidades ESG.
Además de identificar empresas que ya aplican buenas prácticas de ESG, el fondo también tendrá en cuenta a aquellas que, en su opinión, están realizando importantes avances para destacar en este ámbito.
El fondo invierte en compañías de todo tipo de capitalización bursátil y se espera que los gestores mantengan el objetivo de rotación de cartera en niveles mínimos al priorizar oportunidades de inversión a largo plazo. Generalmente, el fondo contará con entre 30 y 50 valores en cartera.
CC-BY-SA-2.0, FlickrFoto: ITU Pictures
. Las políticas urbanas son clave para la integración exitosa de los millennials, según un estudio de Citi
Un nueva investigación elaborada por la Unidad de Inteligencia de «The Economist», EIU, por encargo de Citi Foundation, revela que más allá del optimismo y carácter emprendedor de los jóvenes, muchos de ellos luchan por encontrar un empleo, tener acceso a la tecnología, conseguir equidad salarial e integrarse a redes que les ayuden a prosperar en las ciudades en el ámbito mundial.
«Accelerating Pathways» es un estudio comparativo del entorno económico en 35 ciudades alrededor del mundo e identifica aquellos factores que contribuyen con mayor peso a un entorno favorecedor para el desarrollo económico de los jóvenes. Con los resultados de la investigación se ha elaborado una herramienta interactiva que puede ser aprovechada por quienes trabajan estos temas en los sectores público, privado y social.
La investigación se llevó a cabo para contar con información útil para la instrumentación de políticas y programas públicos y privados enfocados en preparar a los jóvenes urbanos para tener éxito en la economía actual. Se trata de una iniciativa que forma parte del programa Pathways to Progress de Citi Foundation, cuyo objetivo es apoyar a los jóvenes urbanos a desarrollar una mentalidad emprendedora, adquirir habilidades de liderazgo, financieras y laborales para integrarse exitosamente en la economía formal a través del empleo o del emprendimiento. La investigación será base también para la toma de decisiones sobre inversiones y proyectos futuros de Citi Foundation en estos temas.
Brandee McHale, presidenta de Citi Foundation dijo: «Al volverse el mundo cada vez más urbano, global y digital, los líderes de las ciudades tienen más oportunidad de desarrollar nuevas formas de catalizar el crecimiento económico e impulsar mejores condiciones de calidad de vida para sus ciudadanos. Invertir en la juventud es fundamental para asegurarnos de que el crecimiento económico y la competitividad de las ciudades sean de largo plazo, pero es un tema que a veces no atendemos debidamente. Esta investigación fortalecerá y servirá de guía para el debate sobre el tipo de políticas y programas que son más adecuados para que los jóvenes contribuyan a las ciudades sustentables, ahora y en el futuro».
Por su parte, Leo Abruzzese, director global de Políticas Públicas de la Unidad de Inteligencia de The Economist, dijo: «La vitalidad económica y la ambición de los jóvenes son poderosos motores de crecimiento en las ciudades en todo el mundo. El 60% de la población mundial vivirá en las ciudades en 2030 y la población joven del mundo crecerá para entonces en cien millones de personas. Por eso, hoy más que nunca, las ciudades deben dar atención prioritaria a este segmento poblacional».
Foto: Gershon Distenfeld, vicepresidente senior y director de High Yield de AB. AB: “Lo más importante del cambio en la política monetaria de la Fed es cómo va a reaccionar el mercado, no la fecha”
“Estamos preocupados por la liquidez en general. Esa sería nuestra primera preocupación en el actual contexto de mercado”, ese fue el mensaje de Gershon Distenfeld, vicepresidente senior y director de High Yield de AB, en su intervención en FT Investment Management Summit celebrado el pasado noviembre en Nueva York y se corresponde con la multitud de artículos sobre este tema que la firma publica con regularidad en su blog.
Entre los desafíos más importantes a los que se enfrenta el mercado, Distenfeld enumera uno por encima de todo: la volatilidad. “Las valoraciones del mercado han alcanzado un punto en el que vuelven a ser más atractivas que nunca, al menos, desde la crisis de deuda de Europa. Es decir, desde hace varios años. Tras dos años de muy bajas rentabilidades en high yield y otras clases de activos, es probable que el mercado esté posicionado para conseguir mejores retornos en el futuro. Lo que si podemos esperar de cara a 2016, es mucha más volatilidad, sobre todo en lo que rodea a la subida de tipos de la Reserva Federal y a China”, explica.
Para el experto de AB, lo único importante del cambio en la política monetaria de la Fed es cómo va a reaccionar el mercado, no la fecha ni en qué porcentaje suban los tipos. El mercado debería dar la bienvenida a una normalización de la política monetaria, pero ahora mismo hay demasiado miedo para ver más allá. “Los inversores están tan asustados, que no son capaces de reconocer los beneficios de una medida de este estilo. Las subidas de tipos de interés tiene lugar cuando los datos macroeconómicos son buenos. A largo plazo es una cosa totalmente positiva para los mercados en muchos sentidos”.
Pero lo cierto es que el mercado acusa la incertidumbre con niveles de volatilidad que pueden considerarse altos. Ante esto, el responsable de High Yield de AB recuerda que existen muchos instrumentos para proteger el portfolio, el problema es el coste de cada uno de ellos. “Lo primero que le recomendaría a un inversor es que sepa que nivel de riesgo que asumen en sus inversiones”.
Más calidad crediticia en Europa
En lo que respecta al segmento de Crédito, Distenfeld recuerda que hemos empezado a ver compañías individuales que tienen dificultades. Más recientemente, este fenómeno se ha dado en el sector farmacéutico. Pero insiste, lo que cuenta son las valoraciones. “Incluso si dejamos de lado el sector de las commodities, sobre todo el de la energía, podemos ver retornos decentes de cara al futuro. Cuando digo decente, me refiero a retornos de un solo dígito”.
El mercado high yield estadounidense –excluido el sector de la energía- arroja cifras de rentabilidad en torno al 7% y AB ve oportunidades también en el resto del mundo. En Europa, la rentabilidad del high yield es menor, pero por una buena razón, explica. “La calidad de las compañías es mayor en el Viejo Continente frente a EE.UU. Dos tercios de su mercado high yield tiene un rating de BB”.
La otra gran preocupación del mercado es China. Distenfeld afirma que ahora mismo no tiene inversiones directas en el gigante asiático porque la preocupación es alta y la claridad sobre la situación es baja. Lo que si va a pasar, advierte, es que la ralentización económica va a impactar en el mercado de las materias primas y sobre todo, en los países cuya economía depende mucho de ellas. Un efecto que se veía venir hace unos meses, pero que ahora es ya un hecho en el mercado.
. Juan Diez de Bonilla, Enrique Stieglitz y Diego Castillo dejan Credit Suisse NY y se incorporan a UBS
Mientras continúan los movimientos en Credit Suisse, UBS ha aprovechado para llevarse a uno de los equipos internacionales más importantes del banco suizo en Nueva York.
El equipo lo conforman Juan Diez de Bonilla, Enrique Stieglitz –ambos con casi siete años en Credit Suisse-, así como Diego Castillo -quien se unió al banco en abril de 2014, después de casi cuatro años con JP Morgan-, y otras cuatro personas.
El mexicano Diez de Bonilla, con más de 18 años de experiencia en el sector en empresas como Accival en México, Citigroup y Legg Mason, lleva casi 15 años en Nueva York. Stieglitz cuenta con más de 16 años de experiencia en el sector, y de hecho, antes de unirse a Credit Suisse, trabajó durante cinco años en UBS de 2004 a 2009. Castillo por su parte cuenta con nueve años de experiencia.
Los tres brokers son también reconocidos por la SEC de los Estados Unidos como Registered Investment Advisors (RIA).
Alejandro Moreno, director de Distribución de Northstar. Alejandro Moreno, nombrado nuevo director de Distribución de Northstar
Northstar, firma dedicada a las soluciones financieras para satisfacer las necesidades de clientes fuera de Estados Unidos, anunció el nombramiento de Alejandro Moreno como nuevo director de Distribución.
Alejandro Moreno aporta más de 19 años de experiencia en organizaciones financieras globales. Alejandro se suma a Northstar desde Sun Life Financial International, donde su cargo más reciente fue director de relaciones globales. En Sun Life, Alejandro gestionó los equipos globales de ventas y cuentas clave, y la firma experimentó un crecimiento significativo en todos los territorios bajo su conducción. Antes de incorporarse a Sun Life en 2008, Alejandro estuvo 12 años en Putnam Investments, donde desempeñó diversos cargos en la división offshore de la firma. Alejandro completó su programa de grado en CENP en Madrid, y es bilingüe en inglés y español.
Michael Staveley, director ejecutivo de Northstar, comenta: «Estamos encantados con la incorporación de Alejandro en el recientemente creado cargo de director de distribución, y esperamos que juegue un papel central en el crecimiento continuado de la firma. Alejandro trabajará en estrecho contacto con los demás miembros del equipo ejecutivo y los directores, a medida que buscamos expandir la red de distribución global de la firma y ampliar nuestra gama de productos. La plataforma Northstar ha estado en operación por 17 años, y esta contratación crucial es otra demostración de nuestro compromiso de larga duración con el negocio internacional«.
La firma Northstar fue establecida en 1998 como Nationwide Financial Services (Bermuda) Limited, y rebautizada Northstar en 2005, la firma ofrece una gama de atractivos planes de inversiones a tasa fija y variables a una base global de clientes. Los productos de tasa fija de la firma ofrecen tasas de interés garantizadas competitivas, adosadas con la opción de protección agregada del capital. Trabajando con una extensa gama de socios de distribución como bancos y otras instituciones financieras, Northstar tiene clientes en más de 100 países.
CC-BY-SA-2.0, FlickrFoto: Benchmark Realty
. El gestor del hedge fund Citadel adquiere propiedades en Nueva York, Chicago y Miami batiendo todos los récords
Kenneth Griffin, manager del hedge fund Citadel, ha destinado 300 millones de dólares a la adquisición de propiedades en Nueva York, Chicago y Miami, batiendo los récords de las tres ciudades en los últimos cuatro meses y convirtiéndose en el propietario individual de los apartamentos más caros de ellas, según informa el New York Times.
Sus adquisiciones incluyen una propiedad de dos plantas en el Waldorf Astoria de Chicago, por algo menos de 30 millones de dólares; tres plantas en el “bunker de los millonarios” de Nueva York –220 Central Park South-, por unos 200 millones; y un penthouse en el edificio Faena de Miami, por 60 millones.
Griffin, que ya cuenta con propiedades en Aspen (Colorado) y Hawaii y gana 68,5 millones de dólares al mes después de impuestos-según consta en su demanda de divorcio-, estaría buscando buenas inversiones, pues -según fuentes cercanas al comprador declararon al medio- la vivienda de Nueva York no la utilizará para vivir, sino para acoger a invitados o empleados.
Foto: NothingisImpossibleforawillingheart, Flickr, Creative Commons. Kames Capital lanza un nuevo fondo de deuda emergente
Kames Capital acaba de lanzar un nuevo fondo de deuda emergente que viene a complementar su actual gama en renta fija. El Kames Emerging Market Bond Fund comprará principalmente deuda con grado de inversión de emisores soberanos y corporativos de mercados emergentes denominada en divisa extranjera. El fondo invertirá al menos un 80% de sus activos en bonos de mercados emergentes y mantendrá al menos un 80% de sus posiciones en títulos con grado de inversión.
Gestionado por Scott Fleming con el apoyo de Alex Pelteshki, estará domiciliado en Dublín y se comercializará en el Reino Unido, Austria, Bélgica, Alemania, Guernsey, Irlanda, Italia, Jersey, Luxemburgo, Malta, España y Suiza.
El lanzamiento del EMB Fund viene a complementar la actual gama de fondos de renta fija de Kames Capital, lo que refuerza la capacidad de la casa escocesa para cubrir cualquier necesidad de inversión en renta fija.
El Kames Emerging Market Bond Fund se propone generar una rentabilidad superior a la del JPM Emerging Market Bond Index Global Diversified IG. El fondo estará denominado en dólares pero también contará con clases de acción en euros y en libras esterlinas. La comisión anual de gestión para las acciones de clase B será del 0,65%.
«Los mercados emergentes continúan registrando distorsiones mientras los inversores esperan a que se aclare la política de tipos de interés estadounidense», explica David Roberts, responsable de renta fija en Kames.
«Ahora mismo, todas las noticias sobre mercados emergentes se centran invariablemente en historias negativas sobre potenciales crisis o impagos asociados a los reembolsos que está experimentando la clase de activo. Pero, si miramos más allá, existe un universo cada vez más amplio de emisores solventes en deuda emergente con grado de inversión que muchos inversores están pasando por alto. El objetivo de nuestro fondo es explotar esas oportunidades».
«El lanzamiento del EMB Fund completa la gama de productos de renta fija de Kames. Aunque ya invertíamos, y continuaremos invirtiendo, en bonos de mercados emergentes a través de otros fondos de nuestra gama, creemos que ahora existe una demanda a largo plazo para esta clase de activo y queremos que los inversores puedan beneficiarse de la experiencia de Kames en este ámbito», añaden desde la gestora.
Stefan Kreuzkamp. Foto cedida. Las nueve apuestas del CIO de Deutsche AWM para los próximos meses
Stefan Kreuzkamp, Chief Investment Officer de Deutsche Asset & Wealth Management (Deutsche AWM), realiza nueve apuestas para los próximos meses. Kreuzkamp y su equipo gestionan activos de clientes por un valor de 1,09 billones de euros (a 30 de septiembre de 2015).
Sus nueve apuestas son las siguientes:
La Reserva Federal de Estados Unidos quiere poner fin a su política monetaria ultra-expansiva.
Se mantienen las políticas monetarias acomodaticias en Japón y la Eurozona: China imita estas políticas.
La inflación en Europa repuntará de nuevo en 2016.
El dólar estadounidense se beneficiará de las políticas monetarias divergentes.
Las perspectivas de rentabilidad para las acciones y los bonos caen ligeramente en lo que queda de año.
Las altas valoraciones podrían contribuir a ver volatilidad en los mercados de renta variable.
Los índices bursátiles de América Latina se mantendrán débiles.
El inmobiliario es todavía uno de los activos más atractivos.
Asignación de activos de la cartera modelo equilibrada para los clientes de Deutsche AWM en Europa, Oriente Medio y África (EMEA): Renta Fija, 46%; Renta Variable, 43%; Alternativos, 10%; Materias Primas, 1%.
Valentijn van Nieuwenhuijzen, responsable de Multiactivos en NN IP. NN IP: “En un escenario menos volátil en 2016, preferimos activos de riesgo que aquellos más seguros”
Este año los vaivenes en los mercados han sido muy pronunciados, con movimientos importantes en renta variable y renta fija, sobre todo en el espacio emergente, pero también en activos como el petróleo o las divisas, con oscilaciones en el caso del oro negro y del dólar de en torno al 20%. Pero, precisamente por la virulencia de esos movimientos, Valentijn van Nieuwenhuijzen, responsable de Multiactivos en NN IP, descarta que el próximo año pueda vivirse la misma volatilidad: “2016 será volátil pero el marco será menos turbulento que el vivido este año”, explicó en una reciente presentación en Madrid.
¿Los motivos? Es poco probable que se repitan movimientos tan bruscos como el vivido este año, a la baja, en el precio del petróleo (que se sitúa en el entorno de 40 dólares) o al alza en el caso del dólar. Ni tampoco se repetirán con la misma intensidad las caídas en los mercados emergentes, que ya han descontado en su precio muchos de sus problemas.
En este contexto, un ancla de estabilidad serán los mercados desarrollados, defiende el experto, debido sobre todo a la “participación de los hogares y los consumidores en la recuperación” (la demanda doméstica, junto con el sector de servicios y las inversiones apoyarán, dice), que está en toda Europa y también en Japón o EE.UU., donde el mercado laboral da signos inequívocos de mejora; y esas dinámicas seguirán adelante el próximo año mientras los emergentes se debilitan y además suponen una fuente de riesgo sistémico en el caso de China. “Habrá episodios de volatilidad”, reconoce, pero serán menos intensos que los de agosto de este año o los del segundo trimestre.
Eso sí, advierte de que el escenario de fondo sigue siendo un escenario de crecimiento modesto, más bajo al de las últimas décadas previas a la crisis de 2008, pero resistente. “El mundo aún parece extraño si lo comparamos con el pasado: es cierto que la Fed empezará a normalizar los tipos, el crecimiento vuelve a países como España y en general a Europa… pero ese crecimiento no es el mismo, no es el 3% de antes”, no ha recuperado los niveles pre-crisis y no lo hará, debido también al lastre emergente, mientras la inflación también sigue en niveles muy bajos, con la duda, eso sí, de si esos niveles serán los normales ahora o si habrá un repunte futuro. En su opinión, habrá tres fuerzas que marcarán la evolución de la economía y los mercados: los patrones de ahorro e inversión globales, la oferta y demanda de liquidez global y los patrones de comportamiento del inversor institucional, la regulación y los comportamientos irracionales de los inversores en los mercados (animal spirits).
Mejor dentro que fuera del mercado
En este contexto, el experto defiende que es mucho más productivo estar dentro que fuera del mercado, y apuesta actualmente por activos como el real estate, pero también la renta variable y la renta fija corporativa para añadir valor a las carteras. “Puede que la renta variable no ofrezca ya retornos totales de doble dígito pero las primas son razonables y es mejor estar dentro del mercado que estar en liquidez”. Dentro de la renta variable, favorece mercados desarrollados, sobre todo el europeo frente a EE.UU., puesto que en este último país el ciclo corporativo está más avanzado. En emergentes, solo destaca en positivo mercados como México o Polonia, por su proximidad a mercados en recuperación como EE.UU. y Alemania, respectivamente.
En renta fija, advierte de que no se debe hablar a la ligera de burbujas por doquier, aunque las primas de riesgo estén bajas, pues hay que tener en cuenta también el nuevo entorno económico en el que nos movemos, que apunta al mantenimiento de tipos de interés bajos durante un largo periodo de tiempo. Así, aunque la deuda pública japonesa sí podría presentar el aspecto de una burbuja, no ocurre lo mismo con la de EE.UU. mientras en Alemania el Bund estaría caro pero no lo suficiente como para hablar de burbuja. “Los precios en los mercados de bonos no son necesariamente ridículos siempre”, indica. Aunque está negativo en deuda pública, sobrepondera mercados como los periféricos (España –no está muy preocupado por las próximas elecciones, puesto que las encuestas descartan un gobierno a imagen del griego-, Italia y Portugal). Y, en deuda privada, apuesta por activos con grado de inversión (tanto en Europa como en EE.UU.) y por high yield europeo (en EE.UU. cree que los defaults repuntarán y no solo en el sector de la energía). Es muy cauto con deuda emergente.
En general, infrapondera deuda pública y sobre todo materias primas, mientras es positivo actualmente con real estate, y más neutral pero también constructivo con renta variable y crédito, siempre advirtiendo de que su visión es a corto plazo (de tres a seis meses) y el equipo tiene flexibilidad para cambiar de ideas y adaptarse en caso necesario. “En un escenario menos volátil en 2016, preferimos activos de riesgo que aquellos más seguros”, dice.
También por dos razones adicionales: la asignación de activos en las carteras globales es actualmente defensiva y con mucho cash, y hay más probabilidades de que se equilibre tomando posiciones de mayor riesgo que volviéndose más defensiva; y porque los bancos centrales (BCE o Banco de Japón) seguirán siendo acomodaticios, si bien la Fed subirá tipos ya en diciembre (para dar una señal al mercado de que prevendrá que la inflación se salga de control, si bien aún no hay peligro de que eso ocurra). “Es sensato que realice esa subida, aunque también hay argumentos en contra”, dice el experto.
Con respecto al BCE, habla de una mejora en el ciclo económico europeo pero la inflación sigue baja, demasiado baja para Draghi, pues no se podrán cumplir los objetivos de acercarse al 2% en al menos cinco años, sobre todo tras la fuerte caída de 2014. “Draghi necesita dar impulsos para acercarse a esa cifra porque cree que el riesgo de sobre reaccionar es menor que el círculo vicioso que podría abrirse si la inflación sige cayendo e incluso se roza la deflación, algo contra lo que es mucho más difícil luchar. Ése es el ejercicio de gestión que está haciendo el BCE, intentando evitar la deflación”, explica.
Foto: Ermanitu, Flickr, Creative Commons. Los flujos en el mercado europeo de ETFs bajan el ritmo en noviembre
Los flujos en el mercado europeo de ETFs fueron limitados en noviembre de 2015. Los flujos netos de activos durante el mes alcanzaron los 3.700 millones de euros, es decir, acusaron un descenso del 27% con respecto a la media anual, según los datos de Lyxor.
El total de activos gestionados ascendió a 462.000 millones de euros, lo que supone un aumento del 27% con respecto al dato de finales de 2014, e incluye un reducido impacto de mercado del 2,15%. En un entorno caracterizado por las cambiantes expectativas acerca de la política monetaria de la Fed, los inversores centraron su interés principalmente en los ETFs de renta variable de los mercados desarrollados.
Los índices de renta variable registraron entradas por valor de 2.600 millones de euros, lo que representa casi tres cuartas partes de los flujos totales en el mercado. Habida cuenta de la sólida creación de empleo y la aceleración de la inflación salarial, las expectativas del mercado viraron hacia una subida de los tipos por parte de la Fed a mediados de diciembre.
En este contexto, el repunte de los flujos experimentado por los mercados emergentes en octubre se reveló efímero, ya que tan solo se registraron entradas por valor de 97 millones, en comparación con los 319 millones en salidas, de la renta variable de los mercados emergentes asiáticos.
Los inversores prefirieron volver a apostar por los índices de los mercados desarrollados en su conjunto, lo que se tradujo en 2.400 millones en flujos de entrada, un dato que duplica el registrado en octubre de 2015. Los flujos en los ETFs de renta variable de Japón y Estados Unidos se anotaron un considerable incremento, con entradas por valor de 785 millones y 321 millones, respectivamente. Los flujos hacia Europa (667 millones) siguieron siendo modestos y permanecieron sin cambios con respecto al mes precedente, y se concentraron principalmente en los índices financieros y de pequeña capitalización.
¿Y en renta fija?
Las entradas de capital en los índices de renta fija cayeron de forma significativa y se situaron en los 930 millones, lo que supone un descenso del 57% con respecto a la media anual. La deuda pública de mercados desarrollados acusó el grueso de las salidas (1.100 millones). En un contexto de fuerte divergencia entre las políticas monetarias, con una brecha entre los rendimientos de EE.UU. y Alemania en máximos históricos, las salidas de capitales afectaron principalmente a la deuda pública europea (997 millones) y también a la deuda pública alemana (354 millones).
Por el contrario, las entradas en la deuda corporativa y de alto rendimiento aumentaron hasta alcanzar un total de 1.900 millones, un dato un 65% superior a la media anual, apuntaladas por la búsqueda de rendimientos y, en Europa, por las expectativas de una ampliación del programa de expansión cuantitativa, que finalmente se produjo. Cabe destacar que las entradas en los ETFs de bonos indexados a la inflación marcaron máximos anuales, al acumular 240 millones de euros.
Los flujos relativos a las materias primas fueron positivos y se situaron en 153 millones, gracias a los flujos positivos en los índices generales (146 millones), mientras que los ETFs de metales preciosos y oro registraron discretas entradas por valor de 7 millones de euros.