CC-BY-SA-2.0, FlickrFoto: Metropolitan Transportation Authority of the State of New York
. La realidad del real estate en la costa Este de los Estados Unidos
El III Real Estate Private Equity Forum sobre terrenos, construcción y desarrollo de condominios, organizado por IMN para la zona Este de Estados Unidos, reunirá los próximos días 5 y 6 de abril a más de 250 participantes en el hotel Four Season de Miami. Entre ellos, propietarios de terrenos, promotores, constructores, fondos de private equity que invierten en real estate, prestamistas y proveedores de servicios.
La primera jornada será inaugurada a las 8:30 con la ponencia de Kevin Guillen, economista jefe de Meyers Research, sobre perspectivas macroeconómicas para 2016 y sus implicaciones sobre la venta de inversiones en real estate.
IMN organiza dos eventos anuales, éste, dedicado a la zona más oriental del país, y otro celebrado en Las Vegas en octubre, para la zona Oeste del país. Para más información sobre el foro de Miami y registro puede utilizar este link.
CC-BY-SA-2.0, FlickrFoto: peasap
. Snowden Lane amplía su equipo Offshore con Alex Arista y Juan Carlos Moreno
La firma independiente de wealth advisory, Snowden LanePartners ha anunciado la contratación del financial advisor Alex Arista y del banquero y especialista en crédito Juan Carlos Moreno, quienes se incorporan a la oficina de la firma en San Diego, ambos provenientes de Merrill Lynch. Con ellos, ya son seis los profesionales de la firma basados en San Diego para servir a los clientes no residentes, evidenciando la continua expansión de la firma en el mercado Offshore.
Alex Arista se une al equipo de LDR internacional, liderado por el socio y MD de la firma Rick Leyva; este grupo está especializado en dar servicio a los clientes no residentes, en proveer una visión holística del patrimonio, incluidas inversiones, trusts y estrategias de transferencia de patrimonio prudentes y de acuerdo a todas las normativas.
Por su parte, Juan Carlos Moreno se incorpora al equipo corporativo de la firma, reportando al MP y presidente Greg Franks, para trabajar con los clientes y asesores en la perfecta integración de soluciones de inversión y servicios de banca privada de terceros.
Ryan Virag/ foto cedida. Ryan Virag se muda a Londres para llevar la cartera europea de ClearBridge Investments
Ryan Virag, director financiero y gestor de carteras de clientes en ClearBridge Investments, trabajará desde la oficina de Londres para impulsar la presencia de la gestora en Europa. Virag actuará como contacto local de gestión de inversiones para los clientes. Además, trabajará para fomentar el conocimiento de ClearBridge y de sus servicios de inversión entre los inversores, asesores de inversión y asesores financieros.
Terrence Murphy, consejero delegado de ClearBridge Investments, comentó que perciben «una gran oportunidad para ampliar las ventas y el conocimiento de nuestras capacidades de inversión a escala mundial. Cada vez más inversores internacionales buscan profesionales consolidados de la gestión activa con trayectorias contrastadas. Antes de incorporarse a nuestro equipo, Ryan era responsable de estrategia de inversión especializado en carteras de renta variable internacional y ha forjado sólidas relaciones con destacados inversores institucionales y particulares, por lo que es lógico que haya protagonizado nuestro primer nombramiento fuera de Estados Unidos».
Por su parte Virag mencionó que «el hincapié que hace ClearBridge en la calidad y los fundamentales es un aspecto muy demandado por los inversores británicos y europeos que buscan exposición a estrategias de renta variable estadounidense y mundial con una gestión verdaderamente activa. Estoy muy ilusionado con esta oportunidad y con el hecho de poder ampliar la red de inversores de ClearBridge en la región».
Ryan Virag se incorporó a ClearBridge Investments en 2012 y cuenta con 15 años de experiencia en el ámbito de la inversión. Antes de unirse a la firma, fue responsable de estrategia de inversión especializado en carteras de renta variable internacional en Oppenheimer Funds. También fue analista en la división de banca de inversión de Goldman Sachs y en Morgan Stanley. Además, cuenta con la certificación CFA y es licenciado en Administración de Empresas y Finanzas por la Villanova University.
CC-BY-SA-2.0, FlickrFoto: Hernán Piñera. Los sonámbulos
La liquidez de los ETFs de bonos corporativos representa un tema candente para los inversores, operadores, autoridades reguladores y analistas, debido a que los ETFs de bonos corporativos combinan la promesa principal de un ETF (negociabilidad bajo demanda) con una clase de activo subyacente tradicionalmente menos líquida.
Los ETFs de renta fija han gozado de una gran popularidad, hasta alcanzar los 450.000 millones de dólares en activos gestionados en julio de 2015, lo que supone aproximadamente el 15% del valor del mercado total de ETF, que asciende a casi tres billones de dólares. Sin embargo, persiste la preocupación, especialmente entre las autoridades reguladoras, de que los ETFs de bonos corporativos supongan una amenaza para la estabilidad del mercado.
En uno de los trabajos académicos realizados por ETF Research Academy, una iniciativa fundada por Paris-Duaphine House of Finance con el apoyo de Lyxor Asset Management para potenciar la investigación independiente y el análisis sobre esta industria, el investigador Syed Galib Sultan, de la Universidad de Washington, en Seattle, analizó el efecto que han tenido en el pasado los ETFs de bonos corporativos sobre la liquidez del mercado de los bonos corporativos, a partir de cinco medidas de liquidez empleadas con frecuencia en los estudios académicos: la medida de Amihud (2002), la medida de Roll (1984), el porcentaje de cero rentabilidad y cero días de negociación, los costes medios totales asociados a las transacciones de apertura y cierre de titulos, y la negociación.
Sus principales conclusiones son:
La huella de los ETFs en el mercado de bonos corporativos sigue siendo relativamente pequeña (poseían el 1,5% del mercado durante el periodo analizado).
Los bonos corporativos propiedad de los ETFs son, por lo general, más líquidos que los que no son propiedad de los ETFs.
En general, el impacto de los ETFs en la liquidez de los bonos corporativos de mayor rendimiento (menor calidad crediticia) es también positivo, aunque los resultados varían algo dependiendo de la medida de liquidez utilizada.
El efecto de los ETFs en la liquidez del mercado de bonos corporativos subyacentes puede cambiar durante periodos de graves tensiones en los mercados (como por ejemplo 2008, según Sultan), aunque sigue siendo positivo en periodos de mayor duración.
Curiosamente, los resultados clave de Sultan difieren de los de otros investigadores: como por ejemplo, de Dannhauser (2014), que señaló que la propiedad de los ETFs tiene un efecto neto negativo en la liquidez de los bonos de mayor calidad (calificación investment grade). Futuros análisis podrían ayudar a esclarecer estos vínculos centrándose, por ejemplo, en la relación entre los ETFs y la liquidez de los bonos en entornos de mercado distintos, por segmentos de mercado o por índice de bonos.
Muhammed Yesilhark, responsable del equipo de renta variable europea. Foto cedida. Carmignac: “El mercado puede llegar a creer que el QE no funciona, y ése es un gran riesgo en Europa”
El año pasado estuvo lleno de eventos en los mercados y, aunque se presentaban oportunidades al principio, con fuertes rallies, la volatilidad en China hizo que se sucedieran las ventas de forma masiva. A pesar de las últimas caídas, el equipo de renta variable de Carmignac no cree que se haya corregido lo suficiente y vaticina, al menos en renta variable, un 2016 tan lleno de eventos como 2015, por lo que en su visión manda la cautela y su exposición a bolsa está en mínimos o con coberturas.
“Creemos que habrá ajustes en 2016”, decía en una reciente entrevista con medios celebrada en París Muhammed Yesilhark, responsable del equipo de renta variable europea. En su opinión, hay dos malentendidos en este mercado: en primer lugar, hay que tener en cuenta que, debido a que el QE ha llegado a Europa cinco años más tarde que a Estados Unidos y que ahora está inmerso en el programa, es un mercado más sensible a los QE que el estadounidense. El gestor llama, tanto a Europa como a Japón, “QE beta markets”. Y, en este sentido, advierte de que si la Fed ha cometido un error con su subida de tipos, y se sigue viendo en el mercado deflación y falta de crecimiento, “el mercado puede llegar a creer que el QE no funciona”, y ése es un gran riesgo, dice, porque, en ese escenario, “no importan los fundamentales”, y no importa que sean buenos.
En segundo lugar, el gestor advierte sobre el impacto que puede tener en la renta variable europea las ventas del inversor estadounidense, que determina el comportamiento de los mercados en el Viejo Continente. “Si hay problemas en EE.UU., desgraciadamente lo primero que venden los inversores es lo que tienen más lejano, no sus activos nacionales”, algo que según Yesilhark ya está sucediendo con ventas en activos europeos, tanto en sus vehículos de gestión activa como pasiva.
Mirar a la Europa core…
Al hablar sobre el efecto de la política en países de la periferia como Grecia, Portugal o España, que cuentan o podrían contar con gobiernos rebeldes de izquierda, el gestor es muy práctico e insta a poner el foco en la Europa core. “La historia dice que lo que realmente importa es la reacción de la Europa core: si sigue apoyando a la periferia no habrá cambios, independientemente de quien gobierne”, si bien también reconoce que, tras lo ocurrido con Tsipras, forzado a actuar conforme a los dictámenes de la UE, “los gobiernos rebeldes no lo tienen nada fácil”. Pero insiste en que habrá qué mirar si el tema de los refugiados o las ayudas a Europa pasan factura a Merkel, si pierde peso a favor de partidos como el antieuropeo AFD (Alternative für Deutschland), porque eso impacta más en la periferia europea que en la propia Alemania.
Sobre el Brexit, cree que la mayoría votará a favor de la permanencia en la UE pero reconoce que las negociaciones son duras. En caso de suceder, cree que el mayor impacto estaría en el incremento de la burocracia, con el consiguiente impacto negativo en el PIB y en las exportadoras británicas.
¿Podrá el BCE cambiar su negativa visión?
Parece difícil que el BCE, aunque tome medidas en marzo, cambie el pesimismo de la gestora, que ve a una Europa afectada tanto por los problemas en EE.UU. como por la volatilidad en China y el mundo emergente, por su carácter exportador. Ni siquiera si Draghi toma más medidas sorprendería positivamente al gestor: “En el pasado, el impacto de las medidas de los bancos centrales duraba días en los mercados pero ahora casi pasan desapercibidas. Los inversores se han acostumbrado a la morfina monetaria”, dice. Y eso es la parte más escalofriante, que ya no haya reacción.
El gestor recuerda que cuanto parece que más ha hecho el BCE para luchar contra la deflación, más deflación hay, y los mercados pueden tener esa sensación de que los QE no funcionan. El primer impacto, dice, fue la depreciación del euro, con lo que las exportadoras ganaron competitividad por ejemplo frente al dólar; pero eso también fuerza a otras economías a hacer lo mismo, devaluar sus divisas para ganar competitividad, lo que desemboca en una espiral de guerra de divisas o de las llamadas políticas de empobrecimiento del vecino, que son una consecuencia no deseada de las políticas de los bancos centrales.
CC-BY-SA-2.0, FlickrFoto: William Murphy. El crecimiento acelerado de los dividendos mundiales se ve empañado por la fortaleza del dólar
Según el Henderson Global Dividend Index, los dividendos mundiales ascendieron a 1,15 billones de dólares en 2015, lo que refleja un incremento del 9,9% en tasa subyacente (tras tener en cuenta las fluctuaciones de los tipos de cambio y demás factores). En términos generales, el total de 1,15 billones de dólares representó un descenso del 2,2%, puesto que la fortaleza del dólar estadounidense empañó el acelerado crecimiento de los repartos en la mayoría de las regiones del mundo.
Los ingresos por dividendos fueron una importante fuente de rentabilidad el pasado año, ya que compensaron casi totalmente el descenso de 1,3 billones de dólares en el valor de sus acciones. De hecho, desde 2010, las multinacionales cotizadas han repartido a sus accionistas 5,4 billones de dólares.
Dado que gran parte de la apreciación del dólar se concentró en la primera mitad del año, el crecimiento de los dividendos pasó a ser más visible a medida que avanzaba 2015. En el cuarto trimestre, las distribuciones aumentaron un 4,6% en términos generales y un 12,1% en tasa subyacente. El HGDI cerró el año en 157,7 puntos, en comparación con los 161,3 puntos de finales de 2014.
La revalorización de la moneda estadounidense restó nueve puntos porcentuales al crecimiento general anual, lo que equivale a 104.000 millones durante el año. El efecto de conversión fue diez veces superior al de 2014 y tuvo un impacto sin precedentes en el HGDI. Tal efecto se dejó notar en todas las regiones pero, en términos de valor, donde más se sintió fue en Europa, cuyo programa de relajación cuantitativa tiró a la baja del tipo de cambio. En el resto del mundo, Rusia, Brasil y Australia también se vieron gravemente afectadas por el desplome de sus divisas y el movimiento análogo de los precios de las materias primas, de los que dependen sus exportaciones.
Más allá de los tipos de cambio y los factores técnicos, el crecimiento en tasa subyacente en todo el universo desarrollado fue muy alentador. Japón se situó a la cabeza, con un crecimiento tan acelerado que compensó con creces la debilidad del yen. Toyota Motors, el principal distribuidor de dividendos del país, es un excelente ejemplo de cómo las empresas niponas están incrementando sus pagos a los accionistas: el pasado año, aumentó su dividendo un 29% en yenes. El impresionante crecimiento subyacente de los dividendos japoneses del 19,2% se tradujo en un 5,2% en base general. Los dividendos en Australia y Canadá, dos de los países más destacados en lo que a repartos se refiere, se anotaron crecimientos subyacentes de dos dígitos aunque, en tasa general, cayeron a causa de la depreciación de sus monedas frente al dólar estadounidense.
El crecimiento subyacente del 7,7% en los dividendos europeos resultó muy alentador. Holanda lideró la tendencia con un incremento del 42% en tasa subyacente, gracias en concreto a ING y KPN, aunque una amplia gama de firmas holandesas también demostraron solidez. El crecimiento de los dividendos alemanes también batió a sus homólogos, situado en un 9,3% en tasa subyacente. Allianz, el principal distribuidor de dividendos del país, destacó por incrementar sus repartos un 29%. Italia y Suiza también mostraron buena orientación, si bien España quedó rezagada. No obstante, la debilidad del euro hizo que los dividendos en Europa cayeran en picado en dólares. El efecto de conversión borró de un plumazo 41.700 millones de dólares del total de la región, el equivalente a 18 puntos porcentuales. En tasa general, los dividendos europeos cayeron un 12,2%, con un descenso total de 204.500 millones de dólares.
Reino Unido no logró alcanzar el ritmo de otras potencias mundiales, anotándose un crecimiento subyacente de tan sólo el 3,7%. Las empresas británicas son algunas de las que más dividendos distribuyen a escala mundial y, actualmente, muchas de ellas —como Shell, HSBC y Glaxo SmithKline— los incrementan de forma leve o nula.
No obstante, Estados Unidos fue la verdadera locomotora mundial del aumento de los dividendos, que mejoraron prácticamente en todos los sectores. Las firmas estadounidenses incrementaron sus pagos a accionistas un 14,1% (10,2% en tasa subyacente) y representaron un 40% de los repartos mundiales. El cuarto trimestre de 2015 fue el octavo periodo consecutivo de crecimiento de dos dígitos en los dividendos estadounidenses.
Las cifras procedentes de los mercados emergentes fueron heterogéneas: China experimentó su primer descenso anual de dividendos y Brasil protagonizó una evolución negativa, pero India mostró buena orientación. En Asia-Pacífico, Taiwán y Corea del Sur experimentaron un crecimiento acelerado dado que las empresas siguieron el ejemplo de Japón y aumentaron sus porcentajes de beneficios destinados a dividendos.
En 2016 prevemos que el crecimiento subyacente se ralentizará y que Reino Unido se enfrentará a una serie de retos. Aunque la mayor parte de las compañías británicas están incrementando sus dividendos, el panorama se está viendo lastrado por unas cuantas grandes multinacionales —especialmente en el sector minero—, que están recortando sus dividendos ante la caída de los beneficios. En términos generales, Henderson prevé actualmente que los dividendos aumenten en tasa general un 1,6% hasta los 1,17 billones de dólares, lo que refleja un crecimiento subyacente del 3,3%.
Alex Crooke, director del equipo de Global Equity Income de Henderson Global Investors, comenta: «La fortaleza del dólar estadounidense empañó un excelente crecimiento de los dividendos en la mayoría de las regiones, haciendo de 2015 un buen año para los inversores centrados en la percepción de rentas periódicas. Si bien los inversores en dólares se han enfrentado a dificultades, las diferencias en el tipo de cambio tienden a disiparse con el paso del tiempo. Desde 2009, los repartos de dividendos han aumentado casi un 60% y los tipos de cambio sólo han lastrado esta cifra en un leve 2%. En 2015 se puso de manifiesto la importancia de los dividendos como catalizador de la rentabilidad total del accionista, ya que las rentas periódicas compensaron casi totalmente la caída de las acciones de los inversores. La reciente volatilidad de los mercados de renta variable subraya el valor continuado de las rentas periódicas como fuente de rentabilidad. Invertir a escala mundial resulta beneficioso, ya que mantener una amplia gama de títulos en diferentes países y sectores atenúa los riesgos a largo plazo. En general, mantenemos una visión positiva sobre las previsiones de crecimiento de los dividendos a lo largo de este año, si bien es probable que los sectores vulnerables al descenso de los precios de las materias primas recorten sus pagos a accionistas. La selección de títulos es fundamental en estas condiciones de mercado para que el inversor centrado en la percepción de rentas pueda evitar acciones que probablemente no brinden demasiada rentabilidad. La renta variable sigue siendo una fuente esencial de rentas periódicas para los inversores en un contexto mundial de tipos de interés bajos».
Foto: ITU Pictures. Banque SYZ, galardonado dos veces como el mejor en su clase en los WealthBriefing Swiss Awards 2016
En la tercera edición de los premios WealthBriefing Swiss Awards, Banque SYZ ha sido galardonado como el “Mejor Programa de Marketing y Relaciones Públicas” y como “Mejor Equipo de Altos y Muy Altos Patrimonios para clientes internacionales” por el jurado. La ceremonia de los premios tuvo lugar el pasado 18 de febrero en Ginebra y fue organizada por ClearView Financial Media.
Este año el “Mejor Programa de Marketing y Relaciones Públicas” y el “Mejor Equipo de Altos y Muy Altos Patrimonios para clientes internacionales” fueron categorías muy reñidas. Mostrando “al mejor en su gama” de los proveedores de banca privada global, gestión de altos patrimonios y comunidades de asesoramiento financiero, los premios fueron diseñados para reconocer a las compañías, equipos e individuos que para el prestigioso panel de expertos han demostrado innovación y excelencia durante 2015.
El equipo de Altos y Muy Altos Patrimonios fue igualmente galardonado por su trabajo con clientes internacionales obteniendo el segundo premio de la noche para Banque SYZ, en una categoría altamente reñida.
Eric Syz, CEO deBanque SYZ: ‘Estamos encantados de haber sido elegidos ganadores de este prestigioso premio por los grandes de la industria. Es un gran honor ser reconocidos en estos premios que dan testimonio del duro trabajo que nuestros equipos han desempeñado durante los últimos 12 meses”.
El CEO de ClearView Financial Media y editor de WealthBriefing, Stephen Harris, fue el primero en felicitar a todos los ganadores. Señaló “Estos premios reconocen a los mejores jugadores de la industria de clientes privados, con ‘independencia’, ‘integridad’ y ‘visión verdadera’ durante el proceso de evaluación –de tal forma que los premios son un verdadero reflejo de la industria de altos patrimonios. Estos premios tuvieron en cuenta únicamente las respuestas de los nuevos operadores a un número de cuestiones específicas, que fueron respondidas centrándose en la experiencia del cliente, no en las estadísticas de evolución cuantitativas. Esto constituye un diseño único, y creo, que atractivo”.
CC-BY-SA-2.0, FlickrPhoto: Cucho Schez. Listed Real Estate As An Income Investment
El papel que las inversiones inmobiliarias pueden jugar en el manejo de un portafolio está evolucionando y hay tres factores en particular que han sido fundamentales para determinar cómo este sector puede contribuir positivamente al ratio de rentabilidad ajustada al riesgo en los fondos orientados a rentas.
El primer factor es simplemente el tamaño. A finales de febrero de 2009 la capitalización de mercado free float del índice EPRA Global fue de 297.000 millones de dólares y el sector representó sólo el 1,1% del mercado de renta variable global. Si vamos directamente a mirar los datos de diciembre de 2015, la capitalización de mercado free float del índice EPRA Global Developed Market es ahora de 1.284.000 millones de dólares, lo que supone un aumento de cuatro veces y representa el 2,7% del mercado de renta variable global (fuente: EPRA). Como resultado, el universo de inversión de las acciones del sector inmobiliario se ha ampliado considerablemente.
En segundo lugar, el sector tiene una estructura única. Los fondos de inversiones inmobiliarias o REITs están obligados a distribuir un porcentaje alto y fijo (normalmente el 90%) de sus ingresos en forma de dividendos. Si cumplen con este requisito por lo general están exentos de pagar impuestos sobre los beneficios corporativos y de capital. Como resultado, los REITs combinan los beneficios de la liquidez de las acciones, con características atractivas de ingresos, y rentabilidades totales impulsadas por los factores propios del mercado inmobiliario. Los REITs representan alrededor del 70% del índice EPRA Globalyson las estructuras predominantes en Estados Unidos, Reino Unido, Europa y Australia.
En tercer lugar, la valoración. La rentabilidad del índice EPRA Global Developed REIT tendía a operar por debajo del índice Merrill Lynch Global Investment Grade Bond (de deuda con calificación investment grade) antes de la crisis financiera mundial. Desde entonces, lo normal ha sido lo contrario, y los REITs han cotizado con una prima, incluso después de la reciente oleada de ventas de bonos corporativos.
Sin embargo, una prima significativa sólo es una parte del cuadro de valoración. El otro componente es el nivel de crecimiento previsto en los valores de alquiler y de capital, lo que se traduce en dividendos y NAV en los niveles de la compañía. Es aquí donde vemos cómo las diferentes áreas geográficas, presentan diferentes trayectorias de crecimiento, debido sobre todo a las variaciones en la dinámica de oferta/demanda local. En este sentido, podemos dividir el sector en tres categorías; regiones con crecimiento de alquileres positivo, como Reino Unido, Estados Unidos, Japón y Australia; los que tienen perfiles de crecimiento más planos, como Europa y Canadá; y aquellos en los que el valor de los alquileres ha disminuido, como Hong Kong y Singapur.
Desde Investec, preferimos invertir en compañías con un rendimiento satisfactorio de partida, alquileres positivos y las proyecciones de crecimiento NAV, una cartera inmobiliaria de alta calidad, un equipo con experiencia y gestión de alta calidad, y un nivel de apalancamiento razonable, que en términos generales, creemos que son los que tienen préstamos por valor inferior al 40%.
Y ¿qué pasa con los tipos de interés?
Claramente, hay una preocupación por el impacto de la subida de los tipos de interés en las valoraciones del sector inmobiliario, y como resultado en las cotizaciones bursátiles. Sin embargo, hay una serie de razones por las que creemos que el impacto de los posibles problemas queden sin efecto. En primer lugar, debido a las valoraciones actuales del sector, que cuenta con una rentabilidad por dividendo en torno al 4,1%, y un descuento respecto al NAV del 9% aproximadamente que proporciona un razonable amortiguador frente a la subida de las rentabilidades de los bonos.
En segundo lugar, el aumento de los costes de financiación pueden tener un impacto limitado sobre los valores. A modo de ejemplo, en 2015 Blackstone recaudó 15.800 millones de dólares para su último inmobiliario.
En tercer lugar el nivel de crecimiento de los alquileres ya está incorporado en las previsiones. Creemos que el crecimiento del dividendo va a ser del 3,5% anual durante los próximos tres años. Por último, es probable que cualquier aumento de la rentabilidad de los bonos sea limitado por la baja inflación, el lento crecimiento del PIB y la cautela mantenida por los bancos centrales.
Creemos que la selección decompañías inmobiliarias cotizadas tiene un papel importante que desempeñar en los fondos centrados en las rentas, debido a una combinación de una prima de rentabilidad por dividendo, flujos de caja estables y atractivas perspectivas de crecimiento.
John Stopford es responsable de las estrategias multi-asset de Investec.
The European Fund and Asset Management Association (EFAMA) has published its latest quarterly statistical release which describes the trends in the European investment fund industry during the fourth quarter of 2015, and the results for the year 2015.
2015 was a record year for the European investment fund industry. Net sales of European investment funds rose to an all-time high of EUR 725 billion in 2015 and assets under management broke through to EUR 12 trillion thanks for a growth rate of 11%.
Further highlights on the developments in 2015 include:
Investment fund assets in Europe increased by 11.3% to EUR 12,581 billion. Overall, net assets of UCITS increased by 13% to EUR 8,168 billion. Net assets of AIF increased by 8.3% to EUR 4,412 billion.
Net sales of UCITS reached EUR 573 billion. Demand for UCITS reached its highest level ever in 2015.
Long-term UCITS enjoyed a record year. Long-term UCITS recorded net inflows of EUR 496 billion, compared to EUR 479 billion in 2014.
Multi-asset funds attracted the largest net inflows (EUR 236 billion) as the broad market, asset class and sector diversification offered by balanced funds attract investors.
Equity funds recorded the best year for net sales since 2000 (EUR 134 billion) as investors remained overall confident in the economic outlook for Europe and the willingness of the ECB maintain its accommodative monetary stance to support activity.
Bond funds recorded lower net sales (EUR 83 billion) compared to 2014 against the background of a reversal in bond yields and the associated uncertainty concerning the evolution of the bond market.
Money market funds saw a turnaround in net flows, ending the year with positive net inflows (EUR 77 billion) for the first time since 2008.
Net sales of AIF reached EUR 152 billion, compared to EUR 149 billion in 2014.
Bernard Delbecque, Director of Economics and Research at EFAMA, commented: “The growth of fund assets has been substantially positive across Europe, with a very few exceptions, confirming investor confidence in UCITS and AIF.”
CC-BY-SA-2.0, FlickrPhoto: Manuel. My Kingdom for a Hedge
Una vez más, la deuda pública de los países desarrollados ha demostrado su utilidad como una cobertura defensiva en las recientes turbulencias del mercado. Sin embargo, con los rendimientos en niveles históricamente bajos e incluso en terreno negativo en varios casos, la calidad de la protección ofrecida por esa exposición de cara al futuro es cada vez más dudosa. Los últimos movimientos sugieren que los participantes del mercado han abandonado cada vez más los bonos como instrumentos defensivos en las carteras, a favor de una ‘gestión del riesgo procíclica’ diseñada para proteger los rendimientos y amortiguar cualquier disminución en un entorno de mercado en general en aumento.
Últimamente, por ejemplo, hemos visto pelea por comprar coberturas para reducir o limitar el riesgo, como una medida de la volatilidad a corto plazo. Teniendo en cuenta el nivel pobre de liquidez, también ha habido una expansión significativa en el uso de proxies (diseñados para imitar el comportamiento de los instrumentos de cobertura tradicionales) para cubrir posiciones, algo que a su vez aumenta las correlaciones. A menudo, todo esto da lugar a ‘factores técnicos’ que dañan los fundamentales y contribuyen al sentimiento bajista.
Durante mucho tiempo, hemos defendido una visión más amplia del conjunto de oportunidades «defensivas» que hay en el mercado y nos hemos enfocado en las cualidades de la diversificación estructural, en lugar de depender excesivamente en el mercado a corto plazo para gestionar el riesgo. Si las leyes de disminución de la actitud defensiva se aplican a la deuda pública, ¿qué activo podría sustituirla?
Esta es una pregunta difícil, porque los bonos generalmente han pagado a los inversores un rendimiento fiable y en general siempre han estado inversamente correlacionados con los activos de crecimiento. Por desgracia, en gran medida esta era de oro pertenece al pasado. Obtener una cobertura es cada vez más costoso y menos fiable. El comportamiento de los activos defensivos más complejos es más difícil de predecir que las coberturas más convencionales. Las estrategias de protección contra la volatilidad son un buen ejemplo de esto, ya que pueden mostrar una alarmante tendencia a desviarse de los activos subyacentes.
A pesar de sureciente evolución, incluso una cobertura más convencional, como el oro, no paga rentas y puede ser costoso en términos de disposición de fondos.
Entonces, ¿qué otras opciones defensiva hay? Podríamos argumentar que las divisas han proporcionado durante mucho tiempo un conjunto de oportunidades defensivas fértiles. Por lo general las divisas de crédito o de naciones, como Suiza y Japón, han ofrecido refugio seguro (aunque el yen perdió este estatus bajo el mandato del primer ministro, Shinzo Abe, y el gobernador del Banco de Japón, Haruhiko Kuroda), y periódicamente el dólar refuerza su estatus de «moneda mundial». Naturalmente, tal y como nos recuerda la depreciación de la corona noruega hace poco, el contexto cíclico y las valoraciones siguen siendo consideraciones importantes, incluso aunque los fundamentos estructurales a largo plazo sean robustos.
Tomar posiciones cortas frente a las divisas con fundamentos macroeconómicos pobres o deteriorados, aumenta en gran medida el conjunto de oportunidades. El dólar australiano fue uno de los principales beneficiarios del auge de China y como consecuencia repuntó hasta niveles insostenibles. Vender esa divisas a futuro resultó ser una excelente cobertura contra la debilidad de los mercados emergentes en general, ya que ha caído un 37,7% desde sus máximos tocados en noviembre de 2011 hasta los niveles mínimos en los que cotiza recientemente. De forma más general, el principio de poner posiciones cortas en activos de crecimiento para crear defensas se puede aplicar más allá de las divisas.
En resumen, debemos tener en cuenta la gama completa de activos defensivos para mantener la diversificación estructural en las carteras en un momento en el tradicional ‘arsenal’ defensivo está cuestionado. Es cierto que este conjunto de oportunidades encontramos algunas de difícil acceso y que requieren habilidades técnicas y competencias adicionales, pero creemos que la alternativa de tener una dependencia inapropiada según el timing del mercado y los modelos de riesgo estándar es un error.
Philip Saunders es co-responsable de las estrategias multiactivo de Investec.