Pixabay CC0 Public Domain. Acciones globales, con dividendos o de estilo growth: las decisiones en renta variable de los inversores en el primer trimestre de 2020
La renta variable ha sido uno de los activos más atractivos para los inversores a finales de 2019 y a inicios de 2020 por dos motivos: la rentabilidad que ofrece y la mayor asignación al riesgo en las carteras de los inversores. En opinión de Schroders, este año hay menos margen para otra revalorización de la renta variable impulsada por la liquidez, pero no faltarán oportunidades.
“Es posible que se produzca una mayor expansión cuantitativa en EE.UU. y en otras regiones como los mercados emergentes, pero el impulso será menor. La relajación de la política monetaria no siempre conduce a una revalorización de los mercados, pero los tipos más bajos crean un fuerte incentivo para que los inversores se alejen del dinero en efectivo y busquen rendimientos en los activos de mayor riesgo”, explica Azad Zangana, economista y estratega senior de Schroders.
Según el escenario central de la gestora, es que, aunque no se produzca un impulso tan generoso de la liquidez en 2020 como en 2019, los bancos centrales todavía están lejos de subir los tipos e incluso podrían reducirlos aún más si la incipiente recuperación se viera amenazada. “En resumen, los inversores tendrán que buscar los temas que les permitan rentabilizar mejor sus inversiones en un entorno difícil. Sin embargo, esto puede ser suficiente para que la renta variable siga avanzando dada la escasa rentabilidad de los mercados de renta fija”, añade Zangana.
Como ocurría a finales de 2019, el principal punto de análisis de los inversores es si renta variable estadounidense o europea. Para una cartera global, los gestores señalan que ninguna de ellas se puede quedar fuera, al igual que cierto peso renta variable emergente. Pero la divergencia entre unas y otras firmas de inversión es si la renta variable estadounidense está muy cara para la rentabilidad que ofrece o si aún le queda recorrido a la bolsa en Estados Unidos, tras un año logrando récords.
En este sentido, desde Natixis IM señalan sobre el contexto económico un crecimiento estable en Estados Unidos y algo menos robusta para zona euro. “Dado el entorno actual, sobreponderamos la asignación en renta variable europea, aunque, a medio plazo, EE.UU. proporcionará mejores resultados y crecimiento. Además, con la incertidumbre y sensibilidad de los mercados a los acontecimientos de ahora, advierte de la posibilidad de que los activos de riesgo se muevan más alto y haya una mayor volatilidad y correcciones a corto plazo”, apunta Esty Dwek, Head of Global Market Strategy en Natixis IM Solutions.
Desde Capital Group prefieren no poner en el foco en la región geográfico, las oportunidades estarán en la calidad y el tipo de acciones. “Los nubarrones que acechan en el horizonte podrían acabar en tormenta, pero las compañías innovadoras y bien gestionadas saben adaptarse a las nuevas circunstancias y tienen potencial para crecer independientemente del entorno”, explican los gestores de Capital Group, Steve Watson y Joyce Gordon. Para ellos algunos de los sectores más interesantes son el de semiconductores, el sector de ropa y calzado deportivo y las ventas minoristas por internet.
Desde Capital Group también señalan como oportunidad a aquellas compañías con dividendos de mayor calidad. “Busco compañías que pueden actuar de forma defensiva cuando aumenta la volatilidad, pero que además pueden participar en periodos alcistas. Me decanto por compañías que reparten dividendos con sólidos flujos de caja libre y crecimiento de beneficios, que han sabido hacer frente a periodos bajistas. Entre el 20 septiembre 2018 y el 30 noviembre 2019, periodo muy volátil por la situación comercial, las compañías con calificación crediticia superior superaron a las de menor calificación. Entre las que reparten dividendos, aquellas con una calificación crediticia superior a la media superaron a las de menor calificación y a las compañías con dividendos reducidos o que no reparten dividendos. Trato de evitar aquellas compañías que han asumido una deuda excesiva. Las que se sitúan en el nivel inferior del espectro de grado de inversión pueden tener problemas para financiarse durante una recesión, lo que podría llevarlas a recortar sus dividendos”, afirma Joyce Gordon, gestora con cuatro décadas de experiencia.
Por último, 2020 también ha puesto sobre la mesa del inversión el debate de si el value ha perdido fuerza. Al menos para Europa, Bank of America anticipa más caídas en la renta variable europea value frente a growth. “Vemos un leve inconveniente adicional para el value europeo frente al growth: el value europeo frente al growth sigue de cerca a los bancos y la energía (los sectores más value) frente a los alimentos y bebidas (el sector más growth). Nos volvimos cautelosos con respecto al value frente al growth a fines de octubre”, añade en su último informe el banco.
Oliver Röder, courtesy photo. Erste AM nombra a Oliver Röder nuevo director de Ventas Institucionales
Oliver Röder ha sido nombrado director de ventas institucionales de Erste Asset Management, según ha explicado la firma en un breve comunicado. Desde este cargo, efectivo a partir del 1 de febrero, Röder será responsable de toda la actividad de ventas institucional de la gestora y tendrá bajo su dirección los equipos de Austria, Alemania e Internacional. Además, también estará a cargo de gestionar y coordinar las actividades correspondientes en los países de Europa Central y del Este. Reportará a Wolfgang Traindl, miembro de la Junta Directiva de Erste AM.
“Oliver Röder nos ha convencido con sus ideas estratégicas sobre cómo expandir aún más el negocio institucional de Erste AM.Su recorrido internacional y sus años de experiencia son un elemento crucial de éxito en este segmento del mercado, lo que es muy importante para nosotros”, subraya Heinz Bednar, consejero delegado de Erste AM.
Oliver Röder ha sido director de Erste AM en Alemania desde 2016, posición que seguirá manteniendo y, anteriormente, ha trabajado para otras firmas en ventas internacionales. Es licenciado en gestión bancaria y tiene un MBA por la Ashridge Management College. Además, es miembro de la Deutsche Vereinigung für Finanzanalyse und Asset Management (DVFA; Asociación Alemana de Análisis Financiero y Gestión de Activos) y Analista de Inversiones Certificado (CIIA).
Pixabay CC0 Public Domain. La pandemia del COVID-19 golpea el estatus del oro como activo refugio
Invesco ha reducido con carácter inmediato la comisión de gestión de su estrategia Invesco Physical Gold ETC, un fondo cotizado que invierte en oro con más de 7.600 millones de dólares de activos. Se trata de uno de los fondos más grandes de Europa entre los que invierten en ese metal precioso y también uno de los principales ETCs de Invesco en Europa.
Según ha explicado la gestora, con la nueva comisión de gestión fija del 0,19% anual y un coste de transacción de alrededor de 2 puntos básicos, este ETC ofrece a los inversores el producto de oro más competitivo en coste en Europa. “La demanda de oro ha crecido significativamente en 2019, con los bancos centrales siendo compradores netos de este metal precioso por décimo año consecutivo, mientras que las inversiones realizadas a través de fondos cotizados están en máximos históricos”, apuntan desde Invesco.
De hecho, en 2019 las compras de oro mediante ETCs alcanzaron los 19.300 millones de dólares estadounidenses a nivel global, que representan más de 400 toneladas de oro. Casi la mitad del volumen global, unos 8.800 millones de dólares, se centraron en productos cotizados en Europa. Laure Peyranne, directora de ETFs de Invesco para Iberia y Latinoamérica, afirma que “los inversores han invertido más en oro para tener a su alcance un colchón protector en el caso de que aumente la volatilidad de la renta variable. También se han visto influidos por la preocupación por la ralentización del crecimiento económico y los riesgos geopolíticos. Además, el oro es aún más atractivo en un entorno de tipos de interés bajos o negativos. Desde hace una década, nuestro ETC de oro físico ha ofrecido a los inversores un modo fácil y eficiente de tener exposición al oro… y ahora incluso a un coste menor.”
El producto está diseñado para replicar el comportamiento del precio del oro menos la comisión fija anual. Según matiza la gestora respecto a este producto, las inversiones se utilizan para comprar lingotes de oro físico, que se depositan en una cámara acorazada de JP Morgan Chase Bank en Londres. “Invertir en un ETC de oro es mucho más eficiente en coste y práctico que comprar y mantener oro físico, que implica también transporte, depósito y seguros”, concluye.
Pixabay CC0 Public Domain. Los bajos tipos de interés y el escaso crecimiento comprimen el ciclo económico
Las economías occidentales se ven actualmente bajo la influencia de la “japonización”. Esto es, según Adrien Pichoud, economista jefe y director de total return de SYZ Asset Management, la persistente situación económica de escaso crecimiento, inflación reducida y tipos de interés bajos que la economía japonesa ha soportado durante casi tres décadas.
Hasta ahora los inversores han estado condicionados a esperar ciclos empresariales relativamente largos que alternaban fuertes recuperaciones y marcadas caídas. En este contexto, a medida que las economías iban expandiéndose, los bancos centrales han ido ajustando gradualmente las condiciones crediticias para evitar las presiones inflacionistas y, finalmente, nos sumieron en recesiones antes de que volviera a reanudarse el ciclo. “La ‘japonización’ marca una ruptura con este conocido modelo que se ha desarrollado durante varias décadas”, afirma Pichoud.
A raíz de este proceso, se plantea un modelo con ciclos empresariales más cortos y atenuados, de unos pocos trimestres o años como máximo. “Ante el acortamiento y la menor magnitud de los ciclos, los inversores tendrán que adaptarse a señales más débiles o confusas por parte de los indicadores tradicionales”, advierte el gestor. Ya hemos visto alguna de estas señales más débiles como, por ejemplo, la última recesión manufacturera en EE.UU. o la breve inversión de la curva de tipos.
Además, Pichoud advierte de que, a corto plazo, los tipos de interés pueden ser menos eficientes en la gestión de los altibajos. Tanto particulares como empresas muestran elevados volúmenes de endeudamiento, lo que limita su capacidad y su predisposición a ampliarlo, por ello, cada recorte sucesivo de tipos a manos de los bancos centrales será menos efectivo.
No obstante, en el plano positivo, las presiones inflacionistas continúan siendo mínimas, y los tipos de interés están bajos, pero estables. Según el gestor, los bancos centrales no se tornarán mucho más acomodaticios, pero sí pueden mantener su posición actual, al menos durante todo 2020, ya que continúan por debajo de sus objetivos de inflación. “Esto implica un entorno duradero de tipos bajos y la necesidad para los inversores de ir más lejos en su búsqueda de rendimientos, así como un enfoque de inversión más táctico respecto de los miniciclos, que pueden medirse en meses en lugar de en años”, asegura Pichoud.
Por otro lado, los mercados seguirán muy de cerca las relaciones entre Estados Unidos y China. Las tensiones se concentran principalmente en las intenciones políticas, perjudicadas por la política interna. “Cualquier deterioro grave en esta relación mermaría el crecimiento estadounidense y posiblemente desencadenaría una nueva reacción de la Reserva Federal para evitar la apreciación del dólar”, subraya el gestor. En consecuencia, y según los datos de SYZ Management, solo uno de los dos extremos (una recesión mundial o un repentino auge del crecimiento en EE. UU.) llevaría a la Reserva Federal a ajustar tipos de nuevo en 2020. Sin embargo, la gestora no considera ninguna de estas hipótesis probable de cara al año que viene.
Como consecuencia, “la normalización de la política monetaria no llegará pronto, ni siquiera si el crecimiento mundial prospera”, afirma Pichoud que descarta la subida de tipos por parte del Banco Central Europeo o de la Reserva Federal. Por lo tanto, los tipos monetarios reales continuarán en terreno negativo, también en dólares estadounidenses. Por ello, “es probable que el oro conserve cierto valor, si no por unas rentabilidades interesantes, al menos en calidad de elemento de diversificación en las carteras, sobre todo si asistimos a un mayor uso de la política fiscal”, apunta el gestor.
En cuanto a las divisas, desde SYZ Management descartan la posibilidad de que el dólar se aprecie mucho más. Desde 2014 ha estado respaldado por un creciente diferencial de tipos con el resto del mundo, que ahora esperan que se estabilice. Por tanto, “aunque no hay razones para priorizar notablemente el euro o el franco suizo, pensamos que los inversores ya no deberían esperar seguir obteniendo ganancias en el dólar estadounidense”, declaran desde la gestora. Esto también implica que los activos emergentes ya no se enfrentarán al obstáculo de un dólar fuerte en 2020.
En línea con su misión de acompañar y asesorar a sus clientes en materia financiera para la mejor toma de decisiones, SURA Inversiones presentó el nuevo Fondo SURA Renta Dólares, un producto abierto y nominado en dólares autorizado por el Banco Central del Uruguay, diseñado para personas con un horizonte de inversión de mediano y largo plazo y tolerancia media al riesgo.
Creado y gestionado por AFISA SURA, la administradora de fondos de inversión de SURA Asset Management Uruguay y distribuido por Corredor de Bolsa SURA, el objetivo de este nuevo fondo es aumentar el capital del cliente a través de la inversión en títulos de renta fija emitidos principalmente por emisores del continente americano, procurando, asimismo, contar con un adecuado nivel de liquidez y sin mínimos de inversión.
“En SURA conocemos, asesoramos y recomendamos activamente a nuestros clientes para que puedan alcanzar sus objetivos financieros. Por eso lanzamos el Fondo SURA Renta Dólares, un producto pensado en el contexto internacional que te permite acceder a un portafolio diversificado de instrumentos financieros de renta fija principalmente emitidos por emisores de todo el continente americano”, explicó Gerardo Ameigenda, vicepresidente de Wealth & Asset Management, de SURA Asset Management Uruguay.
Centrado en la inversión de mercados emergentes, el nuevo fondo ofrece una gran oportunidad para rentabilizar el patrimonio. A través de una cartera compuesta por instrumentos de renta fija que participan en el mercado internacional, brinda una adecuada liquidez, permitiendo invertir un mínimo de 60% en activos de renta fija americanos, ya sea Estados, gobiernos o compañías, y un máximo de 100%.
“La estrategia de inversión está a cargo de un equipo de expertos con amplia experiencia y trayectoria en el mercado, que invertirá equilibradamente entre otras opciones en: Bonos Soberanos y Corporativos, Fondos de Inversión Internacionales y ETFs, alcanzando un portafolio flexible y adaptable a la visión del mercado, gestionado por los mejores profesionales”, agregó Ameigenda.
El nuevo fondo ofrece la oportunidad de invertir en forma diversificada con la tranquilidad de saber que sus inversiones serán monitoreadas a diario y modificadas según la visión de los mercados. Asimismo, se añadirá la posibilidad de poder realizar depósitos y retiros, y seguir de forma online la evolución de la cuenta de manera sencilla.
SURA Asset Management es una Compañía experta en pensiones, ahorro e inversión con presencia en Chile, México, Colombia, Perú, El Salvador y Uruguay. Es una filial de Grupo SURA, con otros accionistas de participación minoritaria. A junio de 2019, SURA Asset Management cuenta con 143 billones de dólares en activos bajo administración pertenecientes a cerca de 20, 2 millones de clientes en la región.
* Clientes y AUM incluyen a AFP Protección en Colombia y AFP Crecer en El Salvador, aunque no son compañías controladas, SURA AM posee una participación relevante.
Foto: OneDigital . OneDigital adquiere a Resources Investment Advisors, una RIA de 45.000 millones
Uno de los brokers de seguros más grandes del país se está expandiendo al mercado de planes de jubilación con una de las adquisiciones más importantes del año. OneDigital ha cerrado un acuerdo para comprar Resources Investment Advisors con sede en Overland Park, Kan., un RIA con 45.000 millones de dólares en activos bajo administración.
Según anunciaron las compañías el martes, el acuerdo también incluye a numerosas firmas asesoras de planes de jubilación como Bukaty, 401k Advisors Intermountain, Cafaro Greenleaf, Capstone Advisory Group, Chepenik Financial, SHA Retirement Group, Strategic Retirement Group y Teros Advisors, así como la operación en San Diego de Fulcrum Partners y tres operaciones en California de Retirement Benefits Group, las cuales gradualmente pasarán a la marca OneDigital.
Los términos del acuerdo, que según OneDigital tardó 18 meses en negociarse, no fueron revelados.
La adquisición se produce a raíz de la demanda emergente de las empresas de servicios integrales que aborden el bienestar físico y financiero de sus empleados, dijo Mike Sullivan, cofundador de OneDigital. “Los empleadores encuentran cada vez más competitivo atraer y retener talento. Están buscando vitalidad en una fuerza laboral… El bienestar físico y financiero es muy importante para la mayoría de nuestros clientes».
Actualmente, Resources tiene cerca de 30 empleados, todos los cuales serán retenidos.
Pixabay CC0 Public Domain. Enero 2020 abre el año con rentabilidades positivas para los fondos de pensiones chilenos
Pese a la volatilidad que siguen mostrando los mercados financieros local e internacional, los fondos de pensiones chilenos comenzaron este 2020 con el pie derecho, en línea con los buenos resultados obtenidos al cierre del año pasado.
De acuerdo a cifras oficiales, en enero pasado el Fondo A (más riesgoso) lideró con un retorno real de 4,0% durante el mes, seguido de cerca por el Fondo B (riesgoso), con un avance de 3,07% real.
Según los datos con que se elabora el informe de la Superintendencia de Pensiones (SP), en el primer mes de 2020 el Fondo C (intermedio) cerró con una ganancia real mensual de 2,10%, mientras que los fondos D (conservador) y E (más conservador) anotaron rentabilidades de 1,19% y 0,57%, respectivamente.
Tras el desempeño antes descrito, los ahorros previsionales chilenos totalizaban activos por 205.814 millones de dólares al 31 de enero, de acuerdo al reporte de la SP.
El buen inicio de año también llevó el desempeño en 12 meses a nuevos registros históricos. Y es que mientras el Fondo A obtuvo una rentabilidad anualizada de 18,26% real, durante el período analizado los fondos B y C anotaron retornos de 15,39% y 15,04%, respectivamente.
Un dinamismo que replicaron los fondos D y E: el primero, con una ganancia real de 12,72% en febrero 2019-enero 2020, y el segundo, con un avance de 8,73%.
El análisis de los datos da cuenta que la rentabilidad obtenida en el mes de enero de 2020 por los fondos tipo A, B y C se explica principalmente por las ganancias generadas por las inversiones en instrumentos extranjeros. Dicho retorno, sin embargo, fue parcialmente contrarrestado por las pérdidas de las inversiones en acciones locales.
Pese a que se observan resultados mixtos en los mercados internacionales, las inversiones en instrumentos extranjeros se vieron impactadas por la depreciación del peso chileno respecto de las principales monedas extranjeras, lo que afectó positivamente a las posiciones sin cobertura cambiaria, señala el reporte de la SP.
Tómese como referencia la rentabilidad en dólares de los índices MSCI mundial y MSCI emergente, con una alza de 0,20% y una caída de 4,08%, respectivamente, además de la apreciación de 5,85% de la divisa norteamericana y una disminución de 2,55% en el retorno mensual de los títulos accionarios locales medidos por el IPSA.
En tanto, el desempeño mensual de los fondos tipo D y E se debe principalmente al retorno positivo de las inversiones en instrumentos extranjeros y títulos de deuda local.
Pixabay CC0 Public Domain. ¿Enfriará el coronavirus las perspectivas del crecimiento económico global para este año?
La crisis del brote de coronavirus iniciado en China continúa contagiando al mercado. La semana comenzaba con caídas en las bolsas asiáticas de en torno al 8% y con una inyección de liquidez por parte del Gobierno chino de 1,2 billones de yuanes, para frenar las caídas del mercado. Por ahora, desde que se confirmó la infección entre humanos por el brote de Wuhan el 20 de enero, el índice MSCI AC Asia Pacífico ex Japón bajó casi un 3%.
Aunque la situación parece más estable, en la apertura europea hubo rebotes de los futuros también americanos (S&P +0,45% 3238 pts) y los resultados empresariales de esta semana (más de 100 empresas del S&P500 publican esta semana) puedan ayudar a dar apoyo al mercado, los expertos consideran que la incertidumbre continuará. Los analistas comienzan a tener una estimación más clara de cuál será su impacto. Tomando como base otras crisis (el SARS entre 2002-2003, la gripe porcina entre 2009-1010, y la gripe aviar en el invierno y primavera de 2014, 2015 y 2017), los datos sugieren que el impacto económico de las enfermedades infecciosas tiende a durar de uno a dos trimestres. «Desde que aumentaron las noticias acerca del virus, alrededor del 17 de enero, los valores de los mercados emergentes han bajado alrededor de un 4%, de acuerdo con el MSCI Emerging Markets IMI. Los valores chinos han descendido más de un 6%, y los tailandeses un 7%. Por el contrario, el MSCI World Index descendió un 1,3% durante el periodo comprendido hasta el 29 de enero», señalan desde Capital Group.
En opinión de Fabrice Jacob, consejero delegado de JK Capital Management, filial de La Française, el impacto a corto plazo en la economía china podría ser mucho más grave de lo que fue en 2003, simplemente porque todo el país está literalmente paralizado por las medidas adoptadas por el Gobierno a todos los niveles. “Las vacaciones por el Año Nuevo chino se han extendido diez días (hasta ahora) en 14 provincias que son responsables del 69% del PIB de China. Con el SARS nunca se tomaron medidas similares que afectaran a la economía. Por ello, podemos prever que el crecimiento del PIB se verá afectado no sólo por una fuerte caída del consumo, sino también por una fuerte caída de la producción. Si esta prolongación de las vacaciones continuase, sería razonable esperar un efecto dominó en todos los países que dependen en gran medida de las importaciones de China. Como resultado, esperamos que la caída del crecimiento del PIB en el primer trimestre de 2020 sea muy significativa. Las cifras de PMI manufacturero de febrero serán atroces”, señala Jacob.
Para Esty Dwek, responsable de estrategia de mercados globales en Natixis Investment Manager Solutions, los mercados hasta ahora han mostrado cierta resistencia, pero la volatilidad ha subido y permanecerá elevada durante un tiempo y hemos decidido reducir riesgo. “Ahora mismo es imposible saber con exactitud la extensión del virus de Wuhan y sus consecuencias económicas, más allá de un brusco impacto en el PIB del primer trimestre, especialmente en China, donde esperamos que el efecto en los datos de actividad sea significativo”, explica.
Dwek subraya que los datos de actividad económica mundial habían señalado últimamente una “moderada recuperación, gracias a un telón de fondo global propicio, después de que la Fase 1 del acuerdo entre China y EE.UU. fuera más amplia de lo esperado, reduciendo los riesgos de una reescalada”. Sin embargo, la experta subraya que “la epidemia de Wuhan podría paralizar este momentum que estaba ganando la economía global”. Esty Dwek concreta que, aunque Natixis IM todavía espera “una recuperación en los segmentos más cíclicos de la economía global, la desaceleración estructural sugiere que el crecimiento no remontará en 2020”.
Entre los aspectos positivos, la estratega destaca la política acomodaticia de los bancos centrales, la resistencia de los consumidores, la fortaleza del mercado laboral y residencial en EE UU y los beneficios que obtendrá Europa de la tregua comercial, si bien “no se puede descartar una disputa entre EE UU y la UE”, advierte Dwek.
En todo caso, Dwek mantiene una visión “constructiva” sobre la economía y los mercados. “Las Bolsas deberían continuar haciéndolo bien y mantenemos nuestra asignación de soprenderar sobre la renta fija. Las valoraciones no son baratas, pero no están excesivamente ajustadas y son menos caras que la renta fija”, concluye la estratega de Natixis IM , que sobrepondera a corto plazo los activos europeos frente a la renta variable estadounidense
Los primeros perjudicados
Una de las decisiones que más se ha notado en el mercado es la reducción en 600.000 barriles diarios en la producción de petróleo de la principal petrolera del país, lo que augura una fuerte caída de la demanda. Esto ha provocado que el barril de brent caiga, alcanzando los mínimos de diciembre de 2018, y que la OPEP se esté planteando un recorte en su producción.
“Los sectores más afectados son el de los viajes, el del entretenimiento y el de las compras, mientras que la producción industrial podría verse perjudicada si el brote se extiende. Dicho esto, el impacto en el comercio y la inversión en activos fijos ha sido menos visible en episodios anteriores. Cabe mencionar que en aquel momento se mantuvo una posición crediticia poco firme en 2003 y en 2009-2010, lo que contribuyó en parte a atenuar los efectos económicos de las epidemias”, explican des Aberdeen Standard Investments.
El efecto del coronavirus parece que también se ha extendido a las divisas, según argumentan los analistas de Monex Europe. “El temor que causa la propagación del coronavirus en China y las crecientes expectativas de un potencial impacto devastador sobre la economía global, refuerzan al dólar y otros activos refugio como clase de activos”, apuntan en su último informe.
Según el análisis que hace Gilles Moëc, Group Chief Economist de AXA IM, la crisis actual está afectando más consumo doméstico chino que a cualquier otro componente del PIB, lo que debería reducir los efectos secundarios en el resto mundo. “Sin embargo, si la crisis del coronavirus no entra rápidamente bajo control, será la actividad de producción e inversión la que se verá afectada, con ramificaciones profundas para la producción mundial. Probablemente ya tengamos que reescribir el resultado del PIB de China para el primer trimestre, pero la cuestión es si la crisis persistirá durante todo el año”, advierte Moëc.
De momento, la mayoría de las investigaciones apuntan a que las ventas se recuperarán en primavera, si se normalizan las restricciones de viajes. La idea de los analistas es que el consumo perdido se pondrá al día rápidamente. “Si mantenemos por ahora como hipótesis fundamental una mera réplica del SARS (un impacto de aproximadamente el 1% del PIB chino), lo que ya parece una hipótesis conservadora en esta etapa, el impacto ya sería similar al que estimamos el año pasado como efecto de la guerra comercial con EE UU (0,9%). Debemos considerar las ramificaciones a otros riesgos globales, en particular a la guerra comercial. De hecho, si duplicar las compras de productos estadounidenses ya era desalentador para Beijing, según el acuerdo alcanzado con la Casa Blanca, será ahora aún más difícil; adicionalmente, la debilidad del Renminbi podría complicar la relación con EE.UU., que podría verse tentado de aprovechar la debilidad china para imponer nuevas concesiones”, añade el portavoz de AXA IM.
Evan Brown, responsable de estrategias macro de UBS AM, hace una lectura más optimista de los mercados y considera que si bien es probable que el coronavirus afecte a ese impulso a corto plazo, no creemos que lo haga descarrilar. “En nuestra opinión, hay más detrás de este rebote de lo que los mercados están descontando actualmente. El crecimiento de la demanda global parece apoyarse en el impacto retardado de la agresiva política monetaria acomodaticia en los mercados desarrollados y emergentes en 2019. Este tipo de movimiento brusco hacia una política acomodaticia ha facilitado históricamente las condiciones crediticias, sentando las bases para una recuperación económica en forma de V. Los bancos centrales seguirán siendo flexibles en 2020. Creemos que hay margen para que la política monetaria del mercado monetario en su conjunto proporcione un mayor estímulo en caso de que sea necesario”, argumenta Brown.
La conclusión a este análisis la pone Paul O’Connor, director del equipo multiactivos de Janus Henderson. En su opinión, resulta poco probable que la confianza del mercado financiero sobre este tema mejore de forma sostenible hasta que haya ciertas pruebas de que la letalidad del coronavirus está quedando contenida. «La caída relacionada con el virus en la mayoría de los activos de riesgo ha sido relativamente moderada hasta la fecha, en comparación con los marcados repuntes experimentados durante los últimos cuatro meses. Si eliminamos de la ecuación los desenlaces biológicos catastróficos, consideramos que el brote de coronavirus tiene potencial para generar oportunidades de compra en los activos de riesgo. No obstante, parece ser aún demasiado pronto para restablecer ya las posiciones, en vista de lo moderada que ha sido la corrección del mercado, el dinamismo de la progresión del virus y las numerosas incertidumbres biológicas que rodean a esta epidemia”, afirma.
¿Qué hace el inversor?
Después de escuchar la visión y valoración de las principales firmas de inversión, la pregunta es inevitable: ¿Qué deben de hacer los inversores? Según Carmignac, la primera «tentación» para el inversor es buscar activos refugio, pero no por la incertidumbre sino por lo complicado que es cuantificar el impacto que tendrá esta crisis sanitaria en los activos y en la economía global.
«La cuestión para el inversor en renta variable no se reduce a cómo reaccionar a la información que le llegará cada día sobre la progresión de la epidemia, sino que obedece a una situación compleja de abordar, que amenaza con arrebatar a los mercados bursátiles, al menos temporalmente, dos de sus tres catalizadores de rentabilidad. Parece razonable responder aprovechando cualquier retroceso para reforzar las posiciones en empresas con un crecimiento menos vulnerable al ciclo económico mundial y recoger beneficios de manera cautelar en las demás», sostiene la firma en su último análisis.
Tom Ross, miembro del equipo de Crédito Corporativo Global de Janus Henderson Investors. Tom Ross, miembro del equipo de Crédito Corporativo Global de Janus Henderson Investors
Tom Ross, gestor de carteras de deuda corporativa en Janus Henderson Investors, analiza en esta entrevista las perspectivas para los bonos de alta rentabilidad (high yield) en 2020.
Pregunta: ¿Cuál es el principal factor que estáis vigilando en Janus Henderson en 2020?
Respuesta: Para nosotros, una cuestión fundamental es si en 2020 asistiremos a una compresión de los diferenciales (estrechamiento) que pueda hacer despuntar en términos relativos a los bonos de alta rentabilidad con diferenciales más amplios. Actualmente mantenemos una posición neutral en beta, conformada por una pequeña sobreponderación en bonos que clasificamos como de «elevado potencial de rentabilidad», y una infraponderación en posiciones de «rendimientos ‘core’ estables». Si los datos de crecimiento global mejoraran, o si se despejaran algunas de las incertidumbres geopolíticas que actualmente afectan a los mercados, podríamos plantearnos incrementar la sobreponderación en posiciones con mayor potencial de rentabilidad, así como adquirir ideas coyunturales preferentes, principalmente a través de emisores cuyos diferenciales de crédito se han ampliado en 2019. Dicho esto, cualquier incorporación de riesgo se llevará a cabo de forma selectiva y con cuidado de no añadir demasiada exposición a áreas cíclicas, habida cuenta de la fragilidad de la economía global y de los riesgos inherentes en los bonos con mayor apalancamiento, como los del sector energético de Estados Unidos, que actualmente presenta algunos de los mayores diferenciales. Existe una leve esperanza de que la ralentización en el crecimiento económico podría estar tocando fondo, pero hasta que no veamos más datos en los próximos meses no podremos determinar si la economía mundial ha alcanzado un punto de inflexión.
P: ¿Cuál es el mayor riesgo existente para la deuda high yield?
R: El mercado afrontará múltiples obstáculos en 2020, y los mayores probablemente serán de carácter político. Pese a que las elecciones generales en el Reino Unido han deparado un Gobierno más favorable al mercado y una reducción de la incertidumbre, la incógnita sobre la forma del acuerdo comercial futuro entre Reino Unido y la Unión Europea persiste y podría generar volatilidad en el transcurso de 2020.
En Estados Unidos, el período previo a las elecciones presidenciales constituye asimismo un riesgo potencial, ya que los demócratas están presentando a candidatos con políticas que podrían tener afectar seriamente a algunos sectores, como la prohibición de la fracturación hidráulica (fracking) en tierras de propiedad federal en EE.UU. (en torno a un 11 % del sector de alta rentabilidad global está conformado por emisores vinculados a la energía)(1), o los cambios en la asistencia sanitaria o el sistema de precios de los medicamentos que podrían afectar a las empresas sanitarias y farmacéuticas. Aunque saludamos el acuerdo comercial de fase uno entre EE.UU. y China, que se ha firmado oficialmente en enero, también somos conscientes de que el presidente Trump está decidido a extraer crédito político del acuerdo, por lo que probablemente habrá más volatilidad en torno a esta cuestión durante la campaña electoral.
P: ¿Dónde aprecian oportunidades en 2020?
R: Consideramos que los inversores seguirán buscando rentabilidad en 2020, ya que anticipamos que la mayoría de los principales bancos centrales mantengan bajos los tipos, y que algunos llevarán a cabo medidas de expansión cuantitativa. El Banco Central Europeo está comprometido con su programa de compra de bonos corporativos, que en la práctica crea compradores insensibles a los precios de los bonos corporativos con grado de inversión y propiciará probablemente un efecto de «goteo» sobre la demanda de bonos de alta rentabilidad. Dado que las rentabilidades se mantendrán en niveles reducidos, las compañías deberían poder refinanciarse a bajo coste, por lo que esperamos que los impagos se mantengan contenidos respecto a sus niveles históricos, si bien se elevarán ligeramente debido a la persistente debilidad del crecimiento global.
Por regiones, estimamos que Europa presenta el mayor atractivo en términos ajustados al riesgo y probablemente resultará favorecida técnicamente por el programa de compra de bonos corporativos del Banco Central Europeo. Por sectores, priorizamos el inmobiliario, ya que sus bonos están respaldados por activos reales y ofrecen unos rendimientos relativamente sólidos, a lo que se añade que sus fundamentales continúan mejorando. La debilidad relativa en las emisiones corporativas de los mercados emergentes durante 2019 ha generado una oportunidad para añadir riesgo también en esa región.
Los diferenciales de alta rentabilidad globales (2) cerraron 2019 en niveles próximos a sus medias de tres años, por lo que existe cierto margen de estrechamiento, si bien se encuentran por debajo de sus medias de cinco o diez años. Los diferenciales podrían estrecharse si la economía mundial mejorara, impulsando así la confianza del mercado sobre los beneficios y los flujos de caja.
(1) Fuente: Bloomberg, ICE BofAML Global High Yield Index; ponderaciones de los integrantes a 31 de diciembre de 2019.
(2) Fuente: Bloomberg, ICE BofAML US High Yield Index, diferencial «spread to worst» frente a bonos del Estado, a 31 de diciembre de 2019. Las rentabilidades pasadas no son indicativas de rentabilidades futuras.
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Pixabay CC0 Public Domain. Amundi ETF superó los 50.000 millones de euros en 2019 y duplicó los nuevos activos netos
Amundi ETF ha superado el umbral de 50.000 millones de euros en 2019 y cerrado el año con 55.000 millones de euros en activos bajo gestión -cifra que excluye las cifras de las joint ventures-. La gestora ha destacado que, en medio del rápido crecimiento del mercado europeo de ETFs en los últimos tres años, han sobrepasado la tasa de crecimiento del mercado y “alcanzado la tasa de crecimiento más elevada entre los cinco principales proveedores europeos de ETFs durante este período”.
Según los datos de la gestora, se han captado 8.000 millones de euros en nuevos activos netos, el doble que el año anterior. “El sólido flujo de entradas ha permitido a Amundi mantener su posición entre los principales proveedores del mercado europeo de ETFs, situándose en la cuarta posición por nuevos activos netos en 2019 y consolidando su cuota de mercado en términos de activos bajo gestión”, apunta la gestora en su comunicado.
En un contexto de mercado caracterizado por dinámicas cambiantes, los flujos a la gama de Amundi ETF ha estado diversificados en múltiples clases de activos. Según Amundi ETF su oferta “ha demostrado estar especialmente adaptada para responder a los desafíos tanto de los inversores estratégicos /largo plazo, como de los más tácticos”.
La firma explica que un clave de su éxito durante el año pasado fue saber “adaptarse para satisfacer las diversas necesidades de sus clientes, tanto de los institucionales o los gestores de fondos, como la creciente demandada de soluciones basadas en ETFs de los distribuidores”. En términos de cobertura geográfica, la plataforma ha continuado acelerando su presencia en Europa, así como en Asia y América Latina, donde la franquicia Amundi UCITS ETF “satisface la creciente demanda de los inversores”, matiza la gestora.
Según ha declarado Fannie Wurtz, director de Amundi ETF, Indexing and Smart Beta: “En un entorno de mercado altamente dinámico, estos sólidos resultados demuestran la continua confianza de los inversores en Amundi ETF y confirman nuestra posición como proveedor líder de ETF. Estamos comprometidos a largo plazo para ofrecer una amplia gama de ETF, innovadores y con costes competitivos a nuestros clientes, tanto institucionales como distribuidores”.
Por último, durante 2019, Amundi ha ampliado su gama de ETFs para adaptarla a las diferentes condiciones del mercado, clases de activos, sectores y temas. Algunos de los lanzamientos han sido:
Amundi Prime ETFs: La gama core de ETF más barata de Europa, que ofrece exposición tanto a la renta variable como a la renta fija. La gama superó los 1.000 millones de euros en activos bajo gestión, lo que demuestra su efectividad para responder a la demanda de los inversores de herramientas de inversión a bajo coste, simples y transparentes.
ETF de Inversión Socialmente Responsable y Low Carbon: Amundi ha seguido aumentando su gama de ETF de Inversión Socialmente Responsable y Low Carbon, que actualmente incluye siete ETF de Renta Variable y Renta Fija, que replican los índices MSCI SRI y Bloomberg Barclays y un ETF de Low Carbon. Estos ETF han captado más de 1.200 millones de euros de nuevos activos netos en 2019, lo que representa el 15% de las entradas durante el año.
Un ETC de oro: Además de su gama ETF, Amundi lanzó un ETC de oro en mayo de 2019, diseñado para ofrecer a los inversores exposición a los precios del oro con un coste eficiente. Este nuevo producto ha tenido mucho éxito, atrayendo cerca de 1.000 millones de euros de activos bajo gestión y situando los activos totales bajo gestión de la gama de ETF y ETC de Amundi cerca de los 56.000 millones de euros.