Pixabay CC0 Public Domain. Crisis del COVID-19: ¿veremos una recuparción en forma de V?
Con el COVID-19 aparentemente inactivo en partes de Asia y Europa, las esperanzas de estar al borde de una recuperación en forma de V reaparecen. Sin embargo, a nivel global, el virus sigue propagándose a un ritmo de velocidad de crucero. En este sentido, Stephen King, asesor económico senior de HSBC, advierte de los riesgos que amenazan aún esta recuperación.
“Si bien han surgido informes alentadores en relación con las vacunas y los tratamientos antivirales, ningún país ha establecido aún la inmunidad de grupo”, añade King. Además, pese a que el fin del confinamiento haya motivado una actividad económica más fuerte, “ningún país ha disfrutado una vuelta a la normalidad”, destaca el experto. Los niveles de actividad, tanto en términos reales como nominales, corren el peligro de ser persistentemente más bajos de lo que se preveía antes de la llegada de COVID-19, según la entidad. Como consecuencia, los los niveles de deuda existentes amenazan ahora con ser persistentemente demasiado altos.
“En circunstancias normales, la respuesta más sencilla es reducir los tipos de interés. Una mayor proporción de la deuda con respecto a los ingresos se compensa entonces con menores costes de servicio de la deuda”, explica King. Sin embargo, al igual que en Japón a mediados de los años noventa, los tipos de interés ya están en el límite inferior cero (o marginalmente por debajo).
Esto supone dos implicaciones clave. En primer lugar, aquellos que ahora se enfrentan a una depresión permanente de los ingresos estarán más dispuestos a pagar las deudas existentes que a asumir otras nuevas. Asimismo, aquellos que han prestado dinero están teniendo que prepararse para un aumento sostenido de los préstamos improductivos. “En estas circunstancias, el sistema financiero está en peligro de anquilosarse”, advierte King.
Según el asesor de HSBC, una forma de evitar esto consiste en impulsar la tasa de crecimiento del PIB nominal mediante el lanzamiento del denominado dinero del helicóptero. “Sin embargo, los datos disponibles hasta la fecha (ligados en parte a la forma en que los mercados han reaccionado al apoyo del banco central para obtener más préstamos del gobierno) sugieren que la liquidez adicional sólo puede servir para aumentar el valor de los activos financieros de riesgo incluso cuando el sistema financiero en general se estanca”, destaca King.
Una mejor apuesta, según el experto, y que ya se está discutiendo en Europa, es la creación de un banco malo en un intento de devolver la salud al sistema financiero lo antes posible.
Pixabay CC0 Public Domain. IASE se presenta en España como principal certificador internacional en ESG
Morgan Stanley Investment Management ha anunciado el lanzamiento de dos fondos de renta fija sostenible. Se trata de las estrategias MS INVF Sustainable European Corporate Bond Fund y MS INVF Sustainable European Strategic Bond Fund. Según explica la gestora, estos lanzamientos responden a su intención de ampliar su oferta de ISR ante la creciente demanda de productos de inversión por parte de los inversores con un enfoque en objetivos sostenibles.
Gestionado por el equipo global de renta fija, los fondos emplearán un enfoque activo para la inversión sostenible, al tiempo que se procurará generar retornos en consonancia con las estrategias existentes. También tendrán el objetivo de hacer una contribución positiva en temas clave de sostenibilidad, como la descarbonización, los Objetivos de Desarrollo Sostenible de Naciones Unidas, maximizando la asignación en bonos verdes y otros bonos etiquetados como sostenibles.
«Estos dos nuevos fondos son una evolución de los fondos existentes líderes en el mercado. Hemos escuchado las sugerencias de nuestros clientes y hemos recurrido a la experiencia de todo nuestro equipo para crear productos de inversión sostenible a medida y de última generación», apunta Brian Weinstein, responsable global de renta fija de Morgan Stanley Investment Management.
El equipo de gestión seguirá un enfoque multidimensional diferenciado que combina sus técnicas de integración de factores medioambientales, sociales y de gobernanza (ESG) para emisores individuales, con objetivos de sostenibilidad mediante un enfoque top down. Los fondos excluirán a los emisores de sectores controvertidos, como armas, tabaco y carbón, y con prácticas comerciales pobres, desde el punto de vista de sostenibilidad. También se centrará en los emisores cuyas puntuaciones ESG se encuentran dentro del 80% superior en cada sector, basado en nuestra metodología propia de puntuación ESG. Ambos fondos están diseñados para ser menos intensivos en carbono que sus respectivos índices, con el objetivo de invertir al menos el 10% de la cartera en bonos verdes y en otros con la etiqueta de bonos sostenibles.
El fondo MS INVF Sustainable European Corporate Bond se centrará exclusivamente en crédito corporativo, mientras que el Fondo MS INVF Sustainable European Strategic Bond Fund invertirá en todo el amplio universo de renta fija, incluyendo deuda soberana de países desarrollados y emergentes, bonos supranacionales y emitidos por agencias, grado de inversión y crédito corporativo de alto rendimiento, así como titulizaciones, lo que le permitirá aprovechar la diversificación natural que ofrece el universo de renta fija.
«Morgan Stanley IM se compromete a crear productos y soluciones que integren factores ESG de una manera holística sin comprometer la rentabilidad. Buscamos activamente identificar activos con una ventaja competitiva sostenible a largo plazo centrándonos en factores como la integración ESG, el impacto social y ambiental y el compromiso activo. Hemos desarrollado metodologías de puntuación ESG, específicas para la Renta Fija, con el objetivo de analizar emisores tanto a nivel corporativo como con respecto a bonos etiquetados como sostenibles”, añade Navindu Katugampola, responsable de Inversión Sostenible para Renta Fija y Liquidez de Morgan Stanley IM.
Por su parte, Dipen Patel, integrante del equipo gestor del fondo MS INVF Sustainable European Corporate Bond Fund, destaca que “el objetivo final de ambos fondos es crear oportunidades interesantes y diversificadas para nuestros clientes y, al mismo tiempo, equilibrar cuidadosamente las consideraciones ESG con el objetivo de ofrecer rentabilidades atractivas ajustadas al riesgo».
«El equipo de renta fija de MSIM y los especialistas de ESG tienen una larga trayectoria en la consecución de rentabilidades atractivas a través del ciclo de mercado. Estos nuevos fondos ofrecen una oportunidad para los inversores que buscan las ventajas de las inversiones en Renta Fija, al tiempo que se benefician de los principios de inversión sostenible de Morgan Stanley”, matiza Leon Grenyer, integrante del equipo gestor del fondo MS INVF Sustainable European Strategic Bond Fund.
Y por último, Richard Lockwood, responsable de distribución del Norte de Europa de Morgan Stanley IM, explica que «los mercados siguen sintiendo los efectos de la pandemia global, y los inversores se centran cada vez más en la asignación de sus inversiones con el objetivo de trabajar hacia una recuperación más ecológica. A través de estos nuevos productos de renta fija centrados en ESG, Morgan Stanley Investment Management está proporcionando los canales adecuados para que nuestros clientes puedan alcazar dichos objetivos».
Foto cedidaDavid Older y Rose Ouahba, gestores del fondo Carmignac Patrimoine.. Carmignac Patrimoine: entre las empresas favorecidas por la economía secular y la deuda corporativa
El brote del COVID-19 ha mostrado con claridad que algunas empresas, especialmente aquellas vinculadas a la tecnología digital, pueden seguir creciendo independientemente de las tendencias macroeconómicas mundiales. Al menos, así lo consideran David Older y Rose Ouahba, gestores del fondo Carmignac Patrimoine. Ambos gestores, consideran que, a medida que nos adentramos en la temporada de resultados trimestrales, parece que los mercados financieros han descontado parte de las malas noticias.
“Por ello, a partir de ahora nos centraremos en 2021, un año para el que los inversores parecen tener altas expectativas (prácticamente en línea con 2019). En nuestra opinión, ello justifica una selección de valores cuidadosa y un enfoque prudente en la estructuración de cartera”, apunta Older. Esta perspectiva de prudencia les ha llevado a mantener la cartera del fondo Carmignac Patrimoine centrada en empresas de crecimiento secular que no dependen de una recuperación económica de gran calado y capaces de registrar un buen comportamiento en el contexto de tipos de interés bajos que, a su juicio, se mantendrá a medio plazo.
Según explica Older, en general, “encontramos estas empresas en los sectores principales en torno a los que hemos estructurado nuestro equipo de inversión: tecnología, salud, consumo y fintech. También contamos con participaciones en valores auríferos a modo de póliza de cobertura multi riesgo. Los balances de los bancos centrales de todo el mundo y los déficits de los Gobiernos han alcanzado cifras astronómicas. Ello podría generar un entorno de desconfianza generalizada hacia las principales divisas. En caso de que se produzca una verdadera crisis de confianza, los activos de riesgo podrían verse desestabilizados y el oro registraría un comportamiento positivo. Los precios del oro también deberían beneficiarse del desplome de los tipos de interés”.
En su opinión, los valores de crecimiento secular han registrado una rentabilidad superior durante los últimos meses, lo que les ha llevado a ser aún más rigurosos en su selección de activos. “Iniciar posiciones únicamente en los valores del Nasdaq sería sumamente peligroso. Por ello, el equipo aplica un proceso muy riguroso, no referenciado y con tomas de beneficios periódicas, además de otorgar un énfasis particular al tamaño de las posiciones. La cartera también está diversificada. Nuestra exposición no está en absoluto limitada al sector tecnológico estadounidense. Nuestra exposición al crecimiento secular está diversificada por regiones —China, EE. UU. e incluso Europa— y por segmentos —sanitario, fintech, consumo y digitalización—. Por último, buscamos empresas con escasas necesidades de capital que sean capaces de ser flexibles”, explica Older.
En este sentido, el fondo cuenta con un proceso de inversión sumamente “disciplinado” y “coherente”. Según explica el gestor, se intenta adoptar un enfoque fundamental bottom-up en la selección de valores junto con un conocimiento exhaustivo de la visión macroeconómica top-down. “Nos concentramos especialmente en las empresas de crecimiento secular, es decir, empresas de productos y servicios con unos mercados objetivo de gran envergadura y en fase de crecimiento y que son una oportunidad de penetrar en estos mercados. Asimismo, estas empresas suelen estar poco apalancadas y ofrecen una mayor visibilidad sobre los beneficios. No obstante, dado que creemos que buena parte de la información disponible ya está descontada en el precio, estamos tratando de desarrollar una visión diferenciada del consenso para un periodo de uno o dos años mediante un análisis primario, por ejemplo, a través de encuestas, análisis de big data y reuniones frecuentes con los equipos directivos”, añade.
Esta visión explica que la mayor parte de la cartera de renta variable de Carmignac Patrimoine se centra en valores de crecimiento secular. Pero, ¿qué hay de sus posiciones de renta fija? Según explica Rose Ouahba, el principal motor de la rentabilidad sigue siendo la deuda corporativa. “El movimiento de pánico de mediados de marzo nos permitió iniciar posiciones en situaciones específicas en sectores especialmente afectados por la crisis (ocio, aerolíneas, automóviles, etc.). Nos centramos en empresas que, a nuestros ojos, pueden soportar una crisis de liquidez emitiendo más deuda en caso de necesitarlo y cuyo valor a largo plazo, incluso en una hipótesis pesimista, siga cubriendo con creces el nivel de endeudamiento. Además, en cuanto reabrió el mercado de deuda corporativa con grado de inversión, participamos en numerosas nuevas emisiones con perfiles de convexidad y primas interesantes que atrajeron una gran demanda y apuntalaron las valoraciones de los bonos. En los dos últimos meses, observamos que los elevados niveles de los mercados secundarios y primarios encontraron una sólida demanda, y este nivel sostenido de emisiones mantuvo el diferencial en niveles atractivos, algo que debería continuar”, apunta Ouahba.
La gestora sostiene que, desde el punto de vista macroeconómico, están monitorizando estrechamente la situación, ya que el posible contexto de depreciación del dólar estadounidense podría dar lugar a un entorno más positivo para los mercados emergentes, especialmente en el plano de la deuda denominada en divisa extranjera, donde las valoraciones siguen siendo interesantes, dado que los diferenciales no se han reducido aún hasta los niveles anteriores a la crisis. “Por ejemplo, algunos países representan una oportunidad para seguir generado rentabilidades más elevadas, especialmente los países cuyos bancos centrales tienen (de nuevo) margen de maniobra, como Rusia o México”, añade la gestora.
De cara a preparar la cartera a lo que queda de 2020 y 2021, Ouahba apunta que si volvieran a producirse turbulencias, se dirigirían a la deuda pública estadounidense. “Si la incertidumbre se mantiene durante el próximo trimestre, los rendimientos de la deuda estadounidense deberían afrontar una presión a la baja y, lo que es más importante, la curva de rendimientos se aplanaría, lo que ofrecería oportunidades interesantes para los inversores que priorizan la deuda con vencimientos a largo plazo”, concluye.
Pixabay CC0 Public Domain. Los gobiernos regionales de las grandes economías europeas aumentan sus necesidades de financiación entre 202-2021
La crisis desatada por el coronavirus causará una caída de ingresos fiscales sin precedentes para los gobiernos regionales y locales en las cinco economías más grandes de Europa en 2020-2021, lo que impulsará un fuerte aumento de la deuda, según indica el último informe publicado por Moody’s.
El documento, titulado Moody’s Public Sector Europe, calcula que la caída general de ingresos para los gobiernos en Alemania, Francia, Italia, España y el Reino Unido alcance los 77.000 millones de euros, o el 6% de los ingresos totales del sector en 2020. “El apoyo del gobierno central solo mitigará en parte la caída en los ingresos de los gobiernos locales”, afirma Massimo Visconti, Senior Credit Officer/Manager en Moody’s y coautor del informe.
Por países señala que los landers alemanes serán los más afectados este año, con una pérdida neta de casi el 5% de los ingresos corrientes, según las estimaciones de Moody’s, seguidas de las regiones francesas con un 4%, las italianas con un 3%, mientras que las regiones españolas y las autoridades locales del Reino Unido oscilan alrededor del 1%.
Según estima el informe, “las pérdidas netas en términos generales variarán según la sensibilidad de los ingresos, la flexibilidad fiscal y las transferencias excepcionales de los gobiernos centrales”. Frente a esta situación, el informe de Moody’s señala que, en general, los gobiernos regionales y locales absorberán las pérdidas reduciendo sus márgenes corrientes o reduciendo temporalmente los gastos de capital. Los ingresos cíclicos, tales como el IVA y el impuesto sobre la renta de las personas físicas, serán los más afectados, mientras que los ingresos por alquiler, estacionamiento e ingresos derivados del transporte público también disminuirán.
Según Moody’s, la reducción de los costes y las subvenciones del gobierno central para financiar costes adicionales suavizarán el impacto en los gastos. “El impacto del coronavirus conducirá a un mayor endeudamiento entre los gobiernos regionales y locales este año y el próximo”, añade Visconti. Las necesidades de financiación de estas regiones para gastos de capital y refinanciación de deuda aumentarán significativamente en 2020, revirtiendo la tendencia a la baja de los últimos años.
El informe señala que las necesidades de endeudamiento totales alcancen los 285.000 millones de euros en 2020 desde los 186.000 millones de euros en 2019, liderados por las regiones alemanas. “La deuda continuará aumentando a un ritmo más lento en los años siguientes, a medida que los ingresos tributarios se recuperen después de un repunte en los ingresos. Mientras los estados alemanes continúan recurriendo a los mercados de capitales, los gobiernos regionales y locales de Francia, España, Italia y el Reino Unido dependerán más de los préstamos del sector público”, matiza el documento de Moody’s.
El dólar sigue siendo, con diferencia, la principal moneda. Pero nuevos acontecimientos políticos y desarrollos en materia política en Europa y China, podrían potenciar el rol del euro y del renminbi, aumentando así las perspectivas de un sistema multipolar futuro.
Según afirma Scope Ratings, los gobiernos de la UE y de China tendrán que hacer más para promover el uso internacional de sus respectivas monedas. Si lo hacen, el cambio del dólar al euro o al renminbi podría tener lugar de forma más precipitada de lo que se cree posible en la actualidad.
«Un mayor uso del euro y el renminbi otorgaría a los gobiernos de la UE y de China una mayor autonomía monetaria, financiera y política, al tiempo que fomentaría un sistema financiero internacional más estable capaz de ofrecer alternativas creíbles al dólar», afirma Alvise Lennkh, director de Scope. Según la firma, el uso de una moneda internacional abarca mucho más allá de su función de reserva de divisas para los bancos centrales. En este sentido, cumple las tres funciones tradicionales de la moneda para los actores privados y públicos del mercado: un medio de cambio, una unidad de cuenta y un depósito de valor.
«El dólar ha dominado estas áreas durante varios decenios, confiriendo ventajas considerables a Estados Unidos (AA/Estable) en términos de sostenibilidad de la deuda pública, así como de influencia económica y política, y provocando una inercia frente a la posible adopción de monedas alternativas», dice Lennkh.
En opinión de Scope Rating, el euro es, quizás, el rival más claro del dólar, dado el peso de los países de la zona euro en el PIB mundial (15%) y en el comercio (25%), así como el creciente protagonismo de los Estados miembros en los mercados mundiales de capital. “De hecho, varios acontecimientos ya apuntan a una mayor dependencia del Euro, como: la mejora de la infraestructura de los sistemas de pago del BCE; la decisión de Rosneft y Novatek (los mayores productores rusos de petróleo y gas líquido) de pasar al euro desde el dólar para todas las exportaciones; y la labor de la Comisión Europea encaminada a fortalecer el papel internacional de su moneda, que incluye la celebración de consultas activas con los participantes en los mercados privados y públicos”, argumenta el último informe de la firma.
«Una integración más estrecha de la UE y del sector financiero de la zona euro, mediante la finalización de las uniones de los mercados y de la banca, aumentaría el atractivo de los activos denominados en euros. La disponibilidad de activos seguros, que se beneficiaría enormemente de la creación de un instrumento de deuda común de la zona euro, como un eurobono o valores de bonos respaldados por la deuda soberana- también es clave para lograr una adopción más generalizada del euro», afirma Levon Kameryan, analista de Scope y coautor del informe.
En este sentido destaca que las negociaciones en torno a un fondo de recuperación de la UE (“Next Generation EU”) para 2021-24 van en esta dirección. Para las autoridades chinas, la mayor apertura a los inversores extranjeros, los avances en la mejora de la supervisión y la reducción de las vulnerabilidades financieras, el fortalecimiento del estado de derecho y la mejora de la solvencia soberana serán fundamentales para aumentar el atractivo internacional del renminbi.
«Hasta ahora, sólo vemos signos graduales de la disminución del dominio del dólar. Por ejemplo, en las reservas de divisas. Los activos denominados en dólares representan actualmente alrededor del 61% de las reservas mundiales, aunque esta proporción ha disminuido desde más del 71% en 1999. La cuota del euro es mucho menor, con sólo el 20,5% de las reservas, después de haber alcanzado un máximo del 28% en 2009. El uso del renminbi, aunque hoy en día es marginal, casi se ha duplicado en los últimos tres años hasta alcanzar el 2%”, afirma Kameryan.
Por último Thibault Vasse, analista de Scope y coautor del informe, recuerda que “la política exterior y comercial de Estados Unidos también pueden incentivar a los gobiernos a reducir su dependencia del dólar, mientras que los persistentes déficits fiscales y de cuenta corriente del país en un entorno altamente polarizado políticamente pueden debilitar gradualmente la confianza de los inversores en la moneda».
Desde el informe de Scope Rating recuerdan que tanto los inversores como los responsables políticos deberían evaluar los riesgos y prepararse para la posibilidad de que el dólar tuviera un rol menos protagonista en los próximos años o décadas. «Tiene sentido tomar medidas hoy para protegerse contra la posibilidad, aunque parezca remota por ahora, de una pérdida repentina de confianza en el dólar que podría conducir a una crisis de liquidez mundial con graves consecuencias económicas sin que exista una moneda mundial alternativa», concluye Vasse.
Pixabay CC0 Public Domain. Nace SEBAversity, una plataforma educativa sobre blockchain, criptomonedas y criptoactivos
SEBA se ha unido a tres prestigiosas universidades para lanzar una plataforma educativa sobre criptoactivos y criptomonedas. SEBAversity es una iniciativa que nace de la mano de FinTech Innovation Lab de la Universidad de Zurich, la Universidad de Ciencias Aplicadas y Artes de Lucerna y el Frankfurt School Blockchain Center, elegidas por su amplio conocimiento sobre este campo.
Según explica, esta plataforma tiene como objetivo proveer de información y contenidos online y offline para educar tanto a personas particulares como a empresas sobre esta nueva generación de activos, así como sobre la tecnología blockchain. La plataforma también proporcionará formación que cumpla con las normas SAQ sobre blockchain y criptomonedas. La iniciativa nace ante la creciente demanda de conocimiento e interés por estos temas por parte del el público en general, pero también de inversores, empresas, y especialmente los bancos y otros proveedores de servicios financieros.
«SEBA es uno de los primeros bancos con licencia completa en todo el mundo que trabaja con activos digitales. Esto nos motiva a unirnos a SEBAversity», afirma el profesor Philipp Sandner, director del Centro de Blockchain de la Escuela de Frankfurt, uno de los tres socios académicos de SEBAversity.
Según Guido Bühler, director general del Banco SEBA, “la necesidad de formación en las áreas de activos digitales y monedas criptográficas aumenta constantemente y con SEBAversity estamos proporcionando una plataforma dedicada a particulares y empresas con el objetivo de adquirir conocimientos en estas áreas. SEBAversity ofrece a todo el mundo acceso a conocimientos expertos orientados a la práctica combinados con investigación académica, en línea y fuera de línea».
Tellimer Group, plataforma de información y datos de inversión de mercados emergentes, con sede en Londres, anunció la incorporación de Banorte a su red global de inteligencia, Insights.
Tellimer distribuirá la investigación macroeconómica, de divisas, renta fija y renta variable de Banorte, a su audiencia global de profesionales de inversión a través de su tecnología patentada, líder en el mundo. Los suscriptores de Tellimer obtendrán acceso exclusivo a esta información y análisis especializado a través de su plataforma para internet y dispositivos móviles.
Gabriel Casillas, director general ddjunto de Análisis Económico y Relación con Inversionistas de Grupo Financiero Banorte, mencionó: “Nuestro objetivo en el equipo de Análisis Económico de Banorte, es generar investigación local de primer nivel combinada con un conocimiento global integral para nuestros clientes y nuestra base de inversionistas. Esta alianza estratégica con Tellimer y su poderosa plataforma nos permitirá llegar a un público especializado más amplio en el mundo».
Tellimer, presente en más de 80 mercados en todo el mundo, ofrece contenido original producido por su equipo interno de analistas, además de información de su red global de expertos, de la cual ahora forma parte Banorte.
Duncan Wales, CEO de Tellimer Group, comentó: «Estamos encantados de distribuir la investigación de Banorte a través de la plataforma Tellimer. A medida que la pandemia por el Covid-19 continúa transformando las economías del mundo es una prioridad garantizar que nuestros clientes tengan acceso a la mayor cantidad de información relevante y oportuna posible, donde sea que estén trabajando. Con la incorporación de Banorte a nuestra red, nuestros clientes se beneficiarán de conocimientos macroeconómicos verdaderamente únicos sobre los riesgos y las oportunidades en los mercados mexicanos».
Aiva ha lanzado su “Latam Digital Conference” que tendrá por primera vez un formato digital, con streaming y espacios de interacción. El evento tendrá contenidos exclusivos para asesores de Aiva el 1 de septiembre, mientras que la segunda jornada será abierta a un público más amplio
Elizabeth Rey, CEO de Aiva, declaró: “En este año tan particular, tenemos que estar aún más cerca, más capacitados, más ávidos de conocimiento. Lo que ya está en nuestro ADN, reforzado por las posibilidades de las plataformas digitales y la certeza de que nuestros asesores esperan de nosotros que los apoyemos en este desafío”.
“Hacia Adelante es nuestro lema ynuestra manera de trabajar en el día a día. El mundo post-pandemia se muestra lleno de interrogantes y es por eso que nos animamos, una vez más, a estar al frente de esa visión, generando nuevas herramientas para que nuestros asesores estén siempre mejor preparados”, añadió Rey.
“El 1 y 2 de septiembre estaremos una vez más reunidos en un evento de alto nivel, con speakers internacionales, workshops, presencia de fund managers para compartir las últimas tendencias. Lo que ya es tradicional de “Aiva Latam Conference” pero en un formato digital con una plataforma que nos permite tener una experiencia cuasi presencial”, concluyó la CEO de Aiva.
Agustín Queirolo, director de ventas de Aiva detalla: “Este formato combina lo mejor de los dos mundos: la posibilidad de acceder desde donde estemos, integrando a la región con las tendencias globales, y ese espacio para encontrarnos, quienes somos parte de Aiva y quienes trabajan con nosotros que reconocen el valor agregado que generan estas instancias”.
La conferencia contará con un entorno similar al de un evento presencial, tendrá streaming de alta calidad y contenidos diseñados especialmente para ser compartidos en la plataforma. Tendrá espacios de interacción y una agenda abierta al público de la industria.
“La experiencia de tantos años realizando este tipo de eventos, sumado a nuestro enfoque Hacia Adelante nos permitió generar un espacio a medida para nuestros asesores y clientes, adaptándonos rápidamente a la nueva normalidad”, concluye el director de ventas de Aiva.
Juan Manuel Mendioroz es el nuevo Head of Relationship Management de Southeast Wealth Planning & Investments y trabajará desde las oficinas de la firma en Zonamérica, Uruguay.
Mendioroz es Licenciado en Dirección de Empresas por la Universidad de Montevideo, con un MBA en el IEEM, y está finalizando un Postgrado en Asesoramiento Financiero en la Universidad Pompeu Fabra de Barcelona.
Dentro de la industria financiera, en la que trabajó por más diez años, fue responsable de desarrollar y potenciar relaciones comerciales con asesores financieros e instituciones en Uruguay, Argentina, Brasil, Perú y Venezuela teniendo un rol clave en el crecimiento de redes de distribución.
Juan Manuel Mendioroz ha desarrollado negocios y relaciones en diversos países de América Latina desde México hasta Uruguay, liderando equipos de trabajo en diversos países y como asesor en servicios profesionales.
Con su incorporación como Head of Relationship Management, “Southeast busca potenciar su presencia regional y su red de socios estratégicos, especialmente en los mercados de Perú, México, Chile y Ecuador”, anunció la firma en un comunicado.
Santiago Costa, director de Wealth Planning de SE, señaló que “la incorporación de Juan Manuel a Southeast” es parte del plan de expansión que tiene la firma para los próximos años, con los desafíos que se plantean en este 2020 apostamos a potenciar nuestras relaciones internaciones y consolidar el valor agregado que generamos a nuestros partners.”
“Es un honor sumarme al equipo de Southeast, un empresa que está a la vanguardia en Wealth Planning y además de ser especialistas en PPLI cuenta con un equipo muy profesional y dinámico, lo cual hace la diferencia en este tipo de soluciones. Espero aportar mi parte para seguir creciendo”, declaró por su parte Mendioroz.
Southeast Wealth Planning & Investments, trabaja con familias de alto patrimonio de Chile, México, Perú y Ecuador junto a los principales Family Offices, Instituciones Financieras y Estudios Juridicos de la región.
Cuenta con más de 10 años de experiencia y más de 800 millones de dólares AUM en soluciones de PPLI, asegurando una correcta implementación de la solución a lo largo del tiempo y la mejor alternativa para cada familia.
El mercado de bonos verdes ha experimentado un gran auge. La demanda de inversiones respetuosas con el medio ambiente se ha incrementado al mismo tiempo que aumentaba la concienciación sobre la necesidad de controlar el cambio climático y la contaminación, impedir el deterioro de la biodiversidad y asegurar un futuro sostenible.
Pero, al igual que con cada nueva clase de activos que levanta el vuelo, los inversores deben tener cuidado con los riesgos.
Hace una década, el mercado de bonos verdes corporativos era prácticamente inexistente. A finales de abril de 2020, su valor ascendía a 347.000 millones de dólares.
En pocas palabras, los bonos verdes son deuda destinada a financiar proyectos específicos relacionados con el medio ambiente. Parte de su atractivo para la inversión se debe a su reglamentación: los gobiernos interesados en fomentar los proyectos ecológicos suelen ofrecer desgravaciones fiscales por la tenencia de estos instrumentos. No obstante, también son atractivos porque denotan el tipo de gestión con visión de futuro que suele equipararse con el éxito empresarial a largo plazo.
La ventaja para las empresas reside en que la demanda de estos bonos tiende a diversificar su base de inversores. Y los datos reflejan que los inversores en bonos verdes suelen mostrar un mayor grado de compromiso y mantener los instrumentos durante más tiempo que la deuda convencional.
Los bonos verdes apuntan muy alto
Tamaño del mercado de bonos verdes corporativos y públicos, índice ICE Bank of America Merrill Lynch Green Bond, miles de millones de dólares
Fuente: índice ICE Bank of America Merrill Lynch Green Bond. Datos a 30/04/2020.
Para los emisores, uno de los atractivos de estos bonos es que sus vencimientos son más largos, por lo que la refinanciación puede ser menos frecuente. Por ejemplo, los bonos verdes (corporativos y públicos) tienen una duración media de casi 8 años, frente a los 7,2 años de la deuda corporativa “investment grade” global, quizás debido al hecho de que los proyectos medioambientales tienen horizontes temporales largos.
Además, recientemente la emisión se ha ido ampliando por todo el espectro del crédito. Aunque la mayoría de los bonos verdes corporativos tienen una calificación de “investment grade”, los emisores de “high yield”, como la empresa de reciclaje y gestión de residuos Paprec, el fabricante de turbinas eólicas Nordex y el fabricante de vidrio O-I Packaging Group también han hecho incursiones en el mercado. Y otras empresas podrían seguir su ejemplo. Las secuelas de la pandemia del coronavirus podrían dar lugar a que aproximadamente un 44% de los bonos verdes calificados como BBB –una proporción menor que la de los mercados de deuda corporativa en general– se conviertan en ángeles caídos al caer en territorio “high yield”.
El riesgo al que se enfrentan los inversores es el de confundir los bonos existentes por el auténtico deseo de una empresa de promover un programa ecológico con aquellos que son más bien un “ecoblanqueo”. Es decir, los de empresas que emiten deuda como bonos verdes, pero que en realidad utilizan el capital obtenido para otros fines, como la refinanciación de su deuda existente.
No hay una demarcación clara entre dónde terminan los unos y dónde empiezan los otros. Esto se debe, en parte, a que los bonos verdes pueden no ser necesariamente una financiación afectada específicamente a proyectos, sino que más bien suelen figurar en el balance de la empresa emisora y, por lo tanto, aparecen integrados en la combinación de activos total –razón por la cual a los bonos verdes se les suele asignar la calificación crediticia de la empresa. Aún así las agencias de calificación podrían rebajar la calificación de los bonos verdes por consideraciones medioambientales, sociales y de gobierno corporativo (ASG), ya que cada vez las tienen más en cuenta en sus análisis.
Por ejemplo, la multinacional eléctrica italiana Enel fue acusada de “ecoblanqueo” cuando emitió un bono vinculado a su compromiso de incrementar su uso de energías renovables. El incumplimiento de los objetivos obligaría a la empresa a pagar un cupón más alto por el bono. Era un compromiso aparentemente ecológico, pero los críticos argumentaron que en realidad era poco más que una opción para producir electricidad contaminante.(1)
Otro ejemplo es Teekay Shuttle Tankers, empresa propietaria de una de las mayores flotas de petroleros del mundo, que se propuso captar un mínimo de 150 millones de dólares para construir cuatro nuevos buques de bajo consumo de combustible mediante la emisión de un bono verde. No alcanzó su objetivo, en parte debido a las dudas de los inversores sobre lo ecológico que podría ser un petrolero, por poco combustible que consumiera.(2)
Las zonas grises de los bonos verdes
Para complicar más las cosas, algunos emisores están subdividiendo todavía más esta clase de valores en, por ejemplo, bonos “azules” relacionados con la inversión en agua, o en bonos de “transición” que promueven el cambio a una economía con menos emisiones de carbono. Entretanto, tras la pandemia del coronavirus se ha renovado el interés por los bonos “sociales”, que prometen un impacto más amplio sobre la sociedad.
A veces resulta conveniente mirar más allá de la etiqueta verde e invertir en valores convencionales emitidos por una empresa verdaderamente respetuosa con el medio ambiente. Algunas empresas con una sólida trayectoria medioambiental han evitado emitir bonos verdes debido al tamaño del mercado, que aún es reducido, y a su naturaleza especializada, o bien porque calculan que no les compensan los costes de cumplimiento normativo adicionales que conllevan los bonos verdes.
Por eso, por ejemplo, hasta ahora son solo tres las empresas automovilísticas que han emitido un bono verde, y Tesla, que lidera el sector de los vehículos eléctricos, no es una de ellas. Todo ello pese a que el sector ha realizado mayores avances hacia el transporte ecológico, sobre todo en lo referente a electrificación. De hecho, el mercado de bonos verdes sigue estando relativamente concentrado, con más del 70% emitido por empresas financieras y de “utilities”.
No obstante, a pesar de todas las zonas grises de los bonos verdes, las cosas están mejorando. Parte de esa mejora se debe a la implantación de las mejores prácticas, parte a organismos de la industria y parte a los reguladores.
Por ejemplo, tras una emisión de tres bonos sostenibles que culminó con una colocación de deuda por valor de 1.000 millones de dólares en 2019, la cadena estadounidense de café Starbucks ha creado un modelo para que otras empresas lo sigan. Sus objetivos de cambiar la adquisición de sus granos de café a productores sostenibles y de hacer más ecológicas sus operaciones minoristas tuvieron una muy buena acogida entre los inversores.(3) La compañía, a su vez, se convirtió en un recurso informativo para otras empresas que deseaban captar fondos mediante bonos verdes.
Un código industrial voluntario determina los bonos que pueden considerarse como “verdes”, los cuales requieren verificación por parte de un tercero acreditado y certificado por el Climate Bonds Standard and Certification Scheme. Esto, a su vez, se refuerza con una segunda opinión formulada por agencias externas independientes, como Sustainalytics, que examinan el carácter ecológico de los bonos.
Los organismos gubernamentales también se han involucrado, por fin. La Unión Europea abrió el camino en diciembre de 2019 estableciendo normas para regular los productos financieros que podrán considerarse como “verdes” o “sostenibles”. Dichas normas exigen que las empresas revelen con total transparencia qué proporción de sus inversiones es ecológica o sostenible. Tan solo un 17% del valor de mercado de los bonos verdes incluidos en el índice MSCI Green Bond cumpliría los requisitos del Estándar de Bonos Verdes de la UE (EU GBS).
Pero este campo sigue siendo bastante nuevo y cuantificar lo que con frecuencia son aspectos cualitativos de las actividades es muy complicado. Las agencias que califican a las empresas con arreglo a criterios medioambientales, sociales y de gobierno corporativo pueden proporcionar evaluaciones muy dispares, según la importancia que den a diversos factores como, por ejemplo, la industria, la región donde se desarrollan las actividades y las intenciones del equipo directivo.
Teniendo en cuenta todas las complejidades que conllevan, los inversores deben adoptar un enfoque prudente y analítico. Algunos bonos verdes son más ecológicos que otros. Algunos bonos corporativos convencionales emitidos por empresas responsables con el medio ambiente pueden ser más ecológicos que los bonos verdes. Además, en algunos casos, los fondos obtenidos mediante deuda ordinaria por empresas de industrias contaminantes se destina a inversiones medioambientalmente valiosas –sobre todo cuando la intención de la empresa es cambiar en profundidad la naturaleza de sus actividades. Equilibrar las credenciales medioambientales con los factores sociales exige la adopción de una perspectiva amplia del mercado. Un bono verde no debe evaluarse sin tener también en cuenta la estrategia general de la empresa emisora para favorecer un modelo de negocio más ecológico y sostenible.
Columna de Stéphane Rüegg, Client Portfolio Manager del equipo de renta fija de Pictet Asset Management.
Para más información sobre las capacidades de Pictet Asset Management en renta fija e inversión sostenible, por favor haga click en estos enlaces.
La información, opiniones y previsiones incluidas en este documento son el resultado de las estimaciones en su fecha original de publicación y pueden verse afectadas por riesgos e incertidumbres que podrían hacer que los resultados reales sean sustancialmente diferentes de los presentados en este documento.
Notas importantes
Este material va dirigido exclusivamente a inversores profesionales. Sin embargo, no deberá ser distribuido a ninguna persona o entidad que sea ciudadano o residente de cualquier lugar, estado, país o jurisdicción en el que dicha distribución, publicación o uso sea contrario a sus leyes o normativas. La información utilizada para la elaboración del presente documento se basa en fuentes que consideramos fiables, pero no se hace ninguna manifestación ni se da ninguna garantía en cuanto a la exactitud o integridad de dichas fuentes. Cualquier opinión, estimación o previsión puede modificarse en cualquier momento sin previo aviso. Los inversores deben leer el folleto o el memorándum de oferta antes de invertir en cualquier fondo gestionado por Pictet. El tratamiento fiscal depende de las circunstancias individuales de cada inversor y puede cambiar en el futuro. Las rentabilidades pasadas no son indicativas de rentabilidades futuras. El valor de las inversiones, así como la renta que generen, puede disminuir o aumentar y no está garantizado. Es posible que usted no recupere el importe inicialmente invertido.
Este documento ha sido publicado en Suiza por Pictet Asset Management SA y en el resto del mundo por Pictet Asset Management Limited, sociedad autorizada y regulada por la Financial Conduct Authority, y no podrá reproducirse ni distribuirse, ni parcialmente ni en su totalidad, sin su autorización previa.
Para los inversores estadounidenses, la venta de acciones en los Estados Unidos o a Personas de los Estados Unidos solo se puede realizar mediante colocaciones privadas a inversores acreditados según las exenciones de registro en la SEC en virtud de las exenciones a colocaciones privadas de la Sección 4(2) y el Reglamento D conforme a la Ley de 1933 y a clientes cualificados según lo definido en la Ley de 1940. Las acciones de los fondos de Pictet no se han registrado según la Ley de 1933 y, salvo en operaciones que no violen las leyes de valores de los Estados Unidos, no pueden ser ofrecidas ni vendidas ni directa ni indirectamente en los Estados Unidos ni a Personas de los Estados Unidos. Las Sociedades de Gestión de Fondos del Grupo Pictet no se registrarán según la Ley de 1940.