Los fondos mutuos ESG están atrayendo grandes flujos de entrada, pero siguen existiendo desafíos fundamentales para definir qué es lo que les da esa etiqueta, dice un estudio de fondos de renta variable de EE.UU., realizado por el equipo de Quantitative Portfolio Strategy (QPS) de Barclays.
«En este nuevo informe, nuestro equipo de QPS examinó dos décadas de datos de tenencia de fondos y encontró una falta de diferencia en las tenencias y los estilos de inversión entre los fondos de renta variable estadounidenses centrados en ESG y los que no lo son«, indicó el director de investigación del banco inglés, Jeff Meli.
El informe, ESG funds: Looking beyond the label, reclama una mayor transparencia en la definición de los fondos ESG y ofrece varias sugerencias para crear puntos de referencia explícitos para medirlos y abordar la falta de una definición uniforme de lo que constituye un fondo ESG.
Según Braclays, “los fondos ESG no son realmente diferentes de los fondos convencionales en términos de tenencias, exposiciones al riesgo y, por lo tanto, rendimiento”lo que refleja el hecho de que medir el enfoque ESG de un fondo es todo menos sencillo.
“Existe una falta de consenso sobre cuántos y qué aspectos de E, S y G deben evaluarse en cada dimensión relevante y, como resultado, diferentes proveedores califican los criterios relacionados con ESG de manera diferente”, dicen las conclusiones sobre el informe.
Además, muchas acciones, especialmente las de pequeña capitalización, aún no tienen calificación ESG.
“La puntuación ESG general de un fondo es una combinación de sus puntuaciones E, S y G individuales, pero puede haber poca correlación entre los pilares individuales”, asegura Barclays.
Un fondo puede tener una puntuación alta de impacto ambiental al sobreponderar las bajas emisiones de carbono, pero una calificación baja en el impacto social, lo que da como resultado una puntuación ESG promedio en general.
“La inversión responsable se ha convertido en un tema candente en los mercados financieros en los últimos años, con muchos inversores compitiendo para integrar cuestiones ambientales, sociales y de gobernanza en su proceso de inversión”, reflexionó Meli, constata el portal Businesswire.
Los fondos con etiqueta ESG han atraído un mayor porcentaje de entradas que otros fondos de renta variable: Desde el 2013, se evidencia que los fondos ESG han tenido, en promedio, entradas de un 7% por año, mientras que los no ESG experimentaron salidas anuales del 2%.
El crecimiento de los activos bajo gestión ha sido impulsado por el interés en la inversión sostenible más que por un mejor rendimiento ya que los fondos ESG han generado rendimientos aproximadamente similares a otros fondos de renta variable desde 2013.
A medida que el interés ha crecido, también lo ha hecho el número de opciones de inversión, con el número total de fondos ESG creciendo significativamente desde 2006, y los activos totales bajo administración aumentando a alrededor del 0,7% de la capitalización de mercado total de todas las acciones estadounidenses.
Pixabay CC0 Public Domain. El volumen de transacciones de capital privado en el sector de la salud aumentó un 21% en 2020
El virus se ha propagado rápidamente en la mayoría de los países del mundo, incluidos los mercados emergentes. Es probable que el número real de casos siga siendo desconocido, ya que es más difícil realizar las pruebas en estos países, pero lo que sí se sabe ahora es que sus ganas de un confinamiento total y su capacidad de implementarlo y vigilar el proceso, son escasas. Los gobiernos de estos estados se enfrentan a un compromiso entre los costes sociales y económicos de intentar controlar el virus, y el impacto del virus en la salud de la población.
Es probable que esto tenga dos efectos principales. En primer lugar, las recesiones inducidas por el virus probablemente serán menos profundas. El segundo lugar, algo más especulativo, es que los países emergentes pueden aprender a vivir con el virus de manera más efectiva, pero es poco probable que lo controlen. Si la respuesta es la inmunidad de grupo, y si las tasas de mortalidad reales por el virus en la gran mayoría de estas zonas son menores, se aceptará vivir con él hasta que haya una vacuna. Este ha sido un camino que ya se ha seguido con otras enfermedades transmisibles a las que se enfrentan muchos de estos países todo el tiempo. Aceptar esto también disminuye la profundidad de la recesión.
Eso no significa que los emergentes puedan evitar una recesión severa. Los costes que han tenido los intentos de confinamiento, el cierre del comercio mundial y la falta de inversión son muy altos y afectan directamente a estos países. Los que deberían ser más resistentes son aquellos que están más cerrados y menos expuestos a las tendencias mundiales. Irónicamente, muchos de ellos son las economías más pobres, más frontera.
Lo importante es entonces la recuperación económica. El escenario bajista espera que las recesiones en los países emergentes terminen siendo más profundas y prolongadas de lo que esperamos, lo que podría causar una disminución del crecimiento potencial.
La mayoría de los países de mercados emergentes han anunciado programas de estímulo monetario y fiscal, lo que tiene sentido desde el punto de vista del crecimiento, incluso si existen preocupaciones sobre las consecuencias para la deuda de algunos de ellos. Una hipótesis optimista sería que centraran el estímulo fiscal en proyectos de infraestructura y de largo plazo, lo que podría ser el motor de crecimiento que necesitan muchos de ellos. En circunstancias más «normales», existe una gran cautela en relación con la deuda y el endeudamiento, así como una prudencia fiscal de tipo prescriptivo del Fondo Monetario Internacional (FMI) en la que los mercados se centran en gran medida; pero, por ahora, muchos países se enfrentan a una oportunidad para llevar a cabo algunos proyectos de infraestructura en gran escala que deberían haber realizado hace mucho tiempo.
Dado que muchos emergentes han seguido los pasos de la flexibilización monetaria de los países desarrollados, existe un riesgo muy real de que la carga de la deuda aumente y se convierta en insostenible. No hay duda de que habrá algunos países a los que esta situación los lleve a una crisis de deuda. Actualmente tenemos a cinco de ellos en default, en medio de programas de reestructuración o que probablemente se dirigen a uno, un número inusualmente alto. Curiosamente, cuatro de ellos ya se dirigían a una reestructuración antes de la crisis: Líbano, Argentina, Zambia y Venezuela. La única reestructuración desencadenada por la crisis actual fue la del Ecuador. Sin embargo, no es cierto que todos los emergentes caminan al borde del precipicio, o que debido a la emisión de deuda de los últimos años, toda esta clase de activos está a punto de implosionar.
Deuda y liquidez
Creo que hay tres razones principales por las que muchos emergentes son capaces de soportar un aumento de los niveles de deuda. En primer lugar, si bien la emisión de deuda agregada ha crecido considerablemente en la última década, en su mayor parte ha reflejado un incremento del número de países y empresas que emiten deuda, en lugar de que la carga se deba a uno o dos países (China es una excepción en este caso). Esto se ha visto favorecido por los programas de expansión cuantitativa (QE) en el mundo desarrollado y la demanda de rentabilidad.
Muchos de los nuevos participantes en los mercados de bonos tienen niveles de deuda que son razonablemente bajos (iguales o inferiores al 50% del PIB), mientras que algunos tienen coeficientes de interés de la deuda que son insosteniblemente altos. Sin embargo, en esos casos, la mayor parte de los bonos se han emitido en su moneda nacional, por lo que la deuda puede imprimirse, inflarse o renovarse. Los niveles insostenibles de deuda interna se manifiestan en mayores costes de intereses, desplazamientos de la curva de rendimiento, devaluaciones de la moneda y deuda a más corto plazo. Todo esto es increíblemente costoso económicamente, pero no implica un incumplimiento de la deuda externa, algo que suele ser muy inusual.
En segundo lugar, en respuesta a la pandemia mundial, se han puesto en marcha varias medidas de liquidez. Entre ellas se han incluido las facilidades de crédito rápido del FMI, el aumento de los servicios de préstamo de la misma institución, el alivio de la deuda a corto plazo del G20 y las líneas de canje de dólares estadounidenses de la Reserva Federal, entre otras medidas. Éstas han dado al mercado la confianza de que se disponía de apoyo y sugieren que de alguna forma habría una acción más coordinada para los mercados emergentes, si se necesitara. Parece que hacer lo que sea necesario para prevenir una depresión mundial es la prioridad número uno de las autoridades de los mercados desarrollados y los países de economía de mercado se beneficiarán de ello. Obsérvese que el apoyo bilateral es otra posible forma de financiación para los países de economía de mercado, a cambio de la lealtad y, en algunos casos, el acceso a los recursos naturales.
Por último, el acceso al mercado es importante, y creo que el momento de temor de un cierre de los mercados de capital a los emergentes ha pasado. Si los países pueden emitir bonos a nivel interno y/o externo, con una prima de riesgo adecuada y un incentivo para reducirla, no habrá una crisis de deuda. A principios de abril, esto no estaba tan claro. Los mercados se están abriendo y funcionando – todavía no para todo el mundo, y tal vez con una saludable y renovada volatilidad-, pero los bonos se están emitiendo, cotizando, comprando y, en general, van bien. Hay tanta liquidez a nivel mundial y el resultado es que el flujo de dinero fluye hacia la clase de activos. Creo que esta situación se mantendrá. Sin embargo, creo que el precio del riesgo seguirá siendo más elevado para los mercados emergentes que para otros activos de riesgo.
La rentabilidad de la deuda emergente en moneda local es la anomalía, ya que la mayoría están en sus niveles más bajos de todo el año. Algunos bonos en moneda local no se vendieron mucho, mientras que otros lo hicieron, pero volvieron a subir bruscamente. Esto tiene sentido ya que por lo general los tipos de interés han sido recortados de manera significativa, reduciendo los rendimientos. Lo que es interesante en la mayoría de los países emergentes es que las curvas de rendimiento también se han empinado mucho, reflejando la incertidumbre económica y de la inflación y unos tipos de cambio más baratos. La estrategia en este caso, que prefiero en general, es tener una larga duración final en mercados selectivos con curvas pronunciadas, pero no estar sobreponderado en general dados los riesgos de la inflación. La excepción son bonos de países asiáticos con grado de inversión, en los que creo que los tipos pueden bajar más y los mercados se comportan de manera más parecida a la de los mercados desarrollados.
Tribuna de Kirstie Spence, portfolio manager de Capital Group.
Pixabay CC0 Public Domain. Edmond de Rothschild Private Equity anuncian el primer cierre de ERES IV
La industria de inversión sigue desarrollándose. Algo perceptible no sólo por el gran número de estrategias diferentes de inversión que existen, sino también por los numerosos servicios financieros a los que puede tener acceso. Ahora bien, ¿cómo pueden diferenciarse los asesores financieros del resto de la industria? Para Cerulli Associates hay una palabra clave: la formación.
“Con el fin de diferenciarse, los asesores financieros deben proporcionar un apoyo significativo a los clientes y seguir siendo relevantes manteniendo al día su formación académica y obteniendo las certificaciones necesarias”, explican desde la compañía de consultoría. Según una investigación realizada por Cerulli Associates, se ha determinado que las credenciales de Certified Investment Management Analyst® (CIMA® ) y Certified Private Wealth Advisor® (CPWA® ), que otorga el Investments & Wealth Institute® (IWI), proporcionan un valor añadido a los asesores y favorecen el crecimiento de sus equipos.
Esta investigación concluye que los profesionales con las certificaciones CIMA y CPWA están alienados con las principales tendencias que ahora mismo se registran en la industria. Según explican desde Cerulli Associate el motivo es que ambos abordan la formación desde una visión integral de las inversiones. “En la actualidad, las prácticas certificadas de CIMA y CPWA proporcionan asesoramiento integral y continuo sobre la planificación de los clientes. En promedio, solo el 49% de todos los clientes que reciben asesoramiento obtienen una planificación financiera integral”, sostiene el informe
La consultora también destaca estas dos certificaciones porque considera que les enseña a operar con equipos grandes formado con personal especializado. En este sentido, destaca que “el trabajo en equipo permite ofrecer las capacidades y la experiencia necesaria para satisfacer las necesidades financieras más complejas de los inversores con altos patrimonios, sostener el talento de la próxima generación de asesores y ejecutar estrategias de crecimiento. Esto es especialmente importante, ya que los asesores buscan profundizar y ampliar su carta de servicios. Dos tercios (66%) de las prácticas certificadas por CIMA y CPWA operan en una estructura de equipo, en comparación con el 52% de todos los asesores”.
Por último, el estudio hace una referencia relevante a la tecnología y la capacidad de los asesores financieros en este ámbito. Según Cerulli Associates, la formación en el ámbito tecnológico es muy importante porque será lo que “salve la brecha entre los inversores actuales y las nuevas generaciones”.
«Durante más de 30 años, el Investments & Wealth Institute® (IWI) ha trabajado para mejorar la competencia y el profesionalismo del asesoramiento que se ofrece al público y para ayudar a los asesores a distinguir su experiencia en un mercado global y altamente competitivo. Este estudio muestra claramente el importante valor añadido que supone obtener las credenciales más avanzadas de CIMA® y CPWA® no solo en la gestión activos, sino para generar más confianza, satisfacer al cliente e impulsar la rentabilidad”, apunta Sean R. Walters, CAE, director ejecutivo del Investments & Wealth Institute.
El estudio de Cerulli Associates muestra que los asesores financieros que ofrezcan apoyo, orientación y formación, también para sus clientes, lograrán diferenciarse en el mercado. “La capacitación y los recursos permanentes del Investments & Wealth Institute® (IWI) ofrecen a sus miembros la oportunidad de seguir formándose para desarrollar aptitudes nuevas e involucrar a los clientes”, concluyen.
Pixabay CC0 Public Domain. El CISI advierte del aumento de atribuciones de certificación falsas
El número de personas que declararon falsamente poseer la certificación de planificador financiero certificado se duplicó el año pasado, según el Chartered Institute for Securities & Investment (CISI). El cuerpo profesional descubrió que 103 personas se atribuían falsamente su certificación en 2019, un aumento del 106%, de los 50 que supuestamente eran planificadores financieros certificados en 2018.
Según Jacqueline Lockie, directora de planificación financiera del CISI, la razón principal de este salto se debe a que varias personas declararon que eran planificadores financieros certificados en varios sitios web de búsqueda de asesores. Según Lockie, “una vez vimos algunos, buscamos metódicamente más. Y encontramos bastantes.No hemos visto un gran salto en aquellos que afirman que son CFPs [planificadores financieros certificados] en sus propios sitios web”.
El Chartered Insurance Institute también podría terminar investigando un número creciente de acusaciones relacionadas con el uso indebido del título colegiado este año, y el organismo ya ha analizado 57 quejas en lo que va de 2020. El dato que hay debe compararse con las 86 empresas acusadas de tergiversar el estatus de certificación en 2019, de las cuales el CII investigó más a fondo 12. El año pasado, el equipo legal del organismo comercial también se ocupó de 26 casos relacionados con otras quejas de marcas registradas.
Melissa Collett, directora normas profesionales de la CII, afirma: “Proteger el estatus de la empresa para aseguradoras, corredores y planificadores financieros es importante para nosotros, y es por eso que tenemos nuestras reglas corporativas autorizadas para garantizar que el estatus se use adecuadamente en beneficio de las empresas y del público. Cuando una empresa se presente como aseguradora, corredora o planificadora financiera autorizada de manera incorrecta, investigaremos su situación y nuestro equipo legal se comunicará con la empresa directamente para asegurarse de que esto se rectifique. Continuaremos usando estos poderes donde creamos que es necesario para proteger la reputación del título colegiado. Cualquier comportamiento que conduzca o pueda conducir a que los consumidores sean engañados es contrario al código de ética del CII y daña los esfuerzos no solo del CII, sino también de todo el sector en trabajar para asegurar la confianza pública en la profesión”.
Por su parte, Darren Cooke, planificador financiero colegiado en Red Circle Financial Planning, asegura que era “bastante fácil” verificar el estado de un asesor, pero que la mayoría de los miembros del público no saben dónde buscarlo y, por lo tanto, pueden ser víctimas de atribuciones falsas.
Según Cooke, “Chartered es un título protegido. Fue un honor difícilmente ganado por el CII poder otorgar el estatus de chartered [‘colegiado’] a individuos y empresas calificados, y los criterios para obtener ese estatus y poder usarlo no son fáciles, deliberadamente. En ambos casos, uno de los elementos clave de la membresía de la Personal Finance Society y del CISI es la integridad. Diría que cualquiera que se descubra que está utilizando falsamente uno de estos títulos ha violado ese estándar clave y debería rechazarse su membresía en el futuro, lo que pondría en peligro su capacidad de mantener un estado de prestigio profesional”.
Engañar al público
En 2017, el órgano de control «Which?» descubrió que casi dos tercios de los asesores enumerados en ese momento en Unbiased podrían haber estado engañando al público con afirmaciones falsas sobre sus credenciales. En aquel momento, Which? también encontró que siete de las 24 compañías afirmaron falsamente que estaban acreditadas por la Society of Later Life Advisers, y 14 de las 72 afirmaron tener asesores con estatus de planificador financiero colegiado a pesar de no emplear a nadie con esta credencial.
En el mismo año, el CISI amenazó con llevar a los asesores a los tribunales si utilizaban de manera fraudulenta la designación de planificador financiero certificado. Karen Barrett, directora ejecutiva y fundadora de Unbiased, apunta que “no tenemos conocimiento de ningún asesor financiero regulado que tergiverse sus calificaciones del CISI, o cualquier cualificación en nuestra plataforma, ni, incluso, que se tergiverse más ampliamente en sus relaciones con el público, pero, si este fuese el caso, instaría al CISI a actuar rápidamente y a tomar las medidas apropiadas dado el riesgo de engaño al público y la integridad de la marca CISI”.
“En nuestra experiencia de tratar con asesores durante la última década, es extremadamente raro que un asesor, a sabiendas, afirme ser algo que no es, y es más probable que una persona haya avanzado y no haya actualizado los detalles de la oficina”, añade Barrett.
Agregó que el reciente movimiento de la FCA [Financial Conduct Authority] para eliminar datos individuales de su fuente de datos no ha mejorado la situación en términos de monitoreo, y añadió: “Recientemente hemos aumentado los recursos de nuestro equipo de servicios al cliente para que podamos verificar aún más los datos individuales en nuestra plataforma para asegurar que nuestros estándares de datos se mantengan”.
*Traducción al castellano del artículo “False certified status claims rising, CISI warns”, de Rachel Mortimer, publicado en el Financial Adviser (Financial Times) el 20 de febrero de 2020
Pixabay CC0 Public Domain. Robeco, BNP Paribas AM y Legal & General IM lideran el ranking de la evaluación de inversión responsable ShareAction
Robeco, BNP Paribas AM y Legal & General IM ocupan los tres primeros puestos en el ranking Asset Owners Disclosure Project (AODP), un proyecto gestionado por la organización de inversión responsable ShareAction. La institución ha clasificado a 75 de los mayores gestores de activos del mundo según sus prácticas de inversión responsable, con un enfoque específico en la gobernanza, el cambio climático, los derechos humanos y las normas laborales y la biodiversidad.
La encuesta clasifica a los gestores de activos en función de la divulgación y gestión de los riesgos e impactos ESG en sus carteras. Utilizando los datos recopilados a través de una extensa encuesta alineada con TCFD, así como de información disponible públicamente, el informe ofrece una visión general de las tendencias globales en la adopción de prácticas de inversión responsable dentro de la industria de gestión de activos.
“Los inversores institucionales, como los fondos de pensiones, que tienen el deber de actuar en el mejor interés de los ahorradores o de actuar con prudencia (dependiendo de la jurisdicción) deben examinar cuidadosamente la forma en que sus gestores abordan los factores ESG en la asignación y administración de activos. Los enfoques de estos gestores pueden resultar incompatibles con la próxima generación de clientes que buscan una mayor transparencia y productos más sostenibles, así como con los requisitos reglamentarios cada vez más estrictos que emanan de los legisladores, como la UE”, advierte el informe.
Según Félix Nagrawala, analista senior de ShareAction, «el estudio revela quién está realmente predicando con el ejemplo sobre temas ambientales y sociales, y quiénes se han quedado dormidos en el espacio de la gestión de activos. Si bien muchos en la industria están ansiosos por promover sus credenciales de ASG, nuestro análisis indica claramente que pocos de los gestores de activos más grandes del mundo pueden afirmar tener un enfoque verdaderamente sostenible en todas sus inversiones. Nuestros resultados muestran que algunos gestores de activos, incluido Robeco, que ocupa el primer lugar, muestran un liderazgo real y son la excepción positiva«, apunta
“Nuestra evaluación muestra que el 51% de los gestores de activos tienen un enfoque muy limitado para gestionar los riesgos y los impactos de los ESG, y reciben una calificación D o E. El 16% de los gestores evaluados tienen una calificación CCC – C, lo que muestra un rendimiento limitado. Sólo el 33% de los gestores evaluados muestran un buen rendimiento, que se sitúa en las bandas AAA – B. A pesar de que los gestores de activos suelen promover sus credenciales de ASG, es evidente que el sector en su conjunto tiene un largo camino por recorrer para incorporar la inversión responsable”, apunta el documento en sus conclusiones.
El informe también revela que existen grandes diferencias entre los mercados regionales y que muchos gestores de activos aún no logran traducir sus compromisos públicos en acciones claras sobre una mayor y más amplia integración de criterios ASG. “Los gestores de activos europeos muestran un rendimiento más fuerte en relación con los gestores de EE.UU. y el resto del mundo. Su mejor rendimiento general puede atribuirse en parte al fuerte marco regulatorio. Esto contrasta fuertemente con los Estados Unidos, donde ha habido mucho menos progreso en la legislación de finanzas sostenibles. También ha habido un fuerte posicionamiento política sobre que el cambio climático no es una prioridad para la administración Trump y la Comisión de la Bolsa de Valores de los Estados Unidos”, matiza el informe en sus conclusiones.
Pixabay CC0 Public Domain. ¿Qué nos espera en el segundo semestre del año de la pandemia?
Empezando por Estados Unidos, tenemos una visión un poco más optimista respecto a la segunda mitad del año. Pero, por supuesto, también hay que tener en cuenta que todavía hay muchos vientos en contra que potencialmente van a afectar negativamente a nuestra perspectiva de crecimiento.
Vemos como muy, muy acomodaticio el telón de fondo de la Reserva Federal. Ciertamente no esperamos ver a la Fed haciendo nada que le dé un giro negativo al crecimiento desde el punto de vista de la política de tasas de interés, por lo que esperamos que las tasas de interés se mantengan bastante relajadas hasta el final de este año y hasta bien entrado el próximo, y probablemente hasta 2022. En el aspecto fiscal, las cosas son más interesantes; aquí podría llegar potencialmente algún viento en contra, a medida que el impacto del virus continúa abriéndose camino, porque seguimos viendo una lenta recuperación, que se puede clasificar como desigual.
Por eso es importante el aspecto fiscal. Los planes presentados ayudaron a salvar la brecha para muchas de las personas que han sido despedidas definitiva o temporalmente en Estados Unidos. Si el Congreso empieza a reducir algunos de esos remedios fiscales, ofreciendo tal vez un seguro de desempleo más bajo, o incluso a recortarlo drásticamente, ese tipo de impactos van a empezar a filtrarse en las perspectivas de crecimiento; esa sigue siendo una de las preocupaciones que tenemos.
Pero, al mismo tiempo, las perspectivas de encontrar una vacuna siguen mejorando y eso también va a ayudar, va a constituir un factor de confianza que sostiene el telón de fondo de la economía americana.
Año electoral en EE.UU.
Otra de las cosas interesantes es qué va a pasar con la Casa Blanca. Tenemos que advertir a la gente que cuando se piensa en los riesgos de las elecciones en EE.UU., hay que tener en cuenta que es la mayoría de las cosas que son significativas para el contexto económico general tienen que pasar por el Congreso. El proverbio de que el Congreso controla los hilos de la Bolsa es realmente importante cuando pensamos en riesgos de las elecciones presidenciales. Ahora tenemos divididas las Cámaras, pero si los demócratas barren en las elecciones y controlan el Congreso y el Senado y, al mismo tiempo, Biden gana la presidencia; entonces el panorama cambia.
Creemos que el mercado está realmente preocupado respecto a las políticas que pueden venir: impuestos individuales y corporativos más altos. Pero cuando empezamos a pensar en la cantidad de déficits fiscales que se van a financiar en el futuro, no es sorprendente que el telón de fondo para la mayoría de los inversores sea que en algún momento van a empezar a tener en cuenta el aumento de los costos de financiación. Por lo tanto, no es algo realmente nuevo, per se; por lo que tal vez se ha ‘pensado demasiado’ en el impacto adverso con el telón de fondo de las elecciones de EE UU. Además, la compensación a esos vientos en contra, podría ser una política exterior mucho más conciliadora en marcha desde una potencial Casa Blanca de Biden.
Así que, para completar el círculo, una vez más, gran parte del riesgo electoral está ahí fuera, pero creemos que es muy conocido, probablemente ya se está descontando en algunas partes. Sin duda habrá algunas complicaciones, pero también habrá probablemente algunas mejoras positivas que compensen eso.
El contexto electoral estadounidense evidentemente afecta a Europa, donde que la parte más importante es que hemos comenzado la recuperación. Parece que lo peor ya ha pasado desde una perspectiva económica. Abril fue claramente el mes más bajo. Hemos tenido ese rebote inicial en forma de V. Probablemente no continúe tan rápidamente hacia adelante. Va a ser lento, va a ser gradual y va a ser desigual. La forma en la que estamos pensando es como la del logo de Nike whoosh; al principio tenías una V más grande y luego se va a ir reduciendo un poco con el tiempo.
El Viejo Continente
Y por supuesto, si hablamos de Europa no podemos dejar de mencionar el fondo europeo de recuperación que se acordó finalmente. Hay muchos debates sobre el porcentaje de subvenciones frente a préstamos. Pero lo más importante es que se va a conseguir una emisión de deuda común por parte de la Comisión Europea, y luego, probablemente, impuestos a nivel de la UE de una manera u otra para pagar esto. Por lo tanto, estás viendo un gran, gran paso y el mayor en años hacia una mayor cooperación e integración en toda la eurozona.
Ahora, la mayor parte de eso va a tomar tiempo. Sabemos que los europeos son lentos para poner las cosas en movimiento y el siguiente paso para una Unión aún más fiscal probablemente va a tomar mucho tiempo. Del mismo modo, el riesgo del Brexit no ha desaparecido completamente y podemos esperar cierta volatilidad. Pero las perspectivas de integración suponen un gran paso para Europa y realmente apoyarán las perspectivas a medio plazo. Algunos vientos en contra están apareciendo, pero mientras la recuperación no se detenga de nuevo, incluso si está llena de baches, si seguimos caminando por este camino, el apetito por el riesgo y los mercados se mantendrán respaldados.
En general, en Europa y también en Asia, por cierto, estamos teniendo una buena reapertura hasta ahora, quizá mejor de lo esperado. Hemos visto rebrotes aquí y allá; en Japón, Pekín, Barcelona, incluso en Alemania. Pero mientras no nos enfrentemos a otro cierre generalizado y realmente no creemos que eso sea probable, la situación es perfectamente manejable para las economías. La recuperación continúa.
Pixabay CC0 Public Domain. Mercado de renta variable: ¿qué aprendimos de otras pandemias del siglo XX?
Las pandemias son acontecimientos poco frecuentes, pero la historia puede darnos importantes pistas sobre qué cabe esperar. Con esta visión, Robeco ha realizado un estudio que analiza qué ocurrió con situaciones similares en el pasado y su efecto en el mercado de renta variable. Dado que los momentos históricos son diferentes, la gestora reconoce que el análisis no es exacto, pero sí nos puede ofrecer cierta orientación.
Para su estudio, Robeco ha analizado el comportamiento que han tenido los distintos estilos de renta variable (o factores) durante la pandemia actual del coronavirus y lo ha comparado con el periodo del brote de gripe española de 1918-1919 y la Primera Guerra Mundial. Partiendo de nuestros días y de la actual crisis sanitaria que estamo viviendo, la gestora observa que, desde el inicio de 2020, los distintos estilos de renta variable han mostrado una evolución “muy dispar”.
“Los factores de momentum y baja volatilidad han mostrado una rentabilidad positiva en relación con el mercado, mientras que los títulos de capitalización reducida y dividendo elevado (value) han obtenido peores resultados. En retrospectiva, los inversores deberían haberse centrado solo en baja volatilidad y momentum para encontrar cierta protección durante el primer trimestre de 2020. Marzo ha resultado particularmente complicado para los factores. La orientación, aunque fuera reducida, hacia acciones value habrá resultado significativamente perjudicial para los resultados en este periodo de venta masiva”, explican desde Robeco.
Aunque cada pandemia y crisis sanitaria es diferente, la gestora ha tomado como referencia para comparara la gripe “española” de 1918-1919, que se produjo en tres oleadas: la primera comenzó en marzo de 1918 y duró hasta el verano; la segunda ola fue la más letal y tuvo lugar durante el otoño de 2018 (de octubre a diciembre); y la tercera fue en la primavera de 1919 (febrero). Durante esta pandemia, que se extendió por todo el mundo a través de los viajeros y los soldados que luchaban en la Primera Guerra Mundial, alrededor de 40 millones de personas murieron en todo el mundo desde principios de la primavera de 1918 hasta finales de la primavera de 1919, de ellas, 675.000 solo en Estados Unidos (alrededor del 0,8% de la población de 1910).
Durante esta pandemia, la gestora recuerda que, al igual que ahora, muchas empresas tuvieron que hacer frente a importantes trastornos económicos debido a la falta de trabajadores, al cierre temporal de otros negocios y a la caída de la demanda. Además, la pandemia se produjo hacia el final de la Primera Guerra Mundial, un período de gran tensión económica y graves caídas en el mercado, como se ilustra a continuación.
¿Cómo se comportaron los mercados de renta variable y los factores durante este período? “No existen datos relativos a los años en torno a 1918 en la base de datos de uso general CRSP, que comienza a partir de 1926. Por ello, la mayoría de los inversores desconoce cuál fue la evolución de los factores durante el período en que tuvo lugar el brote de gripe en española. Quizás se podrían extraer conclusiones de este período (y de otros sell-offs ocurridos antes de 1926)”, señalan como advertencia.
Pero para responde a esta pregunta, Robeco ha utilizado los datos de todos los valores estadounidenses cotizados y sus características que se incluyen en el estudio de Baltussen, Van Vliet y Van Vliet (2020). Al estudiar los estilos de renta variable, señala que ha sido relevante introducir ajustes para corregir el efecto del tamaño, ya que las compañías de capitalización reducida tienden a mostrarse más sesgadas y volátiles, y pueden condicionar los resultados.
Principales conclusiones
Tras este análisis, destaca tres conclusiones. En primer lugar que el mercado de valores alcanzó su pico máximo en noviembre de 1916, pero seguidamente sufrió una venta masiva que lo hizo tocar fondo un año después. Ante el alivio generado por el final de la guerra, se inició una recuperación, y fue entonces cuando se produjo la gripe española. En la figura siguiente se muestra la evolución del mercado de valores y los estilos de renta variable durante el periodo comprendido entre el pico máximo del mercado durante la Primera Guerra Mundial y la duración de la gripe española (noviembre de 1916), hasta que el mercado tocó fondo (noviembre de 1917) y tuvo lugar la subsiguiente recuperación (febrero de 1919).
En segundo lugar que, a lo largo de este período, el mercado cayó alrededor del 20%, desde su máximo hasta su mínimo, debido a los acontecimientos negativos relacionados con la Primera Guerra Mundial. Las acciones de alto dividendo y baja volatilidad ofrecieron protección, aunque no tanto como en otras correcciones del mercado. Todas las acciones se desplazaron en paralelo, y las correlaciones aumentaron. No había sitio donde esconderse. Un poco como el reciente sell-off de marzo 2020. Posteriormente, los mercados se recuperaron, aunque con un bache en torno al primer brote de gripe española.
Y por último, el análisis de Robeco concluye que los mercados se recuperaron por completo a final de febrero de 1919. Durante la corrección, las acciones de capitalización reducida registraron rentabilidades comparativamente inferiores, y las acciones ganadoras evolucionaron en línea con el mercado. En el subsiguiente periodo de recuperación, las acciones de capitalización reducida fueron las que ofrecieron mejores resultados.
“Curiosamente, durante las recuperaciones que siguieron a otras pandemias, las acciones de capitalización reducida y dividendo elevado ofrecieron rentabilidades superiores”, añaden.
Foto cedidaNick Maroutsos, director de bonos globales y gestor de fondos en Janus Henderson Investors. Nick Maroutsos, director de bonos globales y gestor de fondos en Janus Henderson Investors
Nick Maroutsos, director de renta fija global en Janus Henderson Investors, considera intrascendente la decisión de la Fed de no mover los tipos, pues mediante sus decisiones el banco central ya ha mostrado su disposición a hacer lo que sea necesario para respaldar la economía estadounidense durante este periodo sin precedentes.
En la opinión del experto de Janus Henderson, la decisión de la Reserva Federal estadounidense (Fed) en su reunión de julio de mantener los tipos de préstamo a un día entre el 0,00% y el 0,25% resultó intrascendente. Pero, como demostró el nivel de atención dedicado a las declaraciones del presidente Jerome Powell y compañía, en los mercados financieros, la Fed sigue siendo la única alternativa.
Todavía no estamos fuera de peligro
El presidente Powell mantuvo su reciente mensaje de que la economía estadounidense sigue sumida en un fuerte desplome, ya que la caída de la demanda provocada por la pandemia de coronavirus ha lastrado fuertemente el empleo y la actividad económica. En consecuencia, la Fed mantuvo sus previsiones de máxima flexibilidad y reiteró que está lista para utilizar todas las herramientas de que dispone para lograr su doble objetivo de pleno empleo y estabilidad de los precios.
Sin embargo, dada la naturaleza de esta crisis y ante la posibilidad de una segunda ola del virus en lo que resta de año, en Janus Henderson se hacen esta pregunta: ¿Y después qué? Al fin y al cabo, un balance de 7 billones de dólares podría haber sido suficiente para respaldar los mercados financieros, pero con una tasa de desempleo del 11,1% (1) (18% si se incluyen los trabajadores escasamente vinculados a la fuerza laboral) —cifras que podrían aumentar ya que algunos estados tratan de atajar un aumento de los contagios—, se puede afirmar que falta mucho por hacer para apoyar la economía real.
Adopción del control de la curva de tipos
Esa diferencia probablemente sea una garantía para el sector corporativo de que las condiciones de endeudamiento seguirán siendo favorables en un futuro previsible. Una de las herramientas que se ha planteado es el control de la curva de tipos. Con dicha medida, un banco central se compromete a mantener los tipos de interés en un determinado intervalo haciendo todo lo necesario, en lugar de comprometerse simplemente a comprar una cantidad específica de activos, lo que podría tener o no los efectos deseados en los tipos. Antes de la reunión de septiembre de la Fed, en Janus Henderson creen que pueden aumentar las peticiones para que se adopte una medida de este tipo y, por ello, en las próximas semanas, estarán atentos a los comentarios de los miembros de la Fed sobre esta cuestión.
Adelante, ¡alégrame el día!
El control de la curva de tipos lleva implícita la amenaza velada de que los mercados no deben poner a prueba la determinación de un banco central. En Janus Henderson creen que la Fed ya lo ha hecho al indicar que mantendrá los tipos estables al menos hasta 2022, al igual que la velocidad, e incluso la comodidad, con la que casi multiplicó por dos el tamaño de su balance el año pasado. Así lo piensa claramente el mercado, dado el fuerte repunte de los precios de la renta variable y el crédito corporativo.
Algunos indicadores de volatilidad del mercado de renta fija en mínimos históricos confirman también las expectativas de que los tipos no se van a mover ni un ápice. Y si observamos los países que ya han aplicado el control de la curva de tipos —a saber, Japón y Australia—, las masivas compras de bonos han resultado ser innecesarias, ya que los mercados no se han mostrado dispuestos a ir contra las operaciones del banco central. Imaginamos que esto mismo sucedería aún más en EE.UU., debido a la influencia global que tienen tanto la Fed como el dólar estadounidense. En resumen, el control de la curva de tipos en EE.UU. sería muy poco efectivo en el mejor de los casos, pero puede que totalmente innecesario
Situación difícil para los inversores en renta fija
La preponderancia total de la Fed en los mercados financieros no solo distorsiona los indicios de solidez económica, inflación y perspectivas de las empresas, sino que su eliminación de los rendimientos ha complicado las cosas para los inversores en bonos. En la última década, los inversores se han acostumbrado a unos niveles inferiores de cupones en sus posiciones en renta fija. Para compensar esto, la revalorización del capital ha llegado a suponer una mayor proporción de las rentabilidades totales. Captar estas rentabilidades resultaba más fácil en los años anteriores a 2015, antes de que la Fed empezara a subir los tipos a un día. Durante ese periodo, las curvas de tipos más pronunciadas permitían subidas de los precios de los bonos a medio plazo conforme se acercaban al vencimiento. Mientras que los rendimientos de los bonos del Tesoro de EE.UU. a 2 años se han desplomado tras la pandemia, los de los bonos a 10 años no andan muy por detrás, lo que reduce la posibilidad de renovación cuando vencen los bonos.
Buscar opciones mejores
Dado el mayor apetito de rendimiento en el mundo, las carteras de renta fija deben esforzarse más para cumplir su objetivo de ofrecer unos niveles atractivos de rentabilidades ajustadas al riesgo. Aunque puede decirse que la Fed ha contribuido a provocar este problema, también ha ofrecido parte de la solución. En la opinión de Janus Henderson, está en el crédito investment grade. La curva de tipos de la deuda corporativa no solo está más pronunciada que la del Tesoro, sino que con el respaldo implícito de la Fed al mercado de crédito investment grade —y dudan que la Fed tenga interés alguno en perder dinero con sus inversiones—, este segmento del mercado parece ofrecer un potencial atractivo de revalorización del capital con un riesgo menor del usual de caída importante del precio, gracias a la generosidad de la Fed.
De forma similar, países como Australia, Nueva Zelanda y muchos de la región de Asia excepto Japón ofrecen oportunidades de encontrar créditos de mayor calidad —a menudo casi con respaldo estatal— a mayores descuentos que sus homólogos de EE.UU. de una calidad crediticia similar.
Mantener la perspectiva
Aunque en Janus Henderson traten de encontrar rentabilidades ajustadas al riesgo atractivas, no pierden de vista el contexto difícil en el que se encuentra la economía. El número de casos del virus va en aumento en EE.UU., algunas zonas de Europa están sufriendo rebrotes y la vacuna no está asegurada. Tampoco hay que olvidar que este es un año electoral en EE.UU., en el que se debatirá todo, desde los impuestos al comercio y la legislación. Con esta combinación de riesgos potenciales, las carteras de renta fija podrían tener que priorizar su capacidad de ofrecer diversificación con respecto a los activos de mayor riesgo y reducir la volatilidad durante el resto del año.
Anotaciones:
(1) Fuente: Oficina de Estadística Laboral de EE. UU., tasa de desempleo estándar U3 de junio, Resumen de situación del empleo, 2 de julio de 2020. La tasa de desempleo U6, que incluye también los empleados precarios, los trabajadores escasamente vinculados y desalentados, se situó en el 18% en junio de 2020, según la Fed de San Luis.
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Pixabay CC0 Public Domain. La mayoría de factores sanitarios, económicos y financieros favorecen un euro/dólar más fuerte en los próximos meses
El euro continúa su escalada frente al dólar, que ayer superó ya los 1,18. Según el análisis que hace Ebury, fintech especializada en pagos internacionales e intercambio de divisas, la mayoría de los factores sanitarios, económicos y financieros en la zona euro seguirán favoreciendo un euro/dólar más fuerte en los próximos meses.
“La diferencia en los nuevos contagios por COVID-19 entre EE.UU. y Europa y las amplias medidas fiscales y monetarias anunciadas por las autoridades europeas deberían permitir que la economía de la Eurozona se recupere a un ritmo más rápido que la estadounidense”, señala la entidad financiera en su informe de previsión relativo a las monedas del G3. “Dado este contraste entre ambos lados del Atlántico, estamos revisando al alza nuestras previsiones para el euro/dólar”, añade el documento.
La fintech recuerda que el par euro/dólar se ha apreciado en torno a un 9% desde mediados de mayo, debido a la mejora del ánimo en el mercado, la diferencia en los datos del COVID-19 entre EE.UU. y Europa, y la aprobación del paquete de estímulos fiscales de la UE. El euro se está cotizando ahora en torno a su posición más fuerte desde mayo de 2018, tras haber subido por encima del nivel de 1,19 frente al dólar.
Sobre EE.UU. y Reino Unido
Por el contrario, Ebury se muestra pesimista sobre las perspectivas para el dólar. “Seguimos previendo una depreciación del dólar frente a la mayoría de las principales divisas. Y seguimos creyendo que el dólar seguirá una tendencia bajista este año y, de hecho, hay más riesgos para la recuperación económica de Estados Unidos que para la mayoría de los demás países desarrollados (concretamente la zona euro)”, argumenta Ebury, que considera que “la incapacidad de las autoridades americanas para frenar la propagación del virus ya ha comenzado a canalizarse a través de un dólar más débil”.
En relación con la Libra Esterlina, Ebury subraya que ésta ya ha recuperado más del 10% de su valor frente al dólar americano desde los mínimos alcanzados en marzo, su nivel más bajo frente al dólar desde 1985.
“Creemos que la venta que llevó a la libra a su nivel más bajo frente al dólar estadounidense en más de tres décadas fue ligeramente excesiva y estuvo impulsada en gran medida por el miedo de los inversores”, explica Ebury. No obstante, cree que la economía de Reino Unido continuará recuperándose, incluso a mayor ritmo que Estados Unidos, lo que le permite prever “una subida del GBP/USD tanto este año como el próximo, aunque la posibilidad de «no acuerdo» en el Brexit a finales de año presenta un riesgo para estos pronósticos”.
Pixabay CC0 Public Domain. La AEFI crece un 15% en 2020 y se consolida como la principal referencia en el ámbito del Fintech en España
La presión en los márgenes es una tendencia común para toda la industria de gestión de activos, también para los gestores de fondos alternativos. Según señala el informe European Alternative Investments 2020: Matching Different Demands, elaborado por Cerulli Associates, éstos deberán adaptar sus comisiones y tarifas si quieren seguir siendo competitivos.
El ejemplo más claro de cómo esta tendencia también les está afectando es que, según el documento de Cerulli Associates, el 30% de los gestores de hedge funds ha tenido que reducir sus comisiones de gestión y rendimiento en los últimos 12 meses. “Los gestores de hedge funds están experimentando unos rendimientos poco atractivos y un estrechamiento en sus comisiones. En cambio, los gestores de private equity se están beneficiando de un sentimiento de mercado algo más favorable hacia este tipo de inversión. A largo plazo, la mayor competencia entre gestores también afectará a los márgenes de los gestores de private equity”, destaca el informe.
Las conclusiones del informe también destacan aspectos positivos como por ejemplo que las comisiones y la alineación de los intereses con los clientes están mejorando en la industria de hedge funds. En este sentido, advierte que los gestores de private equity son los que están “más retrasados” en cuanto a actualizar su estructura de comisiones. El documento explica que aunque la negociación de las comisiones de transferencia es poco frecuente, los socios limitados (LP) deberían prestar cada vez más atención a las condiciones contractuales que establecen el uso de las líneas de suscripción. “Exigir a los gestores que vuelvan a calcular el ajuste del rendimiento por el uso de las líneas de suscripción puede ayudar a superar las cuestiones relativas a la manipulación del rendimiento y el cálculo de las comisiones de transferencia”, explican.
En opinión de Justina Deveikyte, directora adjunta de análisis institucional de Cerulli y autora principal del informe, para sobrevivir a la presión de las comisiones, los gestores de activos deben adaptarse. “Deben utilizar estructuras de honorarios innovadoras para alinear mejor los intereses y demostrar el valor. Es importante que estos nuevos y creativos modelos de fijación de precios ofrezcan nuevas opciones sin abrumar a los clientes. Los gestores deberían considerar la posibilidad de introducir tarifas más a largo plazo o de cobrar tarifas de gestión más bajas, pero de mayor rendimiento», apunta Deveikyte.
Alrededor del 14% de los gestores encuestados por Cerulli afirmó que tiene pensado introducir comisiones de larga duración y estructuras de tarifas más innovadoras en los próximos 12 meses. La misma encuesta señala que los gestores de hedge funds indicaron que están dispuestos a ofrecer honorarios más bajos a los clientes con mayor volumen y, estratégicamente, más importantes, aunque normalmente ofrecen “descuentos” significativos solo en mandatos grandes y para clientes que ofrecen oportunidades de venta cruzada.
Desde la firma de consultoría advierten que cada vez son más los clientes institucionales, en parte ya que son un tipo de inversor más sofisticado, los que directamente preguntan a los gestores por sus estructuras de comisiones y tarifas, esperando que se vayan reformulando a la baja.
Descuentos para grandes clientes
Según la encuesta, casi la mitad de los grandes inversores institucionales (aquellos con activos superiores por un valor de 15.000 millones de euros) reconoce que los gestores de hedge funds les suelen aplicar descuentos. Además, el 52% de los inversores institucionales afirma que los descuentos que logran en los hedge funds onshore oscilan entre el 1% y el 10%, y el 26% dijo que, en promedio, logran un descuento de hasta el 20%. Las estrategias que ofrecen más alfa tienden a tener menos descuentos: solo un tercio de los encuestados dijo que siempre obtienen descuentos para los hedge funds en el extranjero.
Respecto a las estrategias de private equity, el informe señala que son las “más resistentes” a la presión de las comisiones. Solo el 22% de los inversores institucionales encuestados afirmó que logra algún descuento y un tercio de ellos apuntó que nunca los obtienen para el caso de las inversiones de real estate. Eso sí, la mayoría de los inversores coincide en destacar que no les importa pagar comisiones si sus gestores son capaces de conseguir un rendimiento por encima de lo que ofrece el mercado.
“Es probable que los rendimientos sigan siendo bajos durante un tiempo, lo cual mantendrá la atención de los inversores institucionales en las estructuras de comisiones que les cobran sus gestores. Las inversiones de private equity y los hedge funds deberían valorar el lanzamiento de nuevos productos y la búsqueda de nuevos canales de distribución para equilibrar el alto nivel de competencia y sus costes”, concluye Deveikyte