El ejecutivo que lideró el área de Finanzas Corporativas de Credicorp Capital por media década ahora tiene nuevos horizontes. Heinrich Lessaufue reclutado por el banco de inversiones peruano LXG Capital.
El profesional anunció el cambio a través de su perfil profesional de LinkedIn, señalando que se incorpora a la firma como Managing Director.
Antes de llegar a LXG Capital, Lessau pasó una década en Credicorp Capital, donde primero se incorporó como Managing Director de Researchpara la región andina. Luego pasó casi cuatro años como Managing Director a cargo de Credicorp Capital Securities, en Miami. El cargo de Managing Director de Finanzas Corporativas, por su parte, lo ocupó entre mediados de 2018 y fines 2023.
Además, durante sus más de 30 años de experiencia, el ejecutivo ha ocupado puestos en distintas entidades de la industria financiera chilena. Según consigna su perfil profesional, inició su carrera en Santander, donde ocupó los cargos de Head of Research y Head of Equity Capital Markets.
Más adelante, trabajó como Country Manager para Chile y CIO en Legg Mason y Head of Planning and Marketing en Banchile Inversiones. Después, pasó cuatro años al mando de la gerencia general de la corredora de bolsa de BICE Inversiones.
LXG Capital, por su parte, es un banco de inversiones regional, con oficinas en Lima y Buenos Aires. Con todo, la firma opera en distintos países de América Latina, incluyendo México, Chile, Colombia y Brasil. La firma se especializa en fusiones y adquisiciones, asesoría y levantamientos de capital para compañías de distintos rubros.
Santander Private Banking International (PBI) sumó a Andrés Rodríguez como banquero senior en su oficina de Miami.
El banquero llega procedente de Citi, donde trabajó casi 19 años especializado en clientes latinoamericanos de ultra alto patrimonio (UHNW), según su perfil de LinkedIn.
Además, en Citi promovió «una gama completa de productos de gestión de patrimonios y banca privada para lograr los objetivos financieros del cliente», dice su descripción en LinkedIn.
Previo a Citi, Rodríguez trabajó en Ameriprise Financial Services entre 2003 y 2005.
Tiene estudios en Finanzas por la University of Phoenix y un MBA por la Florida International University.
En enero, Santander PBI realizó cambios en su dirección y sumó nuevos banqueros como Víctor Moreno-Barbera y Fernando Senso Castilla.
Thornburg Investment Management sumó a Richard Kuhn como head de Producto y a Jonathan Schuman para el cargo de head de Internacional efectivos a partir del 1 de abril con el foco de potenciar los objetivos de crecimiento e innovación.
Kuhn llega procedente de Invesco y reportará al jefe global de Distribución, Jesse Brownell.
En Invesco trabajó durante 20 años y en su puesto más reciente como responsable de estrategia y desarrollo de productos en EE.UU., Kuhn estuvo “ocho años innovando, desarrollando e implementando planes estratégicos para líneas de productos tanto minoristas como institucionales”, dijeron fuentes de la industria a Funds Society.
Schuman por su parte, llega procedente de Weston Partners y reportará directamente al CEO, Mark Zinkula.
Trabajó durante 12 años en Matthews Asia como Global Head de Distribución y Head Global de Desarrollo de Negocio donde desarrolló el negocio internacional de la firma desde cero.
Anteriormente, trabajó en AIG y PineBridge Investments en Japón, según su perfil de LinkedIn.
Las personas que invierten su patrimonio esperan, de media, jubilarse tres años antes que aquéllos que no invierten sus ahorros, según desvela una encuesta de la empresa de estudios de mercado YouGov, encargada por el mercado privado de inversiones ADDX. La brecha en las expectativas de jubilación es más pronunciada en el caso de los inversores con asignaciones a activos del mercado privado, que esperan jubilarse nueve años antes que los no inversores. La encuesta abarcó tanto Europa como Asia.
Según el estudio, la edad media prevista de jubilación es de 62,1 años entre los no inversores y de 59,2 años entre los inversores. Para los que invierten en los mercados privados, la edad media de jubilación prevista es aún más baja, de 53 años. En total, sólo el 19% de las personas que no invierten esperan jubilarse antes de los 60 años, frente al 31% de las personas que invierten. En el caso de las personas que invierten en activos del mercado privado, esta cifra se eleva al 47%.
Importante brecha de género en las conductas de inversión
Globalmente, el 29% de los encuestados no invierte. La brecha de género es significativa, ya que casi 4 de cada 10 mujeres (37%) no invierten, frente a sólo 2 de cada 10 hombres (21%) que afirman lo mismo.
La brecha de género se traduce en una diferencia entre las expectativas de jubilación de hombres y mujeres. El 76% de las mujeres espera jubilarse después de los 60 años, frente al 68% de los hombres. La brecha de género en la edad de jubilación existe tanto en Europa como en Asia. Por término medio, las mujeres esperan jubilarse a los 61,1 años, frente a los 59 de los hombres.
La encuesta también reveló que los hombres que invierten tienden a adoptar un estilo de inversión «hágalo usted mismo», en comparación con las mujeres. Alrededor del 81% de los hombres afirmaron invertir total o mayoritariamente por su cuenta, frente al 64% de las mujeres.
Las mujeres y los hombres también valoran de forma diferente las fuentes de asesoramiento en materia de inversión. Las mujeres tienden a valorar los consejos de inversión de asesores financieros y familiares (51% y 39% respectivamente, frente a 41% y 29% en el caso de los hombres), mientras que los hombres valoran ligeramente más los consejos de los medios de comunicación sociales y en línea (22% y 15% respectivamente, frente a 19% y 12% en el caso de las mujeres) y las redes sociales (22% y 15% respectivamente, frente al 19% y 12% de las mujeres).
Por grupos de edad, la proporción de no inversores también fue mayor entre la Generación Z (32%) y los Baby Boomers (38%).
Conclusiones regionales: Los inversores asiáticos buscan opciones más seguras
La encuesta reveló diferencias regionales en los instrumentos de inversión. Los inversores de Asia expresaron su preferencia por los depósitos a plazo fijo, y aproximadamente 1 de cada 2 consideraba esta clase de activos como un componente básico de su cartera de inversión. Casi la mitad de los encuestados de Singapur (46%) y Hong Kong (47%) dijeron que elegirían los depósitos a plazo fijo como una de sus tres principales inversiones. Los encuestados de Hong Kong también se inclinaron en gran medida por las acciones, ya que el 60% eligió esta opción como una de sus tres principales inversiones.
En cambio, los inversores de Europa prefirieron una asignación más equilibrada entre las distintas clases de activos. Para los inversores londinenses, el interés era constante entre los depósitos a plazo fijo (el 28% incluyó esta opción entre sus tres principales inversiones), las acciones (30%), los bonos y la renta fija (27%), así como los fondos (21%). Los inversores de Fráncfort se mostraron ligeramente más dispuestos a participar en fondos, ya que el 40% de los encuestados lo señalaron como una de las tres principales opciones de inversión. Otro 24% de los encuestados alemanes se decantó por los depósitos a plazo fijo, un 35% por las acciones y un 19% por los bonos y productos de renta fija. De las regiones incluidas en la encuesta, los encuestados de Singapur fueron los más orientados al futuro.
A la pregunta de qué harían si heredaran inesperadamente 100.000 dólares estadounidenses, el 39% de los encuestados de Singapur dijo que reservaría entre el 90% y el 100% de la suma para invertir, frente al 22% de Hong Kong, el 33% de Fráncfort y el 32% de Londres.
Elconsejero delegado de ADDX, Oi-Yee Choo, afirmó que no invertir «tiene graves consecuencias: reduce el poder adquisitivo y las opciones de estilo de vida. A largo plazo, puede que no le quede más remedio que prolongar su vida laboral para financiar adecuadamente su jubilación. Las mujeres son menos propensas a invertir que los hombres, y eso repercute negativamente en su capacidad para jubilarse antes, si así lo desean. La jubilación anticipada es también un tema de creciente interés, especialmente entre las generaciones más jóvenes, y cada vez más, se define la jubilación como la consecución de la libertad e independencia financieras, en lugar de simplemente ‘dejar de trabajar'». Choo concluye que las implicaciones de la encuesta son claras: jóvenes o mayores, mujeres u hombres, todos los individuos y hogares deben pensar en canalizar parte de sus ahorros hacia inversiones, de modo que puedan asegurar su bienestar a largo plazo.
«Casi un tercio de los encuestados de todo el mundo (29%) afirmaron que no invierten. Esto significa que aún nos queda camino por recorrer en nuestros esfuerzos educativos. Creemos que la inversión debe ser en igualdad de condiciones y, en última instancia, los inversores deberían tener pleno acceso a todas y cada una de las clases de activos, incluidas las inversiones en el mercado privado. Por acceso no nos referimos sólo a la posibilidad de suscribir inversiones, sino también al conocimiento para entender cómo esos activos pueden desempeñar un papel en la diversificación de la cartera y la creación de riqueza», sentenció Choo.
Según destacan desde la gestora, Mark Holman ha formado parte del equipo de inversión de bonos multisectoriales desde su lanzamiento en 2009, y el equipo ha crecido posteriormente hasta contar con otros 14 profesionales de la inversión. En 2023, TwentyFour añadió recursos adicionales al equipo con la contratación de Jakub Lichwa, un ex analista financiero de Goldman Sachs con 13 años de experiencia, lo que reforzó aún más la experiencia del equipo. Además, Felipe Villarroel, socio y gestor de carteras, se trasladará a Londres desde Santiago en el segundo trimestre de 2024, añadiendo más profundidad al equipo londinense.
“Me gustaría agradecer personalmente a Mark por desempeñar un papel fundamental en el crecimiento y el éxito de la empresa. Ha encarnado el carácter de TwentyFour desde el principio, y ha hecho muchas contribuciones importantes a TwentyFour y a nuestros clientes tanto como CEO como gestor de carteras”, ha indicado Ben Hayward, CEO de TwentyFour.
En opinión de Hayward, la gestora ha creado un buen equipo de profesionales de inversión de muy alto calibre para que nos guíen hacia el futuro. “Como empresa siempre tenemos planes de transición sólidos, y como siempre nos esforzamos por ofrecer un rendimiento de inversión continuo y excelencia en el servicio al cliente”, ha añadido el CEO.
Desde TwentyFour señalan que estos cambios representan la evolución natural de la firma y recuerdan que su proceso y filosofía de inversión permanecerán sin cambios, y que sus equipos siguen enfocados a obtener el mayor rendimiento posible para los clientes de la firma.
Foto cedidaLaura Vaughan, responsable de Direct Lending de Federated Hermes.
Laura Vaughan, máxima responsable de Direct Lending de Federated Hermes, tiene una reivindicación muy clara: “Los mercados privados pueden seguir clasificándose como inversiones alternativas, pero en muchos sentidos han madurado hasta convertirse en parte de la corriente dominante”. Según su experiencia, los inversores se sintieron atraídos por su baja volatilidad, su limitada correlación con otras clases de activos y los ingresos en efectivo para el calce de pasivos. En esta entrevista nos ha dado su visión sobre los activos privados, profundizando en el crédito directo.
Los activos privados han ganado popularidad y relevancia en los últimos 12 meses, ¿a qué cree que se debe este mayor interés por ellos?
En los últimos 12 meses, el atractivo ha aumentado aún más, ya que las inversiones subyacentes en deuda privada son préstamos a tipo variable. Así, cuando el Euribor, por ejemplo, pasó de ser negativo a acercarse al 4%, este rendimiento adicional se trasladó directamente a la rentabilidad de los inversores.
¿Cree que esta tendencia continuará en 2024 y qué seguirá despertando el interés de los inversores?
Sí, el rendimiento disponible de una inversión en préstamos directos sigue siendo muy atractivo en el entorno actual. Con la expectativa actual de que los bancos centrales sean pacientes con los recortes de tipos, este entorno de rendimiento sólido no cambiará materialmente. Junto con el esperado repunte de la actividad de fusiones y adquisiciones de capital privado, impulsada, por ejemplo, por un entorno de tipos de interés más estable, y las grandes cantidades de pólvora seca que necesitan invertir los fondos de capital privado, el nivel de demanda de préstamos se mantendrá fuerte y, por tanto, los prestamistas directos seguirán siendo capaces de desplegarse a un ritmo constante.
Uno de los activos privados de los que más hemos oído hablar es el crédito privado. ¿Qué puede aportar este activo a la cartera de los inversores?
La fuerte subida de los tipos de interés desde mínimos históricos en los dos últimos años ha dado lugar a unos rendimientos más elevados en un momento en que la inflación ha aumentado, lo que permite a la clase de activos de crédito privado actuar hasta cierto punto como cobertura frente a la inflación. Los préstamos directos a pequeñas y medianas empresas europeas han seguido generando rendimientos sólidos y constantes durante la última década, mostrando incluso resistencia durante la pandemia. En cambio, los rendimientos de los valores de renta fija tradicionales siguen siendo bajos y los préstamos directos a empresas ofrecen a los inversores una prima de iliquidez para impulsar los rendimientos de las carteras, así como un bajo grado de volatilidad en relación con las clases de activos públicos.
En un contexto que ha cambiado, ¿cuál cree que es la mejor manera de enfocar la inversión en deuda privada? ¿Por qué optar por el préstamo directo? ¿Qué aporta esta clase de activos?
Tras casi dos décadas en un entorno de bajos tipos de interés en Europa, el mercado de préstamos directos se está adaptando a un periodo de subidas a largo plazo. Sigue ofreciendo a los inversores un atractivo nivel de estabilidad en sus carteras de inversión. Una asignación al préstamo directo, centrada en la estrategia adecuada, puede proporcionar al inversor una correlación limitada con otras clases de activos, una baja volatilidad en comparación con los mercados públicos, una exposición diversificada a las industrias subyacentes, ingresos trimestrales en efectivo y un elemento de protección contra la inflación. El entorno sostenido de tipos de interés más altos beneficiará a los inversores que han apostado por fondos de préstamo directo conservadores. Dado que los préstamos son activos a tipo variable, los inversores se beneficiarán de la subida de los tipos básicos de los préstamos. Sin embargo, las empresas con elevados niveles de apalancamiento financiero seguirán sufriendo las consecuencias del aumento del coste de la deuda. Esto ejercerá presión sobre sus pactos de cobertura del servicio de la deuda y provocará un aumento de los impagos. Como resultado, aumentarán las reestructuraciones, especialmente para aquellos fondos de préstamo directo que han prestado con estructuras de préstamo agresivas a empresas cíclicas. La captación de fondos será difícil para estos fondos, ya que los inversores seguirán respaldando estrategias de préstamo directo más conservadoras.
¿Dónde ve las oportunidades para esta clase de activos y en qué tipos de empresas o sectores?
Hemos identificado un «caramelo dulce» para el préstamo directo en la actualidad -y en un futuro previsible-, el préstamo de deuda senior garantizada en el mercado medio-bajo de los mercados del norte de Europa. En estas zonas geográficas, el mercado medio-bajo está menos saturado que los mercados de gran capitalización y medio-alto. Como resultado de ello, así como del continuo dominio de los bancos en este ámbito, la documentación de los préstamos sigue siendo sólida, mientras que las estructuras de préstamo son conservadoras. En el entorno actual de tipos de interés, este segmento ofrece rentabilidades atractivas, con rendimientos superiores al 9% disponibles para operaciones poco apalancadas. El norte de Europa también cuenta con las jurisdicciones más favorables a los acreedores de Europa, lo que, unido a los paquetes de garantías completos y a los importantes colchones de capital que se sitúan detrás de la deuda senior garantizada, significa que las rentabilidades netas en este espacio deberían mantenerse cerca de los niveles brutos. Nuestros fondos de préstamos directos senior garantizados no invierten en ningún préstamo a prestatarios que estén vinculados al consumo minorista y discrecional o que dependan de las materias primas. Los consideramos de mayor riesgo debido al carácter cíclico inherente a los mercados finales. En el actual entorno de mercado, los servicios empresariales, el software y la atención sanitaria son sectores atractivos en los que invertir. No es de extrañar que los prestatarios bien establecidos, que operan en sectores con grandes barreras de entrada y que generan flujos de tesorería estables, fijos y predecibles atraigan la atención de los prestamistas.
Dada la subida de los tipos de interés que hemos observado, ¿es probable que aumenten los impagos?
La clase de activos ha disfrutado de bajas tasas de impago en los últimos años y las recuperaciones han sido sólidas. Sin embargo, no podemos ignorar el hecho de que estamos invirtiendo en un entorno con varias incógnitas importantes, como unos tipos de interés «más altos durante más tiempo», una menor confianza de los consumidores y la posibilidad de que se produzcan nuevos shocks que podrían hacer subir la inflación o tener un impacto adverso en las cadenas de suministro mundiales. En esta fase del ciclo crediticio, los fondos que han sido menos disciplinados en el análisis del crédito, o que tienen prestatarios con un apalancamiento excesivo que ahora están luchando para hacer frente a una mayor carga de intereses, se encontrarán con más dificultades en la cartera e impagos. Por lo tanto, es importante que los gestores dispongan de una sólida cartera de originación y sean muy selectivos con las empresas a las que prestan. Por este motivo, en Federated Hermes damos prioridad a la calidad de las operaciones y a la originación diferenciada basada en asociaciones bancarias para nuestra estrategia de préstamos directos.
En cuanto a los procesos de refinanciación, ¿por qué cree que serán una oportunidad para el sector de los préstamos directos?
Cuando un prestatario refinancia, se reajusta la documentación y la estructura de la deuda. En el actual mercado de riesgo reducido, la oportunidad de incluir cláusulas superiores es mayor. Además, se ha reducido el nivel de deuda que los prestatarios desean contraer, por lo que los préstamos garantizados senior están ganando cuota de mercado a los unitranche. Esto se debe al menor coste de los préstamos senior garantizados, aunque con una menor flexibilidad en la documentación del préstamo. Esto significa que para los prestamistas directos de préstamos prioritarios garantizados debería haber un mayor número de oportunidades, con un menor apalancamiento, una mejor documentación del préstamo y mayores rendimientos que en los últimos años. Esto proporcionará una fuerte rentabilidad neta para los inversores y seguirá atrayendo a los inversores a esta clase de activos.
¿Cuáles son las perspectivas para el sector de los préstamos directos en 2024?
Los préstamos directos están alcanzando la mayoría de edad como clase de activos en un momento en el que el panorama macroeconómico está cambiando. Para los inversores, esto significa que la capacidad de conseguir operaciones de alta calidad a través de medios diferenciados será clave para mantener el rendimiento a largo plazo. Esto debería beneficiar a los prestamistas senior garantizados frente a los prestamistas unitranche, que tienen objetivos de rentabilidad más elevados. Esto significa que los préstamos garantizados sénior seguirán ganando cuota de mercado frente a los productos unitranche en el mercado europeo de préstamos. 2024 será probablemente un gran año para los prestamistas directos que han sido disciplinados en su enfoque de préstamo, y por lo tanto no se han distraído con reestructuraciones. Se espera que el flujo de operaciones aumente significativamente, y lo ha hecho en los dos primeros meses de 2024, a medida que los volúmenes de fusiones y adquisiciones primarias de capital privado aumentan. Esto debería proporcionar a los prestamistas directos una sólida cartera de oportunidades para seleccionar.
Muchos inversores están reformulando significativamente su enfoque de la gestión del riesgo y la asignación de activos a medida que van diversificando sus carteras en respuesta a las crecientes tensiones geopolíticas, los mayores tipos de interés, la persistente volatilidad del mercado y los próximos procesos electorales. Estas son algunas de las principales conclusiones que se desprenden de la encuesta anual de Nuveen, la gestora de inversiones de TIAA, a más de 800 inversores institucionales a nivel mundial.
“En nuestras interacciones habituales con los clientes y en nuestra reciente encuesta a más de 800 inversores institucionales, calibramos de qué manera se pondrán a trabajar y se gestionarán 18 billones de dólares en activos en los próximos dos años”, explica Mike Perry, responsable de Global Client Group de Nuveen.
Según Perry, tres temáticas claras dominan la atención de los inversores a la hora de posicionar las carteras en el nuevo entorno: “La primera es el inmenso apetito por lograr exposición a las innovaciones energéticas y los proyectos de infraestructuras a medida que la transición energética progresa. La segunda es la predilección por la deuda corporativa privada y el capital riesgo en un contexto de crecientes asignaciones de capital a las inversiones alternativas. La última es que, para posicionarse de manera que puedan aprovechar estas oportunidades a tiempo, los inversores destinan una parte del capital de sus carteras a instrumentos de renta fija líquida y de alta calidad”.
Transición energética
Para el 55% de los inversores mundiales que respondieron a la encuesta anual EQuilibrium a Inversores Institucionales Globales de Nuveen considera que pueden influir de manera significativa en la transición energética a través de sus inversiones, y un 57% indica que tiene o está buscando exposición a las energías alternativas (renovables, nuclear, hidrógeno). Además, el 51% está interesado en asignar fondos a nuevos proyectos de infraestructuras, como las relacionadas con el almacenamiento de energía en la red y el almacenamiento con baterías.
En Asia-Pacífico (APAC), el interés de los fondos de pensiones corporativos por las soluciones basadas en la naturaleza es superior a la media y, en Alemania, los fondos de pensiones muestran un interés por los mercados de créditos de carbono por encima de la media. Por su parte, los fondos de pensiones del sector público norteamericano señalan un interés por la mejora de las infraestructuras existentes que es superior a la media de la encuesta.
Casi el 90% de los inversores (88% a escala mundial, 81% en Norteamérica, 93% en la región EMEA y 89% en la región APAC) están centrados en la transición energética de una forma u otra. Según la encuesta, el grupo menos numeroso, un 9%, es el de los pioneros en la transición energética. El grupo más numeroso (37%) “mantiene el ritmo”, ya que estructura las carteras para reflejar el actual mix energético en la economía, mientras que el 23% está «empezando» y el 19% está haciendo lo necesario para cumplir los requisitos normativos.
“Los inversores entienden claramente su influencia y consideran la política estatal y la innovación técnica como los mayores impulsores de las inversiones en la transición energética para el año que tenemos por delante. El 39% considera que la politización será el mayor obstáculo y destaca la importancia de asociarse con gestores activos que tengan sólida experiencia buscando y explorando las oportunidades más atractivas”, añade Perry.
Mercados privados y su atractivo
La encuesta demuestra que los inversores siguen apostando por los mercados privados, ya que un 55% (60% en Norteamérica, 49% en la región EMEA y 59% en la región APAC) prevé aumentar sus asignaciones en los próximos cinco años, con el crédito privado y el capital riesgo como principales opciones. La tendencia, sin embargo, es menos pronunciada si se compara con la encuesta del año pasado, cuando el 72% (73% en Norteamérica, 67% en la región EMEA y 79% en la región APAC) preveía aumentar las asignaciones a los mercados privados.
De hecho, algunos inversores también prevén incrementar sus asignaciones al sector inmobiliario privado (24%), a las materias primas (22%), a los fondos de alto riesgo (21%), a las colocaciones privadas (19%) y a las superficies forestales y los terrenos agrícolas (12% en ambos casos).
Destaca que los fondos de pensiones del sector público de la región APAC están en cabeza, ya que un 72% prevé aumentar las inversiones a los mercados privados en los próximos cinco años. Las aseguradoras y los fondos de dotación/fundaciones norteamericanas no van muy a la zaga, con un 68% y un 71%, respectivamente.
Por último, la deuda privada a empresas y el capital riesgo se consideraron las clases de activos más atractivas entre los inversores que desean apostar por inversiones alternativas, liderados por los fondos de pensiones del sector público norteamericano (el 57% prevé aumentar el crédito privado) y los inversores japoneses (el 59% prevé aumentarlo en el capital riesgo). Aunque el interés por la deuda corporativa privada y el capital riesgo es generalmente elevado en todas las regiones, no fue la primera opción en todas: las infraestructuras privadas fueron la primera opción para los inversores alemanes (53%).
Reducir los riesgos
Casi dos tercios (65%) de los inversores (62% en Norteamérica, 68% en la región EMEA y 63% en la región APAC) encuestados aseguran que estamos en un nuevo entorno de mercado que está cambiando la manera en que gestionan el riesgo y la rentabilidad. Ocho de cada 10 (81% en Norteamérica, 81% en la región EMEA y 78% en la región APAC) afirman que se ha dejado atrás la era de tipos de interés ultrabajos para volver a entrar en un contexto de tipos de interés más altos durante más tiempo.
La mitad de los inversores (50% a escala mundial, 53% en Norteamérica, 48% en la región EMEA y 50% en la región APAC) prevén aumentar la duración de la cartera en 2024 (en la encuesta del año pasado, solo el 39% de los inversores preveía incrementar la duración). Al mismo tiempo, los porcentajes de inversores que planean reforzar las estrategias de “mitigación del riesgo de inflación” y “liquidez” disminuyen en comparación con la encuesta anterior (del 64% al 41% y del 41% al 37%, respectivamente).
Para los inversores más orientados al pasivo, los tipos de interés más altos y las mejoras resultantes en los estados de financiación representan una oportunidad para reducir el riesgo de las carteras añadiendo duración.
La normalización de los tipos de interés ha creado nuevas oportunidades para que muchos inversores reduzcan el riesgo, alejándose de los mercados de renta variable y acercándose a la renta fija pública y privada de alta calidad. En comparación con la encuesta del año pasado, un número significativamente mayor de inversores está disminuyendo la exposición a la renta variable (40% a escala mundial, 33% en Norteamérica, 44% en la región EMEA y 44% en la región APAC) frente a los que la están aumentando (28% a escala mundial, 25% en Norteamérica, 26% en la región EMEA y 37% en la región APAC).
Casi la mitad de los inversores (48% a escala mundial, 49% en Norteamérica, 49% en la región EMEA y 44% en la región APAC) afirman que tienen previsto aumentar sus asignaciones a la renta fija con grado de inversión, lo que probablemente refleja las expectativas de los inversores respecto a una próxima desaceleración de la economía. El 38% prevé aumentar sus asignaciones a la renta fija privada, donde la deuda corporativa con grado de inversión es la principal opción.
Aproximadamente uno de cada cinco inversores también señala que, en los próximos dos años, contempla aumentar las asignaciones a deuda titulizada cotizada (CLO, MBS, etc.; 22%) y a renta fija por debajo del grado de inversión (alta rentabilidad o high yield, préstamos ampliamente sindicados, etc.; 21%).
“En todos los segmentos de renta fija, la deuda corporativa está atrayendo el interés de los inversores. Los instrumentos corporativos son la primera opción para los inversores que apuntan asignar capital a los mercados de renta fija con y sin grado de inversión, así como a los mercados de renta fija privada. Los inversores ven más valor que antes en estos instrumentos de deuda a tipo fijo. Y para aquellos inversores más orientados al pasivo, los bonos con cupón fijo de alta rentabilidad se han convertido en una forma atractiva de mejorar la gestión del pasivo”, señala Perry.
Según la encuesta, aunque la deuda corporativa con grado de inversión es en general la primera opción para las asignaciones de renta fija privada previstas, existe dispersión entre los distintos tipos de inversores. Las compañías de seguros muestran una mayor preferencia por la deuda privada de infraestructuras, mientras que los fondos de dotación y fundaciones lo hacen por la deuda privada oportunista y los fondos de pensiones del sector público norteamericano se decantan decididamente por los préstamos sénior del mercado intermedio.
UBS Asset Management (UBS AM) ha anunciado el lanzamiento del primer ETF UCITS que replica un índice de transición climática basado en el universo del índice S&P 500. Según explica la gestora, este nuevo ETF, denominado UBS S&P 500 Climate Transition ESG UCITS ETF, ofrece a los inversores una exposición a valores estadounidenses de gran capitalización con una sobreposición de cero emisiones netas y una mejora del perfil ESG general.
El índice S&P 500 es el índice insignia de la exposición a la renta variable estadounidense, por lo que este ETF de UBS AM abre la posibilidad a los inversores que deseen conservar el universo S&P 500 aplicando al mismo tiempo una superposición de Referencia de Transición Climática (CTB). “El índice utilizado por el fondo emplea un proceso exhaustivo de dos fases para seleccionar y ponderar los componentes de la cartera de modo que sean colectivamente compatibles con la transición hacia una economía baja en carbono y resiliente al clima”, indican desde la gestora.
En este sentido, el primer paso define un universo ESG elegible mediante la aplicación de exclusiones de actividades comerciales que incluyen empresas implicadas en violaciones del Pacto Global de la ONU o que superan los umbrales de ingresos en actividades como armas controvertidas, contratación militar, armas pequeñas, tabaco, carbón, carbón térmico y arenas petrolíferas o arenas bituminosas.
El segundo paso está diseñado para ayudar a los inversores a gestionar los riesgos de la transición climática y aprovechar las oportunidades que ofrece el cambio climático. La gestora indica que este paso utiliza un optimizador que permite una reducción inicial de la intensidad de carbono del 30%, seguida de una trayectoria de reducción interanual del 7%. “El índice S&P 500 Climate Transition Base ESG resultante ofrece una solución alineada con cero emisiones netas. Además, el índice proporciona una mejora en la puntuación ESG general en comparación con el índice de referencia” afirman.
El UBS S&P 500 Climate Transition ESG ETF estará disponible en dólares, así como en otras clases con cobertura de divisas (EUR y GBP). Cotizará en las principales bolsas europeas, como la Bolsa de Londres, Xetra, Borsa Italiana y SIX Swiss Exchange.
Foto cedidaChristoph von Reiche, nuevo director de clientes institucionales de Vontobel.
Vontobel ha anunciado el nombramiento de Christoph von Reiche como nuevo director de clientes institucionales, con el objetivo de liderar la estrategia de distribución global y los esfuerzos de crecimiento de la firma.
Christoph von Reiche aporta casi 30 años de experiencia en servicios financieros, más de 20 de ellos en el sector de la gestión de activos. Antes de incorporarse a Vontobel, fue director mundial de distribución y marketing en Robeco Institutional Asset Management, y anteriormente director de institucionales en Europa en JP Morgan Asset Management.
Además, Christoph von Reiche ocupó un puesto en Goldman Sachs AG, donde comenzó su carrera como analista en banca de inversión y continuó ascendiendo hasta ocupar diversos puestos de responsabilidad, entre ellos el de Country Head de Alemania para Goldman Sachs Asset Management. Sobre su formación, la gestora destaca que Christoph von Reiche tiene un máster en relaciones internacionales y una licenciatura en administración de empresas por la Universidad de Georgetown, en Washington DC.
A raíz de este nombramiento, Christel Rendu de Lint, Co-CEO de Vontobel, ha declarado: “Christoph comparte nuestro compromiso de fomentar una cultura centrada en el cliente y orientada a la inversión. Gracias a su dilatada experiencia y a su demostrada capacidad para comprender a los clientes, los mercados y las tendencias, desempeñará un papel fundamental a la hora de perfeccionar y acelerar nuestras capacidades de distribución institucional”.
Por su parte, Georg Schubiger, Co-CEO, ha destacado que su experiencia y liderazgo aportan un enorme valor a sus compañeros y clientes. “Su nombramiento subraya nuestro compromiso de ofrecer el mejor servicio y ofertas de inversión diferenciadas para satisfacer las necesidades cambiantes de nuestros clientes», ha afirmado Schubiger.
Ya como nuevo director de clientes institucionales en Vontobel, Christoph von Reiche ha declarado: “Estoy muy ilusionado de unirme a Vontobel y espero ayudar a los inversores institucionales a alcanzar sus objetivos financieros a largo plazo con una oferta de inversión del más alto nivel en una amplia gama de clases de activos».
Los estímulos a la demanda en China y, por extensión, en Asia no alcanzan para que el oro suba más allá del máximo de 2020; ni la transición energética para evitar el ablandamiento de la plata. Los fundamentos no influyen para que los precios suban. Un solo factor, ajeno a sus propiedades, es decisivo para que brillen… o se oscurezcan.
La opacidad de los metales preciosos
Muchos suponían que la plata se revalorizaría y subiría por su necesidad para baterías, paneles solares y otros bienes de la nueva era de la energía, además de los augurios sobre su uso industrial habitual. Pero no. Su cotización no ha correspondido a lo previsto.
El oro, que se esperaba saltara en 2023 a una nueva marca histórica clara, tampoco validó las expectativas ni ha sido cobertura o protección contra la inflación, la devaluación o el alza de tasas. Sí ha servido para acumular riqueza o atesorar para heredar, por su peso tradicional, histórico o sentimental, para quien está dispuesto a asumir el detrimento.
Observe la disparidad de los rendimientos en la tabla: 2023 fue bueno para el oro y apenas negativo para la plata. En tres años, en dólares, el oro spot subió 9,31%, casi la misma cifra que perdió la plata. Ni uno ni otro contrarrestaron la inflación acumulada en Estados Unidos, de 16,90%.
Vea también que, desde que los máximos de agosto de 2020 y hasta el cierre de febrero, el oro perdió 1% y la plata 22%, en tanto la inflación acumulada fue de 19% (números cerrados). Hubiese resultado mejor invertir en renta variable y menos perjudicial aplicar el dinero en renta fija de corta duración (emulada aquí por el ETF SGOV) o, de plano, guardar el efectivo.
Oro y plata vs Índices Accionarios y otras Variables. Comparativo en dólares
Sí, se podría haber ganado mucho; o sufrir pérdidas peores
En la gráfica, la línea dorada en el panel principal, y los niveles más bajos, todos en forma de “V”, evidencian que:
• A partir de agosto de 2020 hubo cuatro grandes oportunidades de comprar oro que habrían redituado hasta 26% (cifras en negro);
• Y cuatro ocasiones propicias para vender antes de las caídas drásticas, de hasta 21% (cifras en color café);
• En sus tres picos más altos, el oro volvió a su máximo histórico, donde oscilaba al cierre de 2023 y al que parecía “aferrarse” durante enero y febrero.
La plata, en cambio, hace vaivenes más largos y drásticos (línea gris en el panel secundario):
• Sus rebotes han sido hasta de 34% (números en azul), y sus precipitaciones hasta de 32% (números en rojo);
• Las caídas se exageran en las rachas negativas, mientras que en las buenas rachas tiende a subir más que el oro.
Cotización de oro y plata. Agosto de 2020 a febrero de 2024
Aunque los rebotes de la plata son más redituables, no son suficientes para impulsarla al punto desde donde inicia cada desplome. Ya que la altura de cada cima es inferior a la previa, el descenso desde el máximo de agosto de 2020 es esquemático, en forma de canal. Por tanto, se infiere que, en la reacción al alza, podría ser rechazada en 25 dólares.
Un aspecto positivo es que, desde el nivel más bajo, de 17,85 dólares, en septiembre de 2022, los puntos mínimos son gradualmente más elevados. Es decir, en la siguiente caída, si ocurre, podría rebotar alrededor de $22.
El problema es que su reacción desde el fondo, el pasado octubre, fue menos fuerte que la del oro. Hacia finales de diciembre se debilitó para perder el nivel de 24 dólares, mientras que el oro alcanzó una vez más a su máximo histórico. Vea que, en enero, cuando cayó otra vez, también en forma tipo “V”, ese soporte de 22 dólares fue validado.
Para algunos, este comportamiento es muy atractivo: alguien podría intentar la compra alrededor de los mínimos para intentar vender después de la recuperación, asumiendo, claro, un alto riesgo, y considerando, por supuesto, que lo que el esquema presenta como sencillo, la realidad lo hace difícil. Cualquiera que crea que el patrón de comportamiento va a continuar podría aprovechar los puntos altos para tomar posiciones cortas cuando crea que los precios están por caer. Podrían valerse de los ETFs inversos como el ZSL, GLL y otros.
El único factor que condiciona los precios
Para los aversos al riesgo, el desempeño de oro y plata es pobre y derriba el mito de que fungen como cobertura o protección del dinero. Los periodos de gran alza se han debido a que las tasas de interés de EE.UU. han caído a cero (0,00%) por factores extraordinarios, como la gran crisis de 2008-2009 o la pandemia de 2020.
Desde agosto de 2020, los precios han ido en contrasentido al dólar, único refugio seguro. Observe que los picos de oro y plata corresponden a los puntos mínimos de DXY (el dólar vs seis monedas). Solo en los primeros meses de 2022, al estallar la guerra Rusia – Ucrania, los tres activos se movieron en la misma dirección.
Variación porcentual de oro, plata y DXY. Agosto de 2020 a febrero de 2024
La caída más severa (vea el círculo punteado) ocurrió entre agosto y noviembre de 2022, cuando la Reserva Federal subió los tipos de interés en 75 puntos base en cuatro reuniones consecutivas, hasta 4%. El hundimiento fue de hasta 27% y 15%, respectivamente, mientras que DXY subió más de 22%. En tanto, los metales caían a niveles de prepandemia y DXY superaba las 114 unidades, su cresta más alta en 20 años.
Los pronósticos han fallado en los últimos tres años: ni uno ni otro metal los validaron con alzas de precios ni nuevas marcas. El subibaja se supedita a un solo factor esencial: la cotización del dólar. La demanda, la extracción o producción, base de las expectativas, han sido elementos secundarios. Y el dólar, a su vez, se revaloriza por las presiones inflacionarias y la consecuente restricción monetaria.
¿Cambiarán las cosas en 2024? Es posible. Si la Reserva Federal recorta los tipos y el índice del dólar recae por debajo de 100, el oro y la plata recobrarían el brillo. Entonces sí, el consumo global y el uso industrial influirían. Es decir que su potencial no parece vinculado a sus propiedades intrínsecas, sino a la inflación y a la política monetaria.