. Banco Sabadell se estrena en México el próximo 4 de enero
Banco Sabadell iniciará formalmente operaciones en México el próximo 4 de enero, tras cumplir con el procedimiento de certificación de la Comisión Nacional Bancaria y de Valores y con los requerimientos exigidos por el Banco de México. El nuevo banco en México, que obtuvo la licencia el pasado mes de agosto, realizará operaciones de banca corporativa y de empresas y, a finales de 2016, pondrá en marcha la banca personal.
Francesc Noguera, consejero delegado de Banco Sabadell en México, considera que “la obtención de esta certificación representa la culminación de una serie de procedimientos y requisitos cumplidos satisfactoriamente. Esto demuestra nuestra capacidad tecnológica, experiencia bancaria y fortaleza financiera para asegurar el servicio de calidad que brindará a nuestros clientes”.
Banco Sabadell apuesta en México por una propuesta de valor claramente diferenciada, como ya hace en el mercado español, y que se centra en un servicio personalizado, cercano y de calidad, rapidez de respuesta, oferta digital y una competitiva cartera de productos acorde a las necesidades de las empresas del país.
Para 2016, Sabadell tiene el objetivo de lograr más de 200 clientes en banca de empresas, a través de la concesión de 105 millones de dólares americanos en créditos para banca de empresas y 1.500 millones de dólares en banca corporativa.
Desde 2014, Banco Sabadell opera en México con una sociedad financiera de objeto múltiple (SOFOM), denominada Sabadell Capital, dedicada al negocio de banca mayorista, corporativa y financiación de grandes proyectos. En poco más de un año, Sabadell Capital compite ya en el Top 10 del sector en México, gracias a la colocación de más de 1.000 millones de dólares de financiación en varios sectores de la economía mexicana.
Por tanto, Banco Sabadell centrará su estrategia inmediata en México en la atención a clientes empresariales y corporativos, a través de sus dos vehículos financieros: el nuevo banco y la SOFOM. En 2016 pretende iniciar también una segunda fase de sus operaciones, a través de la oferta de productos y servicios destinados a banca personal.
De esta manera, Banco Sabadell consolida una acción más en su Plan Estratégico TRIple 2014-2016, que se basa en tres pilares: Transformación (con la evolución de servicios que desea ofrecer al mercado mexicano); Rentabilidad (en el que México es una pieza clave para el crecimiento de la compañía); e Internacionalización (la puesta en marcha de un banco en México es una clara muestra de ello).
Después de que el pasado enero la libertad de expresión fuera devastada de nuevo en París, los ataques terroristas del 13 de noviembre tuvieron como objetivo otra forma de libertad. La libertad de tomar una cerveza en una terraza o asistir a un concierto tranquilamente y desde el respeto hacia los demás. Dicho de otra forma, la libertad de vivir. Ahora les toca a los políticos forjar una respuesta conjunta al terrorismo. Y, a todos y cada uno de nosotros, en la medida en que podamos, negar la victoria a los asesinos siendo más libres que nunca. Si bien una mera forma de ser constituye un acto de resistencia ínfimo frente a la barbarie, en ella se encarna a diario, muy veladamente, uno de nuestros valores más preciados.
En el plano profesional —el caso de muchos de nosotros, espero— la libertad reside en afirmar, frente a todo tipo de presiones, nuestra autonomía de pensamiento, que a menudo coincide con la de la mayoría. Sentirse libre para defender las propias convicciones, a veces con tesón, e incluso cambiar de opinión si lo consideramos justificado o reconocer los errores y atreverse a corregirlos. En ocasiones, esto requiere cierta obstinación, pero, ¿quién dijo que cultivar un espíritu libre fuera fácil?
En su ámbito, hoy los inversores deberían plantearse si son prisioneros de sus costumbres. A menudo, a muchos de ellos les suele costar renunciar a estrategias que les han funcionado bien durante mucho tiempo. Recordamos, por si hiciera falta, los estragos que provocan todos los cambios de tendencia, como el fin del liderazgo de los valores tecnológicos a principios de la presente década, el de los valores financieros en 2008 o el de las materias primas hace cuatro años. En este momento, estamos convencidos de que hay motivos para poner en entredicho la tendencia de mercado de los últimos siete años.
En Estados Unidos, el mercado no ha comprendido la envergadura del riesgo de ralentización económica que se vislumbra. Los resultados de las empresas empezaron a empeorar durante el tercer trimestre, ya que, si bien el ciclo de los tipos de interés está a punto de comenzar, el ciclo económico cuenta ya su séptimo año de recorrido. Los márgenes de las empresas se habían ampliado considerablemente hasta hace poco y alcanzaron niveles históricos, impulsados especialmente por la reducción de los costes salariales y la caída de los tipos de interés. Ahora, la reducción de la tasa de desempleo empieza a fomentar una subida de los costes salariales, mientras que la evolución de los tipos de interés se convertirá en un factor negativo. Así, los márgenes de las empresas inevitablemente caerán, sobre todo si el dólar se aprecia. De ello se desprende que el motor de crecimiento que supone la inversión de las empresas se debilitará.
¿Podrá el consumo tomar el relevo? La reducción de los costes salariales no impidió, hasta hace poco, un nivel de consumo muy resistente, aupado por una tendencia bajista de la tasa de ahorro y de los gastos financieros. Desde hace ya tres años, la tasa de ahorro se mantiene (el famoso «efecto riqueza» ya no funciona) y la confianza de los hogares (medida todos los meses por el Consumer Confidence Index del Conference Board) ha empezado a decaer desde principios de año. Así, incluso con un ligero incremento de los ingresos medios, es muy poco probable que se produzca una aceleración del consumo en Estados Unidos.
Por último, el motor de las exportaciones es, en sí mismo, muy vulnerable en este momento. Dado que la ralentización de la actividad industrial china sigue su curso, las empresas se ven obligadas a liquidar el excedente de capacidad en forma de exportaciones baratas, lo que refuerza la presión sobre los volúmenes de negocio de los exportadores estadounidenses.
Esta perspectiva mundial no se refleja actualmente en el índice S&P 500 (que se mantiene en el 2%, uno de sus niveles más altos). Una de las principales razones es que la ingeniería financiera, y especialmente los importantes programas de recompra de acciones, han seguido inflando los beneficios por acción. La primera subida de tipos de interés —que tendrá como telón de fondo un endeudamiento neto de las empresas estadounidenses que ha aumentado un 80 % en tres años, de los 1,5 billones de dólares de 2012 a los casi 2,8 billones actuales—, pesará inevitablemente sobre el estímulo que suponen los beneficios por acción.
El repunte cíclico que está experimentando Europa desde principios de año ha impulsado la esencia de su potencial. Según las últimas estadísticas disponibles, el cuarto trimestre debería confirmar la continuidad de esta mejora. No obstante, existen cada vez más motivos para prever una desaceleración de la zona del euro en los próximos trimestres. Efectivamente, la drástica depreciación del euro, el desplome de los precios energéticos, la leve reducción de las políticas de austeridad presupuestaria y la mejora de la confianza empiezan a ver truncados sus efectos, mientras que el contexto mundial se torna menos favorable.
Al mismo tiempo, el aumento de la concesión de préstamos bancarios, que empezó a mejorar a partir de febrero de 2014, apenas logra hoy superar el ritmo anual del 1% e incluso ha vuelto a caer al 0,4 % en octubre. El billón de euros en concepto de préstamos con intereses de demora que aún siguen presentes en los balances de los bancos europeos obviamente está ahí por algo. Francia e Italia son los dos últimos países que han mostrado esperanzadores indicios de reformismo pero, por ahora, sin ningún efecto notable sobre el ritmo de inversión, que sigue en niveles muy débiles. Ahora le toca a Mario Draghi utilizar de nuevo el arma de la depreciación del euro para tratar de impulsar las exportaciones y estimular un poco la inflación. Ante el ciclo económico mundial y las presiones deflacionistas que intensifican la ralentización del universo emergente, no deberíamos hacernos demasiadas ilusiones sobre el efecto de estas medidas.
Este análisis puede parecer alarmista o prematuro. Sin embargo, cabe destacar que siete años después de la gran crisis de 2008, la forma en la que los bancos centrales han tratado la situación no ha logrado más que un crecimiento económico muy mediocre, mientras que los riesgos vinculados al sistema financiero han aumentado. La reacción de los inversores ante esta divergencia podría mantenerse, durante un tiempo, anestesiada por la fe en los mágicos remedios de los bancos centrales. Pero, hoy en día, creemos que la ralentización del universo emergente, así como el intento de normalización de la política monetaria estadounidense, aumentan considerablemente el nivel de fragilidad de los mercados.
Consideramos que ha llegado el momento de que todas las estrategias de gestión activa orientadas a la preservación del capital defiendan su libertad con respecto a los índices. Esto pasa por reducir su «beta», es decir, su exposición al riesgo de mercado y, por el contrario, recurrir ampliamente a la generación de alfa como motor de rentabilidad y, en última instancia, como herramienta adicional de gestión de riesgos.
Didier Saint-Georges es miembro del comité de inversiones y managing director de Carmignac.
CC-BY-SA-2.0, FlickrFoto de cuxclipper
. ¿Cuál será el impacto del Acuerdo Transpacífico de Cooperación Económica (TPP) en las cadenas de suministro en México?
Al igual que el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) hace más de 20 años, el TPP (Trans-Pacific Partnership o Acuerdo Transpacífico de Cooperación Económica) tendrá impactos relevantes sobre las cadenas de suministro de las empresas mexicanas. Aunque el nuevo acuerdo promete beneficios tangibles para el país, es importante que las empresas se preparen y adapten sus cadenas de suministro a las nuevas condiciones del mercado. Hacerlo de forma tardía impactará su productividad y competitividad ante el nuevo escenario que se vislumbra.
¿Qué es el TPP?
El TPP es una propuesta de libre comercio que incluye a 12 países: Australia, Brunei Canadá, Chile, Darussalam, Estados Unidos, Japón, Malasia, México, Nueva Zelanda, Perú, Singapur y Vietnam. Este acuerdo busca la liberación de cerca de 18.000 aranceles en total, y en el caso de México, el convenio incluirá unas 12.000 fracciones arancelarias. Del total en México, al menos 77% se liberará inmediatamente después de que se apruebe el acuerdo; y el resto, en un plazo que va de 10 a 15 años.
Los 12 países que pertenecerán al acuerdo conformarán un mercado potencial de unas 800 millones de personas, es decir, alrededor de 11% de la población mundial. La suma de los PIB -Producto Interno Bruto- de estas naciones representa 40% del PIB mundial. Es un mercado que consume $3.300 mdd al año, según datos de la revista Fortune.
Las áreas que se están negociando en el TPP son: Acceso a Mercados, Reglas de Origen, Obstáculos Técnicos al Comercio, Medidas Sanitarias y Fitosanitarias, Defensa Comercial, Competencia, Compras Públicas, Servicios, Inversiones, Comercio Electrónico, Telecomunicaciones, Entrada Temporal, Servicios Financieros, Asuntos Legales, Propiedad Intelectual, Medio Ambiente, Laboral y Cooperación. Adicionalmente, se han incorporado los denominados temas horizontales que incluyen Coherencia Regulatoria, Competitividad, Desarrollo y Pequeñas y Medianas Empresas.
Las exportaciones a los países que formarán parte del TPP son de 337 billones de dólares, los cuales representan 85% de las exportaciones totales de México, de acuerdo con datos de 2014 (ver tabla posterior). En cuanto a las importaciones, corresponden al 59% de todas las importaciones del país. En cualquier caso, es importante resaltar el peso específico de Estados Unidos en este mercado: representa 94% de las exportaciones al TPP y 80% de las exportaciones totales de México.
Aun cuando es necesario recorrer el camino de la aprobación del tratado en los diferentes países miembros, se estima que a partir de su firma se tendrán 24 meses para que los países ejecuten los pasos necesarios para su instrumentación.
Si al pasar ese tiempo hay, al menos, seis países -incluidos Estados Unidos y Japón, por ser los mercados más grandes que juntos representen el 85% de la suma de los PIB de los países firmantes- el tratado entrará en operación de forma automática.
¿Por qué impactará a las cadenas de suministro mexicanas?
Aunque va a depender en gran medida de cómo se implemente, el TPP va a tener impactos en nuestras cadenas de suministro, entendiendo este concepto como los flujos de información, dinero y mercancía desde los proveedores, pasando por la transformación, hasta llegar al cliente final. Por ejemplo:
· El pacto abrirá nuevas oportunidades de negocio para el sector productivo mexicano en seis mercados de Asia-Pacífico: Australia, Brunei, Malasia, Nueva Zelandia, Singapur y Vietnam. · Recordemos que Estados Unidos representa 80% de las exportaciones totales de México, por lo que México probablemente seguirá siendo un ente transformador de las importaciones provenientes de los países asiáticos para convertirlos en productos hacia el mercado americano. · Se espera que la exportación de México crezca 30% en un período de 5 años, según ha informado este año la Secretaría de Economía. · El tratado implica mayor regulación para las industrias que quieran participar, en algunos casos, mayor protección (propiedad intelectual, denominación de origen, entre otras) · Asia-Pacífico es la región de mayor dinamismo económico. El porcentaje de crecimiento anual 2005-2012 en la región de América del Norte se mantuvo en niveles de 8,3%, mientras que para la región de Asia fue de 24,2%, según la Secretaría de Economía e el Instituto Nacional de Estadística y Geografía).
¿Cómo preparase para ser exitoso?
Este panorama obliga a las empresas a prepararse con tiempo en acciones como:
· Entender las fracciones arancelarias que se liberan, tanto para la exportación y como para la importación, así como los tiempos en que se producirán, para preparar la cadena de suministro de cara a la nueva proveeduría, tomando en cuenta el costo total de propiedad (no solo el precio). · Prepararse para tener mayor interacción con un nuevo bloque comercial, nuevos consumidores, estilos y costumbres. · Desarrollar las capacidades internas de las empresas para cumplir con las exigencias del tratado. Recordemos que el TPP es un tratado más amplio y que pone reglas más exigentes, como los temas de propiedad intelectual, medio ambiente, laboral y denominación de origen.
Muy probablemente veamos un flujo de inversión extranjera de los países que conforman el tratado, en particular de los países asiáticos y australes, que se verán en la forma de nuevas plantas, adquisiciones de compañías o de inversiones de capital para la recepción y distribución de sus productos.
A nivel macro, implicará mayores inversiones para la expansión y modernización de los puertos del Pacífico, mejoras en la conexión con otros modos (carretero, ferrocarril, aéreo, naval) y agilización de los procesos aduaneros. En particular, se deberá facilitar el flujo desde los puertos a los centros logísticos y de transformación mexicanos, para luego llegar al territorio de Estados Unidos. Este flujo también le dará un impulso al futuro corredor logístico del Istmo de Tehuantepec y a la zona económica especial de esta región, para los flujos que van hacia el Atlántico, así como la del Corredor Norte, para los flujos que van hacia Estados Unidos.
Es importante prepararnos para el nuevo escenario que se conformará con el TPP, haciendo los ajustes necesarios en nuestras cadenas de suministro (en términos de proveeduría, manufactura, logística y comercio exterior) para capitalizar los beneficios que representarán para nuestro país. Estas acciones generarán una ventaja competitiva en las compañías que entiendan las nuevas reglas y aprovechen este acuerdo.
CC-BY-SA-2.0, FlickrFoto: Niemeyer, Daniel Zanini. Brasil: No hay luz al final del túnel
En el último informe mensual de Credit Suisse, Sylvio Castro, director de inversiones en Credit Suisse Hedging-Griffo (filial del banco suizo en Brasil), comenta sobre la falta de confianza de empresas y consumidores en la economía brasileña, lo que dificulta que la actividad pueda repuntar en el corto plazo.
«La economía brasileña está experimentando un dinamismo excepcionalmente pobre. La inflación sigue muy por encima del objetivo del 4,5% marcado por el banco central, y el reajuste de las cuentas públicas está resultando un proceso mucho más complicado de lo que se preveía inicialmente. La falta de inversión en inmovilizado, la escasa formación de la masa de trabajadores y la crisis política son algunos de los desafíos más importantes. De hecho, la confianza de empresas y consumidores han mermado drásticamente, lo que hace improbable que la actividad pueda repuntar significativamente a corto plazo», apunta Castro.
Las reformas son esenciales para liberar el potencial
El gobierno podría embarcarse en un audaz programa de reformas estructurales que diera lugar a una mejoría de las perspectivas presupuestarias, con la posibilidad de dar un vuelco al actual pesimismo e impulsar la inversión. Entre las diversas reformas que el país necesita urgentemente, la más acuciante es la reforma de las pensiones. Las pensiones consumen en la actualidad el 12% del PIB de Brasil, a pesar de que menos del 8% de la población es mayor de 65 años. Sin embargo, las propuestas de reforma en este ámbito presentan multitud de dificultades, dado su controvertido carácter y la complicada situación política actual. También se precisan otras reformas, de tipo fiscal, laborar y judicial, que podrían infundir dinamismo en la economía y ayudar a las industrias locales.
El debilitamiento monetario ayuda
Puesto que las grandes reformas estructurales son una realidad distante, más a corto plazo, el tipo de cambio ha servido para mitigar en parte el debilitamiento de la economía brasileña. De hecho, la depreciación del real brasileño que se viene observando en los últimos trimestres ha posibilitado ya una cierta mejoría en la balanza comercial de Brasil. No obstante, esta mejoría del sector externo resulta insuficiente para dar un vuelco a la negativa situación de la economía interna.
A pesar del mal rendimiento, las acciones no resultan atractivas
En esta situación, las acciones brasileñas parecen abocadas a seguir ofreciendo rentabilidades comparativamente escasas. El escaso dinamismo económico, los bajos precios de las materias primas, los niveles muy reducidos de márgenes y de rentabilidad de los recursos propios, y las valoraciones no muy alejadas de los promedios a largo plazo hacen que las acciones brasileñas no resulten particularmente atractivas, a pesar de que en los últimos años ha registrado rendimientos comparativamente bajos.
CC-BY-SA-2.0, FlickrFoto: Douglas Fernandes. Fitch Ratings: “La deuda corporativa en LatAm permanecerá bajo una intensa presión en 2016”
Fitch Ratings publicó recientemente sus perspectivas para Latinoamérica en 2016. En su informe “Latin America 2016 Outlook Compendium” recoge los aspectos más destacados de la perspectiva de Fitch para la deuda corporativa en Brasil, Chile, Colombia, México y Perú.
Joe Bormann, director ejecutivo en Fitch, comentó: “La deuda corporativa en Latinoamérica permanecerá bajo una intensa presión en 2016. Las perspectivas siguen siendo abrumadoramente negativas para Brasil y Perú. En Brasil, Fitch proyecta que las rebajas en la calificación crediticia superarán las mejoras en una proporción de 10 a 1, mientras que en Perú la proporción se sitúa de 5 a 1”.
En Brasil, la combinación de la disminución de la demanda, el aumento del desempleo, las persistentes altas tasas de inflación y de interés, los bajos precios de los commodities, la volatilidad de las divisas y los mercados de crédito ha creado un escenario de pesadilla para las empresas del país. La agitación política sigue siendo un viento de cara negativo que arrastra hacia abajo las perspectivas de mejora de los consumidores y la confianza empresarial.
En Perú, la lentitud del crecimiento económico, bajos precios del metal y de las elecciones presidenciales de 2016 harán más difícil el desarrollo de la actividad empresarial. La depreciación de la moneda ha llevado a un aumento de la deuda de los hogares y un debilitamiento del poder adquisitivo de los consumidores. Actualmente Fitch proyecta que el crecimiento del PIB será del 3,8% en 2016. Si el impacto de “El Niño” es sustancial , esta cifra probablemente se revisará a la baja.
En toda la región, las empresas han respondido a los vientos en contra recortando el gasto de capital y la reducción de dividendos. La medida del flujo de caja libre media mejoró en cada categoría de calificación durante los primeros seis meses y ahora es positivo para el “BB”, “BBB” y categorías de calificación “A”. Las mejoras más notables fueron presenciadas en Brasil y Perú. En Colombia, los niveles de gasto de capital siguen siendo elevados debido a las condiciones económicas favorables, y el flujo de caja libre para las empresas sigue siendo muy negativo.
CC-BY-SA-2.0, FlickrFoto: Lenabem-Anna J.
. Cinco claves a tener en cuenta en 2016
Se cierra un año intenso, de noticias inesperadas y sobresaltos en las bolsas, pero ahora hay que mirar al futuro y no perder de vista algunos temas que podrían ser clave en las inversiones de 2016. Estos son para los expertos de Investec los cinco temas a los que habrá que estar extremadamente atento el próximo año:
Necesidad de un portfolio resistente
Más que nunca, los inversores se enfrentan a un mundo que parece lleno de potenciales peligros. En consecuencia, exigen cada vez más portfolios robustos que puedan tener mejores resultados que el mercado en entornos difíciles y que sean resistentes frente a acontecimientos imprevistos. La elección de los activos que forman parte de la cartera tiene que equilibrar las ventajas y desventajas entre el potencial retorno y la exposición al riesgo, y garantizar un nivel de diversificación fuerte y adecuadamente adaptable a un escenario impredecible. Una consideración importante es la durabilidad de la generación de flujo de efectivo de las compañías. También es clave evitar el riesgo de que se produzcan cambios disruptivos. Los portfolios también tienen que limitar la exposición a las partes menos líquidas del mercado y contar con estrategias para hacer frente a episodios de tensión en los mercados.
Divergencia en las políticas monetarias
Tras haber registrado un proceso de recuperación económica, Estados Unidos ha elevado los tipos de interés. Sin embargo, Europa sigue estando al menos tres años por detrás de esta etapa, que solamente ha empezado a atisbarse en la deuda del sector privado. Asia, y China en particular, están muy lejos de esta etapa y su relación deuda-PIB sigue siendo alta, lo que sugiere que en los próximos años aún veremos una política monetaria laxa. Creemos que las divergencias entre las políticas monetarias subrayan la necesidad de gestionar de forma dinámica la exposición a divisas para manejar la volatilidad y capturar las oportunidades cuando se presenten.
Hay que ser selectivos en los mercados emergentes
El universo de activos de los mercados emergentes es tan diverso que ofrece una amplia gama de oportunidades de inversión. Si bien hay algunos factores homogéneos, es probable que persistan el próximo año la diferencias que ahora mismo caraterizan estos mercados. Esto conllevará algunas dificultades, pero también algunas oportunidades mejores que las que hemos visto recientemente. Somos positivos en las economías que tienen exposición a los mercados desarrollados, como México a EE.UU. o Hungría a Europa. Ambos países se benefician de la recuperación de sus vecinos tanto en su crecimiento como en su actividad.
Buscar oportunidades bottom-up
Creemos que el ambiente de inversión de 2016 proporcionará un contexto más favorable para la selección de valores verdaderamente activa, con un sesgo bottom-up en comparación a los últimos años. La vuelta de oportunidades específicas en el stock-picking, la caída de las correlaciones y la subida gradual de tipos de la Fed va contribuir a esto. Creemos que la adopción de un enfoque bottom-up (no sólo para la inversión en renta variable) es vital para contrarrestar a corto plazo el ruido macroeconómica que puede nublar el juicio de los inversores.
Factores de gobierno corporativo
El próximo año los factores de responsabilidad social corporativa pasarán a estar en el centro del escenario para muchos inversores y pasarán a ser vistos como un motor clave en la creación de valor a largo plazo. Japón es un ejemplo de países que están implantando programas de reformas de gobierno corporativo que envían señales alentadoras a los accionistas. Corea del Sur es otra.
En el otro lado tenemos el escándalo en Volkswagen, que puso de relieve el mal gobierno corporativo en términos de su estructura de votación y, lo que es más importante, la composición su Junta Directiva. Por su parte, la Conferencia sobre el Cambio Climático de la ONU celebrada hace poco en París (COP 21) ha reiterado que las cuestiones medioambientales preocupan cada vez más. La idea de que la sostenibilidad debe ser un pilar de la inversión no es nuevo.
Ann Steele, directora del fondo de renta variable europea Threadneedle Pan European Equity Fund, de Columbia Threadneedle. Foto cedida. “En Europa, el proceso más difícil será la salida del QE, pero para ello todavía quedan algunos años"
La renta variable europea ha vuelto a niveles atractivos después de las últimas correcciones y Ann Steele, directora del fondo de renta variable europea Threadneedle Pan European Equity Fund, de Columbia Threadneedle, explica en esta entrevista con Funds Society los factores que siguen jugando a su favor. Además de las valoraciones, está el QE, el euro débil o los precios bajos de las materias primas, sin olvidar el gran potencial de beneficios empresariales. “Esperamos retornos positivos, impulsado por el fuerte crecimiento de beneficios y una buena rentabilidad por dividendo”, explica.
La renta variable europea ha protagonizado un rally en los últimos años. Tras la corrección del verano, ¿han vuelto las valoraciones a un terreno más atractivo?
Así es. El PER del índice europeo MSCI ha decaído hasta 15,1 (para 2016) y el mismo índice tiene ahora una rentabilidad del 3,5%.
Parece que, a pesar de todo, sigue siendo uno de los activos de moda en la actualidad. ¿Qué factores juegan a favor del activo?
El Quantitative Easing debería impulsar los precios de los activos y ayudar a la recuperación económica. Y esto es un argumento tanto relativo como absoluto, ya que Reino Unido y EE.UU. probablemente empiecen a ajustar sus políticas monetarias pronto. Además, un euro débil potencia el valor de los beneficios extranjeros e impulsa la competitividad. Aumentar la demanda y el suministro de crédito debería ayudar también al crecimiento del PIB. Y los precios bajos de las materias primas son un factor positivo, ya que Europa es un importador neto.
Y ¿qué retornos podemos esperar del activo? Algunos hablan de doble dígito, ¿será aún posible encontrar estas rentabilidades?
Esperamos retornos positivos, impulsados por el fuerte crecimiento de beneficios y una buena rentabilidad por dividendo.
¿Es momento de apostar por posiciones más defensivas, por compañías con altos dividendos por ejemplo, o es momento de beneficiarse de la recuperación en el continente a través de sectores más cíclicos o compañías con mayor potencial de crecimiento?
Gestionamos una cartera diversificada, de manera que algunos de estos factores nos resultan atractivos. Las empresas que pagan altos dividendos suelen correr el riesgo de cortar el dividendo, pero damos mucha importancia a los dividendos y su crecimiento sostenible. Asimismo tenemos interés en empresas que pudieran beneficiarse de un recuperación europea, pero buscando empresas de calidad con modelos de negocio sostenibles, no simplemente aquellas que percibirán crecimiento de baja calidad en base a este entorno.
El BCE propicia un euro bajo… ¿le gustan las firmas exportadoras o prefiere compañías expuestas al consumo interno?
Ambas resultan atractivas por diversas razones. El mercado doméstico europeo está en recuperación y esto impulsará la rentabilidad de muchas empresas enfocadas en este mercado. La recuperación – y por tanto los beneficios- varía de región en región, hemos estado particularmente incentivados con la evolución de España e Italia. Al mismo tiempo, las política del BCE están depreciando el valor del euro y esto impulsará el valor de los beneficios no europeos.
¿Qué pasos cree que dará el BCE hacia una política monetaria más expansiva y cómo podría afectar a la bolsa europea?
Aceptamos la necesidad del Quantitative Easing y apoyamos las medidas del BCE en este sentido. El proceso más difícil será la salida del QE, pero para ello todavía quedan algunos años y mientras tanto tendremos el lujo de observar cómo se gestiona en el Reino Unido y Estados Unidos.
¿Qué pasa con los fundamentales de las compañías? ¿Han mejorado? ¿Espera un fuerte crecimiento de beneficios?
En general hemos aumentado las expectativas de beneficios para las empresas en 2015, particularmente para aquellas que mantienen beneficios desde los dos puntos de vista mencionados.
La exposición a países emergentes de Asia y Latinoamérica de las empresas europeas, ¿es ahora un riesgo más que una ventaja?
La exposición a los mercados emergentes ya no es un factor positivo universal y, por tanto, hemos moderado nuestra exposición. Sin embargo es cada vez más difícil generalizar – vemos buenas oportunidades en mercados e industrias selectas.
¿Qué opinión le merece el mercado español? ¿Encuentra e invierte en algunos nombres?
No mantenemos perspectivas en mercados europeos aislados. Tenemos una visión positiva en una serie de mercados españoles, y mantenemos posiciones en empresas como Ferrovial, Amadeus, Inditex y Applus.
Foto cedida. César Pérez Ruiz será el director de Inversiones de Pictet Wealth Management a partir de marzo
Pictet Wealth Management (PWM) ha anunciado en un comunicado que César Pérez Ruiz, actual responsable global de estrategia de inversión de JP Morgan Private Bank, se incorporará como director de Inversiones (CIO) desde 1 de marzo de 2016.
Pérez Ruiz presidirá el Comité de Inversiones, constituido por Pierre-Alain Wavre, CEO de Pictet Investment Office, y Christophe Donay, responsable de distribución de activos y de investigación macroeconómica.
Suma 20 años de experiencia en estrategias de inversión en gestión de patrimonios y activos institucionales, incluyendo carteras de renta variable y multiactivos. Trabajó en JP Morgan, M&G y Credit Suisse AM, con equipos de hasta cien personas. En sus cargos más recientes ha sido jefe de estrategia de inversión para Europa, Oriente Medio y África y responsable global de estrategia de inversión en JP Morgan Private Bank.
César se graduó como ingeniero industrial por la Escuela Técnica Superior de Ingeniería (ICAI) de Universidad Pontificia Comillas en Madrid.
El grupo Pictet, fundado en 1805, es uno de los principales especialistas en gestión de patrimonios y activos de Europa, con 381.000 millones de euros bajo gestión y custodia en septiembre de 2015. Pertenece a siete socios que participan activamente en su gestión, con principios de propiedad y sucesión que no han variado desde fundación. Con sede en Ginebra cuenta con 3.800 empleados y dispone de oficinas en los principales centros financieros globalmente: Madrid, Barcelona, Ámsterdam, Basilea, Bruselas, Dubái, Fráncfort, Hong Kong, Lausana, Londres, Luxemburgo, Milán, Múnich, Montreal, Nassau, París, Roma, Singapur, Turín, Taipéi, Tel Aviv, Osaka, Tokio, Verona y Zúrich.
CC-BY-SA-2.0, FlickrFoto: Tom. Andbank recibe dos premios como mejor entidad de banca privada
Andbank ha sido elegida como mejor entidad de banca privada de Andorra por las revistas ‘Global Finance’ y ‘The European’. Las publicaciones han reconocido con estos premios los más de 85 años de experiencia en banca privada, en gestión de patrimonios, así como el crecimiento y la diversificación internacional del grupo.
Estos galardones se suman al premio que recibió la entidad a principios de noviembre por parte de la prestigiosa publicación británica ‘The Banker’, editada por el Grupo The Financial Times, que reconocía por segundo año consecutivo a Andbank como mejor entidad de Andorra de banca privada.
Las distinciones confirman la sólida trayectoria de la entidad, que cuenta con uno de los ratios de liquidez y solvencia más altos del sector (68,39% y 18,02% respectivamente, a cierre del primer semestre de 2015).
A cierre del primer semestre de 2015, el grupo continúa en la misma línea de crecimiento, aumentado sus activos bajo gestión de enero a junio en cerca de 900 millones de euros.
CC-BY-SA-2.0, FlickrFoto de N@ncyN@nce. ¿Por qué hay casi 50 puntos básicos entre las expectativas de los economistas para la inflación mexicana y el mercado?
Si bien la inflación en México ha venido descendiendo desde el pasado mes de mayo, mes con mes, las encuestas de los economistas privados que realizan tanto Banco de México como Banamex identifican que este fenómeno es temporal y que se daría un rebote que bien podría ocurrir en la segunda mitad de 2016.
La baja en las tarifas de los productos agrícolas, energía y telecomunicaciones, así como del petróleo -entre otros-, ha provocado un descenso en la inflación de México que incluso la ubica por debajo del nivel del 3% desde mayo de 2015. En diciembre de 2014 la inflación anual terminó en el 4,08%; entre enero y mayo de 2015 se ubicó en un rango entre el 3,1% y el 3% y a partir de mayo a la fecha ha descendido mes con mes para ubicarse en noviembre en un 2,2%, que representan niveles históricos.
La expectativa de la inflación general para 2015 se ubica en el 2,4%, muy por debajo del 3,5% esperado hace un año de acuerdo con las encuestas y para 2016 se proyecta una inflación del 3,3% según las últimas encuestas. Es importante mencionar que esta perspectiva para 2016 ha venido bajando mes con mes.
Estos nuevos niveles de inflación del orden del 2% que se están viendo en México ha despertado la duda entre el mercado y los economistas si se puede o no mantener este nivel. Hoy el mercado –a través de las posiciones que mantienen los inversionistas institucionales como son las Afores y las sociedades de inversión en Udibonos que vencen en los próximos 5 años-, considera que la inflación en los próximos cinco años se podría mantener en niveles del 2,5% o menos y los economistas en sus proyecciones visualizan que la inflación regresa a niveles del 3%.
¿Cómo se llega a estos números? En el mercado mexicano se tienen tanto instrumentos que cotizan hasta 30 años tanto en tasas nominales (Mbonos) como en tasas reales (Udibonos). Al restarle a la tasa nominal (Mbonos) la tasa real (Udibonos) al mismo plazo de vencimiento, se obtiene la inflación implícita a la que están operando los instrumentos de tasa real. Algunas emisiones si coinciden en sus vencimientos y otros no por lo que se calcula la tasa interpolada en cada caso para hacerlos comparativos.
Los Udibonos con vencimiento en los próximos dos años reflejan una inflación implícita cercana al 2,5%, mientras que los de mayor plazo (a partir de los siete años), observan una inflación implícita cercana al 3%. Con datos al viernes 18 de diciembre (al cierre), se tiene que las emisiones con vencimiento en diciembre de 2017 (171214) traen una inflación implícita del 2,5% mientras que la emisión que vence en 2022 (220609) trae una inflación implícita del 2,9%.
No es la primera vez que el mercado y los economistas presentan estas diferencias y habría varias causas de estas diferencias: Podría ser que el mercado está siendo más optimista con la expectativa de inflación. En contraparte, los economistas están siendo más reservados en sus pronósticos de inflación y por eso no se han querido bajar. El otro punto sería que por situaciones de mercado el inversionista castiga las emisiones cortas a través de sus cotizaciones para no sacrificar su tasa de interés durante los próximos meses en los que la inflación se mantendrá baja.
Habrá que ver cómo se desarrolla por un lado la inflación en los próximos meses así como sus componentes para validar la visión de los analistas y por otra parte las cotizaciones de estos instrumentos que reflejan la visión de los inversionistas institucionales.
Columna de Arturo Hanono, consultor para inversionistas institucionales en México