¿Qué podemos esperar de la renta fija en los próximos meses?
| Por Fórmate a Fondo | 0 Comentarios
La política volvió al primer plano en abril de la mano de la primera vuelta de las elecciones presidenciales en Francia, que fue el principal foco de interés de los inversores. En el último informe mensual del equipo de renta fija de Fidelity International, la gestora definió su visión a medio plazo sobre la dirección de los tipos de interés y cómo afectarán a la deuda pública de los mercados desarrollados. Estos son algunos de sus planteamientos:
Europa y el BCE
El debilitamiento de las fuerzas populistas en Europa visto en los últimos resultados electorales, sumado a la recuperación cíclica en marcha y las persistentes inquietudes en torno a la escasez de deuda pública europea, dan mucha munición a los partidarios del endurecimiento monetario dentro del Consejo de Gobierno del BCE, cree Fidelity.
La reunión de abril de la entidad fue intrascendente. Dragui dejó un mensaje de cautela y apenas dio pistas sobre los futuros cambios de la política monetaria. Estuvo en línea con lo que se esperaba, en parte porque cualquier decisión se habría tomado en un momento bastante inoportuno desde el punto de vista político: entre las dos vueltas de las elecciones francesas. Sin embargo, todo apunta a que la reunión de junio dejará las cosas bastante más claras.
“Dado que la inflación subyacente no emite apenas señales de aceleración, consideramos improbable que el BCE comience a cerrar el grifo de las compras a partir de enero de 2018. Sin embargo, persiste el riesgo de que el asunto se vuelva a debatir otra vez y el mercado lo descuente. En este entorno, la deuda pública europea podría sufrir picos de volatilidad y los diferenciales de la periferia podrían ampliarse, pero siguen observándose unos sólidos factores técnicos favorables que contendrán el ascenso de los rendimientos”, explican los analistas de Fidelity en su análisis mensual.
Para los gestores de la firma, la política italiana es el segundo riesgo a tener en cuenta. Sus fundamentales siguen cosechando decepciones como consecuencia de su fragmentación política y el elevado riesgo del auge de los partidos antisistema en las próximas elecciones, previstas para el primer trimestre de 2018.
Como resultado de esto, Fidelity cree que el estrechamiento de los diferenciales de la periferia tras el resultado de las elecciones francesas ofrece una buena oportunidad para recoger beneficios y reducir la exposición a estos países, a la vista de los numerosos obstáculos que se avecinan.
Estados Unidos y Trump
En los últimos meses hemos visto como la deuda estadounidense ha subido con fuerza y ha superado a otros mercados de deuda pública. El aumento de las tensiones geopolíticas, las sorpresas a la baja en la inflación y el cierre de las posiciones cortas son para Fidelity los tres factores que hicieron que la duración estadounidense se mantuviera firme.
Por eso, dicen sus analistas, de cara al futuro, los argumentos a favor de sobreponderar los bonos del Tesoro de EE.UU. siguen intactos, aunque las valoraciones y el posicionamiento son menos extremos que a comienzos de año. En deuda pública, la apuesta reflacionista de Trump se ha diluido en cierta medida.
“Aunque podríamos encontrarnos con alguna sorpresa y ver cómo se aprueba en un plazo breve alguna gran reforma favorable al crecimiento, aprovecharíamos un ascenso de los rendimientos para reforzar nuestra exposición a la duración estadounidense. Consideramos que hay poco margen para que los rendimientos de la deuda estadounidense suban de forma significativa desde los niveles actuales, a la vista de las elevadas valoraciones de otros activos de riesgo, los persistentes riesgos geopolíticos y los problemas estructurales aún vigentes, como el exceso de deuda y el bajo crecimiento de la productividad”, explican desde Fidelity.
Reino Unido y las elecciones
El equipo de renta fija de la gestora sigue infraponderado en deuda pública británica única y exclusivamente como consecuencia de las valoraciones, que consideran elevadas tanto en el plano absoluto como relativo frente a otros mercados de renta fija pública, como por ejemplo, el de Estados Unidos. Sin embargo, advierte que el panorama macroeconómico y político podría seguir sosteniendo este mercado.
“Los datos macroeconómicos británicos están deteriorándose por el impacto negativo del encarecimiento de las materias primas y la debilidad de la moneda sobre las rentas reales y el consumo, mientras que el Banco de Inglaterra probablemente mantendrá los tipos sin cambios en un futuro previsible. Las elecciones anticipadas convocadas por Theresa May constituyen un foco de atención a corto plazo, pero atendiendo a las últimas encuestas, el partido conservador probablemente refuerce su mayoría en el Parlamento, aunque eso no significa necesariamente que las negociaciones del Brexit vayan a ser más fáciles”, concluye el equipo de renta fija de Fidelity.