Banco Santander y su filial en Polonia, Bank Zachodni WBK, han anunciado que han acordado la compra del negocio minorista y de banca privada de Deutsche Bank Polska, S.A., excluyendo su cartera de hipotecas en divisa extranjera e incluyendo las acciones de DB Securities, S.A. (Poland), por un importe total estimado de 305 millones de euros.
La adquisición reforzará la posición de BZ WBK como tercera entidad financiera de Polonia, con 6,8 millones de clientes y una cuota de mercado de más del 11,7% en créditos y el 11% en depósitos. Además, BZ WBK se convertirá en la entidad líder de banca privada en el país.
La adquisición incluye el negocio de banca comercial y banca privada, la actividad de pymes de Deutsche Bank Polska, su unidad de gestión de activos y su red comercial, con 113 sucursales y unos 1.500 empleados. El negocio adquirido tiene 4.350 millones de euros en activos, 4.300 millones de euros en créditos y 2.505 millones de euros en depósitos de clientes (a 30 de junio de 2017).
De acuerdo con las cifras actuales, el banco resultante tendrá unos 39.800 millones de euros de activos totales, 30.300 millones de euros en créditos y 28.300 millones de euros en depósitos de clientes.
La presidenta de Banco Santander, Ana Botín, ha afirmado que “tenemos un gran banco en Polonia con la mejor plataforma de banca móvil del país. En los últimos años, Polonia ha destacado como una de las economías de mayor crecimiento de Europa y creemos que tenemos potencial para continuar creciendo en el país. Esta adquisición refuerza nuestra posición en segmentos de negocio importantes, como banca privada y pymes, y nos permite, además, seguir generando rentabilidad para nuestros accionistas”.
Se espera que la operación, que está sujeta a las aprobaciones correspondientes, se cierre antes de finales de 2018. Está previsto que genere una rentabilidad sobre la inversión del 15% en 2021 y que tenga impacto positivo en el Beneficio por Acción (BPA) de Santander, mientras que no tendrá efecto material sobre los ratios de capital del Grupo.
Gestores e inversores no dan la espalda a las grandes megatendencias que están marcando nuestro siglo, como la economía digital, la innovación, la robótica o la longevidad de la población. Por ello consideran que invertir en ellas es fundamental, pero cómo hacerlo.
Para AXA IM está claro que las carteras de renta variable deben incorporar grandes nombres presentes en la evolución y transformación de estas tendencias, y, por supuesto, el de aquellas firmas que se benefician de las propias megatendencias.
Un factor común de todas estas megatendencias es la innovación. Y es que la evolución de las dinámicas y las herramientas con las que cuentan los consumidores, así como su perfil, hacen que sea aún más importante que nunca para las empresas ser innovadoras.
En este sentido, Isabelle De Gavoty, responsable del equipo de inversión de Small Caps de Framlington, explica que “las empresas pequeñas se sitúan en el epicentro de los cambios a largo plazo y, a través de su capacidad para transformarse, pueden aprovechar el crecimiento y las alteraciones que se producen en su entorno. Al ser flexibles y ágiles, pueden aprovechar y actuar con mayor rapidez ante los cambios a largo plazo que se producen en el mundo”.
En opinión de De Gavoty, el universo de las pequeñas y medianas empresas –small&mid cap– son el tipo de activo más adecuado para captar la rentabilidad que ofrecen las megatendencias y la innovación. “Son una clase de activos que rinden más a largo plazo y a nivel global porque en su ADN llevan la innovación, y por tanto son muy propenso a transformarse, y también porque son empresas que se centran puramente en lo que hacen y se adaptan con más rapidez a los cambios, sobre todo a los cambios de paradigma”, explica.
Su experiencia le dice que cuando el inversor se enfrenta a este tipo de activo, tiende a pensar que será más volátil; sin embargo ella defiende que no tiene por qué ser así. “En primer lugar, permiten diversificar más la cartera y en segundo lugar, según un estudio, el 80% del movimiento del precio de las acciones de una empresa se debe a factores macro, mientras que en el caso de las pequeñas y medianas empresas se debe a ser capaz de buscar en su propio modelo de negocio y actividad lo que le puede hacer aumentar el valor de sus acciones”, argumenta.
Propuesta de inversión
Desde AXA IM proponen el fondo AXA WF Framlington Global Small Cap F EUR como solución y estrategia para abordar este universo. Se trata de un subfondo cuyo objetivo es obtener una apreciación del capital a largo plazo, expresada en dólares estadounidenses, invirtiendo en empresas de pequeña capitalización de todo el mundo, y tiene un horizonte de inversión de uno ocho años.
Para esta cartera, la gestora busca empresas que sean capaces de reinventarse, que puedan plantar retos o funcionen en mercados fragmentados y que tengan un modelo de negocio que les permita crecer más rápido que las grandes empresas. “Esto es un universo enorme por lo que, para abordarlo, lo dividimos en sectores, lo cual nos aporta valor añadido y permite que los expertos en cada sector puedan elegir los activos más adecuados”, explica De Gavoty. En este sentido, el 34% de la cartera corresponde a empresas vinculadas con la longevidad y el estilo de vida, el 5% energía y transformación energética, el 19% economía digital y el 20% automatización y eficiencia.
La gestora hace una criba de empresas basadas en el crecimiento y en criterios financieros, como el nivel de apalancamiento financiero o el origen de sus beneficios. “Vemos que las empresas no tengan una valoración indebida y elegimos 50 acciones, vemos su volatilidad y el rendimiento que podemos generar en determinados contextos. Las empresas de baja capitalización son empresas que ya tienen un concepto que funciona, la empresa más o menos está cerca de convertirse en rentable o generar flujo de caja”, concluye.
Aunque todavía asistirá a una reunión más del Comité Federal de Mercado Abierto (FOMC) en enero del próximo año, la de ayer fue la última conferencia de prensa que contará con la presencia de Janet Yellen como presidenta de la Reserva Federal, quien prometió hacer todo lo posible en el próximo mes y medio para asegurar una transición suave a su sucesor Jerome Powell.
“Con la tercera subida de tasas de 2017 y el inicio de la reducción de su balance en el mes de octubre, la Fed ha conseguido algo inalcanzable en este ciclo: ha cumplido con los ajustes planificados en política monetaria en su totalidad en un año. Acompañando la subida de tasa, existe la posibilidad de que haya un incremento menor en el crecimiento a corto plazo del PIB, pero no esperamos que la mediana de los “puntos de la Fed” se vea alterada. Ciertamente, la suavidad continuada en la inflación subyacente y en los salarios no garantiza una aceleración en el ritmo actual y gradual de normalización”, apunta Dave Chappell, gestor de renta fija en Columbia Threadneedle Investments.
Las previsiones económicas
Esta nueva subida se ha basado en la fortaleza del mercado laboral y la robustez de la economía doméstica. La Fed revisó al alza las previsiones de crecimiento para este 2017, desde el 2,4% al 2,5%, para el 2018 del 2,5% frente al 2,1% anterior; y para el 2019, un 2,1% frente al 2% estimado. En lo que respecta al desempleo, han reducido las expectativas de las tasas de desempleo para 2018 y 2019, hasta situarse en el 3,9%. Sin embargo, según señala Juan Ramón Casanovas, head of Private Portfolio Management de Bank Degroof Petercam Spain, la Fed no descarta volver a revisar estos datos en el caso de que se apruebe la reforma fiscal impulsada por Trump.
“Hemos observado este patrón de revisión de las estimaciones varias veces ya, lo que señala la dificultad de a la que se enfrenta la Fed para entender totalmente la actual dinámica económica, y sobre todo, la pérdida de relación entre la inflación y otras variables macroeconómicas. La incertidumbre sobre cuál es la postura monetaria correcta se refleja en el hecho de que dos miembros de la Fed se mostraron a favor de mantener los tipos de interés sin cambios”, comenta Yves Longchamp, Head of Research de ETHENEA Independent Investors.
En conjunto, podría afirmarse que la Fed se encuentra cómoda con la marcha de la economía, aunque se sigue preocupando por el bajo nivel de inflación. Según apunta Keith Wade, economista jefe de Schroders, las predicciones para la inflación permanecieron estáticas en un 1,9%, indicado que las autoridades monetarias creen que la curva de Phillips permanecerá plana a pesar de que la tasa de desempleo haya caído en los niveles más bajos desde hace 17 años. “Los últimos datos del índice de precios de consumo mostraron que la inflación subyacente sería menor que las expectativas de noviembre, dando mayor fuerza a los miembros que apoyan políticas acomodaticias para la inflación”
Coincide con esta visión, Mondher Bettaieb, gestor del fondo Vontobel Fund- EUR Corporate Bond Mid Yield en Vontobel AM, que afirma que a pesar de un crecimiento más alto y de un desempleo menor, la Fed no ha modificado sus perspectivas de inflación, considerando la subida de ayer, sin duda, una subida acomodaticia (dovish).
“Las proyecciones en materia de desempleo por parte de la Fed fueron revisadas por debajo de la tasa sostenible en el largo plazo. Y las predicciones de inflación mostraron muy poco cambio, esto sugiere que la Fed no espera que un crecimiento mayor y un menor desempleo lleven a una intensificación de las presiones inflacionarias y por lo tanto no requieren una política monetaria más restrictiva que la prevista anteriormente” señala Mitul Patel, responsable de tipos de interés en Janus Henderson Investors.
Sin embargo, la Fed sigue muy de cerca los cambios que puedan darse en materia de política fiscal. “El estímulo fiscal puede provocar caídas mucho mayores en la tasa de desempleo que lo estimado por las previsiones de la Fed, lo que a su vez podría conducir a una mayor inflación. Esto sigue dependiendo de la que se reafirme la curva de Phillips, con unas menores tasas de desempleo que conducen a unas mayores presiones salariales”.
En la opinión de Aberdeen Standard Investments, son precisamente estas dos cuestiones las que el mercado quiere conocer: “cuánto impulso cree la Fed que tendrán los recortes de impuestos, y si su confianza en la curva de Philips se ha debilitado”.
Según señala Ken Leech, director de inversiones de Western Asset -filial de Legg Mason-, de forma general, la Fed cree que la falta de inflación y de presiones inflacionistas es un problema temporal, mientras que algunos inversores consideran que se debe a los desarrollos tecnológicos, que empujan a la baja el precio de algunos servicios, así como al efecto de la globalización. Otros consideran que las sociedades occidentales ahorran más de lo que gastan o lo achacan al menor poder de los sindicatos.
Además, tampoco se ha realizado ningún ajuste en el gráfico de puntos. Nuevamente desde el punto de vista de Vontobel esto significa que las presiones a la baja en la inflación permanecerán durante un tiempo en la economía. “Analizando el gráfico de puntos, se pude concluir que habrá tres subidas de tipos en 2018 y dos en 2019. Mi opinión es que veremos dos en cada uno de los años, pues la Fed no está satisfecha con las perspectivas de inflación y por ello dejarán que la economía se “caliente” un poco más de lo que está hoy en día. Si acometen finalmente cuatro subidas de tipos, dos cada año, esto sería benigno para la economía”.
¿Qué cabe esperar en los próximos meses?
Según apunta Luke Bartholomew, responsable de estrategia de inversión de Aberdeen Standard Investments, la reunión de ayer no trataba en realidad de una subida de tipos de interés, algo que lleva tiempo descontado en los mercados, sino de saber qué hará la Fed en el futuro. “Está claro que la Fed cree que puede subir los tipos tres veces más el próximo año. Pero esta es una previsión que los mercados no compran todavía, y son los datos más que la retórica los que convencen a los inversores en última instancia”.
El mercado está descontando más subidas de tipos por parte de la Reserva Federal en 2018 y 2019 hasta llevarlos cerca del 2%. Sin embargo, según señala Tristan Hanson, gestor del equipo multi-asset de M&G y especializado en retorno absoluto, el comportamiento en fechas recientes de los bonos con mayor vencimiento parecen reflejar un cierto escepticismo sobre la posibilidad de que el contexto económico positivo se mantenga más allá de este horizonte.
“El rendimiento de la deuda pública de Estados Unidos a 10 años ha caído durante 2017, a pesar del aumento del rendimiento de los bonos a dos años, que han alcanzado un 1,80% desde el nivel justo por debajo del 1,20% con el que empezaron el año. Este notable aplanamiento de la curva estadounidense ha dado mucho de qué hablar este año. Parece que los mercados podrían estar acercándose a un punto de inflexión. Si el rendimiento de los bonos a dos años sigue subiendo el año que viene, tal y como ha venido haciendo este año, es probable que se deba a que los inversores han revisado al alza sus perspectivas de crecimiento a medio plazo en Estados Unidos y consideran ahora que unos tipos de interés por encima del 2% suponen un equilibrio sostenible. Ello terminaría por tener consecuencias de gran calado en los mercados internacionales, y los mercados de renta fija y algunos segmentos de la renta variable que se han beneficiado de los tipos bajos podrían verse presionados”, comenta Hanson.
Asimismo, el gestor de M&G señala que si la era de tipos reducidos -vigente ya desde hace una década- se mantiene y los inversores no ven motivos para mejorar sus previsiones económicas, siendo poco probable que los rendimientos de la deuda estadounidense a dos años suban mucho más.
“En este contexto, los activos de crecimiento que han arrojado un buen comportamiento en 2017 podrían verse presionados. Dentro de un año, sabremos qué hipótesis prevalecerá. Mientras, tendremos que estar muy atentos a la evolución del rendimiento de los bonos del Tesoro estadounidense a dos años”, apostilla.
Una divergencia similar se está viendo en los rendimientos de los bonos del Tesoro estadounidense a 30 años, que han caído casi en 30 puntos básicos desde principios de año, mientras que, los rendimientos del tramo corto de la curva han aumentado de forma notable (los rendimientos de los bonos del Tesoro estadounidense a un año han aumentado 86 puntos básicos). Si bien algunos inversores consideran este aplanamiento en la curva de rendimientos como un precursor del estancamiento del crecimiento, Ken Leech, compara la curva de rendimientos estadounidense con Cassandra, un personaje de la mitología griega que siempre acertaba en sus predicciones, pero a la que nadie creía: un error que los inversores de Western Asset quieren evitar “teniendo en cuenta la señal de alarma en la curva de rendimientos en su valor nominal”.
Lo que realmente debe importarnos de la Fed
En 2018, los miembros con derecho a voto del Comité Federal de Mercado Abierto cambiarán y hay tres vacantes libres, cuatro si se incluye la de Janet Yellen. Estos mencionados cambios podrían variar la dirección de la política monetaria. A juicio de Ron Temple, director de renta variable de Estados Unidos para Lazard Asset Management, estos cambios son más relevantes que la nueva subida anunciada y las proyecciones de su mapa de puntos.
“Janet Yellen ha hecho un excelente trabajo navegando en el mar revuelto que supone presidir la Reserva Federal. Mirando hacia el futuro, los mayores desafíos de la Fed son alcanzar el objetivo de inflación del 2%, no socavar la recuperación del consumidor de clase media y mitigar los riesgos sistémicos a través de la política acomodaticia. Estos objetivos se pueden lograr, pero requerirán que la Reserva Federal se centre más en los datos reales que en los modelos teóricos y aprecie completamente el grado en que esta recuperación difiere de las anteriores. Estados Unidos puede sostener varios años de crecimiento adicional si la política monetaria sigue siendo lo suficientemente acomodaticia”.
En cuanto al nuevo presidente de la Fed, Temple señala que esperan continuidad en la política de Jerome Powell, pero reconoce que la nueva composición de miembros con derecho a voto del FOMC puede complicar cualquier pronóstico.
“De cara al futuro, las preguntas clave para los miembros del FOMC son cuán dispuestos están a dar respuesta a una próxima recesión con políticas no convencionales si la inflación y las tasas de interés se mantienen en niveles históricamente bajos y cuán dispuestos están a considerar objetivos nuevos o diferentes para lograr su doble mandato, dados los desafíos planteados por el lento crecimiento, baja inflación, tipos bajos y baja participación en la fuerza de trabajo”, añade.
Por último, según apunta Jack McIntyre, co-gestor de Brandywine Global, filial de Legg Mason, la reunión del Comité Federal de Mercado Abierto de marzo de 2018 será importante en vista del inminente cambio de liderazgo en la Fed. “No creemos que Powell quiera cambiar por completo la dirección de la institución, a no ser que algo cambie drásticamente. Por tanto, la Fed debería mantener su trayectoria durante buena parte de 2018, dado que, en su reunión de diciembre, acaba de establecer la hoja de ruta para el próximo. Lo interesante es que hubo dos miembros discrepantes que abogaron por no subir los tipos en la reunión de diciembre —un acontecimiento nada habitual—, por lo que tal vez la Fed debiera considerar descartar la subida de tipos de marzo por el momento”.
Cuando viajo alrededor del mundo visitando clientes, me suelen preguntar, “¿Qué es lo que te quita el sueño por las noches?” La respuesta: tratar de acertar cuándo se producirá la siguiente recesión. Mientras el crecimiento económico global continua en una expansión sincronizada, existen varias señales preocupantes que me han impedido pegar ojo. ¿Por qué encuentro las recesiones tan preocupantes? Porque causan estragos en los precios de los activos con riesgo.
Según un estudio realizado por Ned Davis Research, la caída media de en el índice S&P 500 durante la era posterior a la Segunda Guerra Mundial, desde el pico anterior a la recesión hasta el punto mínimo de recesión, es cercano al 28%. Por supuesto, los activos con riesgo como las acciones y los bonos high yield han tendido a proporcionar unos retornos positivos en exceso de la tasa de crecimiento económico en el largo plazo, pero el inversor típico suele fracasar a la hora de cosechar esos beneficios a largo plazo. ¿Por qué? Porque debido a los antojos de la naturaleza humana, las recesiones pueden ser ruinosas para su cartera. Los inversores suelen abandonar sus inversiones una vez los mercados han caído, el peor momento de todos; y, suelen ser lentos en su reincorporación, solo regresando cuando los mercados han comenzado ha recuperarse.
Según mi experiencia, una vez que los inversores se asustan, tienden a permanecer asustados. En otras palabras, puede que a los inversores les lleve más tiempo curarse psicológicamente de lo que lleva a los mercados a curarse desde una perspectiva de precios. Por lo que claramente, tener en mente una potencial recesión es muy útil para que los inversores posicionen sus carteras.
Ya que nadie posee una bola de cristal, es importante disponer de un marco en el que ver los riesgos que pueden venirse encima. Para mí, este marco es una lista de control de indicadores de recesión que he utilizado durante décadas. Mientras que esta lista no está prediciendo una recesión inminente, existen tres señales preocupantes que creo que merece la pena explorar con mayor detalle.
Demasiada deuda
Los mercados se encuentran en sus máximos. Los inversores están confiados. Las condiciones financieras son laxas. Los tipos de interés son bajos. ¿Por qué deberían las empresas y los inversores aumentar su endeudamiento? Hacer frente a los pagos de la deuda debería ser fácil teniendo en cuenta este telón de fondo, ¿verdad? No debería suponer una sorpresa que la cantidad de deuda tanto en los balances corporativos como en los hogares ha aumentado a niveles que superan los de los últimos dos picos del ciclo.
En mi experiencia, demasiado endeudamiento es una señal de una confianza excesiva, y una confianza excesiva no es nunca algo bueno. Y, mientras el servicio de la deuda es bastante gestionable en el momento actual, la Reserva Federal está preparada para subir tasas de interés de nuevo en diciembre y probablemente, según mi punto de vista, habrá un mayor número de subidas de tasas de las que el mercado espera en 2018. En la última fase del ciclo, las tasas de interés tienden a subir, y este ciclo es uno de los más largos registrados.
Una actividad de trivial de fusiones y adquisiciones, y la deuda en margen
Un repunte en el flujo de acuerdos y precios más altos pagados por las fusiones y adquisiciones son un fenómeno clásico en las etapas tardías del ciclo, y estamos viendo ciertos excesos en este campo, según mi opinión. Frecuentemente, en la última parte del ciclo, las empresas dudan de su capacidad para conseguir que los beneficios y las ventas crezcan a un ritmo suficientemente rápido para complacer a los inversores, por lo que compran alguna otra empresa para crear unos ahorros y para exprimir los beneficios por acción. A menudo, pagarán un precio elevado en este proceso. En mi opinión, la actividad en materia de adquisiciones se está incrementando y la prima pagada está creciendo con respecto a los picos de los ciclos anteriores. El endeudamiento marginal representa una preocupación similar. Para muchos, el incremento de la deuda en margen es una señal de confianza. Algunos pueden llamarlo una señal de sobreconfianza. Contra este telón de fondo merece la pena señalar que, a finales de octubre, el margen de la deuda tocó un nuevo máximo de 561.000 millones de dólares. Algunos inversores toman prestados contra sus carteras para comprar más acciones, con las que poder ampliar los resultados si las acciones continúan creciendo en precio o magnificar las pérdidas si las acciones caen en precio. Otros inversores utilizan la deuda en margen como una fuente barata de financiación a corto plazo para otras prioridades. Esto puede ser preocupante si los inversores comienzan a utilizar la deuda en margen del mismo modo que se solía utilizar los prestamos sobre el equity de los hogares durante la fase previa a la crisis financiera global. Endeudarse contra una cartera de valores puede eliminar una protección en la caída si los mercados vuelven a caer y los prestatarios se ven obligados a vender acciones para cumplir con los requerimientos del margen.
La cuota de beneficios con respecto al PIB
Según mi punto de vista, uno de los mejores indicadores que señalan dónde se encuentra la economía de Estados Unidos dentro del ciclo de negocio, es la cuota de beneficios con respecto al PIB. Utilizando los datos de la cuenta de producto e ingreso nacional (NIPA), con los datos producidos por la Oficina de Análisis Económico de Estados Unidos (BEA), es posible comparar todos los beneficios producidos por la economía de Estados Unidos -desde el restaurante local de pizza y el salón de belleza hasta Apple y Netflix- y dividir estos beneficios entre el producto interior bruto, lo que mide el valor de todos los bienes y servicios producidos por la economía. Este cociente es la cuota de beneficio con respecto al PIB. Cuando la cuota de beneficios crece, suele sugerir que esperan mejores tiempos para los precios de las acciones, basándose en la asunción de que las empresas tienen una mayor probabilidad de invertir y contratar cuando los beneficios están creciendo que cuando están cayendo. Cuando los beneficios caen, las empresas tienden a restringir en contratación e inversión. Históricamente, cuando la cuota de beneficio con respecto al PIB cae durante un año o más, sugiere que se avecinan problemas. Durante este ciclo la cuota de beneficios con respecto al PIB se encuentra en máximos históricos. Pero por el momento, la cuota de beneficios por PIB es menor de lo que era hace un año. Este indicador suele caer entorno a unos 12 – 18 meses antes del comienzo de una recesión, y estamos aproximándonos al año de que la cuota de beneficios del PIB haya caído lentamente, -aunque el porcentaje total permanece relativamente alto, con relación a su historia.
Pisen el freno
Mientras la economía y los mercados parecen estar poniendo en marcha todo el cilindraje, para mi estos indicadores son las luces de aviso en el tablero de mandos de un coche. Algunos ven la luz de “compruebe el motor”, pero piensan, “bueno, parece que el coche está funcionando correctamente”. Pero yo pienso que las luces de aviso se encuentran allí por alguna razón. Cumplen la intención de mantenerte alejado de un problema mayor. Por lo que creo que los inversores deben querer considerar que las estrategias de preservación de capital son una opción para poner sus pies en el suelo en este punto del ciclo.
Opinión de James Swanson, estratega jefe de MFS Investment Management
El mercado bursátil chino es una de las sorpresas de 2017, en opinión de Deutsche Asset Management. A principios de marzo los mercados de renta variable desarrollados llegaron a su punto más alto expresado en euros pero posteriormente cayeron, mientras que las acciones de países emergentes, especialmente las de China, han continuado creciendo.
Al final de agosto, el índice MSCI China había subido un 41,6% desde principios de año, “un comportamiento considerablemente mejor que el de otros mercados bursátiles tanto de países industrializados como emergentes”, según valoran desde Deutsche AM. El MSCI China también registró rendimientos extraordinarios a largo plazo con un 188% desde agosto de 2006, si bien con una volatilidad muy alta.
Según señala la gestora, en la serie passive insights, Deutsche AM analiza al detalle lo que sostiene a este impresionante desarrollo, y qué oportunidades –y al mismo tiempo qué riesgos– deberán considerar los inversores al invertir en acciones chinas.
“Para empezar, miramos la valoración del mercado de valores chino. Recientemente los precios han subido considerablemente. El ratio previsto de precio-beneficio es a día de hoy 14,6. Sin embargo, las valoraciones en Estados Unidos, Japón y la Eurozona son notablemente más altas. Además, las compañías cotizadas pueden mostrar un crecimiento de beneficios fuerte”, explican desde la gestora.
Según las previsiones de los analistas, los beneficios por acción han subido un 14% este año y podrían incrementarse en un 15% en 2018. Por otro lado, se espera una caída en la rentabilidad de compañías cotizadas en los mercados de EEUU, Japón y la Eurozona el año que viene.
En su opinión, aunque parezca prometedora la situación actual, los inversores podrían querer ver si hay fuertes argumentos para el comportamiento positivo de las acciones chinas a medio y largo plazo. “Aquí hay dos factores que resultan especialmente prometedores. Uno es la estabilización del Yuan frente al dólar que ha llevado a una disminución en las salidas de capital de China hacia la zona del dólar, lo que suaviza los temores de un aterrizaje forzoso para la economía china”, afirma.
Apertura de los mercados
El segundo de los factores sería la incorporación de las acciones clase A, listadas en las bolsas de Shanghai y Shenzen, en índices bursátiles de mercados emergentes, podría impulsar el índice MSCI de Mercados Emergentes. “Este es de lejos el índice más común para los mercados emergentes. En el índice se incluyen hasta 450 acciones de clase A de gran tamaño o mediana capitalización. Los inversores expuestos al índice MSCI EM podrían invertir hasta 340 mil millones de dólares en estas acciones. Esto podría conducir a una mejor eficiencia del mercado, menor volatilidad y una mayor participación de inversores institucionales en el mercado de valores chino”, afirma en su último análisis.
Para Deutsche AM, los ETFs podrían ser una buena opción para participar en las oportunidades que ofrece el mercado de valores chino. Sin embargo advierte que los inversores deben comprender los aspectos únicos del mercado. Según la compañía China Securities Index Co., actualmente hay más de 3.300 acciones que cotizan en las bolsas de Shanghai y Shenzen. “Durante mucho tiempo las acciones clase A que cotizaban en la divisa China Renminbi estaban reservadas solo para inversores chinos. Sin embargo, recientemente, a finales del 2011, con el lanzamiento del programa “Renminbi Qualified Foreign Institutional Investor” (RQFII) se pueden desarrollar ETF de réplica física que proporcione a los inversores extranjeros acceso directo a acciones chinas. Deutsche Asset Management, con su compañía asociada china, Harvest Global Investments, cotizaron el primer ETF de réplica física “A-Shares” en Europa en la bolsa alemana en el año 2014”, explica.
Además de las acciones clase A, la gestora defiende que existen unas acciones H mucho más pequeñas que cotizan en la bolsa de Hong Kong, que hasta ahora son más importantes para inversores no chinos. “Aquí, las compañías chinas tradicionalmente han incluido acciones para inversores internacionales en dólares de Hong Kong. Los índices comunes, como el índice MSCI China –o el índice FTSE China 50– siguen constando predominantemente de acciones de Hong Kong y por lo tanto, en la parte más pequeña del universo de la renta variable china. Sin embargo, con la inclusión de acciones clase A por grandes proveedores de índices, esta distinción podría ser cosa del pasado”, matiza a este respecto.
Las minutas de la última reunión de la Reserva Federal parecen sugerir que, a pesar de que hubo desacuerdo con respecto a la inflación futura en EE.UU., subirán la tasa en diciembre. En este caso, el mercado ahora tiene incorporado en su totalidad un alza de 25 puntos base (pbs) para la tasa de fondos federales en la próxima reunión del 13 de diciembre. Las minutas de la última reunión de política monetaria de Banxico mostraron en la discusión que la mayoría de sus miembros creen adecuado mantener el diferencial de tasas con la Reserva Federal, especialmente, a la luz de los mayores riesgos para la inflación.
El nuevo gobernador puede inclinar la balanza en cualquier dirección, pero su compromiso con la inflación será fuertemente analizado. El mercado ya está incorporando una subida para el mes de diciembre con un 50% de probabilidad y un alza completa de 25pbs para la reunión de febrero. En vista de la inflación de la 1Q Nov, que sobrepasó el consenso del mercado y a la seguridad de Banxico ayer de que la inflación general ya estaba en una tendencia descendente hacia el objetivo, preferimos que el alza sea tan pronto como en la próxima reunión. Banxico se mostró muy preocupado por que las expectativas de inflación no aumenten debido a la dificultad que está teniendo la inflación para converger al objetivo de 3,0%. En las minutas, incluso uno de los miembros mostró serias dudas de que el objetivo podría alcanzarse tan pronto como el próximo año. En este momento, nuestro pronóstico para la inflación anual general del próximo año se ubica en 4,6%.
De acuerdo con nuestra regla de política monetaria, ahora vemos la tasa de referencia teórica en 7,25% para fines de enero del próximo año, cuando la inflación general cae a 5,3% debido a efectos base. En este caso, podríamos ser indiferentes entre una subida en diciembre o febrero, como el mercado está debatiendo en este momento. Pero ir con la Fed es la propuesta menos arriesgada, especialmente teniendo en cuenta los aún inciertos resultados de la negociación del TLCAN, la reforma fiscal en EU y las elecciones presidenciales. Los tres podrían potencialmente depreciar el peso mexicano además de cerrar el diferencial con la Fed en un entorno de inflación que ya se está deteriorando.
Tras dos años de negociaciones, los Ministros de Finanzas de los Estados miembros de la UE aprobaron ayer, durante su reunión en Bruselas, la primera lista de jurisdicciones que no cooperan en materia fiscal.
De los 17 estados incluidos en esta lista de paraísos fiscales, hay cinco de América Latina y el Caribe: Barbados, Panamá, Granada, Santa Lucía y Trinidad y Tobago.Todos han sido señalados por no realizar esfuerzos suficientes en la lucha contra la evasión fiscal y también están incluidos en la lista que cada año elabora la OCDE.
A estos cinco se unen otros 12 países: Samoa Americana, Bahréin, Guam, Corea del Sur, Macao, las Islas Marshall, Mongolia, Namibia, Palaos, Samoa, Túnez y Emiratos Árabes Unidos.
Las Bahamas y las islas vírgenes tanto Británicas como de Estados Unidos estaban destinadas a entrar en la lista negra, lo mismo que Anguilla, Antigua y Barbuda o Dominica, pero la Unión Europea ha pospuesto el análisis hasta 2018 para que estas pequeñas islas caribeñas tengan tiempo de recuperarse de la devastadora temporada de huracanes.
Además, 47 países se han comprometido a abordar las deficiencias en sus sistemas tributarios y cumplir los criterios requeridos. En esta lista gris sí está Uruguay. Esto se debe a su legislación sobre las Zonas Francas señalada este año como un “incentivo legal dañino” por la OCDE.
La tramitación parlamentaria de una reforma de la ley de Zonas Francas que somete a las empresas a mayores controles, debería terminar de sacar a Uruguay de la zona de duda.
¿Qué supone estar incluido en esta lista?
Los países que fomentan las prácticas fiscales abusivas, según la Comisión Europea, debería tener un impacto real en los países afectados, gracias a las nuevas medidas legislativas de la UE.
En primer lugar, siguiendo las propuestas de la Comisión, la lista de la UE está ahora vinculada a la financiación en el contexto del Fondo Europeo de Desarrollo Sostenible (FEEF), el Fondo Europeo de Inversión Estratégica (FEIE) y el Mandato de Préstamo Exterior (ELM). Los fondos de estos instrumentos no pueden ser canalizados a través de entidades en los países listados. Solo se permitirá la inversión directa en estos países (es decir, la financiación de proyectos sobre el terreno) para preservar los objetivos de desarrollo y sostenibilidad.
En segundo lugar, la Comisión ha propuesto que se exija a las multinacionales con actividades en esas jurisdicciones unos requisitos de reporting mucho más estrictos. Además cualquier esquema fiscal que incluya operaciones en alguno de los países incluido en la lista de la UE será automáticamente reportado a las autoridades tributarias.
Por último, la Comisión ya ha dado pasos para que los Estados miembros impongan a estos países sanciones coordinadas que incluyen medidas como un mayor monitoreo y auditorías, retención de impuestos, requisitos especiales de documentación y disposiciones contra el abuso.
Las razones de la UE
Estos 17 países de la lista negra han sido señalados tras constatar que no cumplen con las normas internacionales de transparencia sobre intercambio automático de información o por alentar una competencia fiscal injusta.
“Aquellos países que opten por no tener impuesto a las empresas o por tasa cero deben asegurarse de que esto no aliente las estructuras offshore artificiales sin una actividad económica real”, explica la Comisión en su comunicado.
Tras pasar el filtro del Senado por 51 votos a favor y 49 en contra, la reforma fiscal promovida por Trump está a un paso de salir adelante y aunque todavía quedan algunas diferencias importantes que limar entre la versión aprobada por el Senado y la de la Cámara de Representantes, el mercado espera que proporcione un moderado impulso al crecimiento estadounidense.
Según una encuesta a 51 analistas realizada por la Asociación Nacional de Economía Empresarial, recogida por Bloomberg, en torno a la mitad de los economistas afirmaron que los cambios en la política fiscal aumentarán el crecimiento de la primera economía del mundo en entre 0,28 y 0,39 puntos porcentuales el próximo año.
“Creemos que el éxito de un paquete de medidas fiscales probablemente irá acompañado de un ligero repunte de los precios a corto plazo, de una magnitud prácticamente similar a la del retroceso que se derivaría de un fracaso legislativo”, explicó Mark Burgess, director adjunto global de Inversiones de Columbia Threadneedle Investments.
Small caps, consumo y finanzas
En general, se espera que el impacto sea limitado, pero las small caps, las acciones relacionadas con el consumo y los títulos financieros serán los más beneficiados para Patrik Lang, responsable de análisis de renta variable de Julius Baer.
“El resultado final aún estará sujeto a algunos cambios, pero ahora parece cada vez más probable que la reforma tributaria entre en vigor durante las próximas semanas. Mantenemos nuestra opinión de que el impacto directo en el S&P 500 será limitado, mientras que small caps y los sectores de consumo y finanzas serán los más favorecidos por la reforma”.
Renta variable
Para Peter Garnry, responsable de renta variable de Saxo Bank, la rebaja de impuestos beneficiará especialmente a las empresas con una orientación más nacional, pues será positivo en términos de flujo de efectivo disponible después de impuestos. Con la tasa de impuestos corporativos reduciéndose del 35% al 20%, los beneficios operativos netos aumentarán un 20% a nivel nacional.
“Entre los sectores que están en el punto de mira por la reforma fiscal estadounidense se encuentra el tecnológico, ya que se podría imponer un impuesto de repatriación del 12%. Este impuesto incentivaría que las empresas con dinero en el extranjero regresaran a EE.UU. Se estima que alrededor de $ 2,5 billones en efectivo se encuentran en el extranjero y que alrededor del 50% de este dinero volvería a casa y se utilizaría para la recompra de acciones”, estima.
Mercado de deuda high yield
Las tasas impositivas de los emisores de deuda high yield en Estados Unidos son de media del 28%, recuerda SKY Harbor Capital Management, por lo que con todo lo demás igual, los recortes fiscales propuestos mejorarán modestamente el flujo de efectivo libre para los emisores.
Además, explican, los emisores de menor calificación y mayor apalancamiento se verán afectados negativamente por la reforma, ya que un escudo fiscal reducido compensará los beneficios de una tasa impositiva reducida. Y por otro lado, los beneficios de la repatriación serán en gran medida para emisores de mayor calidad y grado de inversión.
Para la firma, los sectores con altas tasas impositivas medias, altas tasas de cobertura de intereses y modelos operativos intensivos en capital deberían ser los principales beneficiarios de la reforma fiscal.
El oro a la espera de los acontecimientos políticos
Sin embargo, la reforma tributaria sí debería tener un impacto más duradero en el mercado del oro, ya que es probable que reactive el optimismo de una mayor tasa de crecimiento en Estados Unidos, respaldaría la visión del aumento de los tipos de interés y fomentaría el repunte del dólar estadounidense.
“El alza sostenible del oro debería materializarse una vez que las preocupaciones sobre el crecimiento se cuelen en los mercados financieros y reactiven la demanda de los inversores por el oro como refugio seguro”, apunta Carsten Menke, analista de materias primas en Julius Baer.
El capital de hedge funds invertido en mercados emergentes tocó máximos en el cuarto trimestre del año gracias a la contribución de la industria de hedge funds china. El capital total ascendió a 223.000 millones de dólares, según el último informe de HFR Emerging Markets Hedge Fund Industry. El capital total de los hedge funds a nivel global llegó a los 3,15 billones de dólares en este mismo periodo.
«Los hedge funds chinos han seguido demostrando un fuerte rendimiento superior al de las bolsas regionales a través de la selección de valores y el ajuste de la exposición. El desempeño de los hedge funds de mercados emergentes y el liderazgo en crecimiento probablemente se extenderán hasta 2018 a medida que estas tendencias continúen», explicó Kenneth J. Heinz, presidente de HFR, el líder mundial de indexación, análisis e investigación de la industria global de hedge funds.
Los hedge funds chinos han liderado el rendimiento de los hedge funds de los mercados emergentes en 2017, con el índice HFR de China subiendo un 28,1% hasta octubre, el mejor desempeño desde 2009, y superando el avance de las bolsas chinas en más de 1.700 puntos básicos en lo que va de año. El capital total de hedge funds invertido en los países emergentes de Asia aumentó en un 13,5% hasta los 55.200 millones de dólares durante los primeros tres trimestres del año, mientras que el capital total de hedge funds de los mercados emergentes en general aumentó en un 10,9%. El índice HFRI Emerging Markets (Total) repuntó un 15,6% hasta octubre.
Los hedge funds que invierten en América Latina también registraron fuertes ganancias en lo que va de año, el índice HFRI EM de América Latina acumula avances del 15,5%, después de un aumento del 27,2% registrado en 2016. El capital total de hedge funds de mercados emergentes invertido en Latinoamérica aumentó un 7,7% en esta parte del 2017 hasta los 6.800 millones de dólares. Del mismo modo, el índice HFRI EM de Rusia y Europa del Este ha sumado un 8,2% en lo que va de año, después de registrar un 27% en 2016. El capital total de hedge funds de mercados emergentes invertido en esta región aumentó un 4,4% hasta octubre hasta los 30.600 millones de dólares.
«Los hedge funds de los mercados emergentes extendieron un sólido 2017 al cuarto trimestre, ya que la aceleración del comercio mundial, las presiones inflacionarias y las tensiones geopolíticas moderadas impulsaron las ganancias en los mercados de renta variable regionales de los mercados emergentes», añadió Heinz.
El gobierno argentino considera que los beneficios que generan las criptomonedas son una renta financiera, y por lo tanto, se dispone a gravar con un 15% sus ganancias. Mientras la reforma tributaria argentina incluye este novedoso aspecto, Lionel Messi está promocionando a una marca israelí de tecnología blockchain.
El proyecto de reforma tributaria gravará la diferencia entre la compra y venta de una moneda digital si dicha moneda fue generada en el extranjero. Si se trata, por ejemplo, de un bitcoin generado en Argentina, el impuesto se aplicará a la diferencia entre el valor de cotización al 31 de diciembre y el de la venta.
En declaraciones al diario argentino Clarín, el tributarista Julián Ruiz, de Ruiz & Asociados, señala que habrá una trampa para aquellos que lograron fuertes beneficios invirtiendo en bitcoins este año: “venderlos el 31 de diciembre, antes de la entrada en vigencia de la nueva ley, y recomprarlos el 1 de enero, cuando la norma ya esté operativa”, declaró.
La nueva legislación argentina, pendiente de aprobación, se seguirá con mucho interés en el mundo, dado la dificultad que supondrá lograr fiscalizar las operaciones hechas con las criptomonedas. De hecho, el gobierno está planteando toda una regulación para las criptomonedas.
Los argentinos están siendo especialmente activos en el universo de las monedas digitales, quizá por eso una firma tecnológica israelí, Sirin Labs, acaba de contratar al futbolista Lionel Messi para una de sus campañas publicitarias.
La firma fabrica teléfonos móviles y computadoras que evolucionan en el universo blockchain.
Estoy “emocionado de unirme a Sirin Labs como embajador para hacer que blockchain sea más amigable con su próximo sistema operativo para teléfonos inteligentes», afirma del delantero del FC Barcelona en un anuncio. Habrá que restarle un 15% a la emoción, si los esforzados inspectores fiscales argentinos logran desminar el bitcoin.