La división de International Wealth Management de Credit Suisse está en plena regionalización, un proceso liderado por su CEO Iqbal Khan que ha provocado algunos movimientos. Así, la entidad ha nombrado a Marco Abrahao CEO de IWM en Brasil, mientras que Jorge Fernández Amann será jefe de la región latinoamericana ex-Brasil, según ha podido confirmar Funds Society.
Sávio Barros será el Vice Chairman de Private Banking Brazil y Fernández Amman, hasta ahora jefe en ese país, tendrá a cargo las operaciones en México, Cono Sur y la zona andina.
Credit Suisse experimenta un fuerte crecimiento a nivel mundial en la división Wealth Management y con el objetivo de mantener esta progresión ha sumado nuevas áreas a su estructura que le permitirán estar más cerca de los clientes.
Tras los recientes casos de ciberataques que han sacudido a varios bancos en Chile, el más sonado el del pasado mes de mayo al Banco de Chile que le supuso asumir pérdidas por más de 10 millones de dólares, el Banco central ha reorganizado su estructura con especial énfasis en la gestión de riesgos estratégicos.
Según el comunicado oficial, el organismo ha creado dos nuevas posiciones para fortalecer la gestión de riesgos estratégicos: gerente de riesgo corporativo y jefe de ciberseguridad. El gerente de riesgo corporativo, que reportará al director general, será responsable de identificar los riesgos de mayor relevancia estratégica, internos y externos y el jefe de ciberseguridad será el responsable de monitorear los riesgos informáticos formando parte de la división de administración y tecnología. Asimismo, el organismo ha comunicado que considerará candidatos externos e internos para cubrir estas posiciones.
Adicionalmente el Banco central persigue otros dos objetivos con la reorganización que está llevando a cabo: facilitar la implementación de las iniciativas contenidas en el Plan Estratégico 2018 – 2022 y fortalecer el liderazgo y la conducción en el nivel gerencial.
En este sentido han introducido los siguientes cambios: la división de estudios se redenominará división de política monetaria, alineándose con la nomenclatura de otros bancos centrales quedará formada por las áreas de análisis macroeconómico, análisis internacional, estudios económicos y comunicaciones y estrategia de política monetaria. La división de asuntos institucionales estará estructurada por las áreas de comunicaciones y asuntos públicos; la división de administración y tecnología estará compuesta por las áreas de gestión contable y planificación y de tecnología y la división de operaciones, por su parte, estará compuesta por las áreas de tesorería, seguridad e ingeniería. Las divisiones de política financiera, mercados financieros y estadísticas y recursos humanos mantendrán su estructura actual.
Las empresas estadounidenses se sitúan a la cabeza de otra destacada temporada de resultados a escala mundial. Las firmas que superaron las expectativas se han visto recompensadas con una subida de las cotizaciones, incluso a pesar de las inquietudes de los inversores sobre el aumento de la incertidumbre en el plano económico, las tensiones comerciales y la apreciación del dólar estadounidense.
Los análisis de las previsiones empresariales de Blackrock sugieren que la confianza empresarial se sitúa al alza, lo que sienta las bases para afirmar que la solidez de los beneficios puede perpetuarse en 2018 en un contexto caracterizado por la robustez del crecimiento mundial.
“Los directivos de las empresas estadounidenses hacen gala de un mayor optimismo. Prácticamente el 80% de las empresas del índice MSCI USA que ofrecen previsiones han revisado al alza sus pronósticos para el conjunto del año en términos de beneficios, ventas o ambos en lo que va de año, como muestra el gráfico anterior. Este porcentaje contrasta con la media del 63% desde que terminó la crisis financiera mundial”, explica Richard Turnill, director mundial de Estrategia de Inversión en BlackRock en su comentario semanal.
Para el gestor, el optimismo del mercado es generalizado: un mayor número de compañías de todos los sectores han revisado al alza sus expectativas este año en comparación con la media del periodo posterior a la crisis.
Las firmas de salud y tecnología de la información, que, en conjunto, representan el 40% de la capitalización bursátil del índice, han experimentado por lo general unas revisiones al alza de los beneficios relativamente elevadas y, en 2018, están rebasando este umbral, dice. Los sectores de consumo han quedado ligeramente rezagados frente a la tasa media de revisiones al alza en el índice general.
“Algunas de estas empresas lo achacan a la fortaleza del dólar y al incremento de los costes de producción, que pueden resultar difíciles de trasladar a los consumidores, según muestran nuestros análisis de las transcripciones de las llamadas para informar de los resultados financieros del segundo trimestre”, concluye Turnill.
Mientras el gobierno de Caracas anuncia una batería de medidas para frenar la inflación, uno de los actos esenciales del drama venezolano se juega en los tribunales y apunta a que los acreedores internacionales puedan embargar bienes de PDVSA, algo que parece cada vez más posible después de la sentencia de un tribunal de Delawere.
El mismo día de la entrada en vigor del bolívar soberano, la nueva moneda de Venezuela, la petrolera estadounidense Conoco Phillips anunció un acuerdo con PDVSA para recibir 2.000 millones de dólares en un litigio de activos expropiados. Esto muestra que evitar juicios se ha convertido en algo crucial para el gobierno de Nicolás Maduro después de que un tribunal de Delawere decidiera aplicar una nueva jurisprudencia a los embargos de activos venezolanos.
Este mismo mes de agosto, dicha corte federal de EE.UU. autorizó que los acreedores de la República Venezolana pudieran ejecutar activos de la petrolera estatal en el extranjero basándose en la tesis del “alter ego”. Así, la empresa minera canadiense Cristallex International Corporation podría utilizar los haberes de Citgo, la subsidiaria de PDVSA en Estados Unidos, para recuperar las deudas que mantiene con el Estado venezolano. Citgo es una empresa de vital importancia para Venezuela ya que es una importante fuente de dólares para el país.
El profesor José Ignacio Hernández explica en un artículo del portal Prodavinci que la República de Venezuela y PDVSA tienen estatutos legales separados que hasta ahora los hacían independientes en caso de embargo para el cobro de deudas en caso de impago. Pero la Corte de Delawere consideró que PDVSA no es realmente independiente del gobierno de Venezuela a pesar de sus estatutos ya que se trata de un ente instrumental del Estado. Así, la sentencia considera que la petrolera venezolana es un “alter ego” de la República.
“En pocas palabras: la decisión comentada abre las puertas para que acreedores de la República –desde inversionistas afectados por expropiaciones arbitrarias hasta tenedores de bonos– intenten acciones en contra de activos de PDVSA en el extranjero, considerando que la compañía es un “alter ego” de la República”, señala José Ignacio Hernández.
Los analistas consideran que las últimas medidas del gobierno venezolano tienen pocas posibilidades de revertir la situación actual, ya que la devaluación y los nuevos impuestos se aplicarán a una economía exhausta. Solo el apoyo de alguna institución internacional proveedora de dólares o una clara subida del precio de la gasolina pueden frenar la inflación.
En este contexto, el default en cámara lenta de Venezuela puede acelerarse y Citgo puede quedar en manos de los acreedores.
Tras una extensa trayectoria profesional vinculada a LarraínVial, Patricio Muñoz se ha incorporado a AFP Provida como Head of Strategy.
El directorio de AFP Provida ha aprobado recientemente su nueva política de inversiones que incluye la política en activos alternativos. En el documento se recoje que la gerencia de inversiones está conformada por una gerencia de renta fija y monedas, una gerencia de renta variable y una gerencia de estrategia y activos alternativos. La gerencia de activos alternativos estará compuesta a su vez por un gerente de estretegia y activos alternativos, un jefe de estrategia y posiciones de analistas de estrategia e activos alternativos.
La larga trayectoria de Muñoz en LarrainVial se puede divididir en dos etapas distintas: entre 2011-2017 y 2005-2009. Desde agosto 2017 hasta la fecha, ocupaba el puesto de Head of Asset Allocation de LarrainVial donde lideraba un equipo responsable de un volumen de inversión de 1.500 millones de dólares a través de fondos multiactivos, fondos de renta variable internacional y de renta fija y cartera discrecionales. Con anterioridad ha ocupado distintos cargos tales como Head of Latam rates and FX, Head of Fixed Income and Head of Multi-asset and International Equities mutual funds.
Muñoz, es ingeniero industrial por la Universidad Católica de Chile y ostenta un MBA por Stephen M. Ross School of Business de la Universidad de Michigan y un MBA por la WHU – Otto Beisheim School of Management.
Intelectsearch, firma especializada en buscar agentes y banqueros privados para entidades financieras y gestoras internacionales, presentó en julio de 2017 la documentación para crear su fundación y recientemente el ministerio de Justicia aprobó -con el número de autorización 2047- la Fundación Intelectsearch + Nakupenda, que en suajili significa “amor a Dios”.
La fundación, declarada de interés general por sus fines, no desea admitir donaciones externas sino canalizar las aportaciones dinerarias que desde 2013 la consultora Intelectsearch realiza para obras sociales y programas de RSC en España, Latinoamérica y África.
Los fines de esta nueva fundación son básicamente todo lo que favorezca a la población infantil, focalizado en programas de educación y salud, así como en apoyar programas de la iglesia católica. Actualmente, Intelectsearch construye dos colegios en África, promueve un orfanato en Kenia y recientemente construyó un hospital infantil en Uganda.
Según comenta Santiago Díez Rubio, socio de la consultora, “para nosotros crear la fundación es un compromiso de futuro con los mas desfavorecidos, y en especial trabajar en proyectos que impacten en la infancia”.
Desde 2013, la consultora dedica un mínimo del 2% de su facturación a su programa de RSC –en 2017 fue el 8,24% con 102.176 euros-.
Ya hemos pasado el ecuador de 2018 y las gestoras consideran que el año está siendo más complejo de lo que en un primer momento esperaban. El contexto ha cambiado y el entorno de mercado que impulsó unas rentabilidades extraordinarias ajustadas al riesgo en 2017 ha cambiado.
En opinión de BlackRock, el crecimiento continuará y estará encabezado por Estados Unidos, que contagiará positivamente al resto del mundo y apuntalará el crecimiento global, pero en su radar no todo es positivo. “El abanico de posibilidades para las perspectivas económicas se ha ampliado. En el lado negativo: la guerra comercial y los riesgos de sobrecalentamiento. En el lado positivo: las sorpresas positivas de los estímulos en Estados Unidos. Esta mayor incertidumbre —junto con la subida de los tipos de interés — ha contribuido al endurecimiento de las condiciones financieras y justifica la estructuración de carteras con mayor resistencia. La apreciación de dólar ejerce presión sobre las compañías que se financian en esta divisa, así como sobre los mercados emergentes con un elevado volumen de deuda externa”, explica Richard Turnill, director mundial de estrategia de inversión de BlackRock.
Las gestoras coinciden en señalar que 2018 está siendo un año de transición para la economía global. Según explica el equipo de inversiones de Unigestion, “a partir del período goldilocks que caracterizó gran parte de 2017, hemos pasado a un período de incertidumbre, provocado por la disminución de la flexibilización cuantitativa (QE), el aumento de las presiones inflacionarias y el consiguiente endurecimiento de la política monetaria”.
En su opinión, estamos observando gran crecimiento de las economías desarrolladas por encima del potencial, frente a las emergentes que, a pesar de quedarse por debajo, parece invertirán su tendencia. “En este contexto, la guerra comercial se revela como la fuente de incertidumbre de mayor impacto, bajo previsión de escalada, determinada por la actualidad política y micro efectos adheridos. Un conflicto comercial liderado por Estados Unidos que está debilitando a las economías emergentes ante el aumento del dólar” , sostienen.
Por su parte, Turnill insiste en los riesgos políticos: “Las disputas en el plano comercial suponen un riesgo para la confianza del mercado y el crecimiento. El Gobierno populista de Italia y las tensiones migratorias han aumentado el riesgo de que se produzca una ruptura de la Unión Europea, aunque creemos que la zona del euro saldrá del paso este año”.
Posicionar la cartera
Con este cambio de entorno, las gestoras han ajustado sus carteras y se centran en buscar oportunidades que surjan en este cambio de ciclo. La renta fija seguirá siendo todo un reto para los gestores, así como el aumento del apalancamiento de los mercados de deuda corporativa, aunque aún no haya motivos para preocuparse.
Desde BlackRcok continúan priorizando los activos de riesgo, aunque han moderado su postura en vista del frágil equilibrio entre el aumento de incertidumbre en el plano macroeconómico y la solidez de los beneficios empresariales. “Priorizamos la renta variable estadounidense frente a otras regiones. Seguimos creyendo que la renta variable momentum registrará un mejor comportamiento y priorizamos exposiciones centradas en la calidad frente al valor. En renta fija, nos decantamos por bonos de vencimientos cortos en Estados Unidos, y en el segmento de deuda corporativa, adoptamos una postura más orientada a los títulos de mayor calidad. El aumento de las primas de riesgo ha generado valor en algunos activos de los mercados emergentes. Nos gustan ciertos activos determinados en los segmentos de capital privado y de activos reales de cara a diversificar las carteras. Creemos que la inversión sostenible brinda protección a largo plazo en las carteras”, afirma Turnill.
Por su parte, desde Unigestion considera que el entorno actual exige una planificación estratégica cautelosa. Apuestan por la renta variable pero con coberturas ante los riesgos políticos y comerciales.
Para Antonio Ruggeri, experto en crédito europeo de SYZ Asset Management, el segundo semestre puede ser una gran oportunidad para mirar con interés los bonos corporativos y financieros denominados en euros. “Desde una perspectiva top down, consideramos que el crédito de grado de inversión es un componente estructural de las carteras de renta fija, ya que a medio plazo muestra una menor volatilidad y mejores rendimientos que los bonos soberanos. El actual mínimo a un año en los tipos y los máximos a un año en los diferenciales sugieren que es un buen momento para añadir exposición”, explica Ruggeri.
Los bonos convertibles son una forma de financiación que permite a los inversores comenzar como prestamistas y, potencialmente, terminar como accionistas gracias a la opción de conversión. Estos activos son cada vez más importantes en la asignación de las carteras de inversores institucionales.
En promedio, durante los últimos 10 años el rendimiento de los bonos convertibles ha superado ligeramente a las acciones internacionales con menos volatilidad gracias a su naturaleza flexible. De hecho, los bonos convertibles generalmente tienen características similares a los bonos en entornos correctivos de renta variable, y propiedades similares a las acciones en el contexto de subida de las bolsas, todo gracias a su convexidad.
Gracias a esta propiedad, cuando el precio de las acciones subyacentes se acerca al precio de conversión, el bono convertible ofrece una exposición equilibrada o «mixta» al riesgo de crédito y de capital. Cuando la acción está por debajo del valor de conversión, el bono convertible se comporta como un bono con un riesgo de tasas de interés y crédito. Sin embargo, la tasa de interés y la sensibilidad crediticia son más bajas que las de un bono tradicional debido a su perfil mixto.
Los retornos y la volatilidad anualizados de las distintas clases de activos observadas en los últimos cinco y diez años parecen respaldar esta teoría de la convexidad. Durante estos dos períodos de observación, los bonos convertibles internacionales mostraron, en promedio, una volatilidad más baja que las acciones internacionales. En términos de rendimiento, los bonos convertibles han captado parte del repunte del mercado de acciones de los últimos cinco años y han superado a los mercados de acciones en los últimos diez. Aunque los bonos convertibles internacionales han experimentado una mayor volatilidad en comparación con los bonos tradicionales, han compensado esta desventaja con mayores rendimientos en los últimos cinco años.
El universo de bonos convertibles internacionales está formado en la actualidad por aproximadamente 1.000 activos valorados entre 400.000 millones y 500.000 millones de dólares y emitidos principalmente en los Estados Unidos y Europa. Creemos que la gestión activa es clave para identificar los bonos con sólidos fundamentos y retornos atractivos. El análisis fundamental bottom-up es particularmente esencial para detectar oportunidades de inversión en valores que no están presentes en los índices de referencia.
El interés y la antigüedad de un bono convertible son especialmente importantes para los inversores con restricciones de pasivo (más del 80% de todos los bonos convertibles son deuda senior no garantizada). Más de dos tercios de los bonos convertibles pertenece a la categoría de high yield o sin calificación, donde el potencial de apreciación es más fuerte, siempre que sea selectivo. Además, la opción de conversión a acciones ofrece un potencial de subida mayor que el de un bono tradicional.
Para determinar su relevancia para el inversor, la obligación de conversión debe analizarse en el contexto de un mercado específico. Este análisis requiere competencia y experiencia porque involucra análisis técnicos, fundamentales y tácticos. Si se hacen bien, los beneficios para el inversor pueden ser sustanciales.
Tribuna de Arnaud Brillois, gestor de Lazard Asset Management.
Aunque, tradicionalmente, los fondos globales con objetivo de generación de rentas mantenían una exposición limitada a Asia, la situación ha cambiado en los últimos años. Como explican desde Kames Capital, Asia continúa fortaleciendo su presencia en los índices mundiales como reflejo del hecho de que la mayoría de la población mundial vive en ese continente y de que las economías asiáticas crecen a un ritmo superior al del resto del mundo.
Además, las empresas asiáticas son ahora más líquidas y están distribuyendo más liquidez entre sus accionistas, lo que las hace más adecuadas para los fondos de rentas. Según Robin Black, gestor adjunto del Kames Global Equity Income Fund, con un 2,6%, la región de Asia Pacífico ofrece una rentabilidad por dividendo más alta que la media mundial, del 2,4%, y muy superior al 1,9% que ofrece el mercado estadounidense.
“Y no solo es que las rentabilidades sean superiores sino que, además, los dividendos están creciendo más rápidamente, lo que se debe en parte a un cambio de actitud pero también refleja la capacidad de generación de caja de algunas de las empresas de mayor éxito de Asia”, añade.
Black se centra en identificar empresas rentables con balances solventes y flujos de caja sostenibles que se muestren dispuestas a distribuir la liquidez adicional entre sus accionistas. “El fondo ya está más invertido en Asia (excluido Japón) que en Europa (excluido Reino Unido) y es inevitable que la región siga ganando importancia entre los inversores con objetivo de generación de rentas”, afirma.
Según Black, estos son los cinco valores asiáticos que ofrecen las rentabilidades más atractivas que las del mercado estadounidense.
TSMC: “El gigante tecnológico taiwanés, que lleva en cartera desde que lanzamos el fondo hace más de cinco años, es líder mundial en la fabricación de semiconductores. La empresa está expuesta a diversos sectores de crecimiento como la inteligencia artificial, el almacenamiento de datos o las criptomonedas, que representan sólidos factores de impulso para su negocio. El liderazgo tecnológico de TSMC en comparación con su competencia es indiscutible: fabrican más semiconductores, de forma más consistente y con mayor precisión que nadie; por eso son el proveedor principal de empresas como Apple”, explica.
Macquarie Group: según Black, “una de las características más interesantes de la australiana Macquarie es cómo ha reorientado su modelo de negocio. Nunca habríamos invertido en una empresa como Macquarie hace diez años, ya que el valor era demasiado cíclico y se movía al ritmo de factores externos. En la actualidad, la mayor parte de su negocio sigue un modelo de anualidades (por ejemplo, tienen una fuerte presencia en infraestructuras), por lo que los beneficios de la empresa son mucho más estables”.
PTT: El conglomerado petrolero tailandés PTT es una posición menos habitual en un fondo de rentas global. “Se considera una empresa estrechamente vinculada al gobierno, algo que puede ser un arma de doble filo. No obstante, el descuento que le atribuyó el mercado por este motivo resultaba desproporcionado, lo que nos permitió explotar las anomalías en la valoración. Nos gusta su modelo integrado, ya que se dedica a la extracción de gas y petróleo pero también al refinado y la producción de petroquímicos, y además comercializa los productos”, sostiene.
Anta: Black valora que la empresa china de ropa de deporte Anta ofrece una buena vía de acceso. “En un país que ha tardado en desarrollar marcas nacionales creíbles de alcance mundial, resulta refrescante ver que empresas como Anta le están plantando cara a gigantes como Nike o Adidas con gran éxito, lo que les ha permitido duplicar su dividendo en los dos últimos años”, añade.
DBS: “El banco singapurense DBS se considera una de las entidades financieras más seguras y estables de la región: está bien capitalizado, cuenta con numerosas fuentes de ingresos y distribuye un 50% de sus beneficios entre sus accionistas. A menudo, la clave para invertir en Asia está en evitar las trampas por lo que, aunque la cartera de préstamos de DBS crece a un ritmo más lento que las de los bancos de China, la India y el sudeste asiático, nosotros lo consideramos algo positivo”, argumenta en último lugar.
Steffen Hoerter, responsable global de ESG de Allianz Global Investors, ha sido nombrado uno de los 35 expertos de alto nivel que forman parte del grupo de trabajo que asesorará a la Comisión Europea en la elaboración de recomendaciones para que el sector financiero apoye la transición hacia una economía sostenible.
Hoerter ha sido seleccionado entre una lista de 185 candidatos y es uno de los tres únicos representantes de las gestoras de activos dentro del grupo. Sobre el nombramiento, Hoerter comentó que: “Es un honor y una gran responsabilidad el representar a Allianz Global Investors y poder contribuir a impulsar la ESG en la Unión Europea”.
La nueva normativa europea en materia de finanzas sostenibles incluye, entre otras medidas relevantes, la creación de una taxonomía que defina lo que es sostenible y señale los ámbitos en los que la inversión sostenible puede tener mayor repercusión. El grupo, que comenzará sus reuniones de trabajo en julio, deberá presentar sus recomendaciones en 2019.
Actualmente, Steffen Hoerter es el responsable global de ESG en Allianz Global Investors, donde trabaja desde 2001. Es responsable internacionalmente de la estrategia de integración de ESG en Allianz Global Investors y ha publicado varios informes (whitepapers) y artículos de opinión sobre la importancia financiera del ESG en la renta variable, en renta fija corporativa, en bonos soberanos y en asignación sstratégica de activos. Entre 2010 y 2016 ha asesorado a inversores institucionales, en particular a fondos de pensiones en Europa, en estrategias de inversión, gestión de riesgos y ESG.
Antes de unirse a Allianz Global Investors, el Dr. Hoerter trabajó como consultor de gestión para bancos y gestión de riesgos en una empresa de consultoría internacional. El Dr. Hoerter estudió Administración de empresas en Regensburg, Edimburgo e Ingolstadt / Eichstaett. Además, tiene un doctorado de la Universidad Católica de Eichstaett-Ingolstadt, donde trabajó como profesor en el Departamento de Finanzas y Banca en WFI – Ingolstadt School of Management.