«El libro de Ray Dalio es una lectura obligada para cualquiera que aspire a prevenir o gestionar la próxima crisis financiera», dice Larry Summers, ex secretario del Tesoro de Estados Unidos, ante el lanzamiento, el próximo 10 de septiembre del libro del fundador y co-CIO del hedge funds Bridgewater Associates.
Y es que Ray Dalio es respetado en Wall Street y considerado como uno de los inversores más exitosos del mundo. Su obra A Template for Understanding Big Debt Crises detalla el profundo análisis de Dalio sobre cómo han operado las crisis de deuda a lo largo de la historia. Este estudio permitió a Bridgewater Associates anticiparse y esquivar la crisis financiera hace diez años.
«En esta etapa de mi vida quiero transmitir los principios que me ayudaron y pueden ayudar a otros», explicó Dalio. «Dado que las crisis de deuda causan uno de los peores sufrimientos humanos, escribir esta guía para comprender las crisis y poder superarlas en el décimo aniversario de la crisis financiera de 2008 me pareció muy apropiado».
Este será el segundo libro del gurú tras el bestseller Principles: Life & Work. A Template for Understanding Big Debt Crises puede conseguirse de forma gratuita en formato PDF a través de la página web Principles.com.
«Una fantástica obra de uno de los principales inversores del mundo que ha dedicado su vida a entender los mercados y ha demostrado esa comprensión al navegar bien la crisis financiera de 2008». Esta es la recomendación de otro ex secretario del Tesoro de Estados Unidos. Esta vez la del Hank Paulson.
Los mercados emergentes están en caída libre. Los principales motivos de este declive son la reciente fortaleza del dólar estadounidense, los temores a una guerra comercial y, más recientemente, la drástica depreciación de la lira turca. La profunda liquidación trae a la memoria la crisis del peso mexicano en 1994-1995, la crisis financiera asiática de 1997-1998 y, más recientemente, la devaluación china y la turbulencia en los mercados bursátiles de 2015-2016. ¿Deberían los inversores preocuparse por el contagio a los mercados emergentes?
La crisis en Turquía no sorprende demasiado. Su economía sufre un gran déficit comercial (6,3 % del PIB), grandes necesidades de financiación externa y unas crecientes presiones inflacionarias. La inflación de precios al consumidor se disparó, pasó del 10 % a comienzos de año a más del 15 % en junio. Sin embargo, el banco central mantuvo su tasa de interés en 17,75 % en su reunión de julio. Resultó evidente que la crítica a las altas tasas de interés del presidente Erdogan ha afectado la independencia del banco central, en consecuencia, se aceleraron las apuestas en contra de la lira. Es posible que una política más integral junto con austeridad fiscal y monetaria podría estabilizar la moneda y evitar una espiral inflacionista, aunque podría llevar a la economía a la recesión en 2019. Las buenas noticias son que los lazos económicos son mínimos entre Turquía y otros mercados emergentes.
Y lo que es más importante, los otros principales mercados emergentes están en mejor forma que Turquía. Las bases son sólidas: tienen baja inflación al igual que unas mejores cuentas comerciales y fiscales. Los niveles de deuda externa no son excesivos y algunos de los principales países (en especial China) cuentan con considerables reservas de divisas. Asimismo, los factores demográficos siguen siendo favorables al compararlos con las economías avanzadas. Por último, existe una tendencia a las reformas estructurales, institucionalidad y políticas contra la corrupción que deberían mejorar la estabilidad financiera a largo plazo. En la actualidad, parece que China y Brasil son los únicos países que podrían provocar una crisis económica más profunda debido a su tamaño y al aumento de la deuda soberana (Brasil) y a los niveles de deuda corporativa (China).
Brasil ha puesto en marcha un ambicioso proceso de reforma. El país está en una primera fase de recuperación económica tras su profunda recesión de 2015-2016. Desde entonces, el déficit comercial ha desaparecido en gran medida y la inflación y los tipos de interés son bajos en comparación con sus valores históricos. Si a esto le sumamos las significativas reservas en divisas fuertes y un acuerdo línea de swap directo con la Reserva Federal de Estados Unidos, el banco central cuenta con mucho margen para contrarrestar las presiones y defender el tipo de cambio. El problema está en que Brasil necesita crecimiento económico para liquidar sus enormes niveles de deuda pública y, en consecuencia, hay que continuar con las reformas. Por ello, es probable que continúe la volatilidad hasta las próximas elecciones presidenciales de octubre. No obstante, puesto que el expresidente Lula no puede ser elegido, el resultado más probable sigue siendo un gobierno de centroderecha con políticas promercado, aunque populista, lo que podría llevar a una valorización en los activos en Brasil.
China ha comenzado a transformar y modernizar su economía, lo que debería provocar un crecimiento económico más sostenible y robusto, si bien algo más lento. Entre las políticas de los dos últimos años se encuentra una reducción de los estímulos fiscales y monetarios para desinflar la burbuja inmobiliaria y reducir los niveles de deuda corporativa. El crecimiento económico se ha seguido ralentizando a un ritmo moderado, pasando de más del 7 % al 6,5 %. La reciente depreciación del yuan no debería suponer una gran sorpresa si tenemos en cuenta la generalizada fortaleza del dólar, así como las menores diferencias en cuanto a crecimiento, déficit comercial y tasas de interés frente a Estados Unidos. Por supuesto, el principal riesgo es un escalamiento en la guerra comercial. Si consideramos la recuperación de los índices de aprobación del presidente Trump y sus recientes escándalos políticos en relación con su abogado y director de campaña, puede que decida seguir jugando duro para satisfacer a sus principales partidarios. En consecuencia, las tensiones comerciales podrían intensificarse ante las elecciones de mitad de legislatura de noviembre. Sin embargo, China ya ha empezado a aplicar pequeños ajustes en sus políticas para blindar su economía frente al impacto negativo de los aranceles estadounidenses, que deberían empezar a resultar visibles en el cuarto trimestre. Incluso si los Estados Unidos imponen un arancel del 25 % en productos chinos por valor de 250.000 millones de dólares, el retraso en el crecimiento sería inferior al 1 % y un estímulo adicional bastaría para mantener el crecimiento del PIB por encima del 6 % en 2019. En un escenario más favorable para los mercados, el tono de Trump podría volverse más conciliatorio una vez hayan pasado las elecciones.
De hecho, la introducción de aranceles de Trump y su amenaza de más tarifas y sanciones han sido los principales catalizadores del reciente repunte del dólar, que ha sido el mayor freno para los mercados emergentes. Si consideramos la amplia cobertura mediática y que Trump ya ha amenazado con imponer aranceles a básicamente todas las importaciones chinas, tantas malas noticias deberían estar descontadas. Sin embargo, los mercados odian la incertidumbre y es probable que la volatilidad continúe durante la campaña política estadounidense y, en menor medida en Brasil. A menos que la situación quede totalmente fuera de control, podríamos ver una recuperación hacia finales de año.
La Superintendencia de Servicios Financieros de Uruguay ha sacado a consulta el proyecto que incorpora la figura del inversor especializado a la lista de operadores de la bolsa de valores, un cambio que abre nuevas oportunidades de inversión a las cajas paraestatales, las administradoras de fondos de ahorro previsional, empresas aseguradoras, administradoras de fondos de inversión y fiduciarios financieros.
Según el documento oficial se consideran inversores especializados a las cajas paraestatales, administradoras de fondos de ahorro previsional, empresas aseguradoras, administradoras de fondos de inversión y fiduciarios financieros, siempre que en el último ejercicio económico acrediten que cumplen alguno de los siguientes requisitos:
– El saldo de activos financieros al cierre sea superior a cien millones de dólares USA
– El número de operaciones realizadas en el ámbito bursátil en valores de oferta pública durante el ejercicio sea superior a 300.
– El monto anual operado en los referidos valores sea superior a trescientos millones de dólares USA.
“Las administradoras de fondos de ahorro previsional, las administradoras de fondos de inversión y los fiduciarios financieros sólo podrán realizar inversiones como inversores especializados para los fondos y fideicomisos que administren. También se consideran inversores especializados a las bolsas de valores y al Banco Central del Uruguay”, añade del comunicado oficial.
El plazo para la recepción de los comentarios será improrrogable y vencerá el 14 de setiembre de 2018.
El anuncio del acuerdo comercial entre México y Estados Unidos ha tenido primeras reacciones positivas en un mercado siempre hostil a la incertidumbre, pero conforme se afina el análisis surgen numerosos obstáculos para que el nuevo tratado se convierta en una realidad.
El mejor acuerdo posible según BBVA Bancomer
Carlos Serrano, Javier Amador, Iván Martínez, Arnulfo Rodríguez y Saidé Salazar firman un documento de BBVA Bancomer que señala la necesidad de este acuerdo para México”.
“Respecto a los acuerdos alcanzados en el sector automotriz consideramos que son positivos ya que: i) el mayor requisito de contenido regional podría, en el mediano plazo, significar un mayor valor agregado mexicano en el sector; ii) en el sector de autopartes existe espacio para que, aun con un aumento de los salarios a niveles de 16 dólares la hora, muchas empresas puedan seguir siendo competitivas, lo cual resultaría en mejoras laborales para los trabajadores mexicanos; iii) en el caso de vehículos ligeros y autopartes, para aquellas empresas que no cumplan con las reglas de origen, podrán exportar a EE.UU. con un arancel de 2.5%”, señala en documento.
Pero los analistas advierten que “en materia de resolución de controversias, la eliminación del mecanismo vigente en el TLCAN representa un riesgo para la economía mexicana, dada la ausencia de una instancia imparcial que dirima las disputas entre los particulares y el gobierno norteamericano”.
Buenas noticias para el peso mexicano, según BlackRock
«El anuncio de hoy es un acontecimiento clave y debe ser visto como un evento positivo para los activos mexicanos, los cuales han estado subiendo desde mediados de agosto, cuando se dieron a conocer reportes de un posible anuncio. Adicionalmente, es una buena noticia para el peso mexicano, el cual se ha apreciado cerca de 4% durante este mismo rango de tiempo, desasociándose de alguna forma de la crisis turca. Desde las elecciones de Estados Unidos en 2016, el peso se devaluó hasta un 25% debido a la incertidumbre sobre la posible cancelación del TLCAN y el impacto de esto sobre el crecimiento económico mexicano y los flujos de inversión”, señala Axel Christensen, director de estrategia de inversiones para América Latina e Iberia de BlackRock.
Pero el experto añade que «el eventual acuerdo con Canadá podrían enfrentar obstáculos ya que requieren la aprobación de la legislación de cada país. Por lo cual, el riesgo de incertidumbre – y la volatilidad en los mercados que lo acompañan – no quedan descartados completamente.”
Natixis muestra escepticismo ante los golpes de efecto de Donald Trump
“El avance en las negociaciones del TLCAN con México ha traído obviamente algunos beneficios explícitos – reactivar de nuevo el avance del proceso y reducir la incertidumbre entre las empresas. Sin embargo, más sutilmente ¿hemos podido confirmar que la administración de Trump simplemente está buscando algunas “victorias” comerciales y no tanto una reconstrucción del marco de referencia comercial a escala global (ej., acabar con los lineamientos de la OMC, etc.)? ¿Es esto una señal de que los peores temores del mercado no llegarán a hacerse realidad?”, se pregunta Dave Lafferty, estratega en jefe de mercados de Natixis IM.
Lafferty señala que aún queda mucho camino por recorrer antes de la conclusión del proceso sea una realidad ya que Canadá debe ser incluido en el proceso, aún hay categorías del tratado difíciles de abordar y en EEUU, un acuerdo nuevo o modificado deberá ser ratificado por el congreso (el cual está conforme con el acuerdo existente).
“Igualmente, la línea de tiempo es muy limitada para integrar a Canadá de nuevo a la mesa de negociaciones y lograr una aprobación legislativa antes de la toma de posesión por el gobierno de AMLO en México. En resumen, este avance es una medida en la dirección correcta, pero todavía hay muchos temas pendientes que pueden desviar las negociaciones. La implicación del mercado es que las ganancias actuales de la renta variable pueden fácilmente diluirse si el acuerdo trilateral no avanza o si Trump desvía su curso”, señala el estratega jefe de Natixis IM.
Para ING el acuerdo todavía no se puede dar por hecho
“Aunque el acuerdo con México puede parecer un gran avance, a primera vista, la revisión o el reemplazo del TLCAN necesitaría la aprobación del Congreso estadounidense, lo que significa que está lejos de ser un acuerdo cerrado aún”, señala Timme Spakman, Economist, International Trade Analysis de ING.
Según Spakman, Trump tendría problemas con sus correligionarios republicanos para obtener el voto en el Congreso en caso de que Canadá no aceptase entrar en el acuerdo.
“Además, se espera que el representante de comercio de EE.UU:, Robert Lighthizer, publique los detalles del nuevo acuerdo antes del 31 de agosto, después de lo cual el Congreso revisará el nuevo acuerdo en un período de 90 días. Sin embargo, este período será posterior a las elecciones de mitad de período, lo que significa que no hay garantías de que haya siquiera una mayoría republicana para aprobar cualquier acuerdo comercial propuesto por la Casa Blanca. Entonces, aunque todo esto puede parecer un avance, a primera vista, los detalles aún no se han publicado, y la revisión o el reemplazo del TLCAN aún está lejos de ser un acuerdo”, señala el analista de ING.
CFA Society Chile lanzó una nueva versión del CFA Institute Research Challenge, competencia internacional entre equipos universitarios que premia el mejor análisis financiero a una compañía listada en bolsa y que en su primera etapa local, tendrá a grupos de más de nueve universidades chilenas, que competirán por un cupo en la final regional en Estados Unidos.
En la lista de participantes, la Pontificia Universidad Católica de Chile, Universidad de Chile, Universidad de Los Andes, Universidad Andrés Bello, Universidad Adolfo Ibañez, Universidad de Santiago, Universidad Católica de Valparaíso y la Universidad FinisTerrae.
Este año, el desafío -que tras su kick-off tendrá plazo para inscripciones hasta el 4 de septiembre- convocará a los participantes para trabajar en un análisis financiero de la firma frutícola Hortifrut: los equipos participantes deberán presentar un informe escrito y los tres mejores trabajos clasifican para ser defendidos en la final nacional, el próximo 19 de noviembre.
Los ganadores en Chile serán patrocinados por CFA Institute para, primero, representar a Chile en la Final Regional Américas, en Nueva York el 23 y 24 de abril de 2019 y de ganar, para asistir a la Final Global que se llevará a cabo en la misma ciudad, el 25 de abril de 2019.
El concurso -dirigido a estudiantes de Ingeniería Comercial, Finanzas y carreras afines- permite a los participantes la posibilidad de poner en práctica los conocimientos adquiridos en sus cursos, además de hacer networking y exponerse a profesionales líderes en la industria financiera, familiarizándose con las mejores prácticas en investigación y elaboración de reportes de análisis e investigación financiera.
El CFA Institute Research Challenge es una competencia a nivel mundial que se realiza en 82 países y en la que participan más de 4.500 estudiantes y 1.000 universidades. En Chile es impulsada por CFA Society Chile, se organiza desde 2010, y se desarrolla gracias a la colaboración voluntaria de más de 20 de sus miembros.
Cada equipo puede tener entre tres y cinco miembros que deben ser estudiantes de pregrado o postgrado de la misma universidad, la que puede inscribir hasta dos equipos.
A cada grupo se le asigna un Tutor Académico, que es un profesor de la misma universidad participante, quien les aporta asesoría en teorías y métodos de investigación académicos, al mismo tiempo que cuentan con un Mentor Industria, un profesional certificado (“CFA charterholder”), que les podrá aportar asesoría sobre prácticas de la industria financiera, de manera presencial o virtual.
CFA Society Chile es parte de la red global de sociedades del CFA Institute. A nivel local, cuenta conmás de 100 miembros, e incluye solamente a profesionales que han conseguido la acreditación Chartered Financial Analyst (CFA). El presidente de CFA Society Chile es Cristián Rodriguez, actual presidente de AFP Habitat.
S&P Global Ratings estima que 234.000 millones de dólares de la deuda corporativa latinoamericana financiera y no financiera calificada por la organización debe madurar entre la segunda mitad del 2018 y 2023.
Aproximadamente 62% (145.400 millones) de esa deuda tiene calificación de inversión (‘BBB-’ o más alto), lo cual debería ayudar a moderar el riesgo general de reembolso de la región. Sin embargo, la deuda que madura en los niveles más bajos de calificación se mantiene significativa; aproximadamente. Hay 88.800 millones de dólares en deudas de nivel especulativo (calificada ‘BB’ o más bajo) que deben madurar para el 2023.
La emisión de nuevos bonos corporativos en América Latina fue ligeramente más alta durante la primera mitad del 2018 que en la primera mitad del 2017, y en su ritmo actual, estaría en sintonía con el volumen promedio anual de emisión de 45.000 millones registrado desde el 2009.
La porción más grande (74%) de la deuda corporativa Latinoamericana que madura en 2023 pertenece a empresas de México y Brasil, con 97.000 y 76.000 millones de dólares, respectivamente. La mayoría (93%) de la deuda corporativa mexicana en maduración tiene calificación de inversión (‘BBB-‘ o más alto), mientras que la mayoría (86%) de la deuda corporativa de Brasil en maduración está calificada con nivel especulativo.
En el caso de Chile, el país cuenta con 15.600 millones de dólares emitidos lo que representa el 7% de toda la deuda corporativa latinoamericana calificada y en maduración para el 2023. La mayoría de la deuda chilena tiene calificación de inversión (93%), de la cual 4.800 millones (33%) es del sector de metales, minería y acero, seguido de cerca por instituciones financieras con 3.500 millones.
Para leer información detallada sobre el ciclo de maduración de la deuda latinoamericana, puede descargar el archivo adjunto ubicado en el espacio izquierdo de esta nota.
A los recientes ataques de ciberseguridad sufridos por varias entidades financieras chilenas en los últimos meses hay que añadirle el del día 27 de agosto en el que se filtraron en Twitter números de tarjetas de crédito, fecha de caducidad y código de seguridad de 916 tarjetas de crédito válidas, 825 de las cuales fueron emtidas en Chile, según datos de la Asociación de Bancos e Instituciones Financieras.
En el comunicado, la asociación exime de responsabilidad a la banca aludiendo que uno de los datos sensibles filtrados (el código de seguridad) no es almacenado por parte de las entidades financieras y destacó el buen funcionamiento de los protocolos de seguridad que se tradujo en el bloqueo inmediato de las tarjetas afectadas y emisión de sustitutivas.
Por su parte, el Superintendente de Bancos, Mario Farren en declaraciones al respecto, citó como posible que la filtración se hubiera producido en un comercio internacional al igual que la registrada el pasado mes de julio donde se filtraron más de 14.000 registros de tarjetas de crédito.
Adicionalmente quiso transmitir un mensaje de tranquilidad a los usuarios al confirmar que la responsabilidad corría a cargo de los emisores, aunque no se habían registrado fraudes hasta el momento y “solo” 210 de las tarjetas afectadas estaban activas. Además, añadió que desde la Superintendencia habían demandado información a las entidades sobre sus políticas para administrar situaciones de fraude en cada una de los distintos casos que se han producido recientemente.
GAM Investments ha anunciado que ha recibido la aprobación para comenzar el proceso de liquidación de sus estrategias unconstrained y de retorno absoluto en renta fija, tal y como anunció hace apenas quince días. Con esta liquidación, que se produce tras el cese del gestor Tim Haywood, responsable de estas estrategias, la gestora quiere garantizar que todos los partícipes reciben el mismo trato.
Según ha informado la gestora en un comunicado, todos los inversores del fondo recibirán su participación proporcional en efectivo. La decisión afecta a los fondos GAM Absolute Return Bond, GAM Absolute Return Bond Defender, GAM Absolute Return Bond Plus, GAM Star Absolute Return Bond, GAM Star Absolute Return Bond Defender, GAM Star Absolute Return Plus, GAM Star Dynamic Global Bond, GAM Absolute Return Bond Master y GAM Unconstrained Bond, según el comunicado. Nueve en total.
Para cada uno de los fondos, la firma espera poder realizar los primeros pagos a principios de septiembre, devolviendo entre el 74% y el 87% de los activos de los fondos UCITS domiciliados en Luxemburgo y en Irlanda, y entre el 60% y el 66% de los activos en el fondo master de las Caimán y los fondos asociados a él (feeder), de Caimán y de Australia.
La prioridad de GAM, según ha explicado la gestora, es maximizar el valor para los inversores del fondo a lo largo del proceso de liquidación, al tiempo que garantizar un trato igualitario y justo para todos los partícipes. Ya que estos fondos comprenden una combinación de activos principalmente líquidos con otros de menor liquidez, GAM quiere enfocar este proceso en asegurar el equilibrio entre maximizar el valor de los activos y la rapidez con que se liquiden. La compañía espera realizar una distribución adicional para cada fondo antes de finales de septiembre y continuar en los próximos meses, dependiendo de las condiciones del mercado.
GAM también espera ofrecer estructuras alternativas para los inversores que quieran seguir invirtiendo con el equipo de ARBF. Por ejemplo, la firma espera tener listo en las próximas semanas un fondo UCITS para los inversores, además ya está trabajando en la creación de nuevo fondo en las Caimán.
Según ha explicado Alexander S. Friedman, consejero delegado del Grupo GAM, “la suspensión y la posterior decisión de liquidar los fondos ARBF ha sido un proceso difícil, pero necesario para asegurar que cumplimos nuestros principios de actuar en el mejor interés de todos los inversores de fondos y tratarlos por igual y justamente Esto no quita la fortaleza fundamental de GAM como administrador de activos diversificado. Hemos pasado los últimos años reestructurando GAM para convertirlo en un negocio más eficiente con un perfil de ganancias menos volátil, mientras hemos seguido construyendo estrategias especializadas de alto rendimiento que son relevantes para nuestros clientes. Esto ha posicionado a GAM para enfrentar un entorno desafiante, y creemos que seguiremos atrayendo clientes a nuestra plataforma y ofreciendo valor a nuestros inversores en los próximos años”.
La economía colaborativa, que tiene sus cimientos en las posibilidades que ofrece la tecnología e Internet, está de moda. Pero para Paul Brain, jefe de renta fija en Newton (BNY Mellon), antes de ensalzar esta tendencia es necesario evaluar y determinar el impacto potencial que tiene en la inflación.
Ahora que muchas economías están aumentando el sueldo mínimo e intentan proteger sus industrias nacionales mediante la imposición de aranceles a la importación de productos, Brain opina que las presiones salariales deberían estar aumentando y reflejarse en la inflación general. No obstante, la inflación salarial sigue siendo relativamente modesta. “Además, la mayoría de las principales economías registran unos niveles de desempleo más bien bajos. En circunstancias normales, esto provocaría que aumentasen los salarios, algo que, sin embargo, prácticamente no ha ocurrido”, añade el experto.
El principal motor de la economía colaborativa ha sido la proliferación de los teléfonos inteligentes, lo que a su vez ha generado mayores eficiencias, explica. Este es uno de los factores que ha frenado el crecimiento de los salarios en los últimos años: “La automatización que subyace a la economía colaborativa no elimina trabajos pero, en muchos casos, facilita que se puedan hacer de forma más rápida y sencilla. En Londres, el sector del taxi estaba protegido y los taxistas tenían que aprobar un examen (conocido como «the Knowledge of London») para demostrar su conocimiento del callejero de Londres antes de obtener su licencia. Aprobar este examen solía llevar entre dos y cuatro años y suponía una inversión importante para cualquier taxista”.
En su opinión Uber es un buen ejemplo. Desde su llegada, el número de coches disponibles aumentó y los precios bajaron. “Básicamente, la aplicación ha digitalizado los conocimientos que antes requerían tanto tiempo de estudio y energía”, matiza.
Evolución de la renta fija
Como apunta Brain, la opinión del mercado es que la renta fija se enfrenta a cambios importantes –aumento de la inflación y aumento de las tires– que harán más difícil ganar dinero en la clase de activo, algo que no tiene por qué cumplirse si la inflación continúa manteniéndose en niveles bajos. “Sea como sea, creemos que existen formas de lidiar con esta situación si se adopta un enfoque lo suficientemente global, se diversifica en mercados en los que no estén subiendo los tipos de interés y se adoptan posiciones cortas en mercados en los que sí estén subiendo”, argumenta.
En este sentido, es el enfoque que está siguiendo en la estrategia Global Dynamic Bond. Brain recurre a varios mercados para aprovechar sus propiedades de ‘activo refugio’ y a otros que ofrecen algo más de riesgo, como la deuda high yield y la deuda de mercados emergentes: “Incluso en un entorno inflacionario podemos encontrar empresas que lo están haciendo bien y países que se comportan de forma diferente”.
¿Regresará la inflación?
Aunque los bancos centrales están adoptando una postura algo más agresiva, el proceso ha sido tan anunciado que a Brain no le preocupa el impacto que pueda tener sobre las tires de los bonos gubernamentales. “La retirada progresiva de la expansión cuantitativa no resulta tan negativa para la deuda gubernamental como muchos piensan, porque los mercados suelen descontarla. En mi opinión, los activos de riesgo son más vulnerables a un brusco repunte de la volatilidad”, afirma.
En ausencia de este aumento de la volatilidad en renta variable y en los mercados de riesgo, el experto sitúa las rentabilidades de los treasuries en el rango del 3,1% y el 3,4%. Según explica, la razón por la que aún no están en esos niveles la encontramos en las turbulencias de febrero pero creo que acabarán alcanzándolos. El entorno apunta a rentabilidades más altas, por lo que ahora mismo nos hemos puesto cortos en el mercado de treasuries.
Para Brain, la paradoja de Moravec podría ser otro factor que explique el escaso aumento de la inflación a largo plazo. “Uno de los aspectos más curiosos de la automatización es que a las máquinas les resulta fácil realizar las tareas más difíciles para los humanos. Sin embargo, a las máquinas les resultan difíciles las tareas que a los humanos nos parecen más sencillas, como servir comida o bebidas. El sector de servicios profesionales ha sido el principal empleador en las últimas dos décadas y es ahí donde podríamos ver los cambios más importantes y las mayores caídas de salarios. La presión no va a desaparecer, por lo que es inevitable que nos preguntemos si la inflación volverá algún día a retomar su tendencia”, sostiene.
El 56% de los inversores institucionales espera aumentar el nivel de integración de la inteligencia artificial en su proceso de inversión y el 40% aumentar el presupuesto destinado a la inteligencia artificial, según un nuevo informe de Thomson Reuters y Greenwich Associates. Según el documento, además, el 70% de los encuestados ha implementado datos alternativos o planea hacerlo en los próximos 12 meses como parte adicional de su enfoque de inversión fundamental.
Este estudio muestra los cambios recientes en el análisis y los procesos de inversión, ya que los puntos de vista de los encuestados identifican tres temas principales que impulsan el futuro del análisis de inversiones: datos alternativos, inteligencia artificial y cómo han cambiado las relaciones entre inversores institucionales y el lado de las ventas.
Para entender mejor cómo los gestores de activos piensan que la investigación de inversión evolucionará en los próximos cinco y diez años, se entrevistó a 30 jefe de inversión, gestores de carteras y analistas de inversión de América del Norte, Europa y Asia. Entre las conclusiones que arroja el informe destaca:
Solo el 17% de las empresas está utilizando inteligencia artificial, como el aprendizaje automático y el procesamiento del lenguaje natural, al analizar datos, noticias y contenido en su proceso de inversión
Los datos que aporta la web, las tendencias de búsqueda y los datos de las redes de expertos fueron los tres conjuntos de datos alternativos más populares actualmente utilizados
El 71% de los profesionales senior de gestión de activos y fondos de cobertura cree que la dinámica competitiva conducirá a una mayor desagregación de la investigación, incluso en regiones no cubiertas por MiFID II
El 50% de los encuestados cree que la parte de compras dependerá menos de la venta para los servicios de investigación. Al mismo tiempo, el 43% espera aumentar aún más su dependencia de la investigación propia interna, y el 39% espera aumentar su dependencia de los proveedores de investigación independientes
A la luz de estos datos, Mahesh Narayan, jefe global de gestión de cartera e investigación en Thomson Reuters, señala que “parece claro que el análisis de inversiones será muy diferente en los próximos cinco a diez años. Es probable que los inversores necesiten obtener más datos e información para alimentar la nueva tecnología de inteligencia artificial y aprendizaje automático en la que invierten, incluidos datos alternativos para identificar nuevas formas de encontrar alfa. Esperamos que los gestores activos de la cartera también busquen menos por la parte de ventas en su análisis, y apuesten por depender de la investigación interna y de los proveedores para suministrar la información y las herramientas que necesitan”.
Por su parte, Richard Johnson, vicepresidente de estructura de mercado e investigación de tecnología de la firma de asesoría y de inteligencia de mercado Greenwich Associates, ha querido destacar que la investigación de inversión tradicional está bajo dado el boom que vive el big data y la tecnología.
“Al mismo tiempo, las regulaciones que requieren la desagregación de la investigación han puesto de relieve su valor, creando un cambio significativo en el panorama del análisis e investigación de cara a las inversiones. Los proveedores de información financiera tienen la oportunidad de ayudar a la industria de gestión de activos en esta transición, garantizando que los gestores de cartera y los analistas de inversión tengan los datos y las herramientas necesarios para desarrollar sus modelos de negocio y que puedan controlar mejor su proceso de investigación de inversiones”, concluye Johnson.