Wikimedia Commons. El Fondo Mutuo ETF It Now S&P IPSA de Itaú registro un récord de aportaciones durante el mes de septiembre
El fondo mutuo ETF It Now S&P IPSA de Itaú Administradora General de Fondos experimentó un ncremento récord de aportaciones registró durante septiembre. Este fondo replica el comportamiento de las principales acciones del índice S&P IPSA.
Durante el noveno mes del año, el fondo registró la creación de poco más de 10 millones de cuotas, equivalentes nuevos aportaciones por 35 mil millones de pesos (50 millones de dólares). Según explicó el gerente general de Itaú A.G.F., Wagner Guida, el objetivo de esta estrategia es ofrecer un vehículo de inversión simple y barato a los inversionistas y que les permita acceder a través de una sola cuota a una rentabilidad similar a la obtenida por el principal indicador bursátil del país.
Guida explica que el buen desempeño del fondo en septiembre se explicó principalmente a que la depreciación observada durante el año ha favorecido a los indicadores de valorización, y actualmente el S&P IPSA se mantiene en niveles históricamente atractivos.
El mercado de acciones chileno se ha visto impactado ante la escalada de los conflictos entre EE.UU. y China debido a su alta exposición a la actividad comercial global y cadenas de valor. Una pausa en las tensiones durante septiembre permitió revertir parte de las caídas de los meses anteriores. A esto se sumó un sostenido aumento del estímulo monetario de los bancos centrales alrededor de mundo, en línea con las expectativas de mercado y consistente con el deterioro de la actividad comercial y baja inflación. Este mayor sesgo expansivo impulsó los mercados accionarios globales y condiciones financieras, favoreciendo al mercado accionario de Chile”, agregó Guida.
Los titulares que cambian constantemente no constituyen una tesis de inversión. En un entorno de mercado que se ve impulsado al ritmo de las publicaciones de tweets, una selección por parte de los inversores, una gestión activa del riesgo y un horizonte temporal extendido nunca han sido tan importantes.
“El espectáculo de los mercados de inversión mordernos a veces me ha llevado a la conclusión de que convertir la compra de una inversión en algo permanente e indisoluble, como un matrimonio, excepto por causa de muerte o alguna causa mayor, podría ser un remedio para los males contemporáneos. Esto obligaría al inversor a dirigir su mente a las perspectivas de largo plazo y solo a estas”, John Maynard Keynes.
Consideremos el mes de agosto:
Desde la apertura del mercado el 31 julio a los niveles mínimos que se alcanzaron una semana después, el índice del S&P 500 perdió cerca de un 6,5% de su valor. Para el 13 de agosto, el mercado de renta variable estadounidense había recuperado más del 4% de estas pérdidas, solo para entregar estas ganancias unos días después. Esta actividad del mercado palidece en comparación con el movimiento intradía en el precio del S&P 500 el 23 de agosto o la volatilidad en el mercado de futuros de ese mismo día. A final del mes, el índice S&P 500 había perdido menos del 2% de su valor desde el 31 de julio, una pequeña pérdida dada la tumultuosa actividad del mes de agosto (1).
Los bonos, en contraste, han permanecido como un mar de tranquilidad, siempre que el inversor se hubiera posicionado en largo. El bono de diez años del Tesoro estadounidense tuvo un rally más de 50 puntos básicos, con un rendimiento de más del 5% en el mes de agosto, mientras que, en su extremo a largo plazo, la curva del Tesoro mostraba un rendimiento total superior al 10% para el mismo periodo. Para muchos inversores, estas estadísticas de rendimiento y volatilidad representan un buen rendimiento anual, y un mucho mejor rendimiento en términos mensuales.
Como uno podría imaginar, escribir una nota de esta naturaleza lleva algo de tiempo e implica generar una idea, escribirla, editarla, pulirla, producirla y que el departamento de cumplimiento la apruebe. Mi intención es siempre llegar con una visión oportuna mientras opero dentro de los límites de lo publicable.
Considerando este mandato, ¿cómo puede uno proporcionar un comentario oportuno en el contexto de la volatilidad actual en los mercados? ¿Cómo puede uno sentirse confortable articulando unas perspectivas de mercado a sabiendas de que después de unos tweets enviados oportunamente pueden hacer que el contenido de la nota se vuelva obsoleto mientras la nota sigue en producción? En otras palabras, ¿deberían los titulares, como los vistos en las últimas semanas, alterar el mensaje? ¿Debería temer quedarme obsoleto antes de la publicación?
La respuesta rápida es: no
Respondo a la pregunta con confianza, a pesar de todos los titulares y los tweets. Respondo a la pregunta con confianza, a pesar de la reciente volatilidad que a veces ayuda y otras veces daña las carteras. Respondo a la pregunta con confianza, conforme la cita de Keynes antes mencionada resuena en mi mente y reflexiono sobre el estilo de inversión de MFS, que está profundamente arraigado en el compromiso de unos estándares de rendimientos a largo plazo. El cortoplacismo en los mercados ha llegado a unas proporciones epidémicas. Considere como frecuentemente los comentarios evocan frases como “risk on/risk off”, los mercados están siendo “golpeados” por la guerra comercial, o los inversores están siendo alentados a “comprar la caída”. Hoy en día, los mercados están “respaldados” por unas negociaciones comerciales conciliatorias o bancos centrales “acomodaticios”, y mañana, la inhabilidad de los negociadores comerciales para llegar a un acuerdo en una fecha concreta creará debilidad en los mercados. ¿No ha sido precisamente este el guión que ha seguido el mes de agosto?
Lo que es más importante para los inversores: ¿se puede invertir pensando en los titulares o en los tweets? ¿Tiene algún gestor una verdadera ventaja competitiva para especular sobre el flujo de noticias que ocurrió en el mes pasado? No lo creo.
En mi opinión, adivinar la dirección o fuerza de los vientos políticos es el equivalente al mono proverbial que tira dardos a una lista de nombres de acciones. Además, creo que esto es cierto independientemente de si los vientos políticos se originan en Estados Unidos, China, Hong Kong, Reino Unido, Italia o Argentina. Los titulares y los tweets políticos no constituyen una tesis de inversión, y nuestro trabajo es no posicionar o realizar operaciones en una cartera sobre resultados cortoplacistas de esta naturaleza.
Curiosamente, cuando me encuentro con inversores y clientes alrededor del mundo, casi todos están de acuerdo en estos sentimientos. De hecho, “loco” es el adjetivo más utilizado para describir el actual entorno de inversión. Estos son comentarios que son bienvenidos y que sintonizan con nuestra filosofía de inversión en MFS IM. Creemos firmemente en un horizonte de inversión de largo plazo.
Se necesita tiempo para proporcionar al research fundamental una pista de despegue que permita influenciar de forma significativa la valoración de las inversiones que realizamos en nombre de nuestros clientes -mientras que también brinda la oportunidad de arbitrar las dislocaciones del mercado creadas por el pensamiento a corto-plazo.
Reconozco que muchos participantes del mercado no estarán de acuerdo con estos pensamientos. Consideremos los hechos: operamos en un mercado en el que el periodo de tenencia en cartera nunca ha sido más bajo, la cobertura realizada por el research de Wall Street parece estar muy centrada en los resultados corporativos del siguiente trimestre y en los titulares, los medios financieros producen ruido en el mercado y las gestoras de inversión incentivan estructuras que se centran en los estándares a corto plazo. Ninguna de estas prácticas es saludable para obtener unos resultados a largo plazo para los clientes. Iré un paso más allá y añadiré que estas dinámicas están de hecho dañando los resultados de las inversiones.
No me malinterpreten, mi intención aquí no es descartar la importancia del proteccionismo, populismo o la globalización, tampoco quiero decir que las opiniones y la dirección de los bancos centrales globales no sean importantes para proporcionar liquidez al mercado, para las valoraciones de los activos y para los ciclos económicos. Mi opinión aquí es que nos debemos fijar en horizontes de inversión realistas y en las expectativas de rendimientos que tienen los inversores y los dueños de los activos.
Las negociaciones comerciales pueden influenciar la confianza empresarial y el gasto de capital, la retórica populista, por su parte, alimenta la dinámica de la inflación y todos estos riesgos geopolíticos pueden afectar a las valoraciones de los activos. Sin embargo, a pesar de los titulares constantes, el enfoque de MFS IM como gestores activos debe permanecer en los fundamentales, es decir, los ingresos, los gastos, los beneficios, los balances contables, los flujos de caja, la deuda, el gasto en inversión, las decisiones de asignación de capital y demás consideraciones. Últimamente hemos expresado los desafíos que vemos en el horizonte para muchos de estos factores fundamentales.
Dicho de otra manera, uno no puede comerciar dentro y fuera de las tendencias fundamentales a largo plazo, siempre ganan al final. Dados el “loco” entorno de mercado, la selección por parte de los inversores, una gestión activa del riesgo y un horizonte temporal extendido deberían tener más importancia.
Columna de Williams J. Adams, director de inversiones de renta fija en MFS Investment Management.
Pixabay CC0 Public Domain. japan-4141578_960_720.jpg
La consultora de gestión global Oliver Wyman Wealth Management y la entidad financiera Deutsche Bank han publicado su cuartoinforme anual sobre gestión patrimonial. Bajo el título «Global Wealth Managers: Out of the pit stop – into the fast lane», el informe proporciona una visión general de las tendencias en la industria y sus perspectivas sobre los desarrollos futuros.
El informe señala que el crecimiento de los altos patrimonios (high net worth, HNW) se redujo al 4% en 2018, año en el que los gestores patrimoniales se enfrentaron a diversas eventualidades: un menor crecimiento de los activos bajo gestión, mercados más desafiantes y una presión constante sobre las comisiones del negocio de la gestión de patrimonios. La presión sobre los ingresos sufrida a finales de 2018 revela la continua vulnerabilidad de los modelos operativos ante el estrés del mercado y, aunque el rebote experimentado en 2019 trajo consigo cierto alivio, es inevitable que termine produciéndose una mayor presión a medida que el fin de ciclo se acerca.
Pablo Campos, co director de Oliver Wyman Iberia, aseguró que “para lograr un crecimiento por encima de la media, trabajar en los mercados desarrollados no será suficiente. Los mercados emergentes son el motor para el crecimiento en el futuro, ya que el sector continúa enfrentándose a presiones sobre los márgenes y los costes en los mercados desarrollados».
El informe de Oliver Wyman destaca las siguientes prioridades:
Asia-Pacífico. Los gestores de patrimonio han de permanecer alerta ante los desarrollos en mercados offshore como Hong Kong y Singapur, al tiempo que crece el reto para aumentar la escala. Mediante la implementación de cambios estructurales, es el momento de valorar la entrada en China Continental. Además, han de situar apuestas descentralizadas en el resto de mercados del sudeste asiático para reaccionar a las reformas regulatorias, al tiempo que consideran diversos modelos de entrada a mercados para optimizar el coste.
Latinoamérica. En la región han de centrarse en resolver los retos operacionales, técnicos y regulatorios para proporcionar una experiencia sin fisuras a sus clientes, tanto en mercados offshore como onshore. Además, deben guiarles en su camino hacia estrategias de inversión más sofisticadas, así como hacia un mayor entendimiento del riesgo, dado el entorno de bajos intereses.
Simplificación del modelo operativo
El rebote del mercado en el primer trimestre de 2019 ha dado a los gestores una última oportunidad para mejorar la eficiencia de su modelo operativo y ajustar su base de costes antes de una eventual desaceleración.
Los costes asignados continúan siendo obstinadamente altos, algo que debería afrontarse mediante la disminución del consumo de servicios grupales. Los gestores necesitan enfocarse en el entendimiento y manejo de la asignación de costes, así como en el establecimiento de una cultura de propiedad de los mismos para comenzar a dirigir su asignación.
Foto cedidaMatthieu Rolin, co-gestor de Thematics Safety Fund.. Thematics AM incorpora a Matthieu Rolin como co-gestor de su estrategia Thematics Safety
Thematics Asset Management, filial de Natixis Investment Managers, ha reforzado el equipo de su fondo Thematics Safety con la incorporación y nombramiento de Matthieu Rolin como co-gestor de la estrategia. Rolin trabajará en colaboración con Frédéric Dupraz, uno de los fundadores y propietarios de Thematics Asset Management, y gestor de Thematics Safety Fund.
Según explica la gestora, Rolin asumirá la gestión de la cartera y el análisis, identificando compañías que ofrecen productos y servicios para la protección física y digital de los individuos, empresas y gobiernos. Las compañías que el equipo selecciona para la cartera tienen un perfil riesgo/rentabilidad atractivo, impulsado por tendencias seculares a largo plazo y que cumplen con criterios no financieros relacionados con asuntos ESG.
Rolin se incorpora desde Aviva Investors France, donde ha trabajado como gestor de fondos de de renta variable estadounidense. Antes de unirse a Aviva Investors, fue jefe de renta variable en SwissLife Banque Privée y gestionó carteras de renta variable estadounidenses y europeas. Matthieu comenzó su carrera como gestor de multiactivos en Olympia Capital Management.
A raíz de este nombramiento, Mohammed Amor, consejero delegado de Thematics Asset Management, ha declarado: “Estamos muy satisfechos con el interés que han recibido los inversores nuestra gestora y sus estrategias, a principios. También estamos muy contentos con la incorporación de Rolin a nuestro equipo de inversión, con lo que podremos hacer crecer nuestro negocio en Europa. En el corazón de todo lo que hacemos está nuestro objetivo de identificar temas a largo plazo, respaldados por motores de crecimiento seculares que crean el potencial de rentabilidad para los fondos de capital temáticos. La experiencia de Rolin en la inversión temática proporcionará será muy valiosa para apoyar al equipo de este fondo y ayudará a impulsar los rendimientos”.
Pixabay CC0 Public Domain. State Street Global Advisors lanza un ETF de inversión sostenible referenciado al índice STOXX Europe 600
State Street Global Advisors, el brazo de gestión de activos de State Street Corporation, ha anunciado el lanzamiento del SPDR STOXX Europe 600 ESG Screened UCITS ETF. Se trata del primer ETF referenciado a una estrategia de inversión sostenible, que replica el índice STOXX Europe 600 y sigue criterios de exclusión transparentes.
Según ha explicado la gestora, su objetivo es eliminar las exposiciones como armas polémicas, producción de tabaco, carbón térmico y a aquellas empresas que no cumplan con los diez Principios del Pacto Mundial de Naciones Unidas. Desde el 30 de septiembre de 2019, el fondo cotiza en Xetra, Bolsa Italiana y Euronext.
El STOXX Europe 600 es un índice de referencia clave para obtener exposición exposición al mercado paneuropeo de renta variable que representa a empresas de alta, mediana y pequeña capitalización de 17 países individuales. El índice STOXX 600 ESG-X, lanzado en 2018, tiene criterios de exclusión que se basan en los datos de Sustainalytics, un importante proveedor independiente de calificaciones que evalúa a empresas cotizadas según las políticas de responsabilidad corporativa de los principales accionistas y cuyo objetivo es reducir los riesgos idiosincráticos y reputacionales.
El ETF, con una comisión de gestión del 0,12 %, cuenta con la función denominada “fast exit” para responder con rapidez a las controversias que se generen en torno a los criterios ambientales, sociales y de gobierno corporativo (ESG). Si Sustainalytics aumenta la calificación de riesgo al nivel 5 (alto riesgo) para un componente particular del índice, este se retira del índice dos días después de haberse hecho público.
“La inversión sostenible ha dejado de ser un nicho y ha pasado a ser una de las áreas de más rápido crecimiento en el desarrollo de productos ETFs en Europa. El inversor demanda, cada vez más, la inclusión de criterios ESG en estos vehículos de inversión. Creemos que, dado el contexto, la demanda de ETFs sostenibles seguirá aumentando. Aunque muchas gestoras (que en conjunto controlan alrededor de unos USD 90 billones de patrimonio a nivel global ) se han comprometido a incorporar criterios ESG en sus procesos de inversión y han firmado los Principios de las Naciones Unidas para la Inversión Responsable (PRI), se calcula que solamente el 20 % cumple con criterios ESG. Sin embargo, esta cifra aumentará rápidamente, a medida que los requisitos para poder ser signatario, como, por ejemplo, publicar los indicadores de riesgo climático, se endurezcan a partir de 2020”, explica Rebecca Chesworth, jefa de estrategias sectoriales y ESG en SPDR.
Por su parte, Mandy Chiu, jefa de productos ETFs para las regiones de EMEA y APAC, señala que “a medida que la innovación en fondos responda a las nuevas capacidades y demandas del inversor, esperamos que la oferta de ETFs se amplíe. A finales de enero de 2019 existían 210 ETF/ETP clasificados como ESG. Hay cada vez más estudios académicos que demuestran la correlación positiva entre una clasificación ESG elevada y un alto rendimiento de la inversión”.
Según explica la gestora, la cartera resultante de este nuevo ETF tiene un tracking de 0,48 % anualizado en los últimos cinco años y rendimientos similares a los del STOXX Europe 600. “La ponderación activa por sector es del 2% en todos los casos”, concluye Chiu.
La guerra comercial instigada por el gobierno estadounidense actual está afectando al crecimiento económico y a los beneficios empresariales en todo el mundo. Las economías y los mercado de valores de Europa y la esfera en desarrollo han resultado ser especialmente vulnerables por su dependencia de la cadena de suministro manufacturera global.
Sin embargo, los inversores que deseen diversificación y estabilidad deberían fijarse en el ojo de la tormenta: Estados Unidos. La economía, el dólar y los mercados bursátiles estadounidenses gozan de características únicas que los convierten en una parte vital de cualquier cartera de inversión, incluso a pesar de que el recrudecimiento actual de la incertidumbre económica sea causa del propio sistema político de Estados Unidos.
La economía estadounidense se presta a aislarse en gran medida de factores externos. Con una población de 372 millones de personas, se estima que el 80% de su economía se basa en el consumo. Las cifras del PIB del segundo trimestre demuestran su importancia: en pleno recrudecimiento de la guerra comercial y con una caída de la inversión empresarial del 5,5% en comparación con el año anterior, el PIB estadounidense logró anotarse un avance del 2,1%, por encima de las expectativas de Wall Street, gracias a la solidez del consumo.
Tal es la confianza del consumidor que las solicitudes de hipotecas para adquisiciones de vivienda (en contraposición a operaciones de refinanciación) también han subido de manera sostenida. Al seguir creciendo el peso del consumo y los servicios en la economía estadounidense, resulta cada vez más improbable que la ralentización industrial o manufacturera sea el origen de una recesión en el futuro. En vista de la tensa situación actual del entorno comercial global, se trata de una característica de gran atractivo que presentan muy pocas economías.
Para los inversores internacionales, la estabilidad del dólar estadounidense también es de vital importancia para conservar el valor de sus inversiones en moneda local. De nuevo, Estados Unidos se encuentra en una posición excepcional en este aspecto. El dólar estadounidense goza de solidez y estabilidad gracias a su condición de moneda de reserva de facto, extremo que apenas muestra signos de que vaya a cambiar.
El comercio global se realiza cada vez más en dólares estadounidenses y la deuda denominada en dicha moneda en manos de empresas y gobiernos se aproxima a los 10 billones de dólares. La economía mundial ha asimilado literalmente la situación del dólar de Estados Unidos motivada por su capacidad para hacer las veces de reserva de valor (por la elevada liquidez de sus mercados de capitales), así como por sus altos niveles de liquidez y seguridad.
El último punto es crucial, pues la Reserva Federal demuestra claramente estar preparada para actuar como prestamista de último recurso. Durante la crisis financiera mundial de 2008, el banco central estadounidense instauró líneas de swap de divisas con nada menos que otros 14 bancos centrales para asegurar una oferta sostenida de liquidez en dólares.
El dólar estadounidense no es inmune a la depreciación, naturalmente, como se vio en la primera década del siglo XXI, cuando la economía a duras penas se recuperó de la recesión. El gobierno estadounidense recientemente planteó la posibilidad de devaluar su moneda un 10% para apuntalar la fabricación destinada a exportaciones. Sin embargo, el proceso de “dolarización” de, aproximadamente, la última década, combinada con las características intrínsecas que se describen con anterioridad, sugiere que el dólar estadounidense seguirá siendo una moneda atractiva en las turbulencias económicas globales en curso, que no de las específicas de Estados Unidos.
En cuanto a los mercados de capitales y, concretamente, la renta variable de Estados Unidos, volvemos a encontrarnos con la excepcionalidad de dicho país. Aunque algunas empresas estadounidenses centradas en el ámbito internacional, como Nike, han pedido al gobierno de Estados Unidos rebajar el tono en el enfrentamiento comercial, la rentabilidad de las empresas del país sigue siendo sólida.
Las expectativas medias de crecimiento de los beneficios de las empresas correspondientes al segundo trimestre apuntan un alza del 4% con respecto al año pasado, si bien numerosas empresas están demostrando flexibilidad en la gestión virando sus cadenas de suministro en detrimento de China en lugar de esperar a la resolución de la incertidumbre política.
En la práctica, esto implica trasladar las fábricas a jurisdicciones de “segundo nivel” como México, Tailandia e Indonesia. También contribuye positivamente la actitud cada vez más “proclive” de la Reserva Federal, que se ha mostrado más abierta a reducir los tipos de interés ante la inminencia de una tormenta económica global. Sin embargo, Estados Unidos también ofrece algo intrínsecamente superior con respecto a otros mercados que trasciende las condiciones imperantes: una rentabilidad de los recursos propios sistemáticamente mayor que en otros mercados.
¿Cuál puede ser la explicación de esto? En pocas palabras, mayor calidad de los equipos directivos de las empresas. No es una mera sospecha de que las empresas estadounidenses simplemente se gestionan mejor que otras, sino un fenómeno observado de manera empírica.
En un estudio básico realizado en 2010 por Nicholas Bloom y John Van Reenen (1), las empresas estadounidenses obtuvieron la mejor puntuación global en cuanto a dirección, a partir de criterios como adopción de técnicas de fabricación modernas, control del rendimiento, consecución de objetivos internos, procesos de revisión de homólogos, estructuras de incentivos y gestión del talento. Aunque la solidez de su infraestructura de formación empresarial puede que sea parte de la razón de esta puntuación elevada, es posible que el enfoque darwiniano de Estados Unidos hacia el éxito y el fracaso individual en el mundo corporativo sea el que más incida en este sentido.
Es interesante señalar que el Reino Unido logró el noveno puesto a escala mundial; los autores del estudio destacaron una cultura fatalista de mediocridad directiva personificada en la cultura popular por personajes como Basil Fawlty, David Brent y Alan Partridge. Resulta complicado relacionar dichas caricaturas con personajes de Estados Unidos porque en ese país prácticamente no existen. La superioridad en la gestión se combina con la enorme profundidad del mercado bursátil estadounidense, donde en 2017 se negociaban a diario, de media, casi 6.500 millones de acciones. El resultado es que el índice S&P 500 tiende a mostrar “asimetría” con el tiempo, pues evoluciona adecuadamente cuando sube la renta variable global, pero también traza una evolución defensiva sólida cuando caen las acciones de todo el mundo, reflejando su capacidad, descontada, de afrontar todo tipo de situaciones.
La fortaleza estadounidense es un fenómeno económico y de inversión más que contrastado. Puede que otros estilos de inversión y regiones muestren un crecimiento más alto, como los mercados emergentes, con sus incipientes clases medias, mientras puede que otros parezcan ofrecer un valor directo más elevado, como la ridiculizada renta variable europea.
Sin embargo, la economía, la moneda y los mercados bursátiles estadounidenses gozan de una resiliencia que se debe, en parte, al legado estructural, pero también en buena parte a que los responsables de sus instituciones económicas y los consejos de administración de sus empresas siempre son de alta calidad.
Estas ventajas únicas posicionan a Estados Unidos adecuadamente para bregar con un periodo prolongado de incertidumbre geopolítica y económica a escala global, incluso a pesar de que el origen de esta situación sea interno. Si bien algunos expertos argüirían que la administración estadounidense está tratando de hacer que el país dependa menos del exterior, la buena noticia es que los mercados de capitales de Estados Unidos siguen siendo fácilmente accesibles para los inversores internacionales.
Tribuna de Julian Howard, responsable de Multi-Assets Solutions en GAM Investments.
Anotaciones:
(1) «Why Do Management Practices Differ Across Firms and Countries?» Bloom & Van Reenen, 2010
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Pixabay CC0 Public Domain. Santander Asset Management lanza nuevo fondo de deuda privada en Chile
Santander Asset Management (SAM) ha lanzado al mercado un nuevo fondo de inversión con el fin de ofrecer una alternativa para acceder al mercado de deuda privada, logrando recaudar en este primer fondo un monto cercano a los 100 millones de dólares, principalmente entre clientes institucionales.
“Uno de los elementos diferenciadores del Fondo de Deuda Privada de Santander Asset Management es que sólo participará en créditos donde el Banco Santander forme parte en al menos un 5% desde el momento de su origen. Cabe destacar que Banco Santander ha mantenido históricamente un liderazgo en la estructuración de créditos sindicados en la industria”, señala Diego Ceballos, gerente de Inversiones de SAM.
El Fondo de Deuda Privada de Santander Asset Management apunta a créditos sindicados de emisores de tamaño mediano o pequeño que no cuenten con valores de oferta pública (acciones o bonos) y se centren sólo en el mercado privado.
“Este producto nos permite tener acceso a emisores nuevos, a los cuales tradicionalmente no se puede llegar mediante un vehículo tradicional”, puntualiza
Juan Pablo Egui, foto cedida. Deutsche Bank Wealth Management ficha a Juan Pablo Egui
Juan Pablo Egui se ha unido a Deutsche Bank Wealth Management en Nueva York. Egui es ahora director en el grupo Institutional Wealth Partners, un equipo especializado que brinda las capacidades corporativas y de bancos de inversión de Deutsche Bank a las family offices y UHNWI, con servicios que incluyen la generación de ideas, préstamos, oportunidades temáticas de mercado privado y corporativos, así como asesoría financiera.
Reportará a Alan Brody, director de Inversiones y Comercio Global de Institutional Wealth Partners, y a Dan Kaiser, director de Institutional Wealth Partners para las Américas.
Previamente, Egui trabajaba en Compass Group, donde fue jefe de Comercialización de Ventas para las operaciones de corretaje de la firma especializada en mercados de capitales latinoamericanos. El papel incluyó la supervisión de representantes registrados tanto en Nueva York como en Santiago, cubriendo inversiones institucionales regionales, de family offices y de clientes UHNW en diversas clases de activos. Antes de encabezar la división, fue especialista de Renta Fija de LatAm para la firma, negociando deuda corporativa y soberana, con énfasis en los segmentos de distressed y high yield.
De acuerdo con la firma: «Su amplia experiencia en mercados emergentes y su base de inversores proporcionarán valiosas contribuciones a la creciente presencia de Institutional Wealth Partners en las Américas».
Egui obtuvo su licenciatura de Boston College y un MBA con honores de NYU Stern School of Business, además, cuenta con las Series 7, 63 y 24.
Deutsche Bank Wealth Management busca brindar una experiencia de gestión de patrimonio de primera calidad al tiempo que aprovecha los vastos recursos de Deutsche Bank para individuos, familias e instituciones selectas de alto y alto valor neto y para ello, sigue fortaleciendo su oferta a personas e instituciones de alto patrimonio de América Latina. Recientemente también contrató en Miami a Karim Aryeh como director y gestor de Inversiones.
De acuerdo con George Crosby, director de Gestión de Patrimonios de Deutsche Bank en América Latina, debido al creciente número de clientes en América Latina, la firma seguirá añadiendo el mejor talento a medida que ejecutan sus ambiciosos planes de crecimiento en la región.
Vontobel Asset Management ha nombrado a Carolee Delaney como gerente de marketing para las Américas. Delaney estará basada en Nueva York y será responsable de la implementación de la estrategia de marketing a través de canales institucionales e intermediarios en América del Norte y América Latina.
Carolee Delaney se une a Vontobel Asset Management después de 14 años en Lazard Asset Management, donde fue responsable de desarrollar y ejecutar estrategias de marketing y ventas para el equipo regional de ventas institucionales, dirigidas a RIAs, family offices, patrimonios y fundaciones, fideicomisos bancarios y segmentos de clientes corporativos.
Tiene una licenciatura en Administración de Empresas, con concentración en Marketing, de la Universidad Loyola en Maryland.
Foto cedidaDe Izquierda a derecha: Alejandro Preusche, Vice Chair de GSG; María José Montero, socia fundadora del Fondo de Inversión Social- FIS|Ameris; José Ramón Valente, presidente de Fundación Chile; y Horacio Pavez, co fundador de The Impact. Santiago será la sede de la cumbre mundial de la inversión de impacto
Este mes de octubre se lanzó oficialmente en la Fundación Chile el programa del GSG Impact Summit 2019, la mayor cumbre de líderes e instituciones de inversiones de impacto social del mundo. Se trata de un modelo de inversión que ostenta uno de los crecimientos más rápido a nivel internacional y que el 18 y 19 noviembre tendrá a Santiago como sede. Esta es la primera vez que se realiza en América Latina, después de haberse celebrado en Londres, Lisboa, Chicago, y Nueva Delhi.
La cumbre, que se llevará a cabo en el Museo Nacional de Bellas Artes, tiene como objetivo acelerar el desarrollo en América Latina de una economía de mercado que pone en el centro de las decisiones empresariales de inversión y políticas públicas, el impacto positivo en el medioambiente y las personas. “En Chile hoy existe un escenario especialmente propicio para que los sectores público, privado y social trabajen juntos con el fin de fomentar la inversión de impacto socio-ambiental y avanzar hacia un desarrollo pleno e integral, lograr el crecimiento económico y generar oportunidades para todas las personas. La inversión de impacto social es un apoyo para conseguir objetivos que muchos actores ya compartimos en Chile, América Latina y el mundo”, señaló Alejandro Preusche, Vice Chair de GSG.
La quinta versión de la cumbre convocará a líderes de los sectores financieros y corporativos, representantes del ámbito público, académicos y empresarios de renombre de todo el mundo. Entre los objetivos se encuentran acelerar el desarrollo de la economía de impacto en Chile, fomentar el intercambio de experiencias entre actores de la región y del mundo, analizar nuevas tendencias del movimiento a nivel global y lograr compromisos y acciones concretas.
José Ramón Valente, presidente de Fundación Chile y quien será parte de los speakers de la Cumbre indicó que «la ecuación del desarrollo sostenible pasa por considerar los aspectos que para los inversionistas globales son estratégicos: riesgo, retorno e impacto. Desde Fundación Chile, queremos catalizar que las inversiones ocurran en los desafíos para el desarrollo sostenible de nuestro país, tales como soluciones que aceleren modelos virtuosos de economía circular donde la inversión pasa a ser una herramienta que da la disciplina, el rigor y momentum del mercado financiero. Queremos invertir en iniciativas que apalanquen los cambios tecnológicos acelerados como se requiere para la transición que demanda el mercado laboral actual. El Estado no puede solo, por lo que es importante promover esquemas donde se considere el conocimiento del inversionista, el cual ya está consciente que un buen negocio es contribuir a los desafíos país donde el riesgo-retorno e impacto no son excluyentes y estos desafíos requieren de una escala inédita”.
Por su parte, María José Montero, socia fundadora del Fondo de Inversión Social- FIS|Ameris, quien también será speaker en la cumbre, señala que “para impulsar la inversión de impacto, es clave trabajar unidos, compartir las mejores prácticas nacionales e internacionales y apoyarse mutuamente para que el ecosistema -integrado por autoridades, empresas, organizaciones socioambientales e inversionistas- avance en la dirección correcta. En ese sentido, es no solo una muy buena noticia sino una oportunidad que Chile sea sede del próximo encuentro del GSG Summit. Esto demuestra el compromiso país de querer avanzar en una industria financiera más sostenible»
Horacio Pavez, co fundador de The Impact y speaker del GSG, destaca que “la inversión de impacto es una transformación que llegó para quedarse y para delinear el futuro de la sociedad y de la actividad económica. Ser la sede de la cumbre anual de esta organización y recibir en el país a más de 500 líderes en este campo nos posiciona a nivel mundial y es primordial para poder intercambiar experiencias, conocer y adoptar las mejores prácticas de la gestión de impacto y buscar sentar las bases para la generación de una comunidad local que conectada a una comunidad global puedan acompañarse en el desarrollo futuro de esta gran transformación social y económica”.
En total la cumbre contará con exposiciones de 150 speakers. Entre los chilenos ellos destacan la ministra de Medio Ambiente, Carolina Schmidt; el ministro de Desarrollo Social, Sebastián Sichel; la ministra de la Mujer y la Equidad de Género, Isabel Plá; el alcalde de Santiago, Felipe Alessandri; el director de empresas, Alejandro Ferreiro; el Co Fundador de The Impact, Horacio Pavez; la gerente de Innovación CORFO, Rocío Fonseca; el Cofundador de Sistema B y CEO de TriCiclos, Gonzalo Muñoz; el co fundador de Linzor Capital, Tim Purcell; y el miembro de la facultad de Economía y Negocios de UDD, Klaus Schmidt- Hebbel; entre otros.
Al mismo tiempo, entre los speakers internacionales estarán Sir Ronald Cohen, fundador del GSG; Marilou Van Golstein, directora general de Triodos Investment Management; Darren Walker, presidente de Ford Foundation; Fran Seegull, directora ejecutiva de US Impact Investing Alliance; Jim Sorenson, presidente de Sorenson Impact Foundation; Yvonne Bakkum, CEO de FMO Investment Management; Alejandro Preusche, Vice Chair del GSG; y Michele Giddens, cofundadora de Bridges Fund Management; entre otros.
La actividad cuenta con el patrocinio del Ministerio de Desarrollo Social y Familia, el Ministerio de Medio Ambiente, el Banco Internacional de Desarrollo, CORFO, Fundación Chile y la Municipalidad de Santiago.