Tras la caída que experimentó el oro en 2018, algunos inversores han dudado sobre su papel como activo refugio. En opinión de Nitesh Shah, director de análisis de WisdomTree, el oro sigue cumpliendo esta función y, de cara a la situación de mercado actual, es una opción muy válida para todos inversores sean o no conservadores.
La gestora considera que el precio del oro cayó el pasado año en parte por la apreciación dólar. “Hemos construido un modelo que demuestra que los cambios en el precio del oro, en dólares, está dirigido por los cambios en la negociación de dólares, la inflación, los cambios en el yield de los treasuries estadounidenses a diez años y por el sentimiento de los inversores”, explica Shah.
Según este modelo y su escenario base, el oro se mantendrá en torno a los 1369 dólares la onza. En este sentido, Shah es optimista y considera que “el oro subirá a lo largo de este año en parte porque la Fed ya ha comunicado su voluntad de ser más dovish, por lo tanto podemos esperar una depreciación del dólar y una caída de los yields en los bonos”.
En este sentido insiste en que el oro puede ser un buen refugio y fuente de rendimiento, teniendo en cuenta no solo la nueva orientación de la Fed, sino también los eventos geopolíticos que pueden acabar generando volatilidad en el mercado, como el Brexit o las tensiones comerciales entre Estados Unidos y China, y que harían subir el precio del oro. En este sentido, y según su experiencia, el oro ha sido uno de los activos favoritos de los bancos centrales y de los mercados emergentes de cara a buscar protección y diversificación.
Por estos atributos, Shah considera que es un buen momento para aportar a las carteras algo de exposición al oro físico: “El oro sigue siendo un buen activo defensivo para una cartera de commodities por el valor de cobertura que tiene frente a la inflación y los posibles eventos de mercado, y también frente a caídas en el mercado de renta variable”. En su opinión, lo ideal sería incluir un 20% pero reconoce que es “básicamente imposible”, pero considera bastante lógico una exposición de un 5% para un entorno como el actual.
El otro activo que Shah considera una buena oportunidad es el petróleo, pese a ser tradicionalmente un mercado bastante volátil. Según explica, “desde las caídas que sufrió el barril de petróleo a finales de 2016, su precio ha ido recuperándose y situándose cercano a los niveles de hace tres años”. Sus expectativas es que el precio aumente: “Estamos en un contexto de cortes en la producción por parte de algunos productores, como la OPEP, que haría mantener el precio del barril en un buen punto de entrada”.
Shah considera que el mercado de petróleo es uno de los que más ha cambiado en los últimos años, básicamente porque Estados Unidos ha pasado de ser un gran importador de petróleo o uno de los primeros exportadores del mundo, cambiando los roles del mercado mundial. “El precio del petróleo tiene ahora mismo depende no sólo de las tensiones geopolíticas, como ha sido tradicionalmente, si de la eficiencia en los costes de la industria estadounidense, que es capaz de explotar petróleo de esquisto a un nivel de dólar por barril inferior a lo que lo han estado haciendo otros productores”, explica.
Con este contexto de fondo, director de análisis de WisdomTree apunta que las oportunidades están en Estados Unidos, ya que el barril de petróleo intermedio de Texas (WTI) se está beneficiando de la intención de Arabia Saudí y la OPEP de seguir limitando la producción de crudo.
Los últimos acontecimientos ocurridos en Venezuela sugieren que el gobierno de Maduro podría estar llegando a su fin. El equipo gestor de la estrategia de renta fija de mercados emergentes de MFS (MFS Emerging Markets Debt fund) comparte su visión al respecto.
El mercado ha percibido de forma positiva el posible colapso del gobierno de Maduro: desde que comenzó el año hasta el 4 de febrero de 2019, el subíndice venezolano del índice JP Morgan EMBI Global ha superado a todos los demás países en el índice, con un rendimiento de 42,21% con respecto a un 4,48% del índice. Esto refleja una rápida recuperación que viene de un punto muy bajo, dado el rendimiento del año pasado de -20,29%.
El detonante de la última ola de disturbios fue la inauguración a principios de enero, después de una elección que había sido considerada como fraudulenta por la comunidad internacional. El nuevo presidente de la Asamblea Nacional, Juan Guaidó, rápidamente emergió como el líder de la oposición doméstica. Guaidó fue proclamado presidente interino por la Asamblea el 15 de enero, estableciendo de forma efectiva un gobierno paralelo.
Bajo el liderazgo unificador de Guaidó, la oposición se consolidó y ganó un impulso considerable a medida que las masivas manifestaciones mostraron el alcance de la insatisfacción social. Guaidó se declaró como líder del país y un número de gobiernos extranjeros (por ejemplo, Estados Unidos, Canadá, Brasil, Argentina, Chile y algunos países de la Unión Europea, entre otros) ayudaron a legitimar el liderazgo de Guaidó al manifestar el reconocimiento a su gobierno. Las protestas masivas que comenzaron el 23 de enero pusieron en evidencia el alto porcentaje de rechazo de Maduro y el fuerte apoyo por un cambio. Además, el respaldo de los militares venezolanos del régimen de Maduro, un factor clave para que Maduro pueda mantener el poder, ha comenzado a disminuir, como evidencio el levantamiento fallido por parte de la guardia nacional y deserciones de alto rango.
Las propuestas de amnistía del gobierno de Guaidó pueden erosionar aún más la lealtad de los militares de Maduro, ya que los que fueron partidarios por mucho tiempo del régimen sopesan los costes de mantener ese apoyo. Además de la presión política, los gobiernos extranjeros añadieron presión económica con la imposición de sanciones adicionales. Estados Unidos recientemente incluyó a PDVSA como una SDN (lista de Specially Designated Nationals) que bloquea toda propiedad de PDVSA en ausencia de una licencia. Esto congela sus cuentas en Estados Unidos, lo que equivale a la prohibición de facto de las exportaciones de 500.000 barriles por día de crudo venezolano a Estados Unidos. Las acciones del Tesoro contra PDVSA fueron rápidamente seguidas de unas medidas restrictivas adicionales impactando a los tenedores de bonos del gobierno venezolano. En particular, las nuevas sanciones prohíben a las entidades estadounidenses comprar deuda soberana venezolana y autoriza las desinversiones únicamente a personas que no son estadounidenses.
La respuesta del mercado a la incertidumbre alrededor de las restricciones ha resultado en un congelamiento de las transacciones del mercado de la deuda soberana venezolana y de la deuda de PDVSA, al menos hasta que haya más aclaraciones. Otros gobiernos han tomado medidas en oposición al régimen de Maduro. Reino Unido, por ejemplo, rechazó la petición de Maduro para enviar parte del oro venezolano almacenado en el Banco de Inglaterra de nuevo a Caracas, citando su reconocimiento a Guaidó como el líder legítimo de del país.
¿Qué le espera ahora a Venezuela?
Esta no es la primera vez que los mercados han experimentado un rally ante la perspectiva de una transición política durante la presidencia de Maduro, sin embargo, los esfuerzos anteriores han fracasado, ya que Maduro logró dividir la oposición y debido a que las sanciones internacionales fueron limitadas. Dicho esto, dada la fragilidad de la economía y el aumento del malestar social, el equipo de deuda de mercados emergentes de MFS Investment Management continúa siguiendo muy de cerca los acontecimientos de Venezuela, pues creen que la probabilidad de un fin inminente del régimen de Maduro ha aumentado considerablemente. Siguen teniendo cautela, pues el resultado puede depender en gran medida de factores como una protesta pública continuada, un posible desplome de la determinación de los militares para seguir apoyando a Maduro, y una continua presión internacional.
Con este telón de fondo, ¿qué cabe esperar en Venezuela? El colapso de la producción de petróleo del país (su principal fuente de ingresos), la disminución de las reservas, la agitación política, la profundización de la crisis humanitaria y el desmoronamiento del tejido social apuntan a la necesidad de un cambio de régimen. En MFS creen que un cambio de gobierno dirigido por la oposición sería positivo y podría llevar a una mejora de las perspectivas en el crecimiento a largo plazo. Un régimen favorable al mercado que podría ofrecer la promesa de un ‘círculo virtuoso’: además de unos mayores flujos de inversión extranjera directa, lo que probablemente permitiría catalizar el apoyo multilateral, incluyendo la posibilidad de un compromiso con el Fondo Monetario Internacional. Si bien en MFS consideramos que un potencial cambio de régimen sería positivo, también observamos varias advertencias en lo que hoy en día parece ser una dinámica de mejora:
La situación política sigue siendo fluida y los resultados son difíciles de predecir.
Cualquier cambio hacia un nuevo gobierno será un proceso lento
El marco institucional de Venezuela tardará un tiempo en ser reconstruido
La principal fuente de beneficio del gobierno, la producción de petróleo supervisada por PDVSA, necesitará años de reparaciones en sus infraestructuras con ayuda de capital externo, así como la restauración del capital humano perdido debido al éxodo de talento del país. La atracción del capital extranjero, muy escéptica tras años de expropiaciones Chavistas, requerirá de unas fuertes garantías y de una mayor confianza en la durabilidad de cualquier nuevo gobierno.
Estas condiciones tienen unas importantes implicaciones para los tenedores de los bonos, sugiriendo que una reestructuración será un proceso largo y complicado, con una enredada maraña de reclamaciones y contra reclamaciones litigadas y conforme se reconstruye gradualmente la capacidad de pagar la deuda de forma sostenible.
Como resultado, es probable que los tenedores de bonos experimenten un periodo prolongado de incertidumbre. Como consecuencia de estos factores, resulta muy difícil evaluar el valor relativo de la deuda soberana venezolana y de PDVSA. Si bien la relación riesgo-rentabilidad ha mejorado gracias al posible cambio de régimen, una reestructuración de la deuda requerirá un ‘recorte’ significativo del valor del principal de los bonos y un alargado periodo de gracia que limita la recuperación de la deuda al alza. Dada esta incertidumbre, el equipo de deuda emergente de MFS siente que el precio actual, o al menos el último precio que existía antes de que la cotización fuera suspendida, es razonable, pero no particularmente barata.
A finales de la semana pasada, BlackRock anunció la oferta vinculante y el acuerdo exclusivo al que ha llegado para adquirir el 100% de las acciones de eFront, proveedor mundial de soluciones y software de gestión de inversiones alternativas de extremo a extremo, a la firma de private equity Bridgepoint y a los empleados de eFront, por 1.300 millones de dólares en efectivo. La combinación de eFront con Aladdin, la plataforma operativa de inversión de BlackRock utilizada por más de 225 organizaciones en todo el mundo, fijará un nuevo estándar en tecnología de inversión y gestión de riesgos.
eFront que da servicio a más de 700 clientes en 48 países, es una solución tecnológica integral para gestionar el ciclo completo de la inversión en activos alternativos, desde due diligence y planificación de cartera hasta análisis de desempeño y riesgos, a lo largo de un amplio espectro de clases de activos alternativos
«La tecnología y los activos alternativo ilíquidos son dos pilares del crecimiento de BlackRock, y esta operación ofrece una oportunidad única para acelerar nuestro posicionamiento en ambos», dijo Laurence D. Fink, Presidente y CEO de BlackRock. «Estamos particularmente entusiasmados con la presencia global de eFront, incluida su sede en París, que es un mercado clave en el continente para BlackRock. Como administrador de activos globales, estamos cada vez más enfocados en comprender las necesidades únicas de los clientes en cada comunidad donde operamos. eFront aumenta de inmediato nuestra presencia y nuestras capacidades tecnológicas en Francia, Europa y en todo el mundo», añade Fink.
eFront amplía enormemente las capacidades para activos alternativos de Aladdin y lo distingue como la plataforma operativa de inversión más completa del mundo”, dijo Rob Goldstein, director de operaciones de BlackRock. “Además de los beneficios que eFront aportará a los clientes de Aladdin, la transacción también mejora la plataforma de inversión en activos de alternativos de BlackRock y potencia el objetivo de la compañía de utilizar la tecnología para fortalecer su posición de liderazgo en el espacio las inversiones ilíquidas y proporcionar soluciones de cartera integral a los clientes», matiza Goldstein.
A medida que los activos alternativos se generalizan, la capacidad de los gestores de inversiones de administrar sus carteras de manera integral incluyendo tanto clases de activos cotizados como privados en una sola plataforma es fundamental. eFront ampliará la oferta de soluciones de procesamiento integral de Aladdin en clases de activos alternativos, permitiendo a los clientes obtener una visión global de su cartera.
«Actualmente hay 9 billones de dólares en activos alternativos bajo gestión en la industria y los clientes los están incorporando en sus estrategias de inversión a un ritmo récord», dijo Goldstein. «Esto ha creado una necesidad sin precedentes de capacidades de gestión de riesgos e inversión que abarcan clases de activos cotizados y privados».
“Ofrecer las capacidades líderes de eFront en activos alternativos a la comunidad de Aladdin a través de BlackRock Solutions permitirá a nuestros clientes acceder a un enfoque de cartera integral que solo Aladdin puede ofrecer. Nos complace dar la bienvenida a BlackRock a los 700 empleados de eFront mientras continuamos ofreciendo eFront como plataforma aislada y enriquecemos su propuesta de valor con las capacidades analíticas de Aladdin.”
«Aladdin ha marcado la pauta en cuanto a tecnología de inversión y gestión de riesgos se refiere y eFront está encantado de unirse al líder del mercado», dijo Tarek Chouman, director ejecutivo de eFront. «La plataforma dinámica y el alcance global de BlackRock nos permitirán ayudar a más clientes con sus necesidades de activos alternativos y mejorar enormemente la propuesta de valor que ofrecemos a nuestros clientes hoy”.
Xavier Robert, socio de Bridgepoint, dijo: “eFront es un negocio de alto crecimiento que, desde su adquisición por Bridgepoint en 2015, ha experimentado un período de transformación significativa para convertirse en el líder del mercado en software para la industria de gestión de activos alternativos. Con su plataforma estratégicamente posicionada, una cartera de productos líder y un equipo de gestión de alta calidad, el negocio ahora está preparado para un mayor crecimiento bajo la propiedad de BlackRock. «
Una vez completado el proceso de notificación y consulta con el sindicato de trabajadores de eFront, tal y como lo exige la ley, se espera que BlackRock y los accionistas de eFront celebren un acuerdo de venta de acciones definitivo contemplado en el acuerdo exclusivo. El cierre de la transacción estará sujeto a la firma del acuerdo de venta de acciones definitivo y al cumplimiento de las condiciones establecidas en el mismo. La operación de compra de eFront se financiará con una combinación de liquidez corporativa existente y deuda. Si bien se diluyen mínimamente las ganancias por acción, la transacción no será dilutiva en términos de efectivo.
En los últimos años Aladdin ha registrado un importante crecimiento en Latinoamérica. BlackRock nombró recientemente a Álvaro Setein para la expansión de Aladdin en la región y a Roque Calleja para liderar su plataforma de activos alternativos. Aparte de la adquisición de eFront, el 20 de marzo de 2019, BlackRock firmó un acuerdo para recomprar aproximadamente 3,1 millones de sus acciones a un precio por acción de 412,84 dólares en una transacción privada en virtud de su programa de recompra existente. Se espera que la transacción de recompra de acciones se cierre el 25 de marzo, sujeto a las condiciones de cierre habituales. A partir del 25 de marzo, BlackRock habrá recomprado un total de aproximadamente 1.600 mil millones de sus acciones en 2019 y habrá completado su nivel objetivo de recompra de acciones para el año, pero seguirá siendo oportunista en caso de que surjan oportunidades relativas de valoración.
BNP Paribas Asset Management ha decidido reforzar su compromiso con la inversión sostenible lanzando una estrategia global de sostenibilidad para toda la compañía. De este modo, da un paso más en su contribución hacia un futuro sostenible en consonancia con su objetivo de ofrecer una rentabilidad sostenible a largo plazo para sus clientes.
«Esta estrategia presenta el planteamiento de BNP Paribas AM en relación con la inversión sostenible y establece objetivos y compromisos claros», ha señalado la gestora. Se centra en tres áreas en materia de sostenibilidad: la transición energética, el medio ambiente y la igualdad. Además, refuerza el compromiso de BNP Paribas AM de invertir a largo plazo y de mantener un diálogo con empresas, organismos y reguladores para promover las mejores prácticas, además de fomentar la concienciación sobre el papel que pueden desempeñar las finanzas a la hora de lograr un mundo sostenible.
Además, la estarategia se basa en cuatro componentes de la inversión sostenible, cada uno de los cuales cuenta con un programa de implantación perfectamente definido. «Estos programas de forma colectiva potencian el modo en que BNP Paribas AM invierte y ofrece resultados a largo plazo, así como la forma en que se generan las ideas de inversión, se gestiona el riesgo y ejerce su influencia en otras compañías y mercados», añade la gestora.
Integración de criterios ESG
BNP Paribas AM integrará los factores ESG en su proceso de inversión incluyendo: filosofía de inversión, análisis y generación de ideas, así como el lanzamiento de nuevos fondos, gestión de riesgos, compromisos, votaciones, divulgación y presentación de informes. Esta integración se guía por las Pautas de Integración ESG, desarrolladas en 2018, y está supervisado por el Comité de Validación ESG, constituido en el mismo año. El objetivo es que, en 2020, todos los procesos de inversión (y, por definición, todas las estrategias de inversión) sean revisados y aprobados por este Comité.
Corresponsabilidad
Según argumenta la gestora, BNP Paribas AM es un propietario activo y un inversor diligente en las compañías en las que opera, y lleva ya muchos años aplicando unas directrices de voto sólidas y detalladas en torno a un amplio abanico de temas ESG. Gracias a esta Estrategia, podrá mejorar su enfoque en materia de corresponsabilidad, desde el compromiso con las compañías en las que invierte hasta una implicación activa con los legisladores, organismos reguladores y grupos sectoriales en temas tales como el clima y el capital natural. BNP Paribas AM está representada en el Grupo de Expertos Técnicos (“GET”) en Finanzas Sostenibles de la Comisión Europea, en el Grupo de Trabajo sobre Divulgaciones Financieras relacionadas con el Clima (“TCFD”, por sus siglas en inglés), en el Grupo de Inversores Institucionales Europeos sobre Cambio Climático (“IIGCC”, por sus siglas en inglés) y en otras muchas iniciativas. BNP Paribas AM ha reforzado recientemente sus capacidades en materia de corresponsabilidad con el nombramiento de responsables de este ámbito en las regiones de Asia-Pacífico y América.
Expectativas de conducta comercial responsable y exclusiones basadas en sectores
BNP Paribas AM sigue los principios del Pacto Mundial de la ONU y cuenta con una serie de políticas sectoriales que establecen las condiciones que han de cumplirse para poder invertir en sectores concretos, además de servir como guía para los requisitos de control y compromiso. Las políticas sectoriales se aplican a todos los fondos de inversión. Un ejemplo de ello es la recientemente publicada política de exclusión más estricta a las empresas de minería de carbón térmico y de generación de electricidad a partir del carbón.
Perspectiva de futuro, las “3 E”
BNP Paribas AM ha desarrollado una serie de objetivos y de indicadores clave de rendimiento (KPI, por sus siglas en inglés) en relación con las denominadas “3 E” (environment, equality, energy). Dichos KPI analizarán cómo ajustarán su análisis, sus fondos y sus compromisos corporativos y regulatorios para apoyarlos. Los KPI incluyen la intensidad en carbono (gCO2/kWh) de sus inversiones con respecto del escenario de desarrollo sostenible de la AIE y una cuota ecológica de los activos bajo gestión (transición energética, Objetivos de Desarrollo Sostenible –ODS- 7, 9 y 13). Asimismo, también incluyen la huella hídrica de sus fondos, número de compañías comprometidas/que cuentan con políticas de No deforestación, no destrucción de turberas, no explotación (NDPE, por sus siglas en inglés) (sostenibilidad medioambiental, ODS 6, 15). Finalmente, también cuentan con un porcentaje de consejeras delegadas o número de compromisos para promover unas decisiones de asignación de capital corporativo más sostenibles (igualdad y crecimiento inclusivo, ODS 5, 8 y 10).
BNP Paribas AM ha creado una hoja de ruta con los compromisos necesarios para implantar esta estrategia durante los tres próximos años. En 2020, BNP Paribas AM presentará valoraciones e informes sobre el impacto y la evolución de sus iniciativas de sostenibilidad e irá introduciendo objetivos adicionales en consonancia con una de las “3 E” y los Objetivos de Desarrollo Sostenible de la ONU en concreto.
El compromiso con la sostenibilidad de BNP Paribas AM no es nuevo: la entidad lleva siendo un actor importante en el ámbito de la inversión sostenible desde 2002, cuando lanzó su primer fondo de inversión socialmente responsable. Los PRI (Principios de Inversión Responsable) le han concedido una calificación de A+, la más alta posible, de forma consecutiva durante los tres últimos años, lo que muestra su firme compromiso con la sostenibilidad.
Además, el enfoque de BNP Paribas AM está en plena consonancia con el liderazgo del Grupo en finanzas sostenibles. El Grupo BNP Paribas pretende, en concreto, financiar la economía de una manera ética, promover el desarrollo de sus empleados, apoyar iniciativas con impacto social y desempeñar un papel importante en la transición hacia una economía baja en carbono y, por lo tanto, quiere ser un importante contribuyente a los Objetivos de Desarrollo Sostenible de la ONU.
“Nos encontramos en una encrucijada: es ahora cuando la comunidad financiera debe emprender acciones decisivas y colaborar activamente para alcanzar el futuro sostenible que necesitamos, según se detalla en el Acuerdo de París y los Objetivos de Desarrollo Sostenible. BNP Paribas AM se enorgullece de asumir este reto: creemos que redunda en el interés de nuestros clientes y es básico para nuestra responsabilidad fiduciaria», señala Frédéric Janbon, consejero delegado de BNP Paribas Asset Management.
«La Estrategia Global de Sostenibilidad y las inversiones relacionadas en nuestro equipo y nuestros sistemas es una muestra de nuestra creciente ambición y revela el proyecto de integrar la sostenibilidad en todo lo que hacemos, ya sea en nuestros procesos de inversión o en nuestros compromisos con empresas, legisladores, nuestro personal y la sociedad en su conjunto. Este es un aspecto básico de nuestra estrategia corporativa y de nuestra capacidad para ofrecer una rentabilidad sostenible a largo plazo para nuestros clientes», añade Janbon.
«Como gestores, tenemos la posibilidad de ayudar a influir en el mundo que nos rodea y de adoptar un papel de ‘creadores del futuro’. Con nuestra Estrategia Global de Sostenibilidad, pretendemos establecer el estándar de liderazgo en inversión sostenible. Además de ayudarnos a articular y comunicar nuestro enfoque y visión de inversión sostenible, estamos definiendo unos objetivos y metas claros que podamos utilizar para cuantificar el éxito y nuestro impacto con respecto a nuestros clientes y la economía en su conjunto. Me siento orgullosa de que BNP Paribas AM haya lanzado una estrategia tan ambiciosa como esta y espero poder trabajar con nuestros clientes, equipos de inversión y con colegas del sector para contribuir con nuestra aportación a crear un futuro inclusivo y de bajo consumo de carbono», concluye Helena Viñes, deputy head of Sustainability y head of Research and Policy en BNP Paribas Asset Management.
El líquido elemento es un bien escaso de cuya preservación depende la vida en nuestro planeta y que, a día de hoy, necesitan desesperadamente 2.100 millones de personas en todo el mundo, según un informe publicado recientemente por la UNESCO. Según este informe, el acceso inadecuado a los servicios de agua potable y saneamiento provoca cada año 780.000 muertes por disentería y cólera, mucho más que las víctimas de conflictos, terremotos y epidemias.
“El oro azul se enfrenta a desafíos tan importantes que el Foro Económico Mundial ha clasificado las crisis del agua como uno de los cinco mayores riesgos globales a los que se enfrenta el planeta”, afirma Jean-Philippe Desmartin, director del equipo de inversión responsable de Edmond de Rothschild Asset Management.
Esta organización internacional independiente destaca que “una serie de factores agravantes pueden empujar a más megaciudades hacia el día cero del agua”, incluyendo el crecimiento de la población, la industrialización o la debilidad de las infraestructuras. También denuncia las “políticas polarizadas y cortoplacistas” que ponen en peligro los recursos hídricos.
La escasez de agua se hace evidente si tenemos en cuenta que solo el 1% del agua del planeta potable. Según el Servicio Geológico de Estados Unidos, el agua salada representa el 97% de las reservas totales, mientras que el 2% del agua dulce está congelada en casquetes polares y glaciares.
Este líquido es fundamental para la mayoría de las actividades humanas, ya sea en la agricultura, la industria y las necesidades domésticas e incluso recreativas. Según la Water Footprint Network, se calcula que se utilizan un promedio de 10.000 litros de agua para fabricar un kilo de algodón, mientras que un kilo de carne de vacuno requiere aproximadamente 15.000 litros.
La esperanza se sustenta, según Desmartin, en el progreso tecnológico y el abanico de soluciones potenciales, como el uso de Big Data para gestionar las precipitaciones para un riego más inteligente de los cultivos o los avances bioquímicos que hacen más accesible la desalinización del agua de mar por ósmosis inversa. “Si queremos conservar el oro azul, también tendremos que cambiar nuestros hábitos de consumo y nuestros métodos de producción”, sostiene este experto.
Principales desafíos
El crecimiento de la población mundial, la urbanización o la industrialización de los mercados emergentes son aspectos que tienen un impacto directo en cómo gestionar este recurso esencial. “Si no se gestionan los limitados recursos hídricos del planeta, los costes sociales y económicos serán enormes. La otra cara de la moneda de este escenario es que, si el mundo puede aprovechar sus limitados recursos hídricos, los beneficios para la humanidad serán enormes y se traducirán en un caso de inversión convincente”, explica Álvaro Cabeza, responsable para Iberia de UBS Asset Management.
Desde UBS AM se estima que el mercado mundial del agua tiene actualmente un valor de más de 600.000 millones de dólares anuales. “La mayor categoría, con un 35%, es el tratamiento de aguas residuales, y el 65% restante se atribuye principalmente a la provisión de equipos de agua que suministran los medios para la exploración, distribución y tratamiento del agua”, explica Cabeza.
En este contexto, tendencias como el tratamiento del agua de lastre son nichos de mercado “con perspectivas de crecimiento a largo plazo convincentes, ya que esperamos que la demanda de agua supere la oferta en las próximas décadas, lo que requerirá inversiones adicionales en equipos de agua”. De hecho, esperan que las inversiones temáticas para superar los retos del agua superen el índice MSCI World durante este ciclo económico.
Se trata de una inversión menos cíclica que el sector industrial, pero vinculada a la actividad inversora de las autoridades locales. “A pesar de los ciclos de reinversión actualmente insostenibles en los mercados desarrollados y de aquellos en desarrollo, los organismos de gobierno municipal pueden intentar posponer las inversiones que a día de hoy son tan necesarias”, sostiene Cabeza.
En este contexto, entran en juego las denominadas asociaciones público-privadas, en las que las empresas privadas asumen un cierto grado de riesgo operativo y financiero, al tiempo que se unen al sector público en la prestación de servicios públicos. “Desde la crisis de los mercados financieros, hemos observado una recuperación de las inversiones totales. Sin embargo, la participación del sector privado depende en gran medida de la capacidad de préstamo de los mercados de capitales y de los bancos. Cualquier incertidumbre puede llevar a una reducción de la inversión, por lo que la percibimos como una fuente de riesgo”.
Por último, otro riesgo se deriva de cualquier cambio potencial en las políticas relacionadas con el agua que pueda perjudicar el entorno operativo (regulaciones y tarifas) en regiones como Europa, Estados Unidos o China. Estos cambios pueden afectar, en particular, al sector de los servicios de suministro de agua, que depende en gran medida de la acción política. Los proveedores de equipos también se verían perjudicados indirectamente si las empresas de servicios públicos redujeran sus respectivas inversiones en infraestructura debido a la falta de rentabilidad.
En opinión de Amanda O ‘Toole, gestora del fondo AXA Framlington Global Thematics de AXA IM, las numerosas tecnologías disponibles que respaldan este impulso para proteger los recursos hídricos, reducir el consumo de agua y aumentar su reutilización están “creando muchas oportunidades de inversión a medida que las empresas responden a la necesidad de cambio y ofrecen tecnologías más sostenibles a sus clientes”.
La presión de los consumidores
La acción de los consumidores también se está convirtiendo en un elemento clave, como señala Nina Lagron, CFA y gestora senior de La Française AM. “Para tener contento a un creciente contingente de consumidores y de inversores cada vez más conscientes de las iniciativas ESG, resulta clave el ofrecer resultados tangibles en cuanto a reducción de costes y del riesgo climático, además de la búsqueda de la sostenibilidad de la cadena de suministro”.
Lagron destaca que, cada vez más, los consumidores quieren comprar productos para minimizar su huella ambiental, a menudo dando prioridad a las empresas que tienen una oferta más sostenible. Por su parte, los inversores buscan maximizar el impacto positivo a través de la asignación de activos en sus fondos. “La iniciativa puesta en marcha por Walmart para que sus principales proveedores de uva reduzcan el uso de agua y de fertilizantes es un buen ejemplo de cómo este minorista líder ha aprovechado sus conocimientos en su amplia base de proveedores para generar un impacto positivo”, señala esta gestora.
Esta práctica agrícola inteligente con respecto al agua también ha permitido al proveedor aumentar los rendimientos entre un 10 y un 15% y, por lo tanto, aumentar su propia rentabilidad. “Este es solo un ejemplo de cómo las iniciativas ESG pueden dar paso a situaciones en las que todos salen ganando, en las que la reducción de la huella medioambiental se traduce en una reducción de costes y una mayor rentabilidad en toda la cadena de valor”, concluye Lagron.
Charlie Awdry, gestor de estrategia de renta variable de Janus Henderson Investors, analiza las implicaciones del incremento de la ponderación de las acciones de clase A de las bolsas chinas en los índices de renta variable MSCI y cómo debería llevar a una mayor participación extranjera en los mercados de acciones de China en el futuro.
¿Cuál es la noticia?
El proveedor de índices MSCI anunció el 28 de febrero de 2019 que incrementaría la ponderación de las acciones clase A de las bolsas de China (de las acciones cotizadas en las bolsas de Shanghai y Shenzhen) en sus índices, cuadriplicando el factor de inclusión desde un 5% a un 20% a partir de noviembre 2019.
Como resultado, habrá 253 acciones clase A de empresas chinas de gran capitalización y otras 168 de mediana capitalización en el índice MSCI Emerging Markets, lo que incrementa su ponderación en el índice de un 0,7% a un 3,3%. Esto se suma a las ponderaciones existentes en China en el índice de las acciones H cotizadas en la bolsa de Hong Kong y los Certificados de Depósito Americanos (ADRs). En el caso de una inclusión total (factor de inclusión del 100%), las acciones A de China solo representarían el 16,3% del índice MSCI Emerging Markets según los niveles de capitalización bursátiles actuales, lo que significa que las acciones chinas en conjunto podrían exceder el 40%.
Las acciones cotizadas en el índice ChiNext que se centra en acciones tecnológicas, al estilo del índice Nasdaq sobre la bolsa de Shenzhen, también será incluido en los índices a partir de mayo de 2019.
¿Por qué es importante?
Como se señala a continuación, en Janus Henderson esperan que la medida impulse un cambio positivo adicional para el mercado de renta variable de China y para las empresas chinas, resultando en una mayor inversión por parte de los inversores globales.
Una mejora en el acceso
Este movimiento es la confirmación que la introducción de acciones A en los índices MSCI del año pasado ha sido positiva y que este acceso está mejorando para los inversores extranjeros. Esto se debe principalmente al exitoso despliegue de las acciones clase A en el esquema “Stock Connect”, que facilita el acceso mutuo al mercado entre la China continental y Hong Kong. El mecanismo ha demostrado ser resiliente y flexible, abordando muchas de las preocupaciones que el índice MSCI tenía sobre el mercado de acciones clase A de China, con los estándares de accesibilidad del mercado internacional.
Impulsando la credibilidad de China
La decisión de MSCI refleja una reforma más profunda del país, a medida que el gobierno intensifica sus esfuerzos por integrar los mercados de capital de China en el sistema financiero global. La economía global continúa desacelerándose, con la orientación de la Asamblea Popular Nacional de China apuntando a un crecimiento de entre un 6% y un 6,5% del crecimiento del PIB, por debajo del 6,5% del año pasado. Pero las políticas formuladas por el gobierno han dado un giro a favor del crecimiento en este año, con unos planes específicos para impulsar el gasto, recortar los impuestos y abrir el acceso de los inversores extranjeros a sus mercados.
Esto, junto con un aparente debilitamiento en la postura de los Estados Unidos con respecto a los aranceles comerciales impuestos a China, ha dado lugar a un fuerte repunte en el mercado de acciones clase A de este año, aunque desde una base baja después de la caída del año pasado. El rally refleja la naturaleza emocional del mercado de acciones clase A, que está dominado por inversores domésticos “emocionales”. Es esta volatilidad la que puede hacer que el mercado de acciones tipo A sea particularmente difícil de navegar. Sin embargo, dado a su gran tamaño y profundidad, a menudo es el lugar donde los gestores activos pueden descubrir las mejores oportunidades.
Al contrario que los inversores domésticos, los inversores extranjeros suelen tener un horizonte temporal más a largo plazo y un enfoque basado en los fundamentales, prefiriendo un sub-conjunto de empresas de alta calidad dentro de estos mercados. Con el incremento de la actividad institucional que una mayor ponderación en el índice probablemente traerá, en Janus Henderson esperan que algunas de estas acciones vuelvan a ser calificadas y que se negocien de manera diferente al resto de los mercados de acciones clase A con el tiempo y que las ineficiencias en los precios se corrijan a medida que la base de accionistas se vuelve más estable. Una mayor atención y una mayor participación por parte de los inversores institucionales extranjeros en los mercados de acciones domésticos de China deberían ayudar a estos mercados a madurar, mejorando el conocimiento y la compresión mutua mientras que debería permitir a los emisores de acciones chinas mejorar su gobierno corporativo.
Un diverso conjunto de oportunidades
El mercado de acciones clase A es complejo y dinámico. Con más de 3.000 empresas cotizadas, es uno de los mercados más grandes del mundo y continúa creciendo rápidamente. Es probable que las reformas se traduzcan en un número aún mayor de ofertas públicas de adquisición (salidas a bolsa, IPOs) en los próximos años.
El equipo de Janus Henderson tiene por objetivo descubrir las mejores oportunidades en todo el mercado bursátil chino, invirtiendo en acciones domésticas A y B, así como en acciones extranjeras cotizadas en la bolsa de Hong Kong y acciones ADRs cotizadas en la bolsa de Nueva York. La gestora utiliza ya la plataforma Stock Connect, con aproximadamente un 15% de las estrategias invertidas en la actualidad en acciones clase A. También tienen más de un 5% invertido directamente en el índice de la bolsa de Hong Kong, que debería ser el beneficiario principal del incremento de la afluencia en la plataforma Stock Connect.
Los mercados de renta variable de la China continental se están abriendo a los inversores extranjeros, inversiones que no eran posibles hace unos años son ahora posibles. En Janus Henderson creen que el incremento de la importancia de China en la escena global de inversión debería ser un fuerte impulsor para que los inversores vuelvan a evaluar su posición y consideren una asignación separada a un gestor de inversiones especializado en renta variable china, al margen de su asignación en mercados emergentes o Asia. Un enfoque especializado a la hora de invertir en China puede ofrecer una exposición mucho más amplia y profunda a las empresas dinámicas de China.
*Factor de inclusión del índice: MSCI utiliza el factor de inclusión estándar del índice como parte de sus cálculos para determinar el peso de un valor en el índice. Por ejemplo, con un factor de inclusión del 20%, la ponderación de cada acción en el índice será del 20% de su capitalización de mercado disponible de flotación libre, ajustada por cualquier límite aplicable a la propiedad extranjera de acciones.
Información importante
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Las rentabilidades pasadas no son garantía de rentabilidades futuras. El valor de las inversiones y las rentas derivadas de las mismas pueden disminuir o aumentar y es posible que los inversores no recuperen la cantidad invertida en un principio.
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Merian Global Investors (MGI) ha anunciado el ascenso de Dominik Issler a jefe de distribución de EMEA. Desde este cargo, de reciente creación, Issler será el responsable para toda la región EMEA, pero con especial atención al desarrollo del negocio en Europa.
Según ha explicado la gestora, este nombramiento refleja el compromiso que tienen por la región europea, tras haber abierto la su primera oficina en Zurich en 2015. Desde hace cuatro años, la firma ha ido ampliando su presencia en Europa mediante la contratación de ventas especializados en cada una de las regiones y con la apertura de una nueva oficina en Milán.
Desde su nuevo puesto de trabajo, Issler trabajará con los responsables de ventas regionales para impulsar el crecimiento y el reconocimiento de la marca en los mercados elegidos por MGI, principalmente en los mercados de Iberia, Francia, Benelux, DACH (mercado grecoparlante), Italia y los países nórdicos.
Entres sus responsabilidades también estará seguir supervisando la distribución en las regiones de habla alemana, por lo que trabajará junto con Benjamin Huegli que se unió a la firma en 2017. Issler, quien continuará con sede en Zurich, informará al director general de distribución, Warren Tonkinson, y se unirá al comité de distribución de la empresa con efecto inmediato.
“En los últimos años, nuestra presencia en Europa ha crecido de forma significativa impulsada por nuestra reputación como gestora innovadora y diferenciada por los alto servicio que damos al cliente. Estoy dispuesto a capitalizar el crecimiento que ya hemos visto en toda la región, trabajar con los responsables regionales individualmente para aumentar nuestra visibilidad después del cambio de marca y ampliar nuestra base de clientes. Estoy orgulloso de lo que hemos logrado en Suiza, Alemania y Austria desde que establecí la oficina en 2015, y mi compromiso con nuestros clientes en estos mercados sigue siendo tan sólido como siempre. Con el equipo en Zurich, Benjamin y yo esperamos ampliar aún más nuestra red de distribución a lo largo del tiempo”, ha destacado Issler a raíz de su nombramiento.
Por su parte, Warren Tonkinson, director general de distribución de Merian Global Investors, ha señalado que “estoy encantado de que Dominik haya aceptado el puesto de jefe de distribución de EMEA. Tiene una gran experiencia y ha gestionado hábilmente nuestra expansión en los mercados de habla germana en los últimos años, aumentando significativamente los activos bajo gestión y diversificando nuestra base de clientes. Confío en que él, junto con el equipo más amplio, realizará nuestros ambiciosos planes de crecimiento para la región».
Ayer se cumplieron las expectativas y finalmente la Unión Europea aceptó dar una prórroga al Reino Unido, hasta el 22 de mayo, para que su primera ministra, Theresa May, logre aprobar el acuerdo de salida de la Unión Europea, quedando exenta de participar en las próximas elecciones europeas, previstas para el 26 de mayo. Según los expertos esta ampliación arroja poca luz sobre cómo se resolverá el problema y añade más presión sobre Londres.
Por otro lado añade más incertidumbre a los mercados, quienes habían confiado en dejar atrás la opción de un Brexit duro, que ahora parece volver a ganar opciones como uno de los escenarios finales. También aumenta la incertidumbre económica. “El contexto de Brexit hace que sea muy difícil para el Banco de Inglaterra pueda decidir sobre futuras proyecciones económicas y su política monetaria, que considera necesita un ajuste adicional. En cambio, la institución monetaria prefiere esperar al desenlace del Brexit por si fuera demasiado pronto para una subida de tipos”, apuntan los analistas de ING.
Desde Legg Mason se muestran más optimistas y destacan que sea cual sea el desenlace de este proceso, el Reino Unido lo afronta con una economía estable. Según explica el equipo de renta fija de Legg Mason, “la economía del Reino Unido parece resiliente, aunque algo inestable. Con una tasa de desempleo en su mínimo en los últimos 40 años, poco más del 4%, y una inflación del 1,8%, la economía británica navega políticamente hacia aguas desconocidas, pero parece estar bien aprovisionada para este viaje. El PIB ajustado a la inflación creció a una tasa anualizada de 1,3% en el cuarto trimestre de 2018, marcando una leve desaceleración. Sin embargo, por el momento, está superando el crecimiento del resto de la Unión Europea”.
Aún así, los analistas no pierden ojo a los datos macroeconómicos del país. Por ejemplo desde Groupama AM destaca que la perspectiva de una caída en los precios inmobiliarios es un riesgo para el crecimiento. “La encuesta RICS de los profesionales inmobiliarios ingleses se está deteriorando de forma lenta pero consistente desde mediados de 2018. En la actualidad, el indicador avanzado sintético sugiere una tendencia internanual negativa en el precio de inmuebles residenciales, lo que se traduciría en una caída de los precios para los próximos meses. Históricamente, el crecimiento de los precios inmobiliarios ha sido un factor importante para el crecimiento, y la estabilidad del mismo, del Reino Unido, pero esta contribución «directa e indirecta» se ha acentuado desde 2013, ya que estimamos que será alrededor de un tercio del crecimiento del PIB. Por el contrario, una caída en los precios de los inmuebles pesará significativamente en el crecimiento económico”, explica Christophe Morel, Economista Jefe de Groupama AM.
Desde Scope Ratings advierten que la economía británica puede aguantar, pero no es invulnerable. “La calificación crediticia del Reino Unido no puede resistir indefinidamente la incertidumbre relacionada con el brexit. Scope estima que el coste económico de este proceso ya es superior al 1% del PIB desde el referéndum de 2016 y sigue aumentando”, afirma Dennis Shen, analista de Scope Ratings.
¿Y ahora qué?
Una de las principales preguntas que se hacen los analistas es para qué ha pedido el Reino Unido. Según los analistas de Renta 4 Banco, la prórroga ha permitido al presidente del Parlamento británico que May apruebe su acuerdo y que los partidarios del Brexit viesen esta tercera y última votación como la última oportunidad de sacar adelante el acuerdo de divorcio. Pero, ¿y ahora qué?
“Reino Unido deberá aclarar a la Unión Europea para qué quiere ese tiempo extra: para llegar a un nuevo acuerdo de divorcio con Europa, cancelar el Brexit, celebrar un segundo referéndum… Recordamos que nuestra postura se alinea con la consecución de una salida negociada, evitando una salida abrupta que sería perjudicial para ambas partes y provocaría importantes daños a nivel macroeconómico y fuerte volatilidad en los mercados”, defienden desde Renta 4 Banco.
En opinión de David Page, economista senior del Reino Unido y responsable del análisis macro de AXA IM, la Unión Europea intentará evitar añadir más incertidumbre e inestabilidad al entorno. “Creemos que la Unión Europea estará dispuesta a evitar los riesgos macroeconómicos asociados con un Brexit sin acuerdo. También creemos que estará dispuesta a evitar la acusación política de que fue la responsable de que el Reino Unido se desplome. Sin embargo, esto está lejos de ser una conclusión inevitable”, sostiene Page. No obstante, Donald Tusk, presidente del Consejo Europeo, ha advertido de que «todas las opciones seguirán abiertas el 12 de abril» si los parlamentarios mantienen su rechazo al texto por tercera vez.
Para bien o para mal, con la firma del TLCAN a principios de la década de los 90, la economía de México se casó con la de EE.UU., siendo este último el miembro dominante en la relación. Si a EE.UU. le iba bien, a México también le iba bien, y si a EE.UU. le iba mal, pues México también tenía que sufrir el mismo destino. Esta simbiosis es muy común en el reino animal: las rémoras con los tiburones, las hienas con los leones, los perros con los humanos.
Pero en la actualidad hay algo que no se siente bien; algo que esta fuera de lugar; algo que está rompiendo la simbiosis (Gráfica 1).
¿Cómo podemos explicar ese desacoplamiento económico que hemos visto los últimos 3 años entre México y EE. UU.? Si bien el crecimiento en EE. UU. puede ser explicado en gran medida por las políticas fiscales de Trump, en México, la guerra comercial y la incertidumbre política actual han desincentivado varios ramos económicos.
En primer lugar, está la inversión. De 1994 a 2016, la inversión fija bruta en el país creció alrededor de 2% al año. Sin embargo, de finales de 2016 (elección de Trump) a mediados de 2018 (elección de AMLO) tuvo un crecimiento prácticamente nulo, y de mediados de 2018 a finales de año tuvo un decrecimiento de 11% en términos anualizados. Sin tomar en cuenta los periodos de crisis y recesión (que para este lapso serían 1994-1995, 2000-2001 y 2008-2009), nunca se había visto una baja tan marcada en la inversión fija bruta en un periodo no-recesivo.
En segundo lugar, están los flujos de capital. Cada vez que había apetito por los mercados emergentes (ME), México era un claro beneficiario (Gráfica 2). De hecho, la correlación entre los flujos a México y a ME antes de 2017 era de casi 60%. Sin embargo, desde la elección de Trump, los flujos a México parecen haberse detenido, a pesar de que siguió habiendo apetito hacia ME. De la misma forma, la correlación entre los flujos bajó del 60% histórico, a tan solo 22%. En tercer lugar, están, de manera más reciente, los factores internos.
Formación bruta de capital pública y privada: En los últimos 10 años, la formación bruta de capital privado ha crecido a una tasa de 2.6%. Sin embargo, los últimos 3 años (desde la elección de Trump), el crecimiento ha sido nulo. Por otro lado, los últimos 10 años, la formación bruta de capital público ha decrecido 5% en términos anuales.
Curva de aprendizaje del nuevo gobierno: Es normal que el primer año de gobierno sea lento en término de gastos y, por lo tanto, en término de crecimiento económico. El efecto en 2019 es probable que sea más acentuado, ya que la mayor parte de los altos mandos no tienen experiencia en la burocracia mexicana.
Pemex como una carga para el crecimiento: Si bien Pemex es una empresa importante para el presupuesto nacional, representa apenas el 3% del PIB mexicano. Pemex es una empresa altamente endeudada, poco productiva y con una necesidad de capitalización importante. Conforme el gobierno siga desembolsando recursos para apoyarla, las finanzas públicas se deteriorarán, y esto hará que la economía se ralentice.
Un mal manejo de la fuerza laboral: Con los recientes aumentos en los salarios mínimos, muchos sindicatos y fuerzas laborales se han visto empoderados, y han pedido mayores recursos al gobierno y a la iniciativa privada. Lo anterior ha desembocado en paros y huelgas. Es interesante mencionar que, en los 3 meses del actual gobierno, ha habido alrededor de 45 huelgas relacionadas a la industria, cifra muy superior a las 13 huelgas industriales que hubo en todo el sexenio de Enrique Peña Nieto (Gráfica 3). Asimismo, hay que recordar que el sector industrial y manufacturero representan alrededor del 16% del PIB mexicano, por lo que una paralización en parte de este sector podría influir negativamente el crecimiento económico.
Si bien el consumo privado ha sido el motor de la economía los últimos años, es un motor que apuntala el crecimiento de corto plazo. Una vez que el consumo se desincentiva, la economía decrece. Por otro lado, lo que ha caído ha sido la inversión, la cual apuntala el crecimiento de largo plazo. Desincentivar la inversión no tiene efectos muy visibles en el corto plazo, pero si en el largo plazo, es por ello que el estancamiento en inversión observado a partir de la elección de Trump y el empeoramiento observado a partir de la elección de AMLO nos esta empezando a pasar factura. Basta ver los últimos números del IGAE (Gráfica 4). En estos se nota que la economía se empezó a enfriar a partir de finales de 2016, y en su última observación, se ve que el IGAE cae de manera importante. Hay que recordar que el IGAE sirve como un indicador adelantado del crecimiento económico, por lo que ver números de crecimiento económico bajo, o incluso negativos, los próximos trimestres no debería sorprender a nadie.
En este sentido, tampoco debería sorprender las constantes bajas de pronóstico de crecimiento, tanto por parte del mercado, como por parte de organismos internacionales y del banco central.
México, por una u otra cuestión, se ha distanciado de su socio comercial más importante. Esto nos ha costado crecimiento, vitalidad y momentum. Si bien EE. UU. parece estar en una parte madura del ciclo, todavía no parece que vaya a existir una desaceleración fuerte este año. Ese impulso es probable que México lo pierda, porque, al final del día, cuando a EE. UU. le va bien, a México le da pulmonía, o ¿cómo era el dicho ese, Dr. Carstens?
Columna de Franklin Templeton escrita por Luis Gonzalí, CFA
Itaú Chile publica su primera “Memoria Integrada y Verificada” que presenta su gestión ambiental, social, económica y de gobiernos corporativos correspondiente al año 2018. De esta manera, se convirtió en el primer banco en Chile en verificar su información de sustentabilidad, alineándose con los estándares internacionales de la industria bancaria.
Esto significa que la información entregada para los indicadores de sustentabilidad fue verificada por la auditora EY, y un panel de expertos constituido por representantes del mundo académico, medios de comunicación especializados y asociaciones de consumidores, revisó en profundidad los principales temas de la Memoria.
La metodología para elaborar el contenido se basó en principios internacionales como el International Integrated Reporting Council (IIRC) y Global Reporting Initiative (GRI), y los temas abordados en el documento fueron vinculados con los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de la Agenda 2030, plan de acción a favor de las personas, el planeta y la prosperidad, adoptado por Chile y todos los países de las Naciones Unidas en 2015.
“Este documento refleja y comunica cómo nuestro banco ha integrado la sustentabilidad en todos sus ámbitos y da cuenta del progreso respecto de los 10 Principios de Pacto Global -iniciativa de Naciones Unidas- de la que el banco es parte. Además, nos da la posibilidad de entregar a nuestros públicos de interés un contexto más claro y preciso, que les permita comprender cómo esta empresa crea y sustenta valor a largo plazo”, afirmó Gabriel Moura, CFO de Itaú.
La Memoria incluye una carta del gerente general de Itaú, Manuel Olivares Rossetti, en la que da cuenta de los principales hitos 2018 para el banco y para la industria bancaria, así como también los desafíos que enfrenta la compañía.
Además, el documento entrega cifras relevantes y destaca que el banco superó los 400 mil clientes y que el promedio mensual de transacciones a través de su sitio web alcanzó a casi 4 millones.
Otros aspectos que reporta el informe son la gestión de clientes y de los capitales financiero, social y relacional, ambiental, manufacturado y humano del banco.