Si hay una conclusión clara que podemos sacar de los últimos grandes movimientos corporativos en la industria de inversión es que el proceso de concentración no ha terminado. Según recoge Reuters, una nueva operación se estaría gestando: la venta de Lyxor, el negocio de gestión de activos de Société Générale.
La publicación indica que Amundi o BNP Paribas estarían estudiando ofertas para adquirir Lyxor, cuyo negocio de gestión de fondos alcanza los 150.000 millones de euros. De hecho, se aventura a decir que no serían los únicos, sino que firmas como JP Morgan, Street State Corporation o DWS también podrían estar interesadas en una operación de este tipo. Sin embargo, desde Lyxor no dan cabida a este rumor, que definen como “especulaciones”.
Dejando a un lado la rumorología, lo que sí pone de manifiesto este tipo de informaciones es que la industria de gestión de activos continúa su proceso de concentración como respuesta a un entorno con márgenes más estrechos, mayores presiones en sus comisiones y un mayor coste de regulación.
Las propias voces del sector indican que esos tres motivos continuarán fomentando las fusiones entre gestoras en búsqueda de mayor tamaño, mejorar sus capacidades, abrir nuevas líneas de negocios -como la gestión pasiva- o especializarse.
Movimientos corporativos
En este sentido, la última gran operación corporativa a la que hemos asistido ha sido la compra de Legg Mason por parte de Franklin Templeton. El sentido de esta adquisición la explicaba la propia gestora: «Añadirá una diferenciación a nuestras actuales estrategias de inversión con una modesta superposición en diversas filiales de clase mundial, equipos de inversión y canales de distribución, aportando un notable liderazgo y fortaleza extra en la parte de renta fija, renta variable y activos alternativos. También ampliaremos nuestras soluciones multiactivo».
En este caso, la gestora buscaba “diferenciación” y ampliar sus soluciones de inversión, pero no son los únicos argumentos que explican las últimas operaciones que hemos visto. También hemos asistido a movimientos estratégicos, como la compra de Amundi del 49,96% de BNP Paribas AM en Fund Channel. Según explicó la gestora, siempre consideró esta plataforma una actividad estratégica de su negocio de servicios de distribución.
eToro, plataforma de inversión en multiactivos, ha anunciado el lanzamiento de RemoteWork, una cartera automática inteligente que da a los inversores minoristas acceso a una selección de empresas beneficiadas por el auge del teletrabajo. Entre las 25 compañías que conforman la cartera, se encuentran firmas como Apple, Alphabet y Zoom, junto a otros actores enfocados en el mercado empresarial que ofrecen servicios de cobertura al teletrabajo, como la gestión de accesos y la informática en la nube.
“RemoteWork nace en un momento en el que la pandemia está obligando a millones de empleados a trabajar desde sus casas por primera vez, una tendencia que muchos expertos creen que podría convertirse en permanente. Este hecho ha provocado un espectacular aumento de la demanda de servicios digitales, como videoconferencias, aplicaciones de mensajería, gestión de proyectos, gestión de documentos en línea y servicios de seguridad digital”, explican desde eToro.
La inversión mínima en la cartera es de 1.000 dólares y, al igual que el resto de carteras de la firma, cuenta con herramientas y gráficos que permiten a los inversores realizar un seguimiento de la evolución de la cartera, evaluar los riesgos y analizar la asignación de activos.
“El COVID-19 ha sido el principal catalizador del pico que ha experimentado la demanda de soluciones de teletrabajo por parte de las empresas, una tendencia que ha cobrado relevancia durante los últimos años. Muchas empresas se vieron obligadas a mandar a gran parte de sus plantillas a trabajar desde casa en cuestión de semanas y el probable resultado de todo ello sea un cambio duradero en la forma de trabajar, añade Dani Brinker, responsable de carteras de inversión en eToro.
Además, Brinker subraya que esta tendencia podría suponer el comienzo de un paso permanente a patrones de trabajo más flexibles. “El genio ya no puede volver a entrar en la lámpara ahora que hemos demostrado que no es necesario desplazarse a una oficina cinco días a la semana para realizar nuestros trabajos”, asegura.
El proveedor de videoconferencias Zoom comunicó un aumento del 3.300 % interanual en sus beneficios en el segundo trimestre después de que el confinamiento provocara un crecimiento del 458 % en el número de usuarios. Las acciones de la empresa se han revalorizado más de un 713 % desde comienzos de año. “La cartera RemoteWork combina empresas con las que muchas personas a buen seguro estarán trabajando todos los días con otras que están prestando servicios en segundo plano que son esenciales para un futuro en el que el teletrabajo tendrá cada vez más peso”, explica el experto.
Asimismo, Docusign anunció un crecimiento interanual del 45 % en los ingresos en el segundo trimestre después de que el COVID-19 diera lugar a una mayor necesidad de firmar documentos electrónicamente. El confinamiento también ha incrementado el número de marcas que han adoptado estrategias digitales. Shopify, que ofrece las herramientas necesarias para crear una empresa de comercio electrónico, anunció que sus ingresos se habían casi duplicado respecto al año anterior.
La cartera RemoteWork de eToro, que se lanza el 19 de octubre, trata de aprovechar el éxito de estas empresas y exponerse a un sector de rápido crecimiento. “Las ventajas son numerosas tanto para los trabajadores como para las empresas, así como para los negocios que ofrecen servicios que nos permiten trabajar en remoto. Estos deberían experimentar un aumento permanente en la demanda de sus servicios, lo que en la mayor parte de los casos debería traducirse en mayores beneficios. Para los inversores, eso significa que existe toda una nueva área de la economía para invertir que tal vez pasó desapercibida antes de que golpeara la pandemia”, concluye Brinker.
Las economías emergentes que logren que el 100% de las niñas finalicen la educación secundaria en 2030 podrían registrar un aumento del PIB de alrededor de un 10%, según un nuevo estudio elaborado conjuntamente por la entidad financiera Citi y la ONG Plan International.
El informe “Una inversión holística en las niñas – Mejorar vidas, aprovechar el potencial, beneficiar a todos” revela que, en las economías emergentes, invertir diariamente 1,30 euros por cada niña tendría un enorme impacto en el desarrollo económico general de los países. Más de 130 millones de niñas y adolescentes en todo el mundo no iban a clase antes de la crisis de la Covid-19 y más de 11 millones de niñas no volverán nunca a la escuela después de la crisis, según la UNESCO.
Las adolescentes de todo el mundo, pero especialmente las que viven en países con economías en desarrollo, se enfrentan a grandes obstáculos a la hora de acceder y completar una educación de calidad, ser económicamente independientes, participar en el mercado laboral y tener una vida libre de violencia.
“Lo más importante en la salida a esta crisis es que los planes de recuperación contemplen una inversión integral en las niñas, que no sólo se centre en la educación, sino que también aborden las diferentes barreras que impiden su desarrollo, desde el matrimonio infantil hasta la violencia y los embarazos adolescentes, lo que se traduciría en un aumento del PIB, un alto rendimiento de la inversión para los países y en un mundo más justo», explica Concha López, directora general de Plan International.
Los beneficios económicos más importantes se materializarían después de 2030, gracias a los efectos acumulativos, y teniendo en cuenta el impacto que supone la educación de las niñas y adolescentes en las familias y las comunidades.
«El valor especial de la colaboración entre Citi y Plan International reside en la unión del ámbito económico y el social, y al hecho de presentar un argumento sólido de inversión que tiene en cuenta múltiples componentes», explica Andrew Pitt, director global de Investigación de Citi, quien añade: “Acabar con los obstáculos a la educación y el desarrollo de las niñas puede ser la clave para alcanzar muchos de los Objetivos de Desarrollo Sostenible«.
El informe aborda los diversos ámbitos de especialización de Citi Global Insights y Plan International y presenta tres componentes clave. Por un lado, una investigación detallada sobre las complejas barreras que enfrentan las adolescentes, así como un análisis de las intervenciones que se requieren para superarlas. En segundo lugar, un novedoso análisis económico sobre los posibles costos y beneficios económicos que se podrían obtener mediante un conjunto de intervenciones; y, finalmente, recomendaciones sobre cómo los diferentes sectores pueden colaborar para hacer frente de manera efectiva a los obstáculos que están impidiendo el avance de las adolescentes.
Uno de los principales problemas de las investigaciones realizadas lo largo de los años ha sido la falta de datos desagregados de alta calidad. Citi y Plan International se han asociado para hacer frente a esta brecha de datos, creando uno de los conjuntos de datos más completos hasta ahora sobre los beneficios económicos y sociales que tendría invertir en las niñas, adolescentes y jóvenes.
El informe concluye que invertir en el desarrollo de las adolescentes tendrá repercusiones positivas más allá del ODS 5, de igualdad de género y, de hecho, es fundamental para lograr el desarrollo sostenible en todos los ámbitos. La importancia de la educación y el empoderamiento de las niñas está vinculado a varios objetivos de desarrollo sostenible, entre ellos la reducción de los conflictos (ODS 16), el acceso a agua potable y saneamiento (ODS 6) y la acción por el clima (ODS 13).
Las Naciones Unidas están fomentando las colaboraciones entre el sector privado, el sector público, las organizaciones no gubernamentales y las instituciones filantrópicas para cumplir con los Objetivos de Desarrollo Sostenible y esta investigación es un ejemplo de los beneficios que tienen este tipo de colaboraciones interdisciplinarias.
Hemos publicado recientemente nuestro Reporte Macroeconómico Trimestral con la actualización de nuestras perspectivas para las economías andinas (Chile, Colombia y Perú). En esta oportunidad, mantuvimos relativamente inalteradas la mayoría de nuestras proyecciones para los tres países una vez la actividad económica se ha comportado en línea con nuestras expectativas en los últimos meses, en medio de una reducción gradual de la incertidumbre.
En consecuencia, mantenemos nuestro pronóstico de contracción de 6% para la economía chilena este año y un rebote del 5% en 2021, implicando que Chile sería el país con la menor caída en la actividad en 2020 en la región andina. Asimismo, es probable que Chile alcance sus niveles de PIB pre-pandemia antes que el resto de los países latinoamericanos, lo que se explicaría principalmente por la magnitud de las medidas de apoyo a los hogares adoptadas por el gobierno, mejores precios del cobre y, más importante aún, los retiros de fondos de pensiones que alcanzarían los 30 mil millones de dólares si el Congreso aprueba un segundo retiro, lo que consideramos muy probable que ocurra.
Para Colombia, mantenemos también nuestra estimación de una contracción del PIB de 7% para este año y un aumento de 4.8% en 2021. Hasta ahora, creemos que la economía colombiana ha mostrado una relativa resiliencia al choque actual, con nuestra tesis de una ‘diversificación interna’ favorable jugando un papel protagónico. Así, cabe recordar que Bogotá representa solo el 26% del PIB nacional, muy por debajo de otras capitales de la región como Santiago (42%), Lima (44%) y la Provincia de Buenos Aires (~53%). Esto ha sido un factor relevante en medio de la implementación de cuarentenas diferenciadas al interior del país. De hecho, los indicadores lideres recientes sugieren que varias ciudades intermedias se están desempeñando favorablemente, compensando en parte el comportamiento más moderado en las principales ciudades como Bogotá o Medellín debido a su elevado número de casos de Covid-19. El apoyo del gobierno a los hogares también ha influido, pero el paquete fiscal ha sido mucho menor en comparación con lo observado en Chile y Perú.
Finalmente, el PIB de Perú ha registrado una recuperación no despreciable en los últimos meses después de una impresionante contracción del 30% anual durante el segundo trimestre, e incluso ha alcanzado a otros países en términos de su nivel de actividad vs lo observado antes de la crisis. El proceso de reapertura de la economía, un paquete de estímulo superior al 10% del PIB, la reactivación de la inversión pública y el retiro de los fondos de pensiones por aproximadamente 6.000 millones de dólares han explicado la recuperación de la economía. Por lo tanto, esperamos que la economía peruana se contraiga -12.5% este año y crezca un 9% en 2021.
Los riesgos siguen inusualmente altos
No obstante lo anterior, los riesgos sobre la economía siguen siendo inusualmente altos en medio de factores como el comportamiento incierto de la pandemia en los próximos meses, el fuerte deterioro de indicadores sociales -especialmente los del mercado laboral-, y el ruido político presente particularmente en Chile y Perú en medio del proceso constitucional y un nuevo gobierno, respectivamente.
Este ruido e incertidumbre política podrían llevar a aplazamientos en las decisiones de inversión, lo que significaría una recuperación más gradual que lo esperado. Los desarrollos futuros en torno a estos procesos políticos serán un factor clave a monitorear, siendo la posibilidad de nuevas medidas populistas la mayor preocupación en cuanto si bien éstas pueden brindar soporte a la economía en el corto plazo, tienen el potencial de deteriorar los prospectos sobre el crecimiento y las cuentas fiscales en el largo plazo dado los menores niveles de ahorros e inversión.
Como resultado, vemos crecientes riesgos en las cuentas fiscales de las economías andinas en los próximos años, en particular considerando que la estabilización de la deuda pública, la cual se ha incrementado sustancialmente en los tres países, requerirá medidas que apunten a un incremento de los ingresos fiscales permanentes, un desafío difícil en medio del contexto actual. Colombia es el país con los mayores desafíos fiscales con el ministerio de Hacienda reconociendo la necesidad de mayores ingresos permanentes por 2% del PIB para 2022, por lo cual esperamos que se debata una nueva reforma tributaria en el Congreso en el segundo semestre de 2021. Sin embargo, 2% del PIB es una meta ambiciosa bajo las condiciones actuales, por lo que seguimos pensando que la probabilidad de que Colombia pierda el grado de inversión en el segundo semestre de 2021 o 2022 por parte de al menos una agencia calificadora, es alta. Habiendo dicho todo esto, el impacto de un posible recorte en la calificación en el corto plazo sobre los mercados locales sería moderado, pues el evento ya estaría incorporado en buena medida en los precios.
El modelo económico de las economías andinas no está bajo amenaza
Dicho todo lo anterior y, a pesar del ruido político actual, creemos que el modelo económico de las economías andinas no está bajo amenaza. Esta visión está soportada, por ejemplo, en el hecho de que se necesita una mayoría de dos tercios para aprobar cualquier propuesta en la convención constitucional en Chile, así como en la postura conciliadora del nuevo presidente interino del Perú. Por el lado de la política monetaria, se espera que todos los bancos centrales de la región andina mantengan sus tasas de interés en los niveles actuales a lo largo de 2021 dada la gradual recuperación de la economía y una inflación controlada en medio de unos históricos excesos de capacidad, lo que debería limitar la habilidad de las firmas para aumentar precios en los próximos trimestres.
En Chile, estimamos una inflación de 3% para fin de año y 2.8% en dic-21; Colombia debería registrar una inflación de 1.7% este año y 2.5% en 2021; y en Perú vemos una inflación del 1.5% en ambos años. Finalmente, prevemos una apreciación de las tres monedas debido a nuestra expectativa de un debilitamiento gradual del dólar a nivel mundial en medio de la gran expansión de la hoja de balance de la Fed, la búsqueda por retorno ante bajas tasas de interés globalmente y la visión de una menor aversión al riesgo en 2021 explicada por una recuperación de la economía global y la posibilidad de una vacuna. Para diciembre del próximo año, proyectamos que el peso chileno llegará cerca de los 760, el peso colombiano a 3500 y el sol peruano estará en el rango de 3.40-3.45; sin embargo, creemos que se pueden observar niveles más bajos en la tasa de cambio en algún momento del 2021.
Con todo lo anterior en consideración, los riesgos tanto externos como internos siguen siendo inusualmente altos, pero confiamos en que lo peor de la crisis actual ya ha quedado atrás y que el actual modelo económico de los tres países se mantendrá sin cambios con las instituciones económicas permaneciendo fuertes. Esto puede llevar a que Chile, Colombia y Perú se recuperen más rápido que el resto de la región latinoamericana, alcanzando los niveles del PIB previos a la crisis a mediados de 2022.
Las acciones en Estados Unidos subieron este martes y el Dow Jones alcanzó un récord luego de que el presidente Donald Trump autorizó el paso formal para la transición del gobierno del mandatario electo Joe Biden a la Casa Blanca, poniendo fin a semanas de incertidumbre política.
Los 11 índices principales del S&P operaban con ganancias, en un avance liderado por sectores económicamente sensibles como los bancos, industria y energía, informó la agencia Reuters.
Por otro lado, el impulso en el Dow Jones se daba tras un un aumento del 4,9% en Boeing después de que reguladores europeos dieran la aprobación preliminar a sus aviones 737 MAX, allanando el camino para una autorización de vuelo formal en enero.
Además, la decisión de Biden sobre una posible nominación de la expresidenta de la Fed, Janet Yellen, como secretaria del Tesoro, que podría cambiar el enfoque hacia los esfuerzos para abordar la creciente desigualdad económica, empujaron al alza al mercado.
En la misma línea, el analista de la plataforma eToro, Adam Vettese, aseguró que “Las bolsas mundiales suben debido a las nuevas noticias sobre vacunas y al indicio de que el presidente saliente Trump facilitará una transición de podersin problemas, lo cual aviva el rally actual”.
En cuanto al anuncio de Trump, “la noticia ayudó a calmar los temores sobre la posibilidad de un traspaso de poderes agitado al presidente entrante Joe Biden”, agregó el experto.
Por otro lado, el anuncio de la universidad de Oxford y el laboratorio AstraZeneca acerca de que su vacuna contra el COVID-19 alcanzaría una efectividad del 90%, también empujó a los mercados.
Lo importante de este anuncio es, fundamentalmente, que la vacuna de AstraZeneca se puede almacenar a temperatura de refrigerador, en lugar de requerir el almacenamiento en frío extremo que representa un desafío logístico para las vacunas Pfizer y Moderna.
Por último, el anuncio de la vacuna generó una depreciación del dólar, ya que el optimismo por atacar a la pandemia provocó que los inversores se inclinaran más por los activos de riesgo. .
JPMorgan Chase acordó este martes pagar una multa de 250 millones de dólares después de que la OCC (Office of the Comptroller of the Currency), del Departamento del Tesoro descubriera un «patrón de mala conducta» en su división de gestión de activos y patrimonio.
La OCC dijo en un comunicado que los controles de gestión de riesgos del banco con sede en Nueva York eran «deficientes» y que la empresa no podía evitar «conflictos de intereses» en el negocio y lo obliga a pagar la multa.
“El Banco deberá efectuar el pago de una multa civil en dinero por el monto total de doscientos cincuenta millones de dólares, los cuales serán pagados a la ejecución de esta orden”, dice el documento.
“Durante varios años, el banco mantuvo un marco de gestión y control débil para sus actividades fiduciarias y tenía un programa de auditoría insuficiente y controles internos inadecuados sobre esas actividades”, agrega la orden de consentimiento.
Si bien en la orden no se mencionaba que las acciones de las filiales hubieran causado daños financieros a sus clientes, la compañía no admitió ni negó las acusaciones.
Por otro lado, la OCC aclaró que JPMorgan ya solucionó las deficiencias que provocaron la sanción.
«Estamos comprometidos a ofrecer los mejores controles en su clase en todo nuestro negocio, y hemos invertido significativamente y mejorado nuestra plataforma de controles durante los últimos años para abordar los problemas identificados», dijo un portavoz del banco, consigna CNBC.
Esta es la la segunda vez en dos meses que el banco acuerda pagar a los reguladores estadounidenses como sanción por cómo realiza sus negocios.
A fines de septiembre, JPMorgan acordó pagar 920 millones de dólares para resolver las investigaciones de tres agencias federales sobre su papel en la manipulación de los mercados globales de metales y bonos del Tesoro de Estados Unidos, indica la cadena televisiva.
En la evaluación anual sobre criterios medioambientales, sociales y de gobernanza corporativa (ESG) del Global Real Estate Sustainability Benchmark (GRESB), Credit Suisse Asset Management superó al mercado en las 14 soluciones inmobiliarias participantes, por lo que será distinguido como «líder del sector mundial» y «líder del sector europeo» en la categoría de inmuebles ya existentes y en la de promociones inmobiliarias.
Desde Credit Suisse Asset Management Global Real Estate explican que se proponen integrar los criterios ESG en sus soluciones de inversión inmobiliaria en toda la cadena de valor y en todo el ciclo de vida de las propiedades inmobiliarias. Asimismo, busca la neutralidad en emisiones de carbono de su cartera inmobiliaria mediante una descarbonización activa y la reducción sistemática de emisiones de CO2 que afectan al clima. «Los resultados actuales del índice de referencia GRESB ESG confirman la posición de liderazgo en el mercado de activos inmobiliarios mundiales en todas las clases de activos en el área de ESG», señalan desde la firma.
En este sentido, explican que la evaluación y optimización sistemáticas de los resultados en materia de sostenibilidad son componentes esenciales de su estrategia de sostenibilidad. En consecuencia, 14 vehículos de inversión inmobiliaria del segmento core/core plus (abiertos), que totalizan unos 33.000 millones de francos suizos, han participado en el test de comparación ESG del índice de referencia de sostenibilidad de activos inmobiliarios mundiales (GRESB).
Tomás Espinosa ha sido nombrado gerente de Multifamily Office de Fynsa, tras el anuncio de la alianza de Fynsa y EFG. Espinosa, ya estuvo vinculado a EFG Bank en el pasado, habiéndose desempeñado como gerente de Inversiones y Distribución de EFG Bank, desde noviembre de 2015 a noviembre de 2019, cargo que dejó para fundar TeoAnalytics.
Espinosa, ingeniero comercial de la Universidad Católica de Chile y MBA en UCLA, cuenta con una amplia experiencia en la industria financiera y de asset management chilena. Durante más de 20 años ha ocupado cargos de responsabilidad en distintos tipos de entidades financieras, nacionales e internacionales, entre las que, además de su cargo en EFG Bank, destacan: Regional Manager para Latam en Allfunds bank desde agosto de 2010 hasta enero de 2013, Regional Manager de Amundi Pioneer entre el 2004 y 2007 y Portfolio Manager de AFP Cuprum entre los años 2002 y 2004.
En un importante paso para el mercado de inversiones, FYNSA acordó una alianza con el equipo de EFG Chile, que pasó a ser parte del grupo FYNSA, reforzando su liderazgo como boutique financiera y de inversiones en Chile y Perú.
La asociación con el equipo en Chile de EFG combina la solidez y calidad de servicio de FYNSA con las capacidades internacionales y productos del grupo suizo EFG.
Los criterios ESG están pasado de ser un tema de inversión a una estrategia, mientras los inversiones se siguen interrogando sobre cuáles son las mejores formas de participar en este movimiento global. Para saber cómo los inversores minoristas e institucionales en otras partes del mundo están integrando ESG en sus programas, DWS abre un debate sobre inversión responsable.
El 2 de diciembre de 2020 a las 10:30 am ET, los especialistas de DWS serán los protagonistas de un nuevo Virtual Investment Summit organizado por Funds Society. Durante el cuentro se brindará información sobre qué están haciendo los inversores a nivel global y por qué se están agregando los factores ESG como parte del proceso de asignación de activos.
La presentación correrá a cargo de Robert Bush, Research Institute-Americas de DWS, y de Steffen Kutcher, Specialist-Investment & ESG Advisory.
Robert Bush es director de DWS Research, instituto donde se centra en la investigación de inversiones estratégicas. Antes de unirse, fue profesor asistente en Columbia Business School. Trabajó como economista en el Tesoro del Reino Unido y también tiene experiencia como operador de bonos, materias primas y acciones. Ha publicado en el Journal of Investing, Journal of Index Investing y, próximamente, en el Journal of ESG and Impact Investing.
Bush tiene una Licenciatura en Clásicos de University College London; Diplomado en Contabilidad y Finanzas de la London School of Economics; MBA en Finanzas y Economía de Columbia Business School; Maestría en Estadística Aplicada de la Universidad de Oxford; Certificado de gestión de inversiones (IMC); Gerente de Riesgo Financiero (FRM); Analista de gestión de inversiones certificado (CIMA)
Steffen Kutscher es responsable de análisis y soluciones de inversión ESG. En estrecha colaboración con los inversores, les ayuda a establecer sus políticas y objetivos ESG individuales, los traduce en su asignación de activos y diseña soluciones a medida para todas las clases de activos. Como reflejo de la naturaleza cambiante de las políticas de ESG y los requisitos regulatorios, apoya continuamente a los inversores en la adaptación y mejora de su estrategia de ESG a través de actualizaciones y conocimientos sobre cambios regulatorios, temas de ESG y calificaciones y señales de ESG disponibles.
Antes de su puesto actual, Kutscher formó parte del equipo de Soluciones para clientes. Diseñó soluciones de inversión a medida que incluyen ALM, asignación estratégica de activos, gestión de riesgos, estrategias estructuradas y cuantitativas. Se unió a DWS en 2012 trabajando en el equipo de Overlay, estructurando riesgos y overlay tácticos para clientes institucionales. Tiene licenciaturas en matemáticas y economía.
La Secretaria Ejecutiva de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL) de las Naciones Unidas, Alicia Bárcena, ha hecho un llamamiento a redoblar los esfuerzos para generar en la región nuevos pactos y coaliciones que permitan reconstruir mejor tras la crisis del coronavirus y transformar nuestras sociedades con igualdad y sostenibilidad.
Así lo ha asegurado durante un seminario virtual de alto nivel organizado por la Pontificia Comisión para América Latina (CAL), la Pontificia Academia de Ciencias Sociales (PASS), del Vaticano, y el Consejo Episcopal Latinoamericano (CELAM).
“En la CEPAL estamos convencidos de que, si se construyen las coaliciones y se alcanzan los pactos necesarios, recuperando la política como instrumento, con liderazgos transformadores que sepan escuchar y examinar errores y modificar conductas, se podrá lograr un cambio en el estilo de desarrollo que la actual coyuntura nos exige”, subrayó la alta funcionaria de la ONU en el webinar América Latina: Iglesia, Papa Francisco y escenarios de la pandemia, que contó con la participación especial del Papa Francisco mediante un mensaje por video.
La primera jornada del evento, que se prolongó hasta el 20 de noviembre, contó también con la participación del cardenal Marc Ouellet, presidente de la CAL; monseñor Marcelo Sánchez Sorondo, canciller de la PASS; monseñor Miguel Cabrejos Vidarte, presidente del CELAM; y Carlos Afonso Nobre, premio Nobel de la Paz en 2007.
El COVID-19 ha puesto en evidencia los problemas e injusticias en Latinoamérica
Asimismo, el Papa Francisco subrayó que la pandemia del COVID-19 ha amplificado y puesto en mayor evidencia los problemas y las injusticias socioeconómicas que ya afectaban gravemente a Latinoamérica, con mayor dureza a los más pobres.
“No todos cuentan con los recursos necesarios para llevar adelante las mínimas medidas de protección contra la pandemia. Esto nos tiene que alarmar: ¿todos tienen techo seguro? ¿Acceso al agua? ¿Tienen recursos para higienizar los ambientes? ¿Trabajo estable? La pandemia hizo aún más visibles nuestras vulnerabilidades preexistentes”, señaló.
El Papa Francisco agregó que la pandemia ha tenido efectos devastadores que se seguirán viviendo por mucho tiempo, sobre todo en las economías, que requieren atención solidaria y propuestas creativas para alivianar el peso de la crisis.
“En el reino de Dios el pan llega a todos y sobra. Y la organización social se basa en contribuir, compartir y distribuir. No en el poseer, excluir y acumular. Todos estamos llamados a realizar nuestro trabajo y misión con responsabilidad, con transparencia y honestidad”, advirtió el Papa.
Asimismo, señaló que, junto con la pandemia, América Latina sufre por la falta de tierra, de techo y de trabajo. “Esto requiere una respuesta generosa y una atención inmediata. La profundidad de la crisis reclama una clase dirigente a la altura para buscar soluciones viables”, dijo el Papa.
Buscando una recuperación transformadora
En su intervención, Alicia Bárcena recordó que la CEPAL presentó hace pocas semanas a los 33 países de América Latina y el Caribe un conjunto de propuestas de política expresadas en el documento Construir un nuevo futuro: una recuperación transformadora con igualdad y sostenibilidad, durante su trigésimo octavo período de sesiones. El objetivo es concretar una recuperación transformadora del modelo de desarrollo de América Latina y el Caribe en consonancia con la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible.
“Es una invitación que llama a repensar nuestros estilos de vida, nuestras relaciones, la organización de nuestras sociedades y sobre todo el sentido de nuestra existencia y a recuperar, tal como dice la Encíclica Fratelli Tutti, la pasión compartida por una comunidad de pertenencia y de solidaridad. La esperanza es audaz, y si alguien cree que solo se trata de hacer funcionar mejor lo que ya hacíamos, o que el único mensaje es que debemos mejorar los sistemas y reglas existentes, está negando la realidad”, señaló Bárcena.
Además, recordó que la región de América Latina y el Caribe ha sido de las más golpeada por la pandemia del mundo en desarrollo y que, además, enfrenta su peor crisis económica en cien años, con enormes efectos y consecuencias sanitarias, económicas, ambientales, sociales y políticas. La caída de la actividad económica será de un 9,1%, acompañada de una contracción del comercio regional del 14% e intrarregional del 11%.
Según CEPAL, los niveles de desocupación alcanzarán a 47 millones de personas y una informalidad de más del 54%. Además, CEPAL estima para 2020 un aumento del número de personas en situación de pobreza de 45,4 millones, alcanzando un total de 231 millones (37,3% de la población) y un incremento de 28,5 millones en el número de personas en situación de pobreza extrema, alcanzando los 96,2 millones (15,5% de la población).
“El COVID-19 ha evidenciado y magnificado los problemas estructurales del modelo de desarrollo en América Latina y el Caribe: desigualdades entrecruzadas, crecimiento mediocre, baja productividad, insuficiente diversificación de exportaciones, muy poco espacio fiscal y alto deterioro ambiental”, añade Bárcena.
Las siete propuestas de la CEPAL
La secretaria ejecutiva de la CEPAL indicó que la Comisión ha puesto sobre la mesa siete propuestas concretas para conectar la emergencia con la recuperación: extender el ingreso básico de emergencia por 12 meses a toda la población en pobreza, ampliar los plazos y períodos de gracia en los créditos a MiPymes y proteger la relación laboral de los trabajadores, crear una canasta básica digital para garantizar la inclusión digital de 40 millones de hogares que no están conectados.
Además, elaborar políticas fiscales y monetarias expansivas que sostengan un período más largo de gasto con instrumentos no convencionales nacionales e internacionales, motivar la solidaridad internacional para aliviar la deuda en el Caribe y el pago de intereses en Centroamérica y crear fondos subregionales de resiliencia, desarrollar planes de recuperación e inversión en torno a sectores dinamizadores con creación de empleo, sustentados en acción climática, sostenibilidad ambiental y construir pactos políticos para acordar de una vez por todas el cierre de brechas y alcanzar regímenes universales de salud y protección social.
“Necesitamos pactos que deben ser construidos con la amplia participación de muchos actores, que, mediante el diálogo y liderazgos transformadores, permitan avanzar hacia consensos para universalizar la protección social y la salud, y reorientar el desarrollo sobre la base de la igualdad con políticas fiscales redistributivas, industriales y ambientales para la sostenibilidad”, señaló la secretaria ejecutiva de CEPAL.
“Queremos otro futuro y en él la igualdad es un factor clave del crecimiento. Con nuestro reciente documento estamos concretando la urgencia de crecer para igualar e igualar para crecer. En él planteamos audazmente que es posible eliminar la pobreza hacia 2030 y reducir la desigualdad elevando el empleo y disminuyendo la huella ambiental, pero se requieren acciones decisivas hoy y un cambio de rumbo, explicó Bárcena.
Para ello, la experta apunta que se debe crecer a una tasa de, al menos, un 4% al año y realizar una fuerte redistribución del ingreso (de hasta 3% del PIB anual). Este crecimiento solo será posible, según Bárcena, si se supera la restricción externa al crecimiento mediante una competitividad auténtica basada en el desarrollo de capacidades humanas y tecnológicas nacionales.
Asimismo, Bárcena advirtió que la solidaridad regional e internacional será fundamental para reconstruir mejor, y que se precisan nuevas formas de gobernanza mundial para proveer colectivamente de bienes públicos globales, como la salud universal (una vacuna contra el coronavirus para todos), la seguridad climática y la protección de la atmósfera, la estabilidad financiera y la paz y los derechos humanos.