Las TIR siguen siendo elevadas respecto a la década pasada
A fin de octubre de 2024, la rentabilidad al vencimiento (TIR) absoluta que ofrecía el crédito con grado de inversión denominado en euros se situaba ligeramente por encima del percentil 80 de los últimos 10 años, representado por la línea naranja en el gráfico 1. Ahora que el Banco Central Europeo ya ha iniciado su ciclo de relajación monetaria, desde Insight anticipan un descenso de las tasas del efectivo en los próximos meses, pero creen que todavía existe una oportunidad para lograr niveles de renta atractivos en crédito de mayor vencimiento. Los tipos de interés a corto plazo más bajos y la mayor pendiente de la curva de tipos también deberían ayudar a anclar su extremo a largo plazo, reduciendo el riesgo de pérdidas de capital. Estas mayores pendientes proporcionan asimismo potencial de revalorización, ya que el vencimiento de los bonos disminuye con el tiempo y las TIR gravitan a la baja a medida que los títulos “bajan por la curva”.
Si la inflación resulta ser moderada, por supuesto, cabe la posibilidad de que un volumen suficiente de inversores suban por la curva para arrastrar también a la baja a las TIR a largo plazo, presentando con ello potencial de ganancias de capital más significativas.
Los diferenciales se han estrechado, pero el crédito presenta un valor relativo atractivo
En términos de diferencial, la deuda corporativa denominada en euros ofrece un valor relativo muy superior al de otros mercados de crédito. Por ejemplo, el diferencial ajustado a la opción (OAS) agregado del mercado de crédito con grado de inversión denominado en euros respecto a la deuda soberana supera actualmente al diferencial que ofrece el crédito investment grade estadounidense respecto a los treasuries (gráfico 2). A fin de octubre de 2024, el diferencial entre el crédito IG denominado en euros y el denominado en dólares superaba el percentil 80 de los diferenciales observados desde 1999 (gráfico 3).
Las gestoras activas han batido a las pasivas en renta fija
Muchos inversores creen que a las gestoras activas les cuesta batir o incluso igualar la rentabilidad de sus índices de referencia, y extrapolan esta noción a todos los activos de inversión. Sin embargo, esto no es cierto en el caso de los mercados de renta fija, que son mucho menos eficientes y transparentes que los de renta variable y presentan ineficiencias que las gestoras activas son capaces de explotar.
A diferencia del análisis concentrado en las gestoras activas de renta variable, datos de MercerInsight indican que la gestora media en estrategias denominadas en euros ha batido de manera significativa a sus índices de referencia a lo largo del tiempo (gráfico 4). Esto significa que es importante no ver la inversión en deuda exclusivamente a través de la perspectiva de las TIR, y asegurarse de sopesar cuidadosamente la selección de gestora, en busca de aquellas con un historial de generación consistente de rentabilidad superior a la del mercado.
Desde Insight creen por tanto que el entorno de inversión debería seguir siendo beneficioso para las gestoras activas en los próximos años, debido a cuatro razones principales:
1) El auge de la emisión es el sueño de los selectores de valores
Los expertos de la gestora creen que los altos niveles de emisión bruta en los mercados de deuda corporativa con grado de inversión denominada en euros (gráfico 5) proporcionan abundantes oportunidades a los selectores de valores para sacar partido a las primas de nueva emisión y a situaciones de inversión idiosincráticas, y su expectativa es que esto continuará en 2025. Este auge de la actividad de emisiones no está confinado a las empresas europeas: sus homólogas estadounidenses están emitiendo activamente bonos en euros para financiar sus operaciones en el extranjero, o simplemente para aprovechar los altos niveles de demanda. Los mayores diferenciales disponibles en emisiones denominadas en euros significan que a menudo es posible comprar la deuda de grandes emisores corporativos estadounidenses en diferenciales más atractivos que los que pueden encontrarse en el mercado de deuda en dólares.