En un entorno donde la expansión internacional exige estructuras complejas y altos costos regulatorios, los gestores de activos buscan formas más ágiles de escalar sus estrategias. La securitización de activos, especialmente mediante vehículos tipo ETP (Exchange Traded Products) listados y euroclearables, se consolida como una vía efectiva para competir internacionalmente sin replicar infraestructuras corporativas en distintas jurisdicciones, señalan desde FlexFunds.
Lanzar un fondo de inversión convencional implica crear entidades gestoras locales, cumplir con marcos regulatorios diversos y asumir procesos largos de registro y distribución. Estos requisitos pueden extenderse por meses y consumir recursos legales, fiscales y operativos que reducen la rentabilidad.
Además, los bancos custodios y las plataformas institucionales demandan productos con compatibilidad operativa completa: ISIN, conciliaciones automáticas, reporting estandarizado y auditorías recurrentes. Cuando un vehículo no cumple con estos estándares, su integración en redes de private banking o wealth management se vuelve lenta y costosa.
Securitización y ETP: una arquitectura moderna de distribución
Mediante la securitización, una estrategia gestionada se convierte en un vehículo estructurado con ISIN y custodia internacional (Euroclear / Clearstream), sin que el gestor pierda el control de la cartera. Este formato permite reempaquetar estrategias especializadas en crédito privado, real estate, renta fija o activos alternativos, en instrumentos fácilmente integrables en sistemas institucionales, reduciendo barreras de entrada y mejorando la transparencia.
El III Informe Anual de Securitización de Activos 2025, elaborado por FlexFunds con colaboración de Funds Society, destaca precisamente el papel de Irlanda como jurisdicción preferente para estructurar ETPs securitizados. Gracias a su marco bajo la Section 110 del Taxes Consolidation Act, la supervisión del Central Bank of Ireland y su conectividad con Euroclear, el país ofrece una infraestructura robusta y reconocida internacionalmente.
Los ETPs de FlexFunds aprovechan este entorno al estructurarse a través de vehículos irlandeses de propósito especial (SPVs), lo que permite combinar eficiencia fiscal, estandarización operativa y distribución global. De acuerdo con el informe, más del 70 % de los gestores encuestados consideran este modelo una herramienta clave para internacionalizarse, destacando su bajo coste operativo y rapidez de lanzamiento (entre 6 y 8 semanas, frente a los varios meses de un fondo convencional).
A su vez, el Irish SPV Report Q2-2025 confirma el liderazgo de Irlanda en este campo, con 3,724 SPVs activos y activos totales de 1,18 billones de euros, impulsados por vehículos de deuda estructurada como CLOs y titulizaciones privadas. Los FVCs (Financial Vehicle Corporations) concentran 689.000 millones de euros en activos, mientras que los Other SPEs alcanzan 490.700 millones de euros, un reflejo de la madurez del ecosistema securitizado irlandés.
El crecimiento del modelo securitizado se da en paralelo con la expansión récord del mercado global de ETPs. Según el informe ETFGI al cierre del mes de septiembre de 2025 los activos gestionados en ETFs y ETPs alcanzaron los 18,81 billones de dólares, el nivel más alto registrado. Este aumento refleja una tendencia sostenida hacia la institucionalización y estandarización de las estructuras listadas, impulsando la demanda de productos eficientes, transparentes y fácilmente distribuibles.
Ventajas de los ETPs para los gestores de activos
Escalabilidad internacional: acceso a múltiples jurisdicciones sin crear nuevas filiales.
Eficiencia y velocidad: estructuras estandarizadas permiten lanzamientos en semanas.
Compatibilidad institucional: ISIN y custodia internacional facilitan la integración con bancos y plataformas.
Mantenimiento del control: el gestor conserva la toma de decisiones sobre activos y riesgos.
Transparencia y credibilidad: valuación independiente, auditoría y reporting aumentan la confianza de los inversores.
El informe de FlexFunds y Funds Society subraya el papel de la securitización como palanca de innovación y diversificación, especialmente en estrategias que buscan captar capital institucional sin perder flexibilidad operativa.
La securitización se ha transformado en una herramienta estratégica para que gestores de portafolio amplíen su alcance global con eficiencia y control. Lejos de ser un producto reservado a grandes instituciones, los vehículos de inversión ofrecen hoy una vía práctica, regulada y competitiva para internacionalizar carteras, mejorar la gobernanza y conectar con inversores de todo el mundo.
Para más información, puede contactar a nuestros especialistas a través de info@flexfunds.com
Foto cedidaRichard Woolnough, gestor del M&G (Lux) Optimal Income Fund.. Richard Woolnough (M&G): "El mercado anticipa una recesión porque la Fed solo se fija en Wall Street"
Richard Woolnough lleva ya más de 20 años trabajando para M&G Investments y 18 años al frente de uno de los fondos estandarte de la compañía, el M&G (Lux) Optimal Income. Como inversor centrado particularmente en los bonos, el experto ha vivido toda clase de episodios de mercado, aunque lleva más de un año afirmando que las condiciones actuales del mercado le recuerdan al entorno en el que se produjo el lanzamiento de la estrategia, en 2007: “En 2007 hubo mercados financieros fuertes, y un mercado de crédito fuerte. Y enfrentamos los mismos problemas”, explica. En concreto, el experto detalla que el crédito “está bastante caro en términos históricos, aunque los rendimientos siguen siendo bastante atractivos”, aunque se muestra más interesado en la evolución de la deuda pública, particularmente de los países desarrollados, que supone actualmente la mayor ponderación en su fondo.
Crítico como siempre con los bancos centrales, Wooulnough afirma que la principal diferencia respecto a cómo estaban los inversores hace 18 años es que ahora mismo Europa, EE.UU. y Reino Unido están inmersos en sendos ciclos de bajadas de tipos de interés. “Ahora, la pregunta es si lo están haciendo demasiado lentamente. O si no lo están haciendo suficiente. Tenemos que esperar y ver”, afirma, aunque añade que, por el momento, la bajada anunciada recientemente por la Reserva Federal “no va a tener mucho efecto”.
¿Está comprometida la independencia de la Reserva Federal?
Tanto como que los bancos centrales son independientes… los miembros del banco central son designados por el gobierno. Es un buen trabajo, los miembros del FOMC suelen permanecer durante todo su mandato. Obviamente, ahora hay discusiones sobre si ciertas personas han tenido un comportamiento adecuado, pero, históricamente, ha sido muy difícil despedir a los oficiales de la Fed. Yo diría que el banco central es siempre semi-independiente. Siempre trabaja de cerca con el gobierno y en momentos de crisis, como el 11-S, la Gran Crisis Financiera o el COVID, han trabajado muy bien juntos.
Pero esta vez, con el presidente Donald Trump al mando, ¿hay algo diferente?
Tenemos a un presidente al que le gusta mucho hablar claro. Antes, la política ocurriría a puerta cerrada. Pero ese no es su estilo, se puede comparar por la cantidad de conferencias de prensa que suele dar un gobierno y las que hace él. La mayoría de los políticos tratan a la prensa como si fuera el enemigo. Trump ve a la prensa como una manera de que las personas le entiendan mejor.
Pero es cierto que el entorno ha cambiado alrededor del mundo. Hemos pasado por un periodo en el que muchas naciones y estados se han movido más a la derecha y muchos líderes se han vuelto más autoritarios. Es un fenómeno global, desde Nueva Zelanda hasta EE.UU. Sin embargo, para los políticos conservadores de derecha la situación es compleja, porque son ideologías que rechazan la figura del Estado. En una primera etapa, no quieren que el Estado determine cómo se asigna el capital. Obviamente, la derecha no quiere que la banca central se encargue de la economía. En su forma extrema, creen que los tipos de interés deberían ser establecidos por el mercado, no por un banco central. Obviamente Trump quiere manipular los tipos de interés, como también quiso presumiblemente Biden, como todos los políticos. Una de las maneras que tiene Trump de resolver el déficit es bajar los tipos.
¿Cómo podría hacerlo?
EE.UU. tiene mucha deuda viva en vencimientos cortos. Obviamente, esto les proporciona riesgo de refinanciación, algo que es negativo para ellos si los tipos se mantienen elevados. Pero si consiguen que los tipos sean muy, muy bajos, entonces no tendrían problema en emitir más deuda, podrían asumir el riesgo. Es una política menos prudente, pero su coste es muy bajo, y EE.UU. ya tiene un perfil de deuda de muy corto plazo, por lo que podrían hacerlo. En países con perfiles de mayor duración sería más difícil de conseguir. Por tanto, yo diría que su objetivo es hacer que la financiación sea muy, muy barata, y es posible que sea hacia donde ancle sus políticas en el largo plazo.
También dependerá de quién llega a la presidencia de la Fed. Si consiguieran poner a alguien radical, podrían cambiar la naturaleza de la independencia del banco central. El propio banco podría decidir que ya no quiere seguir siendo independiente.
Si EE.UU. incrementase la emisión de letras del tesoro, ¿qué impacto tendría sobre la curva? Sería de ayuda, porque ahora no hay oferta. Ya lo han hecho en el pasado. Una manera de enfocar esto es pensando en dónde se sitúan ahora las tires de los bonos y la prima por duración. Si piensas que el PIB está creciendo al 2% y tú te estás financiando al 6%, estás perdiendo dinero, ¿verdad? Llega un punto en el que tienes que dejar de pedir prestado. Ahora, el gobierno de EE.UU. vuelve a estar cerrado. Trump piensa que se debe despedir a 70.000 personas. Creo que es un ejemplo de disciplina fiscal. No van a conseguir aprobar el déficit presupuestario, se ha vuelto demasiado grande.
Esto conecta con otra cosa que también es bastante importante sobre los tipos, que es que, todas las veces que se ha entrado antes en recesión, las dos principales herramientas son bajar tipos de interés y aumentar el gasto fiscal. Pero ahora no tienen margen para el gasto, lo que significa que el único instrumento que les queda es bajar los tipos. El mercado está poniendo en precio que solo habrá una cantidad modesta de recortes. Pero si llega una recesión, tendrán que recortar más y quizás por debajo de la tasa neutral. En una economía estimulada, los tipos tienen que estar en el 0%, no por debajo del 2%. De otra manera, ¿a quién le importa? Es como si no hicieran nada.
Desde el punto de vista inversor, ¿cómo está abordando este entorno macro?
Creo que la inflación está bajo control. Creo que el downside para los bonos es limitado, porque ya estamos cerca del techo. Digamos que, en EE.UU., con un 6% de déficit y un 2% de inflación, el 4% sería la tasa neutral. Al 6% quieres estar largo en bonos lo máximo posible, y ahora están al 5%, porque lo que ahora nos gustan los bonos soberanos, nuestra posición larga está en máximos. El riesgo a la baja es realmente limitado y, si necesitan recortar los tipos, el potencial al alza es enorme. La rentabilidad-riesgo es muy buena ahora mismo en deuda soberana.
¿Cuál es su escenario central?
Mi escenario central es que la política monetaria funciona, como siempre lo ha hecho. Ha sido capaz de frenar a la inflación y está ralentizando a la economía, aunque su efecto se note con retraso, que es la situación actual. Un aspecto que está lastrando a la inflación en EE.UU. es el precio de la vivienda y de los alquileres. Como creo que la política monetaria funciona, la economía se ralentizará. Ahora bien, ¿funcionará que bajen los tipos de interés? Si lo hacen lento, no va a funcionar. Si lo hacen rápido, podría funcionar. Pero necesitan recorrer un largo camino, porque para hacer que se mueva el mercado de la vivienda necesitas poner los tipos por debajo de dónde estaban, lo que significa que las tires a largo plazo deberían situarse en torno al 3%.
Lo único que está manteniendo tan alto el crecimiento del PIB en EE.UU. ahora mismo es todo el gasto en centros de datos. Es una única y pequeña sección de la economía la que está produciendo. La economía se está ralentizando, pero encontramos que el crédito está poniendo en precio que no habrá recesión. Y puede que no la haya, pero el potencial al alza es limitado. En definitiva, nuestra visión sobre la economía es ligeramente más bajista que el consenso.
¿Cómo vivió la estrategia el Liberation Day, teniendo en cuenta que el dólar y los treasuries mostraron un comportamiento anómalo desde el punto de vista histórico?
Se comportaron de forma muy, muy diferente, pero nos proporcionaron oportunidades. Los bonos a corto plazo se comportaron así porque los mercados pensaron que EE.UU. iba a entrar en recesión. Los diferenciales de crédito se ensancharon mucho. Así que recortamos parte de nuestra exposición a duración, porque se estaban poniendo en precio unos recortes de tipos más agresivos y no queríamos estar tan largos. También compramos algo de riesgo de crédito, también por la perspectiva de recesión.
Cuando el mercado entra en pánico o se enfada, proporciona oportunidades, y eso es lo que hemos hecho a lo largo de la vida de la gestora. Obviamente, en los últimos 20 años hemos tenido muchos momentos de pánico y muchas oportunidades. Han sido cosas que hemos aprovechado o aceptado, dependiendo de lo convencidos que estemos. Y seguimos haciéndolo. Y con Donald Trump en el cargo, esto no se ha terminado.
¿Cómo está posicionada la cartera?
Tenemos un 60% en deuda soberana y un 10% de high yield, y el resto está en crédito con grado de inversión. La deuda soberana está ofreciendo valor relativo a la historia. Tenemos muchas posiciones en Francia, como anteriormente tuvimos en España, Italia o Reino Unido cuando el Brexit, y todos se recuperaron. Francia está vista ahora como un país problemático en Europa y, por tanto, sus bonos están bastante baratos.
También tenemos una posición en gilts. Pensamos que los tipos de interés tienen que caer en Reino Unido. El gobierno está cambiando su patrón de gasto y no está emitiendo tantos bonos de vencimientos largos como solía hacer. Normalmente, cuando los políticos acceden al poder en Reino Unido, primero aplican una política fiscal dura y luego, cuando se acerca el final de su mandato, se gastan todo el dinero, porque eso es lo que haría el Partido Laborista. Es lo que hizo Tony Blair. Pero esta vez, están gastándose todo el dinero ya, y el mensaje es que el Partido Laborista seguirá gastando. Así que, mientras que mantengan esa rectitud fiscal, será difícil saber qué efecto económico tendrá, si realmente conseguirán una transferencia de dinero.
El mercado de CLOs ha crecido tanto que ya supera en tamaño al high yield en EE.UU. Aunque se trata de una clase de activo que ya lleva décadas en funcionamiento, aún es necesario hacer pedagogía sobre cómo puede comportarse, y así lo ha comprobado el experto de Janus Henderson John Kerschner, responsable global de productos de titulización y gestor de fondos.
Kerschner está al frente de JAAA, el ETF activo de CLOs con rating AAA más grande del mundo, con 25 mil millones de dólares en activos bajo gestión. La firma ha lanzado una versión UCITS, el Janus Henderson Tabula EUR AAA CLO UCITS (JCL0), que actualmente gestiona 212 millones de dólares, y otra versión offshore en dólares que cuenta con unos 175 millones en activos. “Obviamente hemos demostrado que nuestro modelo funciona en EE.UU. Estamos en los inicios en Europa y Reino Unido, llevará más tiempo, y es necesario hacer mucha pedagogía”, resume el experto.
Kerschner accede a explicar a Funds Society el funcionamiento detrás de JAAA y las claves del éxito de esta estrategia entre sus clientes.
¿Son los CLO lo suficientemente líquidos como para ser negociables en un ETF?
Nos preguntaron esto mucho cuando lanzamos el JAAA hace cinco años y medio. Creo que el escepticismo venía de que la gente no se daba cuenta de lo líquidos que son los CLOs, particularmente los AAA. Tuvimos confianza para lanzar JAAA debido a nuestra experiencia con CLOs AAA durante el covid. Yo gestionaba un fondo 40-act llamado Multi-Sector Income, que básicamente funcionaba como un fondo de mejores ideas de renta fija. Invertíamos en CLOs y, a lo largo de la pandemia, incluso en los momentos de mayor iliquidez y dislocación, seguíamos haciendo trading de CLOs AAA para mejorar la liquidez del fondo. No sabíamos cuánto podría durar el confinamiento. Pero si puedes hacer transacciones con un producto incluso en ese tipo de entorno, entonces es que es muy líquido.
La razón es que no se trata realmente de un producto de crédito. Lo que se suele ver es que los CLO cotizan al valor nominal (par) o, si los diferenciales se estrechan, incluso un poco por encima del valor nominal, pero la cobertura de la opción de compra es muy corta, normalmente de dos años.
Por lo tanto, a muchos inversores, especialmente a los institucionales, no les gusta comprar CLOs cuando cotizan por encima del valor nominal, porque realmente no pueden subir mucho más, pero sí pueden bajar. Eso es una convexidad negativa para el precio. Pero durante la COVID vimos mucha incertidumbre. Pero la gente decía: «Vale, ahora puedo salir y comprar CLO AAA a 97 dólares o incluso a 95 dólares durante unos días. Sé que los CLO AAA nunca entran en mora y obtengo unos ingresos por cupón del 3 % aproximadamente. Si puedo obtener un 3 % más un 5 %, es decir, un 5 % de crecimiento de 95 a la par durante el próximo año, eso supone un 8 % para un activo AAA”. Parece bastante bueno. Así, lo que hemos visto a menudo es que, cada vez que se producen estas distorsiones, entra dinero nuevo.
¿Cómo integra los CLOs en una carcasa de ETF activo?
Crear y canjear efectivo es muy sencillo. Sea quien sea el market maker, nos da efectivo, le damos acciones, cogemos ese efectivo y compramos CLOs. O viceversa: ellos quieren CLOs, tenemos que vender CLOs, recaudar el efectivo y dárselo. Alrededor del 90 %, quizá incluso más ahora, de nuestras compras y reembolsos, ambos, son ahora en especie.
Después del Día de la Liberación, muchos operadores de mercado tenían clientes finales que querían comprar CLOs AAA y recurrieron a la compra de participaciones de JAAA gracias a su liquidez y porque su coste de capital es menor, ya que cotiza con un diferencial de compra-venta de un centavo.
Eso es lo que mucha gente no entiende. Piensan: «Bueno, sois tan grandes y negociáis tanto…», pero en realidad no hacemos tanto trading. Todas las operaciones que se realizan son CLOs por acciones, entre nosotros y los creadores de mercado.
¿Qué comportamiento mostró JAAA durante el shock tras el Día de la Liberación?
Creo que para muchos la narrativa era que se produciría una dislocación en un momento en que JAAA ya era grande y tenía muchos inversores minoristas, y que muchos se asustarían y querrían vender, y después Janus Henderson tendría que vender CLOs a toda prisa en un mercado muy dislocado. Pero eso no sucedió. Sí, tuvimos algunos reembolsos. Pero siempre le hemos dicho a los inversores que, durante una fase típica de dislocación, JAAA podría caer un 1 %-2 % y después debería recuperarse muy rápido. Y eso es exactamente lo que sucedió. Literalmente, no tuvimos inversores que nos dijeran que no estaban contentos con el comportamiento del ETF. El único cliente insatisfecho es el que no sabe qué esperar del producto, y por eso dedicamos mucho tiempo y esfuerzo a educar a nuestros inversores para que lo entiendan.
¿Esta estrategia tiene algún límite de capacidad?
Para nuestro ETF JAAA, prometemos a nuestros clientes darles el comportamiento del índice, aunque hay algunos niveles en los que podemos añadir un poco de alfa. A medida que vamos ganando tamaño, añadir alfa se vuelve más difícil, pero todavía somos capaces de hacerlo. Actualmente, nuestro tracking error todavía es relativamente bajo, pero para nosotros está bien y para nuestros inversores, también.
Si conseguimos compensar nuestra comisión, que son 20 puntos básicos, todo el mundo está contento. Así que, para responder a tu pregunta, pensamos que la capacidad del ETF puede alcanzar varios cientos de miles. Pero, ¿llegaremos ahí? Lo dudo. Pero si literalmente tuviéramos que salir y comprar toda nueva emisión de CLOs disponibles, aún cumpliríamos con la promesa que hemos hecho a nuestros clientes.
¿Y si se produce un default en un CLO AAA? ¿Cómo podría afectar al ETF?
Hemos tenido recientemente un gran default, First Brands. Es un fabricante de limpiaparabrisas y otras piezas de automóvil. Y rápidamente hicimos los cálculos. JAAA tiene 400 CLOs diferentes. Cada CLO tiene entre 300 y 400 préstamos apalancados diferentes. Obviamente, hay cierto solapamiento. Pero teníamos una exposición de entre 21 y 22 puntos básicos a este impago.
Ahora bien, un CLO AAA tiene un 35 % de mejora crediticia. Así que, en realidad, se necesitarían 400 impagos de este tipo para afectar a los CLO AAA.
¿Qué lectura hacen de la situación actual del consumo en EE.UU.?
Los CLO están respaldados por préstamos corporativos, y la mayoría de los préstamos corporativos también tendrán una correlación con el consumidor en general. La economía general está funcionando bastante bien: el PIB del segundo trimestre acaba de revisarse al alza hasta el 3,8 %, y creemos que el tercer trimestre superará el 3 %. Pero eso no explica toda la historia, porque hay cierto sufrimiento entre los consumidores con rentas bajas en EE.UU. Se ha vuelto más difícil conseguir trabajo. Todavía hay algo de inflación en el sistema. Los coches, especialmente los de segunda mano, se han encarecido. La gasolina se ha estabilizado, pero sigue siendo relativamente cara. Los precios de los alimentos han subido y el alquiler y la vivienda siguen siendo muy, muy caros en EE.UU. Sin duda, hay un problema de asequibilidad en ese sentido.
Son los consumidores de gama alta los que están obteniendo muy buenos resultados: si tienes un trabajo y una cartera de acciones, esta ha aumentado enormemente desde la COVID. Ese consumidor, que es el 10 % de los consumidores estadounidenses, representa el 50 % del gasto. Es una economía con forma de Ka: las rentas altas van bien, las bajas no tanto. Somos muy conscientes de ello. Hemos reducido nuestra exposición a todo lo que está más expuesto a ese consumidor de renta baja. Ya sean tarjetas de crédito de alto riesgo, automóviles de alto riesgo o cualquier tipo de deuda corporativa con mayor exposición a este segmento.
The CLO market has grown so large that it now surpasses high yield in the US. Although this asset class has been around for decades, it still needs to be educated on how it can behave, as Janus Henderson expert John Kerschner, global head of securitization products and fund manager, has found.
Kerschner heads JAAA , the world’s largest AAA- rated active CLO ETF , with $25 billion in assets under management. The firm has launched a UCITS version , the Janus Henderson Tabula EUR AAA CLO UCITS (JCL0) , which currently manages $212 million, and an offshore dollar version with around $175 million in assets. «We’ve obviously proven that our model works in the US. We’re just starting out in Europe and the UK; it will take more time, and a lot of educational outreach is needed,» the expert summarizes.
Kerschner agrees to explain to Funds Society the workings behind JAAA and the keys to this strategy’s success among his clients.
Are CLOs liquid enough to be tradable in an ETF?
We were asked this a lot when we launched JAAA five and a half years ago. I think the skepticism stemmed from people not realizing how liquid CLOs are, particularly AAA CLOs. We felt confident launching JAAA because of our experience with AAA CLOs during COVID . I managed a 40-act fund called Multi-Sector Income , which basically functioned as a fixed -income best ideas fund . We invested in CLOs, and throughout the pandemic, even in times of greatest illiquidity and dislocation, we continued to trade AAA CLOs to enhance the fund’s liquidity . We didn’t know how long the lockdown might last. But if you can trade a product even in that kind of environment, then it’s very liquid.
The reason is that it’s not really a credit product . What you typically see is CLOs trading at par or , if spreads tighten, even slightly above par, but the call option coverage is very short, typically two years.
So, a lot of investors, especially institutional ones , don’t like buying CLOs when they’re trading above par, because they can’t really go much higher, but they can go lower. That’s negative convexity for the price. But during COVID, we saw a lot of uncertainty. But people were saying, «Okay, now I can go out and buy AAA CLOs at $97 or even $95 for a few days. I know AAA CLOs never default, and I get about 3% coupon income. If I can get 3% plus 5%, so 5% growth on $95 at par over the next year, that’s 8% for a AAA asset.» That sounds pretty good. So, what we’ve often seen is that whenever these distortions happen, new money comes in.
How do you integrate CLOs into an active ETF shell?
Creating and redeeming cash is very simple. Whoever the market maker is , they give us cash, we give them shares, we take that cash, and buy CLOs. Or vice versa: they want CLOs, we have to sell CLOs, raise the cash, and give it to them. Around 90%, maybe even more now, of our purchases and redemptions, both, are now in-kind .
After Liberation Day , many market operators had end clients who wanted to buy AAA CLOs and turned to buying JAAA shares because of its liquidity and because its cost of capital is lower, as it trades at a one-cent bid-ask spread.
That’s what a lot of people don’t understand. They think, «Well, you’re so big and you trade so much…» But in reality, we don’t do that much trading . All the transactions that happen are equity CLOs, between us and the market makers.
What behavior did JAAA display during the shock following Liberation Day?
I think for many, the narrative was that there would be a dislocation at a time when JAAA was already large and had a lot of retail investors, and that many would get scared and want to sell, and then Janus Henderson would have to sell CLOs in a hurry in a very dislocated market. But that didn’t happen. Yes, we had some redemptions . But we’ve always told investors that during a typical dislocation phase, JAAA might drop 1%-2% and then should recover very quickly. And that’s exactly what happened. We literally had no investors tell us they weren’t happy with the ETF’s performance. The only dissatisfied customer is someone who doesn’t know what to expect from the product, and that’s why we spend a lot of time and effort educating our investors so they understand that.
Does this strategy have any capacity limits?
For our JAAA ETF, we promise to give our clients the performance of the index , although there are some levels where we can add some alpha . As we grow, adding alpha becomes more difficult, but we’re still capable of doing so. Currently, our tracking error is still relatively low, but that’s fine for us and our investors, too.
If we can offset our fee, which is 20 basis points, everyone is happy. So, to answer your question, we think the ETF’s capacity can reach several hundred thousand. But will we get there? I doubt it. But if we literally had to go out and buy every new issue of CLOs available, we would still fulfill the promise we made to our clients.
What if a AAA CLO defaults? How could that affect the ETF?
We recently had a large default , First Brands . They’re a manufacturer of windshield wipers and other automotive parts. And we quickly did the math. JAAA has 400 different CLOs. Each CLO has between 300 and 400 different leveraged loans . Obviously, there’s some overlap. But we had an exposure of between 21 and 22 basis points to this default.
Now, a AAA CLO has a 35% credit enhancement . So, in reality, it would take 400 such defaults to affect AAA CLOs.
What is your take on the current consumer situation in the US?
CLOs are backed by corporate loans, and most corporate loans will also be correlated with the broader consumer. The overall economy is doing quite well: second-quarter GDP was just revised upward to 3.8%, and we think the third quarter will exceed 3%. But that doesn’t tell the whole story, because there is some pain among lower-income consumers in the U.S. It’s become harder to find jobs. There’s still some inflation in the system. Cars, especially used ones, have become more expensive. Gasoline has stabilized but is still relatively expensive. Food prices have risen, and rent and housing are still very, very expensive in the U.S. There’s certainly an affordability issue in that regard.
It’s the high-end consumers who are doing very well: if you have a job and a stock portfolio, your portfolio has increased enormously since COVID. That consumer, which is 10% of US consumers, accounts for 50% of spending. It’s a K- shaped economy : high incomes are doing well, low incomes not so much. We’re very aware of this. We’ve reduced our exposure to everything that is most exposed to that low-income consumer. Whether it’s subprime credit cards, subprime autos, or any type of corporate debt with greater exposure to this segment.
En un entorno en el que los bancos centrales avanzan por sendas de política monetaria divergentes y el crecimiento global muestra signos de fatiga, la renta fija vuelve a ocupar un papel central en la construcción de carteras equilibradas. La gestión activa de la duración se convierte en una fuente clave de valor ante un previsible empinamiento de las curvas, especialmente en los mercados desarrollados. En este contexto, las oportunidades se concentran en los bonos soberanos periféricos europeos frente a los estadounidenses, en emisores corporativos de alta calidad y, de forma selectiva, en deuda emergente en moneda local, donde el atractivo del carry sigue siendo significativo.
A continuación, desgranamos algunas de las ideas de renta fija con las que estamos trabajando en Allianz Global Investors de cara al cuarto trimestre de 2025.
Somos más favorables a una duración larga en determinados mercados debido a los riesgos a la baja para el crecimiento. Prevemos un mayor empinamiento (steepening) de la curva de tipos en mercados clave, como el estadounidense. La exposición global a los tipos de interés es clave, dada la divergencia en las políticas de los bancos centrales.
Consideramos que los bonos soberanos de países periféricos de la zona euro, como España, son más atractivos que los estadounidenses. Adoptamos una postura más cautelosa con respecto a Francia, donde los riesgos políticos y fiscales están aumentando.
Estamos considerando los TIPS, los bonos del Tesoro de EE. UU. protegidos contra la inflación, ya que los mercados podrían estar subestimando los riesgos inflacionarios en el país. En cuanto al crédito, preferimos los emisores de alta calidad con calificación de inversión a los de high yield, centrándonos en los no cíclicos y la deuda senior bancaria.
La deuda de los mercados emergentes se beneficia de un carry atractivo y de la debilidad del dólar estadounidense, especialmente los mercados de bonos en moneda local, como Brasil, Sudáfrica y Perú. En el crédito asiático, seguimos prefiriendo el carry en high yield.
Somos cautelosos con el dólar estadounidense por la desaceleración del crecimiento en EE. UU., la bajada de tipos y los crecientes riesgos para la independencia de la Fed. Mantenemos posiciones largas en el euro y en el won coreano frente al dólar, y posiciones cortas en la libra esterlina frente a la corona noruega, el dólar australiano y el renminbi chino.
Tribuna firmada por Michael Krautzberger, director de inversiones (CIO) de mercado públicos de Allianz Global Investors
Para leer nuestras perspectivas completas para el 4ºtrimestre, pinche aquí.
El mercado de CLOs ha crecido tanto que ya supera en tamaño al high yield en EE.UU. Aunque se trata de una clase de activo que ya lleva décadas en funcionamiento, aún es necesario hacer pedagogía sobre cómo puede comportarse, y así lo ha comprobado el experto de Janus Henderson John Kerschner, responsable global de productos de titulización y gestor de fondos.
Kerschner está al frente de JAAA, el ETF activo de CLOs con rating AAA más grande del mundo, con 25 mil millones de dólares en activos bajo gestión. La firma ha lanzado una versión UCITS, el Janus Henderson Tabula EUR AAA CLO UCITS (JCL0), que actualmente gestiona 212 millones de dólares, y otra versión offshore en dólares que cuenta con unos 175 millones en activos. “Obviamente hemos demostrado que nuestro modelo funciona en EE.UU. Estamos en los inicios en Europa y Reino Unido, llevará más tiempo, y es necesario hacer mucha pedagogía”, resume el experto.
Kerschner accede a explicar a Funds Society el funcionamiento detrás de JAAA y las claves del éxito de esta estrategia entre sus clientes.
¿Son los CLO lo suficientemente líquidos como para ser negociables en un ETF?
Nos preguntaron esto mucho cuando lanzamos el JAAA hace cinco años y medio. Creo que el escepticismo venía de que la gente no se daba cuenta de lo líquidos que son los CLOs, particularmente los AAA. Tuvimos confianza para lanzar JAAA debido a nuestra experiencia con CLOs AAA durante el covid. Yo gestionaba un fondo 40-act llamado Multi-Sector Income, que básicamente funcionaba como un fondo de mejores ideas de renta fija. Invertíamos en CLOs y, a lo largo de la pandemia, incluso en los momentos de mayor iliquidez y dislocación, seguíamos haciendo trading de CLOs AAA para mejorar la liquidez del fondo. No sabíamos cuánto podría durar el confinamiento. Pero si puedes hacer transacciones con un producto incluso en ese tipo de entorno, entonces es que es muy líquido.
La razón es que no se trata realmente de un producto de crédito. Lo que se suele ver es que los CLO cotizan al valor nominal (par) o, si los diferenciales se estrechan, incluso un poco por encima del valor nominal, pero la cobertura de la opción de compra es muy corta, normalmente de dos años.
Por lo tanto, a muchos inversores, especialmente a los institucionales, no les gusta comprar CLOs cuando cotizan por encima del valor nominal, porque realmente no pueden subir mucho más, pero sí pueden bajar. Eso es una convexidad negativa para el precio. Pero durante la COVID vimos mucha incertidumbre. Pero la gente decía: «Vale, ahora puedo salir y comprar CLO AAA a 97 dólares o incluso a 95 dólares durante unos días. Sé que los CLO AAA nunca entran en mora y obtengo unos ingresos por cupón del 3 % aproximadamente. Si puedo obtener un 3 % más un 5 %, es decir, un 5 % de crecimiento de 95 a la par durante el próximo año, eso supone un 8 % para un activo AAA”. Parece bastante bueno. Así, lo que hemos visto a menudo es que, cada vez que se producen estas distorsiones, entra dinero nuevo.
¿Cómo integra los CLOs en una carcasa de ETF activo?
Crear y canjear efectivo es muy sencillo. Sea quien sea el market maker, nos da efectivo, le damos acciones, cogemos ese efectivo y compramos CLOs. O viceversa: ellos quieren CLOs, tenemos que vender CLOs, recaudar el efectivo y dárselo. Alrededor del 90 %, quizá incluso más ahora, de nuestras compras y reembolsos, ambos, son ahora en especie.
Después del Día de la Liberación, muchos operadores de mercado tenían clientes finales que querían comprar CLOs AAA y recurrieron a la compra de participaciones de JAAA gracias a su liquidez y porque su coste de capital es menor, ya que cotiza con un diferencial de compra-venta de un centavo.
Eso es lo que mucha gente no entiende. Piensan: «Bueno, sois tan grandes y negociáis tanto…», pero en realidad no hacemos tanto trading. Todas las operaciones que se realizan son CLOs por acciones, entre nosotros y los creadores de mercado.
¿Qué comportamiento mostró JAAA durante el shock tras el Día de la Liberación?
Creo que para muchos la narrativa era que se produciría una dislocación en un momento en que JAAA ya era grande y tenía muchos inversores minoristas, y que muchos se asustarían y querrían vender, y después Janus Henderson tendría que vender CLOs a toda prisa en un mercado muy dislocado. Pero eso no sucedió. Sí, tuvimos algunos reembolsos. Pero siempre le hemos dicho a los inversores que, durante una fase típica de dislocación, JAAA podría caer un 1 %-2 % y después debería recuperarse muy rápido. Y eso es exactamente lo que sucedió. Literalmente, no tuvimos inversores que nos dijeran que no estaban contentos con el comportamiento del ETF. El único cliente insatisfecho es el que no sabe qué esperar del producto, y por eso dedicamos mucho tiempo y esfuerzo a educar a nuestros inversores para que lo entiendan.
¿Esta estrategia tiene algún límite de capacidad?
Para nuestro ETF JAAA, prometemos a nuestros clientes darles el comportamiento del índice, aunque hay algunos niveles en los que podemos añadir un poco de alfa. A medida que vamos ganando tamaño, añadir alfa se vuelve más difícil, pero todavía somos capaces de hacerlo. Actualmente, nuestro tracking error todavía es relativamente bajo, pero para nosotros está bien y para nuestros inversores, también.
Si conseguimos compensar nuestra comisión, que son 20 puntos básicos, todo el mundo está contento. Así que, para responder a tu pregunta, pensamos que la capacidad del ETF puede alcanzar varios cientos de miles. Pero, ¿llegaremos ahí? Lo dudo. Pero si literalmente tuviéramos que salir y comprar toda nueva emisión de CLOs disponibles, aún cumpliríamos con la promesa que hemos hecho a nuestros clientes.
¿Y si se produce un default en un CLO AAA? ¿Cómo podría afectar al ETF?
Hemos tenido recientemente un gran default, First Brands. Es un fabricante de limpiaparabrisas y otras piezas de automóvil. Y rápidamente hicimos los cálculos. JAAA tiene 400 CLOs diferentes. Cada CLO tiene entre 300 y 400 préstamos apalancados diferentes. Obviamente, hay cierto solapamiento. Pero teníamos una exposición de entre 21 y 22 puntos básicos a este impago.
Ahora bien, un CLO AAA tiene un 35 % de mejora crediticia. Así que, en realidad, se necesitarían 400 impagos de este tipo para afectar a los CLO AAA.
¿Qué lectura hacen de la situación actual del consumo en EE.UU.?
Los CLO están respaldados por préstamos corporativos, y la mayoría de los préstamos corporativos también tendrán una correlación con el consumidor en general. La economía general está funcionando bastante bien: el PIB del segundo trimestre acaba de revisarse al alza hasta el 3,8 %, y creemos que el tercer trimestre superará el 3 %. Pero eso no explica toda la historia, porque hay cierto sufrimiento entre los consumidores con rentas bajas en EE.UU. Se ha vuelto más difícil conseguir trabajo. Todavía hay algo de inflación en el sistema. Los coches, especialmente los de segunda mano, se han encarecido. La gasolina se ha estabilizado, pero sigue siendo relativamente cara. Los precios de los alimentos han subido y el alquiler y la vivienda siguen siendo muy, muy caros en EE.UU. Sin duda, hay un problema de asequibilidad en ese sentido.
Son los consumidores de gama alta los que están obteniendo muy buenos resultados: si tienes un trabajo y una cartera de acciones, esta ha aumentado enormemente desde la COVID. Ese consumidor, que es el 10 % de los consumidores estadounidenses, representa el 50 % del gasto. Es una economía con forma de Ka: las rentas altas van bien, las bajas no tanto. Somos muy conscientes de ello. Hemos reducido nuestra exposición a todo lo que está más expuesto a ese consumidor de renta baja. Ya sean tarjetas de crédito de alto riesgo, automóviles de alto riesgo o cualquier tipo de deuda corporativa con mayor exposición a este segmento.
Luego de meses de trabajo en el proceso de integración, los grupos financieros chilenos BICE y Security consiguieron la luz verde regulatoria para concretar la fusión legal de sus bancos, a partir del 1 de noviembre. La Comisión para el Mercado Financiero (CMF) otorgó la autorización, que dará paso a un grupo financiero con activos totales por más de 37.000 millones de dólares, según informaron a través de un comunicado.
Así, la fusión entre Banco BICE y Banco Security está a la vuelta de la esquina, dejando una sola firma con más de 400.000 clientes y el sexto lugar del mercado de colocaciones comerciales. Además, la integración contempla las filiales de inversiones de ambos grupos financieros, que participan en los negocios de fondos, seguros y corredoras de bolsa.
Con todo, la fusión dejará a estas 20 compañías como parte del grupo financiero BICE, sumando 2,4 millones de clientes. Fue en la junta extraordinaria de accionistas del 22 de agosto que eligieron a Banco BICE como sucesor y continuador legal de Banco Security.
Según detallaron, la integración comercial y de sistemas de ambos bancos –y sus filiales– se realizará de forma paulatina. Además, agregaron que los clientes serán informados “de manera programada” sobre los próximos pasos del proceso. Mientras tanto, los clientes de Banco Security podrán seguir accediendo a los canales habituales con normalidad.
A partir del 1 de noviembre, explicó el gerente general de Banco BICE, Alberto Schilling, en la nota de prensa, se dedicarán a “llevar adelante una integración ordenada y planificada de ambas entidades bancarias, de acuerdo con un cronograma que tiene como propósito resguardar la atención de calidad”.
Como la segunda reserva de gas y la cuarta de petróleo no convencional a nivel mundial, Vaca Muerta es crucial para la economía argentina. Y existe un consenso tácito entre oficialismo y oposición sobre la importancia de su desarrollo, lo que tiene como resultado algo casi inédito en el país: la continuidad de políticas públicas que incentivan fuertes inversiones en esa zona geográfica, a pesar de la profunda grieta política que divide a la Argentina en dos mitades casi irreconciliables.
Gracias a la producción de hidrocarburos no convencionales de Vaca Muerta, el país sudamericano pudo volver a ser exportador neto de energía en 2024.
A principios de los años 2000, la falta de reglas claras junto a una política de tarifas congeladas de servicios, provocaron desinversión en el sector, lo que convirtió a la Argentina en importadora de energía, principalmente, de gas.
En el primer semestre de 2025, el país registró el mayor superávit comercial energético de los últimos 35 años: 3.761 millones de dólares, a partir de un crecimiento del 10,8% de las exportaciones y la reducción del 23,6% de las importaciones de energía, según datos oficiales. A pesar del contexto internacional -con una bajada importante en el precio del petróleo-, la balanza comercial energética argentina creció un 53% frente al mismo periodo de 2024.
Al exportar energía, el país suma divisas internacionales a las que ya genera la cadena agroindustrial argentina mediante sus exportaciones, lo que podría traducirse en más empleo y en estabilidad económica a largo plazo para una nación que tiene crisis económicas de manera recurrente.
Según el estudio “El Campo Argentino en Números” de FADA (Fundación Agropecuaria para el Desarrollo de Argentina), las exportaciones agroalimentarias y agroindustriales aportan 6 de cada 10 dólares de las exportaciones totales del país.
Del total de dólares aportados, el 62% lo explican las manufacturas de origen agropecuario, el 37% los productos primarios y solo el 1% de insumos y maquinaria. Durante el primer semestre de 2025, las exportaciones de productos agroindustriales de Argentina sumaron 23.290 millones de dólares.
Hay consenso en que Vaca Muerta podría generar exportaciones por 30.000 millones de dólares al año 2030, superando la cifra que aportan al día de hoy las exportaciones del campo argentino
Vaca Muerta: ¿solo una promesa para el inversor?
A pesar de las buenas cifras, Vaca Muerta sigue siendo solo una promesa para los inversores en activos argentinos relacionados a la energía, aseguran fuentes del mercado.
Luis Requesens, analista CIIA y Managing Partner de Andes Wealth Management, firma de gestión de inversiones con clientes de alto patrimonio, no ve al sector “muy apetecible” en estos momentos, por la coyuntura de precio del petróleo, lo que hace que las compañías “estén más centradas en la estructura de costos”. En Vaca Muerta “es muy linda la idea, pero en la coyuntura no es muy rentable”, indica.
“El escenario hacia adelante es brillante, pero hoy es puro desembolso”, se explaya. Entonces, “nosotros preferimos cosas muchísimo más cercanas en el tiempo”, explica. En concreto, desde Andes WM miran hacia Europa, donde hay “un boom de inversiones en energía renovable para evitar la dependencia del petróleo y del gas que viene de Rusia”.
Porque “acá, en Argentina, hay que lidiar con una estructura de impuestos, con una estructura de otros costos, con tasas de interés más altas, y los de acá compiten con el mismo shale oil y shale gas de Estados Unidos. Entonces, es linda la idea, pero como mínimo, se ve lejana”, dispara.
Desde Delphos Investment, Leonardo Chialva coincide en el diagnóstico: “Vaca Muerta es todo un rompecabezas con piezas que todavía faltan. Ahora mismo atraviesa una meseta: no hay por donde sacar el petróleo”, dice en relación con las nuevas inversiones que se necesitan y las que se están llevando adelante. “Y Vaca Muerta es muy sensible al precio internacional del petróleo, es decir, que lo que engloba no deja de ser un commodity, que cayó un 30% este año y en los balances, las empresas demuestran que están empezando a machtear su inversión con su flujo de caja”, concluye.
Por su lado, el académico especializado en energía Roberto Carnicier piensa que a largo plazo “la tendencia de crecimiento no va a cambiar. Apostar y seguir desarrollando Vaca Muerta es imprescindible para destrabar nuestra historia”.
Para los inversores el yacimiento todavía es una promesa lejana: el contexto internacional de los precios de las materias primas no ayuda
El potencial exportador de Vaca Muerta
“A pesar de adversidades externas e internas, Vaca Muerta logró mostrar un crecimiento sostenido, pasando de ser una promesa a inicios de la década pasada, a una clara y robusta realidad en el presente, básicamente, por la calidad geológica de reservorio ‘world class’ que le ha permitido situarse entre los más importantes del mundo”, señala la consultora PwC en su informe “Vaca Muerta: el futuro de Argentina”, de abril de 2025.
A nivel gas no convencional, solamente China supera al país en cuanto a recursos, mientras que en petróleo no convencional, Argentina se ubica detrás de Rusia, Estados Unidos y China. A nivel país, la restricción externa, o la falta de divisas internacionales, es un límite recurrente al crecimiento de la economía, ya que genera cuellos de botellas productivos en una economía que tiene una demanda estructural de dólares también por la historia de inflación y las devaluaciones del peso argentino.
Buena parte de la deuda pública y privada argentina está nominada en dólares, y el Estado necesita dólares para pagar intereses y capital a organismos internacionales y bonistas. Si no los consigue mediante exportaciones, debe recurrir a endeudamiento nuevo o usar reservas del Banco Central, lo que alimenta el eterno circulo vicioso de la economía.
Con Vaca Muerta, se estima que el país podría duplicar la producción de crudo en los próximos años, para alcanzar el millón de barriles diarios, lo que generaría exportaciones por 18.000 millones de dólares anuales en 2026, con un superávit en la balanza energética de unos 12.500 millones de dólares.
En lo que respecta al gas, la Argentina podría autoabastecerse y constituir un recurso estratégico como parte de las transiciones energéticas para contribuir a descarbonizar las economías del mundo. El país podría convertirse en un exportador de gas a la región, especialmente a Chile y Brasil, y en un paso posterior, en exportador al mundo con una planta de gas natural licuado (GNL), como consta en la web de YPF, principal petrolera del país y mayor inversor en Vaca Muerta.
Argentina prevé un superávit de su balanza energética de 8.000 millones de dólares en 2025. “Antes de la construcción del gasoducto (Presidente Néstor Kirchner) el déficit era de 4.500 millones de dólares, ósea que hubo unos 11.000 millones de reversión”, apunta a Funds Society Daniel Gerold, dueño de G&G Energy Consultants y uno de los principales consultores de energía del país. Estimaciones privadas sitúan entre 5.000 y 6.000 millones de dólares de superávit para la balanza energética argentina de este año.
Roberto Carnicier, director del Área de Energía, Gas y Petróleo de la Universidad Austral, asegura que con los seis proyectos de barcos de licuefacción de GNL que está desarrollando Argentina en asociación con empresas locales e internacionales el país podría generar ingresos por más de 13.000 millones de dólares al año.
En suma, hay consenso en que Vaca Muerta podría generar exportaciones por 30.000 millones de dólares al año 2030, superando la cifra que aportan al día de hoy las exportaciones del campo argentino.
“En Argentina hay que lidiar con una estructura de impuestos, con una estructura de otros costos, con tasas de interés más altas, y los de acá compiten con el mismo shale oil y shale gas de Estados Unidos. Entonces, es linda la idea, pero como mínimo, se ve lejana”
Más y más inversiones
Carnicier subraya que en el desarrollo de Vaca Muerta es clave el rol de YPF y su actual CEO, Horacio Marín, quien trabajó anteriormente casi 36 años en Tecpetrol, subsidiaria del poderoso Grupo Techint, del empresario Paolo Rocca. El académico explica que Marín fomenta desde el primer día las asociaciones estratégicas con otras empresas que aportan tanto capacidad técnica como financiera.
En los últimos siete años, YPF se asoció con compañías internacionales, y desde que comenzaron los desarrollos en Vaca Muerta, junto a esos socios, invirtieron más de 11.000 millones de dólares.
En mayo de 2024 comenzó la construcción del oleoducto Vaca Muerta Sur con una inversión estimada de 2.500 millones de dólares, que permitirá transportar 500.000 barriles de petróleo por día, y la construcción de un puerto de aguas profundas en Río Negro. También están en ejecución los proyectos Duplicar y Triplicar de OldelVal (actual principal oleoducto de la cuenca), así como la ampliación del Gasoducto Néstor Kirchner, y la reversión del Gasoducto de TGN, que permitirá terminar de sustituir las importaciones de gas de Bolivia, llevar gas local a las provincias del norte, y abrir una vía de exportación a Brasil del gas de Vaca Muerta.
“Estas obras, que se estiman estarán operativas en 2025-28, serán de suma relevancia para concretar los planes de producción de la formación para fines de esta década. Pero la capacidad productiva de Vaca Muerta requerirá de más inversiones de infraestructura”, advierte el informe de PwC.
“En Vaca Muerta se dan dos categorías de inversión”, explica Daniel Gerold, desde G&G Energy Consultants. “Una es para aumentar la producción de petróleo y gas, y la otra tiene que ver con las obras de infraestructura, que implican unos 14.000 millones de dólares”, agrega.
Con todo, Vaca Muerta está expuesta por un lado al precio internacional del barril de petróleo, pero también “al panorama internacional de tasas de interés, que pueden poner en duda el financiamiento de proyectos. Pero, aunque su desarrollo se demore, Vaca Muerta va a seguir estando”, apunta Fernando Heredia, editor de Economía y Energía en Forbes y columnista de energía en CNN Radio.
Los incentivos a la inversión en Vaca Muerta logran lo imposible: que haya consenso entre oficialismo y oposición sobre la importancia de explotar esos recursos de manera estratégica
El volumen de transacciones en fusiones y adquisiciones de firmas asesoras de inversión alcanzó un nuevo máximo en Estados Unidos, donde se reportaron 345 operaciones durante los primeros tres trimestres de 2025, superando el récord anual previo de 341 en 2022, según el RIA M&A Deal Report correspondiente al tercer trimestre de 2025 publicado por el banco de inversión boutique Echelon Partners.
En el tercer trimestre de 2025 se anunciaron 125 acuerdos, lo que representa una subida del 69% respecto al mismo período del año anterior. Según la firma, 2025 puede concluir con alrededor de 440 acuerdos entre RIAs.
Los AUM involucrados en las transacciones del 3T de 2025 alcanzaron aproximadamente los 1,2 billones de dólares (trillones, en términos americanos), frente a los 828.000 millones del trimestre anterior.
Los compradores predominantes fueron los “estratégicos” (firmas RIA, consolidadores que adquieren para escalar), que representaron el 91% de los acuerdos en el trimestre. Por otro lado, el capital privado tuvo un rol muy importante: cerca del 75% de las adquisiciones estratégicas en el 3T de 2025 involucraron a firmas respaldadas por private equity.
Aunque hubo transacciones de gran tamaño (“mega-deals”), Echelon también observó que las firmas adquirentes están apuntando a una mezcla más amplia de objetivos (medianos y grandes) para mantener el ritmo de crecimiento y escalar operaciones.
En lo que va de año, el tamaño medio de las operaciones rondó los 1.500 millones de dólares, lo que supone un aumento de alrededor del 7% con respecto al año pasado. Sin embargo, la cifra está por debajo de la media histórica de 1.700 millones de dólares entre 2021 y 2024.
Este cambio indica -según Echelon- una ligera normalización en el tamaño de las operaciones, tras el auge de las megatransacciones en los últimos años, ya que los compradores se centran en integrar las adquisiciones anteriores e identificar empresas medianas y escalables que se ajusten a sus estrategias de crecimiento.
La consolidación pisa el acelerador
La industria de asesoría financiera continúa consolidándose de manera acelerada. El hecho de que ya se hayan superado los números anuales de años anteriores antes de que acabe el año sugiere que 2025 seráel año más activo hasta ahora en M&A de RIAs.
La preponderancia de compradores estratégicos respaldados por capital privado refuerza la importancia de contar con escalabilidad, infraestructura operativa y capacidad de integración como factores clave para las firmas que buscan ser adquiridas o crecer vía adquisiciones.
Para las firmas medianas, hay una ventana importante: los compradores están ampliando su rango objetivo más allá de los gigantes, lo que abre oportunidades para que firmas de tamaño intermedio sean atractivas.
A pesar de la elevada actividad, el informe apunta que la incertidumbre política y de mercado podría moderar el ritmo o tamaño de los grandes acuerdos en el futuro cercano. Para vendedores, este contexto implica un mercado favorable: alta demanda, muchas firmas capitalizadas buscando adquisiciones, lo que podría traducirse en mejores condiciones de negociación.
Un nuevo estudio global entre gestores de inversiones del sector asegurador muestra que se espera un aumento en los perfiles de riesgo de sus carteras de inversión durante los próximos 12 meses, a pesar de haber mantenido un enfoque relativamente cauteloso durante el año pasado. La mayoría (83%) de las aseguradoras y gestores de activos del sector asegurador creen que los perfiles de riesgo aumentarán en el próximo año, y un 20% anticipa un aumento drástico.
El estudio, realizado por Ortec Finance, proveedor de soluciones de gestión de riesgo y rentabilidad para aseguradoras y otras entidades de servicios financieros -que encuestó a gestores de inversiones responsables de 10,48 billones de dólares en activos bajo gestión- reveló que solo el 36% indicó que los perfiles de riesgo aumentaron en los últimos 12 meses.
Más de la mitad (54%) dijo que los perfiles de riesgo se mantuvieron iguales durante el año pasado, mientras que el 10% señaló una disminución. La gran mayoría (91%) afirmó que los riesgos actuales de sus carteras de inversión se encuentran dentro de los parámetros de riesgo acordados.
El riesgo de liquideza largo plazo es considerado como el mayor riesgo para las carteras que gestionan por el 55% de los encuestados, mientras que el 31% cree que el mayor riesgo es la liquidez a corto plazo, y un 14% adicional considera que ambos tipos de liquidez representan riesgos similares. Los participantes clasifican la posibilidad de una recesión como el mayor riesgo macroeconómico que enfrentan sus carteras de inversión, seguido por un deterioro en las condiciones de liquidez. La inflación ocupa el tercer lugar entre los principales riesgos.
La volatilidad del mercado de crédito es vista como el cuarto mayor riesgo, por encima de los aranceles y la posibilidad de una guerra comercial. La flexibilización monetaria y la deflación se consideran los siguientes riesgos en importancia. La volatilidad del mercado de renta variable y las tensiones geopolíticas ocupan el octavo y noveno lugar, respectivamente, entre los mayores riesgos macroeconómicos.
Hamish Bailey, director general del Reino Unido y jefe de Seguros e Inversiones, comentó que este estudio «sugiere un cambio en el sentimiento», ya que tras un período de relativa cautela, «las aseguradoras esperan aumentar sus perfiles de riesgo de inversión en los próximos 12 meses. Lo que estamos escuchando de las aseguradoras es una expectativa de asumir más riesgo, a pesar de identificar la recesión y la liquidez como las preocupaciones más significativas. Esto sugiere que tanto aseguradoras como gestores de activos perciben que estos riesgos tienen una probabilidad relativamente baja de materializarse. En este contexto, herramientas como el análisis de escenarios y la simulación de balances son fundamentales para realizar evaluaciones prospectivas y bien informadas».