La IA encabeza el índice de riesgo global para el sector de seguros en 2025, mientras que la sostenibilidad cae al último lugar

  |   Por  |  0 Comentarios

Pixabay CC0 Public Domain

El sector de seguros se enfrenta a un cambio radical a medida que la inteligencia artificial (IA) emerge como el riesgo principal para el próximo año, desplazando a todas las demás preocupaciones importantes. Las cuestiones de sostenibilidad, que alguna vez fueron un foco importante, han caído al final del índice de riesgo, ubicándose en el décimo lugar de un total de diez.

Este hallazgo proviene del último “Global Forecast” de Kennedys, asesor  del sector de seguros, que encuestó a 170 socios de Kennedys entre noviembre y diciembre de 2024 junto a una detallada evaluación cualitativa de una amplia gama de interacciones con clientes, instrucciones y tendencias de la industria. 

Ahora, en su tercer año, el “Forecast” se propone proporcionar un análisis integral de los riesgos clave a los que se enfrenta el sector de seguros. La aplicación de la IA ha llegado a lo más alto de la lista de riesgos, seguida de los ciberataques/interrupciones y los fenómenos meteorológicos extremos.

 “Las diferencias regionales, sin embargo, ponen de relieve diversas preocupaciones. En Estados Unidos, la volatilidad económica es una prioridad menor y se presta mayor atención al creciente desafío de la inflación social, que abarca un aumento de los litigios, definiciones ampliadas de responsabilidad, decisiones judiciales favorables a los demandantes y mayores compensaciones de los jurados”, han indicado desde el informe. Por el contrario, la inestabilidad geopolítica se ha convertido en una preocupación importante en Asia-Pacífico y América Latina, donde las incertidumbres y los conflictos políticos están cobrando mayor protagonismo en estos mercados.

Las cuestiones de sostenibilidad, que anteriormente tenían mayor peso en el sector de seguros, han experimentado una marcada disminución en su impacto potencial. Áreas como los objetivos de emisiones netas cero, las afirmaciones de “greenwashing” y la protección al consumidor ahora parecen menos urgentes, posiblemente influenciadas por la nueva administración estadounidense y prioridades políticas cambiantes, así como por un marco regulatorio más asentado, según el informe.

En un mundo multipolar y en rápido movimiento, el sector debe mantenerse fiel a sus principios fundamentales, explica John Bruce, el socio director de Kennedys: “Al trabajar junto con sus asesores legales y otros expertos dentro del ecosistema de seguros, el sector de seguros puede desarrollar soluciones para identificar exposiciones nuevas y emergentes, impulsar mejores resultados y fortalecer las estrategias de gestión de riesgos”.

Horizonte de riesgo

Parte de esa flexibilidad consiste en comprender cuándo un riesgo pasa de ser una preocupación a largo plazo a convertirse en una cuestión crítica. El “Forecast” evaluó los horizontes temporales para los impactos de los 10 riesgos macroeconómicos identificados y encontró algunas diferencias importantes. Aunque la IA era en general el mayor riesgo, los encuestados sintieron que el verdadero impacto de esto no se sentiría hasta dentro de 3 a 5 años, mientras que riesgos como la inflación social y los ataques cibernéticos se consideraron más inmediatos.

Al analizar un horizonte de cinco años, más del 85% de los socios globales de Kennedys citaron la adopción de la IA como el evento que tendrá el mayor impacto de riesgo, destacando que el impacto de la IA, que ya es alto, crecerá aún más. Curiosamente, las percepciones sobre los riesgos climáticos extremos resultaron significativamente divergentes según la región. En Europa continental y América Latina, los socios de Kennedy informaron que los clientes de seguros ya están experimentando los efectos del clima extremo. Mientras tanto, en el Reino Unido, se prevé que estos impactos se manifiesten de manera más sustancial en cinco o más años. Mucho más urgentes en el Reino Unido eran los problemas cibernéticos y el impacto de la inestabilidad económica. 

IA y reclamaciones de Seguro

Como destaca el “Forecast”, la IA no solo es el riesgo número uno a nivel mundial, sino que también el coste de la aplicación generalizada de la IA para el sector de seguros sigue constituyendo una gran incógnita. En este sentido, si una póliza tradicional no considera los riesgos relacionados con la IA, podría producirse una cobertura no intencionada en caso de una pérdida relacionada con la IA; aunque dicha eventual pérdida no se haya considerado en el cálculo de la prima de la póliza.

La industria de seguros ya ha aprendido lecciones de la “cibernética silenciosa”: casos en los que algunos riesgos han sido cubiertos en líneas no cibernéticas, aunque esa no era la intención. Para evitar disputas de cobertura relacionadas con la IA, la industria debe comprender ahora los riesgos propios de la IA, y evaluar qué contingencias ya cubren (silenciosamente) las políticas tradicionales.

Tom Pelham, Director global de cibernética y datos en Kennedys, dijo: “Ser completamente ágil y aceptar el cambio que traerá la IA es la única opción de supervivencia. Apegarse a las formas tradicionales de trabajar e interactuar con el mundo hará que las aseguradoras y las empresas queden obsoletas, y las alejará de un sector cada vez mayor de población que aceptará el cambio tecnológico con naturalidad”.

Isidoro Ugena, socio de la oficina de Kennedys en Madrid, dijo: “El uso de las herramientas de IA traerá nuevos desafíos y problemas de adaptación, así como problemas relacionados con su uso correcto. El aumento del impacto de la siniestralidad sobre el ciber riesgo requerirá la adaptación de todos los operadores del mercado para adoptar una política de prevención eficaz para estos problemas. El impacto en el mercado de seguros es muy significativo”.

Gestión del riesgo a través de la colaboración

El Informe también destaca que el intercambio de perspectivas, conocimientos y experiencias de una amplia gama de partes interesadas permitirá a las políticas y las prácticas comerciales gestionar el riesgo y, a su vez, ayudarán a la industria de seguros a sortear la infinidad de factores de riesgo a que se enfrenta. 

Los corredores, aseguradores, gestores de reclamaciones, altos ejecutivos, expertos legales, organismos reguladores, gobiernos y, lo más importante, los asegurados tienen una gran cantidad de perspectivas individuales sobre cada elemento de estos riesgos en evolución. Ahora tienen que empezar a compartir ese conocimiento de una manera más eficaz.

Mientras tanto, la tecnología se utilizará tanto de forma positiva como maliciosa en todos los elementos de riesgo. La conciencia corporativa y los procedimientos internos adecuados permitirán estar preparados y ayudarán a aprovechar y maximizar las oportunidades.

Meg Catalano, socia directora global de Kennedys, concluye: “Además de gestionar estos riesgos globales interconectados, las empresas y sus aseguradoras también deben considerar cómo su exposición se puede ver afectada por factores locales. Los desafíos universales creados por el uso de la IA, la amenaza de ciberataques y la inestabilidad geopolítica deben considerarse junto con las preocupaciones regionales antes referidas como los fenómenos meteorológicos extremos, la volatilidad económica y la inflación social”.

Inversis prevé un año de resiliencia económica a pesar de las guerras comerciales

  |   Por  |  0 Comentarios

Inversis y resiliencia económica
Foto cedidaIgnacio Muñoz-Alonso, estratega jefe macroeconómico de Inversis.

Inversis prevé que 2025 sea un año de resiliencia económica mundial, a pesar de las amenazas de guerras arancelarias desatadas ya por el presidente estadounidense Donald Trump. El estratega jefe macroeconómico de la firma, Ignacio Muñoz-Alonso, no descartó, en la presentación de perspectivas para el primer trimestre del año, posibles sorpresas, «que vendrán marcadas por la agenda económica del presidente de Estados Unidos». Entre ellas, el efecto en el crecimiento -y por tanto en las futuras decisiones de los bancos centrales- de esas posibles tensiones comerciales; las dudas de cómo abordar la fiscalidad en un entorno de bajada de tipos de interés y subida de aranceles, y el impulso desregulador en sectores como el energético o el tecnológico.

En definitiva, 2025 será «un año que, a nivel macroeconómico, estará marcado por las posibles guerras comerciales, la evolución de la inflación -que aún no consigue situarse en el objetivo del 2%- y la duda de si finalmente en 2025 veremos a Europa despegar económicamente«. En los mercados, el año estará marcado por la volatilidad de las curvas, los múltiplos de acciones y el futuro del sector tecnológico tras la reciente irrupción de la IA china.  

Trump y su margen real de actualización

El regreso de Donald Trump a la presidencia de Estados Unidos vuelve a arrancar con una batería de decretos y anuncios de medidas económicas proteccionistas y amenazas de subidas de aranceles. En este contexto, Muñoz-Alonso apunta que la cuestión que habrá que analizar es si el nuevo inquilino de la Casa Blanca tiene margen real de actuación en un entorno que es muy diferente al que se encontró en 2016: ahora el país cuenta con un mayor déficit y deuda.

La primera de estas dudas llega precisamente de esa amenaza de subida de aranceles. Las guerras comerciales pueden representar una caída de más de un 1,3% del PIB americano y 0,3% de inflación, «lo que para el ciudadano medio americano se traduciría en una pérdida de unos 2.600 euros por año con el coste político que conlleva».

Para el experto, las políticas fiscales anunciadas, parecidas a las de 2017 para bajar el tipo fiscal medio al 15%, «supondrían aumentar el déficit público por encima de la tendencia estimada actual». Sobre la inmigración y el anuncio de deportaciones masivas, estas medidas provocarían una subida de medio punto de la inflación y una caída del 0,4% del PIB por el efecto en la base laboral del país. «Lo mismo ocurre con la inflación por el efecto de la desregulación en sectores claves como el energético, el tecnológico en especial las criptomonedas», asegura.

Todo esto lleva a Muñoz-Alonso a preguntarse si Trump va a ser capaz de poner en marcha estas medidas por los efectos negativos que tienen y su coste social y político, en términos de popularidad.

Panorama regional

Con este contexto y con perspectivas de alzas inflacionistas las previsiones de crecimiento global estarían en el entorno del 3,3%, muy parecido al 2024. Por regiones, en Estados Unidos la firma prevé un crecimiento en un rango del entre el 1,9% y el 2,7%, en línea con las previsiones de la Reserva Federal (2,1%); un crecimiento de los precios en el 2,5%; una tasa de paro contenida y unos fondos federales en el 3-4%. «Esperamos un repunte de las rentabilidades en Estados Unidos impulsada por el consumo y un mercado de trabajo robusto, con un déficit fiscal al alza y una ratio de deuda sobre PIB lejos de adaptarse».

En cuanto a la inflación, tras crecer en diciembre por tercer mes consecutivo, se mantiene resistente a bajar a pesar de que la subyacente da un respiro y comienza a corregirse, aunque de forma muy lenta.

Con este panorama, la Reserva Federal pondrá freno al proceso de bajadas de los tipos de interés y, tras la suspensión de esta semana pasada, en la firma se inclinan por solo dos recortes en 2025, que dejarán los fondos federales en el 3,9%.

Europa es el contrapunto de lo que ocurre en Estados Unidos. En la eurozona posiblemente hayamos tocado fondo en cuanto a las bajas cifras de crecimiento. El consenso apunta a un 1%- 1,1% en 2025 muy en línea también con el BCE. En cuanto a la inflación veremos cifras cercanas al objetivo del 2%, paro contenido y un déficit fiscal que debería empezar a contenerse. Todos los componentes de la inflación se comportarán bien menos el sector servicios, más obstinado y que lastra la inflación subyacente del índice general. El crecimiento europeo se verá empujado por el consumo privado gracias al mercado de trabajo y los salarios, además de por el consumo público, ambos justifican 2/3 del crecimiento europeo.

Con este entorno, los escenarios del BCE pasan por unos tipos de depósito entre el 1,2% y el 2% con hasta cuatro bajadas en 2025. «Con lo peor de la crisis superada, los retos de la eurozona se centran en la consolidación fiscal y las tensiones comerciales con Estados Unidos, con mayor impacto en Alemania», asegura el experto.

Por último, China mantiene los problemas estructurales que se han visto tras la reapertura tras la pandemia, en concreto el consumo. En los últimos meses parece que se ha registrado algo más de actividad que podría anticipar cierta recuperación, pero las ventas minoristas aún siguen bajas y se mantienen las dudas en el sector inmobiliario. Hay factores que invitan a pensar que el consumo va a seguir contraído durante algunos meses. Las palancas de China para salir adelante serán por un lado el estímulo fiscal y de otro el comercio exterior, con políticas comerciales más agresivas.

Distribución de activos

Tras un 2024 con donde no se ha materializado la recesión, comienza una recuperación con repunte en rentabilidades asociadas a la victoria de Trump, pero también a las consecuencias de sus desregulaciones y medidas fiscales, según la firma. Este contexto permite a la firma ser muy positiva en todos los segmentos de renta fija. «En soberanos, vemos que las curvas empiezan a recuperar la pendiente positiva, con las primas a corto plazo escorándose por debajo de las rentabilidades a 10 años», aseguran. De esta forma, Muñoz-Alonso se muestra favorable a mantener una infraponderación en sectores más volátiles.

En la eurozona también observan una normalización de la curva de tipos, y no ven decisiones del BCE disruptivas en un entorno de crecimiento normalizado. «Nos inclinamos hacia el crédito de calidad europeo», concluye.

En cuanto a renta variable, siendo consciente de la situación de agotamiento tras dos años muy buenos para los mercados bursátiles, la firma cree que al mercado estadounidense «aún le queda recorrido de retornos positivos tras las medidas prometidas por Trump, especialmente en lo relativo a la fiscalidad de las empresas, como ya vimos en su anterior mandato».

En definitiva, apuesta por la renta variable americana y por los sectores: tecnológico, relativizando por tanto la irrupción de las IA chinas, el consumo discrecional, energía, salud y defensa, tras el aumento de inversión militar con la llegada de Trump.

México, Canadá y China: así comienza Trump su guerra comercial 2.0

  |   Por  |  0 Comentarios

Trump y guerra comercial
Canva

Donald Trump, como presidente de EE.UU., ya ha firmado las primeras órdenes ejecutivas para imponer aranceles a México, Canadá y China. Además, ha añadido como coletilla que también los habrá sobre la Unión Europea, ya que ésta “nos ha tratado muy mal”. 

Como consecuencia de este anuncio, el dólar se disparó durante la sesión asiática, mientras que las divisas europeas se llevaron la peor parte. El billete verde se fue apreciando durante casi toda la semana pasada, ya que todo apuntaba a que la imposición de aranceles por parte de la administración Trump era inminente. 

Las divisas de los mercados emergentes también se han visto muy afectadas, encabezadas por el propio peso mexicano”, explican los analistas de Ebury. No obstante, consideran que, “incluso después de las recientes caídas, la mayoría de las divisas siguen cotizando en niveles que sugieren que los mercados esperan que los aranceles draconianos duren poco”.

Por su lado, los países afectados apuntan a que tomarán represalias por estas medidas. “Canadá afirmó que responderá con la imposición de aranceles del 25% sobre 155.000 millones de dólares canadienses de bienes importados desde Estados Unidos (30.000 millones serán efectivos ya esta semana y el resto entraría en vigor en 21 días). México señala que tratará de cooperar, pero también impondrá barreras comerciales. Finalmente, en el caso de China, anunció que lo denunciará en la Organización Mundial del Comercio (WTO) y que tomará medidas de represalia, aunque no especificó cuáles”, matizan los analistas de Banca March. 

Ahora bien, los aranceles serán efectivos a partir del 4 de febrero, lo que deja un poco de margen para la negociación. “No debemos olvidar que ya en el pasado, las negociaciones para renegociar acuerdos comerciales (entre ellos el NAFTA) partieron de extremos para después alcanzar unas posiciones más comedidas. La actual introducción de aranceles se podría revocar en el futuro de alcanzarse los objetivos de mayor control de la inmigración y reequilibrio de la balanza comercial de Estados Unidos, algo que la propia orden ejecutiva deja entrever”, añaden desde Banca March.

El impacto de los aranceles

Según explica Gilles Moëc, economista jefe de AXA Investment Managers, el impacto en los productos de estos tres países por sí solo elevaría el arancel promedio de EE.UU. en 6,4%, en comparación con un choque de solo un 2% durante la primera guerra comercial. Para el experto de AXA IM, esto es muy significativo.

“La elección de las víctimas para esta primera salva de la guerra comercial 2.0 es interesante. Donald Trump optó por colocar el mayor impacto en dos países amigos, Canadá y México, con los que Estados Unidos está vinculado por un acuerdo de libre comercio, y cuya producción está estrechamente entrelazada en las cadenas de valor estadounidenses, con lo que tiene un importante efecto de retroalimentación en la economía estadounidense. El impacto en China es menor -incluso si el 10% se suma a los ya muy altos niveles de aranceles aduaneros desde la primera guerra comercial, con un promedio del 19%- e inexistente por ahora en Europa”, explica. 

En su opinión, el mensaje que esto podría enviar es triple. “En primer lugar, la magnitud del aumento indica a todos los socios comerciales que EE.UU. está dispuesto a sufrir repercusiones internas relativamente fuertes para lograr sus objetivos de reequilibrar su comercio y afirmar su estatus económico dominante. En pocas palabras, Trump va en serio”, señala. 

En segundo término, Moëc considera que perseguir a los miembros del T-MEC -la versión del TLCAN que el propio Donald Trump renovó durante su primer mandato- que debía renovarse en 2026 sugiere que nadie, independientemente de la estrechez de los vínculos políticos, económicos o de seguridad, debería sentirse ‘seguro’: los intereses comerciales de EE.UU. están por encima de cualquier otra consideración de relaciones exteriores.

“Tercero, el movimiento relativamente moderado sobre los productos chinos -inicialmente el principal adversario comercial en la retórica de la campaña de Donald Trump- puede sugerir que, como expresó en Davos, el presidente de Estados Unidos realmente quiere alcanzar un acuerdo de paz sobre Ucrania y cuenta con la presión china sobre Rusia para llegar allí. Sin embargo, sospechamos que no dudará en golpear más duramente a China si esta maniobra fracasa”, añade Moëc.

Asia: China vr Japón

Respecto a China, Christiaan Tuntono, economista senior de Asia Pacífico de Allianz Global Investors, añade que las medidas proteccionistas de Trump podrían ser negativas para el crecimiento de China y de Asia, así como para la demanda externa. “Las pequeñas economías asiáticas orientadas a la exportación, como Singapur, Hong Kong, Corea, Vietnam y Tailandia, son las más vulnerables, no solo por su alta exposición a la demanda final de las economías del G3 (EE.UU., UE y China), sino también porque su demanda interna no es lo suficientemente sólida como para resistir la inminente caída de las exportaciones. Taiwán y Malasia también dependen de las exportaciones, pero su demanda interna está respaldada por sus inversiones en inteligencia artificial”, argumenta Tuntono.

En cambio, según el análisis de Dan Carter y Mitesh Patel, gestores de inversiones de renta variable japonesa de Jupiter AM, Japón sería el país de la región que mejor parada saldría de esta situación. “Japón es una nación amiga de EE.UU. y ya no es la gran molestia comercial. No es fuente ni de inmigrantes ilegales ni de drogas. Tiene lógica pensar, pues, que Japón esquivará el grueso de un nuevo programa de aranceles estadounidenses. El peso de Japón en las importaciones estadounidenses ha menguado desde casi el 12% hasta cotas más próximas al 4 % en la actualidad. El problema de EE.UU. es China y, en menor medida, México y Vietnam, países con los que EE.UU. mantiene un déficit comercial considerablemente mayor que con Japón”, explican. Es más, según sus consideraciones, la localización de la producción de las empresas japonesas aporta una cobertura considerable e incluso una ventaja competitiva frente a los fabricantes chinos y de otros países. 

¿Y Europa?

Desde el Viejo Continente también se vigila a Trump, ya que ha sido señalado como su siguiente “víctima”, en términos arancelarios. Para Konstantin Veit, gestor de carteras de PIMCO, esta situación genera riesgos adicionales a la baja para el crecimiento, en particular a la luz de las amenazas arancelarias de la nueva Administración estadounidense, y margen para unos tipos finales inferiores a los actualmente previstos.

“Es probable que la nueva administración golpee con más dureza a algunos sectores, como el automovilístico, en parte porque la UE impone actualmente más aranceles a las importaciones de automóviles estadounidenses que EE.UU. a las europeas. También es probable que golpee con nuevos aranceles a los sectores químico y de maquinaria; estos tres amplios sectores representan en conjunto casi el 70% del comercio transatlántico”, apunta Raphael Olszyna-Marzys, economista internacional en J. Safra Sarasin Sustainable AM.

El eclipse Trump

Según los expertos, lo habitual sería que las claves para los mercados esta semana hubieran sido los datos de inflación interanual de la zona euro (lunes), la reunión del Banco de Inglaterra del jueves y la publicación de las nóminas de EE. UU. (viernes). Sin embargo, la guerra comercial de Trump -incluidos los anuncios de nuevos aranceles (se espera que en breve se impongan gravámenes a los productos de la UE) y cualquier indicio sobre las condiciones que exigirá Trump para aliviar la presión- eclipsarán todos los informes macroeconómicos ordinarios. “Incluso después de las recientes caídas, la mayoría de las divisas siguen cotizando en niveles que sugieren que los mercados esperan que los aranceles draconianos duren poco. Esperemos que tengan razón”, apuntan desde Ebury. 

En este contexto, Norbert Rücker, responsable de Investigaciones Económicas y Next Generation en Julius Baer, considera que la geopolítica empieza a cobrar trascendencia tras la polémica desatada por los aranceles aprobados. “Ya están aquí. Nuestra opinión no ha cambiado. Los aranceles comerciales son, ante todo, una herramienta de choque utilizada para las negociaciones. Su imposición debería seguir siendo temporal, con impactos inflacionistas algo contenidos dentro de EE.UU. y significativos impactos deflacionistas fuera del mercado estadounidense. Como era de esperar, hemos entrado en un periodo de ruido político e incertidumbre general, elemento que enmarca nuestras opiniones de cara a 2025”, asegura Rücker.

Las operaciones de private equity en el sector sanitario alcanzaron los 115.000 millones de dólares en 2024

  |   Por  |  0 Comentarios

Private equity y sector sanitario
Pixabay CC0 Public Domain

El valor mundial de las operaciones de private equity en el sector sanitario se disparó en 2024 hasta alcanzar una cifra estimada de 115.000 millones de dólares, lo que supone el segundo mayor valor total de operaciones registrado hasta la fecha. Este repunte se vio impulsado por un aumento del número de grandes operaciones. En total, cinco operaciones superaron los 5.000 millones de dólares, frente a dos en 2023 y una en 2022. Norteamérica sigue siendo el mayor mercado, representando el 65% del valor global de las operaciones, mientras que Europa y Asia-Pacífico representan el 22% y el 12%, respectivamente. Los volúmenes de operaciones se mantuvieron estables en relación con los niveles históricos, con una oleada de actividad en Norteamérica y Europa que compensó un descenso del 49% en el volumen de operaciones en Asia-Pacífico desde 2023. Estas son algunas de las principales conclusiones del informe Global Healthcare Private Equity Report 2025 de Bain & Company

Para Cira Cuberes, socia de Bain & Company, el mercado de private equity en el sector sanitario resurgió con fuerza el año pasado, debido en gran parte a una afluencia de transacciones a gran escala, especialmente en el ámbito biofarmacéutico. «También observamos un repunte de las operaciones en el sector tecnología en salud. De cara a 2025, esperamos que los LP sigan apostando por los gestores de fondos del mid-market, debido a su sólida rentabilidad y experiencia en el sector. La estrategia más inteligente para los inversores consistirá en prestar atención a las oportunidades que surjan de las escisiones e incorporar principios de creación de valor en sus diligences”, comenta.

En Europa, el volumen de operaciones ha superado el máximo alcanzado en 2021, gracias al impulso otorgado por la concentración de operaciones de menor envergadura en el primer semestre del año. Los sectores biofarmacéutico y de tecnología médica fueron dos de los principales en 2024, ya que las empresas que adquirieron activos en estos sectores pueden ampliarlos fácilmente a toda la región en la que operan. Bain se muestra optimista sobre el mercado europeo, dado el fuerte crecimiento del volumen de adquisiciones y la estabilización del entorno macroeconómico. La consultora prevé que continúe el repunte en la actividad y ve posibilidades de que se produzcan más mega-operaciones.

El sector biofarmacéutico sigue liderando las operaciones sanitarias en términos de valor total, gracias al impulso de varias operaciones importantes en 2024. A pesar del valor récord de las operaciones de compra en el sector biofarmacéutico, el volumen global en los sectores de herramientas biofarmacéuticas y de ciencias de la vida cayó un 5% y un 10%, respectivamente, desde 2020 en términos de tasa de crecimiento anual compuesto (TCAC). Hay varias razones que explican este fenómeno, entre ellas, la lucha entre compradores y vendedores para alinear los precios de venta y la reducción del gasto en servicios farmacéuticos tras una fuerte disminución de la financiación en private equity del sector biofarmacéutico estadounidense. 

La negociación de acuerdos de TI sanitaria repuntó en 2024 debido a varios factores. En primer lugar, los proveedores –que afrontan presiones financieras y cambios en los modelos de reembolso– están invirtiendo en sistemas básicos para aumentar la eficiencia. En respuesta, las firmas de private equity están invirtiendo cada vez más en activos que respalden las mejoras del flujo de trabajo. Además, los pagadores –que buscan mejorar la integridad de los pagos– están invirtiendo en análisis avanzados. Al mismo tiempo, las empresas biofarmacéuticas están modernizando la infraestructura informática de los ensayos clínicos para acelerar y mejorar el desarrollo de fármacos en un entorno de financiación y exigencias normativas más estrictas.

Cuatro tendencias que redibujan el paisaje de los fondos de private equity del sector sanitario:

Los fondos del mid-market siguen innovando: históricamente, los fondos centrados en el sector sanitario del mid-market han obtenido mejores resultados que el mercado en general, beneficiándose de la continua innovación y evolución de sus estrategias de inversión. También han sido capaces de mantener la actividad de compra de activos y las salidas desde 2020, incluso cuando el mercado de compra de activos sanitarios en general tuvo dificultades. Este rendimiento se ha traducido en una fuerte captación de fondos. Los fondos del mid-market con exposición a la atención sanitaria han recaudado alrededor de 59.000 millones de dólares desde 2022, superando la recaudación de fondos en los tres años anteriores en aproximadamente un 40%. Aunque históricamente se han concentrado más en activos de proveedores, las firmas de private equity del mid-market han ampliado su enfoque en TI de atención médica y servicios de proveedores, al tiempo que mantienen una fuerte presencia en biofarmacia y tecnología médica.

Las escisiones abren valor en un mercado reñido:  a pesar de la variabilidad anual en la actividad de operaciones, las escisiones en el sector sanitario han seguido una trayectoria ascendente desde 2010, impulsadas por una combinación de empresas públicas que intentan mejorar el valor para el accionista y empresas de private equity deseosas de adquirir activos considerables. Las escisiones exitosas permiten a las empresas públicas mejorar los márgenes y centrarse en el crecimiento de los ingresos, reduciendo el apalancamiento y la complejidad. Además, facilitan que los fondos de private equity adquieran activos ignorados con un gran potencial de creación de valor bajo la nueva propiedad. Dada la menor actividad de acuerdos entre patrocinadores desde el máximo alcanzado en 2022, la combinación de escisiones y acuerdos entre empresas públicas ha atraído a una variedad de inversores que buscan desplegar capital en activos escalables de todos los sectores sanitarios con potencial de creación de valor. 

La maximización del valor de salida es un imperativo estratégico: el volumen de operaciones de salida de private equity en el sector sanitario se mantuvo bajo en 2024 –un 41% por debajo de su máximo de 2021–, ya que los elevados tipos de interés y el desajuste entre compradores y vendedores prolongaron los periodos de retención y limitaron la capacidad de los fondos para devolver capital a sus socios comanditarios. Aunque históricamente la expansión múltiple ha impulsado casi la mitad de los rendimientos totales de las operaciones, es poco probable que esta palanca impulse los rendimientos en los próximos años en la misma medida. Para desarrollar con éxito una estrategia de salida, los vendedores deben adoptar una visión imparcial del rendimiento y la evolución del activo y contar con un plan para la futura creación de valor. Los compradores que incorporan los principios de creación de valor a su diligencia previa a la adquisición obtienen una ventaja competitiva.

La inversión en Asia-Pacífico ha evolucionado: las empresas de private equity están ampliando sus inversiones más allá de China en la región de Asia-Pacífico, donde el valor de las operaciones aumentó a una tasa compuesta anual aproximada del 21% desde 2016. Sin embargo, el volumen de operaciones en la región ha disminuido significativamente desde 2023, debido a una desaceleración en la negociación en China; un cambio en el volumen a India, Japón y Corea del Sur; y una mayor competencia de actores estratégicos con apetito para perseguir fusiones y adquisiciones. La India, en particular, se perfila como una alternativa convincente a China para la realización de operaciones, dada la expansión de su clase media, que impulsa la demanda de asistencia sanitaria, y su fuerte crecimiento económico. En Japón y Corea del Sur también se está acelerando el volumen de operaciones, impulsado por factores macroeconómicos favorables y el envejecimiento de la población, con crecientes necesidades sanitarias.

Somos optimistas sobre las perspectivas del private equity en el sector sanitario para 2025, sobre todo porque los múltiplos de las operaciones empiezan a estabilizarse, lo que permite una mejor alineación entre la oferta y la demanda, y hay una base creciente de activos negociables que presenta nuevas oportunidades. La bajada de los tipos de interés en Estados Unidos y el crecimiento económico estable en regiones como Japón y la India indican unas condiciones de inversión favorables. De cara al futuro, la acumulación de activos en las carteras de private equity, junto con la mayor presión de los LP para que proporcionen liquidez, sugiere un aumento inminente de las salidas de patrocinadores”, concluye Cira Cuberes, socia de Bain & Company.

¿Qué tendencias clave configuran el futuro de las finanzas sostenibles?

  |   Por  |  0 Comentarios

Finanzas sostenibles y tendencias clave
Pixabay CC0 Public Domain

Las finanzas sostenibles han evolucionado considerablemente durante los últimos años. De cara al futuro, Amundi sostiene que hay diversos aspectos claves que marcarán el camino. La normalización de la inversión responsable, el cambio y la aceleración de la transición energética, el aumento de la demanda de productos financieros de impacto en el mundo real, y la necesidad de alineación internacional para la regulación son algunos de esos ámbitos que la gestora considera fundamentales. 

Para Elodie Laugel, directora de Inversión Responsable de Amundi, los próximos años son críticos para una transición sostenible e inclusiva hacia una economía baja en carbono. En su opinión, es relevante que la inversión en tecnologías de energías limpias está superando con creces el gasto en combustibles fósiles: por cada dólar que se destina hoy a los combustibles fósiles, se invierten casi dos dólares en energías limpias, y se espera que este impulso continúe. «El desarrollo de tecnologías limpias es ahora una cuestión de competitividad y soberanía, que exige una actuación audaz y coordinada de todas las partes interesadas para evitar los elevados costes de una transición fallida. En este panorama cambiante, el mercado de la inversión responsable se estabilizó en 2024, mostrando su madurez en medio de un mayor escrutinio normativo. A medida que avanzamos hacia 2025, priorizar las estrategias impulsadas por el impacto en el mundo real será clave para aprovechar las oportunidades de transición para los inversores», sostiene Laugel.

Áreas clave en 2025

  1. El momentum cambia hacia las inversiones en energías limpias: las energías limpias aportaron 320.000 millones de dólares a la economía global en 2023, superando a las inversiones en combustibles fósiles en una proporción cercana a 2:1. Esperamos que esta proporción siga aumentando, impulsada por la creciente brecha competitiva.
  2. Los cambios geopolíticos influirán en la transición energética: los paquetes de medidas políticas seguirán impulsando las inversiones en tecnologías limpias, con la necesidad de superar las barreras que aún impiden el desarrollo de energías limpias en las economías desarrolladas, al tiempo que se allana el camino para aumentar las inversiones en los países emergentes y en desarrollo.
  3. Los riesgos físicos se están materializando: los efectos del cambio climático seguirán intensificándose, impactando en las cadenas de valor de las empresas, sin dejar más opciones que tomar medidas. La interrelación de las crisis medioambientales y sociales -a través del nexo clima-biodiversidad-salud-alimentación-agua- está poniendo en riesgo muchos modelos de negocio.
  4. Un interés continuo por las inversiones responsables: el apetito seguirá siendo fuerte a pesar de los desafíos políticos, con el 54% de los inversores indicando que es probable que aumenten su asignación a la inversión responsable en sus carteras.
  5. Todas las miradas puestas en los productos «orientados a resultados»: el impulso de impactos tangibles en el mundo real alimentará la demanda de soluciones financieras innovadoras en 2025, incluidos los bonos verdes, los swaps de deuda por naturaleza (nature-debt swapsy diversas inversiones de impacto.
  6. La caja de herramientas de la sostenibilidad crece: se espera que las nuevas métricas centradas en la biodiversidad, los factores sociales y los indicadores del mundo real refuercen los marcos de sostenibilidad y mejoren las evaluaciones de gestión de riesgos, incluidas las pruebas de resistencia climática.
  7. Necesidad de enfoques centrados en el cliente: tener más en cuenta la heterogeneidad y las necesidades variables de los inversores, así como la realidad práctica de la distribución de productos financieros, será crucial para dar realmente a los inversores la posibilidad de expresar sus preferencias en materia de sostenibilidad.
  8. Racionalización de los marcos normativos: la racionalización de las normativas complejas será esencial para mejorar la comprensión y la accesibilidad de los inversores en finanzas sostenibles, fomentando en última instancia una mayor accesibilidad a los productos de Inversión Responsable.
  9. Abordar las divergencias normativas: en un contexto de creciente fragmentación normativa, esperamos que se preste mayor atención a la armonización y la interoperabilidad internacionales, con vistas a facilitar el cumplimiento de la normativa por parte de las empresas y las instituciones financieras.

Uno de cada cinco fondos de pensiones carece de liquidez en escenarios adversos

  |   Por  |  0 Comentarios

Fondos de pensiones y liquidez en crisis
Canva

En la última década, los fondos de pensiones han aumentado sus inversiones en activos privados para mejorar los rendimientos mediante la prima por iliquidez, pero ahora están reflexionando sobre sus posibles riesgos de liquidez. Según una nueva encuesta global realizada por Ortec Finance, proveedor especializado en soluciones de gestión de riesgos y rendimientos para fondos de pensiones, casi el 18% de los fondos de pensiones afirma no tener suficiente liquidez para resistir escenarios adversos.

El estudio, realizado en Reino Unido, Estados Unidos, Países Bajos, Canadá y los países nórdicos, incluyó a ejecutivos de alto nivel de fondos de pensiones que en conjunto administran 1.451 billones de dólares en activos, muestra que al 18% mencionado, otro 62% cree tener suficiente liquidez para la mayoría de los escenarios, pero admite que la situación podría volverse problemática en escenarios extremos. En cambio, solo el 20% asegura no tener preocupaciones sobre la liquidez.

Los gestores identifican riesgos tanto a corto como a largo plazo, siendo el riesgo de liquidez a largo plazo la mayor preocupación para los administradores encuestados. Alrededor del 60% señala que este es el principal riesgo que enfrentan los fondos que gestionan, mientras que el 25% considera que el riesgo de liquidez a corto plazo es el más significativo. Solo el 15% cree que los riesgos a corto y largo plazo son aproximadamente iguales.

El aumento en la exposición a activos privados es parte de la razón detrás de las preocupaciones de liquidez, particularmente entre los esquemas de beneficios definidos (DB). De los gestores encuestados, el 80% informó que el riesgo de compromisos no financiados representa un riesgo significativo o leve para la industria de pensiones DB en los próximos tres años. En general el 25% de los gestores cree que los compromisos no financiados fuera del control de los gestores de carteras de pensiones representan un riesgo significativo, mientras que el 19% opina que no es un riesgo. A pesar de estas preocupaciones sobre la liquidez, el 58% afirma que la liquidez ya está bien gestionada y el 28% señala que existen otros riesgos más apremiantes. El 10% considera que el riesgo de liquidez es una prioridad, mientras que el 4% dice que no es una preocupación importante.

 «Nuestro estudio destaca el problema de liquidez que enfrentan los fondos de pensiones, especialmente dada la naturaleza impredecible de proyectar compromisos no financiados y llamadas de capital. Para abordar este problema de manera exhaustiva, los fondos deberían centrarse en la modelización de escenarios y pruebas de estrés. La modelización de escenarios de las llamadas de capital y distribuciones de activos privados puede ayudar a los fondos a entender cuáles podrían ser sus limitaciones de liquidez en los peores escenarios en los próximos cinco, diez o veinte años», señala Marnix Engels, director general de Riesgo Global de Pensiones en Ortec Finance.

Los aranceles de EE.UU. acelerarán cambios significativos en los flujos comerciales mundiales

  |   Por  |  0 Comentarios

Aranceles de EE.UU. y flujos comerciales
Canva

Un arancel del 60% sobre los productos chinos, un arancel del 25% sobre Canadá y México, y un arancel del 20% sobre las importaciones de otros países podría añadir 640.000 millones de dólares al coste de las importaciones de EE.UU. procedentes de sus principales socios comerciales, sobre la base de los niveles de importación de EE.UU. en 2023, según las estimaciones de un nuevo análisis de Boston Consulting Group (BCG). 

Los productos electrónicos, la maquinaria eléctrica y los artículos de moda serían los más afectados por el aumento de los aranceles sobre los productos chinos. BCG estima que un arancel del 60% añadiría 61.000 millones de dólares al coste de importación de productos electrónicos de consumo de China a EE.UU.  “El impacto potencialmente dramático de los aranceles estadounidenses podría suceder en un momento en el que los mercados del Sur Global están aumentando su poder comercial. Se prevé que China aumente su comercio con estos mercados en 1,25 billones de dólares y que el comercio anual entre las naciones del Sur Global crezca en torno a 673.000 millones de dólares”, apuntan los expertos del BCG.

Las rivalidades, alianzas y aspiraciones geopolíticas están reconfigurando la economía mundial, y lo seguirán haciendo en los próximos años, aceleradas por las imposiciones arancelarias de los Estados Unidos a las importaciones, según los expertos de BCG. Sin un aumento generalizado de los aranceles, el comercio mundial de mercancías seguirá creciendo a una media anual del 2,9% durante los próximos ocho años, pero las rutas que recorren dichos bienes cambiarán notablemente a medida que Norteamérica reduzca su dependencia de China y China estreche sus vínculos con los mercados del Sur Global, lo que está consolidando su poder en el mapa del comercio mundial.

Estas son algunas de las conclusiones del último informe del Centro de Geopolítica de Boston Consulting Group (BCG), Great Powers, Geopolitics, and the Future of Trade. “El comercio mundial superará los 29 billones de dólares en 2033, pero las rutas por las que viajarán estas mercancías están cambiando a un ritmo notable. Las rutas comerciales ya se estaban desviando de los patrones históricos y los aranceles estadounidenses que se avecinan acelerarán esta tendencia. Navegar por estas nuevas dinámicas será crítico para cualquier negocio global”, afirma Aparna Bharadwaj, Managing Director y Partner en BCG, y global leader de Global Advantage Practice

El informe analiza en detalle las regiones y los sectores que se podrían ver más afectados por la imposición de aranceles por parte de los Estados Unidos. BCG modeló el impacto directo del escenario 60/25/20 (aranceles del 60% sobre los bienes chinos, un 25% sobre los bienes procedentes de Canadá y México, y un 20% sobre las importaciones de todos los demás países). Se estima que los aranceles añadirían 640.000 millones de dólares al coste de importación de bienes de los diez principales países importadores a EE. UU., sobre la base de los niveles de 2023, a menos que se encuentren fuentes o proveedores alternativos.

En cuanto a las categorías de productos importados por EE.UU., el mayor impacto se produciría en las piezas de automóvil y los vehículos de motor importados, lo que afectaría principalmente al comercio con México, la UE y Japón. Los productos electrónicos, la maquinaria eléctrica y los artículos de moda serían los más afectados por el aumento de los aranceles sobre los productos chinos. Se estima que un tipo arancelario del 60% añadiría 61.000 millones de dólares al coste de importación de productos electrónicos de consumo de China a EE. UU.

“El sistema de comercio mundial es demasiado volátil para que las empresas confíen únicamente en la probabilidad”, ha afirmado Michael McAdoo, partner de BCG y director de Global Trade and Investment. “Planificar escenarios y contar con planes de acción flexibles ayudará a las empresas a protegerse contra posibles inconvenientes y aprovechar nuevas oportunidades”.

América del Norte se consolida como un bloque comercial resistente, pero los aranceles y el USMCA podrían condicionar su futuro, según BCG. La relación comercial entre EE. UU., México y Canadá, reforzada por años de deslocalización cercana y amistosa para reducir la dependencia de las importaciones chinas, está contribuyendo al crecimiento económico de América del Norte.

Si se evitan los nuevos aranceles de EE. UU. sobre los productos mexicanos, se prevé que el comercio anual entre EE.UU. y México aumentará a 315.000 millones de dólares en 2033, lo que representa una tasa de crecimiento anual compuesta (CARG) del 4%; mientras que el comercio entre EE.UU. y Canadá crecerá unos 147.000 millones de dólares a medida que las empresas que abastecen a los mercados norteamericanos trasladen una mayor parte de sus cadenas de suministro a la región.

China gira a los mercados del Sur Global. Mientras el comercio de China con EE.UU. y la UE se ralentiza, está creciendo con fuerza en gran parte del resto del mundo. Se proyecta que el comercio bilateral anual con Occidente se contraerá en 221.000 millones de dólares a 2033, lo que representará un descenso medio anual del 1,2%. En ese sentido, el descenso de 159.000 millones de dólares en el comercio anual entre EE.UU. y China podría agudizarse si EE.UU. aumenta significativamente los aranceles sobre los productos chinos. En el escenario más extremo, se estima que esto reduciría aún más el comercio anual entre EE. UU. y China en torno a una cuarta parte. El coste de los bienes chinos importados aumentaría en más de 200.000 millones de dólares si no se dispone de fuentes alternativas y si los volúmenes de importación se mantienen constantes. 

Se proyecta que el comercio de China con los países del Sur Global, por el contrario, aumentará en 1,25 billones de dólares o un CAGR de 5,9% para 2033. Este giro apoyará la agenda geopolítica de China de reducir su dependencia económica de Occidente y estrechar lazos con los principales mercados emergentes. “El crecimiento del comercio total de China se limitará al 2,7% anual durante la próxima década, muy por debajo de la estimación actual de crecimiento del PIB del 3,8%. Esto también es más lento que el crecimiento anual del 4% en el comercio que China disfrutó entre 2017 y 2022”, señalan en el informe los expertos del BCG.

El Sur Global está listo para ganar poder. Uno de los acontecimientos más intrigantes, y menos anunciados, del comercio mundial es el creciente poder de las naciones del Sur Global. Este grupo de 133 países en desarrollo representa alrededor del 18% del PIB mundial y el 62% de la población mundial. También representa alrededor del 30% del comercio mundial. Se prevén varios cambios importantes en el comercio del Sur Global durante la próxima década.

Aunque el comercio con China seguirá creciendo con fuerza, el ritmo se ralentizará hasta el 5,9% de CAGR, frente al 7,5% de los últimos cinco años, a medida que maduren los procesos de fabricación locales.

Por el contrario, el comercio anual entre las propias naciones del Sur Global crecerá en 673.000 millones de dólares durante la próxima década, con un CARG que se acelerará hasta el 3,8%, frente al 2,8% del periodo 2017-2022. El comercio entre el Sur y el Norte también se acelerará, hasta el 3,7% de CAGR desde el 2,3% de los últimos cinco años, alcanzando los 1,67 billones de dólares anuales en 2033.

La UE se centra en la competitividad. Las tensiones geopolíticas, la preocupación por la seguridad energética y los desafíos regulatorios han llevado a los 27 países de la UE a replantearse sus relaciones comerciales tradicionales. Se prevé que el comercio bilateral con China se estanque en la próxima década. Se espera que el comercio con Rusia disminuya en unos 106.000 millones de dólares a 2033, a medida que la UE siga reduciendo las importaciones de energía rusa y aplicando sanciones económicas.

Se proyecta que el comercio total de la UE seguirá creciendo un 2% anual hasta 2033. El comercio anual con EE. UU. crecerá 303.000 millones de dólares durante la próxima década, impulsado en gran medida por las importaciones de GNL estadounidense por parte de la UE, mientras que se acelerará el comercio con India y África. Las empresas también deben seguir de cerca las iniciativas europeas para impulsar su competitividad global en sectores estratégicos.

Los países de la ASEAN ganan con la reestructuración comercial. Esta región ha sido una de las mayores beneficiarias de los cambios en la producción impulsados por la geopolítica, como las tensiones comerciales entre EE. UU. y China. Se prevé que el comercio combinado de las naciones de la ASEAN crezca un 3,7% anual durante la próxima década, a medida que mejoren las capacidades de la industria de manufactura de la región y se profundice su participación en las cadenas de valor industrial.

Se prevé que la relación comercial de la ASEAN con China siga creciendo un 5,6% anual, hasta alcanzar los 558.000 millones de dólares en 2033, mientras que el comercio tanto con la UE como con EE. UU. se moderará.

India se está convirtiendo en la otra gran historia comercial del Sur Global, ya que mantiene relaciones favorables con la mayoría de las principales economías del mundo. Se proyecta un 6,4% de CAGR en el comercio total de la India hasta 2033, en torno a 1,8 billones de dólares anuales, en línea con su alto crecimiento del PIB. Entre los factores que impulsarán este crecimiento se encuentran la creciente popularidad de la India como base de producción para las empresas que buscan diversificar las cadenas de suministro concentradas en China, los cuantiosos incentivos gubernamentales para la fabricación, una enorme mano de obra de bajo coste y la rápida mejora de las infraestructuras.

“Para los líderes empresariales, nunca ha sido tan importante adelantarse a los acontecimientos”, ha afirmado Marc Gilbert, managing director y senior partner de BCG, y global leader del Centro de Geopolítica. “Seguir desarrollando cadenas de suministro ágiles y, lo que es más importante, asegurarse de que tienen la capacidad de percibir y reaccionar a los cambios geopolíticos, serán habilidades necesarias para operar en esta nueva realidad de cambios rápidos y grandes riesgos”.

Laura González se unirá a Apollo Global Management en mayo

  |   Por  |  0 Comentarios

Laura González y Apollo Global Management
LinkedIn

Apollo Global Management ha sumado a Laura González como nueva managing director para el negocio de Global Wealth para US Offshore y América Latina, confirmaron fuentes de la firma a Funds Society.

González, actual Head de Allfunds para las Américas (EE.UU. y Latam) y con más de 13 años en la firma, asumirá su cargo en mayo.  Dejará la compañía en la que comenzó supervisando Iberia y Latinoamérica y posteriormente fue ascendida a Head de Americas en 2022, según su perfil de LinkedIn

Apollo, especializada en productos alternativos, se ha fijado «objetivos ambiciosos” de 150.000 millones de dólares para 2029 que fueron anunciados en su “Investor Day” en octubre de 2024.

 

Para la firma, González, es una profesional experimentada que desempeñará un papel clave en la ampliación de su capacidad para prestar servicio a estos mercados. 

«La ampliación de nuestro negocio Global Wealth es una prioridad clave para Apollo, ya que respondemos a la creciente demanda de los inversores de soluciones de mercado privado que pretenden ofrecer una mayor diversificación respecto al modelo tradicional de cartera 60/40. Nos centramos en ofrecer ofertas de calidad institucional a los inversores finales. Estamos centrados en proporcionar ofertas de calidad institucional adaptadas a las distintas necesidades de los inversores particulares y patrimoniales», comentó Stephanie Drescher, socia y directora de Desarrollo de Clientes y Productos de Apollo, en un comunicado al que accedió Funds Society. 

El negocio Global Wealth “pretende ofrecer un conjunto completo de soluciones de inversión alternativas en clases de activos como crédito, renta variable y activos reales en estructuras y divisas que den prioridad a las necesidades del inversor final”, agrega la firma.

 

2024: un año desafiante para los gestores fundamentales

  |   Por  |  0 Comentarios

Gestores fundamentales y desafíos en 2024
Foto de Marek Piwnicki en Unsplash

Este año pasado fue un muy difícil para los gestores fundamentales, aquellos que construyen sus carteras de renta variable de abajo hacia arriba y que, más allá de las modas o temáticas del momento, atienden a argumentos de mayor recorrido, como la solidez del balance, el valor diferencial que una empresa ofrece dentro del sector donde opera (moat), la capacidad de fijación de precios, la experiencia y continuidad del equipo gestor, la pericia para sostener la rentabilidad sobre el capital invertido consistentemente por encima del coste de ese capital, o una valoración acorde con el potencial de crecimiento a largo plazo.

La (extrema) concentración de las rentabilidades en un puñado de compañías, un par de sectores y un bloque geográfico hizo imposible que la gestión de autor pudiera acercarse al rendimiento obtenido por los trackers o los fondos indiciados.

Con un 47,5% de la rentabilidad acumulada por el índice MSCI World concentrada en solo siete empresas, o un 29% del índice director de renta variable (S&P 500) explicado por cinco compañías del mismo sector, el mercado dejaba muy pocos resquicios para que, aplicando una diversificación razonable, fuese posible alcanzar los registros de esos índices.

Con el S&P 500 apuntándose más de un 20% en 12 meses y el miedo a quedarse fuera del ciclo de ganancias que desde 2023 viene proporcionando el estar posicionado en la temática de la inteligencia artificial generativa, es humano que nos dejemos llevar, dejando de prestar atención a aspectos muy relevantes de la construcción de carteras.

DeepSeek: ¿un punto de inflexión para la IA?

Aunque la volatilidad inicial tras el anuncio de DeepSeek parece haberse calmado, el episodio deja lecciones importantes. El Nasdaq cedió un 3% en esa sesión, el S&P 500, un 1,5%, y Nvidia registró una pérdida histórica de valor bursátil de 600.000 millones de dólares en un solo día, evidenciando el nivel de concentración extrema en los mercados desde el lanzamiento de ChatGPT en noviembre de 2022.

Como vemos en la gráfica, la caída de ~1,5% no es en sí misma muy llamativa en magnitud, pero deja de manifiesto los efectos de la fiebre desatada en noviembre de 2022 con el lanzamiento comercial de ChatGPT. En más de 22 años no habíamos registrado una jornada de caídas por encima del 1,45% que coincidiera con más de un 40% de los componentes del S&P 500 apuntándose subidas.

El mercado está comenzando a discriminar entre empresas con un futuro más incierto y aquellas mejor posicionadas para capturar la disrupción tecnológica. Esto cobra especial relevancia en un contexto en el que entrenar modelos avanzados de IA podría ser entre 15 y 20 veces más barato de lo estimado, lo que potencialmente reduce las barreras de entrada en el sector.

Adicionalmente, en cierta medida, los gestores habían comenzado a prepararse ante las promesas de campaña de Trump, que deberían dar vigor a industrias más cíclicas, favoreciendo el potencial de rentabilidad del S&P 500 equiponderado (respecto al ponderado por capitalización bursátil).

El crecimiento en beneficios para 2025 en tasa interanual seguirá mejorando para el S&P 500 ex Mag 7 y continuará su reversión a la media para los 7 Magníficos.

 

Desde una perspectiva estratégica:

  1. El acceso más económico a la IA beneficia al usuario, pero puede erosionar la ventaja competitiva de las grandes tecnológicas, que han invertido miles de millones en el desarrollo de modelos propios.
  2. El modelo de expertos (MoE) de DeepSeek podría alterar el equilibrio competitivo, favoreciendo a plataformas como AWS o Azure, que permiten a los usuarios acceder a modelos de terceros. Sin embargo, está comenzando a evidenciarse una limitación clave: estos MoE están especializados en un conjunto particular de tareas y resultan mucho menos efectivos en resolver otras. Como consecuencia, podrían ser inferiores a los modelos frontera generalistas, como el GPT-4o de OpenAI.
  3. Si el nuevo paradigma consiste en aprovechar desarrollos open-source para abaratar costes, como DeepSeek parece haber hecho, la situación se complica. En el ámbito del software de código abierto, los modelos de licencia buscan garantizar que los avances derivados permanezcan accesibles, lo que podría desincentivar la inversión en modelos basados en creaciones de terceros.
  4. El bajo coste de desarrollo de DeepSeek ha despertado sospechas. Elon Musk y el fundador de ScaleAI han señalado que el cálculo de costes de entrenamiento podría no incluir elementos clave como investigación, preparación y organización de datos. Adicionalmente, ambos sostienen que los chips utilizados en el proyecto posiblemente hayan sido los H100 de Nvidia, y no los H800 (menos potentes), que son los aprobados para su exportación a China. Esto ha llevado a las autoridades estadounidenses a abrir una investigación sobre el modelo de negocio de la compañía. A pesar de todo, lo cierto es que la empresa ha dado un paso muy importante en la arquitectura de los modelos de IA, lo que podría ejemplificar una respuesta a los controles de exportación de tecnología impuestos por Joe Biden. La escasez estimula la creatividad, y lo que DeepSeek no ha podido hacer con hardware, lo ha conseguido con software. Será interesante observar las implicaciones, si las hay, en la relación comercial entre China y EE. UU. en el contexto de Trump 2.0.

¿El fin del ciclo de inversión en infraestructura para la IA?

La enorme inversión en centros de datos e infraestructura para soportar el auge de la IA generativa podría haber alcanzado su pico de crecimiento interanual. El mercado se muestra cada vez más escéptico sobre el impacto real de estos desembolsos en la rentabilidad de las grandes tecnológicas a corto plazo.

Empresas como Meta y Microsoft ya están tomando medidas:

  • Meta anunció que extenderá la vida útil de sus servidores hasta 5,5 años y utilizará más intensivamente su chip MTIA, reduciendo así su dependencia de Nvidia y AMD.
  • Microsoft advirtió en su última conferencia de resultados que su CAPEX comenzará a desacelerarse a partir del próximo trimestre y en 2026, tras una caída del 30% en su flujo de caja libre interanual debido a la inversión en IA.

A medida que la fase de entrenamiento de modelos de IA madura —ya sea por los niveles prohibitivos de coste o por el límite de acceso a los datos necesarios para su desarrollo—, el foco se desplaza hacia la inferencia (Edge AI). En este contexto, los ASICs podrían ganar terreno frente a los GPUs, dada su mayor eficiencia y mejor adaptación a tareas específicas.

Powell, la Fed y el factor Trump

Con el debate sobre DeepSeek monopolizando la atención del mercado, la última reunión de la Reserva Federal pasó relativamente desapercibida. No obstante, dejó algunos mensajes clave:

  1. La Fed espera más claridad sobre las políticas de Trump en fiscalidad, comercio e inmigración antes de ajustar su discurso para el resto de 2025.
  2. Aunque el comunicado reflejó una visión más cauta sobre la inflación, la conferencia de Powell tuvo un tono dovish, reforzando la expectativa de que la desinflación sigue su curso.
  3. Los tipos de interés siguen en niveles restrictivos, con la Fed estimando una tasa neutral en torno al 3,5%. Si el dato de inflación PCE de febrero (que se publica el 12 de marzo) confirma la tendencia desinflacionaria, las expectativas de un primer recorte de 25 puntos básicos en 2025 podrían fortalecerse, impulsando el precio de los bonos y debilitando el dólar tras su rally de finales de 2024.

Los fondos empiezan el año con un crecimiento del 1,3% y marcando nuevos máximos

  |   Por  |  0 Comentarios

Fondos de inversión y crecimiento en 2024
Pixabay CC0 Public Domain

Los fondos empiezan el año en positivo: en enero, su patrimonio experimentó un incremento del 1,3%, gracias tanto a las revalorizaciones de sus carteras por efecto del mercado como a las aportaciones realizadas por sus partícipes. Así, el patrimonio de los fondos se situó por encima de los 404.200 millones de euros, registrando así un nuevo máximo histórico, según datos provisionales de Inverco.

En concreto, el 55% del aumento en los activos se debió a los nuevos flujos de entrada realizados por sus partícipes (más de 2.800 millones de euros) y el 45% restante se explica por las rentabilidades positivas registradas en el mes (0,45%).

En enero, los fondos registraron suscripciones netas por importe superior a los 2.826 millones de euros, comenzando el año con un ritmo superior al registrado en el mismo mes del 2024. Así, ya encadenan 53 meses experimentando operaciones netas positivas de inversión por parte de los ahorradores, lo que confirma a la inversión colectiva como instrumento de preferencia para la canalización de su excedente de ahorro.

En el primer mes de 2025, los partícipes continuaron la tendencia del año anterior centrando su atención en las categorías con mayor componente de renta fija. Así los fondos de deuda fueron los que mayores flujos positivos registraron (1.880 millones), centrado en su vertiente de corto plazo. También en enero, los fondos renta fija mixta tuvieron flujos de entrada de cierta magnitud (445 millones de euros).

Por su parte, los fondos de renta variable internacional y los monetarios registraron flujos de entrada positivos en torno a los 464 millones de euros en su conjunto.

En el lado de los reembolsos, los globales y renta variable nacional fueron los que registraron salidas netas, si bien no superaron los 100 millones de euros en su conjunto.

En este contexto, a fecha de elaboración del informe y pendiente de recoger las revalorizaciones registradas en los mercados bursátiles en los últimos días del mes, los fondos experimentan una rentabilidad media positiva del 0,5% en enero.

A excepción de los fondos de renta fija en su componente a más largo plazo, registraron rentabilidades positivas, donde los fondos con mayor componente de renta variable en sus carteras obtuvieron rentabilidades adicionales. Así, los fondos renta variable nacional obtienen rentabilidades positivas del 4,2%.