Aegon ratifica su estrategia ESG para la próxima década

  |   Por  |  0 Comentarios

Foto cedidaJuan Sánchez, director de estrategia y transformación de Aegon

Aegon, grupo asegurador especializado en salud  y vida, consolida su compromiso ESG (Ambiental, Social y de Gobernanza, por  sus siglas en inglés) con el objetivo, en la próxima década, de potenciar la salud  y el bienestar de la población como su principal recurso, garantizando un estilo  de vida saludable a todas las edades, con o sin recursos. 

La estrategia ESG de la aseguradora atraviesa de manera transversal todas las  áreas y equipos de Aegon, promoviendo planes responsables y políticas  medioambientales, así como reforzando su modelo de gobernanza. A día de hoy,  Aegon genera un impacto positivo a través de las inversiones, productos,  operaciones y la sociedad en general, al tiempo que se mitigan los riesgos de  sostenibilidad para el negocio y las partes interesadas. 

Juan Sánchez, director de estrategia y transformación de Aegon, afirma que “nuestro propósito como compañía es ayudar a las personas a vivir sus mejores vidas y proteger el futuro de toda la sociedad. En Aegon, somos personas que  cuidan de personas y, por lo tanto, tenemos una oportunidad única y la  responsabilidad de formar parte de los esfuerzos globales, para avanzar hacia  un mundo más sostenible”.  

Asimismo, como reflejo de su sólido compromiso, adquirido y reforzado durante  la última década, el Grupo Aegon es signatario de los Principios para los Seguros  Sostenibles (PSI); el Acuerdo de París sobre el cambio climático; el Pacto  Mundial de las Naciones Unidas; el Carbon Disclosure Project (CDP) y los  Principios de inversión responsable (PRI); entre otros. 

La aseguradora está trabajando en definir una estrategia ESG estableciendo  metas concretas para sus Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) prioritarios a corto, medio y largo plazo. En este sentido, la aseguradora identifica y se centra  en aquellos ODS en los que tiene la posibilidad de generar un mayor valor. Más  concretamente: Salud y Bienestar (ODS #3), cuyo objetivo radica en garantizar  una vida saludable y promover el bienestar para todas las personas de todas las  edades; Igualdad de Género (ODS #5) y Reducción de las desigualdades (ODS  #10); y Acción por el clima (ODS #13).  

“Creemos que un negocio sostenible crea un valor financiero, social y  medioambiental a largo plazo para nuestros grupos de interés”, añade Juan  Sánchez. “En Aegon, entendemos el valor de una compañía como la  combinación indivisible de los aspectos financieros, sociales y  medioambientales”.

Entre las iniciativas que la aseguradora ha llevado a cabo, se encuentran la  reducción de su huella de carbono a través de la implementación de tecnologías  más eficientes en el consumo de energía, el fomento del teletrabajo para reducir  las emisiones de gases de efecto invernadero y la modificación de aspectos  ambientales en los productos. En este sentido destacar como gracias al modelo  de trabajo híbrido, en Aegon han reducido el consumo de KWh en 2022 frente al  2019 en un 60% y las emisiones de CO2 por transporte de empleados en 51%  en el mismo periodo.  

Asimismo, el Plan de Igualdad o el acuerdo de colaboración firmado con  Fundación Inserta de la ONCE para la inclusión de personas con discapacidad  como empleados, son ejemplos claros de su compromiso con el ODC #5 y # 10. 

Aegon ha llevado a cabo la reorganización de las iniciativas mediante la creación  del departamento de sostenibilidad, con Nieves Baneres como responsable, con  el objetivo de acelerar e impulsar transversalmente la sostenibilidad como nueva  prioridad estratégica y convertirla en una realidad en todas las áreas que forman  la compañía. 

Este departamento se crea en 2022 sobre los esfuerzos ya realizados en materia  de sostenibilidad a lo largo del 2021 y años anteriores. Entre sus objetivos: desarrollar una agenda única, alinear la labor de las distintas áreas de Aegon a  las estrategias ESG y a los planes de actuación y la generación de nuevas  capacidades entre sus empleados mediante la creación de una red de expertos  que se encargan de generar conocimiento en materia de sostenibilidad.  

De manera adicional, la aseguradora ha creado el Comité Local de Sostenibilidad  (LSB), de seguimiento trimestral. Entre sus funciones: el diseño y seguimiento  de la implantación del plan director de sostenibilidad; comunicación con los  órganos de gobierno y el asesoramiento al Consejo de Administración y/o  Dirección de Aegon en materia de sostenibilidad.  

Jon Bell: “En tiempos de mayor inflación, el hecho de que la renta variable pueda hacer crecer los ingresos es realmente importante”

  |   Por  |  0 Comentarios

Foto cedidaJon Bell, gestor de cartera en renta variable global en Newton, parte de BNY Mellon IM

Perfección y disciplina son los pilares fundamentales en el “modus operandi” de Jon Bell en su filosofía de inversión. “Los dividendos son clave para los rendimientos que los inversores de renta variable han obtenido. Son muy fiables y consistentes. Buscamos explotar la importancia de éstos, pero lo hacemos de una manera muy disciplinada”, afirma el gestor de cartera en renta variable global en Newton, parte de BNY Mellon IM.

El punto de partida para la selección de los activos que componen la cartera de los fondos de inversión es elegir una empresa que tenga una rentabilidad por dividendo de un 25% superior a la del índice global. “Si la rentabilidad cae por debajo de la del mercado nos vemos obligados a vender la empresa”, señala Bell.

El gestor también destaca que la importancia de la sostenibilidad de los dividendos es algo prioritario. “Es muy importante, así como también lo es el tipo de criterios que utilizamos para evaluar esa sostenibilidad”.

Una inflación incierta y duradera en el tiempo

Para entender el contexto económico, Bell fija la mirada en el ritmo del cambio tecnológico, o la transición energética de los combustibles fósiles a la energía verde. “Son cosas que sabemos que están ocurriendo y que nos ayudan a entender el mundo”, señala el gestor.

El gestor considera que, aunque es muy difícil predecir el futuro, “la inflación va a ser más alta durante más tiempo. No sabemos cómo de altos serán los tipos de interés, pero va a pasar mucho tiempo antes de que volvamos a tipos de interés muy bajos. Estamos bastante seguros de que no vamos a ver al BCE ni a ningún banco central bajando los tipos”.

También apunta que, en lo que va de año, en Estados Unidos, el 85% del rendimiento ha sido impulsado por 10 empresas, todas ellas relacionadas, de algún u otro modo, con la Inteligencia Artificial. “En general, los rendimientos del mercado han sido bastante buenos, pero ha sido un pequeño puñado de empresas las que han impulsado ese retorno”, aclara Bell.

Apuesta por la diversificación en carteras

“Durante muchos años la renta fija no ofrecía una rentabilidad muy atractiva, en absoluto, y había pocas razones para invertir. Ahora que los rendimientos son más altos, creo que las inversiones en renta fija tienen un papel que desempeñar en las carteras”, sentencia Bell.

El gestor en renta variable se muestra a favor de la diversificación en carteras.“No hay que invertir todos los activos en lo mismo, hay que diversificar entre diferentes estilos”, explica.

Sin embargo, Bell evidencia una ventaja significativa en la renta variable, en comparación con la renta fija; “por definición, los ingresos de una cartera de renta fija son fijos. Los ingresos de una cartera de renta variable pueden crecer y, en tiempos de mayor inflación, el hecho de que una renta variable pueda hacer crecer sus ingresos es realmente importante porque eso ayuda a proteger a los inversores del impacto de la inflación”. 

Los bonos de representación no han perdido atractivo. “Creo que sectores como el de los servicios públicos siguen siendo tan llamativos como antes, han tenido un rendimiento inferior y se han comportado en línea con los valores de renta fija. Eso los hace más atractivos porque sus valoraciones han caído y aunque son bastante similares a los bonos, tienen mejor crecimiento y potencial de dividendos brutos”, añade Bell.

La demanda de productos referentes a la transición energética es indudable. “Las carteras sostenibles, y creo que eso es lo más atractivo de una cartera de rentas, ofrecen diversificación a los inversores en un momento en que las valoraciones del crecimiento y las acciones están de nuevo en niveles muy altos”, apunta.

En cualquier caso, Bell asegura que hay que ser muy selectivo en el momento de invertir. La confianza en los equipos de gestión resulta ser arriesgada. “Los equipos de gestión comienzan a creer que son invencibles y que pueden gastar dinero en lo que quieran y serán recompensados por ello, pero hay que pensar mucho sobre cómo emplear ese dinero. Creo que eso es lo que diferencia a las empresas que pagan dividendos del resto de las empresas cotizadas”, expone Bell. 

El sector farmacéutico: una gran oportunidad

Además de valorar aspectos como la deuda, el balance, la rentabilidad o la gobernanza, el gestor pone el foco en los cambios estructurales clave en los mercados, en los que opina “se puede ver un envejecimiento de la población”. Según destaca, “esto crea demanda de atención sanitaria y de varios productos. Se trata de un cambio estructural en el que uno quiere estar en el lado correcto. Esto contribuirá a la generación de efectivo de la empresa y a la sostenibilidad de los dividendos”.

El cambio en el modelo de negocio de las empresas farmacéuticas viene impulsado por la innovación. “Gran parte de esa innovación está en tratamientos de cáncer o Alzheimer. Para que a las empresas farmacéuticas les vaya bien tienen que ser innovadoras y producir medicamentos que, al final, ahorren dinero a los sistemas sanitarios. Las valoraciones son muy atractivas”, subraya Bell.

Las empresas de biotecnología están perdiendo parte del potencial. “Ahora los nuevos productos son medicamentos biológicos; productos muy complicados en los que el proceso de investigación y desarrollo es muy complejo y cuando algo se vuelve más difícil, las posibilidades de éxito disminuyen”, detalla el gestor.

Sin embargo, esto conlleva la creación de un modelo de negocio similar a una empresa de productos de consumo. “Si nos fijamos en la valoración de estas empresas en comparación con las empresas farmacéuticas, todavía hay una gran brecha y eso creo que es la oportunidad”, comenta Bell, que añade: “las empresas que pagan dividendos se diferencian porque son mucho más disciplinadas sobre lo que hacen con su flujo de caja en comparación con otras empresas”.

Los inversores minoristas se muestran alcistas con el yen, pero bajistas con el Nikkei 225

  |   Por  |  0 Comentarios

Pixabay CC0 Public Domain

Los inversores minoristas europeos muestran un fuerte interés a favor del yen japonés frente al euro y el dólar estadounidense, según los datos publicados por Spectrum Markets (Spectrum), el centro paneuropeo de negociación de derivados titulizados sobre los datos de su índice de sentimiento SERIX. Sin embargo, su sentimiento hacia el Nikkei 225 ha sido bajista.

El valor del SERIX indica el sentimiento de los inversores minoristas, con un número superior a 100, que marca un sentimiento alcista, y un número inferior a 100, que indica un sentimiento bajista.

Para los productos vinculados al EUR/JPY, el SERIX registró un nivel bajista de sólo 81 puntos el mes pasado, lo que sugiere que los inversores esperaban que el yen superase a la divisa comunitaria. Asimismo, el valor del SERIX del USD/JPY alcanzó un mínimo de 92 puntos, a medida que los inversores minoristas asimilaban las últimas noticias económicas procedentes de Japón.

Curiosamente, el índice de sentimiento SERIX para el índice Nikkei 225 alcanzó un valor bajista de 89 puntos, lo que sugiere que los inversores minoristas quizá no tengan tanta confianza en la renta variable japonesa como en su divisa.

«Una explicación posible a este desfase podría ser el anuncio realizado por el Banco de Japón a finales de abril en el que manifestaba su intención de mantener los tipos de interés ultrabajos para proporcionar apoyo a la economía japonesa, orientada a la exportación», explica Michael Hall, responsable de distribución de Spectrum Markets.

«Con los precios de las acciones subiendo debido a las políticas del banco central y el yen manteniéndose artificialmente bajo, esto podría llevar a la percepción de que las acciones están sobrevaloradas – y el yen infravalorado -, lo que se refleja en el sentimiento SERIX que vimos el mes pasado», añade Hall.

En mayo de 2023, se negociaron 115,2 millones de derivados titulizados en Spectrum, y el 37% de las operaciones tuvieron lugar fuera del horario tradicional (es decir, entre las 17:30 y las 9:00 CET).

El 78% de los derivados negociados fueron sobre índices, el 15,1% sobre pares de divisas, el 5% sobre materias primas, el 1,6% sobre acciones y el 0,3% sobre criptomonedas, siendo los tres mercados subyacentes más negociados el DAX 40 (23,8%), el S&P 500 (19,1%) y el NASDAQ 100 (18,6%).

Si se observan los datos del SERIX para los tres principales mercados subyacentes, el DAX se mantuvo en 98, el S&P 500 subió ligeramente de 97 a 98, y el NASDAQ 100 pasó de un 101 alcista a un 95 bajista.

La importancia del quality growth en este momento del ciclo económico

  |   Por  |  0 Comentarios

Foto de Volodymyr Hryshchenko en Unsplash

En los últimos dos años, el quality growth ha pasado relativamente desapercibido dentro de la renta variable global, si bien esta circunstancia podría revertirse. En un contexto de alta inflación y tipos de interés elevados, las compañías que destacan por su calidad, una sólida estructura financiera y bajos niveles de endeudamiento pueden verse reforzadas. Estas empresas defensivas y resilientes son capaces de proteger y hacer crecer su valor, sin verse tan impactadas por las condiciones macro. En ocasiones el mercado ha subestimado la sostenibilidad de estas empresas para lograr crecimiento y el mantenimiento de los dividendos.

El equipo de renta variable global de Mirabaud, liderado por Anu Narula, aplica un enfoque temático bottom-up, centrándose en una selección minuciosa de compañías líderes en sus respectivos sectores, ya que este liderazgo conlleva que la compañía dispone de los fundamentales para capitalizar su oportunidad temática. Son compañías que destacan por su capacidad de innovación, ofrecen un crecimiento constante y sostenido por encima del PIB y se ven favorecidas por un viento de cola que les permite crecer por sus sólidos balances y su elevado flujo de caja disponible. Asimismo, se centra en aquellas que cumplen rigurosamente con los criterios ambientales, sociales y de gobierno corporativo (ESG). En nuestro análisis, el equipo también valora a aquellas compañías cuyo equipo directivo es capaz de generar resultados y aprovechar las oportunidades del mercado.

Con este enfoque multitemático, y con total independencia y libertad a la hora de elegir qué valores conformarán su cartera, sin limitación en cuanto a regiones y sectores, nuestro equipo de renta variable global gestiona dos estrategias complementarias: Sustainable Global Focus y Sustainable Global High Dividend.

Ambos realizan una selección de las compañías en diferentes fases de su ciclo de crecimiento.

Mirabaud Sustainable Global Focus apuesta por empresas con un gran potencial en una fase más temprana de su ciclo de crecimiento y que registran fuertes incrementos en beneficios y flujo de caja libre. Es un fondo estructurado con el objetivo de superar las rentabilidades en los mercados bajistas y captar la rentabilidad en los mercados alcistas. El fondo persigue proporcionar un crecimiento superior del capital a largo plazo invirtiendo principalmente en una cartera concentrada de empresas de todo el mundo, centrándose en oportunidades multitemáticas con ventajas tanto financieras como sostenibles. Como parte de un enfoque a largo plazo, en el proceso de selección de valores se integra un análisis medioambiental, social y de gobernanza (ESG).

Sustainable Global Focus se concentra en 30 valores, con un active share del 91,2%. Gracias a la gran habilidad de nuestro equipo de gestores para integrar exitosamente los criterios ESG, el fondo ha obtenido la prestigiosa ISR Label por parte del Ministerio de Finanzas francés.

Por su parte, Sustainable Global High Dividend pondera las compañías más maduras y con un crecimiento más estable, con capacidad para generar un flujo de caja consistente y proporcionar a los inversores dividendos de forma regular. Partimos de la convicción de que las compañías que ofrecen dividendos suelen ser muy disciplinadas en la gestión de su flujo de caja, son rigurosas en la toma de decisiones sobre los gastos de capital y administran con cautela su efectivo. Partiendo de esta consideración, invertimos en áreas en las que la demanda supera a la oferta, lo que genera capacidad de fijación de precios.

El fondo cuenta con una cartera concentrada de 41 compañías que proporcionan dividendos altos y sostenibles, de entre 1,2-1,5 veces por encima de su índice de referencia. El Dividend Yield de la cartera es de 2,97%* y el crecimiento de los dividendos es del 7,32%*. El fondo, que cuenta con un active share del 92.69%, ha sido reconocido con la ISR Label del Ministerio de Finanzas Francés.

En definitiva, quality growth, selección, convicción, gestión activa, flexibilidad y criterios ESG son los pilares de nuestro enfoque global temático en renta variable. A las puertas de un nuevo ciclo económico, esta clase de activo se encuentra en óptimas condiciones para aprovechar las oportunidades del mercado que brinda el enfoque temático.

Columna de Elena Villalba, directora general de Mirabaud Asset Management para España, Portugal y Latinoamérica

*Yield growth a 30 de noviembre de 2022, pero puede fluctuar y las rentabilidades reales pueden ser superiores o inferiores a las indicadas. Tanto el crecimiento de los dividendos como la rentabilidad son a 12 meses vista.

Es hora de que las luminarias tecnológicas se comporten como adultas

  |   Por  |  0 Comentarios

Canva

Aunque el repunte de las acciones tecnológicas este año es bienvenido, muchos inversores aún recuerdan el mal comportamiento que registró el sector en 2022. Las ventas masivas sufridas el año pasado se explican por el reajuste de los tipos de interés, que redujo el valor de los flujos monetarios esperados de las empresas de crecimiento.

Sin embargo, el otro escollo lo creó el propio sector: al interpretar la escalada de negocios en el periodo de pandemia como la nueva norma, varias compañías líderes en tecnología e Internet aumentaron drásticamente su capacidad mediante la contratación de personal y la inversión en bienes de equipo. Al reducirse la demanda, muchas de estas empresas se quedaron con huellas operativas mucho más grandes de lo que justificaban las condiciones del mercado.

Es probable que los directores de las empresas se sintieran cómodos con sus ambiciosos planes porque los habían visto funcionar en el pasado, pero los tiempos han cambiado. Los ejecutivos de empresas tecnológicas maduras (y los inversores) deben reconocer que el mantra de invertir a toda costa que con frecuencia ejemplifica las industrias nacientes y de rápido crecimiento ya no se aplica a ellos. Es la comunidad inversora la que debe dirigir y valorar a estas empresas según métricas más tradicionales, entre ellas la expansión de los márgenes, la generación de flujos de caja y el retorno de valor a los accionistas.

Cada oleada de avance tecnológico, desde los mainframes hasta el cloud computing, ha requerido una inversión considerable a medida que las empresas se posicionan para crecer. En los últimos años, Internet orientado al consumidor, el comercio electrónico y la nube han tenido su momento para avanzar en los ciclos de inversión.

Los inversores lo aceptaron alegremente al tolerar unos elevados costes de adquisición de clientes y gastos en bienes de equipo (capex) con la expectativa de obtener rentabilidades desmesuradas a largo plazo. Esta tendencia recibió un impulso durante la pandemia, ya que las empresas se vieron atraídas por los bajos tipos de interés y el fuerte tirón de la demanda. Sin embargo, aunque estos desembolsos solían estar justificados porque gran parte de la economía mundial se adaptó al teletrabajo y a las compras desde casa, muchas hipótesis sobre el crecimiento futuro resultaron erróneas. Las ventas masivas del año pasado fueron un aviso del mercado de que las compañías tecnológicas deben convertirse en mejores administradores del capital de los inversores.

A medida que disminuye la capacidad de ciertas industrias tecnológicas para acometer fuertes inversiones a lo largo del ciclo, los gestores deben calibrar la magnitud de sus programas de inversión para ajustarse a los mercados maduros, además de priorizar la optimización de las operaciones.

Esto produce que incluso las empresas en crecimiento deban demostrar ahora su capacidad para aumentar la rentabilidad operativa. Conscientes de la evolución que experimenta el mercado tecnológico, los inversores esperarán cada vez más que los equipos directivos cumplan con las medidas estándar de rendimiento financiero, incluidos los márgenes, la rentabilidad del capital invertido y la generación de flujos de caja. El sector de semiconductores es un caso típico positivo para gestionar el crecimiento cíclico maduro.

Esto no significa que la inversión a largo plazo ya no sea importante, sino que, a tenor de la dinámica específica de la industria, las empresas tendrán que equilibrar la inversión destinada al crecimiento futuro con la rentabilidad a corto plazo.

Los ciclos de inversión son inevitables en el ámbito tecnológico, ya que las empresas deben innovar constantemente para mantener o ampliar su cuota de mercado. A medida que los mercados finales maduran y los inversores exigen un mayor grado de disciplina financiera, los gestores deben demostrar que asignan el capital de manera eficaz. De cara al futuro, creemos que una asignación de capital juiciosa, una posición dominante en el mercado y la capacidad de generar un ritmo de crecimiento de beneficios superior al del conjunto del mercado serán factores cruciales para determinar qué acciones tecnológicas generarán un rendimiento superior.

Como se vio en diversos recortes de plantilla, algunas empresas tecnológicas ya están captando el mensaje. Meta, por ejemplo, está llamando a 2023 su «año de eficiencia» después de que los inversores se desprendieran de sus acciones en 2022 debido a lo que percibieron como una expansión excesiva. Otras acciones hasta ahora de alto crecimiento exigen que los directores de línea aborden el avance de los indicadores clave de rendimiento por primera vez.

Como se indicó, la forma en que las empresas plantean el equilibrio entre la inversión y la rentabilidad depende de su sector específico. Las empresas maduras con altos costes fijos y largos ciclos de inversión no pueden adaptarse a una economía que pierde impulso. Los directores de estos negocios deben ser especialmente astutos para asegurarse de que esto no les coja por sorpresa. A modo de ejemplo, aunque creemos que la oportunidad de crecimiento del Software como Servicio (SaaS) es sustancial, estas empresas ya sienten la presión que implica equilibrar la rentabilidad y el crecimiento. No obstante, el SaaS puede resultar más ágil durante las ralentizaciones, ya que buena parte de su base de gastos está compuesta por gastos de personal.

Desde la perspectiva del inversor, consideramos que este proceso de maduración es bien acogido. Creemos que el sector tecnológico, dada su capacidad para impulsar la productividad, aumentará su cuota en las ganancias corporativas totales durante la próxima década. Esto implica un crecimiento continuado y, por lo tanto, inversión. Sin embargo, dado el crecimiento maduro de algunos sectores y la mayor exposición al ciclo económico, los inversores esperarán que la rentabilidad (y el retorno de valor a los accionistas) sean las nuevas prioridades de los directores. Es buena señal que esto ya esté ocurriendo, ya que muchas empresas tecnológicas de mega capitalización están utilizando sus reservas de tesorería para pagar dividendos y recomprar acciones.

 

 

Tribuna de Denny Fish, gestor de cartera de Janus Henderson Investors.

La dualidad inflación y recesión

  |   Por  |  0 Comentarios

Pixabay CC0 Public Domain

La renta variable global mantuvo su positiva trayectoria en abril, con el índice S&P 500 subiendo un 1,6%1. En moneda local, los índices MSCI Europe y MSCI Japan obtuvieron un 2,7%, respectivamente1. Por el contrario, el índice MSCI Emerging Markets (USD) cayó un 1,1%1, siendo el índice MSCI China unos de los principales lastres en el mes con un retroceso del 3,3%1 debido a las rebajas de las previsiones de beneficios y las tensiones entre Estados Unidos y China. La mayoría de las empresas del S&P 500 anunciaron beneficios mejores de lo esperado en el primer trimestre, lo que provocó una revisión al alza en las proyecciones de beneficios para todo el año. Sin embargo, con solo un puñado de nombres impulsando las ganancias mayoritarias, la sostenibilidad de este repunte es cuestionable.

Las tires de los bonos se negociaron entre rangos a lo largo del mes, aunque permanecieron volátiles dentro del intervalo, con la TIR del bono a 10 años del Tesoro estadounidense entre el 3,3%2 y el 3,6%2. En general, la TIR del bono estadounidense a 10 años sufrió un ligero descenso con respecto al mes pasado, cerrando el mes en el 3,4%2. El índice VIX siguió moviéndose en una horquilla delimitada, alcanzando el nivel de 17,03 para finales de mes.

La inflación general estadounidense se ralentizó por noveno mes consecutivo hasta el 5,0%4 en marzo de 2023, por debajo de las previsiones del mercado, que apuntaban a un 5,2%5, y registrando su nivel más bajo desde mayo de 2021. El Comité Federal de Mercado Abierto (FOMC) anunció una subida de los tipos de 25 puntos básicos tras su reunión de mayo6. Esto sitúa el rango objetivo en el 5,25%6, el nivel más alto desde 2007. Sin embargo, el lenguaje pareció más suave que la última vez sin indicios de subidas adicionales. El mercado laboral de Estados Unidos todavía está restringido, aunque se está enfriando lentamente, lo que refuerza la perspectiva de que la Reserva Federal puede mantener los tipos sin nuevos aumentos por el momento. Sin embargo, si la inflación se desancla, volverá a actuar de nuevo.

Por su parte, en Europa, Reino Unido sigue siendo el único país de Europa occidental con una inflación de dos dígitos, en el 10,1%7 . Una inflación subyacente superior a la esperada y la continua rigidez del mercado laboral están obligando al Banco de Inglaterra (BoE) a mantener una política restrictiva. La inflación evolucionó relativamente mejor en la zona euro, situándose en el 6,9%8, y bajó con fuerza a medida que la caída de los precios de la energía continúa aliviando la presión sobre el coste de la vida. Con la inflación aún muy elevada, especialmente en comparación con Estados Unidos y los objetivos a largo plazo, esperamos nuevas medidas por parte del Banco Central Europeo (BCE) y el BoE.

Tras las turbulencias en el sector bancario de las últimas semanas, los diferenciales de crédito parecen haberse calmado y los riesgos de los bancos más pequeños parecen estar desvaneciéndose. Dicho esto, es probable que se mantengan unas condiciones crediticias más exigentes. Sin embargo, es probable que la sorprendente fortaleza, la aceleración y el momento positivo del primer trimestre dificulten que la economía se desacelere lo suficiente como para producir una tasa de crecimiento negativa continua en el segundo trimestre.

Repercusiones para la inversión
Los efectos generales del endurecimiento de la política monetaria llevado a cabo por los bancos centrales todavía no se han percibido por completo, aunque el riesgo de recesión a corto plazo parece haber disminuido. Esto implica que, a pesar de la reciente mejoría de los datos, la diversificación de una cartera equilibrada sigue siendo crucial en vista de la significativa volatilidad. Teniendo ese contexto en cuenta, realizamos los siguientes cambios tácticos en abril:

Redujimos nuestra exposición a renta variable del sector de la energía liquidando nuestra exposición a acciones de energéticas estadounidenses dado que percibimos menos potencial alcista para los precios del petróleo después de las subidas recientes, evolución que, a su vez, deja menor margen de subida para la energía estadounidense, con una beta mayor con respecto a los precios del petróleo.

Redujimos la sobreponderación en renta variable del MSCI China al estancarse las revisiones positivas de las ganancias, a pesar del dinamismo que brindó la reapertura de la economía del país. Además, la elevada prima de riesgo por las continuadas tensiones entre Estados Unidos y China debilita la convicción a corto plazo.

Incorporamos una sobreponderación en renta variable de pequeña capitalización estadounidense durante abril dado que las valoraciones relativas comparadas con la gran capitalización estadounidense se encuentran en niveles de un atractivo histórico. Además, el consenso bajista y la reacción exagerada de la pequeña capitalización estadounidense a la reciente inestabilidad bancaria son también factores favorables.

Liquidamos nuestra sobreponderación en high yield en euros porque esperamos que la intensificación de los obstáculos sobre la refinanciación y económicos orienten los riesgos hacia unos diferenciales más amplios en los próximos meses. Es probable que la falta de disponibilidad de capital y el aumento de los costes para la captación de fondos incidan de manera desproporcionada en las empresas de mayor riesgo.

Al cerrar nuestra sobreponderación en high yield en euros, asignamos el producto a nuestra sobreponderación existente en bonos de titulización de globales para elevar nuestra exposición a rentabilidad de alta calidad. Seguimos confiando en la asignación dada la limitada exposición a inmuebles comerciales y nuestra expectativa de que es improbable que el rendimiento del crédito hipotecario estadounidense se vea sometido a una presión sustancial, incluso en un entorno de recesión.

 

Tribuna de opinión de Andrew Harmstone y Jim Caron, managing directors del equipo Global Balanced Risk Control.

 

1 Bloomberg, rentabilidades de 1 mes, en moneda local salvo que se indique otra cosa, a 30 de abril de 2023.
2 Bloomberg, 3,3% a 5 de abril de 2023, 3,6% a 19 de abril de 2023 y 3,4% a 30 de abril de 2023.
Bloomberg, 30 de abril de 2023.
4 Oficina de Estadísticas de Empleo de Estados Unidos, resumen del índice de precios al consumo, 12 de abril de 2023, sin ajuste estacional. https://www.bls.gov/news.release/cpi.nr0.htm
5 Morningstar: https://www.morningstar.com/articles/1149028/markets-brief-march-cpi-report-forecasts-show-inflation-still-running-high
6 https://www.federalreserve.gov/newsevents/pressreleases/monetary20230503a.htm
7 Tasa del IPC de 12 meses a marzo de 2023. https://www.ons.gov.uk/economy/inflationandpriceindices/bulletins/consumerpriceinflation/march2023
https://ec.europa.eu/eurostat/statistics-explained/index.php?title=Inflation_in_the_euro_area a marzo de 2023.

Por qué los inversores europeos deberían mirar más allá de sus fronteras

  |   Por  |  0 Comentarios

Tras una complicada transición desde un entorno de tipos bajos durante mucho tiempo, la renta fija parece haberse estabilizado y haber recuperado su atractivo, en términos de diversificación y de obtención de rentas, después de que los rendimientos hayan alcanzado niveles que no habían alcanzado en muchos años. Frente a estas buenas noticias, la reciente crisis bancaria en Estados Unidos es otro recordatorio de la volatilidad a la que los inversores de renta fija se enfrentan en la nueva normalidad.

Seguramente, este nuevo régimen macroeconómico se caracterizará por ciclos más cortos e intensos y una mayor incidencia de riesgos idiosincráticos, por países, sectores o emisores individuales. En este entorno, creemos que combinar la flexibilidad de la gestión activa con una mayor diversificación sustentada en el análisis fundamental puede ser decisivo para lograr buenos resultados en el futuro. Y uno de los factores más importantes que se deben considerar es la diversificación geográfica.

En esta coyuntura, la búsqueda activa de oportunidades en el universo global de la renta fija puede resultar muy interesante para los inversores europeos. En comparación con Estados Unidos, la dinámica de los tipos en Europa parece tender al alza y los costes de cobertura pueden llegar a ser sustancialmente más bajos.

Cuatro razones por las que adoptar un posicionamiento global podría generar beneficios

Hasta hace poco, los rendimientos en los bonos core europeos seguían una trayectoria constante a la baja que, en algunos ejercicios, provocaba flujos de salida. Hoy, este fenómeno ha remitido y los rendimientos de la deuda pública europea han vuelto a niveles relativamente atractivos, mientras que la fortaleza del dólar estadounidense ha castigado las asignaciones internacionales, lo que lleva a los inversores europeos de renta fija a apostar por su región. Sin embargo, de cara al futuro, creemos que diversificar las exposiciones domésticas o regionales podría resultarles más rentable. Se diría que esta idea va en contra de las estrategias tradicionales para afrontar las recesiones, aunque debemos recordar que es probable que la próxima sea muy diferente a las vividas hasta ahora. En nuestra opinión, el nuevo régimen brinda cuatro buenos motivos para que los inversores de renta fija diversifiquen sus carteras a nivel global.

1) Acceder a oportunidades en un panorama político global inestable – Los bancos centrales se encuentran en diferentes fases del ciclo. En Estados Unidos, la crisis de los bancos regionales podría suponer un endurecimiento significativo de las condiciones crediticias. Esta posible restricción podría obligar a la Reserva Federal (Fed) a concluir su ciclo de subidas antes que otros bancos centrales importantes, en especial el Banco Central Europeo (BCE). En Europa, los tenedores de bonos también se han beneficiado de una década de compras masivas por parte del BCE como parte de sus programas de compra de activos y de emergencia pandémica. El Gráfico 1 ilustra la magnitud de dichas medidas de apoyo.

La retirada de ese apoyo, conforme el supervisor europeo empiece a reducir su balance, junto con un mayor endurecimiento de la política monetaria, podría representar un importante revés para los tipos europeos. Además, a diferencia de lo que ocurre en Estados Unidos y el Reino Unido, donde se espera una contracción de la política fiscal, los presupuestos de buena parte de la Unión Europea se mantendrían expansivos, impulsando con ello aún más la subida de los tipos.

2) Posicionarse frente a una inflación más impredecible en el futuro – Al mantener los tipos en niveles restrictivos, la Fed podría reducir considerablemente la inflación ralentizando el crecimiento de EE. UU. Por su parte, la reapertura económica en China podría representar un impulso para el crecimiento global y las materias primas, lo cual enturbiaría mucho más las perspectivas inflacionarias que en anteriores recesiones estadounidenses. En un entorno como este, los sesgos domésticos pueden depender en exceso de los supuestos asumidos en el pasado; por ejemplo, en la última década la zona euro ha sido una fuente de desinflación para el mundo, pero este fenómeno parece estar invirtiéndose, dado que tanto la inflación principal como la subyacente se sitúan ahora sistemáticamente por encima de la media del G7 (Gráfico 2).

Gráfico 2

3) Sacar partido de las oportunidades para sortear la volatilidad y el riesgo de eventos – Atisbamos en el horizonte un alto grado de volatilidad y un persistente riesgo de eventos, como la posibilidad de nuevas dificultades para determinados segmentos del sistema bancario y otros sectores que dependen del crédito, la continuidad de la guerra en Ucrania y la multiplicación de los episodios de inestabilidad social y política a medida que la población se enfrente a un coste de la vida cada vez mayor en todo el mundo. Los cambios de rumbo en la política de los bancos centrales pueden brindar oportunidades, pero también riesgos, entre los que destaca el inminente abandono, por parte del Banco de Japón, de su prolongado programa de control de la curva de rendimientos. Concebido como un mecanismo de estímulos para apuntalar la inflación en el país, a las instituciones japonesas les ha supuesto invertir miles de millones en compras de bonos europeos para generar rentabilidades positivas, con lo que un giro de esta política podría representar un contratiempo para la renta fija europea.

En la última década, la deuda europea se ha beneficiado de las compras masivas del Banco Central Europeo en el marco de sus programas de compra de activos y de compras de emergencia frente a la pandemia, que han ascendido a 5 billones de euros desde 2014. Sin embargo, con el endurecimiento de la política monetaria del BCE y la reducción gradual del balance, los tipos podrían resentirse en Europa, ya que han desaparecido los inversores que compran con límites de precio en un momento en que la política fiscal expansiva supone un récord de nuevas emisiones. Todos estos eventos son factores desencadenantes de una mayor volatilidad que puede mitigarse mediante la diversificación en diferentes regiones.

4) Aprovechar los menores costes de cobertura – El crecimiento mayor de lo previsto en Europa y la elevada inflación mantendrán la presión sobre el BCE para que prolongue su ciclo de subidas de tipos. En cuanto el ciclo restrictivo del banco europeo se equipare al de su homólogo estadounidense, la reducción de los diferenciales de tipos a corto plazo entre EE. UU. y Europa debería contribuir a reducir los costes de cobertura para los inversores europeos que operan en los mercados globales de renta fija. Los indicadores fundamentales siguen siendo muy sólidos en Europa gracias a la recuperación de los márgenes de beneficios de las empresas, la normalización de los costes laborales unitarios en la Europa periférica frente a la core y la mejora de los ingresos reales de los consumidores. Bajo nuestro punto de vista, estos factores favorecen la continuidad de un mayor rendimiento del euro y de la mayoría del resto de las divisas europeas frente al billete verde y, en consecuencia, la reducción de los costes de cobertura.

Cómo gestionar una cartera global

Para gestionar con eficacia una cartera global son necesarias determinadas competencias que aúnen un profundo conocimiento de los mercados globales y locales con conocimientos macroeconómicos y geopolíticos. Asimismo, pensamos que una estrategia activa basada en el análisis fundamental puede dotar a los inversores de mayor flexibilidad a la hora de lidiar con el complejo e incierto contexto actual, que podría generar nuevos episodios de volatilidad. En el caso de los inversores europeos, la gestión activa puede ser especialmente útil, dada la enorme disparidad de entornos políticos en los que deben abrirse camino, con significativas diferencias entre países y sectores.

Conclusiones

La mayoría de los inversores suelen presentar un sesgo doméstico y a menudo esta opción les ha generado una rentabilidad positiva. Sin embargo, creemos que ha llegado el momento de que los inversores europeos dirijan su mirada hacia las oportunidades a nivel global, pues estamos convencidos de que les ayudará a proteger sus carteras de la volatilidad idiosincrática de cada país y a preservar los rendimientos. Hacerlo de forma activa puede ofrecer ventajas en términos de riesgo y rentabilidad. Y, si bien el grado de exposición global adecuado cambiará en función de las circunstancias concretas de cada inversor, estimamos oportuno que la mayoría revise sus carteras a medida que nos adentremos en un régimen estructuralmente diferente que podría poner en tela de juicio muchas estrategias que funcionaron bien durante los últimos años.

Wellington Management, con más de 400 mil millones de dólares gestionados en renta fija se encuentra entre los líderes en la gestión de carteras de esta clase de activo. Su oferta comprende una amplia gama de fondos de renta fija con diversos objetivos de inversión.

Para saber más sobre Wellington Management visite su página web.

Tribuna escrita por el especialista en inversión de Wellington Managment, Marco Giordano.

BBVA Asset Management reparte otro millón de euros a 23 proyectos solidarios en su quinta convocatoria

  |   Por  |  0 Comentarios

Pixabay CC0 Public Domain

BBVA Asset Management (BBVA AM) ha anunciado los ganadores de la V Convocatoria Solidaria BBVA Futuro Sostenible, que reparte un total de un millón de euros entre 23 ONG por todo el territorio español. Sus proyectos solidarios se encuentran enmarcados dentro de los ámbitos de la inclusión social; dependencia, mayores y salud, y medio ambiente. En estos cinco años, BBVA AM ha distribuido más de 4,2 millones de euros entre un total de casi 100 proyectos solidarios, lo que ha generado un impacto positivo directo e indirecto en más de 370.000 personas.

BBVA Futuro ISR es un fondo de inversión solidario socialmente responsable (ISR) que, desde hace cinco años, dona anualmente una parte de lo que recauda por la comisión de gestión a proyectos solidarios. El producto de inversión, que tiene más de 22 años de historia, supera actualmente los 2.000 millones de euros de patrimonio y cuenta con casi 80.000 partícipes. El equipo gestor selecciona compañías que integren en su estrategia y operativa oportunidades de minimización de riesgos medioambientales, sociales y de gobernabilidad, para crear valor a medio y largo plazo.

En este quinto aniversario, BBVA AM ha vuelto a repartir un millón de euros entre 23 proyectos de distintas temáticas que se desarrollan en distintas localizaciones de España. El importe íntegro de la donación impactará directamente en 24 provincias de doce comunidades autónomas diferentes, ya que algunos proyectos se desarrollan en varias regiones a la vez.

Cerca de 170 voluntarios de BBVA y BBVA AM repartidos por todo el territorio español han participado en la selección, evaluación y análisis de los candidatos con el propósito de elegir los mejores proyectos para luchar contra el cambio climático y la desigualdad a través del crecimiento inclusivo.

La dotación económica se ha repartido en tres donaciones de 100.000 euros para un proyecto de cada una las tres áreas de actuación: la Fundación Cris de Investigación para Vencer el Cáncer, con un proyecto de dependencia, mayores y salud; la Fundación Balia por la Infancia, con un proyecto de inclusión social, y la Fundación Ecología y Desarrollo (ECODES) con un proyecto de medio ambiente.

Los 700.000 euros restantes se han asignado a 20 donaciones de 35.000 euros. Como novedad, este año, estas donaciones se han dividido entre proyectos sociales (cuatro donaciones para cada una de las cuatro zonas geográficas en las que se ha dividido el territorio nacional) y proyectos medioambientales (cuatro donaciones para proyectos que fomenten y cuiden el medioambiente en cualquier punto de la geografía nacional).

Las cuatro zonas geográficas en las que se ha dividido son: Zona A (Comunidad de Madrid y Castilla-La Mancha), Zona B (Cataluña, Comunidad Valenciana, Región de Murcia e Islas Baleares), Zona C (Galicia, Principado de Asturias, Cantabria, País Vasco, La Rioja, Navarra, Aragón y Castilla y León) y Zona D (Extremadura, Andalucía, Islas Canarias, Ceuta y Melilla).

BBVA Asset Management con la sostenibilidad y la integración social

Desde hace años, BBVA AM se encuentra comprometido con la inversión sostenible. De hecho, la gestora de activos es pionera en la aplicación de criterios ambientales, sociales y de buen gobierno en sus inversiones (ASG), con la firma de los Principios de Responsabilidad de Naciones Unidas (UNPRI) en 2008.

Desde entonces, BBVA AM ha ido afianzando su apuesta por la sostenibilidad incorporando criterios ASG en el proceso de inversión de todos los vehículos gestionados, apoyándose en cuatro pilares: compromiso, exclusión, integración y estrategia de impacto.

El repunte de los bonos del Tesoro ofrece una nueva oportunidad

  |   Por  |  0 Comentarios

Foto de Clique Images en Unsplash

La publicación del dato de IPC de mayo en Estados Unidos da soporte a nuestra tesis respecto al atractivo de la deuda pública y el aumento en duración. El breakeven 10 años se mantiene prácticamente donde estaba antes del anuncio, pero el componente de tipos reales ha continuado subiendo y está cerca de la zona de máximos (1,63%) del canal de consolidación en el que se ha venido moviendo desde octubre (1,75% a 1,05%) .

El crecimiento mensual, tanto del IPC general como del subyacente, cumplió con las expectativas, subiendo respectivamente un 0,1% y un 0,4%, y los dos principales focos de preocupación -alquiler y vivienda (+0,6%) y coches de segunda mano (+4,4%)- lo fueron menos al haber argumentos para pensar que el subíndice de precios para estas partidas disminuirá rápidamente. El indicador de precios de alquiler de Zillow, que registraba en febrero un aumento en tasa interanual del 17%, ahora solo sube un 4%.

Las conclusiones son las mismas si usamos series similares como la confeccionada por Apartment List o el índice de precios de vivienda S&P/Case Shiller que, de subir cerca del 21% en tasa interanual el verano pasado, se ha frenado en seco (+0,66% en marzo) y anticipa una caída en la renta equivalente al propietario (OER) desde el 8% al 3%, aproximadamente, a 12-15 meses vista. Respecto a los vehículos usados, el índice Manheim, que se anticipa en uno o dos meses a la evolución de este subíndice del IPC, ha vuelto a entrar en tendencia bajista desde abril, después de un amago de repunte en el primer trimestre.

La medida del coste de la vida preferida por Jerome Powell -IPC servicios básicos en vivienda- aumentó un 0,24% en mayo, situándose en un 4,6% año sobre año, el sexto descenso consecutivo desde enero (6,19%). Por otro lado, la percepción respecto a que la inflación sigue subiendo apoyada en un número decreciente de componentes queda confirmada por series como la de la inflación recortada (“trimmed”) de la Fed de Cleveland, con más del 50% de los componentes del IPC subyacente marcando una tasa de inflación anualizada inferior al 3% en mayo.

Todavía queda por ver cuán persistente será la presión inflacionista y, como consecuencia, cuánto tiempo tardaremos en regresar a la zona de confort del BCE y de la Fed. Curiosamente, la lectura de los inversores que, contra todo pronóstico, han aguantado el tipo ante la inminencia de la recesión descontando la proximidad de un ciclo bajista en tipos a punto de comenzar y participando agresivamente en el rally en acciones ligadas a la temática de inteligencia artificial generativa por miedo a quedarse fuera, son los mismos que defienden la vertiente deflacionista que esta nueva y disruptiva tecnología traerá a la economía. A priori, como sucedió en la revolución industrial del siglo XVIII, la inteligencia artificial mejorará a largo plazo la eficiencia -los beneficios de internet tardaron más de una década en traducirse en mejoras en productividad-, optimizará los procesos de producción y disminuirá los costes, actuando como una fuerza deflacionista. También, como pasó a partir del inicio de la revolución industrial, la calidad y la esperanza de vida deberían aumentar, compensando en parte ese efecto deflacionario.

No obstante, los inversores cada vez centran más su atención en lo inmediato, y en este sentido la historia nos ha enseñado que el ciclo inmobiliario anticipa la evolución del mercado de trabajo, que podría enfriarse muy rápidamente en EE. UU pero también en Europa.

 

Y aunque es factible que se alcance el (nuevo) objetivo de la Fed para la inflación subyacente del PCE a finales de año, la gráfica demuestra que no está tan claro. El índice de sorpresas macro ha repuntado. Las ventas minoristas han batido a las proyecciones, como también lo han hecho la encuesta Empire de Nueva York y Philly Fed. El PCE solo puede subir de media mensual un 0,32% los próximos seis meses para no superar el 3,9%, y desde 2021 un 60% de los meses esta serie ha marcado crecimientos superiores.

Esta falta de visibilidad respecto a la tendencia en crecimiento, además del propósito de no incomodar innecesariamente a los inversores, puede ser uno de los factores que expliquen el resultado de la junta de la Fed del miércoles.

El banco central estadounidense, como se esperaba, decidió tomarse una pausa dentro de este ciclo de tensionamiento en tipos de interés, que “permite al Comité evaluar información adicional y sus implicaciones para la política monetaria”.

La sorpresa estuvo por un lado en la revisión del resumen de proyecciones económicas (SEP), que dejaba de manifiesto la aceptación de una economía que no acaba de frenar todo lo que debería para garantizar el regreso de la inflación al 2%, y por otro en el ajuste en el “mapa de puntos” que -en contra de sugerir recortes como aún espera el mercado- dejaban la puerta abierta a más subidas a partir de julio.

Por el lado del SEP, el pronóstico para el PCE subyacente a cierre de ejercicio pasó del 3,6% al 3,9%, mientras que la estimación del PIB aumentó del +0,4% al +1%, y la tasa de desempleo bajó del 4,5% al 4,1%. En lo que respecta a los “puntos”, la mediana para el año en curso se incrementó hasta 5,625% (dos subidas más), mientras se sumaba 0,25% a las de 2024 y 2025.

El tono halcón de la Fed y la subida -totalmente descontada de 0,25%- del BCE incrementan los riesgos de contracción. Alemania está ya en recesión técnica y en Estados Unidos se produce la inusual coincidencia de un aumento en la tasa terminal y una probabilidad de PIB negativosegún la propia Fed– de más del 70%. Los tipos están en zona restrictiva para el crecimiento y la respuesta del mercado de bonos europeo a la conferencia de prensa de Lagarde (invirtiendo aún más la curva) muestra la creciente preocupación de los inversores ante un tensionamiento monetario que se antoja excesivo (con indicadores de actividad y confianza como el de expectativas del ZEW o el PMI sueco apuntando a un fuerte retroceso de actividad).

Por todo ello, y a pesar de la volatilidad, el repunte en rentabilidad de los bonos del Tesoro es una nueva oportunidad para aquellos que aún no hayan incrementado la duración en sus carteras. Por la parte de la renta variable, el mayor castigo recibido por la renta fija comprime aún más la prima de riesgo que ya se sitúa en los niveles más bajos desde 2018.

Ser propietario de obras de arte ya no es sinónimo de riqueza

  |   Por  |  0 Comentarios

De izquierda a derecha: Rubén Puga y Yassir Belljelloun-Touimi

“Todo el mundo puede tener una pieza de historia”. Así comenzaba la presentación de Artex, la primera bolsa de acciones de arte del mundo. El proyecto, cofundado por el Príncipe Wenceslao de Liechtenstein y Yassir Belljeloum-Touimi, CEO y cofundador de Artex, en 2020, ha sido presentado por este último y el director general de Artex España, Rubén Puga

Una encuesta realizada por Deloitte en 2020 demostraba que el 85% de los gestores a nivel mundial afirmaba que el arte debía formar parte, y ser un activo, de las carteras de los clientes.

Artex nace con el fin de democratizar la inversión en las mejores obras maestras del mundo, cubriendo un periodo que va desde el Renacimiento hasta el siglo XX. “Generar y enseñar cultura. El objetivo es que más personas, más accionistas, puedan participar del arte”, apunta Puga. Este proyecto innovador pretende dejar atrás la concepción de que el arte es elitista.

Artex MTF cotiza en una bolsa de valores de arte segura y líquida, regulada y supervisada por la Autoridad del Mercado Financiero de Liechtenstein (FMA) y que cumple con la directiva europea MiFID II. “Llevamos a muchas personas, a nivel mundial, la posibilidad de invertir desde 100 euros una acción de cualquier cuadro de máximo nivel y con liquidez absoluta y regulado. Esa es la gran diferencia que aporta Artex”, confiesa Puga.

La empresa se ha aliado con SIX, dueño de Bolsas y Mercados Españoles (BME), como prestador de los servicios de compensación y liquidación y proveedor de datos.

Artex selecciona obras de gran prestigio que tengan un valor de, al menos, 50 millones de euros. Las acciones de los cuadros tendrán un valor nominal inicial de 100 euros. Las obras cotizadas en Artex se expondrán al público en museos y exposiciones a nivel mundial. 

El pistoletazo de salida será protagonizado por la obra Tres estudios para un retrato de George Dyer (1963), óleo sobre lienzo del pintor británico de estilo figurativo idiosincrásico, Francis Bacon. “Él trajo la evolución y la revolución”, señala Belljeloum-Touimi. La obra, valorada en 55 millones de euros, se alistará el 22 de septiembre y saldrá en lotes del 10%, hasta llegar al 100%. 

Esta salida dará paso a otras obras de pintores de la talla de Vincent van Gogh. Tal y como confirma Puga “pronto tendremos nuevo listado”. Artex pretende listar un total de 1.000 millones de euros en obras en un periodo de tres años. “Queremos que haya un impacto a nivel mundial, tanto social como cultural”, aclara Puga. 

Asimismo, Artex se esforzará por permitir a los inversores comprender mejor el mercado del arte ofreciéndoles análisis sobre las últimas noticias en el mundo del arte, así como contenido educativo para ayudar a incrementar el conocimiento en la inversión en arte.