Revolut, la app financiera global con más de 50 millones de clientes en todo el mundo y más de 4 millones en España, ha anunciado el lanzamiento de planes de inversión en ETFs (fondos cotizados), ahora disponibles en todo el Espacio Económico Europeo (EEE), incluida España.
Con sus planes de inversión en ETFs sin comisiones, Revolut busca facilitar el acceso a la inversión a un público más amplio y ayudarles a sacar el máximo partido a su dinero. Los clientes pueden programar aportaciones automáticas y recurrentes, por ejemplo, semanales, desde 1 euro para invertir en más de 300 ETFs listados en la UE de gestoras como BlackRock, Vanguard o Amundi. Estas operaciones serán completamente libres de comisiones y no se descontarán del límite mensual de su plan de suscripción.
Una encuesta representativa realizada por Dynata para Revolut en España reveló que para el 30% de los inversores las comisiones bajas y transparentes son el factor más importante al elegir un proveedor de inversiones. Gracias a los planes de inversión en ETFs sin comisiones de Revolut, todo el dinero invertido permanece en la cartera del cliente, lo que maximiza el efecto del interés compuesto y fomenta un mayor crecimiento a largo plazo.
Los ETFs (fondos cotizados) son fondos de inversión que replican un índice o una amplia colección de valores o materias primas, ofreciendo una diversificación instantánea en un único producto. Revolut ofrece una amplia gama de ETFs adaptados a distintos perfiles de riesgo y objetivos de inversión, desde ETFs centrados en bonos hasta alternativas basadas en acciones.
El boom de los ETFs
El mercado global de ETFs ha experimentado un rápido crecimiento, impulsado por su transparencia, bajo coste y flexibilidad, con una adopción creciente entre los inversores minoristas. En 2024, se ejecutaron mensualmente 10,8 millones de planes de inversión en ETFs en Europa continental, alcanzando un volumen de ahorro de 17.600 millones de euros. En España, los datos internos de Revolut revelan que durante 2024 algo má de un 10% de la cartera de los inversores españoles en Revolut estuvo compuesta por ETFs, un notable incremento frente al 1% de 2023, siendo Vanguard S&P 500 ETF (Dist), con un rendimiento del 35 %, el ETF más negociado.
Rolandas Juteika, Head of Wealth and Trading (EEE), ha comentado: «Los grandes sueños siempre comienzan con un plan. Nuestros planes de inversión simplifican la construcción de patrimonio al automatizar las aportaciones, sin comisiones. Al ofrecer planes de inversión en ETFs sin comisiones, empoderamos a las personas para sacar más partido a su dinero y tomar decisiones financieras más inteligentes. Nos hemos centrado en ofrecer una experiencia de usuario fluida e intuitiva, permitiendo a los clientes recargar fácilmente desde su cuenta principal y automatizar sus aportaciones con solo unos clics. Invirtiendo de forma regular en ETFs elegibles, nuestros clientes pueden mitigar la volatilidad a corto plazo y aprovechar el poder del interés compuesto. La automatización les permitirá gestionar y ajustar sus carteras de ETFs de forma eficiente y con el mínimo esfuerzo».
Revolut ofrece una amplia gama de opciones de inversión para sus clientes en el Espacio Económico Europeo (EEE), con más de 5000 activos financieros disponibles dentro de su app, incluidos acciones de EE.UU. y del EEE, ETFs, bonos corporativos y gubernamentales. Para quienes tienen poca experiencia en trading o no disponen de tiempo para realizar investigaciones exhaustivas, Revolut ofrece su servicio de roboadvisor, diseñado para simplificar el proceso de inversión. Para los clientes más activos, la compañía ha lanzado Trading Pro, una suscripción de pago que incluye beneficios como comisiones reducidas en la mayoría de los instrumentos, límites más altos en el tamaño de las órdenes y funcionalidades analíticas avanzadas.
Desde el pasado 7 de enero, diversos incendios arrasan Los Ángeles, afectando gravemente a áreas como Pacific Palisades y Malibú. Hasta el momento, se han contabilizado al menos 24 víctimas mortales y 130.000 evacuados, además se estima entre 250.000 y 275.000 millones de dólares en pérdidas económicas y más de 12.000 estructuras destruídas. “Los incendios han destruido áreas residenciales de alta densidad poblacional, lo que ha requerido la remediación de la contaminación y la reconstrucción, y probablemente se convertirán en uno de los desastres naturales más costosos en la historia de EE.UU.”, apunta Fitch Rating en su informe de esta semana.
La industria de asset management también se está viendo afectada, en particular aquellas firmas internacionales que tienen su sede en Los Ángeles, como es el caso de firmas como Capital Group, Oaktree Capital Management, Ares Management Corporation o DoubleLine Capital. Además, a lo largo de los años, la ciudad ha destacado por su especialización en las inversiones alternativas -destaca su mercado de real estate- y por la conexión de la comunidad inversora con la industria del entretenimiento y la tecnología. Además, los profesionales de la industria coinciden en que las firmas que operan desde Los Ángeles están liderando la adopción de estrategias ESG, impulsadas por la conciencia ambiental de California y el enfoque de los inversionistas en sostenibilidad.
Durante estas semanas, uno de los aspectos que más se está tratando de esgrimir es cuál será el impacto económico, sectorial y financiero que está generando y que dejará esta catástrofe natural. La respuesta a esta búsqueda es parcial e imprecisa, ya que los incendios no han sido controlados y la evacuación de las personas sigue siendo la prioridad. «Los incendios pusieron de manifiesto posibles negligencias, como el suministro inadecuado de agua para la extinción de incendios y la paralización de proyectos de prevención de incendios, lo que dio lugar a acciones legales contra los servicios públicos locales. Los analistas señalan la elevada concentración de pérdidas no aseguradas, que está aumentando la carga financiera de residentes y gobiernos. Se espera que los esfuerzos de reconstrucción duren años, lo que se traducirá en mayores impuestos y costes de seguros», comenta John Plassard, Investment Specialist de Mirabaud Wealth Management.
Finanzas públicas
Por ahora, hemos encontrado diversos informes que, como si estuviéramos construyendo un mosaico, aportan luz sobre una parcela concreta del ecosistema financiero. Por ejemplo, Fitch Rating ha analizado cómo los incendios podrían poner a prueba la resistencia de las finanzas públicas estadounidenses. Su principal conclusión es que “la resiliencia financiera de los emisores de Finanzas Públicas de EE.UU. respaldará su calidad crediticia a corto plazo ante la devastación de los incendios forestales en el área metropolitana de Los Ángeles”. Según explica, los emisores pueden enfrentar, en última instancia, el incremento de costes y la erosión de su base de ingresos, pero su informe reconoce que aún es temprano para determinar la magnitud de las presiones crediticias potenciales.
“Hasta la fecha, los daños catastróficos por incendios se encuentran principalmente en la ciudad de Los Ángeles (el incendio de Palisades) y en el condado no incorporado de Los Ángeles (el incendio de Eaton, que afecta a Altadena). Estas y otras municipalidades calificadas, incluyendo Santa Mónica y Pasadena, experimentarán retrocesos económicos temporales debido a evacuaciones y las interrupciones en los negocios y actividades recreativas”, indican.
Además, el informe de Fitch Rating apunta que el estado y los gobiernos locales afectados, así como las utilidades municipales y entidades sin fines de lucro, cuentan con una flexibilidad financiera significativa para gestionar los costes incrementados mientras esperan el reembolso de la Agencia Federal para el Manejo de Emergencias (FEMA, por sus siglas en inglés).
Cuando la situación se solvente, Fitch Rating estima que las municipalidades experimentarán una disminución en los ingresos por impuestos debido a una ley estatal, que permite la reducción inmediata de las evaluaciones del impuesto a la propiedad a solo el valor del terreno tras un desastre natural. “Además, los contribuyentes afectados podrán posponer los pagos del impuesto a la propiedad que vencen en abril de 2025. La disminución de ingresos sería moderada en relación con la vasta base impositiva de la ciudad de Los Ángeles, pero aún así agravaría los déficits proyectados. El estado también enfrentará algo de incertidumbre en la previsión y recaudación de ingresos, dado que se ha otorgado recientemente una extensión en la presentación de la declaración del impuesto sobre la renta estatal a los contribuyentes del condado de Los Ángeles”, señalan.
Sector asegurador
Dentro de la industria financiera, el sector asegurador está acaparando gran parte de la atención, dado la magnitud de los daños que están provocando los incendios. Por ello, JP Morgan ha publicado un informe analizando la situación del sector y cómo le puede afectar este evento. Aunque concluye que la “salud” del sector es lo suficientemente buena como para absorber esta situación, advierte de que uno de los aspectos más subestimados y menos discutidos está siendo las coberturas de reaseguro de catástrofes que los aseguradores primarios tienen en vigor.
Sobre los nombres que componen esta industria, el informe de JP Morgan señala que las compañías tienen “una exposición muy distribuida”, por lo que reconoce que “estamos menos preocupados por nombres individuales en el espacio del reaseguro”. “Además, los eventos de los últimos días dejan cada vez más claro que el mercado de seguros de California necesita reformas. En nuestra opinión, la posibilidad de una regulación más flexible, junto con mejores precios prospectivos y una mayor prevención de incendios forestales, probablemente contribuirán a mejorar la rentabilidad con el tiempo en las líneas afectadas”, indica el documento.
Impacto económico
Según indica el informe del especialista de inversión de Mirabaud Wealth Management, los economistas esperan que estos efectos tengan un impacto marginal en los índices nacionales de inflación, con un ligero aumento de la inflación subyacente a corto plazo. «Lógicamente, los precios de la madera subieron con fuerza (+8%), alcanzando su nivel más alto en seis semanas, gracias a la fuerte demanda de materiales de construcción. Esto se debe a dos razones: las expectativas de reconstrucción de viviendas en California y, más en general, en Estados Unidos», apunta Plassard.
Dos datos que destaca este experto sobre cómo se está notando el impacto de la catástrofe son las solicitudes de hipotecas y la importación de madera canadiense. «Las solicitudes de hipotecas se dispararon un 33,3%, el mayor aumento semanal desde 2020, a pesar de los tipos hipotecarios superiores al 7%, ya que los compradores trataron de bloquear los costes de endeudamiento ante el temor de que subieran los tipos. Además de la presión alcista, la perspectiva inminente de un arancel del 25% sobre las importaciones de madera canadiense ha llevado a los compradores estadounidenses a acumular existencias, mientras que los aranceles existentes, de una media del 14,4%, ya están pesando sobre la oferta. La producción nacional sigue enfrentándose a la escasez de mano de obra y al cierre de fábricas, y la dependencia de las importaciones canadienses es crítica, ya que otros proveedores no tienen capacidad para satisfacer la demanda», explica.
BBVA Asset Management SGIIC y BBVA Pensiones EGFP se han adherido al Código de Buenas Prácticas de Inversores de la Comisión Nacional del Mercado de Valores. El objetivo de este código es promover una mayor implicación de los inversores institucionales en su papel de accionistas de las sociedades en que invierten.
La adhesión al Código de Buenas Prácticas de Inversores de la CNMV forma parte del plan de sostenibilidad que la gestora de activos de BBVA puso en marcha hace ya cuatro años y que incluye el compromiso como una de sus líneas de acción. Este compromiso se expresa a través del voto en las juntas de accionistas de las compañías en que invierte la gestora y en acometer acciones proactivas para influir e implicar a esas empresas para que mejoren su gestión, especialmente en el plano sostenible o medioambiental.
A través de la adhesión voluntaria a este código, BBVA AM y BBVA Pensiones se comprometen a actuar en el mejor interés de sus partícipes, por lo que la CNMV recomienda una orientación de inversión a largo plazo. Según señala el supervisor, esto implica promover que las sociedades cotizadas u otras sociedades en las que invierten los fondos de inversión y de pensiones tengan entre sus objetivos: la obtención de un rendimiento y creación de valor a largo plazo, que cuenten con un régimen de gobierno corporativo adecuado, que gestionen e integren adecuadamente en sus políticas y estrategias los riesgos y oportunidades relacionados con los aspectos sociales y medioambientales y que gestionen los posibles impactos que puedan implicar, ya se trate de un impacto financiero sobre la entidad o causar una externalidad, más allá de los aspectos estrictamente financieros.
Todo ello en consideración a su potencial para generar dicha rentabilidad a largo plazo.
“Se espera que el resultado genere un círculo virtuoso, que promueva una inversión responsable que evite una presión indebida para que las entidades en las que invierten adopten un enfoque predominantemente cortoplacista. Lo anterior contribuirá, a su vez, a la sostenibilidad de las entidades en las que invierten y de la sociedad y la economía en general”, subraya el código.
Si analizamos la situación actual de los mercados de inversión de renta variable, observamos que ningún otro gran mercado bursátil se acerca al nivel actual de valoración de Estados Unidos. Se espera que este primer trimestre del año 2025 siga siendo favorable para los mercados de renta variable estadounidenses de gran capitalización, mientras que el comportamiento de su homólogo europeo parece quedar en un segundo plano en medio del entusiasmo por la renta variable estadounidense. Es más, los flujos de capital hacia fondos de renta variable estadounidense han ascendido a más de 140.000 millones de dólares.
“Es muy probable que el primer trimestre de 2025 siga siendo favorable para los mercados de renta variable estadounidenses, especialmente para las large caps, dado el flujo ininterrumpido hacia estos valores. Sin embargo, la segunda mitad del año podría ser testigo de una vuelta a la realidad y a los fundamentales tras la hora de la verdad para la nueva administración estadounidense”, explica Nicolas Bickel, responsable de inversión en Edmond de Rothschild Banca Privada.
Bickel reconoce que la atracción de los inversores por la renta variable estadounidense se ha visto reforzada por los largos años de bajos tipos de interés, durante los cuales los inversores en busca de rentabilidad favorecieron estos activos, que se beneficiaron de un entusiasmo masivo, ligado entre otras cosas al dinamismo del sector tecnológico.
“Los gestores de fondos activos han aumentado progresivamente sus posiciones en renta variable estadounidense para seguir el ritmo de los índices mundiales. Incluso los hedge funds han sucumbido a esta moda, como en el periodo posterior a la crisis de 2008, cuando los mercados de renta variable subían un 15% al año, e incluso los fondos long-short adoptaron rápidamente una estrategia long-only para evitar quedarse rezagados”, afirma el responsable de inversión en Edmond de Rothschild Banca Privada.
Sebastian Paris Horvitz, director de análisis de LBP AM, cree que la temporada de resultados debería dar un cierto impulso al mercado estadounidense con algunos buenos resultados financieros. Además, considera que «las medidas de desregulación prometidas por Trump, el mercado debería encontrar apoyo en la promesa de una reducción del impuesto de sociedades hasta el 15 % (frente al 21 % actual). Estos factores nos llevan a mantener la sobreponderación en el mercado estadounidense, aunque la hayamos moderado como consecuencia de la subida de los tipos de interés y unas valoraciones exigentes».
Niveles de valoración
Sin embargo, advierte de que la consigna del “Make America Great Again” de la administración Trump podría chocar con la realidad, mientras que algunas economías como la europea y la china podrían ver resurgir las medidas favorables promulgadas por sus gobiernos en 2025. “Esta tendencia parece haberse estabilizado en los mercados estadounidenses que vienen obteniendo mejores resultados desde el último trimestre de 2024. El S&P 500 ha subido un 5,8% desde el 1 de noviembre y se acerca a los 60 máximos históricos en un año, algo que sólo ha ocurrido cuatro veces desde 1928. Al mismo tiempo, el Stoxx Europe 600 subió sólo un 1,4% en euros y fue negativo en dólares”, destaca Bickel.
“Estamos saliendo de un periodo muy inusual en el que un mercado estadounidense y un sector (el tecnológico) han dominado la generación de rentabilidad y, dentro de dicho sector, un reducido grupo de firmas excepcionales han impulsado la mayor parte de dicha rentabilidad. Este dominio ha sesgado el posicionamiento de los inversores y las valoraciones: las carteras de muchos inversores están muy expuestas a la renta variable estadounidense, mientras que prácticamente todos los sectores de renta variable no estadounidense son actualmente más baratos que sus equivalentes estadounidenses”, argumenta Justin Thomson, responsable de Renta Variable Internacional de T. Rowe Price.
Según reconoce Chris Iggo, CIO Core en AXA Investment Managers y presidente del AXA IM Investment Institute, este nivel de valoración ha sido una preocupación recurrente para los inversores en los últimos meses. Según algunas estimaciones, el S&P 500 cotiza a 22 veces el beneficio previsto a 12 meses; y en la misma medida, el Nasdaq 100 cotiza a 26 veces. “Se trata de valoraciones elevadas”, apunta Iggo.
Cuando se calcula los ratios precio/beneficios sobre una base ajustada a la inflación y cíclicamente, el S&P 500 se sitúa en el percentil 90 de su trayectoria 1995-2024. Una medida más amplia sitúa a Estados Unidos en su puesto de valoración del percentil 93 desde 1983. Ningún otro gran mercado bursátil se acerca al nivel actual de valoración de Estados Unidos.
“No obstante, la valoración no es garantía de rentabilidades futuras. Los inversores mantienen una visión positiva sobre la renta variable estadounidense, ya que se espera que el crecimiento de los beneficios sea del 14% durante el próximo año y la agenda política del presidente electo Donald Trump parece favorable. Sin embargo, un ajuste de valoración es un riesgo si los fundamentales o la confianza se deterioran rápidamente”, advierte el CIO de AXA IM.
Igualmente destaca que otros activos son más baratos que las acciones estadounidenses, incluida la renta variable europea y asiática y, lo que es más importante, los bonos del Tesoro estadounidense. “Al igual que otros títulos de deuda pública, los bonos del Tesoro se han abaratado en términos de valor relativo frente a los swaps y los bonos corporativos. Una rápida rotación de las acciones a los bonos podría ser una de las grandes sorpresas de 2025”, concluye el experto.
El equipo de analistas de J. Safra Sarasin Sustainable AM considera poco probable que las valoraciones aumenten en 2025, pero sí creen deberían normalizarse gradualmente. “Hasta finales de año, esperamos que el PER descienda a 20 veces el BPA a 12 meses vista. Combinado con una cifra de BPA de 314 USD, esto arroja nuestro objetivo para finales de año 2025 de 6300 para el S&P 500”, señalan sobre sus previsiones.
Por último, consideran que, aunque menos probable, un claro riesgo de cola sería un arancel general del 10% sobre todas las importaciones estadounidenses. “Esto provocaría probablemente medidas de represalia por parte de los socios comerciales, lo que podría avivar un conflicto comercial global. Este escenario tendría efectos mucho más graves sobre la economía mundial y podría ir mucho más allá del impacto negativo directo de los aranceles sobre los beneficios”, concluyen.
El mercado de las criptomonedas ha aumentado su protagonismo desde que Donald Trump ganó las elecciones presidenciales de Estados Unidos. Tras haber rozado máximos a finales de 2024, ahora la criptomoneda más popular, el bitcoin, parece estar ajustándose. Según explica Simon Peters, analista de eToro, su precio ha subido gradualmente hasta alcanzar un pico de 102.760 dólares, aunque ahora parece haber subido un pequeño receso ya que, actualmente se sitúa en 93.000 dólares.
Los inversores saben que están ante un activo volátil, pero sin embargo uno de los aspectos que más le preocupa es la fiscalidad, que es muy variada en función de la región en la que pongamos el foco y va desde exenciones totales hasta impuestos progresivos y prohibiciones estrictas. Según los expertos, estas disparidades reflejan tanto estrategias económicas como cuestiones de soberanía.Desde HelloSafe han elaborado un estudio en el que descifran los marcos fiscales vigentes para ilustrar a los inversores y a los responsables de la toma de decisiones sobre las oportunidades y los retos asociados a la fiscalidad de las plusvalías de las criptodivisas a escala mundial.
Según el análisis que hace este estudio, Europa es un claro ejemplo de la diversidad sobre la fiscalidad de las ganancias de capital de las criptodivisas a la que se enfrenta el inversor. Algunos países, como Malta, Chipre e incluso Estonia, destacan por su total ausencia de tributación, lo que puede hacerlos más atractivos para los inversores en criptodivisas. Otros, como Alemania o Dinamarca, aplican tipos elevados que pueden superar el 50% y varios países han adoptado tipos fijos moderados, por ejemplo, Francia al 30%, Bulgaria al 10%. España, por su parte, aplica tipos progresivos en función de las ganancias (desde el 19% hasta el 28%), mientras que en el Reino Unido, por norma general, aplica un tipo progresivo del 10% al 20% en función del importe declarado. A su vez, hace una exención con ingresos inferiores a 12.571 libras esterlinas.
En cambio, en Norteamérica, la fiscalidad de las criptomonedas en Canadá y Estados Unidos refleja enfoques progresivos vinculados a la renta: en Canadá, varía entre el 15% y el 50% en función de la renta imponible y de la provincia, mientras que en Estados Unidos fluctúa entre el 15% y el 20%. Estos sistemas demuestran una voluntad de regular los ingresos manteniendo al mismo tiempo una cierta flexibilidad fiscal.
El estudio subraya que los datos sobre la fiscalidad de las criptodivisas en Asia muestran una variación significativa, reflejando diferentes enfoques de regulación y atractivo fiscal. Países como Brunei, Hong Kong, Malasia y Singapur destacan por la ausencia total de impuestos, lo que fomenta un entorno atractivo para los inversores. Por el contrario, naciones como Japón (15% a 55%), Taiwán (5% a 40%) e India (30%) aplican tipos elevados o progresivos, lo que indica un deseo de regular el sector al tiempo que se generan ingresos fiscales. China prohíbe totalmente el comercio, optando por un control estricto. Por último, países como Indonesia (0,1%) y Vietnam (0-5%) adoptan tipos muy bajos, lo que refleja un enfoque intermedio para estimular este mercado emergente, manteniendo al mismo tiempo un cierto marco reglamentario. Esta diversidad ilustra la ausencia de una política fiscal unificada en la región.
En América Latina, la tributación de las ganancias de capital de las criptodivisas varía considerablemente de un país a otro, reflejando enfoques fiscales dispares, según los datos del estudio. Chile impone una tributación progresiva de hasta el 40% en función de los ingresos, mientras que Perú aplica un tipo de entre el 5% y el 30% en función de la cantidad declarada. Países como México, Costa Rica, Bolivia, Brasil y Argentina adoptan un tipo impositivo estándar del 15% para las personas físicas. Colombia, por su parte, grava en torno al 10%. Sin embargo, algunos países destacan por la ausencia de impuestos: en Panamá no existe ningún tipo de tributación y en El Salvador, donde Bitcoin es moneda de curso legal, la tributación también es cero. “Es importante señalar que muchos países de la región, como Paraguay o Uruguay, no aparecen en estos datos debido a la falta de un marco legislativo o regulatorio claro para las criptomonedas. Esto pone de manifiesto la necesidad de armonización y clarificación de las políticas fiscales en la región”, añaden desde HelloSafe.
La demografía ha sido durante mucho tiempo un motor de las tendencias de inversión y consumo, en particular en lo que se refiere a la tecnología. En general, se supone que las generaciones más jóvenes adoptan más fácilmente la tecnología porque están más familiarizadas con ella. También tienden a centrarse más en la sostenibilidad. Pero, ¿es esto definitivamente así y dónde están los matices dentro de las preferencias de cada generación?
A esta pregunta clave ha intentado dar respuesta el último informe de Janus Henderson. Está claro que el mundo se enfrenta a un gran reto: el rápido envejecimiento de la población. Según las Naciones Unidas, se prevé que la población mundial mayor de 65 años pase del 10% en 2022 al 16% en 2050. Mientras que Francia necesitó más de 100 años para que su población mayor de 60 años pasara del 10% al 20%, se prevé que mercados emergentes como China y Brasil tarden menos de dos décadas. Las implicaciones son enormes, ya que se espera que la tasa de dependencia (número de trabajadores por jubilado) se reduzca aún más drásticamente de aquí a 2050.
Según las conclusiones del informe de la gestora, el resultado de estos factores es que el aumento de la productividad y la eficiencia son más necesarios que nunca, y la necesidad de facilitar una vida y un trabajo saludables en la tercera edad se convierte en algo esencial. «Como inversores a largo plazo en el sector tecnológico, creemos que es imperativo comprender claramente las tendencias a largo plazo y las preferencias de los consumidores, junto con las actitudes hacia la sostenibilidad medioambiental, la adopción de tecnología y su evolución. Esto nos llevó a realizar una encuesta en colaboración con Paul Redmond de la Universidad de Liverpool, uno de los principales expertos del Reino Unido en cambio generacional y el futuro del trabajo. La encuesta se centró en el aspecto tecnológico de una investigación más amplia del Dr. Redmond, tal como se expone en Demographic shifts: Tendencias e implicaciones para las empresas y los inversores”, explican desde Janus Henderson.
Preferencias y sostenibilidad
Una de las conclusiones que alcanza el informe es que «cada generación es su propio pueblo» y por ello tienen preferencias distintas. Esto quiere decir que las actitudes y puntos de vista de cada cohorte generacional difieren. Por ejemplo, los baby boomers están concienciados con el medio ambiente, mientras que los millennials son muy conocedores de la tecnología, con una fuerte inclinación hacia la sostenibilidad. Según explica el documento, al ser nativos digitales, son el primer grupo que crece con la tecnología y la conciencia del cambio climático.
Estas observaciones también están estrechamente correlacionadas con el nivel educativo y el nivel de ingresos. Por ejemplo, los que ganan más y tienen más ahorros tienden a ser más conscientes del clima. Las mujeres también son más proclives a dejarse influir por las decisiones medioambientales en su planificación financiera.
Otra conclusión llamativa es que los millennials son los más preocupados por la sostenibilidad y el medio ambiente, por lo que son más propensos a comprar productos sostenibles o éticos y están dispuestos a pagar más por marcas y productos sostenibles. Por ejemplo, es más probable que compren un vehículo eléctrico; la generación Z tiene preferencias similares. En las cuatro generaciones se reconoce que pagar más por productos sostenibles depende del producto o servicio en cuestión, aunque los Baby Boomers y la Generación X manifiestan no estar dispuestos a pagar más, a pesar de todo.
Cabe destacar que, aunque los baby boomers son más conscientes del medio ambiente que la generación X, es menos probable que compren productos sostenibles. Según el informe es demasiado simplista suponer que las preferencias de los jóvenes son similares a las de los mayores. “Nuestro estudio demuestra empíricamente que la división entre jóvenes y mayores no siempre es cierta. Cada generación tiene sus propias características y puntos de vista, por lo que no pueden agruparse en un solo grupo”, señalan desde Janus Henderson.
Inversión sostenible e IA
Las opciones de inversión respetuosas con el medio ambiente prevalecen en todos los grupos; sin embargo, el grado varía. Los millennials afirmaron que sería «más» o «definitivamente» más probable que sus finanzas personales se vieran afectadas por consideraciones medioambientales. Casi la misma proporción de respuestas obtuvo la Generación Z (66,2%).
“Sorprendentemente, la encuesta también reveló que los beneficios económicos podrían seguir influyendo en todos los grupos demográficos (es decir, considerarían la posibilidad de invertir en una empresa que no diera prioridad a la sostenibilidad pero ofreciera mayores beneficios económicos). Esta respuesta podría parecer contradictoria con datos anteriores, que revelaban un fuerte compromiso de los millennials y la generación Z con las causas medioambientales y sostenibles”, explica el informe.
La IA no sólo está provocando una brecha “digital”, sino también “generacional”. Existe una preocupación generalizada y multigeneracional por el creciente uso de la IA, especialmente entre las generaciones de más edad. Las generaciones más jóvenes muestran más confianza en la tecnología de la IA, y los millennials y la generación Z se muestran dispuestos a adoptar nuevos avances como los robotaxis. También son más optimistas y ven la IA como una posible fuente de empleo en el futuro.
Las respuestas del estudio revelan que la falta de conocimientos sobre la IA puede generar incertidumbre entre las generaciones mayores sobre la influencia de la IA en las decisiones de consumo sostenibles. Más de la mitad de los encuestados boomer y de la generación X no saben si la IA desempeñará un papel en la promoción de consideraciones medioambientales. Esto va en contra de los millennials y la generación Z, que en general se muestran más positivos sobre su capacidad para impulsar mayores niveles de ecologismo.
Según el estudio de Janus Henderson, las generaciones más jóvenes piensan más en el transporte (p. ej., robotaxis, electrificación, seguridad) y la sanidad (p. ej., diagnóstico, descubrimiento de fármacos, cirugía robótica) como áreas que se verán alteradas por la IA; esto es un buen augurio, ya que el transporte y la sanidad están experimentando un aumento de la demanda, especialmente por parte de las personas mayores. Las generaciones de más edad tienden a fijarse en los sectores que ya se han visto alterados, como el comercio electrónico y la educación, pero también consideran que la fabricación es un sector que se verá alterado (lo cual, dadas las largas y a veces complejas cadenas de suministro, podría llevar décadas).
“En contra de la creencia popular, nuestro estudio ha revelado que el correo electrónico, y no las redes sociales o el correo postal, es el medio más utilizado en todas las generaciones. Todos nos estamos convirtiendo en nativos digitales, y cada grupo demográfico está ahora casado con su bandeja de entrada a pesar de los diferentes antecedentes de exposición digital”, destacan desde el estudio.
La transición a los paradigmas digitales está influyendo en las actitudes hacia la IA y la sostenibilidad, así como en la inversión, con una clara inclinación hacia los productos éticos y sostenibles, especialmente entre los millennials y la generación Z. Sin embargo, las diferencias de género, educación y nivel de ingresos también influyen en las preferencias y decisiones, según los datos del estudio.
“Es demasiado simplista suponer que las generaciones más jóvenes son más proclives a adoptar el cambio tecnológico y la sostenibilidad, mientras que las mayores se muestran más indecisas y resistentes. La generación del milenio se está convirtiendo en un motor económico fundamental, lo que indica un cambio hacia inversiones que reflejen sus vidas tecnológicamente integradas y su mayor concienciación sobre el impacto del cambio climático. Los baby boomers, la generación X y la generación Z tienen sus propias características e inclinaciones. Como defensores de la inversión en renta variable tecnológica a largo plazo, creemos que, en lugar de aceptar suposiciones, es clave comprender y considerar claramente las preferencias generacionales”, concluyen desde Janus Henderson.
En 2025, los dividendos de las compañías que forman parte del índice MSCI Europe volverán a alcanzar niveles récord, según los cálculos de Allianz Global Investors (Allianz GI). La gestora explica que los dividendos de las empresas incluidas en este índice de renta variable europea se sitúan en unos 440.000 millones de euros en 2024 y estima para este año que el volumen de dividendos alcance unos 459.000 millones, un 4% más que en el periodo anterior. Además, estima que para 2026 la cifra ascienda a 496.000 millones de euros, un 13% más que en 2024.
Además, según Allianz GI, la rentabilidad por dividendo también sigue una tendencia positiva. De hecho, para las empresas del índice MSCI Europe, la rentabilidad por dividendo se calcula en el 3,3 a finales de 2024 y podría aumentar hasta el 3,5% este año. “El reciente aumento del reparto de dividendos se enmarca dentro de una tendencia al alza, que solo se vio interrumpida durante la pandemia del COVID-19. Las perspectivas también siguen siendo positivas: se espera que el pago de dividendos siga aumentando de forma anual. En 2025, los sectores de Tecnología de la Información y Sanidad deberían liderar el crecimiento en el pago de dividendos. En cambio, los dividendos en el sector energético podrían reducirse. El sector financiero, por su parte, seguirá siendo el principal pagador de dividendos, aunque con un crecimiento más moderado”, apunta Grant Cheng, gestor de Renta Variable de Dividendos.
En este contexto, la gestora considera que los dividendos contribuyen significativamente a la rentabilidad total de una inversión en renta variable. En el caso de Europa, durante los últimos 40 años, casi el 39% de la rentabilidad total anualizada de las inversiones en renta variable del MSCI Europe se debió a la contribución de los dividendos. En Norteamérica (MSCI North America) y Asia-Pacífico (MSCI Pacific), los dividendos aportaron algo menos del 22% y algo más del 41% del rendimiento total, respectivamente.
Otra de las tendencias que previsiblemente continuará es que las empresas sigan una política de dividendos constante y de reparto creciente. En opinión de Hans-Jörg Naumer, autor del estudio sobre dividendos y director de Global Capital Markets & Thematic Research de Allianz GI, si se observan los últimos 20 años en el índice STOXX Europe 600, que aglutina un mayor número de compañías, su estudio muestra claramente que la gran mayoría de las empresas ha tendido a aumentar sus dividendos en comparación con el año anterior. «Sólo una proporción significativamente menor de compañías recortó sus repartos, salvo en años excepcionales como 2009, el año posterior al estallido de la crisis del mercado financiero mundial, y el año de la pandemia. Los repartos totales también han aumentado de un año a otro en el pasado», matiza Naumer.
Por último, argumenta que los dividendos cumplen otro papel importante como fuente de rentas para los inversores. “En un momento en el que la esperanza de vida se alarga, especialmente en los países desarrollados, en el que las pensiones públicas están sometidas a la presión demográfica y en el que cada vez hay menos personas trabajando, las rentas del trabajo deben complementarse con las del capital. Debido a su crecimiento constante y a su importante contribución en los rendimientos totales, los dividendos son una forma adecuada de generar rentas adicionales. Estos ingresos pueden utilizarse, por ejemplo, para la educación de los hijos, para las vacaciones o para la jubilación”, concluye Naumer.
Las políticas de recursos humanos de las entidades bancarias deben adaptarse a los retos futuros que pasan por atraer y fidelizar al mejor talento, la adopción de la inteligencia artificial de manera ética o la adaptación a los nuevos cambios regulatorios.
En este sentido, según Adecco, los departamentos de personas de este sector tienen que poner el foco en las siguientes tendencias en este 2025 que acaba de comenzar: adopción de IA y nuevas tecnologías en los procesos de RRHH puesto que la automatización y la inteligencia artificial están transformando el reclutamiento y la gestión del talento, facilitando la toma de decisiones en tiempo real y permitiendo a los equipos de RRHH enfocarse en actividades estratégicas más allá de las tareas administrativas repetitivas.
Los departamentos también deben centrarse en los modelos de trabajo híbridos y en remoto, ya que los bancos buscan flexibilizar sus políticas laborales para atraer talento y mejorar la retención, adaptándose a las demandas de los empleados por un mayor equilibrio entre vida laboral y personal. Sin embargo, esto requiere inversiones en tecnología y una gestión cultural que apoye la productividad a distancia.
El desarrollo de liderazgo digital también debe de ser un aspecto importante porque se busca formar líderes capaces de guiar equipos en entornos virtuales y de adaptarse a la rápida evolución tecnológica, algo especialmente relevante en un sector donde el liderazgo tradicional se enfrenta a desafíos propios de la digitalización.
Otras tendencias son la planificación estratégica de la fuerza laboral, ya que con el envejecimiento de la fuerza laboral y la necesidad de nuevas habilidades, los bancos trabajan en planes a largo plazo para garantizar que dispondrán de talento en las áreas clave en los próximos años, abordando la escasez de perfiles especializados en tecnología.
Otra tendencia es la cultura organizacional reforzada porque fomentar una cultura que refleje valores de inclusión y sostenibilidad es clave en la banca, donde la mayor parte de los líderes de RRHH consideran esencial mejorar la cultura organizacional para aumentar el compromiso y la retención del talento
Por último, el bienestar y salud mental de los empleados, puesto que problemas como la incertidumbre económica pueden traer consigo emociones negativas como el estrés y hace que los bancos prioricen la salud mental y el bienestar, desarrollando programas de apoyo y promoviendo un entorno saludable para mantener la motivación y reducir la rotación en sus plantillas.
“Estas tendencias muestran que el sector se encuentra en plena transformación digital y con un enfoque en la experiencia del empleado. En un contexto de alta competitividad, los bancos están invirtiendo en IA y en modelos híbridos para retener talento y mejorar la productividad. Este cambio se acompaña de una creciente preocupación por la cultura organizacional y el bienestar laboral, lo que permite responder a las demandas actuales del mercado de trabajo”, añaden desde Adecco.
Los retos del sector asegurador
En términos de talento y gestión de RRHH, desde Adecco subrayan que el sector asegurador se alinea con prácticas similares a las de la banca. Se enfoca en la flexibilidad laboral, la promoción de una cultura organizativa positiva y el bienestar del empleado, elementos esenciales para atraer y retener talento en un mercado muy competitivo. Ante esta situación, la industria aseguradora parece estar priorizando la especialización técnica y la sensibilidad humana, adaptándose tanto a cambios tecnológicos como a nuevas exigencias de transparencia y sostenibilidad en sus productos.
Para 2025, los departamentos de Personas del sector asegurador tienen que poner el foco en los siguientes retos, según Adecco: implementación de estándares en ciberseguridad, puesto que la intensidad de los ciberataques plantea el desafío de dotar al personal de los conocimientos y herramientas necesarios para prevenirlos. Las aseguradoras deben invertir en formación constante en ciberseguridad, incluso para roles no técnicos que manejan datos sensibles de los clientes.
Otro reto para el sector es la escasez de perfiles especializados en seguros climáticos, ya que con el incremento de desastres naturales, el sector asegurador ha aumentado la oferta de seguros ambientales y climáticos. Sin embargo, encontrar talento que entienda tanto de aseguramiento como de ciencias ambientales es difícil, lo cual limita la capacidad de innovación en estos productos específicos y la adecuada respuesta ante fenómenos climáticos extremos.
La adaptación a la regulación de sostenibilidad también supone un reto puesto que cumplir con la normativa ESG es esencial, pero su aplicación práctica en seguros requiere la creación de nuevos procedimientos internos y de recursos especializados. Los departamentos de RRHH deben contratar y formar a personal que entienda las regulaciones medioambientales.
Los sectores han de seguir una preparación ante nuevas normativas de transparencia porque las regulaciones para la protección del consumidor cada vez son más frecuentes, por lo que las aseguradoras deben garantizar que sus equipos de ventas y atención al cliente comprendan completamente los productos y sus riesgos.
Por último, los sectores han de centrarse en la reducción de la rotación en áreas críticas ya que recursos humanos enfrenta el reto de diseñar estrategias efectivas de retención para evitar la pérdida de empleados en roles altamente especializados que requieren formación específica.
El sector inmobiliario se encuentra inmerso en un profundo proceso de transformación, en el que la tecnología juega un papel crucial. El ecosistema proptech, formado por startups y empresas tecnológicas, continúa ganando protagonismo en la modernización del real estate, y 2025 se perfila como un año clave para consolidar su papel y abordar desafíos emergentes.
Según el informe ‘Análisis y perspectivas del mercado proptech en España 2024’, elaboradoconjuntamente por Solvia y TheFringe/LABS a partir de encuestas a empresas tecnológicas y tradicionales del sector inmobiliario, la colaboración entre startups proptech y compañías inmobiliarias convencionales será este ejercicio el principal motor del mercado. Así lo señalan el 64,7% de las empresas tecnológicas encuestadas y el 60% de las empresas tradicionales.
Otra tendencia clave será la adopción de tecnologías emergentes, como la inteligencia artificial, el machine learning, el blockchain o la realidad virtual, con un 52,9% y un 50% de menciones respectivamente. Estas herramientas están transformando no solo la manera de operar en el sector, sino también la experiencia de los usuarios, marcando un antes y un después en la gestión y comercialización de activos inmobiliarios.
De igual modo, en un contexto en el que la sostenibilidad es una prioridad global, también se prevé un mayor enfoque en eficiencia energética y soluciones más respetuosas con el medio ambiente. Esta tendencia es percibida como clave por el 32,3% de las startups tecnológicas y el 33,3% de las empresas inmobiliarias tradicionales. Asimismo, el informe también apunta a que la consolidación del mercado a través de fusiones y adquisiciones será otro de los puntos fundamentales, señalado por un 29,4% de las empresas tecnológicas y el 40% de las tradicionales.
Finalmente, el impulso del talento digital también comienza a considerarse como una de las tendencias que marcan el sector, aunque con menor incidencia: un 11,7% de las startups tecnológicas y un 3,3% de las empresas convencionales inmobiliarias. La captación de perfiles especializados en tecnología sigue siendo una tarea pendiente para muchas entidades que buscan adaptarse a las exigencias de un sector en plena digitalización.
Para que estas tendencias puedan materializarse correctamente, será necesario superar los retos que impiden que el sector proptech crezca más rápidamente. De acuerdo con el informe elaborado por Solvia, los problemas de escalabilidad e industrialización que enfrentan las empresas de este ecosistema son el principal desafío, mencionado por el 29,4% de las startups tecnológicas y el 26,6% de las entidades tradicionales. Este reto pone de manifiesto la necesidad de optimizar procesos y estructuras para facilitar el crecimiento sostenido.
Las regulaciones y políticas gubernamentalesson otro gran obstáculo desde la perspectiva de las startups tecnológicas, señaladas también por el 29,4% de las proptech. Este dato refleja la necesidad de que el marco regulatorio evolucione al ritmo de la innovación, mientras que para las empresas tradicionales esta preocupación es menos relevante, con solo un 13,3% de menciones.
La adaptación a las necesidades del mercado también figura como un desafío importante para las proptech (11,7%), aunque es menos prioritario en comparación con las empresas tradicionales, donde alcanza el 26,6%. Este contraste podría explicarse porque las proptech suelen enfocarse en modelos de negocio más B2B, orientados a proveer soluciones tecnológicas a otras empresas, lo que les permite centrar su propuesta de valor en nichos específicos. Por el contrario, las empresas tradicionales, al estar más orientadas al consumidor final, enfrentan mayores retos para adaptarse a las cambiantes expectativas del mercado.
Se percibe, por tanto, una diferencia en la percepción de los desafíos entre startups proptech y empresas tradicionales. Mientras las primeras priorizan problemas estructurales como la escalabilidad y las regulaciones, las compañías tradicionales tienden a centrarse más en la captación de clientes y la adaptación al mercado.
Premios Solvia PropTECH: impulsando la innovación en el sector
Conscientes del auge del ecosistema proptech y tras el éxito de las dos ediciones anteriores, Solvia presentó en noviembre la tercera edición de los Premios Solvia PropTECH. Estos galardones, cuyas candidaturas están abiertas hasta el 22 de enero de 2025, tienen como objetivo identificar y reconocer a las empresas tecnológicas que están revolucionando el sector inmobiliario español, ya sea optimizando procesos internos o creando soluciones innovadoras. Esta tercera entrega distinguirá tres proyectos destacados para las siguientes categorías: ‘Mejor tecnología para la comercialización de activos y atención comercial’, ‘Mejor innovación tecnológica para la mejora de la productividad’ y ‘Proptech innovadora’.
Las compañías interesadas en participar pueden registrarse a través del siguiente enlace. Tras el cierre de inscripciones, se llevará a cabo una selección preliminar de ideas, y las empresas seleccionadas presentarán sus proyectos ante un jurado de expertos del sector inmobiliario y financiero, que evaluarán el potencial ganador de las propuestas en base a criterios como la relevancia de la necesidad resuelta, el impacto en el modelo de negocio y la complejidad tecnológica. Los ganadores, que tendrán la oportunidad de realizar un primer proyecto piloto con Solvia, serán anunciados en el evento de entrega de premios.
La causa inmediata del aumento adicional de los rendimientos a largo plazo de EE.UU. es la nueva señal de la impresionante resistencia del mercado laboral estadounidense, pero lo que es más importante, anuncia el hecho de que, a menos que la nueva administración cambie radicalmente de rumbo, la adición de más estímulo fiscal y otro shock del lado de la oferta en forma de aumentos de aranceles llegará en un momento particularmente malo dada la resistencia de la inflación estadounidense.
Los problemas con los mercados mundiales de bonos son un problema para Europa. El diferencial francés se ha movido ligeramente al alza en las últimas semanas, con una media de 84 puntos básicos en lo que va de enero frente a los 80 puntos básicos de diciembre, pero la cuestión clave reside en el nivel absoluto de rendimientos. Francia pagó la semana pasada un 3,4% para financiarse con bonos a 10 años. Esto supera el crecimiento tendencial del PIB nominal de Francia (alrededor del 3,2%, una combinación de aumentos potenciales del PIB del 1,2% y una inflación del 2%), lo que es mecánicamente una mala noticia para la trayectoria de la deuda pública a largo plazo. Sin embargo, el problema va más allá de Francia. Italia paga ahora un 3,77% por los bonos a 10 años, 58 puntos básicos más en un mes, mientras que su crecimiento tendencial del PIB nominal es incluso inferior al de Francia.
Aunque no esperamos que el BCE empiece a fijar el objetivo de la curva de rendimientos a corto plazo, creemos que el Consejo de Gobierno no puede ignorar el endurecimiento de las condiciones financieras generales en un momento en el que la economía sigue teniendo dificultades. Si bien no hay justificación para la respuesta de la política monetaria a una deriva aislada y autoinfligida de los rendimientos en uno u otro estado miembro, creemos que ahora deberían tratar la subida de los tipos de interés a largo plazo como un shock simétrico que afecta a la zona en su conjunto.
El índice de incertidumbre política –un indicador de «pesimismo genérico»– es muy elevado en Alemania (alimentado por las reflexiones sobre el modelo de crecimiento del país) y Francia (impulsado por la inestabilidad política y las dificultades fiscales), mientras que en España e Italia sigue estando apenas por encima de su media a largo plazo. Sin embargo, si nos fijamos en el PMI compuesto -y el mensaje lo confirmaría la encuesta de la Comisión Europea-, España es el único gran país de la eurozona donde la confianza empresarial se mantiene fuerte. También está disminuyendo en Italia, lo que sugiere que, incluso cuando el entorno político es estable y donde, según los estándares históricos, el desempeño reciente del crecimiento ha sido decente, las perspectivas se están deteriorando. El aumento de las tasas de interés a largo plazo no ayudará, aunque solo sea para forzar una mayor acción discrecional sobre el saldo fiscal para compensar un mayor servicio de la deuda.
La mejora constante de la confianza de los consumidores ha sido una rara evolución positiva en la zona del euro desde la pandemia, aunque se ha mantenido muy por debajo de su media a largo plazo. Sin embargo, esto puede estar cambiando, con dos meses consecutivos de deterioro desde noviembre de 2024 (véase el gráfico 3). El componente genérico «situación económica en los próximos 12 meses», que suele reaccionar a las noticias políticas, ha disminuido visiblemente, pero las intenciones de ahorro también han vuelto a aumentar, mientras que la opinión sobre el desempleo futuro se está deteriorando. Esto se hace eco de los desarrollos en el sector empresarial. Las intenciones de contratación ahora están solo marginalmente por encima de su promedio a largo plazo. El crecimiento real del empleo se mantiene en terreno positivo en términos interanuales, pero más allá de la volatilidad de la serie, ahora tenemos los ingredientes adecuados para el comienzo de una verdadera destrucción de empleo en la eurozona.
Es cierto que el flujo de noticias sobre la inflación no ha sido inmaculado en la eurozona últimamente, ya que la subyacente no siguió cayendo en diciembre en términos interanuales (2,7%). Sobre una base anualizada de tres meses, incluso se produjo un ligero repunte, impulsado por los servicios. Sin embargo, el mercado había anticipado estos acontecimientos, y el BCE ya ha expresado cierta tolerancia a cierto «ruido» en torno a su esperada tendencia a la baja. Dadas las malas perspectivas de la economía real, nos sentimos aún más cómodos con nuestro escenario de reanudación de la desaceleración de los precios subyacentes en la eurozona: incluso si la depreciación del euro pudiera seguir empujando al alza los precios industriales, no vemos cómo los precios de los servicios podrían resistir mucho tiempo a la ausencia de un impulso de la demanda interna.
En estos momentos, el BCE está comunicando sobre el retorno de los tipos de interés oficiales a su nivel neutral. Creemos que será necesario un descenso en un territorio adecuado. Nuestro escenario base es un tipo terminal del 1,5 %, pero creemos que existe un riesgo a la baja, ya que el Consejo de Gobierno debería asumir el endurecimiento de las condiciones financieras generales”.
Tribuna de Gilles Moëc, economista jefe de AXA Investment Managers.