Foto cedidaSimone Rosti, responsable de UBS ETF para el sur de Europa.. Simone Rosti: "MiFID II supondrá un impulso para el desarrollo de los ETFs"
La eficiencia y la educación financiera. Cuando hablamos de ETFs, estos dos conceptos son clave y lo serán todavía más con la llegada de MiFID II. En palabras de Simone Rosti, responsable de UBS ETF para el sur de Europa, este producto ha permitido “la institucionalización del cliente privado” que cada vez entiende más su eficiencia.
Rosti explica en esta entrevista que lo que está sucediendo ahora en Europa, y en España, es lo que ya ha sucedido ya en EE.UU. Los inversores institucionales tienen en torno al 60% de sus carteras en fondos pasivos o ETFs y el 40% en fondos activos. En el caso de los inversores particulares, sin embargo, el porcentaje de la inversión activa alcanza el 90% y sólo un 10% es a través de productos de gestión pasiva. En opinión de Rosti, “esto va a cambiar y los inversores particulares van a introducir cada vez más gestión pasiva en sus carteras porque empiezan a entender cómo funcionan”.
Su bajo coste se ha convertido en su principal atractivo porque, como explica Rosti, “en el entorno actual de baja rentabilidad el inversor no puede asumir pagar unas comisiones de entre el 2% y 3% porque no gana nada”.
Para Rosti, las ventajas que puede aportar el producto al inversor particular no se limitan sólo a los costes. “Hasta ahora nos hemos centrado mucho en los costes, pero los ETFs son atractivos también por su transparencia y esto está relacionado con MiFID II. En un ETF podemos conocer su composición cada mientras que, en un fondo tradicional, incluso en el más transparente, conocemos su composición una vez al mes”, argumenta.
En su opinión, esto es clave cuando tienen lugar eventos como el referéndum sobre el Brexit, las elecciones en Estados Unidos o el desastre de Fukushima porque “los inversores quieren, en momentos así, moverse rápido, quieren liquidez”. De igual forma, constituyen una alternativa para la inversión a largo plazo debido a que “cumplen lo que dicen”. “Los gestores activos intentan batir a su índice de referencia, pero no lo consiguen en el 90% de las ocasiones”, afirma Rosti.
Eso no significa, añade, que los ETFs no necesiten asignación de activos. “Los ETFs son útiles cuando hay una asignación de activos que los dirige. Si es así, son perfectos para la inversión a largo plazo”.
MiFID II: el siguiente impulso para los ETFs
La entrada en vigor de MiFID II también supondrá un impulso para el desarrollo de los ETFs. “La nueva regulación busca mayor transparencia y esto significa que los bancos deben revelar a los clientes cuánto van a pagar en comisiones por su fondo de inversión, entonces la eficiencia en costes de los ETFs va a ser clave para las entidades financieras una vez que desaparezcan las retrocesiones. Cuanta más transparencia de costes deban tener, más espacio habrá para los ETFs”. En resumen, habrá cada vez más apetito por ETFs por parte de los inversores privados ya que los bancos y los intermediarios financieros serán los más interesados en distribuirlos.
Pixabay CC0 Public DomainPexels. "El horizonte de crecimiento económico traerá buenos resultados a las bolsas"
La foto macroeconómica actual convierte a la renta variable internacional en una clara oportunidad para lograr buenas rentabilidades. Esta es la opinión de Celso Otero, gestor Renta 4 Gestora y actual gestor de los fondos Renta 4 USA con 3 estrellas Morgningstar, Renta 4 Japón, Renta 4 Acciones Globales y Renta 4 Retorno Dinámica. Según su experiencia, salvando la volatilidad que la incertidumbre política genera a corto plazo, el horizonte de crecimiento económico traerá buenos resultados a las bolsas.
“Creo que entre los activos más rentables que podemos encontrar ahora está la renta variable, siempre y cuanto se siga dando esta normalización de las políticas monetarias, continúe el crecimiento y aumenten los beneficios empresariales”, señala Otero quien estima que podría estar en rentabilidades del 7% o 8% aproximadamente. Ahora bien, recuerda que estas perspectivas implica asumir los riesgos y la volatilidad del mercado.
Con lo que sí se muestra optimista es con la marcha de la economía a nivel global, al menos así es cómo describe la fotografía actual. “Estamos en el momento de digerir toda la incertidumbre política, que parece que va pasando, y las políticas expansivas que los bancos centrales han llevado a cabo los últimos años. Todas las regiones crecen, los resultados empresariales van mejorando, ha aparecido un poco de inflación, aunque sea de momento sólo a nivel general no subyacente, y China parece que crece. Esto nos deja un escenario positivo donde la que era una de las mayores preocupaciones, la incertidumbre política de Europa y Estados Unidos, parece que se va relajando”, resumen.
De cara a este año y al comportamiento de la renta variable, para él la clave no está en intentar predecir qué hará el mercado, sino analizar hacia donde irán los resultados de las compañías. “Al final los mercados van con los beneficios empresariales, existe una correlación muy alta”, recuerda.
Respecto a su valoración del mercado, Otero se muestra prudente a la hora de decir si la renta variable está o no cara. “Estamos en momento en el que los beneficios son muy exigentes. Estamos ante PERs de 15, 14 o 10 veces y si lo comparamos con las medias históricas, vemos que hay potencial de un 5% o 6%; a lo que luego habría que sumarle dos puntos más por los dividendos por acción. Esto convierte a la renta variable en un activo más atractivo que la renta fija”, explica.
Latinoamérica
El crecimiento global empuja a algunos mercados, entre ellos, según Alejandro Varela, gestor Renta 4 Gestora, a los países emergentes en los que, en su opinión, ha habido un cambio de sentimiento durante los últimos meses. “Después de dos años saliendo capitales, como ocurrió en China, vemos que en 2016 los inversores comenzaron a volver. La tesis de los países emergentes está volviendo, tras haber sido interrumpida por la crisis financiera, y asistimos a un crecimiento motivado por el aumento de población y del consumo”, apunta.
Esto convierte a algunos países en destinos muy atractivos para la renta variable, Varela destaca, por ejemplo, Chile que se encuentra en máximos históricos y está anticipando los cambios de políticas que espera se den a finales de año. “China a mejorado su comportamiento y seguimos viendo a México, pese al efecto Trump”, matiza.
Varela considera que la inversión en Latinoamérica puede ser muy rentable por aspectos como la mayor estabilidad de los mercados de materias primas, por ser mercados aún competitivos como fruto de la devaluación de sus divisas en los últimos años, y por un entorno político más maduro y que desarrolla políticas favorables al mercado. A esto se suma que son “países con mejor endeudamiento, si se compara con los países desarrollados, y que tiene una elevada exposición a un ciclo global que acelera, con mayores expectativas de inflación y con cierto énfasis en infraestructuras donde le continente se ve especialmente beneficiado”.
En su opinión, el principal riesgo al que se enfrenta la región es cómo va a cambiar el mapa comercial con Trump, pero “lo que vemos es que no se va a concretar con tanta dureza como se pensaba, aunque cualquier mensaje que lance en nuevo presidente de Estados Unidos puede afectará rápidamente, sobre todo a las divisas”.
Para invertir en este mercado, Varela destaca dos fondos de Renta 4 Gestora: Renta 4 Sicav MILA y Renta 4 Latinoamérica. El primero cuenta con una cartera con el 75% de activos de esta región –México, Colombia, Perú y Chile– y esta año ha tenido una rentabilidad del 7,77%. Respecto al segundo fondo, Renta 4 Latinoamérica, fue el fondo más rentable de 2016 en España, según Morningstar. El obtuvo un rendimiento del 38% y en lo que va de año ha alcanzado el 12%, además cuenta con un patrimonio de 7,4 millones de euros.
Estados Unidos
En opinión de Otero, las grandes compañías estadounidenses son otro de los activos que más pueden ofrecer ahora mismo a la renta variable, ya que la bolsa estadounidense se encuentra en uno de sus momentos de máximos históricos. “En general, en la renta variable estamos en un ciclo más maduro. Eso de comprar barato, ya lo hemos vivido. Ahora estamos ante valoraciones más exigentes, por lo que la diversificación es clave”, afirma.
En este sentido destaca la estrategia de su fondo Renta 4 USA FI, que invierte en megacompañías cuyo 50% de las ventas están en Estados Unidos, pero el resto de ellas provienen de mercados internacionales. “Básicamente identificamos qué sectores participan de las megatendencias que vemos y luego identificamos qué están en ellos y seguirán estando los próximos 10 años. A partir de ahí, miramos los fundamentales y cuáles están a un precio atractivo”, explica Otero sobre cómo aborda el proceso de inversión.
Foto: Dan Ivascyn, gestor del Pimco Income Fund. Dan Ivascyn, el hombre elegido para sustituir a Gross en PIMCO, sigue atrayendo flujos de capital a ritmo vertiginoso
En 2014, tras la marcha de Bill Gross y Mohamed El-Erian de PIMCO, muchos dieron por sentado que la legendaria firma había perdió su toque mágico dentro del mercado de bonos estadounidenses. No en vano, con la partida de los gestores estrella llegó la retirada de inversores.
Sólo un año después de que Gross fichara por Janus Capital, 120.000 millones de dólares salieron del Total Return Fund, el que fuera el fondo más grande del mundo, y los activos bajo gestión de PIMCO cayeron desde los 2 billones de dólares en 2013 a 1,5 billones en septiembre de ese año.
Sin embargo, el plan de sucesión puesto en marcha por Allianz, propietaria de PIMCO, ha devuelto a la firma su antiguo esplendor, pillando por sorpresa a quienes pensaron la gestora fundada por Gross en 1971 había perdido su trono.
Dan Ivascyn, el hombre elegido para sustituir al gurú de la renta fija, está atrayendo miles de millones en efectivo. En los últimos tres y cinco años, prácticamente ningún fondo comparable en Estados Unidos ha podido igualar el retorno de Pimco Income Fund, el fondo que dirige.
Alta rentabilidad
El fondo obtuvo un rendimiento de 10,6 por ciento en los últimos 12 meses y el dinero de los inversores ahora está entrando a un ritmo que ningún otro fondo de bonos o acciones gestionado activamente haya visto antes, según datos compilados por Bloomberg y Morningstar Inc.
A finales de febrero, la estrategia llegó a los 74.500 millones de dólares y alcanzó un hito simbólico: superó al antiguo fondo que dirigía Gross, el Pimco Total Return Fund. Gestionado ahora por Scott Mather, Mark Kiesel y Mihir Worah, sus activos han disminuido constantemente desde la partida de Gross y ahora se sitúa en los 74.200 millones de dólares.
Entre los dos movimientos más hábiles llevados a cabo por Ivascyn en los últimos meses, Bloomberg citó dos: la apuesta por los bonos hipotecarios del alto riesgo, que en gran parte fueron emitidos antes de la crisis de la vivienda, después de que los fondos de cobertura se vieron obligados a vender a bajos precios para cumplir con los reembolsos, y el aumento de la deuda del Tesoro a más largo plazo tras la inesperada victoria de Trump.
Foto cedidaAlfonso Valero, director de Desarrollo de Negocio y Gestión de Cuentas de JLL. . Alfonso Valero, nuevo director de Desarrollo de Negocio y Gestión de Cuentas de JLL
JLL, empresa de servicios profesionales y gestión de inversiones especializada en el sector inmobiliario, ha anunciado la incorporación de Alfonso Valero como nuevo director de Desarrollo de Negocio y Gestión de Cuentas de la compañía. Cargo desde el que reportará directamente a Borja Basa, director general de Corporate Solutions de JLL.
Desde su posición, desarrollará estrategias de crecimiento empresarial y búsqueda de nuevas vías de negocio para las dos áreas de JLL (inversores y clientes corporativos), con el objetivo de contribuir al crecimiento y plan estratégico marcado por la consultora para los próximos años.
Según ha señalado Basa, “estamos muy satisfechos de contar con Alfonso en nuestro equipo, y estamos seguros de que su dilatada experiencia contribuirá notablemente al desarrollo de negocio de la firma y nos permitirán seguir consolidándonos como la consultora inmobiliaria de referencia en el sector gracias a la excelencia de sus servicios”.
Valero se incorpora a JLL procedente de Microsoft China, donde ocupaba desde 2014 el puesto de responsable de Retail Internacional y Workplace Strategy dentro del área de Real Estate de la compañía. También ha trabajado en el área inmobiliaria de compañías de prestigio como LVMH y Porsche, así como en firmas del sector como Grupo Lar o Coperfil Group.
Formado en Arquitectura por la Universidad Politécnica de Madrid y por la Sapienza Università Di Roma, posee además dos masters en Administración y Dirección de Empresas del China Europe International Business School (CEIBS) y del IESE.
Foto cedidaOriol Ramírez-Monsonís Angliker, jefe de Delegación en España de Willis Towers Watson.. Oriol Ramírez-Monsonís se incorpora a Willis Towers Watson para reforzar el equipo de Inversiones
Willis Towers Watson refuerza su equipo de Inversiones con el nombramiento de Oriol Ramírez-Monsonís Angliker, como jefe de Delegación en España, y Alejandro Olivera Guerrero, como consultor de Inversiones.
Oriol Ramírez-Monsonís, que cuenta con 17 años de experiencia en Banca, Asset Management, y Consultoría de Inversiones, se une a Willis Towers Watson aportando su experiencia como senior associate en Mercer. Oriol será una pieza fundamental en el desarrollo del servicio de delegación de inversiones de Willis Towers Watson en España en todos los segmentos de cliente para los que la firma ya ofrece sus capacidades de asesoramiento en inversiones, y para nuevos nichos de mercado aún por explorar.
Anteriormente trabajó como director de distribución internacional de Orion Capital Partners, responsable de mesa de distribución de productos estructurados en Société Générale, y especialista en el área de productos y responsable del departamento de riesgos en Banco Banif. Oriol cursó sus estudios de Económicas en la Universidad San Pablo CEU y es Máster en Finanzas por ESADE Business School.
Por su parte, Alejandro Olivera Guerrero ha sido consultor de inversiones en Mercer, y su formación ha tenido lugar entre el Colegio Universitario de Estudios Financieros (CUNEF), en Madrid, y Rijksuniversiteit Groningen, en Groninga (Países Bajos). Alejandro es también CAIA Level 2 Candidate.
Según ha señalado David Cienfuegos, jefe de Inversiones en Willis Towers Watson España, “nos alegra poder contar con gente de tanto talento en nuestro equipo. Tanto Oriol como Alejandro son una apuesta segura en el departamento de Inversiones de Willis Towers Watson y su contribución nos permitirá continuar ofreciendo un verdadero valor añadido a nuestros clientes”.
Pixabay CC0 Public DomainFoto: didgeman. Gestionar pensando en los riesgos políticos
Las elecciones estadounidenses han dado lugar a profundos cambios de tendencia en los mercados financieros. Términos como inflación o «reflación» han ocupado el lugar del temor a la deflación. Las acciones y la deuda corporativa registran comportamientos claramente positivos, mientras que los tipos de interés están subiendo en los países desarrollados.
Los inversores se han posicionado rápidamente para aprovechar estas nuevas tendencias y la apuesta por la «reflación» parece actualmente bastante generalizada.
¿Dónde nos encontramos tras un primer trimestre de buenas rentabilidades en los mercados de activos de riesgo? ¿Todavía hay razones para creer en el cambio de régimen impulsado por EE. UU.? ¿Cómo influye la prima de riesgo político europea en los mercados de la zona euro? ¿Los mercados emergentes pueden representar una buena alternativa a los países desarrollados?
El cambio de régimen en EE. UU. es real… tanto como lo sea el programa de reformas del nuevo presidente estadounidense
Tras la elección de Donald Trump como presidente, los EE. UU. han iniciado un cambio de régimen. La economía se ha recuperado totalmente de la crisis financiera de 2008 y los temores a la deflación han dejado su lugar a los «estímulos». En EE. UU., la expansión cíclica debería prolongarse gracias a la perspectiva de aumento del gasto público. Los estímulos presupuestarios y el éxito de la reforma fiscal estadounidense serán los factores clave que favorecerán a las bolsas. Sin embargo, la incertidumbre en materia de política económica sigue siendo extremadamente elevada y provoca una dispersión más acusada en el comportamiento de la bolsa, así como violentas rotaciones sectoriales.
En la renta fija, este nuevo régimen augura el fin de un ciclo de bonanza en este tipo de activo, la subida de la inflación y el endurecimiento monetario que conduce a una subida de los tipos de interés. Todas las miradas se dirigen hacia la Reserva Federal, cuyas proyecciones apuntan a tres subidas de tipos en 2017 y 2018. Sabemos que los mercados descuentan un ritmo de subidas mucho más lento y que el valor razonable de los bonos del Tesoro de EE. UU. a 10 años se sitúa en torno al 3 %, de ahí que nos parezca pertinente estar infraponderados en duración estadounidense, pese a que la Fed se ha comprometido a endurecer progresivamente las condiciones monetarias. En conjunto, esperamos que los posicionamientos en torno a los estímulos se generalicen entre los inversores en un contexto de ampliación de la recuperación económica.
La evolución de los mercados seguirá dependiendo enormemente de la confianza de los inversores en la capacidad de Donald Trump para desarrollar la política económica que ha prometido.
El descenso del riesgo político europeo, una condición indispensable para la revalorización de las bolsas
El crecimiento de la zona euro sigue acelerándose. La confianza de las empresas y los beneficios han mejorado, mientras que la inflación se ha reactivado. El efecto Draghi, vigente desde 2012, debería desvanecerse si la reducción del programa de relajación monetaria del BCE se produce antes de lo previsto. El riesgo de cola, como una posible victoria de los partidos euroescépticos en Francia y una fragmentación del espectro político en Italia, son fuente de una gran incertidumbre. Estos factores demandan un enfoque táctico y prudente en los mercados de renta fija pública europeos.
La prima de riesgo de la bolsa europea ya ha descontado ampliamente los riesgos políticos existentes. Las elecciones francesas constituirán un hito decisivo. Las acciones de la zona euro presentan valoraciones atractivas en un momento en el que el posicionamiento de los inversores, aunque está aumentando, sigue todavía muy lejos de los máximos anteriores. Cuando se atenúe el riesgo político, esperamos un reposicionamiento de los inversores en las acciones de la zona euro. En el mercado de deuda corporativa, los diferenciales han alcanzado mínimos históricos, lo que justifica algunas recogidas de beneficios.
Sin embargo, la deuda corporativa europea sigue siendo interesante, ya que se beneficia de un marco normativo favorable a los tenedores de bonos, unos balances en proceso de mejora y unas valoraciones relativamente atractivas.
La deuda emergente es atractiva dentro del universo de renta fija
Lejos de las inquietudes de los últimos años, los mercados emergentes se han presentado como un valor sólido en este comienzo de año. Con unos fundamentales sólidos gracias a un crecimiento el doble de fuerte que el de los países desarrollados, su demanda interna se ha reforzado y sus desequilibrios exteriores se han reducido.
El riesgo chino se ha moderado y el crecimiento del PIB sigue estando en consonancia con los objetivos del gobierno, que cada vez tolera más una reducción del crecimiento con el fin de gestionar los riesgos financieros. Por lo tanto, el aterrizaje suave de China no debería convertirse en un riesgo sistémico este año.
Por su parte, Latinoamérica se beneficia de un retorno a la normalidad en lo que respecta a su deuda y sus monedas. La deuda emergente ofrece rendimientos previstos interesantes, aunque es crucial diferenciar dentro de los segmentos del mercado. La vulnerabilidad de la deuda pública emergente a las medidas políticas del presidente Trump no es homogénea, lo que nos lleva a preferir los segmentos de alto rendimiento con un historial específico, como Argentina o Brasil. Además, las monedas de los países emergentes latinoamericanos presentan un potencial alcista importante.
Columna de Candriam escrita por Nicolas Forest, responsable global de Gestión de Renta Fija y Nadège Dufossé, responsable global de Asset Allocation.
Pixabay CC0 Public DomainTheAndrasBarta. ¿Sería posible recuperar la propuesta de los eurobonos de Schulz?
Las elecciones federales alemanas de septiembre aún parecen estar muy lejos. Sin embargo, por primera vez en años, Angela Merkel podría perder las elecciones, ya que Martin Schulz, candidato a canciller y presidente del Partido Socialdemócrata, ha dado un salto en las encuestas y está ganando terreno. Por este motivo, según Wolfgang Bauer, gestor adjunto del fondo M&G European Corporate Bond, sería recomendable que los inversores que adquieren títulos de deuda europea y británica se refrescaran la memoria y recordaran los cinco años de Schulz como presidente del Parlamento Europeo.
Según recuerda Bauer, en 2011 y 2012, en plena crisis de deuda de la eurozona, Schulz defendió reiteradamente la mutualización de la deuda en forma de eurobonos, es decir, la emisión de deuda soberana de manera conjunta por parte de todos los países miembros de la eurozona.
“El enfoque que subyace tras esta idea es evidente: permitir que los países periféricos más afectados se beneficien de unos costes de financiación más bajos. A medida que aumentaba la confianza de los mercados de deuda en la capacidad del BCE de hacer todo lo que sea necesario para respaldar la eurozona, se reducían los diferenciales de las rentabilidades (TIR) de los bonos soberanos periféricos”, afirma el gestor.
Durante este último año, las primas de riesgo periféricas han mostrado en general una tendencia ascendente, aunque a un ritmo mucho más lento que el de 2011 y 2012, “lo que deja entrever que la postura de Schulz podría volver a ser pertinente”, según Bauer.
Al analizar los niveles históricos de los diferenciales, se observa que las valoraciones de los bonos emitidos por los países periféricos de la eurozona aumentaron la presión en algunos mercados de bonos. El diferencial de los bonos del Tesoro de España a diez años respecto a la rentabilidad (TIR) de los bonos federales alemanes (Bunds) a diez años se aproxima al 1,3%, cifra cercana a la media de los últimos diez años. El diferencial de rentabilidad (TIR) de los bonos italianos a diez años solo supera esta cifra en medio punto porcentual (1,8%), lo cual no es demasiado en términos absolutos.
“Sin embargo, si lo comparamos con los datos históricos de los últimos diez años, el panorama se complica: durante el 70% del tiempo, el diferencial era más bajo que el actual”, señala este gestor de M&G. Y pone como ejemplo Portugal, con una la situación similar. “Un país para el cual el diferencial de rentabilidad (TIR) ha sido inferior al valor actual del 3,7% durante más de dos tercios de los últimos diez años. El exceso de rentabilidad (TIR) griega sobre los bonos federales alemanes, 7,0%, es la cifra más alta entre los países de la periferia, aunque en realidad esté por debajo de su media histórica. Según este cálculo, la situación en Grecia es de lo más tranquila, una frase que no solemos leer”, aclara siguiendo su argumento.
Emisión conjunta de eurobonos
Si se toma como hipótesis de trabajo que se llega a introducir la política de Schulz sobre la emisión conjunta de eurobonos a diez años, Bauer señala que las primas por rentabilidad (TIR) de los países periféricos desaparecerían de inmediato. “Pero ¿qué rentabilidad (TIR) podrían esperar los inversores para los eurobonos?”, se plantea.
En su opinión, excepto Estonia, todos los países de la eurozona tienen bonos del Tesoro en circulación, lo cual permite calcular la rentabilidad (TIR) media ponderada a diez años y establece un buen punto de partida. “Para efectuar estos cálculos, hemos utilizado dos factores: el PIB y el nivel de deuda. La rentabilidad (TIR) ponderada basada en el PIB representa la potencia económica de los países y, por lo tanto, su capacidad para recaudar impuestos y saldar deudas. Alemania tiene más peso porque disfruta de un PIB elevado”, explica.
Como resultado de la hipótesis que plantea Bauer, la rentabilidad (TIR) media desciende hasta el 1,2 %, casi como la rentabilidad (TIR) a diez años actual de Eslovaquia. Si esta fuera la rentabilidad (TIR) real de los eurobonos, los costes de financiación para Alemania a diez años se triplicarían, mientras que la rentabilidad (TIR) de los países periféricos se reduciría de forma considerable. Por el contrario, la rentabilidad (TIR) ponderada basada en la deuda refleja el grado de apalancamiento financiero y la calidad del crédito de los países. Italia, debido a su elevada deuda, tiene un peso importante e impulsa el promedio hasta el 1,6 %, cifra parecida a la rentabilidad (TIR) actual a diez años de Malta y cuatro veces superior a la rentabilidad (TIR) a diez años alemana.
Aunque, es probable que el cálculo de la hipotética rentabilidad (TIR) de los eurobonos basada en el PIB y en la deuda ponderada sea demasiado elevado puesto que no tiene en cuenta la mejora de la solidez del mercado ni de la liquidez. Según su análisis, “si se creara una clase conjunta de eurobonos, se transformaría radicalmente el fragmentado mercado de bonos del Estado en Europa y pasaría a ser mucho más uniforme. Los países más pequeños, cuyos mercados de deuda estatal local pueden haber sido ignorados por muchos inversores, se verían muy beneficiados por el acceso al amplio y líquido mercado de los eurobonos”.
Pese a esta hipótesis, es poco probable que los eurobonos se introduzcan en un futuro próximo. Así lo reconoce el propio Bauer, “aparte del posible riesgo moral que entraña la mutualización de la deuda y los conflictos potenciales con el Tratado de Lisboa, Alemania se enfrenta a obstáculos políticos de gran importancia. La canciller Angela Merkel, el ministro de Finanzas Wolfgang Schäuble y otros miembros de los partidos conservadores CDU y CSU han rechazado categóricamente los eurobonos en ocasiones anteriores”.
El gestor se muestra muy seguro de ello ya que, incluso si Schulz pudiera organizar una mayoría parlamentaria estable sin el bloque CDU/CSU tras las elecciones, ¿de verdad querría reabrir el debate sobre los eurobonos? “Como es lógico, la idea de los eurobonos no es precisamente popular en Alemania, lo que explicaría el hecho de que el candidato no haya sacado el tema a colación últimamente, ahora que se postula a la cancillería de Berlín. En este sentido, parece coincidir con el primer canciller de la República Federal Alemana en su famosa frase: ¿A mí qué me importa lo que dije ayer?”, reconoce como conclusión de su análisis.
CC-BY-SA-2.0, FlickrFoto: Evan Jackson
. Los bonus de las gestoras son cortoplacistas
Morningstar piensa que los partícipes de fondos activos deben invertir con un horizonte temporal de largo plazo para sacar provecho de las ventajas de la gestión activa, y, por tanto, que las gestoras deberían compensar a sus gestores basándose en los resultados conseguidos a largo plazo, expone Fernando Luque, en un artículo en la página web de la firma. Sin embargo, como el mismo autor recalca, incluso en Estados Unidos, pocas lo hacen.
En un estudio llevado a cabo recientemente por la fima en Estados Unidos, en que ha analizado cómo las 30 principales gestoras remuneraban a sus gestores, ha quedado patente que la gran mayoría de estas calcula el bonus en función de las rentabilidades conseguidas a uno, tres y cinco años; y son muy pocas (solo 3, de las 30) las que van más allá de esos periodos. Según el autor, “focalizar la remuneración exclusivamente sobre periodos de corto plazo incita al gestor a tomar decisiones, en algunas ocasiones, riesgos no deseados por los inversores”.
El estudio muestra, además, que es común otorgar el mismo peso a las rentabilidades a uno, tres y cinco años, lo que –según Luque- acentúa aún más la importancia de las rentabilidades a corto plazo. Hay gestoras, sin embargo (como America Funds, por ejemplo) que no solo evalúan los resultados a largo plazo, sino que dan más importancia a los resultados de más largo plazo frente a los de más corto plazo.
Por otra parte, añade el senior financial editor, la mayoría de las gestoras también toma en consideración únicamente la rentabilidad total a la hora de calcular el bonus, mientras que sería más adecuado considerar la rentabilidad ajustada al riesgo.
En conclusión, “para Europa y España en particular, sería deseable conseguir el mismo nivel de información en cuanto a bonus a gestores que el que proporcionan las gestoras estadounidenses. No es un asunto baladí. La forma en la que el gestor recibe su bonus puede influir en la forma en la que gestiona su fondo”.
En cualquier caso, el autor recuerda que la forma como se remunera a los gestores, junto con otros aspectos como la rotación de personal, forma parte de las variables que sus analistas valoran a la hora de otorgar un rating al fondo.
CC-BY-SA-2.0, FlickrFoto: Savara. La inversión en la era del populismo: punto de vista desde la óptica de la renta variable europea
No estaba previsto que Reino Unido celebrase elecciones generales hasta 2020, pero es cierto que la posibilidad de que la primera ministra, Theresa May, anticipara la convocatoria siempre estuvo ahí. Sin embargo, el mercado reaccionó el pasado martes con sorpresa al anuncio. En consecuencia, los rendimientos de la deuda pública británica rebotaron tras conocerse la noticia y la libra esterlina se revalorizó tras abrir a la baja.
La hipótesis de trabajo en estos momentos de Ian Spreadbury, gestor del fondo FF Flexible Bond Fund de Fidelity, es que Theresa May conseguirá una mayoría sustancial que le permitirá tener una postura negociadora más sólida frente a sus colegas europeos.
Spreadbury cree que se podría dar el caso, aunque es muy improbable, de que Theresa May no consiga la mayoría y tenga que abandonar el liderazgo del partido conservador. De ser así, la moneda británica se vería perjudicada en primera instancia.
Además, añade el gestor, provocaría un movimiento general de búsqueda de la calidad que tiraría a la baja de los rendimientos de la deuda pública británica, como ocurrió tras el referéndum del año pasado. “No obstante, la incertidumbre a corto plazo debería hacer que los rendimientos de los gilts se mantuvieran relativamente estables”, apunta.
Aunque el Banco de Inglaterra ha terminado con sus compras recientes de deuda pública británica y con la mayor parte de sus compras de bonos corporativos, el gestor del FF Flexible Bond Fund, espera que la entidad siga atendiendo a las condiciones del mercado y, por lo tanto, mantenga un sesgo expansivo durante este periodo, “lo que debería atenuar la magnitud de una posible ampliación de los diferenciales de deuda corporativa”.
En lo que respecta al posicionamiento de su estrategia, Spreadbury afirma que está ante un nuevo recordatorio de la elevada prima de riesgo político mundial. “Mi intención es mantener la cautela en los mercados de deuda corporativa y centrarme en los bonos respaldados por activos, menos cíclicos y de alta convicción”, concluye.
Foto cedida. La banca aboga por un modelo de gestión basado en valores y servicio
El primer encuentro sectorial “Modelando el sistema bancario” ha reunido a representantes de CaixaBank, Banco Santander, Triodos Bank y Global Alliance for Banking on Values, con el objeto de analizar el modelo de gestión estratégico basado en valores del sistema bancario español, facilitar la inclusión de principios éticos y sostenibles en su gestión, así como dar a conocer la doble misión de estas entidades: económica y social.
Según Guillem López Casasnovas, catedrático de Economía Aplicada de la Universidad Pompeu Fabra y consejero del Banco de España, las entidades financieras deberían contrarrestar la acumulación de desequilibrios internos vía requerimientos de capital, sobre todo en bonanza. “El mejor impuesto a la banca es forzarla a provisiones”, ha dicho. Asimismo, ha insistido en la necesidad de reforzar el buen gobierno de las entidades y en que la banca genere productos y servicios diseñados y desarrollados para satisfacer las necesidades de las personas y organizaciones. En este sentido, para López Casasnovas “más Europa es la solución”.
Por su parte, el director adjunto del Servicio de Estudios del Banco Santander, Antonio Cortina, ha señalado que “la confianza es la única base que aumenta la vinculación de los clientes”. También ha hecho hincapié en que hay que avanzar hacia una banca europea, y aquí –ha dicho– “la banca española parte con ventaja porque tiene un negocio consolidado, es más eficiente y cuenta con una mayor diversificación geográfica”.
Ante el reto de restablecer la confianza en el sector financiero, Estel Martín, directora del departamento de estrategia bancaria de CaixaBank, ha señalado que “aunque la confianza en los bancos se está recuperando gradualmente, aún queda camino por recorrer”. En este contexto, Martín señala que “solo logrando una rentabilidad adecuada podemos asegurar la sostenibilidad de nuestro modelo”.
Los dos últimos ponentes del encuentro han sido Mikel García, director general de Triodos Bank en España, y Marcos Eguiguren, director ejecutivo de Global Alliance for Banking on Values –red internacional formada por 25 bancos de los seis continentes que tiene como objetivo ampliar el impacto de la banca ética y sostenible a nivel global–.
Ambos han hecho un llamamiento a bancos, reguladores y gobiernos para un cambio de paradigma en el sector financiero promoviendo estándares que aporten transparencia en los modelos de negocio, utilizando indicadores para dar información sobre impacto social, económico y medioambiental, e incluyendo una diversidad de modelos de banco, tanto en tamaño como en formas de gobierno, para “reconstruir las regulaciones en el sector bancario”.
Por último, Valentín Pich, presidente del Consejo General de Economistas, ha señalado que “aunque existen diferencias entre los sistemas de gestión de las diferentes entidades, no cabe duda de, hoy en día, todos incluyen principios éticos”. A este respecto, Pich ha recalcado que “además de cumplir escrupulosamente los estándares normativos, la ética de los negocios siempre ha de estar presente en el sistema bancario”.
El presidente del Consejo General de Economistas ha manifestado que existen muchos estereotipos sobre el sistema bancario y que, en muchas ocasiones, “se olvida el peso específico que tiene en lo referente a creación de empleo e inversiones de todo tipo, así como el servicio imprescindible que presta a la ciudadanía y empresas en general, y a las pymes, en particular”.
Pich ha concluido diciendo que “el sector bancario, al igual que otros sectores económicos, se enfrenta a nuevas realidades –importantes regulaciones, cambios tecnológicos…–, lo que sumado a la “digestión” de los excesos de años pasados, ha hecho que tengan que emplear mucha energía y sabiduría para aumentar su eficiencia sin afectar a la satisfacción del cliente”.