CC-BY-SA-2.0, FlickrFoto: David Shankbone. ¿Posible ola de impagos en la deuda high yield estadounidense?
La renta fija global ha sido una de las inversiones preferidas de los inversores dispuestos a asumir una mayor prima de riesgo en su búsqueda de rentabilidades. Pero los expertos de Invesco recomiendan precaución, debido a los niveles de deuda cada vez mayores en todo el mundo. En su último informe sobre la estabilidad financiera mundial, el FMI alertó del preocupante aumento del apalancamiento corporativo global, que hace que las empresas del universo de renta fija high yield sean vulnerables a una fuerte subida de los tipos de interés.
El FMI afirma que el ratio medio de cobertura de intereses en Estados Unidos –que mide la capacidad de los ingresos actuales para cubrir los costes de los intereses— ha caído a menos de seis veces el gasto por intereses, rozando el valor más bajo desde el comienzo de la crisis financiera.
“La subida de los tipos de interés podría provocar que hasta el 22% de todas las grandes empresas estadounidenses —lo supone casi 4 billones de dólares en activos— fuesen incapaces de atender sus pagos de intereses, lo que resultaría en un aluvión de impagos”, advierte Invesco.
La gestora alude también a otra medida: la proporción de ingresos que las empresas dedican al pago de la deuda se sitúa actualmente en Estados Unidos en su nivel más alto desde 2010. Edward Altman, experto en quiebras y creador del rating Z-Score (variable Z) —que mide la solidez del crédito de una compañía en función de los beneficios, el apalancamiento, la liquidez, la solvencia y la actividad— prevé una posible ola de impagos.
Altman afirma que la variable Z se sitúa actualmente por debajo del nivel de 2007, justo antes de la gran crisis financiera, que se caracterizó por un gran aumento de los impagos de bonos corporativos. Todo esto hace que las empresas con una calificación crediticia baja sean vulnerables si los tipos de interés empiezan a subir y los costes del endeudamiento aumentan.
Además, añade Invesco, la calidad del high yield se está deteriorando en todo el mundo según la agencia de calificación Moody’s, la calidad de los acuerdos de deuda high yield estadounidense es la peor desde que la agencia comenzó a registrarla en 2011. Además, el número de préstamos con calificación inferior a la categoría de inversión (sub-investment grade) con una protección del acuerdo mínima o nula va en aumento en EE. UU, Europa y también en Asia.
“Como consecuencia de ello, muchos creen probable que los tipos de interés globales se mantengan bajos durante más tiempo y los bancos centrales sigan respaldando el débil crecimiento de la economía. Esto refuerza los motivos para invertir en deuda con categoría de inversión (investment grade), así como la necesidad de ser precavidos al seleccionar bonos globales”, concluye la firma en su análisis mensual de renta fija.
Pixabay CC0 Public DomainFoto: DomainPIctures. VDOS facilita la transición a MiFID II para gestoras y distribuidores desde una única fuente de datos
El próximo 3 de enero de 2018 entra en vigor el nuevo marco regulatorio basado en la normativa europea de MiFID II, cuyos objetivos fundamentales son mejorar la trasparencia de los mercados financieros y proteger a los inversores.
En este contexto, desde VDOS trabajan ya desde hace tiempo en adaptar sus soluciones para facilitar la transición a la normativa, tanto para las entidades gestoras -en su obligación de gobierno de productos y la entrega de esta información a sus canales de comercialización-, como para las entidades distribuidoras -en integrar la información relativa al mercado objetivo, costes y cargas de los productos según su estrategia de distribución-, desde una única fuente de datos.
En particular, en el servicio de datos y documentación, las acciones de adaptación de las soluciones de VDOS a MiFID II consisten en la incorporación de la información relativa al mercado objetivo, estrategia de distribución y costes y cargas (ex ante, ex post) para los fondos de inversión de la base de datos; la puesta en marcha del servicio de difusión para entidades gestoras; y la puesta en marcha del servicio de explotación para entidades distribuidoras.
En cuanto al apoyo a la comercialización y el asesoramiento, VDOS trabaja en la adaptación del servicio y validación del catálogo de productos según mercado objetivo y estrategia de distribución.
En cuanto al negocio institucional, en la adaptación del servicio e integración de la información en los procesos de análisis y selección de fondos de inversión así como en los procesos de soporte comercial a la red y clientes, según explica en un comunicado.
Foto: SantiMB, Flicrk, Creative Commons.. PSN Gestión Socimi comenzará a negociarse en el MAB el viernes y será la socimi número 44
El Consejo de Administración del MAB ha aprobado la incorporación de la compañía PSN Gestión Socimi al segmento de socimis, tras analizar la información presentada por la empresa y una vez emitido el informe de evaluación favorable del Comité de Coordinación e Incorporaciones.
El inicio de negociación de la sociedad, cuadragésimo cuarta socimi que se incorpora al MAB, está previsto para el próximo viernes, 22 de diciembre. Su código de negociación será “YPSN”. VGM AdvisoryPartnerses el asesor registrado y Banco Sabadell actuará como proveedor de liquidez.
El Consejo de Administración de la Sociedad ha fijado un valor de referencia para cada una de sus acciones de 14,20 euros, lo que supone un valor total de la compañía de 28,1 millones de euros.
PSN Gestión Socimi es una sociedad patrimonialista dedicada a la inversión en inmuebles, principalmente oficinas y locales comerciales, destinados al alquiler. La compañía es propietaria de una cartera de activos compuesta por un edificio completo con uso hotelero, así como diversas oficinas distribuidas entre 27 edificios situados en 21 ciudades de España y Portugal.
La número 45
Además, el MAB ha emitido un informe favorable a la incorporación de Barcino Property Socimi, que sería la número 45. El código de negociación de la compañía será “YBAR”.Renta 4 Corporate es el asesor registrado y Renta 4 Banco actuará como proveedor de liquidez.
El Consejo de Administración de la sociedad ha fijado un valor de referencia para cada una de sus acciones de 1,33 euros, lo que supone un valor total de la compañía de 19,1 millones de euros.
BarcinoProperty Socimies una sociedad de inversión inmobiliaria que se caracteriza por su enfoque patrimonialista de inversión, gestión y desarrollo de su propia cartera de inmuebles, centrada principalmente en el área metropolitana de Barcelona. En la actualidad su cartera de activos está compuesta por ocho inmuebles.
Foto cedidaSteven Maijoor, presidente de ESMA.. El presidente de ESMA considera que MiFID II podría ser un modelo también para fuera de la Unión Europea
¿Podría ser MiFID II un modelo exportable a otros países? Para Steven Maijoor, presidente de ESMA, podría ser una opción. Según ha declarado Maijoor en una entrevista realizada por Bloomberg, “no me sorprendería que MiFID II se convirtiera en un modelo utilizado fuera de la Unión Europea (UE)”.
En su opinión, con esta regulación, existe una creciente presión competitiva sobre los gestores de activos en general y “no me sorprendería si, como parte de esa presión, el unbundling se convierte en un modelo más estándar”, afirmó durante la entrevista.
Como apunta Maijoor, la entada en vigor de MiFID II el próximo 3 de enero supone menores ingresos para muchos de las gestoras ante el cambio de modelo que supone para la industria, lo que generará grandes oportunidades para algunos gestores de activos, especialmente para aquellos que ofrecen productos más baratos, según Maijoor.
“Lo habitual es que los costes de los fondos en EEUU sean menores que en la UE. Además, de media, los fondos europeos son más pequeños que los estadounidenses. Sabemos que en este negocio el tamaño es muy importante. Una de las posibilidades podría ser incrementar el tamaño de nuestros fondos. Creo que deberíamos trabajar en un industria de gestores de activos más competitiva en la UE. Y el unbundling y el research juegan aquí un papel muy importante”, explicaba Maijoor durante la entrevista a la hora de hablar sobre las complicaciones que pueden existir por las diferencias entre la legislación americana y la europea.
“Se trata de un tema de debate muy candente en la industria actualmente, pero me complace haber escuchado a algunos players decir que implementarán MiFID II inmediatamente y que esperan cubrir costes en sus propias cuentas, en lugar de trasladarlo a sus clientes. Debería haber igualdad de condiciones entre el gestor de la Unión Europea y el gestor de Estados Unidos que presta sus servicios a un gestor de activos europeo. Entonces, cuando el broker de Estados Unidos proporciona esos servicios, es importante que el research no sea un aliciente y que haya una separación”, añadió.
Foto: Alex Segre, Flickr, Creative Commons. ¿Tipos de interés en el -15% en 3017, dentro de mil años?
En un entorno de tipos bajo mínimos, el horizonte de vencimiento de algunas emisiones de bonos se está alargando de forma alarmante, con el objetivo de ofrecer algo más de rentabilidad al inversor en deuda. A las recientes emisiones de bonos a cien años de gobiernos como el argentino o el austriaco, con mucho interés en el mercado, se ha sumado el de una empresa danesa de energía, llamada Orsted, que ha hace unos meses emitía un bono verde híbrido con un cupón fijo del 2,25% anual y vencimiento a mil años, en 3017. Y la oferta resultaba sobresuscrita.
“¿Quién dijo que los inversores no piensan ya en el largo plazo?”, ironiza en un reciente artículo Joachim Fels, asesor de estrategia global de PIMCO, en el que reflexiona, a raíz de este bono milenario, sobre cuál será el rumbo de los tipos de interés en los próximos 1.000 años. “Por supuesto, es imposible de saber, pero si esta respuesta no resulta ser lo suficientemente buena para usted, habrá que mirar datos históricos sobre los tipos de interés para tratar de adivinarlo”, remontándose lo más posible al pasado para tratar de adivinar un futuro también muy lejano.
El experto utiliza una serie de datos recopilados por el historiador de Harvard Paul Schmelzing sobre los tipos de interés a largo plazo libres de riesgo, y sobre la inflación, que se remontan 700 años atrás. “Como primera aproximación, asumamos una reversión a la media de tal forma que el nivel medio de tipos de interés para el próximo milenio iguale la media histórica de largo plazo. Según los datos de Schmelzing, el tipo real libre de riesgo ha sido de media de un 4,8% y la inflación del 1,1% en los últimos 700 años. Por lo tanto, si los próximos mil años son como los últimos 700 años, los tipos de interés libres de riesgo nominales deberían arrojar una tasa media del 5,9%, significativamente por encima del actual nivel. Si esto es así, los inversores que compraron el bono danés a poco más del 2% no parecerán muy inteligentes a largo plazo», explica.
Sin embargo, añade, mirando con más atención los datos históricos, se puede concluir que la trayectoria histórica de los tipos de interés ha sido claramente descendente en los últimos siete siglos. Así, los tipos han ido bajando a un ritmo de 1,6 puntos básicos por año o un 1,6% por siglo. “De forma muy interesante, el actual nivel de tipos reales está muy cerca de esta tendencia y en línea con la tendencia histórica, en lugar de encontrarse anormalmente bajos”, dice el economista de PIMCO.
Por eso, “asumiendo que la tendencia es tu aliada, como muchos participantes del mercado frecuentemente hacen”, explica que una caída continuada de los tipos de interés reales de 1,6 puntos básicos por año durante los próximos 1.000 años llevaría a las tasas desde el actual nivel cercano a cero hasta niveles cercanos al -16% en el año 2017. Mientras, la inflación no ha mostrado una tendencia claramente positiva o negativa a largo plazo en los últimos 700 años, así que, asumiendo que continúa la ratio histórica del 1%, y poniendo ambas cifras juntas, da como resultado una tasa nominal de tipos de interés libre de riesgo del -15% para dentro de 1.000 años.
«Si es así, los que compraron el bono danés serán vistos como genios por sus descendientes en el futuro. Por supuesto, asumimos que el emisor seguirá en pie y será capaz de pagar el bono en su fecha de vencimiento», dice.
Ciclos en los tipos
El estratega de PIMCO también se pregunta sobre la posible existencia de ciclos de largo plazo en la evolución de los tipos. “Después de todo, los datos históricos muestran fluctuaciones significativas de tipos de interés reales alrededor de la tendencia bajista de largo plazo. De hecho, explica, a lo largo de los últimos siete siglos, Schmelzing identifica lo que llama “nueve ciclos de tipos de depresión” que muestran una caída secular en los tipos reales, seguidas por reversiones”. Y el actual noveno episodio de depresión en los tipos (de 34 años) ya es el segundo más largo registrado.
“Cuando los ocho ciclos anteriores de caídas terminaron, durando de media 26 años, las reversiones que siguieron tendieron a ser bastante viciosas: en los primeros dos años, los tipos de interés reales subieron de media 315 puntos básicos. En dos de las subidas, los tipos reales incluso subieron más de 600 puntos básicos en un periodo de dos años. Como indica el autor, en la mayoría de los casos las fases de caídas de tipos fueron interrumpidas por catástrofes y eventos geopolíticos, como la Peste Negra, la Guerra de los Treinta Años o la Segunda Guerra Mundial”, indica.
Según Schmelzing, la analogía histórica más cercana con el estancamiento secular actual fue la Gran Depresión de los años 1880 y 1890, caracterizada por un crecimiento de la productividad muy bajo, presiones deflacionistas y un aumento en el populismo y proteccionismo global. Acabó en los años 90 del siglo XIX con un crecimiento de la productividad, el descubrimiento del oro y la expansión monetaria, y una aceleración de la inflación los salarios, así como la elección de William McKinley como presidente de EE.UU., un republicano a favor del proteccionismo, en 1896.
«¿Podríamos ver una reversión similar en los tipos pronto”, se pregunta el experto de PIMCO. “No lo creo”, responde. “Vengo argumentando durante varios años que las fuerzas fundamentales de la demografía, la tecnología y la globalización seguirán alimentando un exceso de ahorros deseados sobre inversiones deseadas, lo que significa que los tipos deberían seguir estancados en lo que PIMCO llama el nuevo neutral (the New Newtral) durante el futuro próximo”, dice.
Por eso, de momento, su principal conclusión tras analizar los tipos de interés de los últimos siete siglos es que, tomando una visión de largo plazo, no hay nada raro en ver el actual nivel de tasas: “Están de hecho donde deberían, según la tendencia descendiente de los últimos siglos”, apostilla.
CC-BY-SA-2.0, FlickrFoto: Ian D. Keating. Perspectivas para 2018: moderación del crecimiento y contracción de los márgenes de beneficios
El contexto económico para los mercados en 2018 resulta menos favorable. Las tendencias monetarias y los análisis cíclicos sugieren que la economía global perderá dinamismo a medida que avance el año. Mientras tanto, los mercados laborales en Estados Unidos y otras economías principales se han ajustado hasta niveles que tradicionalmente se asocian a un repunte en el crecimiento de los costes laborales unitarios. La aceleración del crecimiento de los costes laborales ejercería una presión alcista en la inflación subyacente y los tipos de interés y una presión bajista en los márgenes de beneficios.
En el mismo análisis de hace un año, preveíamos que 2017 sería un año positivo para la economía mundial. El crecimiento del agregado monetario real a escala mundial, que generalmente precede al crecimiento económico en un periodo de seis a doce meses, aumentó considerablemente en el último tramo de 2016. Además, el ciclo de constitución de existencias estadounidense, que tiene una duración de entre tres y cinco años, había tocado fondo a principios de 2016 y se adentraba en una fase alcista. Los anteriores mínimos de este ciclo, registrados en 2009 y 2012, dieron paso a una sólida expansión económica en el país y a escala internacional durante el siguiente año que duró 18 meses.
Las tendencias monetarias
El crecimiento anual del agregado monetario real a escala mundial se ha moderado desde finales de 2016 y, en el momento de redacción del presente artículo, volvía a situarse en torno a su nivel medio de 2014-2015, tal y como muestra el siguiente gráfico.
El repunte del ciclo de existencias estadounidense todavía tiene recorrido —los niveles de inventario son reducidos en comparación con las ventas finales—, pero podrían alcanzar su máximo en el primer semestre de 2018. Teniendo en cuenta todo esto, sería razonable esperar que el crecimiento económico mundial mantendrá su solidez en 2018, pero se moderará más tarde durante el año.
¿Podría una pérdida de impulso traducirse en una recesión? Las tendencias monetarias actuales siguen siendo coherentes con un crecimiento económico considerable, aunque un incremento de la ralentización a principios de 2018 podría suponer una señal de alarma de cara al resto del año.
Según el análisis del ciclo, es improbable que se produzca una recesión en 2018, pero es una posibilidad realista para 2019-2020. Las recesiones generalmente tienen lugar cuando se produce de forma simultánea una desaceleración en el ciclo de constitución de existencias y un debilitamiento en uno de los otros dos ciclos clave o en ambos: el ciclo de inversión empresarial de siete a once años y el ciclo inmobiliario a más largo plazo (más de 15 años). Los tres ciclos tocaron fondo en 2009, lo que explica la gravedad de la recesión en EE. UU. y el resto del mundo ese año.
El último mínimo en el ciclo de existencias se produjo en 2016, por lo que se espera que el siguiente tenga lugar en 2019-2021. El ciclo de inversión empresarial tocó fondo por última vez en 2009, por lo que se prevé que vuelva a marcar mínimos en 2020 como muy tarde. La tendencia al alza del ciclo inmobiliario a más largo plazo se mantendrá. Por tanto, la debilidad en los ciclos de inversión y de existencias podría coincidir y dar lugar a una recesión en 2019-2020. Cualquier recesión tendría una gravedad moderada, dado que contaría con el apoyo del ciclo inmobiliario y la naturaleza relativamente moderada del actual repunte de la inversión empresarial.
¿EE.UU. y Japón en vanguardia?
Las tendencias monetarias en todos los países en el momento de redacción del presente artículo sugieren que China y Europa encabezarán la moderación del crecimiento mundial en 2018, mientras que EE. UU. y Japón registrarán una evolución relativamente sólida.
El IPC subyacente mundial (es decir, excluyendo los sectores alimentario y energético) mostró un comportamiento estable en 2017 a pesar del sólido crecimiento económico. El consenso podría estar infravalorando los riesgos derivados de la inflación en 2018, al igual que sucedió con las perspectivas de crecimiento hace un año.
En EE.UU., la tasa de desempleo cayó al 4,1% en octubre de 2017, y la tasa de ofertas vacantes de empleo o disponibilidad se situó cerca del 4,0% en septiembre, tal y como muestra el gráfico siguiente.
La diferencia entre las dos tasas solo ha caído por debajo de los 0,5 puntos porcentuales en cuatro ocasiones desde principios de la década de 1950: 1955, 1965, 1972 y 1999. El crecimiento anual de los costes laborales unitarios repuntó considerablemente durante el año siguiente en las cuatro ocasiones. Los mercados laborales en Japón, Alemania y el Reino Unido también se muestran ajustados en términos históricos.
La aceleración del crecimiento de los costes laborales impulsaría la inflación subyacente y provocaría la contracción de los márgenes de beneficios. Los dos fenómenos resultarían perjudiciales para los mercados, pero el equilibrio entre ambos afectaría a la atracción relativa de la renta variable y la deuda pública. Una situación en la que los márgenes sufriesen una mayor presión, por ejemplo, conllevaría un deterioro de las perspectivas económicas y un aumento de los riesgos de recesión, lo que constituiría un apoyo para la renta fija a pesar de una inflación más elevada a corto plazo.
Una sencilla norma de inversión que habría funcionado bien en términos históricos consiste en rotar de renta variable a activos monetarios si el crecimiento del agregado monetario real del G7 se sitúa por debajo del 3% o si cae 3 puntos porcentuales o más a lo largo de seis meses. Si bien las tendencias monetarias se han moderado, ninguna de estas dos condiciones se ha cumplido todavía. Esta norma puede servir como referencia a la hora de determinar si resulta necesario adoptar una postura de inversión totalmente defensiva en 2018 y en qué momento hacerlo.
Simon Ward es economista jefe de Janus Henderson Investors.
Pixabay CC0 Public DomainRawpixel . El 34% de los emprendedores anticipan un crecimiento con respecto a su uso futuro de fondos de inversión
La cuarta edición del Informe Global sobre Emprendimiento de BNP Paribas revela que el 39% de los emprendedores de éxito considera que el impacto positivo de sus inversiones es un factor fundamental a la hora de evaluar la rentabilidad de su empresa, frente al 10% de hace dos años.
Este aumento tan significativo refleja un cambio en la mentalidad de los emprendedores de todo el mundo. En los últimos doce meses, el concepto de impacto positivo, que consiste en asegurar que sus empresas, inversiones y acciones personales ayuden a hacer del mundo un lugar mejor, se ha convertido en una prioridad para los emprendedores.
El informe, que está basado en la opinión de 2.700 emprendedores de éxito de 22 países, que atesoran un patrimonio total de 36 billones de dólares, señala que:
El 55% de estos emprendedores han destinado una parte de su patrimonio a lograr resultados socialmente responsables.
El 80% cree que el emprendimiento es la mejor manera de lograr un impacto local o global, sobre todo en lo que se refiere a proteger el medio ambiente. En Europa, la energía limpia es la causa más popular (35%) mientras que en EEUU y Oriente Medio, lo es la creación de empleo (36% y 40%, respectivamente).
Los emprendedores anticipan un crecimiento con respecto al uso futuro de fondos de inversión (34%), financiación de start-ups (34%), capital riesgo (32%), inversión en capital (32%) e inversiones de impacto (29%).
Según señala Sofía Merlo, Co- CEO de BNP Paribas Wealth Management, “se ha producido un cambio muy rápido en su mentalidad, lo que influye en la manera en la que los emprendedores de éxito invierten su patrimonio. Recientemente BNP Paribas Wealth Management rompía la barrera de los 10 mil millones de euros en inversiones responsables de nuestros clientes, multiplicándose por diez en los últimos seis años. Este hecho demuestra claramente el creciente apetito de nuestros clientes por este tipo de estrategias”.
En opinión de Vincent Lecomte, Co-CEO de BNP Paribas Wealth Management, “la forma en la que invierten los emprendedores pone de manifiesto su objetivo de dejar un mundo mejor para las generaciones futuras, al mismo tiempo que reflejan sus propios valores. Los millennipreneurs, que cuentan con un elevado potencial de patrimonio, lideran esta tendencia: el 64% está comprometido con las inversiones de impacto, sobre todo en términos de creación de empleo”.
Perfiles de emprendedores
El Informe Global sobre Emprendimiento de BNP Paribas recoge diferencias en función de la zona geográfica. Aún así, identifica cinco perfiles globales que definen estos emprendedores de impacto:
Ultrapreneurs: emprendedores con un patrimonio de más de 25 millones de USD. El 67% de los ultrapreneurs son inversores responsables, que suelen favorecer la inversión social y medioambiental. Invierten sobre todo para “crear empleo” (41%), “proteger el medioambiente” (38%) y apoyar la transición hacia “energías limpias” (32%).
Serialpreneurs: emprendedores que han creado o son propietarios de 4 o más empresas. Estos emprendedores están más centrados en utilizar su patrimonio de manera estratégica para apoyar empresas con elevado potencial: dedican el 15% de su cartera a inversiones “angel” y a capital riesgo.
Millenniprenerus: emprendedores con menos de 35 años. El 46% define el éxito de su negocio en base al impacto social, en comparación con el 39% de los emprendedores a nivel global. A pesar de ello, la mayoría no se siente satisfecha con los logros conseguidos en este área hasta la fecha, por lo que identifican el impacto social como una prioridad a futuro.
Woman entrepreneurs: las mujeres emprendedoras obtienen mejores rentabilidades que sus homólogos masculinos con un patrimonio medio mayor. Muestran mayor interés (37%) que los hombres (33%) en las inversiones ASG (las que integran los criterios ambientales, sociales y de buen gobierno, además del análisis financiero tradicional), para garantizar un impacto positivo.
Boomerpreneurs: emprendedores de la generación Baby Boom, con más de 55 años. Los emprendedores de la generación Baby Boom están menos convencidos de las bondades de las inversiones orientadas a lograr resultados sociales o medioambientales: el 55% no tiene exposición en sus carteras. Invierten sobre todo en renta variable y en inversiones de temática medioambiental.
CC-BY-SA-2.0, FlickrFoto: Giuseppe Milo. El segmento de 3 a 5 años de la curva estadounidense puede proteger a los inversores de la normalización monetaria de la Fed
Desde comienzos de año, el diferencial entre los tipos de interés a diez y dos años se ha reducido más de la mitad hasta alcanzar los 60 puntos básicos, su nivel más bajo desde 2007. Históricamente, una inversión de la curva de rendimientos, algo que todavía queda lejos, ha dado paso a menudo a una recesión. No es de extrañar, así, que el aplanamiento de la curva de rendimientos en Estados Unidos preocupe, y no poco, a los inversores.
Sin embargo, desde nuestro punto de vista, el aplanamiento de la curva de rendimientos no augura una recesión en Estados Unidos. En este sentido, es importante detenerse a recordar que durante los seis últimos ciclos de endurecimiento de la política monetaria estadounidense se ha observado un aplanamiento de la curva de rendimientos debido, principalmente, a las fuertes subidas de los tipos de interés a corto plazo.
También esta vez, la subida de los rendimientos de los bonos del Tesoro estadounidense a dos años explica en gran parte esta evolución y responde a las tres subidas de los tipos de referencia de la Reserva Federal desde el pasado mes de diciembre y las previsiones de normalización gradual de la política monetaria.
Dentro de la renta fija, la evolución de los rendimientos de los bonos a 10 años merece una atención especial. Durante los últimos doce meses han descendido cinco puntos básicos después de aumentar más de 100 puntos básicos de media durante los ciclos anteriores.
Exceso de ahorro
Sin embargo, esta evolución no se origina en una revisión a la baja de los tipos de referencia previstos durante los diez próximos años, lo que habría sido inquietante, sino que refleja sobre todo el exceso de ahorro a nivel mundial, que es, en definitiva, el persistente efecto de los programas de compra de activos y las bajas expectativas de inflación.
En este contexto, y dentro de la asignación a deuda pública estadounidense en nuestras carteras, preferimos posicionarnos en los vencimientos a tres-cinco años, entorno en que la curva permanece relativamente estable y actúa como bisagra desde comienzos de año. Tampoco olvidemos que el rendimiento de los bonos estadounidenses a diez años repuntó recientemente hasta superar el 2,40%.
Este posicionamiento debería protegernos en caso de que continúe la normalización de la política monetaria mediante la subida de los tipos cortos. Además, limitará el riesgo de duración en caso de repunte de los tipos largos a consecuencia de una revisión al alza de las perspectivas en torno al crecimiento, la inflación y la prima a plazo. Los bonos de alto rendimiento todavía podrían beneficiarse de un descenso de los diferenciales de tipos de interés, pero siguen siendo una clase de activos de alto riesgo en caso de corrección de los mercados.
En cualquier caso, seguimos creyendo que podemos encontrar valor en la renta fija, eso sí, con un enfoque de aproximación flexible, global, con un elevado control del riesgo y muy activo, que nos permita obtener las ventajas, en cada momento, de cada tipo de activo, en cada mercado. Esto es lo que hace con éxito el equipo de Andrew Lake en su fondo Mirabaud Global Strategic Bond, con más de un 6% en el último año y una volatilidad por debajo del 2%.
Raimundo Martín es director general de Mirabaud Asset Management para España, Portugal y Latinoamérica.
De izquierda a derecha, Joan Bonet, director de estrategia de mercados en Banca March; Juan Antonio Roche, director del área de productos; y Carlos Andrés, director de gestión discrecional de carteras y asesoramiento. . Banca March adoptará un modelo no independiente pero con espíritu independiente para diferenciarse en un entorno post-MiFID II
Este año, a las perspectivas de mercado de 2018 hay que añadirles un vector adicional, y es lo que supone tanto para los clientes como para los proveedores financieros la entrada en vigor de MiFID II, y el cambio que instaura en las relaciones entre ellos. Esa perspectiva es la que ha adoptado Banca March, que ha definido su gama de servicios con mayor precisión que en el pasado de cara al nuevo entorno que se avecina y ha presentado su estrategia en un evento celebrado esta mañana en Madrid. Un nuevo entorno que favorece al cliente, debido a la mayor protección y transparencia que trae la normativa, y que se conjuga con un escenario de inversión positivo, explican, y en el que la actitud y el posicionamiento de cada entidad, con MiFID II sobre la mesa, es lo que marcará la diferencia: “Cada entidad decide cómo jugar con MiFID II y el cliente verá las distintas posiciones de los proveedores, y decidirá con quién trabajar”, comenta Juan Antonio Roche, director del área de productos de Banca March. Para jugar en este contexto y diferenciarse de sus competidores, la firma mallorquina se declara “entidad no independiente”.
“Una entidad con una fábrica de productos fuerte solo puede declararse no independiente, pero la idea es trabajar como si fuéramos independientes, porque en la práctica tendremos una oferta completa de servicios de inversión –que incluye gestión discrecional, asesoramiento recurrente, asesoramiento puntual, ejecución y comercialización-, arquitectura abierta (con productos propios y de terceros), una alineación de intereses a través de la coinversión, y un cobro dual al cliente”, explica Roche. Un cobro en el que se conjugarán las retrocesiones (en los servicios de ejecución, comercialización y asesoramiento puntual –este último sobre todo a través de producto propio, por lo que tiene sentido el cobro de incentivos-) con el cobro explícito en el servicio de gestión discrecional de carteras y asesoramiento recurrente.
En realidad, en asesoramiento recurrente –a medio camino en cuanto a potenciales conflictos de interés entre la gestión discrecional y los servicios de comercialización o ejecución, realizados a iniciativa del cliente- en un principio se conjugarán ambos tipos de cobro -puesto que la transición total a cobro explícito a día 3 de enero es imposible teniendo en cuenta que hay muchos clientes que aún pagan vía incentivos- pero el banco instaurará un modelo transitorio hacia el cobro directo por asesoramiento, con la idea de que sea una realidad en el futuro y con la idea también de que los nuevos clientes paguen ya de forma explícita. “2018 será un periodo de observación, en el que recomendaremos el pago explícito en el asesoramiento recurrente pero no forzaremos a los clientes. Creo que el cambio será rápido pero no lo vamos a violentar”, asegura Roche.
De esta forma el asesoramiento puntual será el más abierto y flexible, ya que permitirá el cobro de retrocesiones, y la inversión en productos complejos, y tanto en productos propios como de terceros, con menos limitaciones. Todos los servicios se ofertarán a través de un contrato único, que regula las relaciones entre el banco y el cliente, con unas normas generales y anexos para cada uno de ellos, de forma que supongan una especie de guiones que sirvan para explicar en qué consisten. “El cliente puede moverse de un servicio a otro y lo natural es que antes de delegar la gestión de su cartera se pase por el asesoramiento”, dice el experto.
Así las cosas, y a diferencia del mundo pre-MiFID II, March se diferenciará definiendo con mayor precisión (y ampliando) su oferta de servicios prestados, permitiendo un cobro dual por dichos servicios (a diferencia del cobro no explícito previo a la normativa) y, en cuanto a la oferta de productos, potenciando los instrumentos pasivos –ya disponibles antes, pero con menor uso en las carteras- y los fondos boutique -de acceso muy restringido-, sin dejar de lado los productos singulares en los que invierten junto a los clientes (proyectos en la economía real, o de coinversión) y siempre con una oferta tanto propia como de terceros. “El mundo de la arquitectura abierta se polariza hacia el alfa y la beta”, comenta Roche.
Así, la gama de productos será amplia (tanto no complejos –utilizados sobre todo en gestión delegada como en asesoramiento recurrente, con la idea de poder rotar las carteras cuando sea necesario, gracias a su liquidez- como complejos –estos últimos se ofertarán sobre todo en el asesoramiento puntual y en la comercialización, en este último caso tras un test de conveniencia en el que el cliente explique que entiende lo que compra), y con productos propios y de terceros (a través de la plataforma de Inversis). Y conjugando la gestión activa y pasiva, para equilibrar y controlar tanto los riesgos de las carteras como los costes, explica Carlos Andrés, director de gestión discrecional de carteras y asesoramiento.
De hecho, en las recomendaciones de inversión se conjugarán cuatro posibilidades: la gestión activa y diversificación profesional (ahora apuestan por la protección contra el riesgo de tipos de interés vía bonos flotantes, siendo selectivos con crédito, con apuestas por renta variable sobre todo europea y sectores cíclicos); la captura de la prima de iliquidez (con inversiones no cotizadas y de medio plazo, a través de proyectos de co-inversión en sectores como el inmobiliario, la deuda privada subordinada, el capital riesgo internacional o las infraestructuras); la apuesta tanto táctica como estratégica por la pura beta líquida, precisa y barata de mercado (a través de instrumentos pasivos, como fondos indexados y ETFs); y la inversión en boutiques que sacan partido a los episodios de mayor volatilidad y dispersión (a través de gestoras como Eleva, o el grupo de boutiques del que forma parte March AM, GBAM).
“A raíz de MiFID II, la labor del gestor cobra más importancia”, afirma Andrés, pues se amplía a toda la cadena. La entidad lleva pensando en su estrategia desde el año 2015, con el objetivo de estar preparados de cara al 3 de enero de 2018 para su implementación (recordemos que la entrada en vigor se retrasó un año, pues la fecha inicial prevista era enero de 2017). Este año, dicen los expertos de March, los esfuerzos se han centrado en ámbitos como la tecnología o la formación.
Un contexto de inversión favorable
Y todo, en un contexto de inversión favorable, en el que los activos siguen subiendo -y podría haber una continuidad en 2018-, y en el que el hilo conductor es la ausencia de inflación: “La inflación no termina de aparecer y eso permitirá que las políticas monetarias sigan siendo expansivas; unos bancos centrales retiran estímulos (la Fed) pero otros compensan (Banco de Japón y BCE)”, dice Joan Bonet, director de estrategia de mercados. Aunque habla de continuidad de las subidas de los activos en 2018, mientras haya liquidez, matiza que hay tres derivadas que no pueden obviarse: unas mayores valoraciones (que por sí solas no pueden dar la vuelta a los mercados), un ciclo más desarrollado en economías como la estadounidense y una volatilidad en mínimos, que es el factor que más le preocupa.
“La renta variable sigue siendo el activo estrella, pero es difícil que la volatilidad continúe en mínimos”, advierte. Con todo, cree que las ganancias en bolsa europea podrían superar el 10%, región en la que es más positivo, junto a las emergentes, mientras España será más atractivo cuando se disipe la incertidumbre en torno a Cataluña. Por sectores, favorece los cíclicos (financiero –sobre todo en EE.UU. gracias a los mayores tipos y a la menor regulación, aunque también en Europa suponen una oportunidad por valoración y una cobertura si el escenario de baja inflación no funciona-, industrial –sobre todo en Europa, gracias a las mayores inversiones en capex- y tecnológico –sobre todo en EE.UU.-)
Foto cedida. Fernando Primo de Rivera Oriol sale de Altair y asesorará el fondo que ya tenía en la entidad bajo el nombre Bluenote Global Equity
Bluenote Global Equity: es el nuevo nombre del fondo Altair Bolsa, que asesoraba desde su lanzamiento Fernando Primo de Rivera Oriol en Altair y que ahora, tras su salida de la entidad tras algo más de un año en la misma, asesorará en solitario bajo la nueva marca Bluenote. Y bajo el paraguas gestor, como hasta ahora, de Renta 4 Gestora.
El experto lleva más de 25 años vinculado a los mercados financieros y gestionando diferentes vehículos de inversión. Con su asesoramiento, el fondo acumula, a cierre de noviembre 2017, un 7% de rentabilidad anualizada a tres años con una volatilidad del 10%.
El fondo tiene la misma vocación que los vehículos anteriores que ha asesorado o gestionado Primo de Rivera Oriol: enfoque de largo plazo, en esta ocasión a través de inversión en renta variable global para aquellos inversores que buscan una rentabilidad a largo plazo y tienen perfil menos conservador que aquellos que buscan garantizar la preservación del capital y son inversores en otro de los vehículos asesorados por Fernando y su equipo, Bluenote Sicav (con activos bajo gestión de 10 millones de euros).
Para ello, sobre un universo de compañías globales que cumplen con los criterios de selección, se invierte en las 30 compañías con mayor potencial de revalorización, equiponderando el peso de cada posición (con un peso del 3%) en busca de una ¨concentracióndiversificada¨.
Bluenote Global Equity nace, aproximadamente, con 6 millones de euros de patrimonio bajo gestión. Tiene actualmente una exposición superior al 50% a la Zona Euro (57%), región en la que el equipo asesor ve más potencial, seguida de Estados Unidos (20%) y Reino Unido (8%). La cartera también cuenta con una importante diversificación sectorial de sus activos, con posiciones en tecnología (20%), consumo cíclico (15%), industrial (13%), servicios financieros (13%) y energía (11%).
Entre sus principales posiciones cabe destacar Microsoft, RD Shell Veolia o Danone, entre otras. El fondo mantiene una liquidez del 20% con el objetivo de aprovechar las oportunidades que detecte el equipo asesor en los próximos meses.