Ibercaja Gestión ha configurado un nuevo organigrama con el objetivo de apostar por una gestión de calidad que continúe respaldando el crecimiento experimentado en los últimos años. Desde finales de 2012, la gestora de fondos de inversión de Ibercaja ha multiplicado por tres el volumen de patrimonio administrado hasta alcanzar 13.075 millones de euros a 30 de abril y se ha consolidado en la séptima posición del ranking nacional del sector con una cuota del 4,86%. Su oferta alcanza en la actualidad 61 fondos de inversión adaptados a las diferentes necesidades de sus clientes.
Lili Corredor, directora de la gestora de fondos de inversión de Ibercaja desde agosto del año pasado, potencia ahora su equipo de inversiones, que continúa siendo dirigido por Óscar del Diego, y crea un Área de Análisis Interno, con Javier Rillo al frente. Ambos profesionales tienen una dilatada experiencia en la gestión de activos, habiendo desarrollado su carrera profesional dentro de la gestora.
Cinco líneas de inversión diferenciadas
El nuevo equipo de inversiones va a ser liderado por Óscar del Diego, CFA y sexto gestor español con más votos en la encuesta de Extel de 2018. Del Diego coordina el equipo gestor de los fondos de inversión y planes de pensiones del Grupo Ibercaja y además gestiona algunas de las carteras más representativas de la entidad.
Pedro Lacambra es el responsable de Renta Variable y Arquitectura Abierta. Con más de 10 años de experiencia en la gestión de activos y segundo gestor español con más votos en la encuesta de Extel de 2018, es un firme defensor de la gestión activa y la inversión value, que aplica a los fondos de inversión y pensiones que gestiona.
Toda la gama de fondos perfilados recae bajo la responsabilidad de Beatriz Catalán. Pertenece al equipo de Ibercaja Gestión desde 2007, habiendo desarrollado su labor profesional con anterioridad en Banco de España. Es doctora en Ciencias Económicas y novena gestora española con más votos en la encuesta de Extel.
Miriam Fernández, CFA, es responsable de la inversión con criterios ambientales, sociales y de buen gobierno (ASG), quinta gestora española con más votos en la encuesta de Extel. está plenamente convencida de que la combinación de criterios financieros y ASG es un hecho diferencial que permite mejorar las rentabilidades, minimizando riesgos.
Cristina Gavín es responsable de Renta Fija. Ha desarrollado íntegramente su carrera profesional en Ibercaja Gestión. En sus decisiones de inversión, Gavín aplica el análisis fundamental en busca de ineficiencias en los mercados, tratando de aprovechar momentos de volatilidad. Es la gestora de Ibercaja Plus y de Ibercaja Oportunidad Renta Fija, dos de los fondos más laureados de España.
La estratégica posición de Ibercaja Banco en planes de pensiones de empleo es gestionada por Cristina Martínez, cuya trayectoria ha estado siempre ligada a la gestora de fondos. Algunos de los planes de empleo de mayor volumen del país están bajo su tutela. Los buenos resultados obtenidos históricamente avalan su gestión.
Nueva área de Análisis
Reforzar, complementar y enriquecer la información disponible para la gestión de las carteras es la finalidad de la nueva área de Análisis, dirigida por Javier Rillo, CFA, CIIA y 12º gestor español con más votos en la encuesta de Extel. El análisis fundamental es la base de la toma de decisiones de la gestora de Fondos del Grupo Ibercaja.
Rillo, que siempre ha aplicado la filosofía value, es además gestor del fondo de autor Ibercaja Alpha y participante habitual en los foros de inversiones más prestigiosos del país.
Ibercaja Gestión, referencia en el sector con 30 años de experiencia
Ibercaja Gestión es una de las primeras gestoras de fondos de inversión creadas en España entre las entidades financieras. Con una cuota de mercado del 4,86%, ocupa el séptimo puesto en el ranking nacional del sector.
Entre los reconocimientos y premios obtenidos, cuenta con el premio a la Mejor Gestora Nacional de Fondos de Inversión en los premios Expansión All-Funds Bank en la edición de 2017 y ha resultado finalista en las ediciones de 2019, 2018 y 2015.
Foto cedidaSam Theodore, director general de instituciones financieras de Scope.. Bancos europeos: 10 temas clave para lo que queda de año
Según Sam Theodore, director general de instituciones financieras de Scope, los bancos europeos se mantendrán en buena forma en 2019, mostrando características prudenciales, financieras y comerciales tranquilizadoras, persiguiendo estrategias de riesgo moderado a bajo. Pero las incertidumbres de fondo continuarán irrumpiendo en el mercado.
Las calificaciones de Scope en los grandes bancos europeos, la mayoría en el rango A / bajo AA, reflejan esta evaluación, por lo que la expectativa para 2019 es de estabilidad de los ratings. Pero la presión en el sector está aumentando, principalmente debido a preocupantes acontecimientos sociales y políticos en Europa y en todo el mundo. En este contexto,Theodore, identifica 10 temas clave para los inversores institucionales:
Fortaleza prudencial y financiera, pero no totalmente tranquilizadora. El sector bancario europeo continúa mostrando sólidos indicadores prudenciales en torno al capital y la liquidez, y el sector no está insuficientemente capitalizado estructuralmente en comparación con los grandes bancos estadounidenses. Todos los grandes bancos de la Unuión Europea (EU) superaron sus procesos de revisión y evaluación supervisora (PRES) de 2018. En su opinión, los problemas de calidad de los activos del sector son, en su mayoría, un legado del pasado, a pesar de las preocupaciones continuas del mercado y el supervisor. Más importante aún es que no hay signos visibles de deterioro material en la calidad de las carteras de préstamos creadas desde la crisis financiera mundial. Esto refleja estándares de suscripción más estrictos y el hecho de que los préstamos recientes se han extendido en un contexto de tipos de interés históricamente bajos. Si bien esto sugiere que las subidas futuras de tipos pueden afectar la capacidad de pago de los prestatarios más apalancados, las normas de provisión de la NIIF 9 deberían atenuar significativamente el efecto negativo del deterioro de la calidad del préstamo al exigir provisiones contra pérdidas esperadas, en lugar de incurridas. Por otro lado, ante los crecientes riesgos cibernéticos y de mala conducta (que no se pueden cuantificar), las buenas métricas prudenciales ya no pueden tranquilizar por completo.
Rentabilidad moderada. Considera que es probable que la rentabilidad se mantenga moderada y que los márgenes netos de intereses continúen en niveles bajos, ya que es factible que los tipos no suban. Los volúmenes de nuevos préstamos seguirán aumentando con cautela, pero es probable que los bancos sufran una reducción en el crecimiento de las tasas y que la disminución de los costes materiales sea difícil. Sin embargo, las características de bajo riesgo del sector mitigan este punto y deberían brindar tranquilidad a los inversores de crédito con respecto a que los bancos aumenten sus resultados al asumir un mayor riesgo. Los bancos que son demasiado agresivos con los objetivos de beneficios deberían levantar sospechas entre los inversores. En este sentido, Scope no considera que un ROE de un solo dígito alto para el sector bancario europeo sea negativo, no cuando valoramos que el coste real del capital está en el rango 7% -8% (por debajo del consenso del mercado de doble dígito bajo).
Una mayor reducción de costes es cada vez más difícil: el exceso de capacidad no se diluye. La mayoría de los bancos europeos han podido reducir los costes en los años posteriores a la crisis gracias a una combinación de estrategias centradas en la reducción de peso, reducción de riesgos y desapalancamiento, así como la incorporación de nuevas tecnologías más eficientes. Sin embargo, a falta de movimientos de reestructuración más drásticos, tanto a nivel bancario como sistémico, es probable que este proceso sea más difícil. Esto no será una buena noticia para la industria. Primero, porque la menor flexibilidad para reducir costes ofrece menos opciones de gestión en un entorno de rápida evolución; En segundo lugar, los analistas e inversores, con razón o sin ella, continúan considerando esta métrica como un indicador clave de fortaleza o debilidad.
Riesgos sociales y políticos tras bambalinas. En contra del desempeño financiero y del riesgo, vemos una creciente aprensión del mercado hacia el sector, un movimiento derivado de las tendencias tras bambalinas que pueden afectar la capacidad crediticia de los bancos, ya sea directamente o a través de un «efecto mariposa»: Brexit , La política estadounidense (el proteccionismo estridente del presidente Trump y las amenazas de una guerra comercial) y el auge del nacionalismo y el populismo en Europa y en otros lugares (especialmente en Italia). Si bien es comprensible que haya una mayor cautela en el mercado, esta precaución no debe incrementarse innecesariamente empeorando el panorama y afectando a la capacidad de los bancos para financiar y / o emitir capital. Los bancos no son los culpables del estrés actual del mercado. El área principalmente afectada son los ingresos bancarios. La calidad de los activos no debería ser un tema crítico en este momento, ni la amenaza de que la Unión Bancaria Europea esté en peligro.
La era digital desafía los modelos de negocio. Scope señala al desafío creciente de la evolución digital y los cambios relacionados con el comportamiento del cliente. En los próximos años, es posible que comencemos a ver el modelo de negocios integrado de la mayoría de los bancos: los circuitos de la mayor cantidad posible de productos para sus negocios y clientes individuales son más intermedios. Es probable que esto sea verdaderamente transformador para Europa, donde el sistema financiero y los circuitos son más intermedios para los bancos que en los Estados Unidos.
Riesgo de ataque cibernético: “el talón de Aquiles” de los bancos. Para la firma, el riesgo cibernético está entre los más temidos por las instituciones financieras. El desafío para los inversores, analistas y supervisores es que las amenazas cibernéticas no se pueden cuantificar y medir adecuadamente. En los últimos años, hemos visto un esfuerzo cooperativo sin precedentes entre los reguladores de todas las jurisdicciones para aumentar la eficacia de la protección cibernética en el proceso de la supervisión y las regulaciones bancarias. Es necesario que haya un esfuerzo conjunto sostenido por parte de la industria bancaria, los reguladores, los gobiernos, los proveedores de TI y los expertos externos. Los bancos no pueden ser efectivos por sí mismos y necesitan cooperar. El hipotético potencial reducido de subida que pueden poseer al tener una reputación más efectiva en cuanto a riesgos cibernéticos que la competencia podría ser rápidamente alterado por un exitoso y masivo ataque cibernético a ese competidor, que podría dañar significativamente la confianza en la viabilidad de la banca digital.
El riesgo de mala conducta sigue estando en el centro de atención. Las preocupaciones de los inversores se están enfocando cada vez más en el riesgo de mala conducta bancaria. Las reglas con acrónimos como KYC (conozca a su cliente), AML (lucha contra el blanqueo de dinero) y CTF (lucha contra la financiación del terrorismo) definen la clave de las regulaciones de riesgo de mala conducta, con claras consecuencias legales, financieras y penales, por infracción. En la década transcurrida desde la crisis, se han producido numerosos actos de mala conducta, relacionados con el blanqueo de dinero, el fraude o la evasión fiscal, y el abuso de mercado. Los bancos europeos han pagado miles de millones en multas legales y regulatorias (especialmente relacionadas con sus operaciones en Estados Unidos). En el Reino Unido, existe una clara división del trabajo de supervisión, que aporta transparencia al proceso: la Autoridad Reguladora Prudencial es responsable de la supervisión prudencial, mientras que la supervisión de la conducta corresponde a la Autoridad de Conducta Financiera. En la Unión Bancaria Europea, sin embargo, esta distinción es más difusa. El Mecanismo Único de Supervisión (SSM) es responsable de la supervisión prudencial, pero la supervisión del riesgo de mala conducta en general se maneja a nivel nacional por las autoridades competentes.
ESG: mayores expectativas de mercado y políticas y estándares más altos. Los inversores institucionales se centran cada vez más en los factores medioambientales, sociales y de gobernanza (ESG) en todo el universo de inversión. El sector bancario es una parte muy importante de este enfoque. Alentados por los inversores y los clientes y actuando según sus propias convicciones, los grandes bancos se están volviendo más públicos acerca de su enfoque de ESG. Esto abarca desde detalles sobre políticas de préstamos sostenibles, divulgación de información relacionada con el cambio climático y la huella de carbono, aclaraciones sobre su adhesión a los Principios de Ecuador, hasta la emisión y suscripción de bonos verdes o sociales. La divulgación de información ESG por parte del sector bancario ha estado mejorando, con el objetivo de acercarse más a las expectativas de los inversores y los legisladores. Con respecto a la gobernabilidad, algunos bancos han logrado avances significativos en los años posteriores a la crisis. Si bien la regulación está ayudando a mantener a los bancos en el buen camino, los elementos de concienciación de ESG también están cambiando la cultura de los bancos para mejorar. Una cultura bancaria renovada está conduciendo a una toma de riesgos más responsable, mayor conciencia social, de género y étnica en las políticas de empleo y relaciones laborales, así como a estándares más altos de salud y seguridad. Sobre el enfoque del inversor de la ESG, Scope expresa sus dudas sobre la práctica de sustituir las puntuaciones de ESG de terceros por una evaluación propia y exhaustiva de estos problemas.
Mejor evitar las fusiones y adquisiciones transfronterizas a gran escala. Scope no espera ni ve mucho valor en la consolidación de grandes bancos en Europa, incluso a pesar de que los supervisores lo alienten. Los bancos pueden ampliar su potencial a través de la inversión en capacidad digital, aprovechando las plataformas abiertas y las API, en lugar de fusionarse con los «bancos heredados» y asumir costos innecesarios, así como los posibles problemas desconocidos tecnológicos o de conducta indebida.
Resolución vs rescates. Por último, existe un debate en curso sobre los escenarios de resolución para bancos en quiebra. Si bien el marco de resolución está firmemente implementado en toda Europa, muchos participantes del mercado continúan creyendo que, cuando llegue el momento, el gobierno nacional no permitirá que un gran banco sea intervenido. Esto puede ser cierto, pero es altamente improbable que los inversores institucionales sean rescatados, especialmente aquellos que han invertido en valores elegibles para MREL / TLAC (y posiblemente también en deuda senior preferente). Es muy probable que 2019 sea un año activo para las emisiones bancarias, con la mayor parte de las operaciones en un formato senior no preferente elegible para MREL (Requisito mínimo de pasivos elegibles). Hay, por fin, más claridad normativa en la UE con respecto al MREL, y los bancos ahora necesitarán construir los amortiguadores necesarios de la deuda con capacidad de garantía. Es probable que el BCE renueve las facilidades del TLTRO (o extienda el calendario de pagos más allá de mediados de 2020) para que el pánico en la financiación debido al empeoramiento de las condiciones del mercado no empeore. Pero al mismo tiempo, los requisitos de MREL y la necesidad de cumplir con el Coeficiente de Financiación Estable Neta (NSFR), que probablemente se convertirá en un requisito regulatorio en un futuro no muy lejano, harán que los bancos emitan más fondos en el mercado.
Foto: Aranjuez1404, Flickr, creative Commons. Amundi celebra el “Amundi Day” en La Coruña: Entender los mercados y encontrar soluciones
Amundi celebra el próximo 29 de mayo su “Amundi Day”, con el título «Entender los mercados y encontrar soluciones».
En el encuentro, Victor de la Morena, director de Inversiones de Amundi Iberia, compartirá las visiones macro y de mercado, oportunidades y riesgos.
A continuación Raúl Fernández, director de distribución de Amundi Iberia, y Lorenzo Gallardo, ejecutivo de cuentas, propondrán soluciones de inversión; centrándose en un producto multi-activo de baja volatilidad como es el Amundi Funds II – Global Multi-Asset Conservative; y en un fondo de renta variable temática que invierte de forma diversificada en Disrupción con el CPR Invest – Global Disruptive Opportunities. Seguidamente se servirá un cóctel.
El evento, dirigido a inversores profesionales, tendrá lugar el miércoles 29 de mayo a las 18.45 en Palexco, Muelle de Trasatlánticos s/n. En La Coruña.
Será en castellano y será válido por una hora de formación para la recertificación EIP, EFA y EFP.
Para confirmar su asistencia puede enviar un e-mail a: rosa.montequin@amundi.com
Pixabay CC0 Public Domainsiobhandolezal. ¿Hay un cambio de tendencia en el mercado de renta fija?
En un entorno caracterizado por el compás de espera de la Fed y la relajación monetaria del Banco Popular de China y del BCE, la alternativa es una búsqueda continua de rentabilidad, fundamentalmente en las curvas de deuda soberana y de crédito. En este contexto cabe preguntarse qué impulsará los mercados.
En opinión de Nordea AM, la respuesta pasa por: “Las expectativas de una recuperación económica en China. El mantenimiento de los tipos por parte de la Fed durante el segundo trimestre, seguido de una subida de 25 a 50 puntos básicos en la segunda mitad del año antes de marcar una pausa en 2020. Y, por último, la continuación de las negociaciones comerciales entre EE. UU. y China en el segundo trimestre, que podría traducirse en amenazas esporádicas de aumento de los aranceles”, apunta la gestora en las perspectivas económicas para el segundo trimestre de 2019.
En renta fija, y vista la posición de los bancos centrales, el riesgo de tasa de interés ha disminuido significativamente y esto debería alentar a los inversionistas de bonos a preocuparse menos por la duración de la tenencia. Según destaca Chris Iggo, jefe de inversiones de renta fija de AXA IM, esto “también es positivo para el crédito, dado que los diferenciales de crédito se ampliaron y los activos de crédito tuvieron un desempeño inferior al del año pasado cuando la Fed subía las tasas cada tres meses”.
De hecho, el crédito siguió comportándose de forma positiva en febrero con entradas de capitales a fondos tanto investment grade como high yield en euros. El mercado observa que pese al aumento de las nuevas emisiones, la demanda de los inversores se ha ido manteniendo fuerte. Iggo pone el acento en que el inversor debería concentrarse en beneficiarse de un entorno de tipos bajos y estables y de un crecimiento económico aún positivo. “El año pasado es el año pasado, en este los bonos han vuelto», sostiene.
En opinión de Nicolas Chaput, consejero delegado y director de inversiones adjunto de Oddo BHF AM, se ha producido un freno a la recuperación de la renta fija. “El reciente repunte de la deuda pública se ha interrumpido. A estos niveles tan bajos, los bonos federales alemanes podrían haber descontado ya un fuerte descenso de la economía, dejando poco margen. Sin embargo, el potencial de subida de los rendimientos sigue limitado por la actitud sobre los tipos más bajos durante más tiempo y el probable descenso de la inflación general”, señala Chaput.
Foto cedidaAdrian Hull, responsable de renta fija de Kames Capital. . Kames Capital nombra a Thomas Hanson nuevo responsable de high yield
Kames Capital ha nombrado a Thomas Hanson nuevo responsable del equipo de high yield en Edimburgo. La casa escocesa también ha incorporado a Eleanor Price en calidad de analista de high yield, con el objetivo de reforzar sus capacidades en esta clase de activo.
Hanson se une a Kames tras su paso por Janus Henderson Investors, donde era gestor de carteras de crédito high yield y cogestor del Janus Henderson Euro High Yield Fund y del Janus Henderson Global High Yield Fund.
Cuenta con casi 19 años de experiencia en inversiones, tras haber trabajado previamente en Aerion Fund Management y Lazard Asset Management. Hanson compartirá con Mark Benbow la gestión del Kames High Yield Bond Fund, del Kames High Yield Global Bond Fund y del Kames Short Dated High Yield Bond Fund.
Por su parte, Price, que acumula más de 24 años de experiencia en gestión de inversiones, de los cuales 15 han sido en deuda de alto rendimiento, se une a Kames en calidad de analista de inversiones en high yield. En su último puesto fue gestora de inversiones en el equipo de high yield de Baillie Gifford; sus responsabilidades incluían generar ideas para las carteras de high yield, tanto europeo como estadounidense. Antes, trabajó en Insight Investment Management y en Baring Asset Management.
Estos nombramientos se producen después de que el cogestor de high yield, Jack Holmes, abandone la firma tras casi dos años y medio para perseguir otras oportunidades. «Desde Kames, le deseamos lo mejor para el futuro», dice la gestora en un comunicado.
«Tanto Thomas como Eleanor aportan muchísimo conocimiento en inversiones al equipo de high yield, ya que suman más de cuarenta años de experiencia entre los dos. Kames cuenta con una larga trayectoria de excelencia en el espacio high yield y esta es la oportunidad ideal para que Thomas dé un paso más en su desarrollo profesional y lidere nuestro equipo de high yield en un momento en el que nos proponemos reforzar nuestra marca y subrayar nuestra especialización en esta clase de activo», comenta el responsable de renta fija de Kames, Adrian Hull. «Por último, me gustaría darle la bienvenida a Thomas y a Eleanor y agradecerle a Jack el trabajo desarrollado en Kames».
Pixabay CC0 Public Domain. Esfera Capital celebrará una conferencia sobre las inversiones de impacto y el SDG's investing
Esfera Capital organiza el próximo 30 de mayo una conferencia en la que profundizará acerca de las inversiones de impacto y el SDG’s investing. El evento se celebrará a las 7 de la tarde en la sede de Cecabank, en la calle Caballero de Gracia, 28-30, en Madrid.
Luis Hernández Guijarro, gestor del fondo Esfera II Sostenibilidad ESG Focus FI en Esfera Capital Gestión SGIIC, asociado EFPA y miembro del IEAF, será el ponente de la conferencia. Desde la organización destacan la importancia de este tipo de inversiones, que «son un paso más allá de la inversión socialmente responsable (ISR) y que incorporan, entre otras cosas, criterios de exclusión, selección positiva ‘best in class’ y sostenibilidad y criterios ESG (enviornmental, social, governance)». Asimismo también tienen influencia en las decisiones de inversión y, adicionalmente, en los criterios tradicionales como liquidez, rentabilidad y riesgo.
Las inversiones de impacto y el SDG’s investing buscan proporcionar al inversor una rentabilidad financiera: con todo, pese a que no se trata de filantropía, existe una intención positiva de proporcionar al inversor una rentabilidad social y medioambiental de impacto medible. Otros temas que se analizarán en el evento son los objetivos de desarrollo sostenible de la ONU, el funcionamiento de las empresas sociales o el plan de acción de la UE para gestionar unas finanzas sostenibles.
El acto será presentado por José Carlos Sánchez Vicaíno, director de Depositaría de Fondos de Cecabank, y contará con la participación de otros profesionales (ver programa adjunto).
Para asistir, pueden enviar un mail a infogestora@esferacapital.es o bien apuntarse en este link de Eventbrite.
Para los profesionales del sector, se puede obtener 1 hora de formación CPD por el CISI, 1 hora de formación MIFID II por el IEAF y 1 hora de formación MIFID II por la Escuela de Formación de Bancaria de Cecabank (estas dos últimas tras superar un test).
Pixabay CC0 Public Domain. Mercer publica una actualización de su modelo de inversión ante los diferentes escenarios del cambio climático
Mercer, la consultora global vinculada a las inversiones, salud, bienestar y desarrollo profesional, ha publicado las conclusiones de su modelo actualizado de inversión ante los diferentes escenarios del cambio climático, en el informe ‘Invertir en tiempos de Cambio Climático – Los Efectos’. Mercer interpreta el cambio climático como un riesgo sistémico para los inversores, por eso propone un modelo que permite evaluar el riesgo financiero y climático para toda la cartera del inversor, abarcando todas las clases de activos y sectores, y cuantificar así el impacto del clima sobre el retorno en el largo plazo.
En el estudio, la modelización de los efectos del cambio climático considera tres escenarios probables, que recogen un incremento medio del calentamiento global de dos, tres y cuatro grados centígrados respectivamente, durante tres franjas temporales: 2030, 2050 y 2100. El impacto que genera el incremento de temperatura, con un mayor número de catástrofes naturales y una reducción de los recursos disponibles, puede observarse con mayor claridad considerando un mayor periodo (el informe de Mercer de 2015 fue modelizado hasta 2050). Adicionalmente, la nueva herramienta incorporada al modelo, permite realizar pruebas de tensión de las carteras que permite a los inversores evaluar cómo se desarrollaría un cambio repentino de las probabilidades asignadas a los distintos escenarios, en términos de mercados y/o daños ambientales.
«Una conclusión clave es que invertir en un escenario de dos grados es tanto un imperativo como una oportunidad. Es un imperativo puesto que, para casi todas las clases de activos, regiones y plazos, este escenario conduce a rendimientos proyectados mejores en comparación con los obtenidos en los escenarios de tres y cuatro grados y, por lo tanto, un mejor resultado relativo para los inversores. Por otra parte, es una oportunidad, ya que, aunque algunas de las industrias pueden sufrir pérdidas en un escenario de dos grados centígrados, hay muchas oportunidades de inversión notables en la transición hacia modelos productivos de bajas emisiones de carbono», afirmó Aleix Olegario, director de Mercer Investments. «El modelo muestra que una mayor inclusión de activos sostenibles en las carteras puede mejorar los rendimientos. La evidencia es convincente y refuerza los conclusiones expuestas en el informe sobre el cambio climático de Mercer 2015, respaldando la mayor urgencia de acción para lograr conseguir un calentamiento global muy por debajo de los dos grados», añadió Olegario.
Los inversores también deberían centrarse en las posibles implicaciones a corto plazo de invertir en tiempos de cambio climático. Los cambios bruscos, en las estimaciones de retornos, parecen más probables que unos rendimientos que evolucionen de forma progresiva, por lo que el stress-testing de las carteras se establece como una herramienta fundamental.
«La diferencia de modelización entre considerar un escenario con un incremento del dos grados con otro del cuatro grados es sustancial, puesto que los retornos de las carteras podrían verse afectados en un rango comprendido entre un +3% y un -3% en menos de un año», recacó el director de la entidad.
Los efectos considerados en el estudio, proporcionan a los inversores un marco claro para empezar a adoptar activamente un enfoque ‘Future Maker’ e implementar la transición a un escenario de 2dos grados centígrados. Los ‘Future Makers’, tal y como se definen en el Informe sobre el Cambio Climático de Mercer 2015, sugieren que los modelos de negocio de empresas expuestas a riesgos de transición estén alineados con el marco de los dos grados y presionan a los gobiernos para que tomen medidas urgentes en la implementación del Acuerdo de París, incluyendo un aumento en los compromisos para abordar el cambio climático.
«Se trata claramente de una cuestión fiduciaria, ya que el riesgo debe gestionarse tal y como se establece en el informe del Foro Económico Mundial 2019. Los inversores deben tener en cuenta el cambio climático en todas las etapas del proceso de inversión, desde las creencias, las políticas y los procesos de inversión hasta las decisiones de construcción de carteras», afirmó Cristina San Juan, Socia y líder de Mercer Investments.
El trabajo de Mercer sobre el Cambio Climático es una colaboración empresarial liderada por el negocio de Inversión Responsable (IR). El enlace a Inversión Responsable de Mercer muestra el alcance de los servicios IR que ofrece la compañía, estructurados entorno a la integración de IR en las principales etapas de la inversión: creencias, políticas y procesos e implementación de cartera.
Pixabay CC0 Public DomainStockSnap. Dispuestos a dejarse asesorar, abiertos a activos alternativos e influenciados por su ética: así son los inversores más jóvenes
Según el estudio anual Global Investment Survey, que elabora la gestora de fondos de inversión Legg Mason, pese a las turbulencias y el cambio de escenario económico que se dio a lo largo de 2018, los inversores han mantenido la cabeza fría y han consolidado hábitos de inversión que hasta el momento parecían tendencias, como es el caso de la inversión bajo criterios sostenibles.
“Tomar un enfoque único para invertir no es una opción. Los inversores han reequilibrado sus carteras, reduciendo la exposición al efectivo y a la renta fija, y adoptando por la renta variable y los activos alternativos, e incluso bitcoins, a medida que buscan rendimientos e ingresos de mayores retornos en tiempos volátiles”, apunta en sus conclusiones el estudio elaborado por Legg Mason a partir de 16.810 encuestas a inversores, en 17 mercados de Europa, Asia-Pacífico, Latinoamérica y Estados Unidos.
La encuesta sostiene que el inversor de hoy tiene una fuerte confianza en sí mismo y una fuerte ética y convicciones personas, que también quiere trasladar a su forma de invertir. En consecuencia, los inversores reconocen que cada vez más la responsabilidad social corporativa y la sostenibilidad están influyendo en las decisiones de inversión tanto ha influido en los patrones de compra y consumo de los individuos.
“Después de años escuchando la gran diferencia entre la generación de los baby boomers y los millennials y lo difícil situación que han pasado los más jóvenes, observamos que los millennials están reflexionando sobre sus enfoques de inversión de forma diferente a sus padres. Están más dispuestos a asumir el riesgo y utilizar un asesor financiero que la generación de baby boomer, están abiertos a activos alternativos y son guiados e influenciados por su ética. Estos nuevos inversores están teniendo un gran impacto y pronto les seguirá la Generación Z, que es aún más diversa, a medida que crecen”, señala el informe en sus conclusiones.
En este sentido, estas nuevas generaciones no entienden la inversión sin la tecnología y la digitalización. Muestra de ello es que, según la encuesta el 41% de los millennials afirma que entender las criptomonedas frente al 18% de los individuos de la generación del baby boom. De hecho hay un 28% de los millennials considera que las criptomonedas son la “mejor forma de inversión”.
Otro aspectos que el informe destaca es que si bien la creciente preocupación por la sostenibilidad ha aumentado el interés en la inversión en ESG, parece que la tendencia estaba empujando una puerta abierta: “El inversor de hoy reconoce que estamos todos juntos en esto, y ven tanto la oportunidad como el riesgo en el enfoque global y están preparados para poner su dinero donde están sus opiniones”, señala el informe.
Las cifras de la encuesta señalan que el 77% de los inversores están ahorrando e invirtiendo con objetivos específicos en mente, una tendencia que es aún mayor con los inversores millennial (80%) o la Generación X (80%). Inevitablemente, estos objetivos de inversión son tanto a corto como a largo plazo, dependiendo de la generación y la etapa de vida del individuo.
Por último, existe una marcada diferencia en los niveles de confianza de los inversores dependiendo de qué área geográfica se trate. Por ejemplo, los inversores son particularmente optimistas respectos a Estados Unidos de cara al próximo año. Entre sus preocupaciones se sitúan la inestabilidad política mundial, las tensiones y guerras comerciales y la agitación política. Pese a estos medios, los encuestados se reafirman sobre las oportunidades de inversión y la evolución económica de Estados Unidos.
Foto: Andrea Iannelli, director de inversiones en renta fija en Fidelity International. La economía china ha dejado atrás lo peor
Se mantiene el efecto combinado de un crecimiento modesto, bajas presiones inflacionistas y bancos centrales cautos. La coyuntura sigue siendo favorable a los activos de riesgo y mantiene estables las curvas de rendimientos, mientras que las bolsas siguieron avanzando y los diferenciales de deuda corporativa estrechando durante el mes.
En cuanto a la panorámica macroeconómica general, según indica Andrea Iannelli, director de inversiones en renta fija en Fidelity International, hemos asistido a una mejora del consumo y del mercado laboral, y así lo refleja el indicador adelantado que elabora Fidelity (FLI). Concretamente, el consumidor estadounidense parece encantado de gastar. A tenor de las últimas encuestas, la confianza empresarial también está remontando. Sin embargo, más allá de estas mejoras el comercio mundial y los pedidos industriales continúan de capa caída y los efectos inducidos de las políticas monetarias y presupuestarias más favorables en China todavía tienen que materializarse. Sobre China, aunque los datos generales han invertido su tendencia gracias al fuerte impulso al crédito de marzo, los componentes subyacentes siguen mostrando cierta debilidad. Así pues, tal vez la economía china ha dejado atrás lo peor, pero al resto del mundo podría llevarle todavía un tiempo ponerse al mismo nivel, como se observa en los datos de exportaciones más recientes de Japón y Corea y en los últimos PMI preliminares en Europa.
Aunque se mantienen las inquietudes en torno al crecimiento europeo debido a una combinación de obstáculos externos (China y el Reino Unido) e internos, estos parecen estar ya ampliamente descontados en los tipos de la deuda de los países centrales del euro. La hipótesis de trabajo del mercado es que el BCE mantenga el tono expansivo en un futuro inmediato y si ya no se contemplan tipos diferenciados para los depósitos atendiendo a las últimas declaraciones, el Consejo de Gobierno probablemente tenga que compensarlo con unas condiciones muy generosas en las TLTRO. En fechas más recientes, parece haber remitido el “pánico” que el mercado experimentó a comienzos de año en relación con la ralentización del crecimiento y las escasas opciones a disposición del BCE para contrarrestarlo.
Los últimos datos publicados trajeron cierto alivio gracias a la estabilización de las encuestas, la inflación por encima de lo previsto y las expectativas de que se apliquen políticas presupuestarias más favorables en el segundo semestre. Todavía no hemos salido del túnel y la próxima ronda de lecturas de los PMI será un barómetro importante para saber si la mejoría de la coyuntura macroeconómica china en el primer trimestre se ha dejado sentir en la economía europea. Por ahora, no se observan apenas indicios de que sea así.
Los Bunds volvieron a coquetear con los tipos negativos y se mantienen por poco en positivo en estos momentos. A estos niveles, en Fidelity International no aprecian un potencial alcista significativo en los tipos de los países centrales del euro e infraponderamos este mercado. Sus modelos cuantitativos refrendan esta visión. La deuda de la periferia europea sigue encontrando apoyo en la fuerte demanda de rentas. No obstante, se observa dispersión entre los diferentes países; así, Italia marcha en el furgón de cola conforme nos adentramos en un periodo que probablemente sea volátil en el plano político. Por su parte, la deuda pública española salió indemne de las últimas elecciones, que en su opinión se han saldado con un parlamento sin mayoría. Más allá de la política, la dinámica de crecimiento probablemente sea el principal impulsor de los diferenciales de la periferia y, a este respecto, se mantienen las dificultades para los BTP italianos, mientras que la deuda portuguesa y española se encuentra en una posición más favorable.
En cuanto a EE.UU., la economía está desacelerándose gradualmente desde los picos de crecimiento observados el año pasado. Con unas tasas de crecimiento que vuelven a rondar el 2%, unas perspectivas de inflación relativamente favorables y una Fed que probablemente mantendrá los tipos sin cambios durante algún tiempo, los bonos del Tesoro de EE.UU. deberían seguir encontrando apoyo. Mientras continúan los avances de los activos de riesgo, podríamos ver una ligera subida de los rendimientos, pero es improbable que esta situación dure mucho, en nuestra opinión, y los bonos del Tesoro de EE.UU. deberían batir a sus homólogos.
El mercado interpretó la última reunión de la Fed en clave ligeramente restrictiva, pero en general el discurso que ha asumido la Fed este año no ha cambiado. Un riesgo que persiste para el mercado es una política presupuestaria más expansiva, sobre todo a medida que se aproximen las elecciones de 2020. Sin embargo, apenas existen pruebas de que un déficit presupuestario mayor tenga un efecto significativo en los rendimientos, a menos que se lleve al extremo de que la Fed tenga que actuar y subir tipos.
En el Reino Unido, por último, las últimas elecciones locales dejaron una importante pérdida de apoyos entre conservadores y laboristas, lo que pone de relieve los retos a los que se enfrentan los dos partidos. Los Gilts han ido a la zaga de los Treasuries y los Bunds en abril. Sin embargo, las valoraciones siguen siendo elevadas y el modelo de mercado de Fidelity International recomienda infraponderar. Suponiendo que un Brexit con acceso al mercado único sea la hipótesis de referencia, los rendimientos tienen margen para subir desde los niveles actuales.
Pixabay CC0 Public Domainwww_slon_pics. Llamada de atención: cinco áreas clave donde los gestores de activos deben centrarse en mejorar sus servicios
Según un informe de Allianz Global Investors, la industria de la gestión activa debe trabajar aún más en una serie de áreas críticas para convencer a los inversores sobre su propuesta de valor. El informe, titulado Mantenerse activo: cómo recuperar la confianza en la gestión activa, incluye las opiniones de 500 inversores institucionales de todo el mundo y que representan 15 billones de dólares en activos bajo gestión.
Según revela el documento, si bien los gestores activos están mejor posicionados para ayudar a los inversores a superar los desafíos que ellos mismos identifican, la confianza general en los gestores activos es baja. De los inversores globales encuestados, menos el 23% piensa que vale la pena el coste que conllevan las carteras gestionadas de forma activa, y en los Estados Unidos, tan solo el 17% de los encuestados estaban de acuerdo con esta afirmación.
En contraste, el 61% de los inversores dijo que pensaba que la gestión activa era la mejor opción de inversión cuando los componentes subyacentes de los mercados muestran poca correlación y el 71% piensa que los gestores activos estaban mejor posicionados para capitalizar las oportunidades de inversión presentadas por la transformación digital. Aun siendo importante, el informe revela que la rentabilidad no es el único factor que influye en la elección de los gestores de fondos por parte de los inversores. El 48% afirma que es una de sus tres prioridades principales a la hora de elegir gestores.
Los inversores encuestados también expresaron una clara preferencia por las relaciones a largo plazo y de gran alcance con las gestoras que entienden sus objetivos y desafíos de negocio (41%). También están buscando gestores que tengan la capacidad de evolucionar con sus necesidades, lo que puede generar beneficios tanto para los clientes como para los gestores (40%).
El informe identifica cinco áreas clave donde los gestores de activos deben centrarse en mejorar sus servicios para generar mayor confianza y obtener el compromiso a largo plazo de los inversores.
Ofrecer enfoques de riesgo innovadores: menos de la mitad de los inversores entrevistados sienten que tienen las herramientas / soluciones adecuadas para enfrentar los riesgos de cola.
Facilitar la inversión en criterios ASG (ambientales, sociales y de buen gobierno corporativo): el 61% dice que los gestores activos son mejores que los pasivos, pero el 60% está confundido por los diferentes enfoques de la inversión ASG. No obstante, el 72% de las instituciones planean gestionar todos sus activos de una manera consciente siguiendo criterios ASG para el año 2030; casi 2 de 5 (38%) planean hacerlo para 2025.
Informar a los inversores sobre la inversión alternativa: el 45% se ve disuadido por una sobreabundancia de nuevos productos, y el 61% dice que asignaría más a las inversiones alternativas si las estrategias fueran más claras.
Adoptar la tecnología para mejorar los resultados de los clientes: el 61% de los inversores institucionales cree que los gestores activos pueden captar mejor las oportunidades del mercado aprovechando la inteligencia artificial y el big data.
Abogar por modelos de comisiones innovadores: el 68% quiere estructuras de comisiones que se ajusten al rendimiento.
A raíz de estas conclusiones, Andreas Utermann, consejero delegado de Allianz Global Investors, ha comentado que “este informe debe servir como una llamada de atención para aquellas partes de la industria de la gestión activa que aún no han comprendido cuán fundamentalmente está cambiando nuestro sector. En el desafiante entorno de mercado de hoy, la gestión activa es más relevante que nunca. De hecho, solo la gestión activa puede proporcionar el tipo de soluciones personalizadas y a medida necesarias para satisfacer muchos de los desafíos de los inversores identificados en nuestro informe sobre tecnología disruptiva, modelos de comisiones innovadores y criterios ASG. Pero los gestores de fondos deben mantener un enfoque láser en su aportación a los clientes para poder destacar y prosperar en un mercado atestado y consolidado».
Por su parte, Tobias Pross, director global de Distribución de Allianz Global Investors, ha destacado que “comprender y escuchar a los clientes es muy importante. En Allianz Global Investors, estamos totalmente involucrados con ellos, y ya hemos trabajado intensamente para mejorar nuestra propuesta de valor para asegurarnos de que seguimos cumpliendo con las cambiantes actitudes y objetivos de los inversores en torno a las tendencias identificadas en esta encuesta».
Según Pross, durante los últimos años, “hemos invertido en nuestra experiencia digital de cliente, hemos sido pioneros en los nuevos enfoques para integrar los factores ASG y hemos creado una de las mejores franquicias de inversión alternativa, además de haber innovado en modelos de comisiones para que las posibilidades de elección de los clientes aumenten. A medida que sigamos aumentando nuestra oferta, seguiremos centrándonos en establecer relaciones a largo plazo con los propietarios de activos y en asegurarnos de que nuestro negocio esté alineado con lo que esperan de nosotros como una gestora activa líder”.
El informe también recoge las respuestas de los inversores acerca de sus principales preocupaciones para 2019. El 80% afirmó que la volatilidad del mercado era lo que más les preocupaba, el 79% lo estaba por la política monetaria y el 75% por la inflación. Casi 9 de cada 10 (87%) de los encuestados dijeron que los inversores se han vuelto complacientes en la década posterior a la crisis financiera.