Continúa el ciclo de conferencias de XTB, en donde los expertos del sector divulgan sus conocimientos. La temática de la siguiente Masterclass será el trading algorítmico.
Rubén Martinez explicará cómo hacer trading algorítmico y aplicar sistemas con ventaja estadística positiva aun sin saber programar ni tener conocimientos informáticos avanzados.
La conferencia será el próximo jueves 27 de agosto, a las 7 pm. Será en directo desde la plataforma xStation y Youtube.
Entre los temas a tratar, cómo crear estrategias rentables sin programar, aplicar sistemas automatizados, utilizar un enfoque basado en datos y no en emociones, cómo aplicar trading cuantitativo y estrategias robustas de trading.
Foto cedidaImagen de la obra del artista Luis Guarín Molina y ganadora del concurso Art on Climate. Allianz Global Investors abre su museo virtual: Art On Climate
Allianz Global Investors abre su museo virtual Art On Climate. El museo recoge las obras presentadas en el concurso internacional de ilustración con el mismo nombre, organizado por la gestora. Además, tanto el museo como el concurso han sido diseñados para ayudar a crear conciencia sobre la importancia del cambio climático y la necesidad de encontrar soluciones que puedan contribuir a alcanzar un futuro más sostenible, según afirman desde Allianz GI.
El concurso Art On Climate fue convocado en 2019 por Allianz GI en España. En total, participaron 446 artistas de 69 países, incluyendo 155 de España, que contribuyeron con 920 obras originales. Una selección de las mejores, incluidas las del ganador y los finalistas, puede verse ahora en la galería online a través de este enlace. Cada obra va a acompañada de mensajes sobre las medidas que pueden implementarse para ayudar al medioambiente y colaborar en la lucha contra la emergencia climática. Además, en la galería web, los visitantes pueden hacer un test de 10 preguntas para poner a prueba sus conocimientos sobre el cambio climático.
Como gestora activa, Allianz GI busca “impulsar y facilitar el cambio hacia una economía baja en carbono, tanto a través de sus decisiones de inversión como de su comportamiento corporativo”, subrayan desde la firma. Por ello, el museo busca promover, mediante el arte, la reflexión en torno a la necesidad de luchar contra el cambio climático y de impulsar un modelo de desarrollo sostenible.
“En Allianz GI estamos comprometidos con ayudar a conseguir un crecimiento económico y social más sostenible a través de nuestras inversiones y nuestra actividad corporativa. Pero también estamos convencidos de que la concienciación social es clave en la lucha por la protección del medioambiente. Creemos en un futuro mejor para todos nosotros y en compartir la responsabilidad de hacerlo realidad”, añade Marisa Aguilar, directora general para España de Allianz GI.
En este sentido, Aguilar destaca que el “arte es una herramienta de comunicación muy poderosa en la concienciación sobre el cambio climático”.
Pixabay CC0 Public Domain. CFA Institute publica el documento de consulta sobre su nuevo estándar de divulgación ESG
CFA Institute, asociación global de profesionales de la inversión, ha anunciado la publicación del documento de consulta pública de su próxima propuesta de un Estándar de Divulgación Ambiental, Social y de Gobernanza (ESG, por sus siglas en inglés) en los productos de inversión. El informe recoge las aportaciones y opiniones de las partes interesadas sobre el estándar en referencia a su alcance, estructura y principios constituyentes. Además, CFA Institute busca colaboradores para apoyar la siguiente fase en el desarrollo del estándar.
“Establecer estándares globales en la industria de la inversión para asegurar la transparencia y salvaguardar la confianza es parte integral de nuestra misión. Ante el creciente interés que conlleva la inversión ESG, hemos encontrado un amplio apoyo entre la comunidad inversora global para desarrollar un estándar que disminuya la actual confusión y facilite una mejor alineación entre los objetivos de los inversores y la intencionalidad del producto”, explica Margaret Franklin, CFA, presidenta y CEO de CFA Institute. En este sentido, estos estándares se sumarán a otras normas de la entidad en materia ESG como los Global Investment Performance Standards (GIPS) y el Asset Manager CodeTM.
Por otro lado, desde CFA Institute aseguran que el estándar se enfocará, principalmente, en los requisitos de divulgación para productos de inversión con características ESG. De este modo, la entidad busca que los inversores puedan evaluar de manera más completa si un producto de inversión satisfará o no sus necesidades. “El estándar es claramente diferente de otras normas que buscan establecer requisitos de divulgación para emisores corporativos, prescribir requisitos para el etiquetado o calificación de valores o productos de inversión, o definir las mejores prácticas para una estrategia o enfoque en particular”, añade Chris Fidler, director senior de CFA Institute para Estándares Globales de la Industria.
El documento de consulta presentado ha sido elaborado con la ayuda de un grupo de trabajo internacional formado por 15 voluntarios con “gran experiencia tanto en asuntos ESG como en propiedad y gestión de activos, la consultoría y servicios”, subrayan desde CFA Institute.
Así, el documento define las características asociadas a la ESG como componentes o capacidades que poseen los productos de inversión y que son susceptibles de ser combinados para satisfacer las necesidades de los inversores. También propone las definiciones para seis características principales de esta inversión. “El objetivo es que sirvan como columna vertebral del estándar, y que funcionen como un mecanismo para conectar las necesidades de los inversores con los requisitos de divulgación”, explican desde la entidad.
Integración ESG: Considera explícitamente los factores asociados a la ESG cuya materialidad, a efectos del riesgo y el retorno de la inversión, junto con los tradicionales factores financieros, son tenidos en cuenta al tomar decisiones de inversión.
Exclusiones asociadas a la ESG: Excluye valores, emisores o empresas del producto de inversión en función de ciertas actividades, prácticas o segmentos comerciales relacionados con la ESG.
Best-in-Class: Tiene como objetivo invertir en empresas y emisores que se desempeñen mejor que sus pares en una o más métricas asociadas con temas ESG.
Enfoque temático asociado con ESG: Tiene como objetivo invertir en sectores, industrias o empresas que se espera se beneficien de las tendencias macro o estructurales asociadas con la ESG a largo plazo.
Objetivo de Impacto: Busca generar un impacto social o ambiental positivo y medible junto con un retorno financiero.
Voto por poderes, participación y custodia: utiliza los derechos y la posición de propiedad para influir en las actividades o comportamientos de los emisores o empresas.
“CFA Institute quiere ahora conocer las aportaciones de la comunidad inversora global para que ayuden a dar forma a un proyecto de norma, una versión inicial de los Estándares de Divulgación ESG para Productos de Inversión, que se espera esté lista para publicación en mayo de 2021”, declaran desde la entidad.
“Sabemos por experiencia que es vital tener diversas perspectivas en la formulación de estándares globales. Buscamos aportaciones de personas, grupos y organizaciones de todo el mundo en forma de cartas de comentarios, así como de personas que participen en comités de voluntarios”, añade Fidler.
El documento de consulta está compuesto por un formulario respuesta para proporcionar comentarios y estará disponible hasta el 19 de octubre de 2019. Además, la solicitud para las oportunidades de voluntariado se puede hasta el 23 de septiembre de 2020. Toda la información está disponible en el siguiente enlace.
Un año más, la publicación Forbes ha elaborado su lista anual de milmillonarios, en la que sólo ingresan aquellas personas cuyo patrimonio supera los mil millones de dólares. En un entorno dominado por la incertidumbre creada por la pandemia, las personas más ricas del mundo no han sido inmunes al coronavirus. A medida que el COVID-19 se afianzaba en Europa y Estados Unidos, las bolsas globales colapsaron y muchas fortunas vieron cómo su patrimonio disminuía considerablemente.
A 18 de marzo, cuando se finalizó la lista, Forbes contaba con 2.095 milmillonarios, 58 menos que hace un año y 226 menos que 12 días antes, cuando se realizó el cálculo inicial de los valores netos. De los milmillonarios que quedan, el 51% son más pobres que el año pasado.
En términos absolutos, los más ricos del mundo tienen un patrimonio de 8 billones de dólares, unos 700.000 millones menos que en 2019.
Por tercer año consecutivo, Jeff Bezos sigue siendo la persona más rica del mundo, a pesar de haber dado 36.000 millones de dólares en acciones de Amazon a su exesposa Mackenzie Scott como parte del acuerdo de su divorcio, que tuvo lugar el verano pasado. En la actualidad, Bezos tiene un patrimonio de 113.000 millones de dólares, impulsado por un incremento del 15% de las acciones de Amazon desde que se elaboró la lista de Forbes de 2019.
Amazon, el gigante del comercio electrónico, ha estado en el centro de atención durante la pandemia, por estar contratando más de 100.000 trabajadores a tiempo completo y parcial para ayudar a satisfacer la creciente demanda de los consumidores en línea que se tuvieron que recluir en sus hogares para evitar la propagación de la pandemia.
Con 98.000 millones de dólares, Bill Gates se mantiene como la segunda persona más rica del mundo gracias a la buena trayectoria de Microsoft. A continuación, con 76.000 millones de dólares, el magnate francés del conglomerado de artículos de lujo LVMH, Bernard Arnault, ocupa por primera vez el tercer lugar de la lista, desplazando a Warren Buffett, quien con 67.500 millones de dólares se queda en un cuarto puesto.
En la sexta posición, pero posicionado como el hombre más rico de Europa, con 55.100 millones de dólares, se encuentra Amancio Ortega. Pionero en el negocio del «fast fashion» y de la moda retail, creó en 1975 junto a su exmujer Rosalía Mera (fallecida en 2013) la empresa Inditex, conocida principalmente por su cadena de moda Zara.
Alice Walton, heredera de la fortuna de Walmart, es la mujer más rica: ocupa el puesto número 9 con 54.400 millones de dólares. En total, 241 mujeres componen la lista, incluidas siete que comparten una fortuna con su cónyuge, hermano o hijo.
Ricos en la industria financiera
Dentro de la industria financiera, Warren Buffett, conocido como el “Óraculo de Omaha”, es uno de los inversores más exitosos de todos los tiempos. Buffett dirige Berkshire Hathaway, empresa que posee más de 60 compañías, incluida la compañía aseguradora Geico, el fabricante de baterías Duracell y la cadena de restaurantes Dairy Queen.
El siguiente puesto en la industria lo ostenta Jim Simons, con la posición 36 en la lista y 21.600 millones de dólares de patrimonio. Simons es el fundador de Renaissance Technologies, una prestigiosa firma de hedge funds de trading cuantitativo que gestiona unos 68.000 millones de dólares. Simons fundó Renaissance Technologies en 1982 y se retiró en 2010, pero todavía tiene un cierto peso en la firma y se beneficia de sus fondos.
El bronce es para Joseph Safra, descendiente de una familia de banqueros de Siria que, con 19.900 millones de dólares, es el banquero más rico del mundo. En Brasil es dueño del Banco Safra, el octavo banco más grande del país, mientras que en Suiza es dueño del J. Safra Sarasin, un banco creado tras una fusión en 2013.
Otros grandes inversores conocidos de la industria de las inversiones y los hedge funds que aparecen en la lista son Ray Dalio (en el puesto 46, con 18.000 millones de dólares, propietario de la empresa Bridgewater Asociados, uno de los mayores hedge funds del mundo), Steve Cohen (fundador de la firma de hedge funds Point72 Asset Management) o Carl Icahn (empresario e inversor estadounidense, fundador y accionista mayoritario de Icahn Enterprises, holding de compañías con sede en la ciudad de Nueva York).
El mayor ganador
El mayor ganador en términos de dólares es Qin Yinglin, el criador de cerdos más rico del mundo. Ocupa el puesto número 43 y su patrimonio está valorado en 18.500 millones de dólares, un incremento de 14.200 millones de dólares con respecto al valor de su patrimonio en la lista de 2019, después de que las acciones de Muyuan Foods, empresa cotizada en la bolsa de Shenzhen, prácticamente se triplicaran con la gripe porcina africana que redujo la oferta de cerdos y elevó los precios.
En total, 267 personas que figuraron en la lista de 2019 se cayeron en la edición de 2020 debido a que sus negocios se tambalearon. Entre los descensos más notables se encuentra Adam Neuman, fundador de WeWork. Otras 21 personas murieron. Aun así, Forbes incorporó 178 recién llegados, provenientes de 20 países diferentes. Entre ellos cabe destacar la entrada del fundador y director ejecutivo de Zoom Video Communications, Eric Yuan, en el puesto 293 con 5.500 millones de dólares, cuyos servicios están en pleno auge en medio de una “nueva normalidad” en la que el teletrabajo y la educación a distancia se han impuesto.
Por países, Estados Unidos sigue siendo la nación con más milmillonarios, con 614, seguido de la gran región de China (incluidos Hong Kong y Macao), que cuenta con 456.
Para obtener más información, puede ver la lista de Forbes aquí.
El mercado y el entorno económico continúan siendo inciertos. Para el inversor, en estos momentos tiene sentido centrarse en empresas de calidad que tengan modelos de negocio duraderos y que puedan proporcionar rendimientos resilientes, incluso con unas condiciones de mercado cambiantes.
En esa línea de opinión, en Ninety One, gestora internacional de origen sudafricano anteriormente conocida como Investec AM, se centran en las empresas que están generando unos niveles altos de flujo de caja libre para impulsar su crecimiento, que cuentan consistentemente con una alta lealtad por parte del consumidor y con una sólida imagen de marca, y que muestran fortaleza financiera con unos balances sanos con un bajo nivel de apalancamiento. En concreto, su estrategia Global Franchise, gestionada por Clyde Rossouw, pone el foco en acciones de alta calidad que están, por lo general, asociadas a marcas globales o franquicias.
Asimismo, en Ninety One tratan de evitar empresas que sean intensivas en capital o que tengan un alto nivel de deuda. Por ello, entre sus posiciones, descartan bancos, empresas de servicios públicos, o compañías de recursos.
¿Qué es una empresa de calidad?
Las empresas de calidad, tal y como las define Ninety One, tienen cinco atributos:
Presentan unas ventajas competitivas duraderas y difíciles de replicar.
Una posición dominante en el mercado en industrias de crecimiento estable.
Una baja sensibilidad al ciclo económico y del mercado.
Un balance contable saneado y una baja intensidad de capital.
Una generación sostenible de flujos de caja y una asignación efectiva del capital.
Global Franchise: asignación geográfica y por sectores
A cierre de junio, la estrategia Global Franchise tenía un claro sesgo hacia Estados Unidos, con un posicionamiento del 59,8% de los activos en este país, como consecuencia directa del fuerte sesgo de la cartera hacia acciones tecnológicas, con un 38,0% de los activos invertidos en tecnología de la información.
Global Franchise: buscando una mayor certeza en tiempos de incertidumbre
Liderando las 10 principales posiciones de la estrategia Global Franchise, se encuentra VISA, la empresa que opera el mayor sistema mundial de pagos de electrónicos, gestionando más de 3.300 millones de dólares en transacciones por tarjetas de crédito y otras tarjetas de pago que están en circulación en más de 200 países. Le sigue Microsoft, empresa líder en tecnología con productos que incluye desde el sistema operativo de Windows a aplicaciones de productividad para oficinas, pasando por los servicios de computación en la nube ofrecidos por Azure. En tercer lugar, Moody´s es una agencia líder en emisión de calificaciones crediticias, research, gestión del riesgo crediticio y otros servicios a través de sus principales dos segmentos de negocio, Moody’s Investors Service (MIS) y Moody’s Analytics.
Pixabay CC0 Public Domain. El COVID-19: un catalizador para el cambio y la innovación
La pandemia del COVID-19 ya forma parte de la historia del siglo XXI. Por eso, Pieter Busscher, gestor senior en RobecoSAM, firma especializada en inversión sostenible, propone una mirada positiva y analizar qué ha aportado este choque a la sociedad. En este sentido, defiende que el coronavirus se ha convertido en un catalizador para el cambio y la innovación.
“Aunque el COVID-19 ha generado problemas a corto plazo para muchos sectores, a largo plazo, estas complicaciones y tensiones derivadas de las perturbaciones en las cadenas de suministro y las medidas de confinamiento impulsarán un aumento del interés y la inversión en tecnologías innovadoras que permitan prosperar a la sociedad”, argumenta.
Para Busscher, aunque la pandemia del coronavirus interrumpió temporalmente las operaciones comerciales y el crecimiento del PIB, no ha detenido ni puede detener la necesidad de que se realicen avances tecnológicos que permitan generar mejores resultados con menos recursos. “Los factores estructurales que impulsan y fomentan la adopción de tecnologías transformadoras en las cadenas de suministro industriales continúan muy presentes y se están intensificando de manera constante”, añade.
A pesar de los reveses a corto plazo, tanto a medio como a largo plazo, según su valoración, estos factores darán lugar a importantes oportunidades de inversión y crecimiento para las industrias y en temas como la automatización y el despliegue de la robótica, la electrificación de la movilidad, la logística y el transporte, los edificios con eficiencia energética y los modelos de negocio circulares. En la UE, estos factores se verán fuertemente impulsados por los planes de recuperación económica recientemente anunciados, en los que el estímulo presupuestario se centra en aspectos que promueven la transición de la UE hacia una economía con bajas emisiones de carbono.
Principales temáticas
Según Busscher, las semanas de inactividad de las plantas y las perturbaciones en las cadenas de suministro acentuaron aún más las deficiencias operativas de la industria manufacturera y su necesidad vital de adaptarse a unas condiciones de negocio en rápida transformación —condiciones que ya estaban viéndose distorsionadas por la disputa comercial entre Estados Unidos y China, todavía latente—. “La conjunción de estas grandes fuerzas está acelerando la transición hacia las tecnologías inteligentes y la reinvención de los procesos de producción”, matiza.
En segundo lugar, destaca que esta pandemia ha puesto de manifiesto que a medida que el sector industrial vaya integrando las tecnologías big data y la nube, cabe esperar que se obtenga una mayor eficiencia en la producción a gran escala. “La pandemia del Covid-19 también ha proporcionado un campo de pruebas en tiempo real para mostrar las posibilidades que ofrecen otros tipos de tecnologías de fabricación”, afirma.
El gestor senior identifica dos temáticas más: la sostenibilidad medioambiental y las tecnologías limpias. “La propagación del COVID-19 ha sacudido las economías y nos ha abierto los ojos a los riesgos asociados a las enfermedades infecciosas, sobre todo en los centros de trabajo. La incorporación de funciones electrónicas más sofisticadas en el interior de los edificios solo aumentará el consumo de energía y las huellas de carbono del “entorno construido”, que ya representa más del 36% del consumo de energía y casi el 40% de las emisiones de GEI. Asimismo, la creciente popularidad de los principios económicos circulares implica que el sector de la construcción debe hacer mayor hincapié en minimizar los residuos y reducir la contaminación en relación con las materias primas empleadas en la construcción”, explica.
La pandemia del coronavirus y las medidas de confinamiento asociadas han dado lugar a una serie de retos disruptivos sin precedentes, en términos de escala y urgencia. “La respuesta inicial al COVID-19 ha dejado patente la capacidad y agilidad de muchas industrias para adaptarse a circunstancias muy exigentes. Sin embargo, el periodo posterior al COVID seguirá estando caracterizado por unos niveles de presión regulatoria y competitiva también sin precedentes, que requerirán soluciones igualmente novedosas, centradas en la eficiencia de los costes y los recursos”, concluye Busscher.
CC-BY-SA-2.0, FlickrFoto: Ingrid S Abarco. Foto: Ingrid S Abarco
Deutsche Bank acaba de publicar su nuevo compromiso climático, “Climate Statement”, en donde ofrece un resumen transparente y claro de las actividades relacionadas con el clima de todas las divisiones del banco.
«Jugamos un papel crucial en la protección del clima», dice Christian Sewing, consejero delegado de Deutsche Bank. «Somos la puerta de entrada al mercado de capitales. Tenemos los medios para financiar inversiones sostenibles y para recaudar el capital de inversión necesario. Estamos motivados por una convicción muy fuerte de ayudar a dar forma al cambio mundial hacia una economía sostenible, climáticamente neutra y social, y de apoyar a nuestros clientes en su transformación».
Deutsche Bank considera que el cambio climático es el principal desafío de los próximos años. El banco ha hecho repetidos compromisos públicos con los objetivos del Acuerdo de París sobre el clima, por ejemplo, firmando el Compromiso de Acción de París de 2016 y, más recientemente, el compromiso climático del sector financiero alemán. Esta declaración sobre el clima subraya nuevamente este compromiso de la entidad.
La declaración resume la posición del banco sobre la protección del clima y su paquete de medidas para luchar contra el cambio climático, desde la financiación sostenible hasta su propia huella climática y el compromiso de sus empleados. Christian Sewing, al igual que los altos directivos del banco, han mostrado su compromiso con esta estrategia.
La liquidez es uno de ellos, en un contexto de crisis en el que las carteras han tenido que hacer frente a reembolsos, y podrían tener que hacerlo más aún en el futuro. Según los datos, la liquidez de las carteras de los fondos de inversión es, en términos generales, «satisfactoria».
Pero el riesgo de liquidez no es el único que afrontan los fondos. El informe también analiza otros riesgos asociados a los fondos como el riesgo de crédito, el de transformación de vencimientos o el de apalancamiento.
La CNMV explica que los riesgos asociados a los fondos de inversión españoles no son demasiado elevados, a excepción del riesgo de crédito, ya que, por la propia naturaleza de los fondos, muestran un porcentaje alto de activos crediticiosen sus carteras. De hecho, los fondos monetarios seguían siendo los que mantenían un porcentaje mayor de activos crediticios, cerca del 100%, seguidos de los fondos de renta fija, con un 96% de activos crediticios en su cartera. En ambos tipos de fondos, estos porcentajes se han mantenido muy estables a lo largo de los últimos años.
En los fondos mixtos, por su parte, ese porcentaje era mucho más reducido (por debajo del 50%) y, además, ha disminuido durante los últimos años (en 2011-2012 estaba alrededor del 75%), seguramente por la mayor proporción de acciones y de inversiones en otras IICs en la cartera de los fondos.
En relación con el riesgo de transformación de vencimientos, es decir, la capacidad o no de la entidad de satisfacer sus obligaciones a corto plazo, el estudio concluye que tan solo los fondos de renta fija tienen un nivel de riesgo moderado, con una proporción de activos a largo plazo del 42%, por debajo del porcentaje del año anterior.
En el resto de vocaciones el riesgo es bajo: en el caso de los fondos mixtos, la proporción de activos a largo plazo se consolidaba por debajo del 30% y en los fondos monetarios, con importantes restricciones a la inversión a largo plazo, el riesgo de transformación de vencimientos era prácticamente nulo.
Apalancamiento: riesgos reducidos
Con respecto al apalancamiento de las IICs, en la legislación española se establece que las IICs mobiliarias (a excepción de las de inversión libre) únicamente pueden endeudarse de forma transitoria y por algún motivo específico, y nunca superar el 10% de su patrimonio. En España, ninguna categoría superaba el 2% en 2019ni lo había hecho al menos desde 2009. Adicionalmente, a nivel individual, ningún fondo superaba al cierre de 2019 el 10%.
Sin embargo, estas instituciones pueden apalancarse mediante el uso de derivados, una parcela de análisis que está en desarrollo y en la que se van a emplear los indicadores propuestos recientemente por la Organización Mundial de Comisiones de Valores (IOSCO) para hacer un seguimiento del apalancamiento de estas instituciones a escala internacional, explica la CNMV.
“La información disponible sobre el uso de derivados por parte de las IICs españolas no apunta a la existencia de vulnerabilidades relevantes en ninguno de los posibles riesgos que puede generar dicha operativa (de contraparte, de mercado y de contagio). Se estima que a mediados de 2019 la exposición al riesgo de mercado evaluado para las IICs que pertenecen a la IFNB y sujetas a la normativa UCITS que realizan sus cálculos a través de la metodología del compromiso(99% del total) suponía el 26,6% de su patrimonio, porcentaje que se encuentra muy por debajo del máximo permitido por la legislación vigente (100% del patrimonio)”, explica el estudio.
En términos individuales, la exposición al riesgo de mercado era inferior al 40% en más del 90% de los fondos de renta fija y del 60% de los fondos mixtos (en términos patrimoniales), mientras que únicamente un 1,6% y un 6% de ellos experimentaban unos valores relativamente elevados de exposición a este riesgo, de entre el 80% y el 100% del patrimonio.
Por su parte, en los fondos denominados cuasi-UCITS, el nivel de exposición se situaba por debajo del 70%. Finalmente, por lo que respecta a las IICs de inversión libre (incluidas en la categoría de IICs alternativas, con una regulación más flexible), la evidencia empírica también respalda que el nivel de apalancamiento es, en general, moderado y tan solo algunos fondos aislados realizan un uso más intensivo de este.
No se materializa el riesgo de contraparte
“El riesgo de contraparte, es decir, el riesgo de que las dificultades financieras de una entidad se transmitan a sus contrapartes o prestamistas y que se amplifica con un elevado uso del apalancamiento, no se ha materializado en los fondos de inversión españoles”, añade el informe. Así, la exposición a este riesgo, que en el caso de estos vehículos se origina en las operaciones de derivados contratadas en mercados no organizados (OTC) a través de las operaciones pendientes de liquidar, se encuentra en niveles muy reducidos y alejados de los importes que podrían considerarse potencialmente sistémicos.
A modo de ejemplo, al cierre de 2018 los saldos deudores de las IICs sujetas a la normativa UCITS por operaciones con derivados OTC representaban el 0,27% del patrimonio total. En sentido contrario, las contrapartidas de las operaciones OTC realizadas por parte de los fondos de inversión estaban expuestas a un riesgo de contraparte equivalente al 0,13% del patrimonio total de dichos fondos. En el caso de las IICs de inversión libre estas cifras eran del 1,09% y del 0,82%, respectivamente.
Pixabay CC0 Public Domain. Las empresas españolas no terminan de aplicar sus políticas de reducción de emisiones
El 91% de las empresas españolas cuenta con una política de reducción de emisiones, frente al 80% de hace cinco años. Sin embargo, sólo el 37% de las compañías tiene objetivos claros en materia de emisiones, lo que significa que muchas de éstas están estableciendo políticas sin finalidades específicas para respaldarlos, apunta el estudio de Refinitiv sobre ESG: “Inversión Socialmente Responsable”.
En este sentido, los datos del informe muestran el avance de las compañías españolas en materia de reducción de emisiones si se comparan con la media europea, donde un 81% de las empresas cuentan con política de reducción de emisiones y un 35% tiene objetivos claros para llevarlas a cabo, según Refinitiv.
El informe, que analiza lo que las industrias, países y empresas están haciendo para reducir su impacto negativo en el medio ambiente, ha incluido a 45 grandes empresas españolas de diferentes sectores como el bancario, hotelero, tecnológico y energético, entre otros.
El análisis de Refinitiv ha utilizado su base de datos de factores medioambientales, de sostenibilidad y buena gobernanza (ESG) para establecer qué empresas se están posicionando en la transición hacia economías con emisiones cada vez más bajas en carbono. En este sentido, destaca que el 91% de las empresas españolas tiene iniciativas de reducción de residuos, lo que supone un aumento del 3% en cinco años.
Cinco pilares
Según Refinitv, hay cinco pilares clave que determinan la viabilidad y sostenibilidad a largo plazo de un negocio: propósito, personas, prácticas, desempeño y socios. Asimismo, desde la compañía advierten de que no adaptar el propósito comercial a estas tendencias afectará gravemente al crecimiento empresarial a largo plazo.
En España, las empresas encuestadas producen 86.691 toneladas de residuos de media por cada millón de dólares generados y tienen un ratio de reciclaje del 55%. En cuanto a la cadena de suministro en España, el 84% de las empresas establece políticas medioambientales para sus proveedores. Respecto la gestión del agua, el 68% de las empresas tiene una política de eficiencia del agua, aunque sólo el 25% de éstas cuenta con objetivos en esta materia, subraya el informe.
“Las empresas ya no pueden darse el lujo de ignorar las consideraciones ambientales y sociales, o no informarse sobre ellas. El impacto que tiene una organización en la sociedad que lo rodea, la mayor demanda de transparencia de los clientes a los inversores o empleados, el ferviente ritmo de la innovación tecnológica y la transición a una economía baja en carbono son las mega tendencias que existen ahora”, afirman Luke Manning, director de sostenibilidad e iniciativas estratégicas, y André Chanavat, director de gestión de producto en Refinitiv.
Pixabay CC0 Public Domain. La contratación de espacios de oficinas en Madrid alcanza los 170.570 metros cuadrados en el primer semestre
Los efectos de la pandemia del coronavirus empiezan a revelarse en el sector del real estate, y en concreto, en el sector de oficinas en ciudades afectadas como Madrid. Así, los niveles de contratación de oficinas en la capital se han resentido durante el segundo trimestre del año con un total de 68.090 metros cuadrados, un 53% menos que durante el mismo periodo del año anterior.
En total, se ha registrado un volumen total de 170.570 metros cuadrados en 2020, frente a los 342.200 metros cuadrados del primer semestre del año anterior. Según los datos del último informe de BNP Paribas Real Estate, el número de operaciones firmadas en el segundo trimestre del año ha sido de 59, frente a las 72 de 2019.
En cuanto a superficie media contratada, la cifra se mantiene por debajo de los 1.425 metros cuadrados del primer trimestre, pero, con una media de 1.151 metros cuadrados, aún supera los los 952 metros cuadrados del último trimestre de 2019. Las firmas más destacadas han sido la operación de 10.633 metros cuadrados en la Plaza de Santa Bárbara y la contratación de 9.104 metros cuadrados en Paseo de la Castellana 83-85, en Azca.
En torno al 42% de la contratación del segundo trimestre del año ha coincido con los peores meses de la pandemia. Según el último informe de BNP Paribas Real Estate, la zona centro ha congregado el 31,4% de la superficie total, mientras que la zona descentralizada y la periferia lo han hecho un 11,7% y un 14,7% respectivamente.
La renta media de la ciudad de Madrid se ha estabilizado y se sitúa en los 18,9 euros por metro cuadrado al mes, superando en un 4% a la del año anterior. Por zonas, el distrito financiero y centro han mostrado una evolución impar, creciendo el primero hasta los 29,9 euros por metro cuadrado al mes y en el centro las rentas han disminuido ligeramente hasta los 20,1 euros por metro cuadrado al mes. Fuera de la M-30, tanto la zona descentralizada como la periferia han visto incrementadas sus rentas medias alcanzando los 14,7 euros por metro cuadrado al mes y 11,0 euros por metro cuadrado al mes, respectivamente. La renta prime de Madrid se mantiene en los 36,25 euros por metro cuadrado al mes.
Por otro lado, la disponibilidad en la ciudad se mantiene en niveles del 8,2%, creciendo 9 puntos básicos respecto al primer trimestre de 2020. Según el informe, la llegada del COVID-19 ha supuesto la implementación del teletrabajo, y la incertidumbre respecto a la vuelta a las oficinas ha provocado que muchas empresas opten por posponer sus decisiones.
Dentro de la M-30, en las zonas del distrito financiero y centro, la tasa de desocupación se ha situado en 2,46% y 3,63% respectivamente, con una disponibilidad prácticamente residual en estas zonas en las que los niveles de absorción son muy elevados. Fuera de la M-30, la desocupación ronda en 11,47% en la zona descentralizada, por los 13,06% de la periferia.
Teniendo en cuenta la situación actual de incertidumbre económica y laboral, desde BNP Paribas Real Estate prevén un descenso en la contratación en el entorno del 40%-50%, respecto a niveles de 2019, por lo que la superficie contratada a finales de año se situaría en 350.000 metros cuadrados.