Hemos entrado en la segunda mitad del año y las incertidumbres acerca del rumbo que seguirán la renta variable y los bonos son muy elevadas. Actualmente, muchas incertidumbres se basan en el ruido político y geopolítico: barreras comerciales, aranceles y represalias; un gobierno populista en Italia, y por último pero no menos importante, la inmigración ilegal acapara titulares.
Sin embargo, pensamos que es importante ver a través del ruido y centrarse en los fundamentales. No debemos dejarnos llevar por los tweets y titulares que captan nuestra atención. Actualmente, desde una perspectiva de asignación de activos, los fundamentales son claves. China, EE.UU. y Europa representan de forma conjunta el 60% de la economía. Por tanto, es importante tener una fotografía clara de los fundamentales de estas tres regiones.
En EE.UU, la economía se beneficia de políticas fiscales, gasto en infraestructuras, y una carga regulatoria reducida. Esto, junto con un mercado laboral muy sólido, debería continuar apoyando a la economía en 2019. Como resultado, la inflación continuará aumentando y las rentabilidades subirán. Al mismo tiempo, el presidente de EEUU, Trump, continuará molestando a los mercados con tweets, titulares e insultos.
El resultado será más volatilidad en los mercados, especialmente en China, pero cada vez más en Europa. En Europa, la situación es diferente. Aquí la economía ya lleva desacelerándose un tiempo. Al mismo tiempo, el ruido político se está incrementando. Estamos especialmente preocupados por la situación en Italia y pensamos que esto emporará antes de mejorar.
En realidad, la situación en China no ha cambiado de forma drástica. La economía está en una fase de transición y esto significa un menor crecimiento a lo largo del tiempo. El gobierno y el banco central han demostrado en el pasado que están comprometidos para apoyar la economía y estabilizar el sistema financiero, cómo y cuándo se necesite. Han demostrado su compromiso y continuarán haciéndolo. Esto significa que la economía seguirá desacelerándose pero de forma gradual y con un ritmo estable y previsible.
¿Qué significa esto para nuestro posicionamiento actual?
Todavía nos gusta la renta variable. Sin embargo, hemos cambiado nuestro foco hacia los mercados de EE.UU. y China y reducido nuestra posición en Europa. En el segmento de bonos, nos centramos en los bonos corporativos de alta calidad y hemos reducido nuestra posición en bonos high yield. En lo que respecta a la duración, creemos que los tipos de interés en EEUU aumentarán en función del incremento de la inflación y la fortaleza de la economía.
Por otro lado, en Europa, creemos que los tipos de interés se mantendrán bajos durante un tiempo. Además, hemos construido una posición que se beneficiará de las rentabilidades al alza en Italia debido a las incertidumbres políticas.
Con fines de diversificar, continuamos teniendo una pequeña posición en oro.
Actualmente, algunas de estas posiciones no han generado rentabilidades muy fuertes recientemente: la renta variable china, el oro, los bonos corporativos en general, y en especial los bonos high yield, atravesaron un periodo difícil y no generaron buenos rendimientos.
Sin embargo, como se ha dicho anteriormente, es importante ver a través del ruido político y centrarse en los fundamentales. Continuaremos vigilando muy de cerca y analizando la información futura de forma rigurosa.
Creemos firmemente que una vez que el polvo se asiente, los fundamentales recuperarán el control y estamos convencidos de que entonces nuestro posicionamiento demostrará su fortaleza y generará rendimientos muy decentes para la segunda mitad del año.
Thomas Herbert es head portfolio manager de Ethenea Independent Investor.
Capital Strategies es distribuidor de Ethenea en España y Portugal.