China dio muchas sorpresas en la primera mitad del año, decepcionando una vez más a los expertos que predijeron un aterrizaje duro para su economía. Los datos macroeconómicos publicados durante el verano son consistentes con una economía sana, impulsada por el impresionante crecimiento de los salarios y el gasto de los consumidores, y respaldada por un fuerte crecimiento de los beneficios empresariales. ¿Qué le espera al gigante asiático en lo que resta de 2017?
Renminbi y reserva de divisas
En lo que respecta a su mercado de divisas, a principios de 2016 hubo muchas predicciones que apuntaban a que China agotaría sus reservas de divisas y su moneda se devaluaría fuertemente frente al dólar. Pero no sucedió nada de eso y este año las reservas de divisas han aumentado y el renminbi (RMB) se ha fortalecido.
Por eso, en lo que resta de año, merece la pena estar atentos a la salida de capitales, que podría acelerarse en los próximos meses debido al turismo chino en el extranjero y las matriculas de estudiantes chinos en universidades fuera del país. A pesar de ese flujo, las reservas de divisas seguirán estando por muy encima de lo que China necesita realmente.
Desde Matthews Asia, esperamos que el dólar se mantenga bastante suave, por lo que el renminbi debería seguir fortaleciéndose. Sin embargo, Pekín continuará con sus esfuerzos para limitar el alcance de esa apreciación frente al dólar.
Creciente consumo
El fuerte crecimiento de los salarios, la baja deuda de las familias, la leve inflación y el optimismo de los consumidores dieron como resultado un crecimiento real de las ventas minoristas (ajustado a la inflación) del 9,3% en el primer semestre de este año. Esto se compara con el crecimiento real de las ventas al por menor de los Estados Unidos, que fue del 2,3% durante los primeros cinco meses del año.
El ingreso per cápita de los hogares en la ciudad subió un 6,5% en el primer semestre de 2011, frente al 5,8% de la primera mitad de 2016, impulsado por la mejora de la rentabilidad de las empresas industriales.
El reequilibrio de la economía china continuó y el consumo representó el 63,4% del PIB en el primer semestre de 2017, frente al 44,7% del mismo período de 2010.
De cara al último tramo del año, la historia del consumo debe seguir siendo saludable en los próximos trimestres, y ser una parte cada vez importante del crecimiento económico de China en los próximos años.
Un mercado inmobiliario saludable
Las ventas de viviendas nuevas aumentaron un 13,5% interanual durante el primer semestre de este año. Esto es aún más impresionante si tenemos en cuenta que muchas ciudades han puesto restricciones de compra para enfriar el mercado. Estas ventas implican mucho dinero en efectivo: el pago inicial mínimo es del 20% del precio de compra, y la mayoría de los bancos requieren un 30%.
En el último trimestre del año, la tasa de crecimiento de las ventas de viviendas nuevas debería continuar enfriándose como resultado de la política de ajuste y el efecto base. Esperamos que las ventas de todo el año aumenten sólo un poco en cifras interanuales, pero incluso si las ventas caen, digamos, un 10% (una probabilidad baja), eso todavía significaría que las familias chinas este año comprarían cerca de 11 millones de nuevas viviendas, con mucho dinero en efectivo.
Andy Rothman es estratega de inversiones de Matthews Asia.