La reunión de este mes de la elite gobernante de China volvió a confirmar varias tendencias que son importantes para los inversores globales. Xi Jinping es el líder chino más fuerte desde Deng Xiaoping, pero no es un dictador. No habrá cambios significativos en la política económica, lo confirma el hecho de que Xi haya enfatizando la calidad sobre la cantidad.
Además, veremos un progreso gradual hacia una economía emprendedora más impulsada por el mercado y la caída del riesgo del sector financiero. Xi jugará un papel más visible en el escenario global, aprovechando la oportunidad de dar una paso adelante ahora que Washington retrocede, incluido el tema del cambio climático.
El XIX Congreso del Partido Comunista de China, un evento que se produce cada 5 años, finalizó la semana pasado, proporcionando una hoja de ruta para la política económica durante el segundo mandato de Xi Jinping como jefe del Partido. Estas son las claves de la política, la economía y las relaciones internacionales.
Política: Xi es un líder fuerte pero no un dictador
Xi Jinping ha consolidado claramente su poder político en los últimos años. Es importante reconocer que, además de mejorar su poder como líder, ha estado trabajando para fortalecer al Partido y su control sobre la infraestructura económica y política de China. Único entre los regímenes autoritarios de un solo partido, desde 1989 ha habido tres transferencias de poder pacíficas y eficientes entre los líderes, ninguno de los cuales pertenecía a la misma familia.
El partido rompió con el precedente reciente y no designó al sucesor de Xi. Una posibilidad es que Xi tenga como objetivo ignorar las reglas de jubilación y mantenerse por un tercer término. También es posible que Xi se retire en cinco años, pero no quiere ser un líder débil, con su sucesor vigilando por encima de su hombro durante todo ese tiempo. Hay que recordar que el proceso político chino es de los más opacos del mundo.
Economía: Enfoque en la calidad sobre la cantidad
Una de la conclusiones más importantes del Congreso fue la decisión de cambiar (por primera vez desde 1981) la declaración de la misión del Partido, o en la jerga del Partido, la «principal contradicción que enfrenta la sociedad china».
Durante el Congreso, Xi explicó por qué la declaración de la misión del partido ha tenido que ser revisada para centrarse en la calidad del crecimiento, en lugar de solo en la velocidad y la cantidad de producción. «La principal contradicción a la que enfrenta la sociedad china ha cambiado. A lo que nos enfrentamos ahora es la contradicción entre un crecimiento desequilibrado e inadecuado y las necesidades cada vez mayores de la gente de tener una vida mejor. No solo han crecido sus necesidades materiales y culturales; sus demandas de democracia, estado de derecho, equidad y justicia, seguridad y un mejor medioambiente están aumentando».
En nuestra opinión, cuando Xi se refirió a la economía en transición desde “una fase de rápido crecimiento a una etapa de desarrollo de alta calidad», creemos que señalaba que continuará poniendo en marchas reformas en el lado de la oferta, reduciendo principalmente la sobrecapacidad y los niveles de deuda entre las empresas de propiedad estatal (SOEs) en la industria pesada. En el número anterior de Sinology, advertimos que se han logrado algunos avances en esa área, con reducciones significativas en el número de trabajadores del acero y del carbón, y la estabilización de los niveles de deuda de las empresas estatales.
También creemos que es significativo que Liu He, el principal asesor económico de Xi, y un firme defensor de las reformas basadas en el mercado, haya sido ascendido y forme parte ahora de los altos cargos del Partido. Además, aunque cinco jefes de las principales empresas estatales estuvieron en el liderazgo del partido durante el último Congreso, no hay representantes de las empresas estatales en la alineación política actual. Esta es la primera vez, en al menos 15 años, que las empresas estatales no tienen un representante en el Comité Central.
En general, esperamos pocos cambios significativos en la política económica en los próximos trimestres.
Política exterior: buscando un papel más grande en el escenario mundial
Xi dejó en claro que tiene la intención de desempeñar un papel más importante en el escenario mundial en los próximos años. Dijo que el éxito económico de China proporciona un modelo alternativo para los países en desarrollo, y que compartir esta experiencia con otras naciones es parte del ‘gran rejuvenecimiento de China’.
El plan de Xi es algo oportunista: espera dar un paso adelante en los ámbitos internacionales donde Washington se está retirando de la arena global. Por ejemplo, Xi prometió que China continuará adoptando la globalización y el comercio, y también expresó su deseo de liderar los esfuerzos internacionales para responder al cambio climático.
Pero no anticipamos que Xi se vuelva más antagónico con sus vecinos regionales o con Estados Unidos, tras reconocer que sus recientes movimientos, de corte más agresivo, han sido contraproducentes. Por ejemplo, para gestionar el problema de Corea del Norte, es probable que Xi continúe cooperando con Washington, en gran parte porque valora una relación positiva con el presidente Trump. Tendremos una mejor perspectiva sobre las relaciones entre EE.UU. y China después de la visita de Trump a principios de noviembre a Pekín.
Andy Rothman es Investment Strategist en Matthews Asia.