Los activos en administración de la Afore más chica y más grande en México están entre los 2.000 y los 32.000 millones de dólares. Este es el caso de Afore Azteca y Afore XXI-Banorte respectivamente. Manejar estos portafolios, con la turbulencia de los mercados financieros, no es sencillo y obliga a tener una visión en el horizonte y tomar decisiones con la cabeza fría ya que las fluctuaciones pueden actuar a favor o en contra del portafolio.
En el primer semestre del año se observó una alta volatilidad en los mercados financieros y todo apunta a que el segundo semestre prevalecerá. En los mercados internacionales el índice S&P tuvo una variación del 16% en dólares entre su nivel más bajo y mas alto y obtuvo una ganancia del 4% en dólares, mientras que el QQQ (ETF de acciones tecnológicas) tuvo una variación del 15% en dólares y tuvo un rendimiento negativo del 2%.
En México, la bolsa mexicana de valores se movió 15% en pesos y tuvo una ganancia en el periodo del 7%, mientras que el tipo de cambio peso dólar tuvo una fluctuación entre su nivel mas bajo y mas alto del 12% y aumentó 7% en el primer semestre de 2016. En el caso de las tasas de interés, las tasas de largo plazo se movieron hasta 60 puntos base entre su nivel más alto y más bajo de tal suerte que el bono gubernamental que vence en 22 años (2038), tuvo una variación en su precio del 6%.
Estas fuertes fluctuaciones algunos inversionistas de largo plazo, han podido aprovechar la coyuntura y otros no.
Las Afores tienen el 74% en valores de deuda en moneda local (54% en deuda gubernamental y 20% en corporativos); el 19% en renta variable (7% en nacional y 12% en extranjera) y el 7% en otros (4% en CKDs, 2% en Fibras y 1% en deuda internacional).
La volatilidad observada se reflejó en los resultados de las Siefores que para el primer semestre de 2016 tuvieron un rendimiento promedio directo en pesos del 3,52% a nivel agregado donde los resultados del pasado mes de junio explicaron una tercera parte de los rendimientos (1,23%).
Al revisar los rendimientos acumulados al primer semestre de las Siefores se puede ver lo contrastantes que han sido los resultados.
La Siefore básica 2 (sb2) que es la que tiene la mayor cantidad de activos en administración al concentrar el 36% (50.000 millones de dólares), tiene a los trabajadores en el rango de edades entre 46 y 59 años y tiene al cierre de mayo 17% en renta variable; sus rendimientos estuvieron entre el 2,07% que pagó la Siefore de SURA y el 5,34% de rendimiento directo en seis meses en pesos de Afore Coppel. El rendimiento promedio fue de 3,52%.
En el caso de la sb3 que es la segunda Siefore mas grande al tener el 32% de los activos (45.000 millones de dólares), edades entre los 37 y los 45 años y tiene el 20% en renta variable, los rendimientos directos a seis meses en pesos estuvieron entre el 1,76% de Afore SURA y el 5,46% de Afore Coppel. El rendimiento promedio de la sb3 fue de 3,55%.
Para la sb4 que tiene el 28% de los activos en administración (39.800 millones de dólares), las edades son menores a los 36 años y tiene el 26% en renta variable, los rangos fluctuaron entre el 0,82% de SURA y el 5,46% de Coppel. La mayor presencia de renta variable en esta Siefore originó los rendimientos con mayor variación entre su nivel más alto y más bajo. El rendimiento promedio fue de 3,40%.
En cuanto a la sb1 que tiene solo el 4% de los activos en administración (6.300 millones), tiene a los trabajadores con edades superiores a los 60 años (donde hay que recordar que la jubilación se hace a los 65 años) y tienen en renta variable el 4%; los rangos fluctuaron entre el 3,16% de Banamex y el 4,60% de Coppel. El rendimiento promedio de esta Siefore fue de 3,79%.
Es interesante observar que a las tres Afores más grandes que son XXI-Banorte (23% de los activos), Banamex (18%) y Sura (15%) están en los últimos lugares de rendimientos en sb2, sb3 y sb4, mientras que algunas de las Afores chicas y medianas destacan en sus rendimientos al ubicarse en los primeros lugares como es el caso de Coppel (5%), Azteca (2%) y Principal (6%).
Lo contrastante de estos rendimientos en el primer semestre es que en los rendimientos de largo plazo que presenta la CONSAR a 3, 5, 7 y 7 años para la sb1, sb2, sb3 y sb4 respectivamente, las Afores que hoy están en los primeros lugares en seis meses, no son las que están en los primeros lugares en el largo plazo y viceversa. SURA por ejemplo que aparece en los últimos lugares en el primer semestre está entre los dos primeros lugares en los rendimientos de largo plazo en las 4 Siefores y en contraparte COPPEL que figura en los primeros lugares en los rendimientos del primer semestre esta en los lugares 8 y 10 de largo plazo en sus 4 siefores.
Oportunidades como estas que dan los mercados son pocas para cambiar las tablas de posiciones de largo plazo, donde lo importante es saber cuándo acercarse al competidor o mantener una estrategia diferente a los lideres.
Columna de Arturo Hanono