La gestión de colaterales se está convirtiendo en una iniciativa estratégica para las empresas de inversión. Anteriormente, era exclusivamente una obligación de gestión de riesgos y cumplimiento normativo; ahora se ve también como una oportunidad para gestionar la liquidez, evitar el malgasto de colateral y obtener rentabilidad con la transformación del colateral.
Hasta ahora, en España, la gestión de colateral no ha sido realmente foco de mucho interés e inversión, pero es probable que con las “Uncleared Derviatives – Initial Margin Rules” que van a afectar cada vez más a inversores institucionales en 2019 y 2020, esto vaya a cambiar.
Cuando las Variation Margin Rules de EMIR entraron en vigor en 2017, las instituciones financieras españolas revisaron las opciones que tenían para gestionar el colateral; la mayoría decidió gestionarlo de una manera bastante sencilla, a menudo utilizando hojas de cálculo y algunos recursos trabajando manualmente. Esto se pudo hacer dada la relativa simplicidad de la gestión hasta este momento; utilizando principalmente colaterales en efectivo y, a menudo, confiando en la contrapartida para los cálculos de los margin calls.
Como los requisitos reglamentarios adicionales están a punto de entrar en vigor para la mayoría de entidades españolas, es decir, los requisitos de Initial Margin (IM, por sus siglas en inglés) para ciertos derivados no compensados de manera centralizada, es hora de reconsiderar los programas de administración de colaterales y decidir si los procesos manuales que actualmente se utilizan son sostenibles o si esta vez es necesario invertir en soluciones eficientes y escalables, en particular para las instituciones que prestan servicios a las compañías de inversión subyacentes.
Hasta ahora, un número relativamente pequeño de empresas se ha visto afectado por el requisito de Margen Inicial debido al alto umbral del Average Aggregate Notional Amount. Sin embargo, en 2020, este umbral bajará de 750.000 millones de dólares a sólo 8.000 millones. Muchas instituciones se verán afectadas y, aunque el año 2020 suena lejano, algunos participantes del mercado se están dando cuenta de que el tiempo se está agotando dada la complejidad de los requisitos que esta fase de la regulación impondrá a una gran parte del mercado. No estar preparado en la fecha límite significa que las entidades afectadas no podrán negociar derivados no compensados centralmente. Esto podría limitar el acceso de una empresa de inversión al mercado de derivados y a su capacidad para cubrir el riesgo, a la vez que también podría afectar a su liquidez.
Las empresas de inversión tendrán que mirar más allá de las necesidades inmediatas. Lo que se necesita y cómo gestionarlo de manera central, no solo los requisitos de colateral, sino también los riesgos y la liquidez de una forma eficiente.
Primero debemos identificar correctamente el inventario a nivel de grupo, repasando los silos que puedan existir internamente entre las diferentes líneas de negocios. Una vez que tengamos una imagen clara, debemos asegurarnos de que los colaterales se asignen de la manera más barata para entregar (“cheapest to deliver” en inglés), después de haber evaluado su coste de financiación y coste de oportunidad. Esta función de gestión de garantías centralizada e integrada también puede identificar oportunidades para obtener liquidez o mejorar los rendimientos gracias a la transformación del colateral. Esto se puede lograr mediante la internalización de la designación del colateral elegible, la función de mejora del colateral disponible (collateral upgrade), la reinversión adecuada del efectivo, así como los préstamos de valores y Repos.
Además, un programa de administración de garantías eficiente debería tener la capacidad de obtener la liquidez requerida, tales como los High Quality Liquid Assets (HQLA), para satisfacer las demandas de margen en momentos de estrés.
Estas tareas a menudo se complican debido al hecho de que los sistemas de gestión de colaterales, en muchos casos respaldados por hojas de cálculo, no pueden hacer frente a la nueva necesidad de información en tiempo real y análisis dinámico para una serie de empresas de inversión, contrapartidas y sistemas.
Una vez que hemos previsto todas esas nuevas funciones, todavía tenemos que cuidar bien los conceptos básicos que incluyen el matching y la liquidación del colateral, el cálculo continuado de los márgenes, así como arreglar cualquier discrepancia en las posiciones.
Por lo tanto, es hora de considerar soluciones más eficientes que estén basadas en tecnologías e infraestructuras robustas pero flexibles. Hay varias maneras de lograr esto: crear, comprar e integrar o externalizar todo o solo ciertos módulos o aspectos del proceso de colaterales que no forman parte de la estrategia central de la empresa de inversión.
La creación de una gestión interna de colaterales capaz de lograr las funciones más sofisticadas, descritas anteriormente, de manera eficiente requiere una colaboración intensa de los equipos de gestión de márgenes, tesorería, financiación y trading con los de TI y cumplimiento normativo para que puedan estar alineados. Es probable que sólo las empresas de inversión más grandes puedan incorporar y dedicar los recursos necesarios para este proyecto. La externalización de la gestión de colaterales es una solución potencialmente valiosa para las empresas de inversión que buscan optimizar una función que no es una actividad central, dando prioridad en términos de asignación de recursos a su negocio principal y a funciones que afectan directamente a la generación de negocio y la satisfacción del cliente. Una combinación de insourcing y outsourcing también puede ser una buena opción según el objetivo de cada empresa y el nivel de control que deseen mantener.
A medida que las empresas vayan seleccionando su modelo óptimo de gestión de colaterales, es importante que garanticen la alineación organizativa correcta para respaldar una función de gestión de colaterales integrada y eficiente. El primer paso es nombrar un jefe de administración de colaterales con un equipo dedicado que tenga una visión centralizada de toda la empresa y pueda implementar una estrategia para optimizar los colaterales, la financiación y la liquidez disponibles. Este es, probablemente, el obstáculo clave. Las empresas deben eliminar los silos internos para permitir una visión integral y amplia de los activos disponibles y las obligaciones, ambos a nivel mundial. También es importante revisar los recursos legales disponibles, particularmente para prepararse para el requisito de Initial Margin dado el número de acuerdos que se tendrán que negociar.
La capacidad para gestionar adecuadamente los requisitos de colaterales y cumplir con la regulación depende de muchos factores. En España, la función de gestión de colaterales ha estado relativamente poco desarrollada hasta ahora. A su vez, esto se puede ver como una oportunidad para diseñar un modelo eficiente desde el inicio y alcanzar una forma altamente efectiva de administrar colaterales, financiar y optimizar la liquidez, sin tener que depender de sistemas y procesos heredados para hacerlo. Con el apoyo adecuado, las entidades españolas tienen la oportunidad de lograr este objetivo sin distraerse de su negocio principal. La pregunta fundamental es cómo una compañía de inversión debería de manera óptima asignar mejor los recursos disponibles. Qué procesos debe gestionar internamente la compañía para brindar un mejor servicio a sus clientes y para cuáles es mejor buscar un proveedor de servicios que pueda cubrir adecuadamente esa necesidad.
Tribuna de Benoit Dethier, responsable de Ventas e Instituciones Financieras en Citi Securities Services para España.