Llegando ya casi al cierre del primer trimestre, ya es recurrente escuchar a más de un inversionista pensando si es la hora de invertir en acciones. Luego de debatir por unos minutos con cualquier inversor llegas a notar que la razón fundamental a la hora defender dicho argumento es el análisis relativo, vamos, el costo de oportunidad del inversionista. Siguiendo este argumento, al final llegamos a la misma conclusión, la renta fija está muy cara. ¿Si asumimos como válida esta premisa, no deberíamos reajustar nuestros portafolios de renta fija?
Si esa es nuestra visión de mercado, probablemente si. ¿Como deberíamos posicionarnos? Muy sencillo, nuestra parte core deberían ser inversiones conservadoras, centradas en preservar el capital, con baja volatilidad y que prioricen la rentabilidad ajustada por riesgo, ya que, el riesgo de la cartera lo estaremos agregando por el lado de la renta variable.
¿Qué proponemos desde Capital Strategies Partners? Actualmente recomendamos dos activos de renta fija que nos ayudarían a mejorar el posicionamiento y a disminuir el riesgo de nuestras carteras, siempre pensando en el escenario planteado inicialmente.
· En primer lugar, invertir en alternativas de high yield que inviertan en duraciones cortas. Es verdad que la correlación de high yield con la renta variable en los últimos años ha sido alta. Sin embargo, el spread está quizás algo ajustado, por lo que consideramos clave el posicionarnos en la parte corta del high yield. En CSP creemos que la mejor manera de tener exposición al high yield con baja duración es a través del fondo de Muzinich Short Duration. Muzinich & Co, al cual representamos en exclusividad en Latinoamérica, es uno de los referentes en el US HY, con un enfoque basado en evitar defaults (solo 0,20% de default en más de 10 años) y recoger cupones. Su tesis de inversión se centra en inversiones solo en BB/B, no utiliza derivados ni tampoco bonos de bancos y aseguradoras. Actualmente el yield de la cartera está en 5.45% con una duración de 1.1 años.
· En segundo lugar, creemos que sigue habiendo valor en las monedas emergentes, pero habría que ser muy selectivo, porque muchas ya han corrido y la volatilidad a la que nos exponemos hoy en día no compensa la rentabilidad ofrecida. Sin embargo, creemos que en el Renminbi chino, principal moneda emergente, si hay valor, y lo bueno es que el rally de la moneda todavía no se ha dado. La moneda se ha venido apreciando ordenadamente a niveles del 4% anual en los últimos años con una volatilidad del 2% anual. Nosotros creemos que es un play con un enorme upside, por varias razones, pero para simplificar, la liberalización de la moneda por parte del gobierno chino o el crecimiento de China son dos buenos ejemplos. Si a esto le unimos la inflación que viene enfrentando China, con la consiguiente obligación de agilizar la apreciación de la moneda, la jugada es cuanto menos interesante. Consideramos que la mejor manera de tener exposición al Renminbi es a través de un fondo como el Azimut Renminbi Opportunities de la gestora Azimut AM. Azimut es una casa italiana con más de 20 años de experiencia en el mercado chino y con USD 19 billones de AUM. La propuesta de inversión del fondo es muy conservadora y enfocada a la apreciación del RMB. El fondo solo invierte en instrumentos de deuda con grado de inversión y baja duración (11 meses), consiguiendo así niveles muy bajos de volatilidad (1,9%). Esperamos una rentabilidad del fondo en un entorno del 7%, ya que, el carry de la cartera está en un +3.25% anual y creemos que el RMB debería apreciarse en un entorno del +4%.
En conclusión, dada la coyuntura actual recomendamos posicionar la cartera de renta fija en activos que den prioridad al carry y que no nos expongan a riesgos innecesarios, como excesiva duración o monedas volátiles, ya que, el mercado no lo está compensando eficientemente. Prioricemos la rentabilidad ajustada por riesgos y asumamos el riesgo en el mercado de acciones, donde está teóricamente el valor o al menos en donde hay mayor upside en términos relativos, depende como lo queramos leer.