La implementación de nuevos requerimientos normativos ha llevado en los últimos meses a una importante contracción en los traspasos que realizan las Afores. De un promedio de 165.094 traspasos mensuales en 2015, para junio pasado los traspasos se cayeron a 10.239 y en julio se ubicaron en 73.083, que si bien presentan una recuperación respecto al mes anterior, no llegan ni la mitad de los traspasos promedio.
Hasta el año pasado el modelo de negocios de la mayoría de las Afores estaba basado en atraer un mayor número de cuentas y para ello, reclutaban numerosos agentes promotores quienes se dedicaban a convencer a los trabajadores a traspasar su cuenta, aunque no necesariamente le convenga al trabajador. Hoy este modelo se está complicando.
Con el objeto de mejorar los servicios a los ahorradores, en enero del año pasado se implementaron nuevos controles de vigilancia y supervisión a agentes promotores, así como nuevos criterios de capacitación. La implementación ha sido paulatina a lo largo de 2015 y 2016. Esta situación llevó a una caída del 10% en los agentes promotores entre enero y octubre de 2015 para ubicarlos en 42.070.
Como parte de estos cambios, en mayo de este año se incorporó el uso de biométricos que significa la reducción en el uso del papel y la incorporación de huellas digitales, voz y firma digital lo cual fortalece la verificación de la identidad de los trabajadores y los controles de seguridad.
Prácticamente desde que nació el sistema de pensiones en México (casi 18 años de noviembre de 1998 a julio de 2016), las cifras muestran que seis de cada diez trabajadores afiliados se han cambiado de Afore.
Los datos muestran que el traspaso promedio anual de los últimos cinco años es del orden de los dos millones de trabajadores anuales que representa casi el 4% anual de los 53 millones de cuentas (trabajadores) registrados en las Afores, lo cual refleja una importante reducción. Tan solo entre 2006 y 2010 el promedio de traspasos fue de 3,3 millones de trabajadores anuales lo cual refleja una contracción respecto a la tendencia actual.
En la caída en los traspasos, solo un par de Afores han tenido la capacidad de recuperarse como es el caso de Azteca, Profuturo y Sura que se encuentran por arriba de su promedio mensual de afiliación del 2016. En junio por ejemplo, tres Afores no lograron ninguna afiliación (Metlife, Invercap y PensiónISSSTE) y para julio estas tres firmas no lograron ni mil afiliaciones.
El costo de los traspasos
Uno de los puntos en el que ha hecho mucho énfasis la Consar se refiere al gasto que realizan las Afores para la afiliación y traspaso el cual pasó del 31% -vs ingresos por comisiones en 2014-, a 26% en 2015 en forma agregada. Estos recursos podrían ser utilizados de una mejor manera por las administradoras, como por ejemplo en la inversión de capital humano para poder tener una mejor administración e inversión de los recursos.
De acuerdo con la Consar, las cifras de 2015 muestran una nueva tendencia en los traspasos:
- La proporción de trabajadores que se cambian antes de un año de permanencia en la Afore fue del 5%.
- Los trabajadores que se traspasan entre uno y tres años de permanencia fue del 31%.
- Los trabajadores que se traspasaron después de tres años de permanencia representaron el 64%.
- Los trabajadores jóvenes son los que más se cambiaron de Afore (Siefore Básica 4), ya que representaron el 40% del total de traspasos en 2015.
Al acotarse el crecimiento orgánico (traspasos) entre las Afores, esto propiciará en el mediano plazo la búsqueda de fusiones e incluso no se debe descartar la posibilidad de alianzas estratégicas las cuales no se han visto.
Columna de Arturo Hanono