La inversión en deuda emergente ha sido la de más éxito a lo largo de las dos últimas décadas, no solo por los altos rendimientos obtenidos, sino también por lo ajustado a la volatilidad. En Mirabaud apostamos por esta clase de activo a finales de 2017, incorporando a Daniel Moreno, y ha sido todo un acierto: sigue generando excelentes oportunidades y creemos que la tendencia continuará.
De hecho, las previsiones de crecimiento para las economías emergentes apuntan a un 4,4% en 2019 y un 4,6% en 2020, a lo que se suma una tasa de impago por debajo de su media histórica y un endeudamiento relativamente bajo frente al de los países desarrollados. Hemos detectado un importante crecimiento del número de inversores que ponen el foco en esta clase de activo. Llevamos muchos meses percibiendo apetito por la deuda emergente y vemos flujos positivos tanto en dólar como en moneda local, jugando esta última un papel cada vez más importante en carteras de deuda emergente.
En este contexto, el equipo de renta fija de mercados emergentes de Mirabaud AM, liderado por Moreno, trabaja fundamentalmente con dos estrategias: Mirabaud Global Emerging Market Bond Fund, que, con 220 millones de dólares bajo gestión, aprovecha algunas de las mejores oportunidades de inversión para obtener rentabilidad superior a largo plazo y ajustada al riesgo; y el más reciente, Mirabaud Emerging Market 2024 Fixed Maturity Fund, con 90 millones de dólares bajo gestión.
Con un perfil similar al de un bono sencillo, pero con la diversificación propia de una cartera de instrumentos de deuda exclusivamente denominada en dólares, este último se centra en la obtención de los atractivos rendimientos que ofrecen actualmente los emisores de los mercados emergentes.
El Mirabaud Global Emerging Market Bond Fund es un fondo que invierte en todas las tipologías de renta fija emergente, con emisiones en dólares, en moneda local, en bonos corporativos y gubernamentales. Esto nos permite alcanzar tires por encima del 10% con duraciones de 3,2 años y es una vía muy importante para gestionar el riesgo y la liquidez.
La diversificación en cuanto a divisas-dólar y moneda local es necesaria. No solo aporta rentabilidad, también nos ayuda a controlar uno de los riesgos más presentes hoy en las inversiones en bonos emergentes denominados en dólares: el mercado de deuda en dólar es cada vez más ilíquido. De hecho, el 80% de las nuevas emisiones en deuda emergente están denominadas en moneda local; área donde se encuentran oportunidades muy atractivas de calidad. Además, gracias una gestión activa, los riesgos de estas divisas se pueden mitigar de manera muy eficiente.
Otro de sus atractivos radica en que, por su propia política de gestión, existe un límite de VAR preestablecido que oscila entre el 3% y el 6% (hoy es 3%), lo que garantiza el control del riesgo. El fondo acumula en 2019 una rentabilidad del 10,6% y una volatilidad del 3,8%, lo que configura un binomio rentabilidad-riesgo realmente atractivo.
Nuestra propuesta de deuda emergente se complementa con el fondo de vencimiento fijo Mirabaud Emerging Market 2024 Fixed Maturity, que lanzamos en mayo y cerrado a nuevas inversiones. Es una clara apuesta de Mirabaud por la inversión dinámica de cara a cubrir las cambiantes necesidades de los inversores. Nos pareció interesante ofrecer una estrategia a vencimiento con un mayor grado de certeza en la rentabilidad esperada. El mercado de deuda emergente está en un momento idóneo y era una estrategia cada vez más demandada por los clientes.
El fondo sigue un enfoque buy and hold de deuda corporativa, soberana y cuasi-soberana. Con esta filosofía, cuenta con cupones realmente atractivos (+8,25%) con una TIR prevista de entre el 7% y el 8% y una cartera que se compone en un 48,2% de bonos corporativos, un 28,3% de soberanos y un 23,5% de cuasi-soberanos, con un peso mayor del sector financiero (24,7%) frente a otras industrias. Se lanzó en dólares porque no consideramos la inversión en moneda local en un fondo con cartera a vencimiento a más de 4 años, ya que requiere una gestión activa debido a los riesgos.
Actualmente estamos trabajando para lanzar otro “Fixed Maturity en Deuda Emergente” pero denominado en euros, donde pensamos que podríamos obtener tires por encima del 4,5% y cupones superiores al 5%.
Creemos que estamos en un momento óptimo para invertir en deuda de emergentes. Pero, para hacerlo con éxito, es crucial trabajar en la toma de decisiones dinámicas en las distintas subclases de activos y divisas, y hacerlo además en las diferentes fases del ciclo económico. La gestión activa es hoy más necesaria que nunca para aprovechar las oportunidades existentes tanto en moneda local como en dólares.
Del mismo modo, las carteras a vencimiento en deuda emergente denominadas en dólares o euros protegerán al inversor del riesgo de liquidez en el mercado de deuda emergente, siendo ambas estrategias complementarias entre sí.
Tribuna de Elena Villalba, directora general de Mirabaud Asset Management para España, Portugal y Latinoamérica