Las continuas tensiones comerciales entre Estados Unidos y China, junto con la creciente preocupación por los datos industriales y de fabricación, han extendido el temor de los inversores ante el impacto que estos eventos puedan tener sobre el sector servicios, tan sólido hasta el momento, debilitando al consumidor estadounidense.
En este entorno, abogamos por la protección de la cartera con activos sensibles a los tipos de interés: nos sentimos cómodos con la deuda high yield y la deuda soberana y empresarial de mercados emergentes, si bien resulta importante mostrarse selectivos y controlar el posible aumento del riesgo por impago, derivado de una recesión económica: como ejemplo, valoramos la deuda pública coreana por su sensibilidad añadida al comercio asiático.
Los indicios de un importante cambio en la política del BCE también podrían llevarnos a vender al descubierto el euro y abogar por las posiciones largas en bonos soberanos periféricos y crédito financiero.
Mientras esperamos el desarrollo de los acontecimientos, hemos reducido el equity risk, con una perspectiva especialmente negativa de Europa y los mercados emergentes por su sensibilidad a las tensiones comerciales.
Sin embargo, existe la posibilidad de que se reduzcan las tensiones comerciales y aumente la fortaleza de los consumidores estadounidenses. En este caso, trataríamos de incrementar el equity risk con una preferencia similar por Estados Unidos y Asia frente a Europa.
Columna de Talib Sheikh, director de estrategia del área de Multiactivos y gestor del fondo Jupiter Flexible Income en Jupiter Asset Management.