Desde 2010 y la aprobación de la Ley Dodd-Frank, la SEC y la industria han tenido dificultades para minimizar el conflicto inherente entre las comisiones por ventas y el derecho de un cliente a obtener consejos “desinteresados”. Ahora, casi una década después, llegó el Reglamento Mejor Interés (Reg BI por sus siglas en inglés) y tendrá un impacto fundamental en nuestra industria con el intento de mitigar ese conflicto.
La pregunta de si un corredor de bolsa transfronterizo ha actuado en el “mejor interés” de un cliente ya no será una pregunta de discreción individual subjetiva. En su lugar, esa determinación estará sujeta a pautas estrictas y disciplinadas por parte de la SEC.
Reg MI ahora requerirá una evaluación significativa de las ofertas tanto de corredores como de asesores para un nivel más amplio de divulgación de conflictos y, en ciertas circunstancias instadas por la SEC, la mitigación o eliminación de esos conflictos. Además, requerirá una metodología disciplinada, documentada, y fundamentalmente nueva para recomendaciones individuales que ha llevado a algunos a preguntar abiertamente si el modelo de la comisión puede sobrevivir bajo la misma.
Reglamento Mejor Interés en general
Bajo Reg MI, los corredores de bolsa y los asesores de inversión deben proporcionar información y diligencia por capas a los niveles de la firma, el corredor y el producto. Cada una de esas obligaciones surge para los corredores de bolsa en el momento en que “recomiendan” a un “cliente minorista” una transacción de valores o una estrategia de inversión con valores. Las recomendaciones también se extienden a qué tipo de cuenta abrir.
A primera vista, el mandato de Reg MI no es notable. Simplemente requiere que los corredores de bolsa actúen en el “mejor interés” de sus clientes minoristas cuando hacen recomendaciones sobre valores particulares o estrategias de inversión. El contexto de esta determinación de “ mejor interés” se centra casi exclusivamente en prohibir que el corredor de bolsa coloque su interés financiero delante de el del cliente, y divulgar cualquier información que pueda llevar al cliente a creer que el corredor de bolsa no es consciente o inconscientemente “desinteresado”.
La diferencia es que ahora la SEC requiere medidas específicas para documentar y confirmar la metodología para llegar a esa determinación.
Aplicación transfronteriza
Debido a la forma en que el negocio de banca privada transfronteriza ofrece muchos de sus servicios, cumplir con esas obligaciones podría tener un impacto excepcionalmente desventajoso en nuestra industria. A diferencia del inversor nacional, la inversión de residentes no estadounidenses en las cuentas de los Estados Unidos a menudo se debe a factores no económicos que incluyen la dolarización del riesgo cambiario, la seguridad y el riesgo familiar, la diversificación geográfica y las consideraciones fiscales internacionales vinculadas a estos.
Además, los inversionistas no residentes de los Estados Unidos a menudo operan en otros idiomas además del inglés. También, los corredores que prestan servicios a clientes no residentes de los Estados Unidos frecuentemente viajan para reunirse con sus clientes en países que presentan niveles adicionales de leyes y regulaciones y pueden restringir legalmente el desempeño en el país de ciertas actividades de servicio.
Firmas más pequeñas
Muchos proveedores de servicios transfronterizos son corredores de bolsa o asesores más pequeños que tienen ofertas y plataformas limitadas. En su mandato de divulgar por completo el alcance y los términos de la relación con su cliente, la SEC enfatiza nuevamente la divulgación de cualquier limitación material en la que un agente de bolsa pueda operar, incluidas las consecuencias de licencias limitadas, la gama de productos disponible o limitados, y la disponibilidad limitada de estrategias.
Es probable que las empresas más pequeñas soporten una cantidad desproporcionada de la carga de cumplimiento de RMI y el costo de la implementación. Sin embargo, es claro que la disponibilidad de sólo una gama limitada de productos no protegerá a una empresa o corredor del incumplimiento de Reg MI.
Un deber de cuidado ampliado
Si bien muchos corredores transfronterizos operan bajo la Regla 2111 de FINRA (idoneidad), los requisitos de idoneidad aumentados de Reg MI forzarán un conocimiento mayor y más profundo del perfil de inversión de un cliente (específicamente, estatus fiscal) para formular una recomendación conforme. La obligación no solo requiere “diligencia, cuidado y habilidad” para hacer recomendaciones desinteresadas, sino que ahora requerirá que la metodología utilizada para considerar alternativas, costos y consecuencias de la recomendación esté bien documentada.
Luego, esas variables deben analizarse en la aplicación al perfil de inversión de un cliente en particular, antes de poder hacer una recomendación conforme. Es importante destacar que el perfil de inversión de un cliente debe incluir un análisis documentado del estatus fiscal del cliente y el impacto de cualquier recomendación bajo ese estatus. Bajo esta metodología de “muestre su trabajo,” la capacidad de minimizar la importancia del estatus fiscal del cliente se perderá en gran medida.
Compensación del corredor
Debido a que la SEC considera que ciertas bonificaciones son demasiado perniciosas para ser meramente divulgadas o mitigadas, los paquetes de referencias y cargados de objetivos bajo los cuales muchos trabajan ahora, pueden necesitar revisión o eliminación.
En una desviación marcada de su filosofía orientada a la divulgación, la SEC ahora ha determinado que ciertos tipos de conflicto son tan dañinos que sólo eliminarlos será suficiente. Si bien algunos, como los concursos de ventas y las cuotas de ventas, han sido abandonados en gran parte por una industria que se controla a sí misma, la aplicación de esa estrategia de eliminación a otros modos de compensación sigue sin claridad. En consecuencia, la viabilidad de los objetivos de ingresos cargados de referencias se encuentra ahora en duda.
Consideraciones de inversión no económica
En su esencia, Reg MI se basa principalmente en indicadores de rendimiento “objetivamente verificables” que ignoran algunos de los principales impulsores de la inversión transfronteriza, como la diversidad geográfica, la dolarización de activos, la privacidad y la seguridad, y estructuras complejas para la planificación fiscal y de sucesión. Si bien la SEC también ha observado que estos impulsores “altamente personalizados no económicos” pueden influir en la pregunta de los mejores intereses, aún no está claro cómo se pesarán esos factores.
Entrega de documentos y posibles clientes
Reg MI se activa cuando se hace una recomendación. Ese desencadenante podría crear obligaciones para un corredor, independientemente de si el beneficiario tiene una cuenta que realmente puede ejecutar la operación. Si bien sigue habiendo mucha incertidumbre sobre cuándo se aplica Reg MI, es importante tener en cuenta que la SEC está urgiendo una mayor consideración al hacer recomendaciones a los clientes prospectivos.
“[Un] corredor de bolsa debe considerar cuidadosamente hasta qué punto puede hacer una recomendación a los clientes minoristas prospectivos, incluida la recopilación de información suficiente que les permita cumplir con el Reglamento de Mejor Interés. . . en caso de que el posible cliente minorista utilice la recomendación.”
Conclusión
A primera vista, Reg MI parece ser la respuesta inocua de la SEC a los mandatos de Dodd-Frank. Pero cuando se aplica a la industria bancaria transfronteriza, Reg MI tendrá un impacto significativo en las formas en que los corredores de bolsa interactúan con sus clientes internacionales. Muchos cuestionan la viabilidad del modelo de corretaje dado el aumento de los costos de cumplimiento. Otros están abogando por una limitación de las acciones recomendadas o clientes elegibles para recomendaciones. ¡Todas estas opciones requerirán la revelación de conflictos según Reg MI!
Todos miraremos con expectación a cómo responde la industria.
Columna de Sergio Alvarez-Mena, socio, Instituciones Financieras – Litigios y Regulación, Jones Day Miami con el apoyo de Lance Maynard, de la Escuela de Derecho de la Universidad de Miami (JD/MBA 2020) y Carly Roessler, de la Escuela de Derecho de la Universidad de Michigan (JD 2020)