El mercado de high yield ha estado en la prensa últimamente por razones equivocadas. A principios de diciembre, Third Avenue, un fondo distressed especialista en high yield suspendió los reembolsos, haciendo que los inversores se preguntaran qué nivel de liquidez tenían sus posiciones de deuda corporativa high yield si necesitaban venderlos. Los diferenciales de crédito high yield en Estados Unidos, que desde junio de 2014 ha sido vendidos de forma bastante constantemente, registraron otro golpe al conocerse la noticia. Como consecuencia, el principal índice estadounidense de high yield (el BofA Merrill Lynch US high yield Master II Total Return Index) finalizó 2015 con caídas del 4,6%.
Third Avenue ha sido quizás un caso especial, pero los diferenciales de crédito parecen haber dejado atrás sus mejores niveles en este ciclo y es probable que veamos otra oleada de ventas en los próximos años antes que una recuperación del terreno perdido durante los últimos 18 meses. Este ha sido el patrón normal en los recientes ciclos económicos, con las primas de riesgo del high yield repuntando antes del inicio de una recesión. Esto ocurre cuando las empresas se vuelven más reacias a tener bonos y por lo general aprovechan el estado de sus balances para complacer a los accionistas conforme el ciclo económico va madurando. A finales de los años 80, los diferenciales de los bonos high yield alcanzaron sus mejores niveles dos años antes de la recesión de 1991. A finales de los años 90, los diferenciales comenzaron a ampliarse durante un periodo total de tres años y medio justo antes de que comenzara la recesión de 2001. En los períodos previos a la crisis de crédito, el high yield registró una subida menor y sólo se empezó a debilitar siete meses antes de la recesión y un total de 15 meses antes del colapso de Lehman Brothers.
El canario en la mina de carbón
En cierta medida, el high yield tiende a ser algo así como un canario en la mina de carbón, advirtiendo cuando el ciclo económico está empezando a madurar, aunque ahora mismo todavía queda tiempo por delante.
La propia oleada de ventas, también puede crear oportunidades en estos activos para captar emisiones corporativas atractivas a bajo precio, sobre todo si la ampliación de los diferenciales ha sido indiscriminada. La reciente debilidad en el sector high yield de Estados Unidos se ha visto exagerada por los problemas en el sector energético. Excluyendo esto, las rentabilidades han aumentado a niveles que comienzan a parecer interesantes. El índice que no incluye las empresas de energía tiene una rentabilidad casi 6 puntos porcentuales más que los bonos del Tesoro y más del 7,5% en términos absolutos. Esto coloca este mercado claramente en el lado barato del valor razonable, especialmente en ausencia de una recesión, que todavía no parece inminente en Estados Unidos.
Explotar selectivamente las oportunidades high yield
En el último año y medio, hemos optado por ser muy defensivos dentro del mercado high yield, manteniendo una exposición limitada, evitando los emisores de menor calificación, y centrándonos en las emisiones europeas, donde el ciclo de crédito está menos avanzado y el programa de expansión cuantitativa del Banco Central Europeo (BCE) proporciona un respaldo adicional. Sin embargo, ahora estamos selectivamente empezando a explotar el nerviosismo en el segmento high yield de Estados Unidos. La volatilidad del mercado ha creado oportunidades para entrar en buenos nombres. Por ejemplo, recientemente hemos añadido la exposición a Frontier en nuestro Diversified Income Fund, una compañía con rating BB, con una prima de rendimiento de alrededor de 10 puntos porcentuales sobre los bonos del Tesoro.
Esto no quiere decirque pensamos que es hora de entrar con ambos pies, sino más bien creemos que es el momento de añadir nombres al portfolio que han sido injustamente penalizados por unas condiciones de negociación difíciles.
El mayor de esos riesgo es el de que se produzcan salidas de capital de los fondos high yield, algo que el mercado tendría problemas para absorber sin una fuerte caída de los precios.
John Stopford es co-responsable de multiactivos de Investec y portfolio manager del Investec Diversified Income Fund.