Se acaba un año muy duro y sin rendimiento en la mayoría de activos. Empezamos con fuertes bajadas entre enero y febrero. Recuperamos el camino perdido durante casi cuatro meses para vivir un día de locos con el Brexit. Finalmente, llegó Trump para acabar de romper todas las previsiones.
Los bancos centrales tienen como objetivo mantener el precio de los activos y van a seguir presentes en los mercados, no los subestimemos. Esto hará que se mantenga el equilibro “perfecto”. El problema es que todos los activos (renta fija, variable, inmobiliario,…) nos siguen pareciendo caros y además distan de sus precios fundamentales.
Todo lo que se nos viene encima en el 2017 es más que sabido por todos (subida tipos, inflación, estallido de la deuda…). Creemos que en muchos activos seguirán respetando sus rangos, vender en tops y comprar en dips. Focalizarse en empresas y gestores de calidad, nada de experimentos.
En DiverInvest seguimos pensando que ser cautos y tener una cartera cada vez más diversificada y muy bien construida va a ser fundamental para abordar 2017. El crecimiento del mundo (aproximadamente un 3,2% de media en los últimos cinco años) parece que va a seguir así, bajo y lento. Los problemas reales persisten. Además, Trump está moviendo todos los mercados especialmente la inflación en EE.UU., los bonos, el dólar y la bolsa. Trump va a ser un líder muy errático pero no hay más líderes. Tendremos mercados aún más volátiles.
Por ello, proponemos seguir tomando riesgos asimétricos. Hay que gestionar el riesgo de forma activa. Optamos por gestores muy activos de sesgo conservador, a la vez que usamos productos de gestión pasiva con costes muy bajos para la parte de generación de rentas. Y por último, como siempre, ¡el cash is King!
Somos conscientes que nos encontramos en un entorno atípico jamás visto. Por ello trabajamos a diario por si el equilibrio “perfecto” se pudiera romper en cualquier momento.
Éste es el cuadro resumen de nuestras recomendaciones para el año 2017.
Este próximo año celebramos nuestro décimo aniversario.
Felices fiestas, felices inversiones
Columna de David Levy, de DiverInvest EAFI