Los inversores por fin podrían estar presenciando una recuperación de la poco querida renta variable británica, ya que el país se ha visto beneficiado del acuerdo comercial alcanzado recientemente con la UE, de una política de vacunación efectiva y bien definida, de una infraponderación estructural en carteras internacionales, de unas valoraciones relativas atractivas y de las oportunidades ante una posible reflación.
Desde el inicio de la recuperación, la renta variable global se ha recuperado registrando máximos históricos. El S&P 500 de EE.UU. ha subido un 27% en 12 meses y el CSI 300 de China ha ganado un 28%, en términos de dólares. Sin embargo, el FTSE 100 del Reino Unido, que se ha visto poco favorecido desde el referéndum de la UE de 2016, solo ha subido un 2,5% en el último año (a 4 de marzo). Su capitalización total de 1,92 billones de libras (o 2,69 billones de dólares) es solo ligeramente superior que la de una empresa estadounidense: el gigante tecnológico Apple, con 2,01 billones de dólares.
Podemos destacar cinco argumentos principales por los que la renta variable británica es un espacio atractivo de inversión
- El acuerdo comercial europeo: Un acuerdo comercial del Reino Unido con la UE evitó una salida desordenada del mercado único y ha sido un catalizador para que los inversores le den una nueva oportunidad a este mercado. El comercio entre estas dos regiones continúa, aunque en condiciones algo menos favorables para los británicos, y aún podría beneficiarse más de otros acuerdos comerciales con otros países. Cada vez queda más claro que salir de la UE no será algo terminal para la economía del Reino Unido.
- Vacunación: El rápido despliegue de vacunas en el Reino Unido ha mejorado considerablemente sus perspectivas económicas en comparación con otras regiones, especialmente con la UE. El hecho de que la reapertura total prevista para el 21 de junio haya estado marcada por un programa de vacunación tan estricto, sugiere que será la primera gran economía occidental en reabrir.
- Infraponderación: Los flujos actuales muestran que los gestores que hasta la fecha han optado por una fuerte infraponderación en las acciones del Reino Unido están comenzando a incrementar sus posiciones. La encuesta semanal a gestores de Bank of America reveló que, a fecha de enero, un 15% de los gestores estaba infraponderado en la renta variable británica, mientras que la cifra era de un 29% el pasado junio y de un 27% tras la votación del Brexit.
- Valoraciones: Varios años de abandono por parte de los inversores internacionales han dejado al FTSE 100 cotizando a solo 14x los beneficios esperados de las empresas (una medida clave de valoración) frente a las 23x del S&P 500 estadounidense (según Bloomberg). Por otro lado, comparando el dividend yield del índice FTSE All-Share con los ingresos disponibles del índice de referencia de los bonos del Estado, el índice está prácticamente en sus niveles más bajos desde la Primera Guerra Mundial. Además, los beneficios de las empresas que componen el índice FTSE All-Share en los últimos 12 meses han sido negativos. Este escenario sugiere que la región está preparada para una fuerte recuperación.
- Reflación: Cabe destacar la gran concentración de empresas de la vieja escuela dedicadas a los sectores de energía y materiales básicos, alimentos, medicamentos y productos bancarios. Muchas de ellas entran en la categoría de acciones value, es decir, acciones que se consideran baratas con respecto a sus beneficios o activos. El FTSE 100 tiene una mayor exposición a bancos, compañías mineras y empresas energéticas en su composición sectorial que otros índices.
Desde Capital Strategies Partners creemos que una buena opción para exponerse a la renta variable de Reino Unido es a través del fondo de Ninety One UK Alpha.
¿QUÉ ES NINETY ONE?
Ninety One es una gestora independiente global centrada en gestión activa con más de 153,8 mil millones de USD bajo gestión (a 31 de diciembre de 2020). Fundada en Sudáfrica en 1991, con el nombre de Investec Asset Management, la empresa comenzó a ofrecer inversiones nacionales en un mercado emergente. En 2020, tras casi tres décadas de crecimiento orgánico, la empresa se separó de Investec Group y se convirtió en Ninety One. En la actualidad, la empresa ofrece estrategias activas en renta variable, renta fija, multiactivos, alternativas y sostenibilidad a instituciones, asesores e inversores particulares de todo el mundo.
¿Quién es Simon Brazier?
Simon Brazier es el gestor del fondo UK Alpha Fund desde 2015 y también es responsable de la gestión del equipo de inversión especializado en quality. Antes de incorporarse a Ninety One, Simon trabajó en Threadneedle como head of UK Equities y responsable de la gestión de la cartera del fondo Threadneedle UK. Con más de 14 años de experiencia en la gestión de fondos, Simon comenzó su carrera en Schroders en 1998. También cuenta con el apoyo de Anna Farmbrough como cogestora de esta estrategia.
¿Qué fondo es el UK Alpha?
Fundado en enero de 1985, el fondo Ninety One UK Alpha, con cuatro estrellas Morningstar, cuenta con 1.800 millones de libras esterlinas en activos bajo gestión. Se trata de un fondo core bien diversificado con aproximadamente 45 posiciones y que tiene como índice de referencia el FTSE All-Share Total Return Index. El fondo está registrado en España, donde, además, es traspasable.
El equipo cree que los mercados se centran excesivamente en factores a corto plazo y que la mayoría de los analistas suelen concentrarse en obtener los resultados y no en la trayectoria per se de la compañía dentro de cinco años. Esto crea oportunidades para invertir en empresas de calidad que darán buenos resultados durante muchos años en el futuro. El equipo solo compra empresas que añaden valor para los accionistas mediante la asignación eficiente del capital. En consecuencia, es muy importante invertir en una gestión empresarial sólida.
La generación de flujo de caja también es clave, y las empresas suelen valorarse en función de la cantidad de liquidez que producen. Actualmente, el fondo tiene una importante sobreponderación en el sector financiero (+10%), sanitario (+5%) y de servicios informáticos y de software. Sus tres mayores posiciones son BP Plc., London Stock Exchange y Unilever.
Conclusión
Las acciones británicas parecen muy atractivas, según muchos parámetros. Por lo tanto, una inversión en el Reino Unido podría ayudar a construir carteras capaces de generar rendimientos superiores a largo plazo. Además, si está previsto que la inflación vuelva en 2021, este índice y su exposición a las mineras, al complejo energético y a las empresas financieras debería proporcionar a los inversores una forma de ganar con el aumento de la inflación, ya sea real o percibida.