En una era donde los datos gobiernan cada vez más las decisiones empresariales, ¿qué lugar queda para la intuición humana en el reclutamiento de talento? Hoy en día, el uso del análisis de datos está transformando profundamente la adquisición de talento. Las prácticas de reclutamiento, que antes se basaban en la intuición y evaluaciones subjetivas, han comenzado a enriquecerse con métricas cuantitativas y análisis avanzados. Aunque la subjetividad no desaparecerá, ya que la experiencia humana y la empatía de los profesionales de recursos humanos son invaluables y no pueden ser replicadas por algoritmos, los datos comienzan a marcar los límites de la intuición.
Además, el impacto positivo de las empresas «data-driven» es innegable y su adopción continúa en aumento, tanto para tomar decisiones informadas como para planificar a futuro. Según una encuesta de Harvard Business Review, los líderes que fundamentan sus decisiones estratégicas en análisis de datos superan a sus pares en diversas métricas clave, incluyendo eficiencia operativa (81% vs. 58%), ingresos (77% vs. 61%), lealtad y retención de clientes (77% vs. 45%), satisfacción de los empleados (68% vs. 39%) y previsibilidad de costos de TI (59% vs. 44%).
Entonces, ¿cuál es el beneficio de los datos en los procesos de reclutamiento? Empecemos por el principio: la búsqueda de candidatos. Cada vez más especialistas reconocen el papel que juegan los sesgos en el reclutamiento. Estas parcialidades, aunque a menudo inconscientes, pueden llevar a elecciones ineficaces, predicciones erróneas y oportunidades perdidas. La contratación imparcial debería ser la base de cualquier estrategia de reclutamiento, y un enfoque basado en datos resulta beneficioso para todas las partes involucradas: aspirantes, equipos de reclutamiento y empresas.
Una de las prácticas clave que hemos incorporado en Nearsure es la calibración de evaluadores. Esto implica que todos los reclutadores siguen un modelo de evaluación uniforme, para asegurar que los candidatos sean medidos con los mismos criterios, evitando que las percepciones individuales influyan en la calidad de la selección. Además, hoy en día existen herramientas tecnológicas de reclutamiento programadas para enfocarse en habilidades y calificaciones, omitiendo información demográfica como género y edad, que puede generar sesgos involuntarios.
El análisis de datos también ofrece información valiosa sobre métricas clave como el costo por contratación, el tiempo para cubrir vacantes y la calidad de las contrataciones. Estos datos son esenciales para mejorar la experiencia del candidato, asignar inteligentemente el presupuesto de reclutamiento y lograr mejores resultados. Por ejemplo, en Nearsure, nuestro enfoque basado en datos ha revelado que al aprovechar nuestra base interna de candidatos, los tiempos de contratación se reducen en un 47% en comparación con la búsqueda externa de candidatos. Esto es posible gracias a la disponibilidad inmediata de candidatos calificados, lo que agiliza significativamente el proceso.
Además, al comparar nuestros resultados con los benchmarks proporcionados por un proveedor de inteligencia artificial que mide el desempeño de sus clientes, encontramos que ellos reportan una reducción del 50% en los tiempos de contratación. Esto confirma la alineación de Nearsure con las mejores prácticas del mercado.
Por otro lado, los datos son cruciales para prever necesidades futuras de talento. El análisis de tendencias y patrones puede ayudar a predecir cuáles serán las futuras necesidades de talento. Por ejemplo, la identificación de brechas de habilidades que habrá que llenar, o la cantidad de nuevas contrataciones que se necesitarán en el futuro. Este enfoque provee una base de conocimiento sólida y asegura que los equipos estén preparados para los posibles desafíos por venir.
Finalmente, los datos permiten predecir la adecuación de un candidato para un puesto y su probable éxito. Utilizando análisis predictivos basados en datos históricos de contrataciones exitosas y desempeño laboral, las organizaciones pueden descubrir patrones y correlaciones que indican la adecuación, habilidades y alineación cultural de un candidato.
Mi experiencia me ha demostrado que aprovechar los datos de manera inteligente lleva a una toma de decisiones más precisa y mejores resultados. Aunque el juicio humano es irremplazable, el panorama actual exige un enfoque más riguroso que utilice el análisis para guiar decisiones alineadas con los objetivos organizacionales. Al fin y al cabo, el conocimiento es poder.
Sobre el autor: Agustín Sedano, es CCO de Nearsure, empresa de innovación financiera