Llega un año no exento de desafíos: una inflación récord; el fin de la política monetaria ultralaxa; los continuos ataques políticos al comercio mundial; el cambio demográfico que afecta profundamente a cada vez más países; los costes de la descarbonización; o, por último, el conflicto de Ucrania, cuyo desenlace es altamente impredecible, seguirán marcando el 2023.
La otra cara de la moneda de las pérdidas dramáticas en el precio de los bonos este año son las rentabilidades bastante decentes que se pueden obtener ahora y en 2023. Sin embargo, uno debe tomar riesgos. Los bonos del Estado por sí solos no serán suficientes este año. Pero las alternativas también están de vuelta: los bonos de alta rentabilidad europeos actualmente rinden más del 7%. Esperamos una recesión este año, pero no severa. En este sentido, la morosidad de los préstamos debe permanecer dentro de los límites.
Las acciones ya no tienen alternativa
Las tasas de interés más altas pesan sobre las valoraciones. Por un lado, porque ahora puede volver a invertir su dinero en bonos y, por otro lado, porque las ganancias futuras se descuentan más. Por lo tanto, las acciones de valor deberían seguir funcionando bien, mientras que las empresas cuyos beneficios se encuentran en un futuro (muy) lejano se verán más afectadas.
Cuando se trata de renta variable, confía en Europa
Europa es actualmente una región atractiva para la inversión, no porque esté al borde de un auge que haría caer las ganancias corporativas, sino porque las preocupaciones del mundo son exageradas. La economía europea ha demostrado cuán flexiblemente puede adaptarse a condiciones macro cambiantes; la recesión en la eurozona probablemente no será particularmente severa. Además, la renta variable europea contiene muchos valores de peso.
En general, debería ser posible ganar dinero real
Los bancos centrales no cesarán su lucha contra la inflación ni volverán a recortar los tipos de interés de forma prematura. Por lo tanto, las tasas de inflación deberían caer este año y debería ser posible ganar dinero real. Es una perspectiva mejor que mirar por el espejo retrovisor.
Tribuna elaborada por Martin Moryson, Economist Europe para DWS.