Este jueves, el Reino Unido votará por quedarse o salirse de la Unión Europea. Reino Unido es la quinta economía más grande del mundo, por lo que de salirse de la UE tendría repercusiones importantes para el mundo. El contexto global no podría ser más retador ya que el comercio mundial ha dejado de crecer amenazando la recuperación económica, y las voces de proteccionismo se oyen también en la primera economía del mundo: Estados Unidos de Norteamérica.
Más por el candidato republicano, pero también por el demócrata. Sin embargo, Global Trade Alert reporta que en los últimos 12 meses, Estados Unidos ha sido la economía con mayores medidas proteccionistas implementadas.
Además, aunque con menor fuerza, hay movimientos a favor del proteccionismo en otras economías de Europa, y con el Brexit de ejemplo podrían tomar mayor fuerza. Así, sobre una base de comercio mundial débil, y de agotamiento de las medidas de política monetaria para impulsar el crecimiento económico, el impacto de Brexit en las variables financieras sería mayor a la suma de sus partes, es decir al mero impacto de menor comercio con el Reino Unido. De esta manera, las variables financieras reaccionarían a las menores perspectivas de crecimiento global, y a una apreciación generalizada del dólar por ser la moneda “safe heaven”.
Para México, habría que considerar tres impactos: el del comercio directo con el Reino Unido que es bajo (Reino Unido representa el 1% del comercio internacional de México), el de la integración al proceso productivo de la manufactura de EUA, que sufriría por menor comercio de EUA con el Reino Unido (Reino Unido es el quinto destino más importante de las exportaciones de EUA) y al impacto negativo de la apreciación generalizada del dólar en el sector de la manufactura de EUA, y en menor medida al menor crecimiento global. Así, en México esperaríamos una depreciación adicional de la moneda nacional con una consecuente respuesta más agresiva de política monetaria: mayor alza de tasas de política monetaria e intervenciones en el mercado cambiario.
Es importante destacar, que en caso de que no ocurra Brexit, igual el mundo se quedará con un crecimiento débil, comercio internacional estancado y políticas monetarias de países desarrollados agotadas. Las presiones sobre el peso mexicano y en general, sobre mercados emergentes por las débiles perspectivas de crecimiento económico global igual justifican, por el riesgo que implican para la inflación, un alza de tasas de Banxico de al menos 25 puntos base en la próxima reunión del 30 de junio. A nuestro juicio, la tasa de interés de México se ha quedado rezagada para el conjunto de riesgos específicos a México y generales a mercados emergentes a los que nos hemos referido en notas anteriores.
Columna de Guillermo Aboumrad, director de Estrategias de Mercado en FINAMEX Casa de Bolsa.