Aunque no lo parezca, el año que está terminando fue poco volátil, al menos si se observan los índices que miden la volatilidad en mercados como el norteamericano. Sin embargo, los momentos en que la volatilidad creció, impactaron de forma importante el desempeño de los países emergentes y por eso, muchos inversionistas, sintieron que este año había sido uno de fuertes turbulencias.
Pero hubo muchos inversionistas que tuvieron y aprovecharon oportunidades en activos como acciones estadounidenses, acciones europeas, monedas, entre otros. Y la pregunta que hacen a esta altura del año es si continúan con esta inversión en las próximas semanas. La respuesta que debo dar es depende. Muchas variables entran a conjugarse a esta altura del año: la mayoría de inversionistas tienden a desentenderse de sus inversiones a esta altura, dejando en modo de “navegación automática” a sus portafolios; otros, entienden que los mercados son menos líquidos, y tratan de ajustarse a dicha situación; algunos, miran la situación fiscal y antes del cierre de año calendario, tratan de hacer cualquier ajuste que no se haya realizado a lo largo del año; mientras que otros, la minoría, seguirá pendiente de sus inversiones.
En vista de cualquier componente, pero pensando en que entraremos a un nuevo período, lo que estamos proponiendo es comenzar el año nuevo muy ligero en inversiones, centrándose más en algo relativamente conservador y estable. Esto no implica que exista una perspectiva negativa para enero, ni mucho menos; sino que llegado el momento, es mejor quitarse de encima una carga que le puede generar el pensar en inversiones, en una época que usted no quisiera hacerlo. En términos automovilísticos, es lo mismo que sucede en un carro mecánico: cuando usted ve que el semáforo cambió a rojo, pone el carro en neutro, ya que el sólo impulso lo hará llegar. Esto no significa que luego no vaya a acelerar y que necesite, nuevamente, engranar el vehículo y pasar secuencialmente de la primera a la quinta velocidad. Algo así es lo que debería suceder en este momento con los portafolios de inversión.
El año 2014 se antoja como un año con muchas oportunidades, pero que puede ser altamente cambiante. Llegarán noticias de muchas partes, habrá temas políticos en los países emergentes, decisiones monetarias en los países desarrollados, y hasta Mundial de Fútbol, que es un momento propicio para que la gente olvide sus inversiones y se centre en el deporte más popular del mundo. Por todo lo anterior, es importante que en 2014 diversifique, y diversifique bien, es decir, que meta dentro del portafolio activos que le permitan válvulas de escape cuando las cosas cambien con la velocidad que nos han acostumbrado recientemente. Este año, y así lo muestra la evidencia, el dólar frente a muchos activos latinoamericanos, cumplió fielmente esa tarea.