Antes de visitar la librería y comprar lo necesario para la residencia de estudiantes, haga que su hijo rellene un poder que permita la toma de decisiones médicas y, si estudia en EE.UU., un poder que cumpla con la normativa HIPAA (Health Insurance Portability and Accountability Act).
Sea su primer o último año de carrera, asegúrese de tener bien cubiertas estas directrices médicas para cualquier hijo que haya cumplido los 18 años.
Los años universitarios conllevan una extraña querencia de los jóvenes hacia comportamientos que suelen acabar en la consulta de un doctor o, en el peor de los casos, en las urgencias de un hospital. Sin embargo, una vez que su hijo haya cumplido los 18 años, usted podría quedar excluido de esta esfera médica.
Los campus universitarios están plagados de oportunidades para que un estudiante sufra problemas de salud, o bien que los problemas le encuentren a él. Desde una epidemia vírica, por ejemplo de meningitis, hasta el sinfín de fiestas al alcance de todos, la vida en el campus puede forzar a los estudiantes a situaciones a las que no se han enfrentado nunca en solitario, que en algunos casos pueden tener consecuencias de por vida.
¿Qué ocurre cuando un estudiante no está en situación de hablar por sí mismo? Con un poder en regla, la incertidumbre sobre quién tiene capacidad de decidir por el estudiante afectado queda resulta.
Además, cuando no estamos implicados, a menudo nuestros hijos deciden dejarnos al margen bien de sus problemas bien por no preocuparnos o bien por miedo a las represalias. Un artículo publicado el pasado 13 de julio en el New York Times, «Reporting a Rape, and Wishing She Hadn’t,» me dejó esto, como padre de dos jóvenes en edad universitaria, meridianamente claro.
Asegúrese de que las personas a las que su hijo haya otorgado poderes médicos estén capacitados para hablar por su hijo o para obtener la información médica necesaria en el caso de que él no pueda hacerlo. Este simple paso puede garantizar que los padres sigan capacitados para formar parte de la vida de sus hijos cuando éstos tengan que afrontar momentos complicados tanto física como emocionalmente.
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Por William Finnegan, senior managing director, Global Retail Marketing, MFS Investments
Fuentes de información adicionales:
- En EE.UU., las normas pueden variar en cada estado. Su pediatra también puede guiarle en lo referente al HIPAA. Una página web de información sobre este asunto es www.caringinfo.org.
- Puede consultar el blog post de Vicky Schroebel acerca de cómo establecer directivas sanitarias para hijos en edad adulta.
- Visita la página de college planning page en la sección de Heritage Planning de mfs.com