En la era digital, la inteligencia artificial (IA) ha dejado su huella en diversos sectores y el de la restauración no es una excepción. De hecho, la IA se ha convertido en un “utensilio” clave en las cocinas de los restaurantes, ya que mejora su eficiencia operativa y eleva la satisfacción del cliente.
Hasta ahora, la innovación en el sector de la restauración se ha centrado, sobre todo, en los menús digitales y la capacidad de hacer pedidos. A su vez, la industria se enfrenta a una menor productividad, una escasez de personal cada vez mayor, una inflación de los costes de los productos, así como a otros desafíos importantes.
La productividad de la industria de la restauración es más baja que la de otros sectores
Fuente: Oficina de Estadísticas Laborales, Evercore ISI Research. Hasta 2020.
En nuestra opinión, y para hacer frente a estos desafíos, los restaurantes empezarán a implementar la IA para acelerar la innovación en los menús y mejorar la calidad de sus productos. Así pues, creemos que surgirán atractivas oportunidades de inversión en aquellas compañías pioneras vinculadas a estas innovaciones.
El cambio ya se está cocinando
Algunos restaurantes ya están probando diferentes sistemas basados en la IA para aumentar la productividad y mejorar su calidad. A continuación, enumeramos tres ejemplos:
En primer lugar, podemos encontrar robots de voz, cuyo objetivo es implementar la IA conversacional para mejorar la experiencia del cliente. Por ejemplo, una cadena multinacional de restaurantes de comida rápida ha instalado un sistema de pedidos por voz en su autoservicio y parece estar consiguiendo buenos resultados, aunque filtrar el ruido de fondo ha sido todo un reto. Por otro lado, un restaurante de comida rápida especializado en alitas de pollo utiliza la IA conversacional para tomar pedidos a través del teléfono. De este modo, no sólo se mejora la experiencia de los clientes al suprimir las llamadas no atendidas y reducir el tiempo de espera, sino que también permite que los empleados tengan más tiempo libre. Tras el éxito de una prueba en 200 establecimientos, la cadena de restaurantes ampliará la capacidad de pedidos telefónicos con IA a más locales en 2024.
En segundo lugar, cada vez son más los restaurantes que instalan cocinas totalmente automatizadas para reducir los costes. Por ejemplo, una cadena de comida rápida de ensaladas abrió su primer restaurante automatizado en un distrito de Chicago. Comenzó produciendo entre 400 y 500 cuencos en una hora, lo que reducía el tiempo de espera de los clientes y mejoraba la calidad de las raciones. Tras este éxito inicial, la empresa tiene previsto abrir un segundo restaurante automatizado en Los Ángeles en 2024. Otra cadena de comida rápida especializada en comida mexicana está probando un sistema automatizado que transporta cuencos y ensaladas a través de una «línea de preparación» automatizada.
En tercer lugar, los restaurantes también buscan un toque de innovación a sus negocios a través de cocinas semiautomatizadas. Por ejemplo, ese mismo restaurante mexicano de comida rápida no sólo ha hecho pruebas con un robot para hacer tortillas y otro para hacer guacamole, sino que también está probando una parrilla con inteligencia artificial que podría revolucionar el cocinado de la carne. De hecho, esta parrilla con IA se está extendiendo a más restaurantes de la cadena.
Oportunidades de inversión
Aunque hasta la fecha el sector de la restauración se ha quedado rezagado con respecto a otros, creemos que las tecnologías de automatización avanzada y la inteligencia artificial tienen el potencial de impulsar la innovación y la productividad a gran escala.
Por ello, todos los ejemplos de aplicación de la IA en los restaurantes que se están realizando nos parecen alentadores. Todo ello podría suponer la aparición de atractivas oportunidades de inversión. Así pues, seguiremos de cerca estas tendencias basadas en la IA para identificar quiénes serán los líderes que surjan dentro del sector de la restauración.
Tribuna elaborada por Sebastian Thomas, gestor del fondo Allianz Global Artificial Intelligence.