Argentina acaba de atravesar un mes crucial en el que reemplazó al presidente del Banco Central y anunció un nuevo acuerdo con el FMI. Desde Schroders creemos que ambos eventos son positivos para el país.
Incluso antes de este periodo, la deuda argentina en dólares subió alrededor de un 8% en el mes, después de haber registrado un rendimiento por debajo de su índice de referencia por un amplio margen.
La credibilidad del banco central ha sido un factor importante en la pérdida de confianza de los inversores en Argentina. Las intervenciones aleatorias en los mercados de divisas para intentar controlar la volatilidad de la moneda no fueron efectivas, lo que solo condujo a una pérdida de reservas.
Los objetivos de inflación eran claramente inalcanzables. El nuevo presidente del Banco Central ha trabajado anteriormente para el ministerio de finanzas y la coordinación entre ambos debería mejorar el régimen general de las políticas.
El acuerdo revisado con el FMI amplía el tamaño del paquete a 57.000 millones (US$57 Bn), lo que permite al país mantenerse al margen de los mercados de emisión de deuda hasta 2019. Eso solo debería mejorar la confianza entre los inversores en dólares.
El acuerdo también requiere el fin de la fijación de los tipos de interés y un estricto objetivo de crecimiento de la política monetaria del 0%. Esto debería reducir la inflación rápidamente en los próximos meses, pero también producir una desaceleración en el crecimiento más pronunciada.
La divisa flotara dentro de un rango sin intervención, excepto durante la volatilidad extrema, cuando se acerque a los bordes de la banda. Esa aclaración debería consolar a los inversores de que el dinero del FMI no se desperdiciará tratando de detener la fuga de capitales de los argentinos.
Sin embargo, aún quedan desafíos. Lo más importante es que el presidente debe mantener un nivel mínimo de apoyo político. Las elecciones se celebrarán a finales de 2019, y es probable que el crecimiento haya tocado fondo antes de ese día.
Sin embargo, la claridad adicional que brindan los eventos de este mes debería mejorar la confianza del mercado, ya que Argentina sigue siendo significativamente más barata que el resto del universo de deuda en dólares de mercados emergentes.
James Barrineau es Head of Emerging Markets Debt Relative de Schroders.