Son varios los argumentos que avalan que la gestión pasiva seguirá creciendo en los próximos meses del año. En este sentido, el diferencial de comisiones sobre la gestión activa, una filosofía de inversión fácil y flexible (en un contexto de mercado donde existe una creciente necesidad de cultura financiera), rentabilidades superiores a la media y la evidencia empírica de que muy pocos gestores activos baten a sus índices en el largo plazo (en Europa menos del 15% a más de 10 años, según datos de Spiva), son algunos catalizadores que seguirán impulsando esta filosofía de inversión.
Y esta filosofía de inversión no cambia. Se sigue considerando el asset allocation (basado en una exposición global a la economía mundial mediante diferentes clases de activos y zonas geográficas) como una filosofía fundamental en el modelo de inversión. No olvidemos en este contexto que el 90% de la rentabilidad y riesgo de una cartera proviene del asset allocation, y esta amplia diversificación (lo que nosotros decimos siempre es “compra el mundo y olvídate del ruido de los mercados”) ayuda a maximizar los beneficios y reducir el riesgo.
Otros de los puntos importantes a destacar, como vemos que ya está sucediendo en otros países, es la creciente predilección de los altos patrimonios por esta estrategia. Una tendencia cada vez más consolidada que está impactando positivamente en el negocio de la inversión pasiva.
Como ha pasado en otras industrias, la digitalización y la adopción de nuevos modelos de negocio va a dinamitar lo conocido en la industria de los servicios de inversión y uno de los vientos de cola es que, cada vez más, las nuevas generaciones están demandando una accesibilidad virtual de su patrimonio, y entender que en una industria donde muy pocos gestores baten a sus índices, la reducción al máximo de las comisiones, y la ausencia de conflictos de intereses, serán catalizadores de una mayor rentabilidad para sus inversiones en el largo plazo.
El crecimiento de la inversión pasiva se va a acelerar sin duda también en España, y un dato que siempre conviene recordar, si el 40% de los activos en EE.UU. son gestionados a través de inversión pasiva, en Europa el 20% y en España solo un 1%, debido al nulo interés de las redes bancarias tradicionales en vender este producto por la ausencia de márgenes, solo hay un camino y ese camino es el de crecer.
Tribuna de Martín Huete, cofundador y co CEO de Finizens