Los inversores en renta fija han estado buscando un enfoque que ofrezca rendimientos activos atractivos, repetibles y no correlacionados. ¿Ha terminado la espera?
La subida de los tipos significa que los mercados de renta fija vuelven a ofrecer rentabilidades reales interesantes, mientras que unas condiciones económicas más difíciles están creando un mayor margen para la selección activa de valores de renta fija. Pero, ¿cómo pueden los inversores aprovechar estas oportunidades de forma sistemática? Creemos que los enfoques de inversión sistemática en renta fija pueden ayudar a encontrar la respuesta, y ofrecen un alto grado de personalización.
¿Qué es un enfoque sistemático de los mercados de renta fija?
La inversión sistemática en renta fija es un enfoque activo cuyo objetivo es superar los índices de referencia del mercado de renta fija. En este enfoque, un proceso multifactorial dinámico dirige las decisiones de inversión, utilizando factores predictivos con vínculos demostrables con la rentabilidad superior. Un proceso de decisión cuantitativo y basado en la IA clasifica cada bono en el mercado en función de su alineación con estos factores predictivos, con el fin de generar una rentabilidad superior (alfa) mediante una selección de valores ascendente.
Esta metodología sistemática contrasta con los enfoques activos tradicionales, que priorizan sobre todo la duración y la exposición al mercado crediticio (beta) y las inclinaciones sectoriales.
Dado que los enfoques sistemáticos dependen de diferentes factores de rendimiento, es probable que sus rendimientos sean diferentes -y complementarios- a los de las estrategias activas tradicionales. Los rendimientos activos de la selección de valores en las estrategias sistemáticas están, por su diseño, en gran medida descorrelacionados tanto con el índice de referencia como con importantes primas de riesgo. En consecuencia, estas estrategias pueden ser eficaces diversificadores en una cartera de renta fija.
Además, los enfoques sistemáticos pueden personalizarse fácilmente, lo que permite a los gestores adaptar las carteras exactamente a las preferencias de los clientes, manteniendo al mismo tiempo el potencial de rentabilidad.
¿Cómo funcionan los factores predictivos?
Los factores de riesgo, como el riesgo de tipo de interés (duración) o la duración del diferencial (la sensibilidad del precio de un bono a los cambios en su diferencial de crédito), identifican las formas en que los factores del mercado pueden influir en los precios de los valores. El objetivo de las estrategias sistemáticas es descubrir factores que tengan poder predictivo para encontrar repetidamente valores con el mejor potencial de rentabilidad ajustada al riesgo, es decir, factores predictivos. Pueden basarse en el valor de mercado (por ejemplo, el valor y el impulso) o en factores fundamentales específicos de la empresa (como la calidad). Los factores predictivos se utilizan para analizar sistemáticamente grandes volúmenes de datos históricos del mercado y seleccionar valores con las características adecuadas para tener una probabilidad superior a la media de superar al mercado.
La gestión de estrategias basadas en factores en la práctica
Los principales gestores sistemáticos cuentan con profundas bases de datos de investigación y plataformas cuánticas internas de vanguardia, que les permiten identificar y acceder a cientos de factores propios. No todos se aplicarán de forma continua en una cartera sistemática, pero los gestores pueden rotarlos en función de las condiciones del mercado, ya que los regímenes de inversión cambian y la eficacia de los factores varía con ellos.
Los enfoques predictivos basados en factores se originaron en los mercados de renta variable, donde los índices de referencia son relativamente fáciles de construir y la fijación de precios es en gran medida transparente. Los enfoques basados en factores llegaron más recientemente a los mercados de renta fija, que son más grandes, más complejos y están fragmentados en grupos de negociación dispares. Todas estas características hacen que la liquidez y la fijación de precios sean más difíciles de descubrir en los mercados de renta fija.
Por estas razones, la tecnología avanzada y el análisis son vitales para que los enfoques sistemáticos funcionen en los mercados de renta fija. Y aunque la investigación académica respalda los factores predictivos en la inversión en renta fija, se necesitan pruebas rigurosas y habilidades de implementación práctica para crear carteras exitosas.
Creación de una cartera sistemática: Combinación de factores predictivos
Con un enfoque sistemático, cada bono del índice de referencia recibe una puntuación en función de una serie de factores predictivos. Esto da como resultado una serie de puntuaciones para cada valor. Por ejemplo, un bono puede tener una puntuación alta en valor pero baja en impulso. A continuación, un modelo de combinación de factores suma las puntuaciones de los distintos factores para obtener una única puntuación factorial total compuesta para cada valor.
El modelo adopta dos criterios para crear una cartera utilizando las puntuaciones de los factores: la eficacia predictiva y la correlación con otros factores. Los pondera mediante un algoritmo determinado por una técnica de aprendizaje automático. De este modo, clasifica la puntuación factorial total de cada bono sujeta a otras restricciones de optimización y riesgo, principalmente: bono, emisor, sector, ESG, duración, diferencial, liquidez y límites de costes de transacción. De este modo, el modelo busca rendimientos superiores ajustados al riesgo equilibrando la eficacia predictiva con rigurosos controles de riesgo.
Las opiniones aquí expresadas no constituyen análisis, asesoramiento de inversión ni recomendaciones comerciales, y no representan necesariamente las opiniones de todos los equipos de gestión de carteras de AB. Las opiniones están sujetas a revisión con el paso del tiempo.