Este año, la IX encuesta del Instituto BBVA de Pensiones se ha centrado en una generación que en su corta vida laboral ya ha vivido dos crisis de gran calado: los millennials. Aunque, en general, esta generación engloba a los nacidos entre 1980 y 1995, desde BBVA han ampliado el espectro y consideran millennial a todo aquel nacido entre 1970 y 1999. 13 millones de residentes en España son millennials y se trata de un grupo de población de gran relevancia, ya que sobre ellos recaerán las pensiones de la generación más numerosa de España: los babyboomers.
A pesar de la opinión que hay sobre ellos, no es un colectivo que evite el ahorro. Según ha explicado Elisa Chuliá, miembro del Foro de Expertos del Instituto BBVA de Pensiones, la encuesta desprende que más de un tercio declara dedicar habitualmente una parte de sus ingresos mensuales al ahorro. Sin embargo, cabe mencionar que muchos millennials aún sigue formándose y no han entrado en el mercado de trabajo, por lo que hay bastantes diferencias según la edad.
La media de ahorro se encuentra en torno al 22% de sus ingresos y suelen ahorrar a través de productos sencillos y líquidos, como los depósitos o las cuentas de ahorro. De aquellos que ahorran, 1 de cada 6 ya ha comenzado a hacerlo para la jubilación. Un número que baja conforme se es más joven, de los menores de 30 solo uno de cada 10 destina parte del ahorro a la jubilación.
Sin embargo, el confinamiento ha trastocado para bien los hábitos de ahorro de esta generación. Más de la mitad ha conseguido ahorrar y de estos casi un 80% ha ahorrado más que en otros periodos de su vida. Después del confinamiento, el porcentaje de los ahorradores cae, y se reduce al 41%. Sin embargo, Chuliá aclara que han ahorrado aquellos que trabajaban y recuerda que el impacto social de la pandemia ha sido extraordinario. “Ha afectado especialmente a aquellos que no tienen ingresos por trabajo, quienes no solo no han ahorrado, sino que han tirado de ahorros o se han endeudado”, matiza.
Como consecuencia de la pandemia, los millennials han extraído lecciones de ahorro y planificación y la mitad sí cree que haya cambiado su perspectiva respecto al ahorro y el consumo. A partir del confinamiento, defienden que conviene gastar menos y ahorrar más para posibles contingencias.
La idea de progreso generacional pierde fuerza
“Contemplamos con cierta tristeza que al plantearles la pregunta de si creen que viven mejor que sus padres a su edad, un 70% de los babyboomer dijo que vivía mejor frente al 42% de los millennials”, lamenta Chuliá.
Respecto al deseo de adquirir una vivienda, aunque lo hacen más tarde esta generación mantiene esa meta. Según el estudio, la mayor parte de los millennials o vive con sus padres, en viviendas de propiedad de sus padres o en viviendas de propiedad, un 20% vive de alquiler. “Esto confirma que hay un interés por mantener y adquirir vivienda en propiedad. A pesar de que el alquiler ha aumentado con respecto a la anterior generación a esa misma edad, en cuanto tienen capacidad compran una vivienda”, analiza la experta.
Sin embargo, un aspecto de su vida que cambia rotundamente en comparación a la generación de sus padres es el deseo de tener hijos o la oportunidad de poder tenerlos. Solo el 27% de los millennials tiene algún hijo y casi tres cuartas partes de los entrevistados no tienen, de estos, un tercio afirma que no le gustaría tener hijos. “El proyecto de tener hijos está relacionado con una confianza en el futuro, y a nuestro juicio estos datos revelan una falta de dicha confianza”, valora Chuliá.